No pasar de largo La experiencia ĂŠtica FRANCESC TORRALBA
Dirección editorial: Miquel Osset Hernández Diseño editorial: Ana Varela
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Primera edición: enero 2010 © Francesc Torralba © Para esta edición: Editorial Proteus c/ Rossinyol, 4 08445 Cànoves i Samalús www.editorialproteus.com
ISBN: 978-84-15047-37-7 Impreso en España - Printed in Spain Romanyà Valls S. A. - Capellades
Introducción
Hace algún tiempo, en Editorial Proteus decidimos publicar un pequeño libro editado en Francia por Bayard. El libro en cuestión, titulado Justo imposible, reflejaba una charla mantenida por el prestigioso filósofo Jean-Luc Nancy ante un auditorio muy joven, apenas unos niños, para tratar un tema sumamente difícil y resbaladizo: qué es la justicia. Jean-Luc Nancy tuvo que bajar un escalón de su rigor expositivo para conseguir comunicar a una audiencia nada fácil pero extremadamente estimulante las ideas principales que deseaba transmitir. La experiencia había sido, a juicio de Nancy, muy enriquecedora y, a juzgar por la calidad de las 5
preguntas formuladas por los niños aquel día a un filósofo prestigioso, también lo debió ser para todos ellos. ¿Por qué no replicar la experiencia aquí? Además de dar a conocer ese texto encantador, ¿por qué no lograr que intelectuales de prestigio en nuestro país se acercaran al público infantil para transmitir aquello que todos deberíamos aprender desde bien pequeños? Es más, ¿por qué no hacer de aquella experiencia de Nancy una serie completa, un compromiso colectivo en el que la escuela sea realmente ese espacio de diálogo que tantas veces echamos en falta? Francesc Torralba respondió entusiasmado a nuestra petición y pronto nos faltó tiempo para ponerla en práctica. Escogimos una escuela y la respuesta también resultó ser entusiasta. En la escuela pública CEIP de Sentfores, en las afueras de Vic, un día del mes de mayo de 2010 Torralba impartió una charla ante un aula compuesta por una cincuentena de niños entre 10 y 12 años que escucharon con muchísima atención algo que nos con6
cierne a todos: qué es la ética. La atención que dispensaron a Torralba fue acompañada de un conjunto de preguntas que tan sólo la sirena escolar pudo interrumpir. De hecho, no ha sido interrumpida porque ahora aquella charla se ha transformado en este libro, y en cada palabra sencilla que lo habita se condensa una semilla. Estamos seguros que aquella charla ya tiene vida propia entre aquel grupo de niños y niñas de Vic. Y nosotros queremos ahora extender aquella experiencia a muchos terrenos abonados más. No sabemos qué surgirá de esta experiencia ni cuándo. Pero sí sabemos que es importante y que debe ser compartida. En primer lugar, con nuestros lectores. Miquel Osset Editorial PROTEUS www.editorialproteus.com
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Buenos días a todos. Intentaré explicaros algo que no resulta nada fácil. Os he de confesar, además, que estoy acostumbrado a hablar ante chicos y chicas algo mayores que vosotros, que estudian en la Universidad. Intentaré, por tanto, ser muy claro. Y, sobre todo, lo que más me interesará es que, después, podáis hacer preguntas. Eso será lo más interesante. Naturalmente, intentaré responderlas, si puedo. A veces los niños formuláis unas preguntas que a los adultos nos dejan en blanco, sin saber qué responder. Mirad, he venido a hablaros acerca de qué es eso de la ética. Intentaré explicaros en qué consiste la ética, la también llamada «filosofía práctica». Muy probablemente, vuestros pro9
fesores y maestras ya os hayan hablado de ella, o tal vez lo hayan hecho de otra manera, sin hacerlo directamente. Y para hablaros de qué es la ética utilizaré una breve historia. Es un relato muy breve que, seguramente, vuestros profesores y profesoras conocen bien porque es muy antiguo. Esta historia me servirá para explicar en qué consiste la experiencia ética, una experiencia que todos cuantos estamos aquí, como seres humanos que somos, podemos llegar a vivir. También los más pequeños la podéis vivir. La historia es muy breve. La leeré muy lentamente y después, a partir de ella, os explicaré qué es la ética. Prestad atención, por favor: Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos salteadores que, después de desnudarlo y golpearlo sin piedad, se alejaron dejándolo medio muerto. Un sacerdote bajaba casualmente por aquel camino y, al verlo, se desvió y pasó de largo. Igualmente un levita que pasó por aquel lugar, al verlo, se desvió y pasó de largo. Pero un samaritano que iba de viaje, al
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llegar junto a él y verlo, sintió lástima. Se acercó y le vendó las heridas, después de habérselas curado con aceite y vino; sacando dos denarios, se los dió al mesonero, diciendo: «Cuida de él, y lo que gastes de más te lo pagaré a mi vuelta». 1
Ésta es la historia. No os he engañado. Es una historia muy breve. Hay tres personajes en ella que van por un camino y, en este camino, se encuentran con un hombre herido, abandonado y que no puede moverse. Está sangrando, herido, medio muerto. De los tres hombres que pasan, sólo uno se detiene para ayudarle. Los otros dos pasan de largo. Le ven, pero pasan de largo. Esta historia sirve para explicar qué es la ética, en qué consiste la experiencia ética. ¿Cuándo podremos decir que una persona «ha actuado éticamente»? A partir de la historia vemos dos conductas, pero sólo una de ellas puede calificarse de ética, la del buen samaritano. 1
Cf. Lc 10, 30-35.
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