MARÍA LUISA MELÉNDREZ

Directora Conjunto Santander de Artes Escénicas

Enesta industria llevamos mucho tiempo en crisis, pero la pandemia vino a acentuarla y nos empujó a que la viviéramos de otra manera, mucho más cruda. Mantener a flote el lugar de trabajo ha sido todo un reto y un privilegio, sobre todo, poder hacerlo con el acompañamiento de tu staff; poder realizar funciones, actividades, proyectos que nos ayuden a sobrellevarlo ha sido muy importante.

En 2020, actuamos rápidamente en respuesta a una crisis inesperada. Muchas de las iniciativas surgieron en la base, con el equipo interno; todos nos involucramos y buscamos alternativas, tuvimos reuniones, creamos una mesa de discusión en donde tratamos de imaginar lo que podíamos resolver y hacer. Así nació la Sala Digital, un medio en el que interactuaron tanto el talento y el staff interno como personas, artistas y promotores externos. Trabajamos con rigor cuidando todos los protocolos que exigía la contingencia sanitaria. Con ellos hemos consolidado una oferta de proyectos de teatro, danza, conciertos y masterclasses.

Las compañías locales hicieron un gran trabajo de adaptación para que el teatro y las artes escénicas se realizaran para la cámara. Uno de los impactos positivos y permanentes de estos tiempos son las relaciones que se fortalecieron con actores, actrices, productores, músicos de la comunidad artística local; todos nos acercamos.

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Al principio trabajamos con los medios que fuimos teniendo a la mano, estábamos descubriendo una nueva manera de producir. Cada vez nos hicimos más expertos y fuimos innovando; teníamos que pensar en cómo lo vería el público desde sus pantallas.

En 2021, activamos nuestros eventos al aire libre y la gente respondió muy bien. Sin duda, las ganas de salir y participar fueron muchas. El hambre de asistir a los eventos y de comulgar con el arte ayudó. Juntos, público, artistas y producción, nos reinventamos.

Las cuestiones digitales tomaron mayor relevancia, llegaron para quedarse, no solo para vender boletos, sino para la difusión cultural, promover la oferta. Actualmente, estamos convencidos de que debemos seguir enriqueciendo la Sala Digital para que se convierta en una biblioteca digital que contenga los eventos y contenido educativos, buscando que los productos tomen otro sentido.

Yo pienso que los primeros meses estuvimos sobrellevando la cruda realidad: innovamos y también nos adaptamos. El mayor reto para el Conjunto Santander durante los momentos volátiles y ambiguos de la pandemia fue mantenernos vigentes, seguir existiendo. México