ECO LITERARIO 59

Page 1

ECO LITERARIO 59 Crónicas periodísticas de la SOCIEDAD DE ESCRITORES DE GENERAL VIAMONTE

AÑO 5

Dirección: S.E.G.V. SADE: FILIAL LOS TOLDOS. Redacción Y Diseño: Etel Carpi.

OCTUBRE 2018

DOMICILIO: Biblioteca Popular Mariano Moreno. Los Toldos. Buenos Aires.

Especial N° 4

EMAIL: escritoresdeviamonte@gmail.com http// sociedaddeescritores en facebook y @de_escritores en Twitter. Blog: http//escritoresdeviamonte.blogspot.com.ar - Eco Literario digital en ISSUU.COM. --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

RELATO HISTÓRICO MUSICAL

OBRAS PREMIADAS EN EL CONCURSO 2018 Continuamos la difusión de los premiados, en categoría adultos. SEGUNDO PREMIO CUENTO Daniel Cheruna. Arrecifes. Buenos Aires.

LA POLLERA AZUL

La Asociación Cultural Sanmartiniana, presentó en el Teatro Español, el espectáculo “Un secreto designio”, RELATO HISTÓRICO y MUSICAL sobre la vida y obra del General Don José de San Martín. La autoría pertenece a Carlos Soria, a quien acompañó un grupo de cantantes que presentaron un nutrido repertorio de canciones alusivas, con momentos de relato a cargo de Raúl Oliverio. Una gran pena, que tan poco público haya concurrido a presenciar un espectáculo de alto contenido artístico y emocional en homenaje a nuestro héroe el Gral. San Martín. SADE Los Toldos apoyó este aporte cultural, al igual que en el año 2017 cuando se presentó en la biblioteca y en la Feria del Libro. Felicitamos a Carlos Soria y su grupo.

Cada vez que me ponía la pollera azul, sentía crecer mi cuerpo. Me convertía en mujer hecha y derecha, teniendo apenas ocho o nueve años. Los tacones de mamá y el labial rojo, me transformaban mágicamente, dándome el aspecto deseado; aquel que podía ver en las mujeres conocidas o en las que descubría a través del cine y las revistas. Mi hermano y mi padre, así como todos los hombres a mi alrededor, representantes de la masculinidad, tal y como yo la entendía, no podían compararse o pretender transmitir el magnetismo de la belleza femenina; ellos estaban en este mundo con el mandato de secundarlas y admirarlas; para seducirlas; escribirles obras literarias; dedicarles poemas; hacerles muchos regalos y amarlas. Obra de arte de Dios, tal vez la más lograda, necesitó a “los hombres” como testigos y destinatarios, para honrarlas con devoción. Durante la niñez me ocupé meticulosamente de armar una personalidad que fuera el reflejo de ese ser “superior”, según mis convicciones; un objeto virtual, percibido únicamente por mí, para disfrutar en soledad como el secreto mejor guardado. El espacio de la siesta era un momento ideal, así como la oscuridad de las noches en la cama antes de dormir. La pollera azul, tenía algunas franjas al tono y corte evasé, que permitía moverme y bailar, creando artísticas figuras. En la escuela perdía por momentos la concentración, por ponerme a pensar en el momento de llegar a mi casa y enfundarme en el atuendo que me permitiría ser plenamente libre. A medida que el tiempo pasaba y la pollera iba perdiendo su color, también yo empezaba a dar cuenta del paso del tiempo. Nadie conocía mis momentos íntimos, pero daba la sensación de que algo se traslucía y era percibido de algún modo por los otros.

ECO L. 1

La hostilidad de mis pares se hacía notar. Debía esconderme mejor cada vez, para que nada quedara en evidencia. Las agresiones aumentaban en forma directamente proporcional al transcurrir de los años. Se notó mucho más en el colegio secundario, momento en que las identidades entran en crisis en la búsqueda de un perfil definido. A mí me gustaba todo lo contrario


que al resto del grupo de pertenencia; y esa osadía tenía como resultado censura y castigo, expresada en segregación y el consiguiente aislamiento.

predicen la certeza.

Cuando pude, asumí la falta de consenso a mi forma de ser y ver las cosas. Ya no me importó más la opinión ajena y decidí enfrentar al mundo.

es una corriente

La pollera azul había desaparecido junto a tantas cosas que el tiempo se lleva, incluida la infancia. Pero podía acceder a otras polleras y otros colores. Elegir a gusto maquillajes, zapatos y sandalias con tacos y gran variedad de accesorios y perfumes. Dejé la oscuridad y me mostré a la luz del día, con el orgullo de saber quién era; ya sin dudas ni conflictos. Fue la mejor decisión en el momento exacto. Conocí el amor, sentí las miradas de admiración y deseo sobre mi persona; así como las de envidia. Pero hoy que ha pasado mucho tiempo y estoy en la última etapa de mi vida, no me resulta nada fácil ser quien soy. Estoy pagando el precio de haberme animado a ser feliz. Los chicos se burlan, me persiguen y agreden; los vecinos murmuran y se apartan como si fuese portadora de alguna enfermedad contagiosa. La soledad volvió a ser mi única compañía; pero no encuentro en ella ahora aquel refugio amable.

La pena

que baja enredándose en la rajadura de tu ausencia ácida y helada. En la sal te bebo. TERCER PREMIO POESÍA María Rosa Rzepka. Florencio Varela. Buenos Aires.

Hay ojos que nos miran, nos reflejan

Vivo en la calle, como de lo que los otros tiran, y me tapo con cartones. Cuando puedo dormir suelo soñar con un pasado mejor; pero al despertar, la realidad me golpea con dureza. Y aunque me acostumbré a que me griten “viejo puto”, me gustaría volver a soñar, como en mi infancia de la pollera azul y tener el inmenso y divino poder de sentirme “mujer”; porque finalmente eso es lo que soy y seré siempre; aunque todos se opongan.

SEGUNDO PREMIO POESÍA. Teresita Mabel Saint Esteben. Dolores. Buenos Aires.

Hay ojos que nos miran y despiertan un mar de interrogantes que se vuelcan bajo un cielo que oculta la tormenta. El horizonte que nunca alcanzamos. El no saber que hay más allá, tras de la espera. Caprichos de las formas presentidas. Hilos de marionetas que sostienen Hay ojos que nos miran, nos reflejan los miedos y las dudas. Las tristezas.

Sabor a sal Cuando la noche escupe desamparo y el día ni siquiera se insinúa, la soledad me traga con sus millas. En la almohada te araño pero los dedos

Día de la Madre. Mabel Romero Miqué. Pehuajó. ECO L. 2


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.