CM AI GCA ZLI O NE DUMOULIN E N RO S A
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El Giro de Italia del Centenario ya es historia. Sin ser su mejor edición fueron tres semanas intensas de ciclismo donde la emoción permaneció hasta el último segundo de carrera dada la igualdad de los ciclistas. Tom Dumoulin por fin se llevó 'una grande' pese al empuje de Nairo Quintana y el ciclismo de ataque de Vincenzo Nibali y Thibaut Pinot. El Giro se va, pero ya se ha puesto en marcha la cuenta atrás para la edición 101.
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SUMARIO 6 PROTAGONISTAS
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ETAPA A ETAPA
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36 CLASIFICACIONES
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Román Vilares
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Todas las imágenes de esta revista están obtenidas de la web oficial del Giro de Italia 5
GIRO DE ITALIA 2017
UN CENTENARI LLENO DE EMO 6
IO OCIONES 7
TOM DUMOULIN
CONTRA VIENTO Y MAREA
Esta es la historia de un luchador. Una historia que ya había vivido en el pasado y que finalizó con tristeza. Le debía una el destino a este luchador, a Tom Dumoulin, un ciclista llamado a romper con el maleficio de los escaladores en las grandes vueltas. Un perfil diferente a los Froome, Contador, Quintana, Nibali y compañía que han ganado las principales carreras por etapas. Un perfil más similar al ganador de los años 90, a Indurain, Rominger o Ullrich. Un perfil de contrarrelojista que va bien en montaña, que puede hacer una renta suficiente en las cronos como para aguantar el envite de los grandes escaladores en los colosos montañosos. Así
Tom Dumoulin se redimió de su 'fracaso' de la Vuelta a España 2015 con una solidez y control de la carrera espectacular.
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es Tom Dumolin, vencedor de un Giro histórico: el Giro de Italia del centenario.
El final infeliz fue hace un par de temporadas, en la Vuelta a España. Las circunstancias y su saber sufrir en la explosiva montaña del norte peninsular, para pegar el zarpazo en la crono. La historia quedó incompleta o más bien destruida debido a aquel infausto día en la sierra de Madrid, cuando Dumoulin cedía el maillot rojo ante Fabio Aru y su equipo, quienes dinamitaron la carrera el penúltimo día. Aquel día, el destino dejó una deuda con el holandés. El destino le debía una a Tom Dumoulin. Muchos pensaron en un posible cambio de equipo. “No tiene equipo para ganar una gran vuelta”, decían muchos. Pese a todo, Dumoulin decidió seguir en un Team Sunweb con el que ha ido progresando en cotas y montaña. Se ha rodeado de buenos gregarios como Ten Dam o Kelderman, que poco le pudo ayudar en este Giro de
Italia, y fruto de ello, de esa confianza, le metiéndole medio minuto a Pinot y ha llegado el éxito. Dumoulin mientras que Nibali, un ciclista diésel que suele ir de menos a más, cedía No partía entre los favoritos pero se ganó ya más de un minuto. esa posición en la primera gran etapa de montaña. Tras el simulacro del Etna, que Las cosas se iban a poner más calientes no dejó diferencias entre los favoritos, la todavía en la crono de Montefalco. Casi 40 jornada con final en el Blockhaus dio el kilómetros duros, con dos subidas banderazo de salida a la lucha por el rosa. importantes –sobre todo la última- que Y para hombres como Mikel Landa, abría el abanico a los escaladores más Geraint Thomas o Adam Yates iba a potentes. Pero en estas circunstancias significar el adiós definitivo a esa lucha. emergió un excelso Dumoulin. El ciclista Una moto de la policía que transitaba en holandés, haciendo gala de su potencia carrera provocaba una caída en la parte contra el crono y de ir bien hacia arriba, inicial de la subida y les dejaba totalmente cortados. Este problema provocó el abandono, etapas más tarde, de Thomas. EXHIBICIÓN DE QUINTANA PERO DUMOULIN SALE BENEFICIADO
Y en la subida al Blockhaus se iba a ver bien claro quiénes iban a ser los grandes candidatos a llevarse la maglia rosa. Una maglia que quería Nairo Quintana a toda costa. Trabajó el equipo Movistar durante toda la etapa y Quintana fue ‘quemando’ uno por uno a todos sus gregarios hasta que llegó el momento de atacar. A seis kilómetros para la línea de meta el colombiano demarraba y se llevaba a Nibali y Pinot. Parecía que italiano y francés iban a ser sus grandes rivales en la montaña. Y así ha sido. Pero no contaban con un inesperado invitado. Mientras los tres ‘gallos’ se atacaban, Tom Dumoulin cogía su ritmo machacón por detrás; sin acabar de exprimirse, pero con la cadencia perfecta para no dejar ir mucho tiempo. Por delante, Quintana logró dejar a sus rivales mientras que Nibali entró en crisis. Así pues, en meta llegaron las primeras grandes diferencias en la clasificación general, con Nairo Quintana 9
para ganar la etapa y meterle más de dos minutos a los que iban a ser sus rivales en la lucha por el rosa: Nibali, Mollema, Zakarin, Pinot… y casi tres minutos a Nairo Quintana. "AQUÍ ESTOY YO"
Tras la crono, con Dumoulin vestido de rosa, iniciaría su fase ‘defensiva’, aunque lo pondremos entre comillas. Quedaba mucha montaña y por detrás, los lobos acechaban a las principales etapas alpinas. Pero antes quedaba la subida al santuario de Oropa, un aperitivo a los ‘tappones’ alpinos y dolomíticos. La oportunidad la vio Quintana, quien se veía fuerte en esos momentos. Y fue el colombiano el primero en dinamitar la carrera. Puso a tirar a sus hombres cuando se acercaban los porcentajes más duros y lanzó su hachazo. Nadie le seguía, parecía otra exhibición en montaña y la señal de que los Alpes y el Giro iban a ser suyos. Pero esto es muy largo. Cuatro kilómetros tenía por delante el colombiano que se quedó a dos
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kilómetros de meta. No daba para más. Miraba hacia atrás y veía el rosa acercarse como si del diablo se tratara, seguido a duras penas por un puñado de favoritos –sin Pinot por cierto-. Llegaba una locomotora sin hacer ruido, un tren eléctrico, a su ritmo, con cadencia, con potencia. Lejos de esa agilidad de Quintana, el gigantón Dumoulin llegó a la rueda del colombiano. Trabajo hecho pensaron muchos poniéndose en la piel del de Sunweb. Nada de eso. Le cogió y le pasó. Aunque fue solo por unos segundos pues el colombiano, que no se esperaba esta reacción, pudo volver junto al líder. Comandaba como jefe Dumoulin, no estaba todo dicho. Nadie preveía esto, ni mucho menos. Limitar pérdidas iba a ser un buen día para el holandés pero quiso la etapa y la consiguió. Quiso la etapa por la diferencia de tiempo pero, sobre todo, por la autoridad que impuso. “Aquí estoy yo”, dijo Dumoulin cuando Quintana dijo basta y el rosa esprintó por delante de Zakarin. Desde ese día ha sido el gran favorito a la victoria final.
CUATRO DÍAS PARA DESTRUIR AL LÍDER
Porque llegaba a la semana final, con cuatro etapas durísimas de alta montaña y una crono favorable a sus características, con casi tres minutos sobre Quintana y más de los tres sobre Pinot y Nibali. Pero sobre todo, tras haber mostrado una fortaleza en montaña poco común para un hombre de su tamaño. Pero ojo, quedaba mucho y se preveían ataques al holandés hasta en la neutralizada.
La 'parada' de Dumolin dio alas a sus rivales y puso emoción a una carrera que ya tenía dominada atacar en ese momento de necesidad para el líder, con la consiguiente polémica que traería. Quizá sin esos ataques, Dumoulin hubiera llegado a Milán como líder y con una renta suficiente como para pasearse en la última etapa. Al menos, el movimiento de Bahrain y también la ayuda de Movistar, aportaron emoción a la carrera. Cuando Nibali y Quintana atacaron, el líder llegó a ceder medio minuto, pero la diferencia no pasó de ahí. Con la ayuda de Ten Dam, Dumoulin se mantuvo en un margen comprensible después de su problema y logró minimizar pérdidas.
Con esta mentalidad salió la maglia rosa y su equipo de cara a esa última semana en los Alpes. Su equipo era capaz de controlar la carrera durante la primera mitad pero lo que pasara en las últimas subidas quedaría a merced del propio Dumoulin y sus rivales. Movistar lo sabía y por ello jugó a la ofensiva, mandando escapados por doquier en cada escapada Aguantó en la subida y recortó tiempo en con el objetivo de contar con trabajadores la bajada mientras por delante Nibali, que en la parte definitiva de las etapas. había atacado y se había marchado con Landa en los últimos metros del descenso, impuso su ley en línea de meta. Dumoulin Y SI DUMOULIN NO HUBIERA entró a 2:18 del ganador, que se metía de PARADO A... lleno en la lucha por el rosa, y a dos minutos de su principal rival, Nairo Si histórica es la victoria de Dumoulin en Quintana. Ahora eran solo 31 segundos el Giro, para la historia quedará también los que tenía el líder, parecía improbable su anécdota a los pies del Umbrailpass. El que los mantuviera respecto a un escalador último puerto de la decimosexta etapa, de la talla del colombiano pero había con final tras la bajada del mismo en demostrado mucha fortaleza y, sobre todo, Bormio, tendrá una historia que contar a mucha capacidad de sufrimiento. nietos y sucesivas generaciones: el día que Dumoulin paró a cagar. El holandés no SALVANDO LA EMBOSCADA DE andaba con buena cara en los pasos por GARDENA Mortirolo y Stelvio y se descubrió el pastel cuando, a los pies del último alto del La que pudo demostrar dos días después día, el holandés se detenía, bajaba por la en el Passo Gardena. Ya en plenos cuneta y hacía sus necesidades. “Tenía que Dolomitas, el líder sufrió desde lejos. En hacerlo, no podía aguantar”, confirmó concreto 50 kilómetros antes de la meta en Dumoulin al final de la etapa. Ortisei, al paso por el puerto ya mencionado. Quintana vio la debilidad del Claro está, sus rivales aprovecharon para líder, sin gregarios, y se lanzó a la ofensiva 11
desde lejos. Medio minuto le sacaron Quintana y Nibali en cierto momento, pero el holandés marchaba pletórico y pudo recuperarlo. Coronó junto a sus rivales y ya no volvieron a inquietarle. Con los favoritos unidos, liderados por el ritmo de Orica, la subida final no dejó diferencias entre Dumoulin, Quintana y Nibali, esperando a las dos etapas restantes, mientras hombres como Pinot, Zakarin, Pozzovivo o Adam Yates sí que se animaron a atacar para intentar mejorar su posición. Algunos, como el francés, intentaban llegar a posiciones de podio. Eso sí, de cara a nuestro protagonista, día redondo sin pérdida de tiempo respecto a sus dos grandes rivales. PRIMER MATCH BALL: EL DÍA MÁS SUFRIDO
Dos etapas, medio minuto que recuperar por parte de Quintana y uno pOr parte de Nibali. Como decíamos, le iban a atacar hasta en la neutralizada. Dos jornadas para salvar, para no ceder demasiado tiempo y una para disfrutar, según la lógica, en Milán. Peor no le pudieron ir las cosas en 12
el primero de los dos días clave. La antepenúltima etapa tenía tres puertos: uno de tercera nada más salir, otro de segunda a mitad de camino y la llegada de primera categoría a Piancavallo. Pues en el primero, Croce Comelico, Dumoulin se quedaba descolgado debido a una mala colocación en carrera. Él mismo lo reconoció al final de la etapa al igual que “los compañeros” le habían “salvado el culo”. Pudo reintegrarse en el pelotón pero el desgaste inicial, y tras 19 días de carrera, fue tal que tuvo que desconectar en las primeras rampas de la subida final a Piancavallo. Primero ayudado por Geschke y luego por sus propios medios, el líder fue minimizando pérdidas, como así hizo durante toda la semana final, hasta la meta. Sus rivales, Nairo y Vincenzo, no daban para más y se escudaban en sus gregarios para hacer la diferencia con el líder. Solo Pinot, Zakarin y Pozzovivo se animaron desde la retaguardia en la parte final pero sin noticias de ataques de los dos perseguidores de Dumoulin. El holandés cedía poco más de un minuto en meta con respecto a Quintana y NIbali y el
colombiano cogía el mando del Giro. Un segundos de ellos, de la mano de su nuevo mando ficticio pues, con poco más de grupo de amigos. medio minuto de cara a la crono final, EL TRÁMITE Y DISFRUTE DE poco o nada podía hacer. SEGUNDO MATCH BALL: 'AMIGOS PARA SIEMPRE'
MILÁN
Pese a no obtener grandes diferencias con el de Sunweb, Dumoulin pasaba a ser cuarto con Quintana, Nibali y Pinot por delante. Eso sí, diferencias exiguas de cara a la crono. Todos los reconocieron: “La diferencia es insuficiente”. 53 segundos tenía el colombiano, 14 Nibali y 10 Pinot, más preocupados de pelear por ser terceros que por alcanzar a Dumoulin. Lo tenía medio hecho el holandés pero había que refrendar todo lo ganado, o lo no perdido, en esa lucha contra viento y marea a lo largo de las 20 etapas anteriores.
Quedaba la última oportunidad para abrir brecha pero todo parecía indicar que tanto Nairo como Vincenzo, reventados físicamente, no podrían hacerle mucho daño a un sólido Tom Dumoulin. Eso sí, no dejaron de intentarlo y desde lejos. El Monte Grappa, a mitad de etapa, fue testigo de un sinfín de demarrajes de Nibali, Quintana y compañía hacia el ‘virtual líder’. Eso sí, resistió de manera sobrehumana Dumoulin tirando de lo de siempre: cadencia y sacrificio, sobre todo mental. No lograron despegar a Dumoulin y la última batalla sería en Asiago y el Desde el kilómetro uno en el Autódromo de Monza, Dumoulin ya se sentía ganador llano final hasta la meta. del Giro de Italia. Las diferencias con Movistar puso un fuerte ritmo y Nibali respecto a sus rivales, sobre todo con lanzó la primera bala. Zakarin, Pozzovivo Quintana, le daban como ganador. Una y Pinot se destacaron mientras que buena crono, en la que fue segundo a Quintana y Nibali tardaron algo más pero escasos 15 segundos de Jos Van Emden. también se lanzaron a la ofensiva. Mirando a la pantalla, Dumoulin sufrió, se Coronaron por delante de Dumoulin emocionó y acabó festejando. Cuenta atrás quién se encontró con buenos amigos: y Tom Dumoulin se convertía en el Jungels y Mollema, luchando por no ganador número 100 del Giro de Italia. perder posición e incluso por el maillot Contra viento y marea llegó el rosa para blanco en el caso del luxemburgués, Dumoulin. ayudaron y de qué manera a Dumoulin tanto en la parte final de la subida como en el llano hasta meta mientras por delante intentaban ponerse de acuerdo para abrir hueco. Pinot ganó la etapa al sprint a Pozzovivo, Zakarin, Quintana y Nibali pero Dumoulin entró a solo quince
Dumoulin, Nairo, Nibali y Pinot se 'jugaron' el rosa en la crono de Milán separados solo por un minuto
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FERNANDO GAVIRIA
DOCTORADO EN SU DEBUT
Había ciertas dudas en el ambiente. Fernando Gaviria había rendido bien cuando se le había requerido hacerlo. Había sabido liderar a uno de los mejores equipos del mundo, el QuickStep, en carreras quizá que no habían sido de máxima exigencia. En los monumentos ciclistas, como en Milán-San Remo no había podido cumplir las expectativas. Por ello el Giro de Italia era tan importante para Gaviria, era su particular doctorado, la forma de demostrar que sí está preparado para ser uno de los mejores
Solo André Greipel y Caleb Ewan pudieron vencer en igualdad de condiciones al 'misil' colombiano 14
sprinters del pelotón. El Giro y la maglia ciclamino son su particular diploma como velocista de primer nivel. Cuatro victorias de etapa alumbran el Giro del colombiano que, además, ha rematado su primera grande sabiendo aguantar en las duras etapas de montaña para llegar a Milán y subirse al podio como líder de la regularidad. Ha tocado todos los palos que debe tocar un sprinter en una grande: una primera semana para ganar, una segunda para ayudar y una tercera para sufrir y aguantar. Gaviria ha rozado la excelencia en todos ellos, alcanzándola en la primera de estas fases. UN INICIO DUBITATIVO
Camino de Cagliari, y tras una inteligentísima táctica de equipo
aprovechando el viento, Gaviria sumó la primera y se quitó la presión de tener que ganar en el Giro. A partir de ahí todo fue rodado y, cada oportunidad que tuvo, la aprovechó, en Messina, Reggio Emilia y Tortona, dejando solo un 'premio' para Caleb Ewan en Albertobello. Previamente, en la segunda etapa, André Greipel había sumado su triunfo y Lukas Pöstlberger había sorprendido a los velocistas en la primera. Es decir, cuatro de siete, un 57% de efectividad para Gaviria al sprint. SIN RIVAL POR LA CICLAMINO
El colombiano ha sido el mejor de una buena nómina de velocistas que se dieron cita en cada una de las siete volatas de este Giro. Sam Bennet, el propio Gaviria, Greipel, Ewan y Giacomo Nizzolo, pero con otros nombres destacados como Jasper Stuyver, Kristian Sbaragli o Roberto Ferrari que completan una lista variada y de gran nivel en la que el de Antioquía no
A partir de la etapa 13, los sprinters perdieron todo el protagonismo en la Corsa Rosa en favor de los escaladores
ha tenido rival pese a los múltiples intentos de que las etapas no llegasen al sprint. Solo lo logró Pötlsberger en la primera jornada, sorprendiendo a todos con una arrancada en la que se esperaba que el austriaco de Bora se quedara sin gas. Pero aguantó para ganar y vestirse de rosa ante el 'estupor' general de como un semidesconocido había dado el primer bofetón a los sprinters. A partir de aquí, tanto velocistas como los equipos de los mismos controlaron cada detalle y, salvo los abanicos camino a Messina en los que QuickStep y Trek formaron un buen 'revuelo', el resto de opciones de volata no fueron alteradas por ningún elemento.
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EL ÉXITO DE LAS FUGAS Los escapados han tenido un notable éxito Silvan Dillier quienes se jugaron el triunfo durante las tres semanas que ha durado la carrera, con hasta en siete ocasiones en las que la fuga se ha disputado la etapa en la línea de meta. Así, en etapas a priori reservadas para la fuga como en etapas destinadas a los gallos, como ocurrió en el Etna, los valientes han tenido su cota de protagonismo. EL PREMIO DE ESCAPARSE
El primer hombre en cazar una etapa a través de una larga fuga ha sido el esloveno Jan Polanc. Con un golpe de pedal espléndido, el corredor de UAE Emirates Team se adjudicó la primera gran etapa de montaña de esta edición con final en el volcán Etna. Lejos de ser lo que fue en 2011, cuando Contador arrasó en sus rampas, los favoritos se vigilaron en exceso permitiendo al esloveno alzar los brazos en la cima. Tras ese éxito de Polanc, poco tardó la fuga en volver a adjudicarse un triunfo. En esta ocasión, solo dos etapas después de la llegada al Etna, fueron Jasper Stuyven y 16
parcial. En un ajustado sprint, aunque a priori el de Trek era favorito, se impuso el corredor de BMC. Por detrás, el pelotón llegó a 40 segundos. ESPAÑA BRILLA EN LAS FUGAS
Los españoles también han tenido su cota de protagonismo en lo que a culminar fugas se refiere. El primero de ellos fue Gorka Izagirre. El corredor de Movistar se coló en un grupo y se impuso a todos sus rivales demostrando una gran determinación en los kilómetros finales. Pero si hay un triunfo a la valentía, ese ha sido el de Omar Fraile. Fugado toda la etapa con Mikel Landa, el de Santurtzi decidió bajar el ritmo para ser absorbido por el gran grupo perseguidor, quedando
Los tres triunfos españoles -Gorka Izagirre, Omar Fraile y Mikel Landa- se fraguaron en las fugas
únicamente el alavés en cabeza de carrera. Así, más fresco y tras recuperar fuerzas, el vizcaíno soltó un tremendo latigazo para levantar los brazos en la línea de meta de Bagno di Romagna. VICTORIAS BALSÁMICAS
Pero si para algo han servido las fugas ha sido para redimir cuentas. Así, grandes nombres como Pierre Rolland o Tejay Van Garderen han olvidado parte de sus penurias con el champagne del podio. Además, tras el incidente con la moto en el Blokhaus que le dejó sin opciones en la
general, Mikel Landa también ha estado muy activo en los cortes, lo que le ha valido el llevarse la clasificación de la montaña. El primero en redimir cuentas ha sido el francés Pierre Rolland. A sabiendas de que no tenía excesivas opciones de cara a la general, se reservó durante la primera semana, a la espera de poder meterse en fugas durante el resto de la carrera y luchar así por una etapa. Premio. El galo se impuso en la 17ª séptima etapa siendo el más fuerte de una numerosa fuga a la que los favoritos dejaron marchar.
opciones por culpa de una moto en el Blockhaus, ha cogido hasta cuatro fugas. En la primera de ellas se empeñó en marchar en solitario y fue atrapado por el grupo, en la segunda de ellas fue Nibali quien le privó de la victoria. Después sería Van Garderen quien le volviese a dejar con la miel en los labios. Pero Mikel Landa no estaba para rendirse. Así como en las tres fugas anteriores el terreno hacía complicado romper la carrera, en la Pero si ha habido un hombre que ha jornada con final Piancavallo se iba a sabido cambiar de chip ese ha sido Mikel imponer por calidad, endosando casi dos Landa. El alavés, que se quedó sin minutos a sus compañeros de escapada. Cambio de chip culminado con éxito.
Otro de los que ha encontrado su tabla de salvación en una fuga es Tejay Van Garderen. Muy lejos de su mejor versión, el estadounidense se redimió de todos sus males en Ortisei. El americano, que iba ya con mucho tiempo perdido, se jugó la victoria con Mikel Landa, a quien adelantó en los metros finales. Llanto de liberación al cruzar la meta. Segundo fuga culminada para BMC.
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UN GIRO DE ITALIA DE HABLA HISPANA No hay que echar la vista atrás demasiado tiempo para observar que el Giro de Italia era un coto cerrado al ciclismo hispano. Muchos fueron los que intentaron brillar en la Corsa Rosa pero pocos fueron los elegidos. Sin embargo, el ciclismo hispano poco a poco se va enamorando del romanticismo de la carrera italiana y cada vez es más protagonista en ella. Pero este año, el del centenario, sobresalió de una manera excelsa. Ocho triunfos parciales con cinco ciclistas diferentes marcan la buena salud del ciclismo de habla hispana y sobre todo la gran versatilidad mostrada en todos los terrenos y situaciones.
progresión. ¿Presión? Ninguna. El 'misil' convive con ella desde hace muchos kilómetros y siempre sale victorioso. Y esta vez no fue diferente. Si bien empezó dubitativo y su primer triunfo lo obtuvo en un sprint reducido fue más que suficiente para lanzarse a otras tres victorias apoyado en su lanzador, el argentino Maximiliano Richeze. Un dúo temible que le permitió doblegar a todos sus rivales y vestirse en Milán con la maglia ciclamino de la regularidad. Simplemente espectacular.
GAVIRIA, EL MÁS DESTACADO
Pero si en el sprint sorprendieron nuevos ciclistas como cazaetapas también. No hace tiempo los hispanoparlantes eran convidados de piedra en las fugas, pero esta situación se revertió en estas tres pasadas semanas. El primero en resolver
Por encima de todos emergió la figura de Fernando Gaviria. Debutante en una gran vuelta pero con todos los ojos puestos en el colombiano por su meteórica 18
VERSATILIDAD EN TODOS LOS TERRENOS
Ocho triunfos parciales, la general de la regularidad, la general de la montaña y un segundo puesto en la general, el bagaje del ciclismo hispano
una fuga fue Gorka Izagirre. El guipuzcoano obtuvo el premio a sus días incansables de gregario con un triunfo antologíco. En un final uphill fue el más fuerte y simplemente no tuvo rival. Como tampoco lo tuvo Omar Fraile quien estando en la fuga fue él quien la seleccionó, atacó en busca de la gloria en solitario pero fue alcanzado. Solo una gran fortaleza mental le permitió vencer al sprint a sus compañeros de fuga. Como en el caso de Gorka, el vasco recibió el premio a su valentía no solo en la etapa si no en su carrera deportiva. Y el tercer cazaetapas fue una reconversión de la general. Mikel Landa, eliminado de la general por la maldita caída camino de Blockhaus debido a una moto, fue capaz de reinventarse en los Dolomitas para llevarse una etapa, con homenaje a Michele Scarponi incluido, tras dos
segundos puestos. Amo y señor de los Dolomitas su valentía le aupó a la maglia azzurra de la montaña y visto el gran nivel del alavés bien podría haber luchado por la maglia rosa. NAIRO, EN LUCHA POR EL ROSA
Quien si luchó por la maglia rosa hasta el último kilómetro fue Nairo Quintana. El colombiano vencedor en 2014 mostró una frialdad poco común de los países latinoamericanos. El de Bocayá lanzó su primer dardo en Blockhaus donde no tuvo rival, la contrarreloj le obligó a remontar en los Dolomitas no sin cierto sufrimiento dado el gran nivel de sus rivales con el apoyo de un Movistar imperial muy hispano. Finalmente se tuvo que conformar con un segundo puesto. Pero hubo más. La lucha de Luis León Sanchez para homenajear a su ex compañero Michele Scarponi en 'su' cima, el Mortirolo. El leve resurgimiento de Igor Antón o las gratas sensaciones de Christian Rodríguez en la primera parte de la carrera, mostraron la buena salud de la que goza el ciclismo hispano... y que dure por muchos años.
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GIRO DE ITALIA 2017
21 ETAPAS 21 IMÁGENES 20
S 21
ETAPA 1
ALGUERO - OLBIA PÖLSTBERGER SORPRENDE
ETAPA 2
OLBIA - TORTOLÍ GREIPEL NUNCA FALLA A SU CITA
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ETAPA 3
TORTOLÍ - CAGLIARI LA PRIMERA DE GAVIRIA
ETAPA 4
CEFALÚ - ETNA LA ERUPCIÓN DE POLANC
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ETAPA 5
PEDARA - MESSINA GAVIRIA COMIENZA A ASUSTAR
ETAPA 6
REGGIO CALABRIA - TERME LIUGIANE DILLIER, EL MÁS LISTO DE LA CLASE
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ETAPA 7
CASTROVILLARI - ALBEROBELLO EWAN TAMBIÉN SABE SPRINTAR
ETAPA 8
MOLFETTA - PESCHICI EL GRAN PREMIO PARA IZAGIRRE
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ETAPA 9
MONTENERO - BLOCKHAUS NAIRO MARCA SU TERRITORIO
ETAPA 10
FOLIGNO - MONTEFALCO DUMOULIN, AL ESTILO INDURAIN
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ETAPA 11
FIRENZE - BAGNO DI ROMAGNA LA MERECIDA RECOMPENSA A FRAILE
ETAPA 12
FORLÌ - REGGIO EMILIA EL MEJOR SPRINTER DEL GIRO
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ETAPA 13
REGGIO EMILIA - TORTONA POKER DE GAVIRIA
ETAPA 14
CASTELLANIA - OROPA ยกMENUDA BESTIA, DUMOULIN!
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ETAPA 15
VALDENGO - BERGAMO LA CONSOLIDACIÓN DE JUNGELS
ETAPA 16
ROVETTA - BORMIO NIBALI, CON 'SCARPA' DESDE EL CIELO
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ETAPA 17
TIRANO - CANAZEI LA FORTUNA SONRIE A ROLLAND
ETAPA 18
MOENA - ORTISEI VAN GARDEREN NO ESTÁ 'MUERTO'
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ETAPA 19
SAN CANDIDO - PIANCAVALLO EL QUE LA SIGUE, LA CONSIGUE
ETAPA 20
PORDENONE - ASIAGO PINOT, PREMIO AL INCONFORMISMO
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ETAPA 21
MONZA - MILAN VAN EMDEN COMPLETA LA FIESTA HOLANDESA
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EL CAMINO DEL ROSA
El viaje de la maglia rosa tuvo seis paradas con inicio en el sorprendente Lukas Pรถstlberger y final en la consagraciรณn de Tom Dumoulin 36
LUKAS PÖSTLBERGER 1 DÍA
Austria se viste de rosa Lukas Pöstlberger fue el encargado de inaugurar la maglia rosa del centenario en la isla de Cerdeña. Una ataque a falta de pocos kilómetros del ciclista de Bora-Hansgrohe le valío para enfundarsela y 'salvar' así el Giro de su equipo.
ANDRÉ GREIPEL 1 DÍA
La fiabilidad tiene premio André Greipel es un asiduo de la Corsa Rosa con triunfos desde hace años de forma consecutiva. Sin embargo, el premio de vestirse de rosa no llegó hasta esta edición. Su triunfo de etapa y las bonificaciones le hicieron merecedor de tal ansiado premio. 37
FERNANDO GAVIRIA 1 DÍA
Una maglia liberadora. Al inicio del Giro todas las miradas se posaban en el debutante Fernando Gaviria. El 'misil' colombiano no defraudó y en su primera victoria ya se colocó como lider de la carrera. Algo que celebró por todo lo alto en el podium, liberándose de toda la presión a la que estaba sometido.
BOB JUNGELS 5 DÍAS
Confirmación luxemburguesa. Primer final en alto y tal como sucedió en la edición pasada Bob Jungels se vistió de rosa. El joven luxemburgués sigue dando pasos firmes para convertirse -si ya no lo es- en uno de los ciclistas más destacados de la actualidad, llevando el nombre del pequeño Gran Ducado con orgullo por toda Italia. 38
NAIRO QUINTANA 3 DÍAS
El 'golpe rosa' de Nairo Si en el Etna no hubo movimientos, en Blockhaus, segundo final de alto, se destapó el tarro de las esencias con un Nairo demoledor al que nadie pudo frenar. El colombiano tuvo que recuperar el tiempo perdido en la crono hasta llegar de nuevo a la crono final vestido de rosa, pero no pudo mantenerlo.
TOM DUMOULIN 13 DÍAS
Dumoulin rompe con el maleficio holandés Tuvo que ser en la edición 100 pero por fin Holanda inscribió su nombre en el libro del Giro con un imperial Tom Dumoluin. Estratosférico en la crono y solvente en las etapas de montaña, solo la debilidad de su equipo -y su problemas estomacalespudieron poner en peligro un más que merecido triunfo. 39
LOS OTROS VE
FERNANDO GAVIRIA
Gaviria, sin rival El colombiano sin duda fue el más rápido del Giro del centenario en el año de su debut. Apoyado en sus cuatro triunfos parciales obtuvo una renta más que suficiente para liderar la clasificación de la regularidad sin ningún tipo de problemas. Un premio más para un Giro inolvidable para el de Quick Step. 40
ENCEDORES
MIKEL LANDA
Un premio menor Venía para vestirse de rosa pero la 'dichosa motociclista' camino de Blockhaus enterró sus posibilidades. Pero Landa no se rindió y se lanzó en busca de ser protagonista en la montaña. Cabalgadas de gran nivel le hizo doblegar el Stelvio y catapultarle en la clasificación de la montaña a pesar de la resistencia de Omar Fraile. 41
BOB JUNGELS
Hasta la última pedalada Con mucho sufrimiento pero Bob Jungels se llevó su segundo entorchado de mejor joven. El luxemburgués que parecía que lo tenia sentenciado jornadas antes vio como Adam Yates le puso contra las cuerdas en las últimas jornadas. Pero la crono final de Milán puso las cosas en su sitio.
MOVISTAR
Un asiduo como bloque Un año más Movistar mostró su poderío como bloque en una gran vuelta por etapas. Con Nairo como líder y con unos 'soldados' de excelso nivel como Víctor De la Parte, Winner Anacona, Gorka Izagirre o Andrey Amador no tuvo problemas en llevarse la general por equipos. 42
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