Perspectivas
La acuicultura en el cruce del calentamiento global y la resistencia antimicrobiana Ante la disyuntiva mundial de la necesidad por incrementar la producción de alimentos para satisfacer a la creciente población, pero a la vez reducir los impactos negativos a los ecosistemas y fortalecer los esfuerzos internacionales por el desarrollo de la agenda 2030 de los Objetivos por el Desarrollo Sostenible, la producción acuícola surge como alternativa para dar solución a la problemática. Sin embargo, este estudio explora la actual correlación entre el aumento de temperaturas derivadas del cambio climático y la resistencia antimicrobiana que se presenta en entornos de producción de algunas de las especies más relevantes para la acuicultura mundial, lo que arroja información interesante sobre la necesidad de mejores prácticas en el desarrollo de la actividad productiva. Por: Miriam Reverter, Samira Sarter, Domenico Caruso, Jean-Christophe Avarre, Marine Combe, Elodie Pepey, Laurent Pouyaud, Sarahi Vega-Heredía, Hugues de Verdal & Rodolphe E. Gozlan *
Introducción
Un desafío para los próximos años es alimentar a la creciente población humana al tiempo que se reduzcan los impactos al entorno por la producción del alimento. Esto aplica en particular a los países con bajos y medianos ingresos donde aumenta la demanda de proteína animal y donde los cambios ambientales por sequías, inundaciones e incendios extensos han conducido a crisis alimentarias. La seguridad alimentaria es punto central de la llamada “agenda
2030 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible” de la ONU, que intenta acabar con la pobreza y proteger al planeta de la degradación. Para alcanzar estos objetivos debe incrementarse la producción de alimento, y las buenas prácticas deben seguirse para reducir el impacto al medio. La respuesta al incremento en la demanda de alimento es la intensificación de la producción, pero se deben evitar riesgos derivados como incrementar el uso del agua y el abuso de sustancias antimicrobianas. 10
Dirigir la dieta hacia un mayor consumo de pescados y mariscos podría ser una solución a la necesidad de proteína, que podría sostener la salud humana y la del medio ambiente. De hecho, se prevé que el consumo de estos productos aumentará en un 27% para 2030, por medio de la acuicultura. La industria acuícola en la actualidad contribuye significativamente al bienestar de más de 100 millones de personas alrededor del mundo, ya que procura seguridad alimenticia y reduce la pobreza. Sin embar-