Ec-t Ediciones

Page 1

P E R S O N A L I DA D E S N OTA B L E S C O N T R ASTO R N O S P S I Q U I ÁT R I C O S

DETRÁS del DIAGNÓSTICO Edvard Munch

El pintor silencioso que gritaba a través de sus obras

Jack son Pollock

El artista que salpicó sobre el lienzo su mundo interior

Número 5 / Año 2



E

ste fascículo es parte de una serie, dedicada especialmente a los psiquiatras, sobre personajes que padecieron distintos tipos de insania y que, sin embargo, trascendieron por su genio y por sus obras. Para algunos de ellos, los momentos de mayor creatividad coincidieron con las manifestaciones más agudas de su enfermedad. Ante estas personalidades, surge el interrogante de cómo habría sido su actividad creativa de haber estado psíquicamente sanas. ¿Fue la enfermedad una fuerza esencial que los llevó a incursionar en terrenos donde nadie se animaría, o los impulsó a trabajar intensamente para escapar de sus delirios? Quizás el lector tenga la respuesta. Producción general: EC-t Ediciones Científico-técnicas SRL. Asesora en psiquiatría: Dra. Susana Ogly.

EL ARTE Y EL TRASTORNO BIPOLAR Numerosos artistas han padecido trastorno bipolar. Con frecuencia se cree que esta enfermedad torna más sensibles a las personas creativas, por su tendencia a la depresión, así como más productivas durante los episodios de manía. Estas afirmaciones representan una idea romántica sobre la creatividad –el artista que sufre– pero hay pocos indicios o datos que avalen esta idea. El trastorno bipolar, aunque puede coexistir con la creatividad, no trasmite ningún don especial a quien lo padece. El talento debe luchar para superar los efectos de la enfermedad y el trastorno bipolar, al igual que cualquier otra patología mental, acarrea más sufrimientos que logros. A pesar del padecimiento que puede ocasionar la perturbación mental a un determinado artista, la producción creativa se desarrolla gracias a procesos sanos durante períodos de menos ansiedad y menor actividad de los síntomas. Edvard Munch y Jackson Pollock pudieron transformar su particular percepción del mundo, sesgada por la bipolaridad, en una obra de arte.

Jackson Pollock (1912-1956).

El artista que salpicó sobre el lienzo su mundo interior Jackson Pollock (1912-1956) se le adjudica haber sido un referente en el movimiento del expresionismo abstracto. Hasta entonces, las mecas del arte se encontraban en Francia con el impresionismo y el cubismo, y en Alemania con el expresionismo. Pollock desvió el foco de interés hacia los Estados Unidos, agregando un nuevo centro al mundo de la pintura. Las primeras obras y formulaciones que llevaron a Pollock a desarrollar el nuevo estilo se produjeron cuando el artista estaba mejorando con el tratamiento psiquiátrico por su trastorno bipolar. El diagnóstico en Pollock se basa en los informes de su psiquiatra, el doctor Richard Hendersen, quien le atribuía al artista períodos de agitación violenta seguidos de apatía y depresión.

A

Jackson Pollock, desplegando la técnica del dripping (goteado) sobre la tela extendida en el suelo. Jackson Pollock trabajaba en el granero de la propiedad q u e , j u n t o a L e e K r a s n e r, a d q u i r i ó e n 1 9 4 5 , s i t u a d a e n L o n g I s l a n d , N e w Yo r k .

1


Gris N# 14. AquĂ­ puede observarse el dominio desarrollado y la expresividad lograda con su tĂŠcnica de chorreado y goteo de pintura. GalerĂ­a de arte de la U n i v e r s i d a d d e Ya l e .

TambiĂŠn es Ăştil la descripciĂłn de su esposa, la perceptiva artista Lee Krasner, quien manifestĂł que Pollock tenĂ­a comportamientos temperamentales extremos: “Cualquier cosa que Jackson sentĂ­a la expresaba mĂĄs intensamente que ninguna de las personas que he conocido. Cuando estaba enojado, se ponĂ­a furioso, cuando se sentĂ­a feliz era el mĂĄs alegre y, cuando estaba tranquilo, era el mĂĄs inactivoâ€?. Pollock recurrĂ­a al alcohol en forma excesiva para enfrentar los cambios en su estado de ĂĄnimo. Pronto se convirtiĂł en alcohĂłlico y el hĂĄbito lo persiguiĂł hasta su muerte. El doctor Hendersen aplicaba las tĂŠcnicas del psiquiatra suizo Carl Jung, por quien sentĂ­a devociĂłn. Una de estas tĂŠcnicas consistĂ­a en el uso de la pintura que, segĂşn Jung, servĂ­a para aliviar o contener las sensaciones de trauma, miedo o ansiedad. Por eso, estimulaba a sus pacientes a que dibujaran el signiďŹ cado de sus sueĂąos.

2

Durante su tratamiento, Pollock le entregĂł al doctor Hendersen numerosas pinturas de las cuales el mĂŠdico conservĂł 83. En ellas se percibe la inuencia de Thomas Hart Benton y de los muralistas mexicanos Diego Rivera, Clemente Orozco y Alfaro Siqueiros. Una de estas pinturas, que no lleva tĂ­tulo, sugiere una deidad azteca. Sus pinturas tambiĂŠn tienen componentes surrealistas y en algunas se nota la inuencia de Joan MirĂł y Pablo Picasso. A medida que el tratamiento progresaba, el simbolismo en el arte de Pollock se tornĂł mĂĄs incomprensible y comenzĂł a producir el tipo de composiciones expresivas que fueron caracterĂ­sticas de su perĂ­odo de recuperaciĂłn. AsĂ­ lo consignan sus hermanos Sanford y Charles, que tambiĂŠn eran artistas. En una de las cartas entre ambos hermanos, el primero le escribiĂł al segundo: “Jackson estĂĄ haciendo un trabajo creativo en el mĂĄs amplio sentido de la palabra. Estoy seguro de que si logra superar su problema psĂ­quico, su obra serĂĄ de gran signiďŹ cancia. Sus pinturas son abstractas, intensas y de calidad.â€? Esta mejorĂ­a de Pollock, que ocurriĂł durante la dĂŠcada de 1940 gracias a la terapia del doctor Hendersen, fue el mejor perĂ­odo en la vida del artista y, por primera vez, fue la persona mĂĄs sobria en las reuniones sociales. El aĂąo 1947 fue decisivo en su trayectoria, ya que en ese momento adoptĂł la peculiar tĂŠcnica del dripping: en lugar de utilizar caballete y pinceles, colocaba en el suelo el lienzo y sobre ĂŠl vertĂ­a o dejaba gotear la pintura, que manipulaba despuĂŠs con palos u otras herramientas e, incluso, a veces le daba mayor consistencia mediante la adiciĂłn de arena o fragmentos de vidrio. La etapa de sobriedad de Pollock fue corta y recurriĂł nuevamente al alcohol durante los brotes de su enfermedad hasta que, en 1956, mientras conducĂ­a en estado de ebriedad, falleciĂł en un accidente de trĂĄnsito. Su talentosa compaĂąera, Lee, pese a haber sido eclipsada por la fama de su esposo, se encargĂł de que la reputaciĂłn de Pollock se mantuviera vigente a pesar de los continuos cambios del mundo de la pintura. Su ďŹ delidad y su talento se vieron compensados mĂĄs tarde cuando sus obras ďŹ guraron junto con las de Pollock entre los grandes del arte abstracto.

PARA CONOCER MĂ S SOBRE JACKSON POLLOCK t 'JMN Pollock EJSJHJEB QPS &E )BSSJT t &NNFSMJOH - Jackson Pollock 5BTDIFO /VFWB :PSL t 3PUIFOCFSH " Bipolar illness, creativity and treatment 1TZDIJBUSJD 2VBSUFSMZ t -BT PCSBT EF 1PMMPDL FTUĂˆO EJTUSJCVJEBT FO DBTJ UPEBT MBT HBMFSĂ“BT EF BSUF EF MPT &TUBEPT 6OJEPT


Edvard Munch (1863-1944).

El pintor silencioso que gritaba a través de sus obras unch nació en Noruega, en 1863. Su vida estuvo rodeada desde la infancia de dolor y muerte. Su madre murió de tuberculosis cuando él tenía cinco años y, poco tiempo después, su hermana mayor murió a causa de la misma enfermedad. Estas muertes tuvieron gran influencia sobre su desarrollo emocional e intelectual. Más tarde, otra hermana sufrió desequilibrios mentales que serían compatibles con trastorno bipolar y, a todo esto, había que agregar el fanatismo religioso de su padre. Estos sucesos hicieron que Munch considerara que su vida estaba dominada por “los ángeles negros de la locura y la enfermedad”. En su diario escribió: “Mi padre era de temperamento nervioso y obsesivamente religioso. De él heredé la simiente de la locura. Los ángeles del miedo, el pesar y la muerte han estado a mi lado desde el día en que nací”. El espectro de muerte y enfermedades que asoló su infancia y su juventud estuvo presente durante toda su vida y se transformó en uno de los temas principales de su obra. El niño enfermo, Habitación mortuoria, Junto al lecho de muerte y La madre muerta son algunas de las muchas pinturas y grabados que reflejan sus macabras experiencias. Munch buscó pintar lo que sentía más que lo que veía y, como muchas veces perdía el control de su vida, sus experiencias eran dolorosas. No obstante, pintó durante toda su larga vida, creando obras extrañas y dramáticas. El artista quería transmitir más que una simple escena; deseaba que sus pinturas estuvieran cargadas de sensibilidad, energía y significado profundo. Su tratamiento intenso de temas emocionales influyó mucho sobre el desarrollo del expresionismo alemán a comienzos del siglo XX. Su pintura El grito se considera como un ícono de la angustia existencial. Munch pintó sus primeros cuadros con estilo impresionista, pero más tarde recibió las influencias de posimpresionistas como Paul Gauguin y Henri de Toulouse-Lautrec. Entre sus

M

Edvard Munch (1863-1944).

amigos había muchas personalidades literarias, como Ibsen, August Strindberg, Knut Hamsun y Stéphane Mallarmé. En 1892, Munch fue invitado a exponer obras en una sociedad de artistas berlineses, donde sus trabajos fueron muy discutidos por su violenta emocionalidad y sus imágenes poco convencionales. Las controversias, las discusiones y los ataques, así como las críticas elogiosas fueron tan abundantes que la prensa y el periodismo cultural empezaron a referirse al “Munch Affaire” cada vez que hablaban de su obra. Sin embargo, en esta mezcla de opiniones, predominó la idea de que había surgido un nuevo talento, diferente al de los impresionistas. Este género de pintura, del cual Munch fue uno de los pioneros, comenzó a llamarse expresionismo y pronto Munch se convirtió en una celebridad. Los 16 años entre esta primera exposición en Berlín y su internación en 1908 en un instituto para enfermos psiquiátricos fueron los más importantes de su carrera. El diagnóstico de trastorno bipolar con síntomas psicóticos se basa en su propio diario, donde describe alucinaciones visuales y auditivas y relata sus numerosos viajes por Europa, manifestando una conducta perturbada y maníaca. En 1908, fue hospitalizado en una institución psiquiátrica debido a la intensificación de sus alucinaciones auditivas, su depresión e impulsos suicidas. También sufrió rachas de

3


El grito es la obra emblemĂĄtica del pintor noruego y una de las pinturas mĂĄs reconocidas del arte universal, tal vez debido a su tremenda potencia expresiva.

HabitaciĂłn mortuoria. Museo de Arte M o d e r n o d e N u e v a Yo r k ( M o M A ) . 1 8 8 8 .

alcoholismo, un recurso relativamente frecuente de evasiĂłn en los pacientes con trastorno bipolar. Munch ingresĂł en la clĂ­nica del doctor Daniel Jacobson en Copenhague. El tratamiento que recibiĂł durante ocho meses comprendiĂł una dieta y la electriďŹ caciĂłn, entonces de moda para los trastornos nerviosos, que no se debe confundir con el electroshock. Esta internaciĂłn estabilizĂł su personalidad y, de regreso en Noruega, sus obras comenzaron a tener mĂĄs color y a mostrar menos pesimismo. Durante este perĂ­odo, sus trabajos mĂĄs monumentales son los que pintĂł para la Universidad de Oslo. Munch pasĂł sus Ăşltimos aĂąos en soledad en Oslo, donde continuĂł pintando hasta su muerte a los 80 aĂąos, en enero de 1944, en una Noruega ocupada por los nazis que habĂ­an declarado a su obra como “arte degeneradoâ€?.

El grito (1893) El grito, la obra cumbre de Edvard Munch, es un sĂ­mbolo de la angustia espiritual del hombre moderno y puede ser considerada la culminaciĂłn del sentimiento trĂĄgico de la vida que dominĂł a su autor. En su diario, Munch registrĂł cĂłmo en 1891 concibiĂł este cuadro: “Caminaba por la carretera con dos amigos. Entonces el sol se puso. De repente el cielo se volviĂł rojo como la sangre, me detuve y me apoyĂŠ en una valla muerto de cansancio. Lenguas de fuego y sangre acechaban sobre el azul oscuro del ďŹ ordo y de la ciudad.

Mis amigos continuaron y yo me quedĂŠ atrĂĄs, temblando de ansiedad y miedo y sentĂ­ un grito inďŹ nito que atravesaba la naturalezaâ€?. Muchos han interpretado al personaje del cuadro, probablemente el propio Munch, como un ser envuelto en un profundo conicto interior. Sabe que tiene un problema, es un problema que lo amarga y lo asusta, pero no quiere escuchar su propio grito, no quiere darse cuenta. Esto recuerda ciertos trastornos mentales, donde los pacientes no perciben bien la realidad, sino que ĂŠsta se deforma hasta convertirse en un universo privado. Al provenir del “inďŹ erno interiorâ€? de Munch, el cuadro representa un aspecto de esa ĂŠpoca, pero tambiĂŠn de la actual: la angustia. El artista pintĂł cuatro versiones diferentes de El grito. La mĂĄs famosa se encuentra en la GalerĂ­a Nacional de Oslo y fue terminada en 1893. Esta versiĂłn fue robada en 1994 y recuperada por la policĂ­a dos meses despuĂŠs. El poder emocional de las pinturas de Munch, que expresan la condiciĂłn humana, hace que se lo considere el mayor artista noruego, asĂ­ como una de las ďŹ guras mĂĄs notables de los inicios del arte moderno.

PARA CONOCER MĂ S SOBRE EDVARD MUNCH t &WBSE .VODI BiografĂ­a y obras. %JTQPOJCMF FO IUUQ XXX BSUFFTQBOB DPN FEWBSENVODI IUN t #JTDIPĂŞ 6MSJDI .VODI Cuadros sobre la vida y la muerte 5BTDIFO .BESJE t -BT PCSBT EF .VODI TF QVFEFO WJTJUBS FO EJWFSTPT NVTFPT &O MB GalerĂ­a Nacional de Oslo TF FODVFOUSBO MB NBZPSĂ“B EF TVT QJOUV SBT 0USBT HBMFSĂ“BT RVF DPOUJFOFO TVT PCSBT TPO MB Tate Gallery de -POESFT Z FM Museum of Modern Art EF &TUPDPMNP

ProducciĂłn cientĂ­ďŹ ca y editorial de EC-t Ediciones CientĂ­ďŹ co-tĂŠcnicas SRL. Š 2011 Derechos reservados. Leopoldo Marechal 1006 1Âş piso – Ciudad de Buenos Aires. www.ect-ediciones.com. DiseĂąo y diagramaciĂłn: Francisco Manuel Baggiani.

4



793329


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.