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Domingo 9 de junio de 2019 • www.pulso.cl
PULSO DOMINGO
Mario Kreutzberger asegura estar inquieto. Son las 15 horas del viernes 31 de mayo, y aunque horas antes el director honorario de la obra estuvo con múltiples auspiciadores dispuestos a colaborar, hoy el empresario tras Don Francisco se muestra preocupado. Si bien la última Teletón sobrepasó los pronósticos, al recaudar $ 32.851 millones, la meta y el aporte estatal que reciben les alcanza justo..., no para crecer y menos para elevar la edad de atención. La Teletón -dirá Kreutzberger- requiere más. “Necesitamos más recursos para hacer un mejor trabajo (...). En este momento no podemos dar la atención que quisiéramos”, señalará. Y en eso están. Hoy, el animador no hablará de artistas ni de la campaña número 41 que acaban de presentar...; hoy hablará de números, del aporte estatal, de un posible fondo endowment, de filantropía, de empresarios que no aportan y de aquellos que aportan mucho...; hoy profundizará en el proceso de rearme financiero de una obra que -dirá“tiene como gran labor haberle dado visibilidad a la discapacidad en Chile”, discapacidad que hoy llega al 20% de la población. ¿Cómo está financieramente la Teletón? —Nunca estuvo boyante. Lo que ocurre es que cuando partimos, atendíamos al 5% de los niños de Santiago, y actualmente atendemos al 93%, de cero a 24 años. Fuimos creciendo y creciendo, y llegó un momento en la última década donde la presión popular del país nos hizo crecer de manera rápida e irresponsable. En 2010 -recuerda-, la Teletón tenía 23.000 m2 y atendía a cerca de 23.000 pacientes. Hoy está ad portas de los 52.000 m2 y supera los 30.000 pacientes, un 30% más. Además, ya hay un 5% de extranjeros. “Tenemos una infraestructura magnífica, pero cada vez que pasa el tiempo tenemos más pacientes, entonces no podemos dar la atención que quisiéramos. Nuestra infraestructura daría para hacer el doble de lo que estamos haciendo”. ¿Cuánto es el gasto de Teletón? —Lo que se recauda, más un aporte estatal que en este momento llega a los $ 7.000 millones anuales a través de Fonasa. Y pensamos que Fonasa debiera pagarnos lo que corresponde, y lo que corresponde es mucho más, yo calculo el doble. Hoy atendemos al 87% de los pacientes Fonasa. Cuando un niño llega con una discapacidad a un hospital público, la respuesta del
médico es ‘vayan a la Teletón’. Nosotros estamos cumpliendo una labor. Esa labor necesita un mayor respaldo del Estado, el gobierno debiera apoyar más esto. ¿A qué se refiere con pagar lo que corresponde? —Fonasa aporta el 20%, con un tope de $ 7.000 millones. A nosotros nos pone un tope, no nos paga como le paga a un hospital, no nos paga la cantidad que correspondería por cada paciente. En este momento, la situación es difícil y el Estado tiene que comprometerse a más, porque creemos que con la infraestructura que tenemos podemos crecer en edad -hoy atendemos hasta los 24 años-, pero esa infraestructura tiene una cantidad fija de gasto. O sea, acá el problema no es el terreno, ni la infraestructura, es el costo de mantención… —Sí, es el costo de mantención. Hemos hecho muchos inventos, como la rehabilitación a distancia, que nos ayuda, pero necesitamos más recursos para hacer un mejor trabajo y podríamos, incluso, aun cuando es muy aventurado decirlo, alargarnos hasta los 30, 35 años. Hoy, Fonasa les pasa $ 7.000 millones, ¿cuánto más necesitan? —Al Presidente Piñera le estamos pidiendo que nos dé más recursos. Pienso que lo que corresponde es que Fonasa nos dé al menos el doble de lo que nos está dando, y si el Estado lo estima, darnos un suple más para que podamos aumentar la edad y ocupar bien la infraestructura que tenemos, porque resulta que cuando un niño o un joven está enfermo en un hospital puede estar 15-20 días, un mes. Un discapacitado está 20 años; cuando se pone un brazo no es un brazo, son 18 brazos, porque el niño va creciendo. ¿Cuánto debiera aportarles el Estado en una primera etapa? — Lo que quisiéramos, para estabilizar los recursos son $ 11.000 millones para partir, en este momento: $ 7.000 millones para rehabilitación y $ 4.000 millones para cirugía. ¿Hoy los recursos que tienen les alcanzan para mantenerse? —Para mantener lo que tenemos de manera anual, pero creemos que podemos atender mucho mejor a esa gente y podríamos crecer más.
“Acá hay un problema: la filantropía” El primer Presidente de la República que le dio un aporte a Teletón proveniente de Fonasa fue Ricardo Lagos. Sebastián Piñera, en su primer periodo, aumentó la cifra en $ 1.161 millones: de $ 3.186 millones a $ 4.347 millones. Y luego, Michelle Bachelet la elevó en $ 2.653 en todo su gobierno. En 2016 pasó de $ 5.000 millones a $ 7.000 millones, la mayor alza efectuada por una administración. Y ahora, Kreutzberger asegura es-
ENTREVISTA CON ANIMADOR Y DIRECTOR HONORARIO DE TELETÓN
Mario Kreutzberger y Teletón: “Al Presidente Piñera le estamos pidiendo más recursos (…). Lo que quisiéramos son $ 11.000 millones para partir”
—El animador explica el rearme financiero de Teletón. Hoy, además de pedirle recursos adicionales al Estado, analizan constituir un endowment y formas para que más empresarios aporten. —Asegura que la obra requiere mayores fondos para aprovechar de mejor manera la infraestructura, sumar más tecnología e, incluso, elevar la edad de atención... ”hasta los 30 o 35 años”, dice. Una entrevista de MARÍA JOSÉ TAPIA
tar insistiendo para que Piñera haga lo suyo, ya que al menos en su primer año mantuvo el monto. ¿Se ha reunido con el Presidente? —He tenido reuniones con él. Él anota todas las cosas, ha sido muy amable; el ministro de Salud también ha sido amable, pero hasta ahora no ha pasado nada, se está estudiando, pero yo estoy inquieto, porque creo que tenemos que darle un buen servicio a la gente. He sido bien claro con el Presidente y con todos respecto de que
tenemos la infraestructura, que queremos ser eficientes, que nos ayuden en eso; que nos den un salto para ponernos al día. Hoy hay cirugías, como una risotomía, que pueden cambiar la situación de un niño; lo que demora 15 años de rehabilitación se puede hacer en 90 días. Entonces, hay tecnologías que hay que incorporar. ¿Cuándo espera una respuesta? —Mañana si fuera posible, pero sé que no lo es. Lo antes posible, porque ahora ya es una situación en
la que necesitamos. Solo este año han entrado 800 nuevos pacientes por encima de lo que esperábamos, porque hay una inmigración grande, muchos no tienen ni siquiera Fonasa, y los atendemos a todos. ¿Y los empresarios no debieran ponerse con más? —No solo podemos pedir y conseguir que el Estado sea quien nos ayude. Acá hay un problema: la filantropía. En este país no existe la costumbre de la filantropía y cada vez que alguien hace un acto filan-