EL FUTURO EN MONITOR REFLEXIONES SOBRE EL FUTURO DE LAS CIUDADES Por ciudades entendemos los espacios urbanos, conjunto de calles y servicios públicos, centros urbanos donde reside la gente y se asienta el poder político. La vida urbana apareció con el comercio y los intercambios, cuando se pasó de los mercados locales que ligaban la ciudad y su hinterland inmediato a los centros mundiales del comercio que gestionaban la distribución de ciertos productos en todo el mundo. Desde Babel, la ciudad es el símbolo de las tensiones entre la integración cultural y lingüística, de un lado, y la diversidad productiva, la confusión y el caos, de otro. La ciudad es también el símbolo del cambio y la innovación. Sin embargo, limitar el concepto de ciudad al urbanismo es una forma reduccionista de entender y comprender los fenómenos urbanos actuales y futuros. La ciudad no se construye de calles, plazas, autopistas, parques, señales de tránsitos, edificios, pasajes y avenidas, sino también de las percepciones y costumbres de sus habitantes. Por eso es que sostenemos que las ciudades son un proceso dinámico que va mucho más allá del cambio que pueda experimentar en sus fachadas. Si pensamos por ejemplo en Ciudad de México, veremos que más allá de símbolos como El Angel, Reforma, Chapultepec, el Casco Histórico, el Zócalo, nuestra ciudad es también los murales de Rivera y de Siqueiros, Bellas Artes, la riqueza de nuestro Museo Antropológico, de la música que se canta y se baila en esta ciudad. Hace unos años, nuestra ciudad estuvo representada por los paseos por La Alameda, la asistencia a los Salones de Baile, las Cantinas sólo para hombres.... Pero como las ciudades cambian, se transforman, ahora nuestra ciudad también está representada por la vida que hacemos en los Centros Comerciales. Claro, en esta ciudad tenemos símbolos casi perennes como esos chamacos que se paran en los semáforos y hacen toda clase de malabarismo para ganarse unos pesos. Pero lo que hará posible que está ciudad crezca social y económicamente y mantenga su riqueza cultural, no es sólo la acción de los gobiernos, sino el compromiso de su gente. Es la conformación de Redes Sociales o Redes Vecinales. Si los chilangos no nos comprometemos a velar por los servicios públicos de esta ciudad y exigir la infraestructura urbana que se requiere para una mejor calidad de vida, el caos nos tragará y la pauperización será la verdadera mancha urbana.
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POBLACIÓN URBANA 2025 (PORCENTAJE DEL TOTAL)
Mundo Países Desarrollados Países menos desarrollados México
61.1% 84% 43.5% 82%
Fuente: Consultores Internacionales con datos de la WFS y CONAPO e INEGI
Megalópolis: ciudades con más de 10 millones de habitantes. Ciudades caracterizadas por el caos urbano, que sufren de arterosclerosis porque ya tienen taponadas sus arterias viales. Por ejemplo: Ciudad de México, Buenos Aires, Bombay, Calcuta. Mega-Ciudades: serán complejos urbanísticos especializados, con aeropuertos internacionales, adecuada infraestructura de comunicaciones, centros de tecnologías, transportación pública eficiente, sofisticado sistema de recolección y procesamiento de la basura y una infraestructura “verde” de parques y bosques urbanos. Las megaciudades, aunque puedan poseer más de 5 millones de habitantes, crecen lentamente en población. Por ejemplo: Estambul en Turquía, Atlanta y Denver en Estados Unidos, Vancouver en Canadá, Vanga en India, Wuhan y Shangai en China, Bangkok en Tailandia, Madrid en España y Cancún Tulum en México
Ciudades Globales: Desempeñan funciones especiales en la nueva economía mundial. Concentran altos índices de desarrollo económico y social. Ejemplos: Hong Kong y Singapur. Ciudades de la información: En estas ciudades de la información el espacio de los flujos de capitales y de los medios empresariales transnacionales coexiste con el espacio de lo cotidiano de la mayoría de la población. Pueden encontrarse en ciudades globales y mega-ciudades.
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CONTEXTO MUNDIAL DE LAS CIUDADES Cuatro rasgos comunes caracterizan a las ciudades en todas partes del mundo: a) La tasa de desempleo sigue siendo elevada b) El mantenimiento de las infraestructuras urbanas es deficiente, incluso en los países industrializados c) los problemas medioambientales, particularmente la contaminación atmosférica, la de agua y el ruido se plantean con gravedad cada vez mayor en muchas ciudades de los países en vías de desarrollo y d) el aumento de los conflictos sociales, como los que plantean las personas sin hogar, el aumento progresivo de condiciones de violencia, intolerancia e inseguridad ciudadana. Las migraciones internacionales influyen también sobre el proceso de urbanización y sobre el crecimiento de las ciudades. A los factores que afectan a las migraciones internas hay que añadir los de orden político y las dificultades que las leyes sobre emigración pueden plantear para salir y entrar en ciertos países. En cuanto a la población, en 1950 el 29.3% de la población mundial vivía en zonas urbanas, cifra que alcanzó el 44.8% en 1994, y se estima que alcanzará el 61.1% en el año 2025. Esta evolución resulta de tres mecanismos: a) el éxodo masivo de la población del campo a la ciudad, b) el crecimiento demográfico "natural" de las ciudades y c) la expansión de las ciudades que absorben a las zonas rurales vecinas. Hay grandes diferencias, según los países y regiones. Las regiones más desarrolladas del mundo fueron las primeras en urbanizarse y, actualmente, las tres cuartas partes de su población vive en zonas urbanas; esta proporción alcanzará el 84% en los próximos treinta años. En los países menos desarrollados, el 21.9% de la población vive en las ciudades, proporción que llegará al 43.5% para el año 2025. Las megalópolis (ciudades con más de 10 millones de habitantes) son evidentemente distintas de las pequeñas ciudades (con menos de 500.000 habitantes); las primeras están creciendo rápidamente, sobre todo en Asia. En 1950, únicamente Nueva York y Londres entraban en esta categoría. Entre las principales megalópolis tenemos además de Nueva York, Los Angeles, Ciudad de México, Buenos Aires, Sao Paulo, Bombay, Calcuta, Osaka, Shangai, Tokio, Seúl y Beijing. Las megalópolis ya sufren de arterosclerosis, tienen taponadas sus arterias viales. Por eso, en algunos países desarrollados se aprecia una inversión de la tendencia, con la huida de los habitantes de las megalópolis hacia los alrededores y hacia las ciudades más pequeñas. Así, la población de algunas grandes ciudades de Europa y Estados Unidos ha disminuido en los últimos veinte años: 23%, en Milán; 17% en Nápoles; 10%, en Londres; 7.4%, en Pittsburgh y 8.4% en Cleveland. En el futuro, este fenómeno de "desurbanización" podría producirse también en las regiones menos desarrolladas del mundo. De hecho, la tasa de crecimiento de las megalópolis de América Latina se ha venido haciendo más lenta desde principio de los años ochenta.
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TENDENCIAS DE LAS CIUDADES El crecimiento urbano y la ingeniería civil tendrán en las aguas un nicho importante de desarrollo y obras. Hacia el 2050 aparecerán las primeras ciudades flotantes. Venecia o los palafitos que se aprecian en ciudades de América Latina y Asia se multiplicarán para dar espacio a ciudades acuáticas. Este crecimiento desbordado de la población, especialmente en países con limitaciones espaciales, también nos traerá las Ciudades Subterráneas. Ya en Tokio, se desarrolla la Ciudad de Alicia, una Ciudad Subterránea que está realizando Taisei Corporation con un costo de 80 mil millones de dólares, para albergar unas 500 mil personas, con base en varios túneles subterráneos interconectados. En el caso de Estados Unidos, la interconexión subterránea urbana de calles y avenidas a través del subsuelo, como en los casos de Phoenix en Arizona y Houston, asoman que ya las ciudades subterráneas estadounidenses son una realidad. Si no alcanza el espacio acuático, terrestre y subterráneo, el hombre podrá vivir en Marte. Hyperion es un proyecto de ciudad para Marte, que ganó el Premio Excelencia en el Pabellón del Club de Astronautas del Japón, en 1999. Hyperion es un proyecto pensado con más de un siglo de anticipación y fundamentado en un equipo humano interdisciplinario y creativo, con gran imaginación futurista para concebir: un globo habitacional, un club de astronautas, un pabellón esférico de sueños, rutas de alta velocidad, manejo y orientación de energías y un zoológico genético. Este proyecto de Marte puede parecer producto de lunáticos, sin embargo si miramos el pasado y pensamos por ejemplo en las propuestas del urbanista Le Corbouisier, a principios del siglo XX, con su proyecto de la Ciudad Mundial, la ciudad de los negocios, como una respuesta al naciente mundo de los negocios financieros, veremos que los grandes visionarios siempre han existido. De acuerdo a la World Future Society, muchas de las grandes urbes se transformará en Mega-Ciudades. Estas serán Estambul en Turquía, Atlanta y Denver en Estados Unidos, Vancouver en Canadá, Vanga en India, Wuhan y Shangai en China, Bangkok en Tailandia, Madrid en España y Cancún Tulum en México. Estas mega-ciudades serán complejos urbanísticos especializados, con aeropuertos internacionales, adecuada infraestructura de comunicaciones, centros de tecnologías, transportación pública eficiente, sofisticado sistema de recolección y procesamiento de la basura y una infraestructura “verde” de parques y bosques urbanos. Las mega-ciudades crecen lentamente en población. Por ejemplo, Bangalore en la India, destacará no sólo por su número de habitantes, sino por su desarrollo vertiginoso de la industria del software. Wuhan en China, será Mega-ciudad por su ubicación estratégica y su industria de alta tecnología y centros de enseñanzas especializados. Estambul en Turquía crecerá rápidamente si aprovecha el corredor entre Asia, China Central y Shangai para convertirse en la que Occidente tiende a llamar la nueva ruta de la seda. En el caso de CancúnTulum no sólo seguirá siendo un atractivo destino de playa tropical, sino que se proyecta como la ciudad para los trabajadores de alta tecnología que quieran vivir en un área de resort. 5
Otras ciudades que estarán en una segunda escala, serán Sao Paulo en Brasil, Toronto en Canadá, Lyon en Francia, Stutgart en Alemania, Melbourne y Sydney en Australia y Guadalajara en México.
Otra característica esencial del porvenir de las ciudades es la devolución del poder y de las responsabilidades a las autoridades locales y a la sociedad civil. Las ciudades se gobernarán y administrarán ellas mismas. En los desarrollos urbanos participarán los pobladores, la consulta será crucial para procesos de planeación y también los habitantes asumirá el monitoreo de proyectos a pequeña escala. El ejemplo de “Lula” en Porto Alegre, Brasil y las experiencias de Robert Puttman en Italia, para conformar el capital social de las ciudades, se quedarán cortos ante las tendencias de los desarrollos urbanos democráticos. En las ciudades del mañana, los individuos y las instituciones serán más libres al estar conectados electrónicamente. La interacción "a través del cable" será el complemento de los contactos cara a cara. Este fenómeno repercutirá sobre el modo de vida, ya que será posible trabajar en el hogar, hacer compras por computadoras y viajar con dinero plástico. Pero esta libertad también será vigilada. Las ciudades aprovecharán los avances electrónicos para vigilar la vida de sus habitantes.
CIUDADES GLOBALES Desde la época de Augusto es posible afirmar que Roma se constituyó en una de las primeras ciudades globales de la historia, además de servir de modelo para la construcción de las grandes metrópolis posteriores como Paris, Londres o Washington. La globalización de las ciudades ha tenido como consecuencia la generación de una nueva geografía de la inclusión y exclusión social. Las ciudades globales han llegado al primer plano porque desempeñan funciones especiales en la nueva economía mundial. Ya no sólo puede hablarse de la existencia de países desarrollados ó en desarrollo, sino también, dentro de cada país y detonado por la creciente influencia de la globalización económica, nos encontramos con ciudades que concentran altos índices de poder económico y social versus aquellas que se han quedado ancladas en el pasado. Los costos humanos de la re-invención urbana de la ciudad bajo el prisma global han sido altos. En términos materiales se expresan en la polarización de una economía financiera altamente eficiente y reconocida, contra el aumento también exponencial de los niveles de subcontratación, subempleo e informalidad. En términos de capital social se expresa en la generación de gethos y expresiones de violencia ciudadana, creciente demanda por seguridad, una paulatina des-habitación de las ciudades y poblamiento de los suburbios. En las ciudades medias, la gente asume un rol de consumidor global a nivel local, que le permite a la vez ser parte de procesos cotidianos de construcción de identidad, que, entre otros, encuentra en los medios de comunicación de masas (radio, prensa escrita y televisión) un vehículo eficiente de comunicación e integración. 6
Si por definición las ciudades son entendidas como territorio de rupturas y pluralidad de identidades, la emergencia y consolidación de medios globales y el uso de Internet, refuerzan su tendencia a convertirse en metrópolis más que a permanecer como ciudades. Es decir, la globalización ha generado la "ciudad de la información", un mundo interconectado donde las sociedades y los espacios se relacionan entre sí a través de nuevas redes de comunicación. En estas ciudades de la información el espacio de los flujos de capitales y de los medios empresariales transnacionales coexiste con el espacio de lo cotidiano de la mayoría de la población. Este espacio de lo cotidiano es siempre más local, más territorial, más ligado a una identidad, un barrio, una etnia o una nación. Si el espacio de la identidad es más local, el espacio de la función de la ciudad es siempre más universal. Este proceso implica la existencia de una "ciudad dual", con estructuras sociales y económicas contrapuestas. El dualismo estructural se expresa en una serie de sectores: el desarrollo de la información, el declive de la industria, la degradación y la recalificación de la mano de obra, la distinción entre trabajo formal y trabajo informal. En un mundo en vías de globalización, los países y las ciudades mantienen relaciones crecientes de interdependencia e interacción. Mientras que las ciudades participan por derecho propio en un orden mundial en el que las fronteras nacionales ya no son obstáculo para la circulación de capitales, personas e ideas, asistimos a la aparición de entidades económicas subregionales. Ciertos territorios vecinos, dependientes de varios países, y llamados "triángulos de crecimiento", tratan de desarrollarse a través de una cooperación económica innovadora. Estos triángulos tienen sus centros en ciudades globales. Por ejemplo: el triángulo de la China meridional, que incluye Hong Kong, Cantón, Fuchian y Taiwan; y el triángulo SIJORI que engloba Singapur, Johore (Malasia) y la isla de Riau (Indonesia). Estos dos triángulos de crecimiento tienen como centros respectivos las ciudades de Hong Kong y Singapur. Una variante de esta estructura subregional es lo que algunos especialistas llaman estados-región, donde se produce un fuerte desarrollo económico, en áreas que pueden formar parte de una país o englobar a varios. Pero la globalización no ha tenido el mismo efecto en todas las ciudades. Para unas, ha abierto nuevas perspectivas y las ha enriquecido, pero ha marginado a otras. En todo el mundo, y especialmente en África, se encuentran ciudades marginadas que permanecen fuera de lo que podríamos llamar el "ciberespacio" y no disponen de la infraestructura necesaria en materia de información y, en general, no consiguen integrarse en la economía mundial. En la era de la información que acaba de comenzar, las ciudades serán las fuentes, las utilizadoras y las depositarias del conocimiento. El saber es fruto de investigación, de los descubrimientos y de la innovación. Como se trata de un recurso de gran valor, las ciudades rivalizarán en la generación de conocimientos. 7
ACTUALIDAD DE LAS CIUDADES EN MÉXICO México cuenta con una de las megalópolis más grandes del mundo: La Ciudad de México, que contribuye con el 21.5% del Producto Interno Bruto Nacional y cuenta con el 19% de la población del país, al considerar su área metropolitana. Es tal la contribución de esta ciudad con vocación industrial y turística, que configura el 12.3% de la Población Económicamente Activa y el 21.3% si se le agrega el área conurbada. Es tal la concentración en esta ciudad, que concentra el 20% de las instituciones de nivel técnico y superior, así como el 17% de los institutos de capacitación para los trabajadores. Para México, es importante las ciudades fronterizas. A lo largo de los 3,000 kilómetros colindantes con Estados Unidos de América, en ambos lados de la franja fronteriza se ubican cuando menos 20 ciudades fronterizadas. La vocación productiva de estas ciudades fronterizas se ha basado en el comercio intrarregional y también en la producción para la exportación, con la ubicación de empresas maquiladoras. En estas ciudades se produce una integración económica y cultural con los mexicanos que viven y producen al otro lado de la frontera, generándose procesos pluriculturales y multiétnicos.
TENDENCIAS DE LAS CIUDADES
EN MÉX IC O
Hoy en día, el 75% de las personas viven en ciudades y, tal cual van las tendencias, esta proporción podría alcanzar cerca del 90% hacia el año 2030. El grueso de la población se ubicará en suburbios ubicados en un radio de 40 kilómetros alrededor de las ciudades centro que ya existen desde principios del siglo XXI. La mayor parte de la población urbana vivirá en multifamiliares, mientras que la población rural vivirá preponderantemente en casas unifamiliares.
Aunado al desarrollo de las grandes metrópolis de la actualidad que son la Zona Metropolitana del Distrito Federal, la Zona Metropolitana de Guadalajara; Zona Metropolitana de Monterrey, Zona Metropolitana de Puebla, Zona Metropolitana de Tijuana, la ciudad de León y Ciudad Juárez; se espera que antes del 2010 tres ciudades más cuenten con una población de más de un millón de habitantes; estas son Acapulco, la Zona Metropolitana de Mérida y la Zona Metropolitana de San Luis Potosí. De esta manera, bajo la dinámica poblacional actual, en el 2030 podría haber once ciudades con más de un millón de personas que agruparán cerca del 60 por ciento de la población nacional. La concentración regional del desarrollo será crucial para la conformación de las ciudades mexicanas. En la actualidad el centro y norte del país generan el 86 por ciento del valor agregado nacional y los ingresos personales promedios 8
duplican a los que captan los cinco estados del sureste del país (Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo y Chiapas). Además existen disparidades en salud y educación. De mantenerse esa tendencia, México estará acercándose a situaciones donde los contrastes regionales estarán incubando conflictos sociales de una gravedad mayor a los que actualmente se viven. Como las ciudades también se caracterizan por su actividad productiva, en el futuro la actividad comercial mexicana generará una nueva conformación de red de distribución de productos de consumo y zonas de tráfico internacionales, y por tanto una nueva conformación de ciudades. El comercio se podría concentrar en ocho centros: el Valle de México, Guadalajara, Monterrey, Mexicali, Torreón, Mérida, Minatitlán y los Mochis. Por lo que se espera que la población se concentren en torno a estos conglomerados. A medida que las ciudades se desarrollen, se agudizará la aplicación de medidas cuyo objetivo sea crear un balance entre la oferta y la utilización de recursos vitales, entre ellos el agua. Algunas ciudades presentarán problemas críticos de agua: México, Guadalajara, Puebla, Monterrey y Ciudad Juárez. Por tanto se requerirá mejorar y ampliar la capacidad de los acueductos. Se anticipa que entre el año 2010 y el 2015, se condicionará que cuando menos la quinta parte del agua utilizada tenga tratamiento para poder ser suministrada a la recarga de mantos acuíferos. Las ciudades mexicanas deben ser vistas como objetos estratégicos de acción pública. Por eso el futuro requiere que la planeación urbana logre un sistema urbano capaz de competir en la globalización y al mismo tiempo, compartir la riqueza generada en las ciudades y regiones, mediante un principio de solidaridad interregional. Entre los aspectos que deberán considerarse para el desarrollo futuro de las ciudades mexicanas se encuentran: Aspectos físicos espaciales: contar con elementos de planificación urbana que consideren el caso del suelo, el equipamiento, la vivienda y los servicios públicos al alcance de los diversos estratos sociales. Ordenamiento Urbano: el suelo urbano es un factor fundamental, por tanto el ordenamiento deberá identificar las zonas urbanas y no urbanizables en una visión de largo plazo. Infraestructura: será necesario abatir insuficiencias y carencias y ampliar la cobertura de servicios públicos como agua potable y saneamiento. Equipamiento: en el equipamiento las ciudades requerirán de aeropuertos, centros de educación superior, plantas de disposición de basura. Vivienda: será necesario atender las demandas de vivienda, considerando no sólo los niveles de ingresos de los demandantes, sino otros factores como el suelo urbano disponible y la red de los sistema de financiamiento para hacer viable el techo propio. 9
Medio Ambiente: se considera necesario que en el futuro se apliquen con la seriedad del caso, instrumentos de regulación del uso del suelo y de crecimiento urbano, cuidando la preservación del medio ambiente, creando reservas territoriales para zonas aptas para el desarrollo urbano. La planeación urbana también debe considerar la transición demográfica y las finanzas urbanas. La conformación de la ciudad no debe olvidar la actividad y su base económica, de ésta dependerá la disponibilidad de infraestructura, servicios y capital humano especializado que requiere. El desarrollo de las ciudades se basará esencialmente en un análisis de costo–beneficio para la población residente y para el gobierno de cada una de ellas. Su vocación estará limitada por un análisis del medio ambiente y la disposición de recursos humanos y tecnológicos México: Ciudades con Más de un Millón de Habitantes, 2000-2030 (Millones de habitantes)
ZONA METROPOLITANA / AÑOS Zona Metropolitana del Distrito Federal
2000
2010
2020
2030
17.7
19.7
21.3
22.3
Zona Metropolitana de Guadalajara
3.5
4.1
5.0
6.1
Zona Metropolitana de Monterrey
3.3
4.0
5.2
7.1
Zona Metropolitana de Puebla
1.6
1.8
2.0
2.1
Zona Metropolitana de Tijuana
1.2
1.7
2.1
2.7
León
1.1
1.3
1.3
1.3
Ciudad Juárez
1.1
1.3
1.5
1.6
Acapulco
1.1
1.5
1.9
Zona Metropolitana de Mérida
1.0
1.2
1.3
Zona Metropolitana de San Luis Potosí
1.0
1.1
1.2
Zona Metropolitana de Cuernavaca
1.2
1.4
Zona Metropolitana de Querétaro
1.2
1.3
Zona Metropolitana de Coatzacoalcos
1.2
1.2
Mexicali
1.1
1.2
Cancún
1.1
1.6
Zona Metropolitana de Aguascalientes
1.0
1.1
Zona Metropolitana de Tampico
1.1
Zona Metropolitana de Chihuahua
1.0
Total
29.5
37.1
49.0
57.5
Fuente: Consultores Internacionales S.C. con datos del Modelo RUP.
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ACCIONES
PARA LA CIUDAD DE MÉXICO
Si esta ciudad quiere ser ejemplo para otras ciudades mexicanas como Monterrey, Ciudad Juárez, Guadalajara, entonces requiere del esfuerzo mancomunado de los vecinos y las instituciones de gobierno. La inversión en infraestructura será fundamental para que el caos urbano no nos trague por completo. Esto significa que para disminuir el caos que atraviesa esta ciudad, será necesario la conformación de Redes de Vecinales. Serán los mismos vecinos quienes velarán por el ordenamiento urbano y el cumplimiento de la acción pública en materia de servicios básicos como transporte, recolección de basura, drenaje, suministro de agua y energía. Tal como hemos expresado, las ciudades será gobernadas por sus propios habitantes. Si bien es necesario la inversión en infraestructura para el apoyo de los servicios básicos, también es importante desarrollar campañas de ahorro de recursos naturales y energéticos y de solidaridad vecinal que incidirán en una mejor calidad de vida. Por ejemplo, racionar el uso del agua en nuestros hogares debe ser campaña gubernamental de todos los días y de las Redes Vecinales. También el ahorro de electricidad, para que no sigan ocurriendo estos apagones que vivimos casi a diario. Para qué usar el auto para transportar sólo a una persona, cuando podemos ahorrar combustible y colaborar con la disminución de la contaminación sónica y atmosférica, si llevamos en nuestro coche a uno o dos vecinos? Nada hacemos con mejorar fachadas, como la del Centro Histórico, que no deja de ser atractiva para los turistas, pero si no incorporamos a la gente, a los mismos habitantes de la ciudad a construir su ciudad del mañana, no estaremos avanzando. Entonces esas mega-ciudades, esas ciudades de la información, esas ciudades globales, nos parecerán como películas de ciencia-ficción porque nuestra realidad serán tan dura, tan caótica, que estaremos a punto de un verdadero infarto al miocardio urbano.
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Las Ciudades en México: Visión Optimista 2030 Las ciudades tenderán a competir entre sí, basadas en su patrimonio histórico, ubicación, liderazgo tecnológico, calidad de sus recursos humanos y de sus instituciones sociales En México, en ciudades de formación reciente o de mayor desarrollo económico, las expresiones xenofóbicas pudiesen presentarse ante la inmigración de asiáticos y centroamericanos que disputan tanto puestos de trabajo altamente codiciados; como labores simples, remuneradas en condiciones de subsistencia. La semilla de estas manifestaciones se presenta en ciudades con alta densidad de empresas maquiladoras. En el aspecto tecnológico, se desarrollarán “ciudades enlazadas”, con alto nivel de conectividad para el desarrollo de negocios basados en la información. Estas ciudades se caracterizarán por una baja centralización de las actividades ya que la tecnología abreviará las distancias físicas y el desarrollo de los sistemas financieros por medio de la red, posibilitarán transacciones desde los recintos de los negocios. En esta perspectiva el desarrollo de viviendas con instalaciones mediáticas, será vital para la evolución de los prestadores de servicios que laboran en sitios distintos de edificios para oficinas. Las “ciudades enlazadas”, desarrollarán grandes centros comerciales, complejos destinados al comercio electrónico y nuevas variedades de viviendas en condominio. Pese al alto grado de desarrollo tecnológico, se avizora una propensión al encierro de los habitantes de estas ciudades y se prevé una falta de convivencia y la pérdida del sentido de comunidad. Otra vertiente de desarrollo urbano será la “ciudad vecindario” que nos remite a un regreso al sentido de comunidad. Los centros educativos podrán retomar su papel de concentradores de las actividades de la comunidad. Las ciudades del conocimiento combinarán el ambiente estudiantil con el desarrollo urbano más humanizado y con altos niveles de desarrollo cultural y científico–tecnológico. En este esquema ciudades como Morelia, Monterrey, Guadalajara, Querétaro y Puebla; podrán desarrollar ambientes propicios para este tipo de convivencia. Las “ciudades conservacionistas” será otro paradigma en la convivencia urbana. Estos serán conglomerados ecológicos con altas dotaciones de recursos tecnológicos orientados a la preservación del medio natural. La principal preocupación será el control o aislamiento del caos urbano acompañado de la preservación de la tierra cultivable y el desarrollo de espacios recreativos. Estas ciudades pudiesen construir jardines hasta en las azoteas, balcones con vegetación y cuerpos de agua artificiales dentro y fuera de las viviendas. Las ciudades ecológicas equilibrarán el conflicto entre la densidad habitacional y la preservación de las áreas verdes a través de la planeación urbana y las políticas de crecimiento controlado. El balance lo hará el acceso a la energía y los recursos naturales (sobre todo el agua). 12
Ante una creciente conectividad de las ciudades y un ascenso irreversible de la migración, se desarrollarán nuevas ciudades globales, cuya atmósfera cosmopolita será definida más por el desarrollo de negocios y fuentes de empleo, que por atractivos históricamente determinados. Paralelamente se desarrollarán ciudades regionales, que serán núcleos o partes de un sistema regional, fruto de la descentralización nacional y la integración de espacios regionales que dejan de fomentar pequeños núcleos aislados y se dan a la tarea de auspiciar el desarrollo de metrópolis bien conformadas con impactos positivos para toda una demarcación. La administración de estas ciudades dependerá de un “foro” común, el desarrollo de consorcios interurbanos, que coordinen el desarrollo de la infraestructura y de las necesidades de transporte. Atendiendo a las necesidades de la población se desarrollarán las “ciudades del ocio”, sus viviendas y servicios relacionados con el hospedaje incluyen ya y lo harán con mayor fuerza, comunidades de retiro próximas a las centros de ciudad. Se ubicarán en parques temáticos, climas tropicales y lugares soleados. La competitividad de las ciudades del ocio dependerá de la habilidad de los planificadores y de los gobernantes para reconocer las necesidades de retiro de la población. En la medida que se ha reducido el uso de aguas y la canalización de aguas residuales, se genera en los medios urbanos un excedente destinado a la formación de paisaje y hábitat para especies animales y vegetales; así, proliferan parques y jardines con lagunas, fuentes y jardines cuya agua procede de sistemas de tratamiento de los centros urbanos cercanos. A medida que estas tecnologías se dispersan eficientemente por las ciudades más grandes del país, se genera un caudal de agua tratada que permite la rehabilitación de viejas cuencas de ríos donde los asentamientos irregulares ya no existen ya que han sido reubicados. Las consecuencias sobre el clima son el aumento el nivel de humedad de las ciudades, la proliferación de la flora y la fauna, al tiempo que mejora el clima citadino. Al año 2030 el financiamiento público habrá facilitado la ordenación territorial de las ciudades y las personas utilizarán su patrimonio como garantía de crédito para la constitución de nuevas empresas. El desarrollo de las ciudades no será espacialmente disperso, habrá pequeñas empresas de servicio ubicadas nuclearmente alrededor de zonas habitacionales, que ofrecerán empleos a los habitantes de las unidades, quienes prácticamente se trasportarán a pie a su lugar de trabajo. La aplicación de nuevas tecnologías economizadoras de energía permitirá un acercamiento a un balance energético, lo que implicará la ausencia de déficit en este insumo. Se usará la basura y la energía solar para generar electricidad. La energía solar podrá almacenarse con mayor eficiencia y será usada para procesos simples del hogar, por lo que las nuevas viviendas tendrán dispositivos y adaptaciones necesarias para el aprovechamiento de las fuentes renovables de energía. Un poco más del 50% de los nuevos hogares mexicanos se asentará de manera diseminada en el resto del país motivado por la re–localización algunas dependencias 13
públicas en otros estados del país, también influirán la formación de ciudades del conocimiento y la formación de centros manufactureros atraídos por Estados con ciudades en desarrollo.
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