EC-t Ediciones

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 101

1/28/13 3:12 PM

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 102

1/28/13 3:12 PM

Este fascículo es parte de una serie, dedicada especialmente a los psiquiatras, sobre personajes que padecieron distintos tipos de insania y que, sin embargo, trascendieron por su genio y por sus obras.

Para algunos de ellos, los momentos de mayor creatividad coincidieron con las manifestaciones más agudas de su enfermedad.

Ante estas personalidades, surge el interrogante de cómo habría sido su actividad creativa de haber estado psíquicamente sanas. ¿Fue la enfermedad una fuerza esencial que los llevó a incursionar en terrenos donde nadie se animaría, o los impulsó a trabajar intensamente para escapar de sus delirios? Quizás el lector tenga la respuesta.

El eScritor del terror

Edgar Allan Poe (1809-1849)

Los hombres me han llamado loco; pero aún no está determinada la cuestión de si la locura es o no la más excelsa inteligencia, si mucho de lo que es gloria, si todo aquello que es profundo, no brota de la enfermedad del pensamiento, de modos de pensar exaltados respecto del intelecto general. Aquellos que sueñan de día son conocedores de muchas cosas que se les escapan a los que únicamente sueñan de noche.

Edgar Allan Poe

P

oe se nos ofrece a través de distintos daguerrotipos de la época: siempre con gesto melancólico, jamás con una sonrisa o con expresión afable porque, desde la infancia, tuvo desdichas, y su mundo interior era tan terrible como los cuentos que escribía. Trató de ganarse la vida como escritor, pero las editoriales lo explotaron comercialmente, subestimaron su obra influenciados por la presencia de ese hombrecito que se les presentaba tímido, desaliñado y con mirada triste. Tenían ante sí a uno de los más grandes cuentistas de los Estados Unidos, al inventor de la novela policial, al que desarrolló el suspenso mucho antes de que se inventara la palabra psycho-thriller y al autor de poemas de notable belleza. No lo entendieron, lo consideraron un poeta menor y le pagaron sumas miserables que lo convirtieron casi en un mendigo que terminaría buscando consue-

lo en el lento suicidio del alcohol.

Pero había otro Poe, el que en circunstancias ordinarias podía ser una excelente compañía, que hablaba de literatura con brillante elocuencia y conocimiento, y leía sus poemas con voz agradable.

Un joven dispar

E

dgar Allan Poe nació en Boston en 1809, y salvo un breve período en Inglaterra, la mayor parte de su vida transcurrió en el sur hostil y racista de los Estados Unidos, donde imperaba la esclavitud. Quedaba por delante casi medio siglo para que la Guerra de Secesión terminara con ese estigma.

El hogar de los Poe era francamente disfuncional. Sus padres, actores trotamundos, no figuraban en su memoria, ya que el

1

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 1

1/28/13 3:12 PM

padre alcohólico abandonó a los suyos y desapareció del mundo sin dejar rastros. En cuanto a su madre, falleció cuando él tenía solo 2 años. Este fue el origen de una búsqueda incansable por la figura materna, que en distintos momentos de su vida encontrará encarnada en varias mujeres que transitaron su vida.

Edgar fue adoptado por una familia, los Allan, en la ciudad de Richmond, quienes, si bien no le ofrecieron el afecto adecuado, al menos le brindaron educación en una escuela privada de las afueras de Londres. Cinco años después, regresaron a Richmond, y Edgar continuó sus estudios en escuelas locales.

A sus 17 años, el señor Allan lo envió a la Universidad de Virginia, pero no fue un período feliz. Su padre adoptivo le retaceaba los fondos, y se transformó en un joven pobre, rodeado de compañeros ricos, hijos de hacendados que poseían plantaciones de algodón, que amasaron sus fortunas gracias al látigo y al sudor de los esclavos negros. Edgar buscó la salida económica de la peor forma: el juego. Así, entró en un círculo vicioso de deudas y empobrecimiento, que lo condujo a la bebida.

Con los bolsillos vacíos, se alistó durante unos años en el Ejército para tener un salario, mientras empezaba a escribir cuentos y poemas.

Retrato de Virginia Clemm Poe, atribuido a Thomas Sully.

Posteriormente, se trasladó a Baltimore, donde se alojó en la casa de su tía Maria Clemm, que vivía con su hija Virginia, de 7 años. Poe se casaría con ella seis años después, cuando aún no había dejado de ser una niña. En la misma casa vivían William Henry y Rosalie, dos hermanos de Edgar que en la diáspora familiar habían sido adoptados por la señora Clemm. La presencia de sus hermanos afectó profundamente su espíritu, ya que William Henry era alcohólico y estaba muriendo de tuberculosis, mientras que su hermana tenía cierto retardo mental.

Los espectros de esa familia devastada lo perseguirían por el resto de su vida.

Primeros trabajos

M

ás tarde, Poe consiguió trabajos menores en editoriales y publicó con poco éxito sus primeros cuentos y poemas. Se unió a la familia Clemm, y todos vivieron en una humilde pensión a expensas del magro salario de Edgard. Por entonces, contrajo matrimonio con Virginia; él tenía 27 años, ella, 13. Entre quienes estudiaron su vida existe controversia sobre las características de ese matrimonio. Se especula sobre su consumación o si el escritor se casó para tener proximidad con su tía en busca de la madre que nunca tuvo. A ella le dedicó el soneto “A mi madre”, en el cual escribe que, al haber perdido de niño a su madre, en ella encontró la figura materna que nunca tuvo.

Pero es evidente que amaba a Virginia, porque así lo manifiestan las cartas que le escribía. Con frecuencia, se estima que Virginia fue la inspiración para el último poema completo que escribió Poe, titulado “Annabel Lee”. En él, el escritor expone uno de los tópicos literarios más románticos: la muerte de una bella mujer. La última estrofa no solo es una muestra del amor del sujeto poético hacia esa joven doncella que ya no vive más, sino también de su insistencia en el tópico del sueño y la vigilia, en donde las almas de estos amantes logran reunirse: “Pues la luna, al brillar; me invita a soñar / en la hermosa Annabel Lee; […] / y así paso, tendido a su lado, las noches, / velando a mi amada, mi amor; mi consorte, / en su sepulcro junto al mar turquí […]”. Esta pieza, además, fue una de las grandes inspiraciones del personaje Annabel Leigh del libro Lolita, de Vladimir Nabokov.

Poe se trasladaba de una ciudad a otra, sea en búsqueda de nuevos horizontes laborales o huyendo de acreedores y loca-

2

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 2

1/28/13 3:13 PM

dores. La familia se mudó a Nueva York y luego a Filadelfia, lugares donde Poe consiguió trabajos fugaces en varias editoriales y logró publicar su primera colección de historias cortas: Cuentos de lo Grotesco y lo Arabesco. En 1841, formó parte del comité editorial del Graham’s Magazine, donde publicó “Los crímenes de la calle Morgue” y, más tarde, “La máscara de la muerte roja” y “La caída de la Casa Usher”, todos llevados al cine con el inolvidable Vincent Price como protagonista.

Fue un brevísimo período de cierto bienestar económico que se interrumpió cuando su esposa tuvo un accidente vascular del cual nunca se recuperó. Poe cayó en profundos pozos depresivos y en el abuso del alcohol, lo que no impidió que produjera varios de sus mejores cuentos, como “El pozo y el péndulo”, “El gato negro” y “El tonel de amontillado”.

En 1847, Virginia fallece, pero Poe logró superar el golpe gracias al intercambio de poemas y cartas con la viuda Sarah Helen Whitman, lo que generó una profunda amistad que se transformó en amor. Al principio, los padres de Sarah opusieron una feroz resistencia a que se casara con ese escritor de dudosa reputación y sin un cobre.

Poe intentó suicidarse con láudano, pero en una cantidad que solo lo enfermó gravemente sin llegar a matarlo. Una vez recuperado, insistió con Sarah, juró abandonar el alcohol y reformarse. Finalmente, su persistencia triunfó y se fijó fecha para la boda, pero el fuerte componente autodestructivo de Poe lo condujo a una noche de juerga con un amigo y poco después se presentó totalmente ebrio en la casa de su prometida. El proyecto matrimonial murió en ese instante, y ya era evidente que estaba en un pozo sin salida, llevando una vida de total desorden.

Entró en períodos de síndrome de abstinencia que le producían alucinaciones y delirios. El deterioro de su organismo y de su mente comenzó a precipitarse rápidamente. Finalmente, en una de las hospitalizaciones, murió después de gritar “Dios ayude a mi pobre alma”. Era el 7 de octubre de 1849, y Poe solo tenía 40 años.

La depresion, companera pertinaz de Poe

A

pesar de no haber sido diagnosticado en vida, se cree que sufrió de depresión. En una de sus cartas escribió: “Tengo cambios tan marcados, de la mayor depresión persistente puedo pasar a una exaltación o júbilo inmenso con una gran voracidad por trabajar”. Muchos estudiosos opinan que los síntomas que padeció son fácilmente encuadrables dentro del trastorno bipolar. Además, sufría de embriaguez patológica, lo que significaba que apenas tomando una copa de alcohol presentaba modificaciones en su estado de áni-

mo, que pasaba desde el desaliento hasta la agitación y verborragia.

Su obra también se vio impregnada por estos altibajos que padeció en su vida. La temática es oscura, triste, donde la muerte, la locura y el miedo son elementos frecuentes.

En la obra de Poe, la locura aparece como un componente de la depresión de sus personajes. En “El gato negro”, el protagonista, que a semejanza de Poe es alcohólico, en un rapto de ira se apodera de su mascota, un gato negro llamado Pluto y le arranca un ojo. El acto perverso aumenta aún más su estado de violencia, y más tarde termina asesinando a su esposa.

El miedo y el pánico fue otro de los tópicos habituales en las obras de Poe, quien escribió acerca del miedo, la locura y la depresión como una forma de sobrellevar lo que ocurría en su propia vida. En la poesía “El cuervo”, sin duda el poema más famoso y popular de la literatura norteamericana, el simple raspar de un cuervo contra la ventana de su habitación llenó de pánico al protagonista.

La obra de Edgar Allan Poe no pasará nunca de moda porque es atemporal. Sus relatos fantásticos y sin relación con el mundo verdadero marcaron a futuras generaciones de escritores e influenciaron en Europa a la flor y nata de la literatura, como Baudelaire, Mallarmé, Verlaine y Rimbaud.

Poe sigue vivo. Su fantasma incansable merodea por los barrios pobres de Richmond, husmea bodegones en Filadelfia, espía los lupanares del Bronx y curiosea los conventillos de Baltimore. Nadie puede escapar a la fascinación terrible de sus relatos, porque Poe es inmortal.

Para conocer mas sobre Edgar Allan Poe

• Edgar Allan Poe. Obras completas. Buenos Aires, Editorial Claridad, 1944.

• Film: La caída de la Casa Usher, dirigido por Roger Corman y protagonizado por Vincent Price. 1960.

• Film: El enigma del cuervo, protagonizado por John Cusack. 2012.

• Meyers J. Edgar Allan Poe: His Life and Legacy. New York, Cooper Square Press, 1992.

• Van Doren Stern P. The Portable Poe. The Viking Press, New York, 1972.

3

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 3

1/28/13 3:13 PM

Los guardianes del dormir 15 de marzo: Día Mundial del Sueño

“Todos los sueños son, en cierto sentido, sueños de comodidad, pues tienden a facilitar la continuación del reposo, evitando que el durmiente despierte. El sueño es el guardián del reposo, no su perturbador”.

Sigmund Freud, La interpretación de los sueños (1900).

D

esde el advenimiento de la modernidad, la vida nerviosa de las personas se vio incrementada frente a los fuertes cambios tanto tecnológicos como en materia de información.

En este mundo globalizado, los sujetos se encuentran permanentemente conectados, su ritmo de vida cotidiano se ha acelerado, y la somnolencia y el insomnio se volvieron epidemias que amenazan la calidad de vida de las personas.

Por este motivo, el 15 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño, que fue creado en 2008 por iniciativa de la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM, por sus siglas en inglés). Este día tiene como objetivo concientizar a la población sobre las consecuencias devastadoras del cansancio y de la somnolencia diurna, que generalmente constituyen síntomas de los denominados trastornos del sueño.

Dentro de los trastornos más comunes están la somnolencia y el insomnio, pero también se encuentran la apnea del sueño, la narcolepsia, el síndrome de las piernas inquietas, entre otros.

Así, algunos de los lemas que se promueven en el Día Mundial del Sueño son “respirar con facilidad, dormir bien” o “dormir bien para crecer sanos”, y se destaca la importancia de disminuir el estrés, para poder alcanzar un mejor y más placentero sueño.

El sueño es una necesidad básica y un componente vital del bienestar general de los seres humanos. Los trastornos del sueño afectan no solo la salud mental, sino también la salud física y emocional, en tanto que aumentan el estrés y se incrementa la propensión a desarrollar ansiedad y depresión, hipertensión, diabetes, envejecimiento prematuro y tendencia a la obesidad.

Existen dos fases diferentes del sueño: la primera se llama REM (movimientos oculares rápidos) y la otra corresponde al sueño profundo o sin movimientos oculares rápidos (NREM).

Durante la segunda fase, el organismo secreta la hormona del crecimiento, que regenera los tejidos y ayuda a reparar los músculos. Por ello, el cuerpo humano necesita dormir bien para obtener los beneficios de esta hormona.

Muchas historias de ficción se estructuran sobre la base del insomnio padecido por sus personajes, pero ninguna tan conocida como la del célebre personaje borgeano de “Funes el memorioso”. Ahora bien, aunque parezca raro, hubo muchos científicos que estudiaron el caso ficticio de Funes. En el prólogo de la segunda parte de Ficciones, titulada “Artificios”, Jorge Luis Borges escribió: “Funes el memorioso […] es una larga metáfora del insomnio”. Y esto es porque Irineo Funes no solo era víctima de recordar todo a cada momento (padecía hipermnesia), sino que, además, poseía un trastorno del sueño ocasionado por no poder frenar un instante su mente inquieta.

Su enorme capacidad de recordar todo en todo momento era lo que ocasionaba que Funes, acostado en su catre, sufriera de insomnio, porque, como reza el cuento: “Dormir es distraerse del mundo”. Así que bienvenida sea dicha distracción y a descansar como se debe en los brazos de Morfeo.

Para conocer más sobre el Día Mundial del Sueño ○○ Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM).

Disponible en: http://www.wasmonline.org/ ○○ Borges, Jorge Luis. “Funes el memorioso”, en Ficciones.

Buenos Aires: Emecé Editores, 2005. ○○ Freud, Sigmund. La interpretación de los sueños.

Buenos Aires: Ediciones Libertador, 2008.

La presente obra tiene como objetivo informar a los profesionales de la salud sobre diversos trastornos psiquiátricos. Agradecemos a todos los que, de una forma u otra, han colaborado para que este material, de indudable interés científico y didáctico, pueda ser difundido.

Producción científica y editorial de EC-t Ediciones Científico-técnicas SRL. © 2013 Derechos reservados. Leopoldo Marechal 1006, 1º piso (C1405BMF) Ciudad de Buenos Aires. www.ect-ediciones.com. Autores: Dr. Ricardo Ferreira y Vanesa Rabotnikof.

4

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 4

1/28/13 3:13 PM

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 5

1/28/13 3:13 PM

DDD1_2013_POE-FINAL.indd 6

1/28/13 3:13 PM