Sebastian Gardet ha desaparecido. Después de una polémica conferencia en Verona, nadie ha vuelto a saber de él y Leo Frobenius, su cuñado, asume la tarea de encontrarlo. Pero antes deberá superar una vieja obsesión. Cruzando los puentes de Verona, unos personajes cobrarán sentido relacionándose entre sí, como el comisario Linati encargado del caso, la joven Aida, víctima de la constante tragedia de Lampedusa, o el viejo conocido Mark Parks. Entre unos y otros, los que cruzan esos puentes de Verona configuran la Europa social que se avecina, enmarcada en esta segunda entrega de La Saga Gardet. Segunda novela de Emilio Ferrín, tras la existosa Las bicicletas no son para El Cairo.