1 minute read

Ya vendrán

Next Article
Rutina

Rutina

Ya vendrán

116 días de confinamiento, 116. ¿Cómo eran las cervezas con mis amigos en la plaza? ¿Cómo era ir en bici a Plaza Dignidad? La pandemia no es lo único histórico que hemos vivido. Abrazar a mis amigas. Odio el contacto físico. Cómo las extraño ahora. Andar en la 210, mirando como cambian las realidades en la ciudad hasta llegar a Puente Alto. A los de allá arriba no les importan los de acá.

Advertisement

Pan-de-mia Me cuesta tomarle el peso. Cuarentena. La gente se está muriendo. Mi abuela tiene miedo en sus ojitos llenos de arrugas. Cómo extraño tus queques de yogurt, viejita.

Va a pasar. No va a ser para siempre. Así consuelan las publicaciones de Instagram y las historias de mis amigxs.

Me siento a leer, tengo clases en media hora.

Cuando el aislamiento nos une | 73

Odio las clases online. Me cuesta entender. Nunca había escuchado esa palabra.

Fui a un colegio de esos que quedan cerca del metro y llegan hartas micros. El profe hace lo que puede, pero no, no puede. La gente sigue muriendo y sufriendo mientras hace su clase. Y nosotros intentando pasar el semestre. Ojalá termine luego la clase, tengo que barrer la casa. Mi hermano se tuvo que devolver a la casa, no hay pega. A veces somos nueve en la casa, nueve. Chucha. Tengo control el viernes. Cagué. ¿Silencio? No, no se llama. ¿Ansiedad? Siempre viví con ella. Todo está tan extraño allá afuera, ¿cómo aquí adentro iba a seguir todo igual?

¿Mamá, puedo limpiar los baños después? Prometo que lo voy a hacer. Prometo que después de esto iremos al parque Quinta Normal para que lo conozcas. Perdón mamá, tenía Coronavirus para el día de las mamis. Me dolía todo el cuerpo y en la mañana tuve clases. Ahora ponte la mascarilla. Que este sistema no nos cuida. Que no está todo bien.

74 |

Historias confinadas

No es un año académico más. Échale cloro a todo no más, que el tío no se nos puede enfermar.

Ya nos encontraremos en los días de sol, donde todo está bien. Dicen por ahí que ya vendrán.

Génesis Beatriz Cabrera Menares

Cuando el aislamiento nos une | 75

This article is from: