1 minute read
SEBASTIÁN LADRÓN DE GUEVARA
Economista de la Cultura e Industrias Creativas
Amanece y enciendo la compu. Luego la cafetera. Anochece y la luz de la compu sin sueño. En medio, la activa quietud.
Mi hogar se convierte en una cava artificial. El clima, la luz, el alimento y la otredad son nuevos otros para diferenciarme de mí mismo. Desde estas miles de guaridas se dan condiciones para lograr una mejor conservación y aislarse de fluctuaciones poco conocidas.
Los días se suceden y mi cava de estación es menos artificial. Dentro de ella me subo al árbol de damascos, corro en el pasillo del fondo, me escondo dentro de la hiedra, juego con mis amigos al Bucanero, siento el perfume del otoño de mi niñez en la casa de mi abuela. Las sombras de la realidad comienzan a alejarse del mito.
Y vamos al encuentro del vino nuevo para la gestión cultural. Necesitamos el apoyo mutuo y el diálogo con colegas y amigos de carrera y de trabajo, hablando en clave latinoamericana. Nos explicamos y construimos alternativas que nos den visibilidad para acompañar y sostener a los emprendimientos creativos, en códigos casi desconocidos. Procesos de crianza para industrias creativas, optimizar la madurez alcanzada, fortalecer esas apasionantes proximidades desde nuestros territorios. Otros nortes o sures.
No es la nueva normalidad, soy uno nuevo.
Está amaneciendo en Mendoza. Enciendo la compu, pero primero la cafetera.