Hasta que volvamos a vernos lucas vega (eder)

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Versión 1.0 © 2016, Lucas Vega © 2016, Daniel Oscar Vega de la imagen de tapa Editorial eder Pavón 1923, 7.° 4, Ciudad Autónoma de Buenos Aires editorialeder@gmail.com www.editorialeder.net


A Alejandra Villalba, que no lo puede leer

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Esta amiga no era más joven ni más hermosa que su esposa; pero tales problemas existen en el mundo y no es asunto nuestro juzgarlos. N. V. Gogol

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I ENTRADA

08:28 valeee no me son贸 el despertador est谩s all谩? salgo y llego enseguida perd贸n!! no la puedo creer vos me llamaste ayer? Lindaaaaa estoy en casa

te matoooooooooooooooooooooooooo

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08:40 estás ahí?

y no, no te llame!! Ssssssssssiiiiiiiiiiiiiiii

08:40 salgo ya

stoy tda mojada sperandot cmo una boluda!

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08:40 Voy pasame tu celu

bueno dale....159873194}

08:41 y te voy avisando cuando llego

dale rapidoo!!

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08:41 voy voy

bueno daleeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

08:42 Salgo ya lo ajende ahĂ­ nos vemos beso!

Dale Stoy en la eskina d un restaurant!

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Aprieta los dientes hundido en el asiento del colectivo, como si esa tensión en algo acelerara los tiempos propios del tráfico, del chofer, de los semáforos. Endereza la espalda contra el asiento para buscar algo de relajación, pero igual: la mandíbula trabada, los puños apretados; todo en función de una urgencia que no depende en nada de su voluntad. Desafiar el tiempo lo hace sentirse menos culpable por la tardanza. Siempre le produjo odio la espera, y tanto más ser él mismo el responsable de causarla. Y para colmo la lluvia. Pobre Valeria. Los vidrios empañados, repletos de gotas minúsculas que nublan la visual hacia la calle, y Sergio arriesga que ya ha pasado avenida Córdoba. No se ve absolutamente nada, solo es posible distinguir los colores de los edificios y algunas esquinas que le parecen conocidas. La gente se abalanza sobre los cristales del colectivo, algunos intentando desempañarlos con las manos, sin llegar a abrir las ventanas; cosa que hubiera resultado catastrófica para el relativo resguardo de los pasajeros. En ese curso, y llevado un poco por el miedo a pasarse, otro poco por la irrevocable certe11


za de estar en punto justo para bajar, Sergio pregunta, no sin pudor, a la muchacha que está sentada junto a él. Ella lo mira sin entender demasiado y, después de sacarse los auriculares, le contesta: Santa fe… la segunda parada te bajás. Sergio le agradece enseguida; la muchacha asiente con una modesta sonrisa, mientras devuelve los auriculares a la morada de sus oídos. Está de pie junto a la puerta trasera, sin dejar de mover el talón izquierdo. Una, dos. Timbre. Puerta. Sin tiempo de llegar caminando, corre bajo la lluvia. Por alguna razón lleva el paraguas cerrado en la mano derecha. La ve parada en la esquina, bajo el alto techo de un restaurant. Se abraza a sí misma tiritando. Ella también lo había visto llegar. Cuando Segio está cerca, se miran de lleno: él con el gesto de quien busca una disculpa aunque no la merezca del todo. Valeria cierra los ojos y ladea un tanto la cabeza; parece algo aliviada después de tanta espera, de tanta agua, autos, minutos y gente que ha pasado. Sergio la abraza. Por un instan12


te el abrazo no es del todo correspondido. Valeria amaga para entregarse plenamente al enlace de los brazos y el cuerpo. “Perdón” le susurra Sergio al oído. No obtiene mayor respuesta de su boca, pero sí del pecho de Valeria que se estruja contra el suyo sin soltarlo, fuertemente; necesitando de pronto, necesitando… Sergio siente la piel fría y húmeda de Valeria contra su ropa menos mojada. Caminan juntos. –Podemos ir a casa, a tomar unos mates…; con la lluvia, no está como para dar vueltas por la calle. Ella acepta rápidamente y caminan con sentido fijo. En eso, Sergio abre el paraguas viendo que de un balcón caen gotas que van a dar justo al hombro de Valeria. Juntan los cuerpos para caber bajo el paraguas. Mientras caminan, él observa fijamente el suelo, siempre alerta ante la posibilidad de pisar una baldosa agrietada, una baldosa floja; aunque, por supuesto, sin quitar el paraguas de encima a Valeria. Su cuerpo se mueve por la vereda, pero el brazo sigue fijo en la misma 13


posición marcando el eje, centrado sobre la cabeza de Valeria que lo ve moverse con astucia sin descuidarla nunca. El colectivo tarda un poco, cosa extraña a esas horas de la mañana. Es una línea buena, frecuente, y a Sergio le parece raro. Está mirando demasiado la mochila rosa que cuelga del brazo de Valeria. Una mochila aniñada, con algunas figuras blancas encima. Ese objeto habla más que su dueña; habla por su dueña mejor dicho, por esa chiquita que está ahí enfrente, a punto de llevarla a su casa y… Siente asco de él mismo. Piensa en irse inmediatamente. Examina la mejor forma de escape. Pero al seguir la vista de scanner ascendente que proyecta sobre el cuerpo de Valeria, llega pronto a su cara; a sus ojos, para ser más específico. Los ojos de una mujer. Verdes, profundamente verdeagua, o azul marino, lo que sea que se le parezca al inmenso océano. Ningún género de los tonos basta para catalogar semejantes ojos brillantes. Daltónico queda Sergio frente a ellos, sin la posibilidad de explicarlos; mejor, así son más hermosos. Y en 14


esas farolas que le apuntan de lleno y hasta llegan a intimidarlo de tanto brillo, ve todo lo lindo y lo bello; ve las conversaciones que habían mantenido en forma escrita, los bombardeos de piropos a ambos lados, cosas lindas y alentadoras que rompen y liberan de la rutina y el contexo en que se dicen y son dichas. Ahí están, después de tanta letra, de tanto preámbulo misterioso y atrayente. No va a irse, bajo ningún punto de vista. Esto mismo enuncia Sergio para sí. Ahora, mucho más claro que antes, ve el escape como una derrota, como su derrota frente al prejuicio, su adecuación al gusto general, su entrega sin condiciones a un mundo ajeno y reglado. No hablan demasiado durante el viaje. Sergio dedica aquel tiempo a devolver las miradas sentenciosas que le destina uno que otro pasajero. Miradas fijas y llenas de reprobación; en ocasiones acompañadas con algún gesto desdeñoso que, sumado a la invasiva mirada penetrante, empiezan a enloquecer un poco más a Sergio. Valeria nota su disgusto y también las miradas, que la incluyen en menor grado, por supuesto; miradas que le dedi15


can sobre todo las señoras, las “señoras bien” que viajan en colectivo. Siempre le dieron menos edad de la que tiene. No entiende el porqué de tanta mirada… “se notará la diferencia…”, piensa y se cuestiona. “Tal vez sea la barba… sí, debe de ser eso. Tendría que haberme afeitado…” Para tranquilizarse un poco, se explica todo de manera más calma. Esas miradas no son más que un mero entretenimiento del pasajero. Un acompañamiento del viaje. No hay juzgado ni tribunal, ni tarima de madera ni mucho menos. Lo miran, simplemente miran, así como se ve toda singular presencia que sube a un transporte; un borracho, lisiado, un marica o transexual. Miran lo que no son. Condenan eso para estar libres de culpa y cargo. Pero Valeria empieza a incomodarse de tanto silencio. Le pregunta a Sergio si falta mucho. Él le contesta que no, lo cual la alivia un poco. Siempre se le mete el mismo bichito en esos momentos: una sensación en algo parecida al miedo, y no es miedo precisamente. Tal vez ese sentimiento sea el que la mueve, ese 16


ánimo de arrojo el que la lleva a estar ahí una vez más, sentada frente a un hombre completamente desconocido, mayor que ella como no puede ser de otra manera, en un colectivo en lugar del colegio, con una nota en el cuaderno de comunicados fabricada por su compañera de banco, la firma falsificada de la profesora que tan bien le sale a Rita. Sergio le explica el recorrido que está próximo, mueve las manos marcando las direcciones en que doblará el colectivo, que son exactamente las que sigue por no perder la costumbre; aunque Valeria no entiende demasiado. No tiene una mínima idea de donde está. Ni de las calles que nombra Sergio enérgicamente, buscando él mismo un modo de olvidarse de esas miradas y hablar de otra cosa, una forma también de tranquilizar a Valeria, mostrarle cierta seguridad. A ella le gusta que Sergio hable un poco, por más que no entiende nada, y que estaría completamente perdida de bajarse ahí sola. El colectivo apura motores y dobla en las esquinas que Sergio había nombrado, sigue su curso tradicional por las calles y bulevares de San Cristóbal. 17


Le es fácil reconocer donde está, a pesar de lo empañado de los vidrios que siguen escurriendo toda el agua de allá afuera. Por momentos, el colectivo adquiere una posición determinada en la que se ve fuertemente azotado por el viento. En esos tramos, Sergio se esfuerza inútilmente por ver algo. Bajan sin mayores inconvenientes. A esa altura, el viento –o tal vez la posición del colectivo– ha cambiado, y Sergio reconoce el lugar, el barrio, su inconfundible morada de años. Necesitan acurrucarse nuevamente bajo el paraguas; y así caminan, coordinando los pasos, intentando coordinar, a veces con éxito, otras sin tanto. Mientras se saca los zapatos completamente mojados, Sergio le ofrece una toalla. “No hace falta” responde ella, que sigue con los brazos cruzados. Él termina trayéndola igual y se la alcanza. –Está medio caluroso para mate… ¿querés algo fresco mejor? –Bueno, eso sí te acepto. Sirve en eso dos grandes vasos de gaseosa fría. Apura el trámite lo más que puede, no 18


aguanta más, quiere besarla. Se refugia en su cuarto y ella lo sigue. Apenas deja los vasos en el escritorio, cuando Valeria se abalanza sobre todo su cuerpo. Lo besa torpemente en la boca, abarcando con sus labios otros sectores de la cara. Y sus manos se arremolinan entre los cabellos de Sergio que sigue todo aquello entregado, atónito, sin entender demasiado todavía. Comienza a gustarle, cuando la furia del primer arrebato pasa. …Qué más decir. Lo lleva, sin quitarle la boca de encima, hacia el borde de la cama. Lo sienta ahí mismo. Sergio vuelve a pararse con fuerza y se mueven a empujones por toda la habitación. Zamarreándose. De golpe la furia ha vuelto. *** Nunca se le ha dado a Sergio por chicas de esa edad. Jamás ha experimentado la tan frecuente fantasía de colegialas y faldas escocesas. Y sin embargo ahí está, desnudo junto a esa mujer de quince años, porque es una mujer, 19


así se lo dice mientras le acaricia el hombro con la punta de un dedo: “sos una mujer, nada más que en la primer hoja del documento se equivocaron y pusieron cualquier cosa”. Valeria sonríe mientras lo mira fijo a los ojos. Le gusta tanto que sea así, todo lo cariñoso que se pude ser; obviamente sin llegar al extremo del fastidio. Lo ve medido, justo y preciso; cualidades todas que también aplican a lo que acababa de ocurrir hace solo un momento. Sergio recuerda los mimos de Valeria, toda su ternura. Cambian algunos mensajes durante esos días, donde abundaban elogios, halagos, citas permanentes de aquel encuentro que los trae por igual embobados.

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II RECEPCIĂ“N

si re bien llegue por suerte!! y me alegro q lo allas pasado bien cnmigo! pense q ivas hacer distinto y no, me diste muxo de lo q pensaba !!! jaja

15:07 no hubo drama en tu casa?

no, jajajja mi mama me llamo en el bondi!

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15:08 joya!!

y me dijo en dond stas??? Jaja le dije estoy en el colectivo xq el subte anda cn demoras jaja y bueno stoy en el colectivo despues de media hora llegue a ksa jajja y me dice xq tardast tanto y le dije q habia agarrado otro camino el bondi y q habia muxo transito

q onda q te van a preguntar a vs tus viejos despues?? Jajajaj cn kien stabas??

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Jaja SERGIIO CN KIEN STABAS TE DIJE!!!! Jajaja me habias dicho q vivias solo :°

15:11 sisi con una chica hermosa, les voy a decir

aahhh te cmo todo jaja

15:11 hermosa!! sos una genia! me causa mucha risa cuando imitas cómo preguntarían

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jaja! gracias corazon! ;) esq haci me la imagino a tu vieja

15:13 jajaj, te sale bien es algo parecido cuando se enoja

jaja asi staria yo si mi hijo sta solo encerrado en la pieza y derrepende scucho un AAAHH AAHH AAHH!! Jajajjajajaj

15:17 jajaja no se enoj贸 estaba media asustada porq nunca estoy a esa

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hora en realidad te habia dicho que vivia con una abuela

jajajajaj aaahhh bueno sta bien es verdad

15:20 no es celosa la viejita

jjaja q bueno.... yo si! jajaajj

15:39 Jajaja cuando lleguĂŠ al laburo me dijeron q tenĂ­a la almohada marcada jajaj

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Jajaja posta?

15:44 siiii

Jajaja che cambiando d tma! Algun dia d stos t pods venir a mi ksa! Jaja a la tard pedis permiso y listo! Jaja pods hacer eso?

15:46 siiii de una!

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Jaja dale yo te aviso cuando! ;)

15:47 tb algĂşn finde puede salir

Para mi se me hace cmplikdo! X mis viejos mas q nda!

15:51 bueno, no hay drama, vamos a encontrar un rinconcito

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Jajaja! Chiii! Jaj

16:01 claro, cierto q me dijiste q tus friends no son muy copadas yo seguĂ­a con esa idea de alguna noche q salgas con amigas caer jaja

Jajajajaj! sabes algo?

***

16:19 q?

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Jaja recien ahora m cntstas? Jaja Jaja we lo t kria q sepas esq me gustas muxo! ;)

16:23 vos tb! si, jaja, estaba en el baño jeje está un poco lejos el baño acá hay q bajar toda una escalera

Sos un osito tierno! Jeje!

16:28 vos mi hormiguita cronómetro

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III VERMÚ

Intenta escribir algo, cuando recibe un mensaje de Valeria. Pide que la llame, y deja un número al que le sobran algunas cifras. Marca Sergio desde el teléfono de su pieza. El tono de llamada lo sorprende, porque marca ese número desconocido, y todavía más la deliciosa voz de Valeria que atiende al otro lado. En el transcurso de la conversación se entera de que el número pertenece a la localidad de Moreno, de ahí semejante característica antepuesta. Valeria nace por esos lados, y parte de su familia vive ahí actualmente. Está en la casa de su abuela, aburrida, acompañada de su amiga Rita, la falsificadora. Hablan siempre con un fondo constante de

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gente, aparentemente familiares de Valeria, un perro que por ahí que ladra y alguna interrupción de Rita que le pide algo. Ella cuenta que le gustan mucho los coches, o “fierros”, como bien dice. Sabe manejar. Lo hace seguido por sus pagos de Moreno, acompañada siempre de su padre, como debe ser. Y Sergio se convence cada vez más de eso que le había dicho en su cama: Valeria, una mujer en el cuerpo de una chica. Sin dudas el tiempo no tiene el mismo efecto sobre ella. Como, de hecho, no lo tiene por igual en la distinta gente. Y Valeria cuenta todo eso de los coches con singular orgullo, con la certeza de ser más que los de su edad. Él la escucha, atento a su voz, tan atento que a veces incluso pierde de vista lo que se dice; y todo sea por escuchar esa voz que le resulta perfecta. Habla como una mujer. Se escuchan gritos al otro lado. –Uh, ¿qué pasó? –No sé, parece que alguien se cayó... A ver, esperá, ya vengo... Está un momento esperando, en silencio, oyendo el griterío ininteligible que se da al 31


otro lado, en esa casa desconocida de Moreno, con esas personas desconocidas que no paran de gritar. Y Sergio intenta figurarse la situación, imaginarla de alguna manera, construirla a través de lo que oye. Alguien se acerca. –Llamame en cinco, beso. –Hola... esperá... Interferencias. –Disculpa, estoy con el inalámbrico. Me alejé un poco porque no se puede hablar allá. Mi abuela se desmayó pobre; es que hace mucho calor. –Ah sí, debe ser eso seguro. Está pesado. –Sí, acá ni te imaginas el calor que hace. Estamos afuera porque adentro no se aguanta. Ahora la llevaron a su cama. –Está bien, así descansa un poco. ¿Ya comiste? –No, no me gusta lo que hicieron. Rita comió un poco y enseguida nos fuimos de la mesa. –Quién es Rita… 32


–Mi amiga. Así se llama, pobre. –Ah. Comé bien, tonta. –Sí, estoy comiendo re bien ahora. Venía de estar media anémica por unos problemas que tuve, pero ahora como de todo (risas). –Tenés que comer carne bien jugosa, así te da más glóbulos rojos. ¿Qué problema tuviste? Si se puede preguntar… si no se puede, es lo mismo. –… Estuve un poco deprimida y no comía bien. No me daba hambre. –¿Mal de amores? –No, jamás me deprimiría por eso… Te lo voy a decir, así ya lo sabes. Yo fui abusada. No sabe qué hacer, qué decir. Si cambiar el tema o sondearlo; de alguna manera que, por supuesto, no resulte invasiva. Termina por largar lo primero que había sentido al escuchar tal confesión. Furia, indignación y rabia en proporciones más o menos iguales. –Disculpá… pero no podía hablar. No sabés qué bronca me da. –Sí, mi papá estaba igual. Quería matarlo… –¿Lo agarraron? –Estuvo preso tres días y después lo soltaron. 33


–¡Qué hijos de puta! –Sí, igual tuve suerte dentro de todo, por los maravillosos seres que tengo como padres, y… después de lo que pasó, estuve con médicos y tenía psicóloga y todo. Me dieron un montón de remedios. Me hicieron mil análisis. Pero por suerte estoy sanita. No me contagié de nada. Aunque le transmite cierta superación en la forma de hablar, Sergio ve necesario dejar el tema. Así continuaron la conversación ocupados de otras cosas, riendo un poco más, trayendo el humor que era tan bien recibido por los dos. Y hablaron así, hasta que a Sergio empieza a transpirarle la oreja. Se aleja el tubo, para que entre un poco de aire. Se despiden, cariñosamente; como son y no pueden evitar serlo. Apenas cuelga, se derrumba en la cama. La penumbra del cuarto lo envuelve. Quiere llorar pero no puede. Intenta pensar en cualquier cosa, pero el tema vuelve y otra vez todo. Lo trae pegado. Es natural; por primera vez toma tal contacto con un caso de ese tipo. Se siente ultrajado. Aunque pasaron cinco meses del terrible 34


hecho, siente todo muy cerca, personal incluso. Juró no defraudar nunca a Valeria, como sí le había pasado con otras mujeres. Éste es para él un caso distinto. Una situación especial que requiere en todo de su responsabilidad y sensible cuidado. Se ve llamado a darle todo ese amor que le han robado. A cuidarla, a protegerla. Esa noche sale sin demasiadas ganas, después de pasar más de dos horas tratando de tomar una siesta, intentando sin ninguna suerte que el sueño venga por fin a llevárselo, a darle algo de descanso, un respiro de inconciencia, un no saber. Sólo pudo dar vuelta tras vuelta buscando la comodidad en el colchón. Y únicamente encontraba a Valeria, Valeria en el subte, Valeria caminando por un sector vacío del andén. Y de pronto un hombre que se le abalanza. La lleva bajo alguna escalera tapándole la boca, o en alguno de esos recovecos del subterráneo, oscuros y sucios y llenos de grasa. La mira a los ojos, o no; le tapa la cara. Toma su cuerpo con fuerza. Le dice alguna cosa. Que no se resista… en fin, retazos de películas, fragmentos de alguna primicia 35


televisiva, el propio testimonio de una víctima oído vaya a saber cuándo; posibles formas de acercarse a eso indefinido e intangible que era lo que le había pasado a Valeria. Aproximaciones, intentos por desenredar el ovillo. Después, ya cuando parece dormido, otra vez Valeria, su cara humedecida por las lágrimas; y lo peor es no saber si esta vez se trata de un sueño, si está soñando, imaginando, o construyendo eso que lo absorbe sin dejarlo en paz. Esa noche no mencionó nada del asunto a sus amigos; trató de que no se notase mayormente. Hasta incluso llegó a divertirse en ciertos momentos de distracción.

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IV TRAGOS

Denunciar · 08:08 Hla mi vida, es re temprano lo se ja, pero te tngo una propuesta para vernos hoy si podes? Tkm Cntstame cuando puedas aca, n a mi cel q no lo tngo! ……………………………….

11:39 hola hermosaaa! recién me conecto

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Jaja no sabia jajajaja recien me di cuenta! Ja

11:41 q propuesta me vas a hacer?? jaja

hoy stoy libre pero n se si vs puedo d 2 d la tarde a 3 y media d la tarde!

11:41 una propuesta indecente? Jeje

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Jaja pods?

11:43 está compliqueti para el jueves ya pedí el auto y estaba pensando en decir acá que después de comer voy a buscar unos reultados de un análisis así tengo más tiempo

Jajajaja! Pero el juevs se me cmplicó a mi x eso!

11:46 uhh, q bajon! q pasó?

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El jueves mi vieja n trabaja y kiere q le ayud en unas par d cosas para el casamiento jaja x eso!

11:49 JAJAJ se casan con tu viejo?

Si algo asi jajaja!

11:50 c贸mo algo as铆?

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Jajaja es compliqueti explicarlo jajajaja

11:52 no te copies q me vas a tener q pagar despuĂŠs jaja

Bueno stem,,, noc jaja otro dia serĂĄ! Jaja vs sabes q a mi me enknta pagar jaja!

11:56 jajaj claro, por eso te copias aajaj por donde estĂĄs a las 2?

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X ak en el cole!

12:03 ahh

Bueno lindo veo q ago para el jueves!

12:06 estaría mejor porq ya venía al trabajo con el coche y salía de acá directo

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Algo voy a inventar, a q hora era q ns encntrabams? Jaja m olvid! Jaj

12:11 a las 2 jajaj, hoy podría meter la misma excusa acá, que por otra parte no es tan excusa porq la verdad hace tiempo que tengo pendiente retirar unos resultados

Aah jajaja

12:14 el tema es que tendría q ir a casa, buscar plata que nunca traigo acá, y tomarme el 46 o alguno de esos

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Jajaja stĂĄ bien corazon. Yo podria inventas sto,,, Inventar kise poner jaj Stem,,, s tngo gim pero q la profe kiere celebrar o algo asi cn nsotras y q ns pidiĂł d una d la tard hasta las 3 d la tard! Jaja

12:20 es buena! para el jueves serĂ­a, no?

Tdo eso lo voy a poner en el cuadern d comunicasiones cn la firma falsificada d la profe jaja ya lo hice banda jaja!

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12:21 me encanta el “stem� ajajaj

Jajaja! Q dcis? Bueno bebe me voy corazon ns vemos el jueves! Bsos enorn en dnd mas t guste!

lo q n entiendo es para q pedist el auto? PerdonĂĄ mi ignorancia! Jaja Jajaja no seras uno d esos tipos q secuestran chicas y las violan..... no?

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12:24 Jajaja NOOO para comerte a besos en su interior, en todo caso jaja es para llegar mĂĄs rĂĄpido y no perder tanto tiempo en el colectivo

Aahh ok jaja perdona lo stupida q soy! Jaja

12:28 no sos estĂşpida sos hermosita jaja

Jajaja aah q amor vs sos hermosito jaja!

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12:30 Gracias pensabas q llevaba el coche para escaparnos de la ciudad ? jaja es buena

ah Jaja no eso n! Jaja lo q pensaba era para q un auto? Jajaja d encerio jaja no me dijiste q tnias ojos claros

12:36 en realidad tengo ojos color del tiempo ahora estรกn marrones a veces grises en fin, ese dia que nos vimos estaban claros, celestes

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o verdes soy sarco jajaja

ahh q es ser sarco?

es tener un ojo marron y el otro azulado, por ejemplo como yo

tnes un ojo ksta単o y el otro azul?

me cagaste el remate

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perdon

ď Œ

no pasa nada igual lo digo: todos tenemos un ojo de un color, y el otro a-sulado jajaja

Cri cri ‌ es malo lo sÊ

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……………………………….

por q al principio tuviste la impresión de q no me importaba nada?

X q ya me pasó! Y crei q tdos sn iguales pero me cnfundí!

12:42 un poco de razón tenías hay muchas cosas q me resbalan pero vos no estás dentro de esas

Jaja en dnd stoy? Ja

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12:44 entre las cosas q me importan entre las q estan todo el tiempo pasando por mi cabeza jaja me rajo un rato, porq lleg贸 uno de los jefes ac谩

Dale amor bsitos!

***

tas cinectadooooooo !! conectado kise poner!

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17:44 siiiii

jaja te extrañé!! Jaja

17:45 yo también!! ahí estaba viendo unas fotos tuyas para no extrañarte tanto

Jajaaja q fotos?? Jaja

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17:46 las q pusiste Ăşltimas

Aahhh sisisisi!!

17:46 muy buenas!

Jajaj sii igual si qres el jueves pods sacar algunas jajja

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de paso jajja si qres!

17:47 Jajaja con mi celu para recordarte

Jjajajajja no tnes camara de fotos!!??

17:48 no

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Jajaj bue la saco cn mi cel y dspues q se yo te las mando!! Haajajja

17:48 Jajaja me gusta me gusta jaja

jajajjaja ;)

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V COPAS

El segundo encuentro se da casi en las mismas condiciones que el primero, aunque con mucha más precisión en los detalles organizativos. Ya Sergio ha buscado la forma de hacerse de un vehículo. Por eso pidió prestado a su tío el Renault 11 gris oscuro con anticipación. Valeria lo espera a pocas cuadras de su colegio. Resulta exitoso el correo enviado a sus jefes con motivo de permiso. Terminan en un hotel. Valeria acepta gustosa aunque con los nervios típicos del caso. Hace preguntas referentes a si la dejarán entrar, etcétera. Sergio la tranquiliza como de 56


costumbre, y así llegan a la habitación número cinco del hotel Los Lirios de Almagro. A Sergio no le gustan nada los hoteles. Prefiere siempre su cuarto o la casa de su compañera. Un terreno que no sea neutral. Pero igual disfruta. También Valeria, que se ve dispuesta a aprovechar el turno lo máximo posible. Lo trae contra ella, pero Sergio está exhausto y necesita descansar por lo menos un rato. Tirados sobre la cama, ella lo mira a los ojos, enreda un dedo en los pelos de Sergio y acerca la boca a su cuello. Lo besa intensamente, casi mordiéndolo. Él siente algo de dolor pero mantiene el silencio. –Uh, te dejé una marca –dice Valeria, cuando levanta la cabeza–. Perdón, no quería hacerlo. Sergio está indiferente, sin preocupaciones al respecto. Le dice que no hay por qué perdonarla. –No está bueno que haga eso igual –responde, un poco ida, como si no estuviera del todo ahí. De esa manera queda durante un momento, con la mirada perdida. 57


El teléfono suena en la habitación número cinco; dos, tres, cuatro veces. Sergio atiende, justo antes de que suene por quinta vez, completamente seguro de lo que dirán al otro lado y de quien fuera su interlocutor. Y así es: fin del turno, lo comunica apáticamente el conserje. Hasta la forma le ha adivinado. Valeria se cambia en el baño a puertas cerradas. Ahí mismo se había desvestido momentos antes, para hacer luego la entrada triunfal a la pieza, o la salida majestuosa del baño, cubierta únicamente por su blanca y sugestiva ropa interior que tan bien le queda y que tanto deslumbra a Sergio. Ahora, en cambio, sale del baño vestida como había entrado, también de la habitación, y más tarde del hotel. Salen juntos, el auto baja por la rampa del estacionamiento y se integra al curso de la avenida Medrano sin mayores inconvenientes. El silencio predomina adentro del coche. Valeria se ha hundido en el asiento de acompañante y parece pensativa. Le pregunta Sergio si pasa algo. Ella contesta que no, que no pasa nada, aunque los dos saben muy bien que no es así. 58


En los semáforos le toca la pierna, acaricia su rodilla; aprovecha bien ese tiempo muerto, dándole vida con sus caricias. Esperar al borde de la bocacalle se transformaba entonces en un momento por demás especial y dulce, ya no es ese tiempo inútil, incómodo, que se estira como el chicle y se extiende así, sin llegar a romperse del todo. Sergio le aprieta el muslo izquierdo, el que tiene más a su alcance, y ella sonríe, lo mira de reojo con una sonrisa tímida. En algunos altos del semáforo hasta llegan a besarse. El beso se prolonga y pronto son sorprendidos por alguna bocina o el ruido de los autos avanzando. Entonces él pisa fuerte el embrague, entra la primera y sale rápido de su distracción, hermosa distracción recurrente. Mejor sería no besarse en los semáforos, más vale estar atento al tráfico, no es suyo el Renault 11; llega a chocarlo, o lo chocan a él por estarse quieto y no avanzar, y su tío lo mata. Todo eso piensa y se lo dice a Valeria. –Mejor no te doy más besos porque me distraés… a ver si todavía chocamos, después mi tío me mata– y aparte del tío, imagina cómo sería chocar en esas circunstancias, con una 59


chica como ella sentada de acompañante, ¡sin el cinturón puesto!, tampoco él lo trae encima; qué decir si le llegan a preguntar. Mi prima, es mi prima señor oficial… y, ¿adónde vamos? eh… a la escuela, sí, eso es, la llevo a la escuela. Cuando Sergio da un beso lo hace con los ojos cerrados, siempre. Salvo momentos en los que se desconecta y resuelve entornarlos para ver un poco alrededor. Esto, sumado a la presencia de Valeria en el coche, lo vuelve más peligroso todavía. Pero él nota otra vez la expresión de su acompañante. La ve cabizbaja, con la mirada perdida en el suelo del coche. Insiste en saber qué le pasa. Y cuando por tercera vez, Sergio repregunta y dice “Vale… Qué te pasa, linda…”. –Nada… es una estupidez, pero quizá te moleste. Prometeme que no te vas a enojar, que lo que te diga no va a cambiar en nada lo que tenemos… –Dale, te prometo. Soy bastante difícil para enojarme, no te preocupes por eso. –Es que en realidad no sé si decirte… –Ahora no podés dejarme sin saber… ya está, contame. 60


–… eh, yo no me llamo Valeria, tampoco soy Achábal. –… – ¡Decime algo!… ¿viste que te ibas a enojar? Yo sabía… –No estoy enojado, simplemente no entiendo nada. ¿Cómo te llamás entonces? –Diana, Diana Florencia Oliva; pero en casa me dicen Flor. Esa cuenta la creé con cualquier nombre. –¿Por qué te dicen Flor? Si sos Diana. –No sé, desde chica que mis papás me llaman por el segundo nombre. Mejor… la verdad que “Diana” no me gusta mucho. Prefiero llamarme Florencia diez mil veces. ¿Nos sacamos una foto acá? con la iglesia de fondo que es tan linda esta iglesia… Dale, vení rápido, ponete en mi pecho que corta el semáforo en cualquier momento. Apurate, apurate… ¡whiskiiiiiii! Click.

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VI BIENVENIDA

aja te agarre recien a sta hora jaj

17:14 ojalĂĄ q me agarres un dĂ­a y no me sueltes jaja

mira esto

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...

que linda pose que tenes en ese sofa la verdad estas para darte que queres que te diga jajaj eso me puso uno

17:16 la foto q estรกs con los taco aguja rojos?

viste q te dije q son bastante pelotudos jaja si

17:17 si, estรกn alzados

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Jajajja alzados es poco viste lo q publique en tu muro??

17:19 reci茅n lo vi

Jajaaja !! si me avis贸 q lo viste

17:20 q linda q sos!!!

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aahh gracias vs sos un tierno!

17:21 q lindo brazo! Jajaja

jjajaja dspues me voy hacer unos en un pecho y otro en el cachete del culo jajaja!! para vs!!

17:24 compramos un poco de pintura roja y te pinto un fondo con la lengua

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jajajjajaajja

17:25 la uso como brocha gorda :) jajaja, mas q pintura tendrĂ­a q ser algo comestible porq sino me enveneno

jajajajja si............. cremaaaaaaaaaaaaaaa!!!!

17:28 clarooo, me voy a empachar porq me gusta mucho y no paro

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jajjaj entonces chocolate pero ese lo uso yo xq me facina el chocolate asi q cuando te ago un petelandia de paso pongo mousse de chocolate jaja

17:30 jajajajaj a mi me encanta el chocolate tb!!

HDP Jajajaj con el respeto de tu mama q pense q me mata si entraba

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jaja q cosa che asi q te dijeron q peensaban q staba desd el martes a la noche yoo?? jajajjaja OJALA le tuvieras q decir a tu mama DIOS TE OIGA MAMI!! jajajjajja

yo la semana q viene puedo star una hora fuera de ksa si vs podes???

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VII EL VALS

Abre la puerta del baño, enciende la luz y lo primero que ve es su pecho reflejado en el espejo, un notorio chupón a la altura de la clavícula. Descubre una marca en su cuerpo, que bien Valeria, o Florencia, le había anunciado. Y con total desconcierto, no sabe, durante apenas unos segundos, de dónde ha salido lo que, en principio, creyó era un hematoma. Esa tarde, después de una placentera ducha, va a casa de Gina. Caminan algunas cuadras sobre la Avenida Boyacá, mientras hablan animosamente. Al llegar a las vías del tren Sarmiento, detienen el paso y ahí se

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quedan parados junto a todo ese tumulto de gente. Sergio se acerca a los rieles, intentando ver si efectivamente ve el tren. No le gusta esperar; y sobre todo con esos pasos a nivel donde nunca se sabe con exactitud si la espera tiene algún sentido. Gina trata de persuadirlo hablando con él, para que se quede quieto y espere como lo hacían todos. Pero él sigue asomado, cada vez con mayor intromisión, cada vez más cerca, intentando ver algo; aunque sea una luz que se anuncie al fondo de la curva. El guarda lo vigila, sin quitarle la vista de encima, y cuanto más se mueve, más lo sigue con la mirada fija. Y Gina mira a los dos alternadamente. Lo llama a Sergio, tratando de captar su atención con algún tema que sea de su interés. En esas idas y vueltas le ve el chupón, favorecida del poste que sobre toda la gente derrama a chorros su tono anaranjado, y otro poco de la remera blanca que trae Sergio, estirada por el uso, que con el cuello ensanchado facilitó lo que, de no ser ahí ella hubiera visto y detectado en cualquier otro momento. Y entonces empieza el interrogatorio: 70


–¿Qué te pasó ahí? ¡Eso es un chupón! No jodas. Decime la verdad. En serio, prefiero que me digas la verdad. Al principio Sergio desmiente con vehemencia; presionado por las preguntas insistentes de su novia. Le ha surgido ese camino poco transitado. Ante la acusación, es lógico que encuentre refugio en el ocultamiento. También juega un poco la piedad. Prefiere siempre una mentira que duela menos, a una verdad desgarradora. Y vaticina un poco ese destino en Gina. Es lo último que quiere para ella que tan buena compañera ha sido. Así, inexperto en el arte de la mentira –la mentira cara a cara, la mentira que se dice mirándose a los ojos–, rápidamente vuelve sobre sus pasos aceptando con toda franqueza el hecho. Muchas veces ha logrado mentir desde su escritorio, desde la tinta y el papel. Ese tipo de mentira le sale mejor. Casi sin esfuerzo en el mejor de los casos. Es Sergio adherente a la mentira indirecta, insinuada o sugerida, donde no debe hacerse cargo de ella en lo más mínimo. 71


Pone claras las cosas entonces. Dice a Gina que lo que trae en el cuello… sí, es un chupón. Estuvo con alguien. Pero no tiene la menor importancia. Es lo que se dice un desliz. Un error. Tal vez un dejarse llevar. Gina lo escucha, muy cerca de romper en llanto. La gente advierte la situación desde los primeros reclamos un tanto subidos de tono. Todos paran la oreja, esperando que la explicación del conflicto llegue. En eso, suena la bocina del tren que aparece, y Sergio, ocupado de Gina, no puede ver bien su llegada, cosa que lamenta. La multitud retrocede ante el paso del tren; la curiosidad de la gente se ve frustrada. Al calor de los vagones, Gina y Sergio llevan muy alto su discusión. Pasa el tren, la escena queda callada. Ellos ya no discuten. Y a ese silencio que parece total, le corresponde otro que nace de la pareja. La gente piensa que de una vez por todas ya levantarán la barrera, cuanto más quieren que la conversación se reanude. Pero ellos siguen en silencio, mirándose. Él ya no está pendiente de la 72


llegada del tren, ahora la atención se corrió a Gina. Quiere decirle algo pero no sabe qué. Va a decir lo primero que le venga a la mente... Cuando su voz empieza a escucharse, es rápidamente aplacada por la bocina del tren que pasa ahora en otra dirección, destino fijo a la estación de Once. Y otra vez la gente queda al borde del paso a nivel, confinada al más amplio desconocimiento, ajena al motivo y causa de la discusión. Se alza la barrera y la multitud avanza sobre las vías. Abierto el corral, rápidamente empieza la dispersión y todo queda en la duda. Sergio y Gina se han perdido entre toda esa gente. Caminan poco más de una cuadra a paso acelerado. Él la sigue con dificultad, intentando esquivar a la gente; Gina avanza rápido, sin más problema que el que trae puesto y que siente, para su desgracia, a la altura del esómago y en la cabeza. Camina como si no hubiese nadie en la calle, ignorando a Sergio que la escolta siempre, aunque por momentos la pierde de vista entre la gente. 73


Llega a perderla por un buen espacio de tiempo. Mira hacia todos lados, desesperado y, al mirar abajo, tampoco la ve. Toma asiento en el cordón de la vereda. Y piensa… Cinco años de novio. Comprometidos, con alianzas y todo, a los tres años y medio de relación. Se conocen desde los catorce. Sus padres suelen hacer negocios juntos. En las reuniones, en casa de ella o la propia, se ven, y empezaron mirándose y hablando. Los mayores sospechaban simpatía y un poco más. Siempre un poco más. Así lo trasmitían a sus hijos, cuando les decían “que buen/a chic@, qué lind@; y qué inteligente…”. Y a fuerza de repetirlo una y otra vez, les iban moldeándo el gusto, los iban convenciendo sin que ellos se dieran cuenta del todo.

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VIII BAILE

:v

15:41 ;)

jejej... che mi mama se crey贸 tdo

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15:41 jaja esa cara de pacman en muy buena!

lo del comunicado jajaja sii

15:42 para mi q tu vieja intuye y no dice nada

Jajaja naa el q intuye es mi viejo n mi vieja ;) Jajajaj

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15:42 si? yo pensaba q tu mamรก por el instinto femenino

pero el tma esq le hice ese cumunikdo cn la firma falsa q me hizo una amiga y safe!!!! jajajaja

15:43 sos parecida a ella, no?

mi viejaaaaaaaaaa naaaaaaaaaaaa en q sentido a mi mam!?

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15:44 físicamente

si algo jajaja

15:45 Jajaj q andás haciendo?? estás en tu casa?

yeeeesss jajaja vs dcis x la foti q publique q me parezco a mi vieja?? 78


15:47 asĂ­ es!

vs q dcis????

15:48 q si no la vi muy bien la foto la veo en miniatura

jajajjajaja nomas q yo tngo menos aĂąos

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15:50 sisi pero parece q heredaste algo del cuerpo

jajaja siiiiiiiiiiiiiii pero eltma el teme* jajaja no le emboco el tema* ahi sta jaja esq mi mamĂĄ es pachonsita y yo no kiero ser panchoncita!!! jaja entndes!??

15:52 jajaj pachonsita serĂ­a rellenita? 80


siii asiii q no soy una de esa?? Jaja

16:01 no la tenĂ­a esa de pachonsita jaja vos no esta muy flaquita usted

Jajajaja siii!! pero yo me referĂ­a de una de esas de lo q hablamos el otro dia!? Jajaj

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16:07 recu茅rdeme q me faya la memoria jaj

jajaja ok don! vsme preguntaste esto....por q al principio tuviste la impresi贸n de q no me importaba nada?

16:09 ahh, sisi recuerdo definitivamente, y lo repito, no sos de las cosas q me resbalan, q por cierto son muchas te gusta q te haga acordar

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y xq se te dio que yo te importe??? es decir xq facilmente me podias aver cojido y ya stá! Jajaj cmo lo hicieron muxo!!

16:12 porq me gustaste mucho

jajaj aahhhh gracias vs tambien a mi!!

16:13 y porq sentí cierta conexión, q la atribuía a los apellidos antes :C

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el tipo analisa todo jaja enserio, hay una conecshion inexplicable

jajajjaa me mata tu CONECSHION jajajaja..... pero igual muxos me dijeron sto q vs me stas diciendo y dspues de la tercera vez ya fue! asi q no me ilusiono muxo tampoco ajajajj!!!!

16:16 lo mismo lo mismo te dijeron? q copiones y mentirosos

jajaja si tnes razon! pero cmo q me acostumbrĂŠ viste,,,, soy re cariĂąosa,,, pero me cagan igual jaja pero we es costumbre nada mas!!

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16:18 yo no te voy a cagar nunca! de enserio q me encantĂĄs toda no solo tu cuerpo y me voy porq me pongo sentimental jaja

jaja gracias lindo!!! nooo!! yaa?? :’( Jjajaja

16:21 siii hermosa me voy a terminar un informe

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Jajajaj dale baby dale n te kito mas el tiempo!

16:22 me gusta como hablas por acĂĄ

Jajjaaj tambien te gusto cmo hablo x tel jajjaaja

16:22 me gusta como me hablas cuando estĂĄs al lado mĂ­o o por telefono

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ajaja sos un tierno!

16:22 me adivinaste

jajaja sos muy especial....gracias x ser asi cnmigo! ;)

16:23 Jaja de nada no hay por q agradecer me sale asĂ­!! con vos

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Aaaaaaaaaaaahhhhhhh

16:23 me voy, ahora si

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IX ANTIPASTO

–No sé qué planes vas a poder hacer con una piba tan chica… yo te diría que la cortes… Y ni se te ocurra volver a traerla a casa, ahora que nos vamos, porque me vuelvo de donde estoy y los rajo a los dos. Se va ella y vos la seguís atrás. Aparte, ni siquiera la conocés y ya la estás haciendo entrar en tu lugar; que es también nuestra casa, dicho sea de paso. No tenés un poco de respeto por nosotros, no cuidas tu espacio. Vas a tener que aprender a preservar un poco tus cosas… ¿y qué pasó con Gina? ¿Pensás tirar todo por la borda, tantos 89


años de relación? Lo que construyeron juntos… Tenés veinticuatro años, che. Avivate un poco. Casi un cuarto de siglo, y no parece que vayas a sentar cabeza. –… eh, no, con Gina… todo bien. Pero cómo hago ahora para decirle a esta chica… es delicada la situación. No quiero lastimarla. –No le digas nada y listo. Desaparecé. –Con ella no puedo hacer eso, viejo. Algo le tengo que decir… y voy a hacerlo, aunque sea o por lo menos parezca ridículo. –Y qué le vas a decir… –Que pensé que no iba a molestarme la diferencia de edad, pero me da miedo lo que pueda pasar a futuro. No es la verdad, nada más lejos de lo que siento, pero por lo menos la encaro con ese discurso que es firme, para que se quede tranquila. Y que más adelante puede darse algo, cuando la diferencia no sea tan notoria. Como para que no sea un adiós tan terminante, sino un hasta luego, un quizá… –No le des tantas explicaciones. Corrés el riesgo de que se obsesione; en una de esas le 90


dice al viejo y terminás metiéndote en quilombos. Hablale cada vez menos, y se va a ir olvidando de a poco. Decile que te vas de vacaciones un mes, así se enfría la cosa. –Puede ser… me da pena por ella, pero quizás sea lo que más conveniente en este caso… Qué linda está el agua. El viejo se enjabona el cuerpo con una velocidad y precisión admirables. Se suena la nariz aprovechando el agua que cae y el ruido retumba con fuerza en las paredes del baño. Hace gárgaras alzando la cabeza, con la boca abierta y los ojos cerrados. Escupe el agua al piso. La saliva y el agua siguen la inclinación del piso hasta perderse en la rejilla alargada que desagota todo ese caudal. Abro la fría un poco más, antes de salir de la ducha, para quedar bien fresco durante el resto del día. La fría, que es la izquierda acá en el club, y no la derecha como en todos lados. –Pasame el toallón… ***

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Decidí volver solo a casa. Le dije que tenía ganas de caminar, lo que no resultaba demasiado creíble después de una intensa hora de ejercicios y corridas. Lo aceptó, aunque no pudo evitar dirigirme esa mirada cómplice que siempre acierta cuando no digo del todo la verdad: los ojos más achinados que de costumbre; de por sí ya los tiene chicos y entrecerrados. Una leve sonrisa, que tal vez sólo yo noto. Abrí el portón corredizo del club y el auto salió tambaleando sobre el canto rodado. Despidió algunas piedritas al salir. Me saludó desde la ventana apenas baja y lo vi perderse entre las calles del barrio. El viejo tiene razón, sin duda. Eso lo siento, no es necesario que lo entienda. Pero… por qué ese cambio tan brusco… La primera vez que hablamos del tema estaba tranquilo, sumamente comprensivo, y ahora me suelta todo su enojo, me remata así de ésta manera. Lo desconozco. Puede que mamá lo haya levantado en peso, o acusado de flojo, de no ser lo suficientemente estricto conmigo, y ahí el cambio en su forma de ver lo que hice. 92


O quizás se acordó de Gina, que es un poco lo que acaba de decirme en resumen. En tal caso se acordó del padre, más que de ella en particular. Del padre y del negoción que montaron juntos, sin contar las cosas que traen entre manos. Pensó en su trabajo. No está mal si es eso. Lo entiendo. No lo juzgo en lo más mínimo. Al final lo hace por mí, por la mamá, por nosotros. Va a ser difícil no traer a Vale; y más teniendo la casa sola por dos semanas. La tentación es grande pero a aguantar se ha dicho. No hablar; mucho menos verla. Debería concentrarme en eso…

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X PRIMER PLATO

Jaja esq el domingo salgo cn ryta y si keres podms encntrarns! voy a salir al cine!

12:22 q van a ver?

Amanecer part 2! Jaja

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12:23 es la de los vampiros, no?

Jajaja si la d ls vampiros!

12:27 no vi ninguna de esas se q estรกn los libros tb

Jajaja! Yo las vi a tdas!

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12:28 bienn!!

Si tambien m ls lei a tdos

12:28 uhhh resultaste lectora a mi me gusta leer tb!

Jajaja buenisimo! Ja

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12:34 bueno linda, me voy besos

Jaja dale vida tkm bsitos!

***

baby staba pensando en vos y lo de las fotos q te dije q me podia sacar una y mandartela jaja ak me saque espero q te guste TKM lindo! imagen1014.jpg

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17:47 qued茅 medio hipnotizado te digo jaja est谩s hermosa es tu habitaci贸n esa?

Gracias mi vida y stem...si es mi habitaci贸n! Solo para vs la foti ;) Bsos hipnotizate nomas jajaja! T kiero baby!

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XI PATA DE CORDERO

Piden la cuenta. Ella va al baño y Sergio la espera en la mesa. En cuanto vuelve Gina, se van del bar. Caminan por las calles de adentro a pedido de Sergio. Ya había tenido suficiente de estar sentado en esa mesa a la vereda, tragando el humo de los autos y camiones que pasan por ahí. Mientras caminan, Sergio la abraza. Se besan profundamente parados en mitad de la calle. Tras los párpados cerrados de Sergio, se agita un dejo de confusión y asombro. “Con cuánta facilidad se recupera de todo…”. Ad99


mira esa capacidad de perdón como el que admira lo que no tiene, lo que no tuvo. Los roles se voltean; de pronto Sergio se ve del otro lado. Él es ahora el que tiene que curar una herida. Él quien debe cuidar, abrazarla con fuerza, besarle la frente; como bien lo habían cuidado cuatro años atrás, sin muchos resultados. Había perdonado sin perdonar. Fatalidades suicidas para un amor. De haber tomado las cosas como Gina las toma ahora, hubiese sido todo distinto. De haber sabido perdonar… Pero inútil es cualquier tipo de arrepentimiento, de eso está seguro. Solo queda aprender. Seguir aprendiendo de la mujer que esté a su lado. Aprender, entenderlas, amarlas. Perdido en recuerdos y elucubraciones, deja de mover los labios sin darse cuenta; ella entiende que es el fin de una serie ininterrumpida de besos y da el último y más intenso. Sergio siente el equilibrio del mundo sobre sus hombros. Abre los ojos en la calle desierta. Está confuso. Incómodo, por ser algo que nunca fue. A él lo habían dejado casi siempre, con algunas relaciones que bien se pueden 100


declarar como empate técnico, parejas que rompen por lo que se dice el mutuo acuerdo, donde ninguno toma una determinación, sino más bien que es acordada, simultáneamente terminada. Sergio ha sido Gina incontables veces. Y ahora le toca interpretar el papel opuesto, de buenas a primeras. Lo enloquece la culpa, verse responsable de ocasionar tanto dolor como el que había sentido. Pero al mismo tiempo lo ve mejor, de pronto la comprende. Ya no es esa mujer despiadada, con la única intención de burlarse y humillarlo y lastimarlo… no, ahora se ve a si mismo en idéntica circunstancia, a grandes rasgos, intentando llevarla como puede, con algo de suerte a su favor ya que Gina parece tomar muy bien lo del hematoma. –¡Hematoma! Vamos a llamarlo por su nombre. Eso es un chupón, terrible chupón que te dio la pendeja… ¡qué zarpada!, no lo puedo creer. Y yo soy una estúpida. Había visto lo que te publicó en el muro... Aparte es una tarada… vos decime: ¿necesita escribirse el brazo y sacarse una foto para decirte que te quiere? Y vos sos un boludo. Vas a termi101


nar preso… qué carajo te pasó por la cabeza… meterte con una piba de dieciseis… qué necesidad… pudiendo estar conmigo, bien. Bueno, algo te dará ella que yo no puedo darte… Pero no pensas ni en tu familia, menos vas a pensar en mí, en lo nuestro. Lo que tenemos. –No digas estupideces. Ya te dije que fue una locura. Es el día de hoy que no entiendo bien por qué pasó todo esto. No sé que me agarró. Nunca tuve fantasías… en ese plano por lo menos. Por ahí me llamó lo prohibido… la verdad no sé. –Tené cuidado, no sea cosa que se entere el padre y termines en cana; y agradecé que te quiero y no le digo nada al mío. Me aterra lo que dice, pero inexplicablemente sonrío. Estoy riendo. Aunque pienso un poco más y me explico el fundamento de la risa. Tengo cierta predisposición a ser víctima, que es todo lo contrario de la culpa que hablaba antes, ése es mi lugar, me siento cómodo así, que a los demás se les caiga una lágrima al verme mal, al verme preso en este caso, que se preocupen, que me presten atención, acá estoy, ¡soy Sergio! 102


XII Sร NDWICHES

Holaaaaa!

15:52 hola! como estรกss?

Maso! Y vs? :)

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15:53 bien! por q mas o menos?

Nda x cosas dl colegio!

15:54 ahhh te llevás muchas?

No, el tma esq me largué a llorar xq me llevé civik jajaja pero el tma n esq xq m siento mal xq llevo la materia sino xq me tomo oral y me puse nerviosa y se me borró tdo y yo lo sabia y me puse a llorar xq me enojé cnmigo misma x eso! Jaja pero we Me la llevo x stupida! 104


16:00 bueno, no pasa nada cuantas tenĂŠs aparte de esa?

5 creo jajaja!

16:01 uh

Jajaja si loc me las llevo x el problem q tuve!

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16:05 estoy con el tema de las vacas vacacones jej hoy justo nos dijeron q confirmemos cuando nos vamos y hablĂŠ con mis amigos

Q bueno y a dnd te vas?

16:07 hubo cambio de planes y nos vamos esta semana

U.u

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16:07 a cordoba no conozco

Q bueno! Es muy lindo yo fui y es precioso! ;)

16:08 a q parte juiste?

Jajaja JUISTE jajaja a cosquin, a carlos paz y otros lugares mas q n me acuerdo el nombre! Jaja!

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16:24 tal vez vaya para el lado de carlos paz

:) Si en dnd hay pura joda! Jaja

16:27 jaja ahh, claro

Jajaja siii! Te enojast x algo cnmigo?

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16:37 noo, para nada

Ok :)

16:40 estรก dando vueltas el jefe por acรก

Stรก bien!

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16:41 me agreg贸 una amiga tuya

Kieeeeeeeeeeennnn?

16:43 ta Ry

Jaja aaahh siii mi mejor amiga RYTA HDP no me dijo nda jaja si la keres aceptar aceptala cn ella n hay problem! Jaja Q kgada d calor stoy

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16:54 seee ayer estaba muy caluroso tb!

Maaal! Fui al cine ayer jaja pero n tnia cmo cmunikrme cn vs!

16:57 ahh estuvo buena la peli?

si yo ya la habia visto!

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16:58 Jaja la habías visto porateada! pirateada

Jajaja noo jaja la vi en el cine cn mis papas jaja!

17:00 Ahhh y ahora la fuiste a acompañar a Rita?

Jajaja sip! Bueno baby me voy a dar un baño xq aunq sté cn la ventana habierta y en ropa interior el calor no se me va!

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XIII SEGUNDO PLATO

La verdad, me cuesta mucho ignorarla. Por el momento sigo como si no hubiera pasado nada, como-si-no-me-hubiera-pasado-nada, firme en la coartada del viaje. Contesto a lo que me pregunta, le respondo como lo hubiese hecho antes, imito mis formas del pasado, atiendo a los detalles; sin alimentar demasiado sus posibles expectativas, que por lo visto y para mi desgracia se mantienen inalterables, y son más posibles de lo que esperaba. Me cuesta ser cuidadoso en ese punto. No tiene que notar ni el más mínimo cambió en mí, aunque intuyo que ya lo está notando. Debería reducir cuidadosamente y de a poco, muy de a poco, los comentarios afectuosos, la 113


ternura que venía en aumento. Tendría también que conectarme menos, empezar por desaparecer un poco. Que no me tenga tan al alcance, con ese redondel verde que me muestra disponible. Esto último me está costando más. El trabajo se hace aburrido, muchas veces molesto, y siempre uso las conversaciones como escape; como también uso los cuentos que leo y releo en un horario vedado, para que el tiempo pase como debe ser, de una forma más armónica, más provechosa y amena. Lo mismo en el caso de la música; uno se pone los auriculares y sale, en cierta forma, de la oficina. Viaja un poco por las letras de las canciones, las recorre, imágenes que se desprenden de ellas con facilidad, como los tallos de las hojas maduras se sueltan suicidas de las ramas resecas de algún árbol, para luego alimentarles el suelo, su suelo, que las raíces recuperan para seguir una temporada más. Pero qué tendrá que ver esa imagen otoñal que me brota así de la nada, con el verano en que ocurrió todo éste lamentable episodio… Seguramente el frío, que carcome acá en la pieza, el frío de afuera y el estremecimiento interno que me surge al hablar, al recordar, al inmiscuirme de nuevo, 114


y sin que nadie lo pida, en esto. Y tiemblo… más por mí que por el frío. Quién me manda a meterme en esto, yo digo, quién me manda… Lo cierto es que la costumbre me gana y termino entrando sin otra cosa por hacer; solo por la intriga de saber quién está, de puro curioso que soy. Y siempre es ella. En el instante que veo su nombre, salto sobre la silla, todo lo terrible se conjuga en ese momento. Enseguida cierro la conexión. Cuando vuelvo a abrirla, esperanzado en que ésta vez esté en la escuela o donde sea pero que por favor no esté ahí por nada del mundo, con frecuencia encuentro algo escrito; al parecer está al acecho, apenas entro me detecta y me escribe, está pendiente de todos mis movimientos. Eliminarla sería igual o peor que decirle la verdad. Igual de abrupto, peor por lo evasivo, por desaparecer de buenas a primeras, sin explicación ni la posibilidad de una descarga de su parte. Esa opción no cuenta para mí. Tengo que esperar aunque sea tortuoso, ir de a poco, enfriar la situación como bien dijo el viejo. Este mes de descanso me va a venir bien. Sería bueno ni aparecerme, quizá alguna vez casual115


mente, y hablar poco, eso sí. Que se le pase, como a mí también se me va a pasar, como todo se pasa. Son solo tres años de aguantarse las ganas. Dos y medio en todo caso. Para estar con ella bien, sin persecuciones. Sin precauciones. Estar. Porque, la verdad… me vuelve loco. ***

Te falta pokito para q te vayas!

17:39 siiiii!!!

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Jajaja! 20 minutitos mas y ya stà!

17:41 jaja volvió el cronómetro

Jajaja chiii! ;)

15 min.

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17:45 jaja Ă­dola!

si loc no hac falta q me lo digas! Agrandada mal! Jajaja

10 min, nda mas!

5 min y ya te vas a la mierda! Jaja

Bueno lindo me voy dspidiendo! Te kiero! Besitos!

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17:58 YO TB!! besoss!!!

Bsitos en dnd mas te guste! Muaaaa!

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XIV ANIMACIÓN

12:32 como estás¿?

mmm...maso pero ya va a pasar!

12:34 q pasó?

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nda nda, ya me stoy llendo bsos chau! me tngo q ir! bye!

12:36 besos!! después me contás

***

Ak stoy!

12:46 q pasó q te fuiste así redepente?

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staba en el cyber xq fui a imprimir el itinerario dl vuelo d AIRR.COM jeje!

12:47 a donde te vas?

Jaja a ningun lado mi abue se va a chile ahora el 13!

12:50 q d铆a q eligi贸! Jajaja

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se lo elegims nsotros jaja!

12:55 la quieren matar pobre por q estás mas o menos?

Jaja vida pera ya vngo me voy a comer! ……

15:27 q comiste?

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Jajaja ñokis kseros echo x mi abue!

15:35 Q RICO! me vas a contar?

Jajaja ya stá! Ya fue! El tma era q staba mal xq vino un ex y me dijo un mntn d cosas cmo q er una puta! Q era hipocrita y q cojia tan bien xq soy una puta y otras cosas mas q me hizo sentir re mal! Y n me metiera en su vida! Jaja eso staba mal pern ahora Me la re soba! Jajaja

15:48 ahh y por q apareció? 124


si q se yo es un pelotudo! Agrandado! Q se cree el cntro dl mundo! Se puso asi xq vino la novia y me dijo q se habian peleado q se yo y yo le di un cnsejo xq me lo pidio! Y we el otro hirvio cmo una pava! Ja

15:55 ahh, le diste un consejo a la novia son compañeros?

Jaja si pero n d curso sin dl cole ella stá en 5° igual q él!

15:59 ahhh

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y q es de tu vida?

16:05 Jajaja en este momento, en el trabajo

jaaja si me imaginĂŠ!! lo q si te voy a dcir esq..... stem.... cmo dcirtelo... stemm.... jajaa stem...esq te siento distante!! puede ser tu forma de hablar cnmigo n es la misma!!! o stoy equivokda!! ??? hello.... are you there???

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16:12 no, para nada

mmm... no m mientasss!!!

16:13 quizรกs estoy medio cortado por lo de las vacas estoy organizando eso

ahhh.... lo q si te aviso esq si tenes algun problem cnmigo voy a necesitar q me lo digas!!! ;) xq sino dspues es peor! para no creo q para vs! jeje! ;)

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16:21 no entendí lo último

Jajaj yo me entiendo!! ;)

16:22 no hay ningún problema!

:D

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16:24 “xq sino dspues es peor! para no creo q para vs!” no entendí eso

jajajajaj yo me entiendo lindo.... ;)

16:25 yo no

jaajajaja!

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16:28 no me lo querĂŠs explicar

Preferiria q nop!

16:29 dale, decime me intriga

Jajajaja sos chusma eeehh!

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16:31 Siiiiiiiiiiiii contameee...

Lo q kise dcir esq si tnes algun problem q me lo digas xq sino v haces peor para mi! Pero nce si para vs! Eso! Jajaja

16:38 Ahh

Jajaja entndit algo?

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16:39 jajaj si

Jajaja a ver q entndist?

16:40 jaja q si yo tengo algĂşn problema y no te lo digo vos seguis de alguna forma pensando y pendiente y despuĂŠs es peor

Muuuyy bieeennn un 10!

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Y cuando era q te vas?

Cri...cri...

16:51 perdรณn es q un amigo llegรณ a argentina y me estรก hablando me voy el jueves

Stรก bien hablรก tranki! N te jodo!

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16:55 no hay drama

Jajaja no stĂĄ bien! HablĂ tranki!

17:05 Jaja bueno, graciass!!

;) d nda!

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Bueno lindo bsos me voy! Saluds para tu amigo jaja! Te kiero muxo! Bsos en dnd mas t guste!

17:28 besos linda! le mando saludos

Jaja cmo kieras! Chausito! Tkmm!

17:30 yo tb!!!

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Aaahh q amor abrevia el TAMBIEN!

17:33 JAJAJAJ ahorro letras, viste?

Jajajaja si! Y al pdo encima!

17:38 ehhh, cuestan plata las letrassss jajajaj

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17:41 驴para d贸nde vas?

Jajaja para ningun lado! Toy mas encarselada ak!

17:44 Jajaj yo igual!

Jajajaja igual t faltan 15 para irte!

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17:50 10 ahora jajaj

Jajajaja naaaa no pods discutir cn tu cronometro sexy!

17:51 viene bastante bien calibrado el cron贸metro jaja

Jajaja bue tu cron贸metro sexy se va! Bsots bye corazon!

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XV FOTOS

y yo stem... tambien tdo bien!! Jja xq no tuve clases hoy!

15:37 uhhh, q bueno!! te levantaste tarde!!

chiiiiiiiiiiii!!! no sabes lo q me pas贸 ayerr!!

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Jajajajjaja ni te imaginas!!

15:40 Q PASÓ??

Jajajaja staba poniendo la mesa para cmer y me estaba riendo sola jajajajaj de las bludeses q dciamos jajaja y mi vieja me dice FLOPI Q TE PASA??? y le digo NDA MÁ X? y me dic XQ TE ESTAS RIENDO SOLA, STAS LOK O Q TE PASA?? jajajaja y me dic N STAS SALIENDO CN ALGUIEN NOO?? Jajajjajajajajaja

140


q blda no me di cuenta te juro x Dios q n me di cuenta ajajajjajaja !!

15:43 y de q te reĂ­as? jaja

jazjajajajjj de las bludeces q dciamos notros!! d esas bludeces nomas jajajajja!! soy una blda loc

jajaj viste son bludecs!! jaja y q haces??? :P

141


15:53 ACÁ, EN EL TRABAJO

q novedaaaaaaadd!!

15:53 no tuve tanta suerte como voss!!!

jajajajajajaj!!! se te extraña banda!!!

142


15:56 porq no tuviste clases? a voss tb!!

xq hubo jornada de docente! x eso!

15:57 Ahhh

:)

143


16:00 adonde te vas de vacaciones?

ahora en enero me voy devuelta aentre rios colon pero cn ryta..jaja asi hacemos desastre jaajaj es mas q nda para poder darme mas libertad y salir mas x ahi q se yo!! sin embargo si stoy sola cn mis viejos tngo q star dtras de ellos!!! y cn ryta podsmos joder mas jajja

16:08 claa

jajajaj!! joda tda la noche y dspues dia al agua pato

144


16:08 siendo dos estรกn mรกs protegidas

yeeesss of corse!!

16:09 la uniรณn hace la fuerza

jajajjaajjaajajja siiii nos cubrimos entre las dos!

145


16:13 se pone col贸n en verano me dijeron

WTF??? JJAJA N ENTENDI??

16:16 q se pone bueno, se llena de gente

aaaahhhh jajaj ahora si sisisisisisisiis muyyyy buenooooo

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bueno...stem... yo ya me voy yendo, xq tngo calor y me aburro veo q me pongo a leer!! jejej bueno lindo me voy sippp suerte cn tu viajeee!!! y q te vaya re bien! te kiero muxo!! ;) bsoteeesss!!! enormeeeeeeeeesssss!!

16:21 Dale

;)

147


16:22 besossss!!! perdón, pero acá me hablan y pasan por atrás yo tb!!!

loc!! ;)

16:23 graciassss!!!! leete alguno de los de crepúsculo jeje

ya me lei a tdos q libro me aconsejas q leiste vs?? jajaj bue otro dia me lo dcis bsitos chau tkm! ;)

148


XVI ENTREVISTA

Ryta… o taRy no se como llamarte

eyyyyy

por que taRyyyy??

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es rita al vezre

se te da por decir todo mezcladito

siiiiiii

asi que se van en enero con vale‌

sipi

150


adonde

Colon entre rios no t dijo?

ahhh, si creo que me habia dicho algo de eso el otro dia te puedo hacer una pregunta‌ aunque ya la estoy haciendo cuando pregunto si te puedo hacer una pregunta

jjaja si decime pods confiar en mi soy muy amiga de flor nos conosemos de chicas

151


lo se los padres se enteraron de algo?

d algo d que?

nada, deja

t dije que pods confiar

si saben algo de mi‌ eso

152


que yo cepa no me dijo la muy tarada que el otro dia casi se va d boca con la mama

si, me dijo algo de eso tambiĂŠn

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XVII VIDEO

sergio ACHEE???

12:12 jajaj siii como estรกss?

154


bien y vs q tal???????

12:12 todo bienn!!

y el viajeee???

12:14 Tranquilo

aahhh!!! me alegro!! :D

155


12:15 gracias! ya comiste?

Jaja xq ACHE? Sisi comi!

13:25 q comiste? jaja porq es una letra muda

Me dio antojos d panchitos asi q fui y me cnprĂŠ salchichas grands para hacerm panchos! aaahh xq es una letra muda! Jaja mira vs!

156


13:28 sisi no te dejaron comida?

Jajaja si pero n tnia ganas d cmer milanesa d pollo! Tnia antojo d panchos! Jaj

13:30 yo tb me hago panchos con pan lactal jaja

Bue me voy a studiar un poco d biologia! Bsos lindo dspues me conecto! Jajaja cn pan lactal! Jajaja mal lo tuyo!

157


13:31 beso!! nooo

Jajaja dale bsitos! Tkm!

13:32 yo iguall!! prob谩 la pr贸xima con pan lactal jaja

***

158


Y la pasaste bien? En tu viaje nunk me dcis q hacs! d q trabajas‌

15:30 sigo de vacaciones y si, te dije que redacto informes

Aaahh! Tas allĂĄ tdavia? q tipo d informes

15:33 sisi!! Informes de todo tipo

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ahh ta lloviendo??? ak si!!

15:39 sii, me dijeron acรก no

jjaaj aahhh q buenoo!!!

15:41 cuando terminan las clases?

160


ak ya terminaron el tema q yo sigo de largo!! Jaja

15:42 ahhhh, por diciembre?

JAJAJ SI! q raro q no tas paseando.... jodiendooooo... boludeandoooo...... y tdo esoo!! jja

15:57 quise conectarme jeje

161


ahh!!! de dond?? tas cn un cel??

15:58 nono

aahh de una compu!!??

15:59 asĂ­ es!!

162


aaahhh!!! :D

16:04 Jaja me voy yendoo!!!! te mando un besoo!!!

dale lindo bsoteees enormeeess q la pases re bieeennn!!

16:05 vos tb!!

163


sip!! voy a aprovar tas las materias jaja!! tkkmmm!!

16:06 siiii!!!!

Jaja cuand volves???

16:07 ponete las piletas

jajajjaja siiii!!

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16:09 el 5

quee?? el 5 de eneroo???

16:09 sui

aahh!! ta gueno! bueno lindo suerte q la pases muy lindo y suert cn las chiks tambien! jajaja bsitos tkkm!!

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16:14 lo mismo digo ! suerte con las chicas

jjajja HDP

16:15 con los chicos, con los chicos

naa!! para que?? para jugar cn ellos!! naaa ni da!! :P

166


16:20 jaja no juegues con ellos, pobres mejor dicho, jugรก, pero no con lo que sienten

sisisiisis pero igual es feo!! algun dia voy a tner un novio stable q me kiera! y sepa realmente lo q tiene al lado! ;)

16:22 yo puedo ser ese, cuando tengas 18 te espero

jajajaj no creo q speres tanto tiempo alguna se te va a pasar adelante!!

167


yy puuufff!! a la mierda el TE ESPERO!! ja!

16:23 yo te espero lo mismo puede pasar con vos

no creo! yo si q no! las mujeres smos distintas! o al menos yo noc! pero si vs me dcis q me esperas TE VOY A TNER SIEMPRE EN CUNETA!! dalo x echo! el tma esq me da miedo! :/

16:25 me caĂŠs tremendamente bien!

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gracias!! sos muy dulce! je! pero cmo q n confio en ndaie entnds?? ncesitos cnocert mas!! y tomar mas cnfianza en vs! vs tambien me caes re bien y me re gustas! y me gusta muxo cmo sos cnmigo! y te valoroo un monton no te das idea!!! soy de tomar cnfianza rapido! pero aprendi q las cosas van de apoco!

16:29 seguro!

=)

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XVIII POSTRE

Lo que sigue queda por fuera de la más estricta decencia. Las palabras que se reproducen abajo resuenan como si hubieran sido dichas mil veces y a los gritos en mis oídos. No me hago cargo de ellas en lo más mínimo, ya que no son de mi creación. Así me llegaron por desgracia, y así las pongo. Ustedes son quienes juzgan. *** 159873194* 10/12/13 09:22 Hola serjio soy valeria nn t qiero

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preocupar ,xq estas d vacas,pero… Pro no me vino el periodo y estoy preocupada,no t altres xq tengo una solución!¡ Nada mas t qria informar d la situación TKMM

***

15:05 hola! como estás? no te preocupes quizás se retrasó un poco

Eso espero! Pero a mi me viene a fecha spero q me venga tard! Pero igual si no viene tngo la solucion!

171


15:14 cual? me conecté antes y no te encontré

Cmprar una pastilla q se llama OXAPROST o algo asi cn eso me hicieron abortar la ultima vez q me pasó tdo eso!

15:18 y te la venden?

Si! No te preocupes x eso stá tdo bien! No te voy hacer llegar problemas!

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15:25 estoy leyendo sobre la pastilla

Jajaj! Enceriooo?

15:26 si

No te procupes yo la cnsigo! Tampoco kiero arruinart tu vacaciones!

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15:27 no me importan las vacaciones me importas vos

Gracias! Pero no kiero ser carga d encerio!

15:30 cuando viene generalmente? te viene

Me tnia q aver venido el 4 o 5 d st mes! Y q opinas d las pastillas?

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15:39 estoy leyendo como las conseguis?

Atraves d una chik quien fue las q me las vendiรณ la ultima vez! La cnsiguiรณ mi papรก x internet!

15:43 y tenes el contacto vos?

Lo tiene en la agenda mi vieja pero se la llevรณ! La chik se llama claudia! Y se cmunik siempre x cel! Mirรก lo q voy hacer es sperar! Esta semana, si hasta el domingo n me viene me cmpro la pastilla!

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15:48 cuanto tard贸 la vez que m谩s se retras贸 en llegar?

Creo q 2 dias!

15:51 y siempre viene los 4 o 5?

Noo, me a venido los 30, 25 o 23, en agosto me vino el 15

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15:54 ahh

lo q me aconsej贸 ryta fue q me aga un evatest!

15:55 entonces sos irregular si, estar铆a bueno eso

Jajaja noo irregular no! A mi me viene el periodo junto cn mi mama! A vecs mi mama se atrasa o adelanta un dia! Pero q pasan 28 dias pasan a vecs 29 o 30! X eso taba preocupada! Pero el viernes me ago un evatest!

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Y te aviso a tu cel! Si me cmpro o no las pastillas! vos no te agas problem

16:05 bueno no te preocupes

Cri...cri...

16:06 q es esa cri cri? te escrib铆 antes

Jajaja lleg贸 tard! Cmo stoy cn el cel! Jaj

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16:07 ahhhh

y voy a tratar d no preocuparme! Lo unico q spero q sto no influya en la quimik q tnems!

16:10 no, para nada

Si eso spero! :(

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16:16 por q esa carita?

Xq soy una pelotuda y siempre arruino tdo! Y siempre me va mal en tdo! :’(

16:18 no tonta

Ya noc q hacer!

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16:18 por q decĂ­s eso? pasĂł algo?

Me pasa d tdo! :’(

16:20 contame desaogate

Siento... Noc...q soy mala persona, q n merezco ls padres q tngo! Me siento muy mal! Me siento sola y destruida cmo persona!

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16:22 no sos nada de eso

soy un dsastre! Gent q me a critikdo tienen razon!

16:23 en q tienen raz贸n?

Te puedo llamar algun tel de linea? :/

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Helloo…

16:31 no, no hay teléfono de línea acá

Ok… Y al cel?

16:31 si igual hay gente y no puedo hablar mucho

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Si te molesta no!

16:32 no me molesta te lo digo por si me notas medio seco es que no me puedo explayar

Stá bien! Igual kiero scuchart! Ja? Ai te llamo! ……

Te juro x Dios q cn tan solo scucharte me re trankilicé! Jaja mal! Gracias! ;)

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16:49 de nada!! entonces siervi贸 de algo

Chiii! Jajaja! Bueno mi vida! Me voy a studiar! Te kiero muxo besitos!

Si cuando me aga el test! Te aviso cmo sali贸 tdo! No te preocupes pasalo genial! Bye!

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XIX CAFÉ

Qué decir… la pasé bien, la verdad que la pasé bien; dormí excelente sobre todo. Si habré dormido tres horas es mucho. Y hoy otra vez al trabajo. No puedo ni siquiera concentrarme en los cuentos; qué es lo que queda entonces para el trabajo… Los párpados me pesan como si las pestañas fueran de hierro. Se bajan solos, y por momentos me duermo sentado en mi puesto. La cabeza cae sola con un movimiento aletargadoy pendular. Acaricio esa delgada línea que divide el sueño, de la vigilia, con una preocupación constante que no me deja por nada. Me despierto de repente mirando a todos lados, para ver si alguien se dio cuenta.

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Pasan muchas cosas por mi cabeza y se van mezclando con ensoñaciones y delirios. Pero cuando la vigilia vuelve para quedarse en todo su alcance, recreo mi futuro con un bebé y con ella y es desesperante, realmente, por la forma de vida que se lleva. Responsabilidades, más allá de las actuales en el trabajo, que ya de por si molestan y son muchas. Dedicarse a otra vida, cuando ni siquiera se ha vivido lo suficiente la de uno. Y lo digo como si se pudiera elegir, como si todo puediera planearse rigurosamente… cuando parece no ser más que un caos, de cosas que pasan más allá de uno, a pesar de uno. Sin atender la suerte a los deseos del que vive. No hay consideraciones de ningún tipo, esto es el fin. ¿Qué dirá Gina cuando le cuente esto? No creo que me lo perdone. Si aguantó las otras cosas, fue únicamente por mantener lo nuestro. Pero ahora… cambia todo. Lo nuestro, eso que llamábamos “lo nuestro”, no va a ser tal cosa bajo este panorama oscuro, injusto; dañino tanto para ella como para mí… para todos, al fin y al cabo.

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XX CORTE DE TORTA

Salist a pasear ayer o t qdas encerrado? Jaja me imagin q sii!

11:30 salimos a dar vueltas

Nda mas? No salen a bailar q se yo! Nc! Jaja

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11:31 nooo

O ya se les fue la onda d bailar!

11:32 yyy, un poco si mรกs bares o fiestas

Ai me va gutando mas! Jajaja bueno corazon me stoy llendo q tngo q rendir bsitos t kiero muxo mi osito! Ace frio ahi?

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11:35 un poco a la sombra más que nada Vayaa mucha suerte!!! yo tb!! éxito! besossss … y? vino Andrés?

Eeeehhh? No, no todavía. Lo estamos esperando j aja ja

*** 159873194*

13/12/13 09:13 Vista previa “viste-estamos[?] que se produjo un

190


error. Llama al asterisco 8 3 … ”. Para escuchar ahora, marca *555-via SpinVox

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XXI BRINDIS

vidaaaa!! aprovĂŠ civica!

12:50 bienn!!! ayer?

no hoy! Jajaj

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12:52 Jajaj felicitaciones!

graciiaas!!

12:52 ayer rendiste tb?

si pero me fu mal! creo! :(

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12:53 ahh q rendiste?

ayer?’ tecnologia y geografia! jaja facil lo se pero staba muy nerviosa!

12:55 si las dos a marzo? jeje

jajjaa nooo a febrero!! voy a star estudiando para mi cumple!! :( pero we yo me mandĂŠ la kgada!!

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13:04 bueno, no hay drama cuantas son en febrero?

jaja no tngo idea! pero me las llevo por trimestre es dcir algunas rendi bien el 1ero y mal el 2do entonces va para febrero el 2do entndes??

13:06 sii ahh, bien entoncesss

jaja si! q tal tus dias allรก! buenos?? ak ta medio nublado! 195


13:10 si, estĂĄ lindo a veces se nubla tb

=D te extraĂąo serjis!! :)

13:15 yo tbbb!!!

^_^

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13:18 jaja chinita

jaja sii sabes q la otra vez me mirĂŠ al espejo y me di cuenta q soy media chinitaa jaja tenias razoonn!!

13:19 viste? sos oriental

jajaja siii maal!! serĂŠ adoptada!

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13:20 uhhh

pura bludeces hablamos nosotros!! Jaajja

13:24 jajaa siiiiii

encima lo admitis con ese sii...jaja te imagino diciendolo jajaja

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Vale 13/12/13 13:32

Te kieroooo muxooo! Sos mi ternurita!

13:33 ¡¡¡q lindaaa!!! yo tb! demasiado pero no quiero q tengas problemas con tus viejos ni tenerlos yo tal vez tengamos q esperar un poco cri cri como decís vos jeje y cambiando de tema… te vino la regla al final?

jajjaaj perdon perdon!

199


13:43 para donde juiste?

taba limpiando la ksa!

13:44 q hacendosa!!

jajajajaj chii!! i y si ya se sobre los problemas! de mis viejos y tda la blada esa!! no te preocupes q lo tngo bien en claro! ,) ;)

200


13:46 q bueno! vos los conocĂŠs bien toda la blada? jaja q es eso?

jajaja lo abrevie.. quiere decir BOLADA

13:49 le sacaste la o nomĂĄs

jajaja sii!!

201


13:56 no hay forma de q lo acepten, no?

y no :(

13:59 algún día, cuando vos quieras, me gustaría q me cuentes eso q decías el otro dia

q te decia?... no me acuerdo!

202


14:00 no se, algo q me tenías q contar

no me acuerdo! Jajaja

14:00 cuando te pregunté por q tenían razón los q te criticaban

aahhh eso sisisisisi te lo voy a dcir algun dia o cuando ns veamos por 3era vez!! Jaja

203


bueno corazon me toy llendo TKMMM bsitoooosss!! muuuuaaaaaa!! ;)

14:03 vaya yo tb a vos!!! besoooo te vino?

bsooootttteeeeessssssss!! ;) ahi no me kiero dspedir jaja pero lo tngo q hacer jaja bsote enormes hermoso! yyyy la regla‌.. no jaja no me vino

204


14:09 otros mås grandes te mando a la distancia ‌no?

no aun

14:10 ahh

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XXII PALABRAS DE AFECTO

Holaaaa corazooon! Te extraño muxo!

09:55 yo tb!!! como estás?? Te busqué por acá pero nada…

Siii muxoo! Te re extraña muxo n te das una idea! Y stoy bien! Y vs?

206


09:57 todo bien!! me doy una idea porq debe ser más o menos parecido a lo q se te extraña desde acá

Aaahh q tierno, extraño muxo tus caricias y tus bsos!

09:58 estás en el cole?

si!

207


09:58 y como está eso??

Mal! La unik q aprové es civica!

09:59 ups

:’(

10:01 tenés 4 en febrero?

208


si :’(

10:02 tenĂŠs q rendir bien 2

si :’(

10:03 no te pongas mal, tonti

soy re pelotuda, pero we no me qda otra!

209


10:03 agarrá las dos q te sean más fáciles y metele, así te aseguras rendirlas bien esas q me dijiste q tenés un trimestre solo

si tnes razon! te voy haces kso!

10:05 yo hice eso en la secu, cuando estuve medio jugado si metés las cuatro mejor pero con dos ya safás jaja

lo leí cn doble sentido! Jajajaja! Tngo fotis para you! Jaj 210


10:06 jajaja

jajaja!

10:13 y como hacĂŠs para esconderlas?

Secret!

211


10:15 jaja cuente cuente

Na mi viejo sabe q me saco fotos asi, no me dic nda al cntrario me da cnsejo en posicion me tngo q sacar la foto es cmo el juez jaja pero a las fotos me las sac贸 ryta!

10:17 ahhhhh

jajaja si es media rara mi forma d vida! Ja

212


10:19 no

jajaja sii!

10:20 por qÂż? por eso nomĂĄs?

Jajaja no x otras cosas tambien, esq soms distintos a otras familia! Jaja

213


10:26 si, pero en lo guardabosques son iguales jaja (en broma)

Jajajaja tnes razon en eso!

10:28 va en broma igual

q tal hasta ahora el viaje? Te aburriste? Ja

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10:29 Jaja no a mi me gusta viajar, es difícil q me aburra q pasaria si le pido la mano de su hija a tu viejo? como se hacía antes jajaja

Jajajaj! Te va a mirar cn una cara d... TOMATELA XQ TE REBANO Y TE CMO CN CUCHARITA! jaja

10:35 te gustaría q le pida tu mano? me la llevo y la como con cucharita jajaj la mano

215


Seria muy lindo d tu parte si arias eso me da a entendr q te importo, y q realmente qres algo cnmigo y eso me gusta muxo! Pero mi viejo v a dcir q no! Jaja

10:51 y tu vieja? si se la pido a ella?

Jaj mi vieja stá en complot cn mi papá! Jaj Te kiero muxo!

10:59 yo también a vos!! no lo abrevié esta vez, viste?

216


Jaja si, me gusta mas asĂ­!

11:02 sino es como q ahorro letras

jajaja si, y al pdo! noc xq pero te stoy queriendo mas! Jaja! :$

11:05 q linda!!

:)

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Jaja es mas la cntraseña d ste face es: SERJITOTEQUIEROMUCHO! jaja pods creer?

11:08 enserio? mmm… mira que puedo entrar y ponerte cualquier cosa borro a todo los pretendientes que tengas por ahi dando vueltas jaja te publico una confesion donde reconozcas que te gustan las chicas 

Jjaaaja siii pretndients no tngo

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XXIII CAMBIO DE ZAPATO

Intento sin éxito entrar en su cuenta, aunque desconfío de tanta confianza. Qué raro… darme así pleno acceso a todas sus cosas… Copio el nombre: valeria.achaval.885. Cierro la mía; pego su dirección, escribo de todas las formas posibles la contraseña… pero ninguna de las variantes da resultado. Desespero de curiosidad. Algo estaré haciendo mal. Quizá me esté probando. Puede que intente conseguir algo con todo esto; quizá conocer mi resistencia a la intriga…

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XXIV TIRA DE CINTAS

asi q t dio la clav d su face? jajaj

si por que la risa?

me causa gracia q qeres q le haga

220


ni intendo

jajja

sos todo risa y cosas alrrreves

Iiissss

que lindo color de peloo!

221


gracias! ď Š

parece fuego

t gusto la foto?

siiii

me lo tĂąi ayer dcolorado me hic en verda

222


ahh y sabes algo de vale?

algo d q?

de como esta ella

sta bien afta dond c

la notas que come bien? 223


si yo q c la verda es q no comemos muxo juntas jajaja la ultima ves creo q fue en su cumple de 15 nos cntaron en la misma mesa yo saq el anillo!!

ahh porque la estaba notando mas flaca en las fotos que sube hace unn tiempito que no la veo ‌.sacaste el anillo?

siii ;) nos hisieron tirar la sintas en un momento pero al contrario yo la noto + pachona

224


sii?

ď Š

esta comiendo mucho?

no c ya t dije

pero pensas q es de comida lo panchona, como decis vos

225


deb ser igual creo q ay algo mas q eso

algo mas?

siiii jajaja

多多多???

226


XXV EL ANILLO

Con el puño cerrado sobre la sien, el codo apoyado en la almohada, Gina permanece perdida en un punto cualquiera del cuarto. Él la observa sentado en el colchón. El silencio parece inquebrantable. Así están, desnudos, sin emitir palabra hace unos cuantos minutos. Intuye Sergio que algo le pasa. Y en verdad no es muy difícil darse cuenta; partiendo principalmente de sus ojos; la mirada, todos los gestos de Gina que hablan por sí mismos. Indudablemente algo trabaja ahí dentro de su cabeza. La semilla plantada hace unos días está madurando. Y Sergio ve a través de sus ojos, por su aspecto, como se revuelve todo allá adentro. Se ve a él mismo, algunos años atrás, con su anterior y primera pareja, cuan227


do acostado en esa misma cama, su cama, confesaba lo mismo que está a punto de anunciar. Había buscado la confesión en ese entonces, y encontró más de lo que pretendía. Se desahogaba en su cara, que es la misma cara de Gina ahora; y sabe que va a decir algo, irremediablemente soltará un lamento como él lo había soltado. La situación es la misma, se desarrolla en el mismo escenario; en esta cama deshecha, revuelta, tibia y en pleno proceso de enfriamiento. En su propio cuarto. Sólo los personajes se han cambiado. Pero está él en su lugar, cumpliendo fielmente y a la perfección el rol del insensible; aunque no quería cumplirlo por nada. Pero así son las cosas; imposible zafarse de las vueltas de la vida. Como si algo lejano –o a la vez muy íntimo y ajeno, aunque parezca paradójico e irreconciliable– resolviera por ellos, y los acerque a un palo, los disponga en lugares determinados y suelte a sus manos un papel, el libreto que sin posibilidad de rechazo han de cumplir. Sergio puede verlo, observa las redes tejidas entre ellos, ve el mapa con los caminos trazados y, sin embargo, no puede hacer 228


nada. Las redes lo envuelven, los caminos lo atrapan. Antes de que ella pronuncie palabra, en ese silencio que se extiende interminable, ve Sergio que los labios de su compañera pierden de pronto todo rasgo de sensualidad, disminuyen sin más su carnosa exuberancia. Al mismo tiempo el cabello se replega poco a poco, cada pelo desanda el camino de su crecimiento; se retrae a tal punto que solo las raíces pueden verse, asomando apenas, al ras de lo que es ya una cabeza calva. Y Sergio recuerda algo que generalmente olvida con facilidad. Nunca es demasiado consciente de su aspecto, ni de los cortes de cabello y ese tipo de cosas que él bien califica de superfluas. Pero así le viene el recuerdo, con la imagen precisa de su cara en aquel entonces. Y más allá de su cara, arriba en la cabeza, un pelillo incipiente que había sido cortado hacía muy poco tiempo. Frente a él, quien fuera la responsable de ese corte de pelo, a la que se lo había pedido porque el calor le molestaba y con el pelo corto se siente mucho más el aire sobre la cabeza, uno no transpira tanto y no se siente tan incómo229


do, aparte el hombre puede jugar con ese tipo de facilidades y ventajas, cosa que la mujer, por cuestiones estrictamente culturales, no tiene tan servidas; aunque ya las hay rapadas a los costados y… en fin: el hecho es que el corte de Gina le parece muy conocido. Esa cabeza rasurada le suena de algún lado, y en eso aparece repentinamente el recuerdo de su propia cabeza. Son la misma cabeza. Y a Gina le salen patillas y barba, y es tan pronto una mujer barbuda. Todo rasgo femenino se va borrando de a poco en Gina. Hasta que Sergio se encuentra con Sergio, los dos desnudos en la cama. Y ese Sergio cabizbajo, recostado, que es el Sergio con pelo corto de hace unos cuantos años, le parece despreciable. Infinitas veces se prometió no volver nunca más a ese estado de sumisión frente a una mujer ni a nadie; menos que menos frente a una mujer, justamente. A la mujer que se quiere. La mujer que uno quiere. Pero esta vez, más que una promesa es una necesidad. La necesidad de ser digno. Tal rechazo le produce verse en esa forma, que casi no se reconoce en aquel Sergio. No 230


es él, aseguró. Y la misma pregunta que se había hecho tantas veces vuelve…: cómo se puede llegar a ese estado… en qué momento había pasado todo… Ninguna respuesta aparece para sacarlo. Salvo una, que muchos se encargan de señalarle como lo que puede ser una salida fácil al asunto, y que consiste en sostener que su ex era nada más ni nada menos que una bruja. Cuenta con lo que para él son pruebas consistentes como para afirmar tal cosa. Ella misma, “ella”, le confiesa una vez, bañada la cara en lágrimas, que su abuela materna había muerto quemada. Al parecer, y por lo que decían, era bruja. Tomaba mucho y se daba con regularidad al manejo de las energías y el esoterismo. Sergio une entonces toda esa información que accidentalmente su novia en ese momento le brindaba producto de una catarsis, y traza una línea recta pasando por todos y cada uno de los puntos. La conclusión previsible es que, por lo tanto, y vistos los antecedentes por línea materna, es digna descendiente de Bruja. Algo de eso vive en ella indudablemen231


te. Esas cosas no se pierden con la influencia y la mezcla de otras sangres como ser la de su padre, que también tenía lo suyo. Permanecen, en cambio, inalterables y combaten la intrusión del componente ajeno para salir triunfantes de esa lucha. Lo habían embrujado entonces. Sirviéndose, quizá inconscientemente, de todo un bagaje que le es heredado por vía sanguínea hace de Sergio un muñeco. Y cada piolín que tira repercute en su novio de igual manera. Es una marioneta. Un títere, cuya voz y pensamientos se controlan desde afuera. Y justamente ella, quién más que ella, hace las veces de ventrílocuo. Sólo cabe otra posible explicación a ese estado de angustia y completa dependencia en que se había sumido Sergio. Una explicación que se reserva para sí mismo, y que únicamente a su más entrañable amigo, el Rengo, se atreve a contar. Y tomando ésta como verdad, todo lo referente a la brujería termina siendo, como dicen algunos amigos, una salida fácil y nada más que eso; una respuesta esquiva, aunque muy pintoresca por cierto. En Sergio se mueve la duda de si, en vez de brujería, lo que 232


estuvo en juego fue el verdadero y apremiante amor, que por primera vez lo asaltaba en su vida. ¿La amaba? ¿Era, como suele decirse, su primer gran amor? Quizás a esto responde esa conducta tan poco suya; el hecho de no reconocerse en los actos, en los pensamientos, incluso en las formas de ser, ancladas y atornilladas por la costumbre desde hace ya varios años. Es otro, y eso lo trae desesperado. Lo cierto es que nunca supo si fue amor o brujería. Tal vez una mezcla de ambas. Una combinación lo suficientemente explosiva como para dar semejantes resultados. Y qué más resultado que ése, el que tiene enfrente. Su cara sumida en la tristeza, en el hecho de no sentirse querido. Ese Sergio deshilachado, deprimente, menor, va mutando nuevamente en Gina. Una Gina deshilachada, deprimente y menor, que habla de pronto y rompe así años de recuerdos comprimidos en tan pocos segundos. Rompe su imagen tan despreciable. Y Sergio se siente un poco aliviado al escuchar esa voz, a salvo de su propio pasado, de esa cara, que es y no es suya, esa cara que no quiere ver más. 233


–Me imagino que te habrás cuidado con esta chica… –y lo mira fijo a los ojos, torciendo la cabeza. La salvación ha durado poco, lo suficiente como para sacarlo de la imagen irritable de su cara y traerlo de vuelta a la de ella, que le planta un nuevo problema con sus palabras; un viejo problema, en realidad: el problema llamado Valeria. Sergio no sabe qué cara ha puesto ante semejante comentario. Lo sabe recién cuando la ve a los ojos y escucha sus palabras: –Sos un estúpido, a mí no me ves más un pelo. Y preparate para el quilombo que se te viene encima… ¡hacéte cargo! Al verla salir de la pieza, hecha un tornado de furia, se ve a él mismo saliendo del cuarto. En lugar de que lo siguan, él sigue a Gina ahora. La superposición se ha diluido. Al desaparecer una, desaparece también la otra. Chau Gina, chau… Hasta nunca.

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XXVI LAS VELAS

Vale 16/12/13 01:18 Hola mi amor ,diculpĂĄ la hora si es que estabas durmiendo pero no de Vale 16/12/13 01:18 jo de pensar en vos, te extraĂąo mucho y te quiero un monton, creo q Vale 16/12/13 01:18 ue dentro de poco voy amarte y eso me da miedo porque yo no se si v

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Vale 16/12/13 01:18 os algĂşn dĂ­a vas a llegar amarme, creo que me estoy enamorando de v Vale 16/12/13 01:18 os! Te quiero mucho y te necesito

***

11:57 linda!

Corazon!

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11:57 no te quise contestar por las dudas no lo tuvieras vos

Sta bien! :) Cmo stas?

11:58 muy bien!! me encant贸 lo q me dijiste

Me alegro!

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11:59 a mi me pasa igual

Aaa

11:59 pero mi Ăşnico miedo es lo q hablĂĄbamos el otro dĂ­a

Jaja pareces un adolecente!

238


12:00 soy medio adolecente q hacĂ­as a esas horas de la noche?

Perdon haceme recordar lo q hablams, pasa q sta semana he dormido 1 o 2 hs x los studios y sigo dormida justament ahora toy llegando al cole para rendir!

12:02 ahhh q rendĂ­s hoy?

Si!

239


12:04 lo q hablamos de tus seĂąores padres jaja

Aah si jaja yase! Perdonam q no me acuerdo!

12:05 Jaja no hay drama q materia das hoy?

Jaja stĂĄ bien! Biologia nda mas!

240


12:07 buenaaa te quedaste hasta las 2 estudiando???

Jajaja hasta las 5 dormí una hora y media!

12:08 Uhh domrí bien tonti q después no tenés energía pa rendir

Stem te puedo llamar? Cri, cri!

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12:12 si pero no entrĂĄs a rendir ahora?

Sisi ahora la termino en un toke y te llamo!

12:15 hacela tranquila q sos muy inteligente! suerte

Ak toy! Ya la terminĂŠ era re facil!

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12:21 como te fue??

4 preguntas bldas! Ja

12:21 bien!!

Si! Al menos no me qdo tanto para febrero! Ahora te puedo llamar? Jaj

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12:22 si

Ok ahĂ­ te llamo!

Disculpame vida esq me tngo q ir! No me di cuenta dl horario. Te quiero mucho no lo olvides. Despues te hablo!

12:38 no hay porq pedir disculpas jaja no me olvido de eso! nunca y de paso‌ te hiciste la prueba?

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el test? no.... no me lo hice

12:49 por q no?

porq estuv hablando con ryta y me dijo q no m preocupara es imposible q pace algo ya tiene q venir un dia d estos no t preocupes q yo t aviso lindo

12:55 sí q me preocupo, cómo no me voy a preocupar… ya pasaron varios días vos te lo estás tomando muy tranquila me parece

245


con ryta nos conocemos desde chicas,nos vino juntas y tdo

12:55 no me importa Ryta vos me dijiste q te cuidabas, q el médico te hacía tomar pastillas por lo q te pasó

bueno t menti,no ay pastillas qeria sentirte bien,sin nada y averigue cual eran mis dias para acer eso

12:57 días? a qué te referis?

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a los dias q no pued pasar nada,tonto

12:59 ah, esos entonces me dejo de preocupar?

q se yo = entre vos y yo nada malo pued pasar

ryta me enseùo una manera d saber cuales son esos dias y aprovecharlos a ella se lo dijo una amiga es conosido creo se llama metodo de ojin craus‌ o algo aci

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Igual es un kilombo!jajja ay q aser calculos y cuentas jajj… es un vardo t re perds! jjajaa ay lagunas mujeres q lo usan para qedar envarsadas tb calculan al rebes y listo! Se puedn usar para las 2 cosas mira jjajaa ai t paso algo q encontre recin “Cuando se trata de evitar el embarazo, usándose perfectamente, este método tiene un nivel de efectividad de en torno al 80% (tasa de error del 2025% según los estudios).[1] [2] [3] [4]” Ventajas No tiene efectos colaterales físicos y no tiene costos monetarios. Desventajas Es ineficaz en prevenir el VIH. Eficacia No es efectivo.

13:10 uhhh

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XXVII LOS LENTOS

Vale 17/12/13 02:14 Hola mi amor, disculpame q sea tan molesta, pero es que no te puedo sacar de mi cabeza, cada dia que pasa te extra単o mas. es como si te necesitara mucho. Vale 17/12/13 02:14 Te quiero mucho, no , no te quiero TE AMO!

***

249


Tngo fotis para you! Jaj 321316_4852313980257_1996848716_n hu perdon, esa no era

10:10 de quiĂŠn es eso?

san clemnte

10:13 eh?

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San clemente del TUYO

13:17 mĂ­o? no, no puede ser

es la saq en el otel

13:21 en que momento?

cuando estabs acstado

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Serrrrrr‌. estas?

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XXVIII MESA DULCE

Desde hace algunos días me obsesiona la idea de transcribir los mensajes. Y no es extraño que pase lo mismo en los repetidos intentos y esfuerzos que hago por escribir. La pereza, de la que siempre fui víctima –no así usted; que por el hecho simple de haber llegado hasta este punto de la cosa, parece ajeno a ella, a cualquier forma de pereza y desgano–, se une ahora con el miedo y la necesidad de no volver al tema, de dejarlo ahí quietito, tranquilo. Todo colabora al paso de los días sin que escriba siquiera un párrafo, sin transcribir los archivos ni seleccionar los diálogos del grueso de la conversación que asciende a las 120 páginas aproximadamente; y el hecho de no hacerlo me altera, necesito meter las manos en el barro mal 253


que me pese, y salir limpio, o al menos intentarlo. Sacar los brazos rápido con un movimiento súbito para no terminar por meterme al punto de hundir la cabeza de lleno. Así se va contando, de obsesión en obsesión avanza lo dicho. Soporto, intento soportar hasta que no puedo más y, generalmente en el trabajo porque ahí estoy acompañado y me siento mucho más seguro de hacerlo, por fin largo todo lo que se viene acumulando de días, semanas, meses inclusive. Y la elección de escribir, revisar y seleccionar los archivos en el contexto de la oficina, no responde únicamente a la variable de la companía. Es eso, por un lado, indudablemente; por otro, la protección de mi casa, de mi habitación, del lugar donde duermo, donde vivo. La protección de mi espacio contra posibles energías que puedan colarse al momento de escribir; al momento de generar el puente necesario con el pasado. Si algo pasa, allí se queda, sin mayores inconvenientes. Todo, siempre y cuando procure sacar rápido los brazos. De lo contrario, poco importa el lugar en donde lo haga; lo llevaré conmigo si es que dejo la cabeza hundida más de la cuenta, si dejo que el trabajo me lleve al punto de hundirme de cabeza. 254


Hoy transcribí todo. Llegué a ese punto del que hablaba, en que ya no soporto más, y he aquí los mensajes: sin una coma de más ni de menos, sin un espacio recreado; soy del todo fiel a la hora de los archivos, los documentos. Son trasladados al papel con total rigor y celeridad. Así fue hoy. Debía hacerlo de una vez por todas, pasar al papel la totalidad de los mensajes; por más que la oficina se hallara completa, con mi superior enfrente pidiendo de vez en cuando alguna cosa. Y para mi sorpresa, por primera vez me alegran las interrupciones, me rescata el hecho de volver al trabajo de oficina que siempre detesté minuciosamente; de esa forma encuentro un escape, o al menos un respiro momentáneo a las puñaladas consecutivas que me ocasiona la lectura de cada uno de los mensajes. Y es de verdad doloroso. Al abrir cada mensaje es como si me abriera la herida ya cicatrizada hace algún tiempo. Leerlos, de a uno por vez, y sobre todo los últimos, se siente como un intento bien logrado de escarbar, de ir cortando uno a uno los puntos que con el tiempo hicieron sutura en la piel, reventarlos, y la herida que sangra nuevamente, se abre como las fauces de una bestia que escupe sangre por la boca. 255


Así, en el día de hoy, contesté con repentino interés y agrado a las consultas de mi superior; en ellas vi el germen de una tregua del todo anhelada. Notación / intervalo

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XXIX COTILLĂ“N

Vale

18/12/13 00:28 Hola vida, como estas? Si keres pods cntstar o no! Te kiero demasiado perdo x ser tan pesada, dcime si stoy asi! Vale 18/12/13 00:57 Bsotes mi amor mi Amor q descances bien! Y te extraĂąo! Te amo! Aunq Vale 18/12/13 00:57 vs no sientas lo mismo!

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Vale 18/12/13 01:15 jajajaja, tnes razon los sentimientos no los podems medir , bsos eno Vale 18/12/13 01:25 rmes, TE AMO! Vale 18/12/13 10:21 Buen día mi amor , te queria decir que cada día que pasa te pienso m Vale 18/12/13 10:31 ás y te amo más, no hay un día en q me levant a la mañana y no te p Vale 18/12/13 10:31 iense, te necesito y te

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extra帽o un mont贸n! ME ENAMORE DE VOS, TE AM Vale 18/12/13 10:31 O MI CORAZON! Besos enormes!

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XXX CARNAVAL CARIOCA

hola mi vida!

20:15 justo te estaba por escribir!! como estรกs??

Sisis

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20:17 me encantaron tus mensajes!

:D

20:17 no sabĂ­a si responder

sta bien

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20:17 por las dudas

sta bien!

20:18 no se bien cuando lo tenĂŠs vos y cuando no

lo q te tengo q dcir esq stoy en problemas en mi ksa yo stoy en problemas

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20:18 por q?

cn mis papas

20:18 q paso?

es largo de explicar y stoy corta de time! me voy a ir de mi ksa

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20:19 a donde?

y voy a desactivar este face noc pero me voy

20:19 por q lo desactivas? q pas贸?

paso algo feo

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y mi papa me peg贸 y weno igual yo te voy a avisando

20:21 contame es por lo del asunto que sabes?

stoy corta de tiempo lo siento mii amor!

20:22 por q est谩s corta de tiempo? no hagas nada sin hablar bien con tus viejos

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ya lo tngo decidido ma単ana me voy de mi ksa !

20:24 y a donde vas a ir?

Nocc tnes algun lugar dond pueda estar unos dias? y pods vnir a visitarme cuando qieras o qdarte conmigo directament es x unos dias nada +

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20:25 eh no, no tengo contame tonta aunque sea así nomás para q te conectaste?

para hacer cosas en el face saqué todooo mañana kpaz te llame y te digo si me fui o no capaz n lo aga x mi mamá

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20:30 no lo hagas hablรก con tu vieja

lo voy hacer bueno me tngo q ir

20:30 q sacaste del face?

tda las fotos

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20:31 por q? no entiendo nada

es complicado mira t paso mi contrase単a para q entres ahora si podes y sacameee todo todo no djes nda es SERJITOTEKIEROMUXO cn minusculas x favor t lo pido me tngo q ir TE AMO MI AMOR BESITOSSS!!

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20:33 no puedo hacer nada si no se q es lo q pasa decime, por favor

dspues te llamoo x favor hacelo o sino me me kgo la vida me tngo q ir bsoosss TE AMO NO LO OLVIDES

20:33 por q tan apurada?

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xq stoy complikda me tngo q ir bsooooooss chau me fui!

20:34 besos me dejĂĄs preocupado. es por lo del mes? decime y andate, si querĂŠs pero decime algo porfa

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XXXI EL TĂ?O BORRACHO

Vale 20/12/13 20:21 Hola serjio aceptame en face! Vale 20/12/13 20:22 Para podes chatear con vos si estas disponible!

***

20:24 hola!

272


como est谩s? q pas贸 al final?

Vale 20/12/13 20:40 En donde estas porque no puedo chatear porque los tengo a mis viejo

***

Vale 20/12/13 20:49 s encima y en 20 min se van a la provincia y voy a quedar sola! Vale 20/12/13 20:49 Estoy por quedarme sola podemos vernos? Vos dnd stas?

273


20:55 ando en cordoba me estoy yendo vuelvo en un rato beso!

*** Vale 20/12/13 21:05 Stoy esperando q me cntestes lindo!!

***

olis bebe no me cntstast el mensaje!

274


21:46 q pasó? me quedé sin credit

no nda stá tdo bien, stas en bs as

21:50 no me contás?

tuve un problema xq un chico del cole me mando un whatsapp y en la compu mi papá encontró una foto mia en la q yo staba arriba de una silla, te acordas de esa?

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21:55 no y por q se enojó tanto tu viejo? decime la verdad q no hay drama

me saqué una foto sentada en la silla dsnuda cn la vagina mirando hacia la camara y se la mandé y mi papá la encontró el whatsapp de denis a las tre y media d la mañna!

YYyyyy?

22:33 y qué que hay de lo otro?

276


que otro?

22:35 no te hagas mas la boluda

eh

22:36 como quedo el asunto del embarazo

ah eso

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22:38 eso que

eso te da miedo?

22:39 miedo? miedo no, pero seria una cagada

cagada? a un bb con tu carucha llamas cagada? pero no t ataqs no psa nada

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22:40 que no pasa?

nada, lindo. todavia no hice el eva me das cosita

22:50 ahh y como esta todo ahora? lo q me contabas antes…

bien, porque mi papá creé q stabams jugando cn ryta y lo de denis lo llamó x telefomo y denis lo negó todo, asi q hasta ahí la pude pilotear un poco

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22:53 ahh como la pasaste ayer?

bien stuvo copadisimo, stuvimos en lo de mi hermano, fue medio boludo o algo cursi, pero bien creo

22:57 por q borraste todo?

por si mis papas lo descubrian!

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lo q pasa es que mi papá descubre todo lo que ago, no se cmo lo hac capaz es la edad o tiene un lazo muy fuert cnmigo y me termina dscubriendo, la ultima vez q me metí cn un tipo fue en junio y tenia 35 años, papá tiene cntacto en la CIDE y tribunales , yo no te lo conté pero este muchacho stá preso por estrupo

pero ahora stá tdo bien, lo unico q necesito es verte para volver a gritar cmo la ultima vez q me penetrabas lindo

olaaaaaaaaaaaaaaa esta .... puedo hablar x telefono cn YYyyyy?

281


23:13 bancame un toque q un amigo necesita la compu

dale te spero xq estoy sola y mis viejos se fueron a la provincia!

23:28 volvĂ­ disculpĂĄ

23:32 che vale, con lo que me acabas de contar sumado a que me consiguieron un trabajo en cordoba y estoy viendo de quedarme, la verdad no tiene mucho sentido que sigamos hablando

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quizas en unos a単os la vida nos vuelva a crusar un beso grande! q seas feliz ...

283


XXXII TACO ROTO

No sé si alguna vez les pasó a ustedes. Supongo que sí, creo que a todos nos pasa de alguna manera. Y no hablo de esto que cuento acá y suelto así, no. Es difícil que les haya pasado algo como lo que me pasó a mí por desgracia, imposible correr esa mala suerte. Me refiero a esas voces que hablan desde algún lugar de nosotros, o de afuera, como sea pero hablan igual y dicen. Hay una de ellas que en este momento está diciendo y hablando, y me dice algo así como… “Si no lo escribís te va a quedar adentro, no ganas nada con olvidarlo; por otra parte es im284


posible que lo olvides, va a estar ahí, hiriéndote desde lo más profundo”. Y tiene razón esa voz que me habla desde algún lado, pero al mismo tiempo no la tengo. Escribirlo es morir, lo sé, es entrar en ese orden de oscuridades, sumergirme de cuerpo entero en ellas; tal vez sea volver a prender la llama, destapar el avispero como dicen, y que las avispas salgan y me piquen, me dejen ronchas incurables, eso me da pánico, reactivar algo que está aparentemente dormido, traerlo de vuelta. Me pica por dentro esa duda: qué habría pasado si no hubiera tenido el tupé de empezar a escribir… quizas desperté al monstruo con la atención, y tengo miedo de despertarlo otra vez, pero debería vencer ese pánico que me endurece y tiesa. Ni siquiera estoy seguro de lo que quiero decir, si es que de algo estoy seguro en esta vida. Sentarme en la silla, abrir la máquina, encenderla, liberarme, intentar librarme aunque corra el riesgo de quedar esclavo, cautivo del terror, sumido en depresiones. Cauterizar la herida, descargar, poner todo sobre blanco. Sé que no van a haber certezas ni conclusiones, sin siquiera pensarlo sé que va a ser así. Puede que ésa sea mi única seguridad, solo interrogantes, una penosa 285


experiencia escupida con tinta sobre el papel. Si no lo escribo me muero, muerto no puedo escribir, temo morir al escribirlo. Pero vale la pena correr el riesgo, tengo que hacerlo cuidando la vida a cada instante, a cada palabra, cada letra. Aunque lo más peligroso son los espacios, estos espacios que dejo, que se dejan donde termino de escribir una palabra y empiezo la otra, otra que comienza con una letra distinta o tal vez la misma, esos espacios son de temer, debería cuidar que nada se cuele por ellos; son intersticios, blancos por donde puede pasar la energía, entrometerse, invadir el espacio, colarse a este lado del papel. Pueden desdoblarse maléficamente, tengo que hacer guardia en los espacios, observarlos dejando las palabras en un segundo plano, borrosas, leer entre ellos, ver las figuras que suscitan, los laberintos que recorren y dibujan a un tiempo, ser responsable de vigilarlos mientras los creo. Puede meterse una pestaña, camuflada en el símbolo de barra invertida o en el de admiración que cierra o el que abre, y es ahí mi deber detectarla. Estar atento, lo suficiente como para verla y que no se confunda con tinta seca. Intermezzo 286


XXXIII MANTEADA

Vale 21/12/13 08:11 Contestame mi amor soy yo! Vale 21/12/13 08:18 Mi osito cntstam el cel q necesito hablar cn vs!

Vale

***

21/12/13 15:14 Serjio si queres safar de esta situaci贸n atendeme el celular asi te

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Vale 21/12/13 15:14 voy advirtiendo lo que sta pasando ak y lo q kiere hacer mi papá! E Vale 21/12/13 15:14 s mi ultimo intento, trato de ayudarte y no per judicarte! Te kiero! Vale 21/12/13 15:14

*** Toma el inalámbrico de la cocina y enseguida va al baño. Por suerte nadie lo ve agarrando el teléfono; sus padres hablan animadamente sobre el futuro de Gina como contadora. “Mirá que yo le digo, eh… Pero no hay caso”, dice su madre a Gina. “Ya me resigné a que siga una carrera y tenga un título. Me resigné a tener un hijo profesional… Yo sé que vos 288


también se lo dijiste… va, todo el mundo se lo dice, hasta tu papá nos hizo el inmenso favor de hablar con él, todos… con Héctor se lo dijimos siempre”. “Seguro tengo la cara trastocada”, pensó su hijo desde el baño. “Qué lástima, no hay un espejo acá para verme”. Saca el inalámbrico del bolsillo izquierdo del pantalón, las manos le tiemblan un poco; el teléfono se le resbala de los dedos accidentalmente y cae. Sergio cierra los ojos en el acto. Al abrirlos, lo ve sobre un fondo blanco, seco e intacto, inmóvil sobre la tapa del inodoro, que por suerte está ahí, baja. Piensa rápidamente “qué hubiese hecho si el otro teléfono y no el suyo hubiera corrido esa suerte”; el que hace un momento nada más ha robado de la cocina. Agarra enseguida el celular, ese mismo que lo había estado acechando fuertemente durante los últimos días, aquel que de madrugada lo despierta… y ya no con su habitual sonido de despertador que programa todas las noches, previendo siempre unos treinta o a veces cuarenta minutos de llegada tarde que 289


le termina ganando, en un acto de osadía, a las nueve horas diarias de padecimientos que vive durante los cinco días hábiles de la semana. Irrumpe en sus sueños. Ni siquiera ese mundo ha quedado para él. Despierta entonces de un sobresalto, con una llamada de ella y mensajes todos que le estuvo mandando durante la noche. Afortunadamente, el sonido de los mensajes que puso –ya no recuerda cuándo siquiera– no es lo suficientemente alto como para despertarlo. Aunque en algún punto sospecha que quizás en un plano inconsciente los perciba, y que eso le modifique el cariz de los sueño… “más vale no sea así, ojalá esté equivocado…” Vive el peor de los calvarios. Y para colmo el trabajo… Hoy no comió en el horario de almuerzo; dedicó esa hora a borrar todo de su cuenta: conversaciones, amigos, publicaciones, etiquetas. Por eso, la cena con Gina fue su desayuno. Comió abundante frente a la perplejidad de los padres, que no habían visto a su hijo comer así en años. Si al menos dejaran de llamarlo… podría estar un poco más tranquilo; la sobremesa y 290


el tiempo traerían el olvido y se sentiría mejor así, olvidando. Pero cada llamada, cada mensaje es un puñal. Cada segundo que pasa, mientras suena el agudo-insoportable timbre de llamada, es un corte en la piel. Al cabo de medio minuto en que no deja de sonar y sonar el teléfono –que vibra también sobre la tapa del hinodoro, porque él lo puso así para que no lo escuche nadie desde la mesa del comedor, y porque estos teléfonos vibran, así los hicieron– los tajos aumentan, se unen unos con otros; llevan, lo que al principio era un pequeño corte, al límite y ya dejan de ser cortes aislados, son ahora una gran herida sangrante. Y vuelve a llamar otra vez, insiste en eso, y cae un mensaje, otro, y otro más. No deja tiempo a que la herida cierre, a que cicatrice. Cuando empieza a suturar ya está vibrando de nuevo. Y duele su sonido, siempre duele. Rasga la piel sin consideraciones. Afilado, se posa en la cisura y presiona, corriendo en todo su sentido; la piel cede poco a poco, con el peso de toda esa carga que trae encima. Pulsa tres veces seguidas el número ocho correspondiente a las letras T, U y V. Busca 291


entonces entre la agenda de las V, y encuentra lo que estaba buscando. Vale; con solo ver su nombre y el número abajo, le vuelve el temblor a las manos, se estremece en la soledad del baño. Sin dejar de moverse transcribe el número de un teléfono a otro. Mientras marca una a una las teclas, mirando alternadamente el teléfono más chico para saber finalmente qué número sigue al 3 que acaba de sumar a la cifra, los temblores aumentan y se complica aún más el hecho simple que es marcar una serie dada de dígitos. El tono empieza a sonar; eso que para él no es más que un pulso, como el latido de un corazón, como el latido de su corazón y que para ella, para quien sea que esté del otro lado será una siemple llamada solamente, el sonido de un celular sonando, sin que rasgue, sin que duela, como a él bien le rasgan la piel los llamados, porque el verdugo está tranquilo, sabe lo que hace, no lo acecha un llamado ni mucho menos. Y no puede creer lo que está haciendo; otra vez la intriga de saber. ¿Será eso lo que mueve… lo que le lleva a hacer las 292


cosas que hace y sigue haciendo irremediablemente? Corta inesperadamente, “corté” exclama por dentro, extrañado de lo que acaba de hacer; detener esa repetición de tonos como latidos, y al detenerla también los suyos se frenan. Queda inmóvil, de pie junto al inodoro. Algo más tranquilo –si se puede llamar tranquilo a lo que en verdad debiera decirse menos desesperado– por haberle puesto fin a esa serie ininterrumpida de tonos que culminarían en la voz, en esa voz hipnótica, inocente, aparentemente inocente y bella y suave, que es la voz tan linda de Valeria. En eso sale del baño, deja el teléfono inalámbrico en la cocina reclinado sobre la fuente que sirve de carga; todo sin que nadie lo vea, otra vez, con suerte en eso al menos. Llegando a la escalera, el teléfono vibra junto a su pierna. Lo toma con dificultad entre las manos. Es ella, quién más podía ser… El teléfono sigue vibrando y Sergio está como aletargado, mirando hacia un punto indefinido, completamente bloqueado. Tal vez la misma clase de impulso que le hizo cortar sin motivo 293


hace solo un momento, ahora lo lleve a atender de la misma forma: sin razones. Todos se ríen desde la mesa, por algún comentario que Sergio ignora. Cree que fue su padre quien dijo algo, pero no está seguro. Se hecha escalera arriba sin dar respuesta a su madre que lo llama insistentemente. El dedo gordo de la mano derecha, que por costumbre se encarga de marcar esa teclita verde en el vértice superior izquierdo del teléfono, se mueve solo y aprieta y marca, presiona sin la más mínima orden. La tecla se hunde bajo la presión del pulgar que empuja. Y a esa altura el teléfono ya está junto a su oído. Escucha ruidos de interferencia y la voz, de pronto esa voz que le recuerda un poco como era después de tanto tiempo de no oírla. Dice “hola”, y él responde igual. Le pregunta cómo está, y la conversación enseguida toma los carriles habituales, salvo por ese ruidito insistente que molesta un poco y se repite como un pulso, de fondo. No tan de fondo, porque es agudo y se distingue con facilidad; le cuesta dejar de oírlo. Intenta, sin demasiado éxito, pasar el sonido a un segundo plano para 294


escucharla mejor. –No te escucho bien, hay como un tono que suena de fondo… –Ah, yo escucho excelente. Te quería decir qu… –Ahí parece que paró… ah no, sigue sonando, volvió otra vez. Bueno decime… no importa. –Quería decirte que hablé con mis papás, les conté; ya lo saben todo. Les dije que yo te elijo a vos y me entendieron. Así que no hay problema por eso ahora. Ya no son un estorbo para lo nuestro. –¿En serio? –Sí. No lo podía creer, pero por suerte lo aceptaron. –El tema Vale, es lo que te decía el otro día… Me ofrecieron un trabajo acá y seguro me quede… sumado a lo que me contaste el otro día de tu papá… conviene que no hablemos más, al menos por ahora. Por el bien de los dos lo digo. No quiero que tus viejos se enojen con vos, tampoco conmigo. Más vale cuando vuelva, quizás, quien te dice… en una de esas se da y podemos estar mucho más 295


tranquilos, sin que tus papás estén tan pendientes… que están así con razón, encima. –Pero ya te dije que ellos no son un problema ahora. –… Igual, Vale… yo prefiero que lo dejemos acá. Es lo mejor para los dos. A mí me cuesta también, pero es así. –Te estoy diciendo que ellos lo aceptan. ¡¿No me escuchás?! –Sí, te escuché; claro que te escucho. Pero igual linda, entendé… son así la cosas. Su madre lo sigue llamando desde abajo. –La cosa es que estoy embarazada. Y es tuyo… de nadie más. Hacéte cargo ahora, boludo. –¡¿Embarazada?! Pero si yo te preg… Antes de que pueda terminar, escuchó un crujido al otro lado, seguido por un manoseo indefinible que se traducía sólo por sonidos ahogados, como de golpeteos sobre el teléfono. –Escuchame, soy el papá de Flor. Te voy a hacer una pregunta y quiero que me contestes la verdad… Resulta increíble todo lo que puede pasar en un instante, todo lo que pasa de hecho entre una 296


pregunta y su exigida respuesta; lapsos que bien pueden percibirse interminables y, sin embargo, haciendo caso omiso al reloj duran apenas dos o tres segundos. En ese intervalo tan breve como eterno, supe que la conversación estaba siendo grabada, que el sonido insistente respondía a eso mismo, que debía de cuidar bien mis palabras hasta en el más mínimo de los detalles, que los labios me habían comenzado a temblar con más intensidad de lo que lo habían hecho hasta ese momento, que también eso debía controlar; el temblor que rápidamente ganaba otros músculos y, sin advertirlo del todo, se propagaba hacia nuevos confines de mi cuerpo.Y para colmo mamá con su voz aguda, su voz irritable y la insisencia en que baje al comedor. El silencio de allá abajo. La voz grave del viejo, no puede ser otro más que él, rompe el silencio y le dice a Gina que se esté tranquila, que seguro fui al baño de arriba, que suelo hacer eso cuando estoy comeindo con ellos, que ya bajo y no tome a mal mi tardanza. –¿Tuviste relaciones con ella? –No.

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¡Eso es!, debía negarlo. Estaba siendo grabado. No podía darle herramientas así de fácil; no me podía dar el lujo de la sinceridad. –Ah, ¿no? Ella me contó todo. Primero fue en un domicilio particular, la llevaste a tu casa encima, boludo. La segunda en un hotel alojamiento. Estás en problemas, flaco. Te di la oportunidad de que digas la verdad y seguís mintiendo. Cuando Flopi me contó, dije: “Bueno, llamálo a ver que te dice…”. Ya me di cuenta la clase de tipo que sos. Te gusta estar con nenas y después dejarlas… ¿Vos sabés que Flor es menor de edad? Cómo no saberlo… –Te voy a hacer un juicio por estupro y corrupción de menores. No sé si te voy a poder meter en cana pero te voy a cagar la vida. No te van a quedar más ganas de joder… En realidad, estoy en la duda de denunciarte o meterte un tiro directamente. Y yo no me voy a manchar las manos, no me voy a meter en quilombos por una basura como vos. En ese 298


caso mando a alguien para que te lo meta. Vamos a hacer una cosa… ahora voy a ir para tu casa, así hablamos un poco con tus papás y los pongo al tanto de la situación… te paso mi teléfono personal, anotá… Iba y venía: del baño a la pieza, de la pieza al lavadero. Entro, salgo, camino rápido sin ir a ningún lugar. Solo camino con todo el cuerpo rígido, con la cara transfigurada seguramente mientras escucho esa voz desconocida y siguo caminando con el teléfono pegado a la oreja. Estuve a punto de agarrar algo para anotar, de ir a buscarlo yo mismo. Al fin tendría rumbo directo, un lugar específico adonde ir, un destino que concretar. Pero algo adentro mío (el dedo pulgar otra vez) despierta, reacciona contra lo que era una orden; me digo a mí mismo: “¿qué es lo que tengo que anotar?”. –Mirá, estoy ocupado en este momento, la verdad que no puedo… Un repentino brote de conciencia se apodera del momento y el dedo, siempre el dedo, se mueve involuntario, aprieta, baja el botón verde a su placer y corta así, sin más, ese amargor, 299


la llamada. –Hola… ¡Hola! (Pfts) Cómo quisiera que solo con eso… con cortar simplemente el teléfono bastara, y se termine de una vez y para siempre el miedo que siente, que sigue sintiendo a pesar del triunfo parcial de haber cortado. Pero no, empieza a intuir que esto es solo el comienzo. Baja finalmente, con los brazos que le cuelgan a los lados del cuerpo. La típica pregunta de su madre, la más que típica mirada de su padre; los ojos entrecerrados que lo miran y esa sonrisa leve que solo él nota. “¿Dónde estabas? ¿No escuchaste que te llamábamos?”. Respuesta predecible: “En el baño, estaba en el baño”. –Y…, no es para menos. Con todo lo que comiste… Su novia lo mira sin expresión en la cara. Él, con la vista baja, observa el plato, los cubiertos, la mesa; restos de comida en las fuentes. Ya no tiene hambre.

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XXXIV FOTO GRUPAL

Y sólo un recuerdo me viene a la mente, un recuerdo que no se explica y aparece precisamente porque tengo cierta seguridad de haber hecho bien las cosas. Se me hace imposible pensar en esta posibilidad que ella me escupe así, sin más, en plena cara. Todo fue hecho con sumo cuidado. Aunque siempre hay lugar para las excepciones, por supuesto. Los accidentes ocurren y no hay explicaciones que valgan. Más vale me tranquilizo un poco. Pero de nada sirve el intento, porque aquel recuerdo del que hablaba en un principio viene otra vez y me atrapa tan pronto… Y es Valeria yendo al baño, apenas entran en la habitación del 301


hotel. Estuvo ahí durante algún rato, mientras yo recorría el cuarto imaginando posibles innovaciones de cosas que nunca había hecho en lugares donde nunca había estado. Salió por fin y tras la puerta abierta pude ver su ropa tirada en el suelo del baño. Y ése, tal vez ése sea el primer motivo de la recurrencia de esta imagen que me viene así. Vuelve, se repite porque no encuentra sentido. Por qué había ido al baño a desvestirse… a qué respondía eso que bien podía dar en llamarse un ejercicio de “modestia”, que por otro lado, nunca había tenido hasta ese momento. Y menos que menos en ese plano en el que estábamos, en el orden de lo carnal. A qué se debía esa diferencia… cuando en casa siempre juntos nos desvestimos uno al otro, uno frente al otro, colaborando en sacar lo que está sobrando; con el apuro y los nervios típicos del caso, con el peso de ser la primera vez entre nosotros, sin saber nada del que está ahí, queriendo conocer por fin a quien se tiene en frente, ayudando al despojo de lo inservible, de lo que estorba sin que ninguno de los dos se caiga ni se enganche, sin que nada logre desviar la energía, la inercia de esos dos cuerpos que desean ansiosamente unirse, acoplarse en uno, fundirse y 302


renacer. No, nada de “renacer”, nada de eso. “Acoplarse en uno, fundierse” y punto final. Y antes de irnos del hotel, otra vez, se cambió adentro del baño. Tardó algo más que la primera vez. Yo esperaba sentado sobre la cama deshecha, porque ya había concluido mi trabajo de preparación para salir a la calle en condiciones que pueden decirse normales. Recorrí la habitación igual que antes, con la diferencia de que ésta vez ya no había proyecciones, ni el menor deseo de exploración de nuevas posibilidades, no; estaba saciado, solo quería irme, que ella salga de una vez y marcharnos por fin de ese hotelucho de Almagro. Y si hay más fotos… Si en lugar de fotos son, para ella y su familia, únicamente evidencia… como si fuera poca cosa. Cuando dejó su teléfono en la mesa de luz junto a la cama… ¿lo habrá dejado grabando? ¿Grabó lo que decíamos? Los suspiros, los silencios, los movimientos nuestros dentro de la habitación… Con el agravante de que ella es habladora y yo respondo por respeto, y porque me gusta la respuesta. También soy hablador a fin de cuentas. Por algo acá estamos. 303


Hay veces que la pasión no deja lugar a otra cosa. Pero en nuestro caso sí dejaba lugar a las palabras. A lo que se dice, un poco inconsciente, llevado por ese trance de los sentidos y que ya no recuerdo. ¿Qué habré dicho? Tendrán fotos de afuera además de las de adentro… ¿Habrán mandado a alguien… quizá una amiga; Rita tal vez, o un familiar para que nos fotografíe entrando al Hotel? “¿Hubo algún derrame accidental de líquidos contaminantes?”. Más vale le doy un freno a las preguntas sin respuesta, mejor me calmo un poco, o al menos lo intento.

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XXXV SOUVENIR

Sorprendido de su suerte, se ve adentro. El alivio dura poco, porque apenas se establece es reemplazado por otro tipo de hostigamiento. Trata de recordar la posición exacta en que estaba todo. Al parecer, no hay nada fuera de su lugar. Avanza por la casa como un extraño: cuidando cada paso, en silencio, agotando cada sonido al mínimo para tener plena escucha. Camina hacia la escalera, se para en el primer escalón y mira arriba tomado del barandal metálico. Sube un pie pero no se anima a seguir. Espera agazapado sin hacer el menor ruido, atento a lo que pasa en la planta alta. Nada, solo silencio, interrumpido ocasionalmente por algún auto que pasa allá afuera. 305


En ese momento se inquieta, “que el sonido de aquel motor enmudezca, que el auto pase de una vez por todas y se aleje enseguida”. Toma coraje, infla el pecho y se lanza escalera arriba. Los pasos resuenan con intencionado eco por los ambientes en los que irrumpe de golpe, sin ningún tipo de titubeo, porque tan pronto y para su sorpresa, otra vez está embebido en ese colérico impulso que lo lleva y trae sin cuidado, sin miedos ni resguardos como hace unos minutos en la calle. Registra cada rincón de la casa: mira bajo las camas, adentro de los armarios, tras las mamparas de las duchas. Y ya debe estar entrando en delirio –quizá sea la adrenalina que siente arremolinada en el pecho y las manos, en las piernas y los dedos–, porque se dedico a registrar lugares insólitos donde caben apenas unas toallas dobladas, unos tarros de talco, cremas y cosas así de ese estilo. Pero no hay nada que hacer, es como si el cuerpo no le perteneciera del todo. Cada movimiento es exagerado al máximo, con una especie de intención que no viene del todo de él. Y sus pasos caen con todo el peso del cuerpo, retumban sobre los 306


mosaicos del piso, lo hacen temblar; pareciera como si dijeran: “Acá estoy, vengan por mí si es que hay alguien en ésta casa… los estoy esperando, no pienso escapar, voy a recibir lo que tengan para darme, pero primero yo les voy a dar algo, a ver si les gusta”. Y el puño cerrado, apretándolo fuerte. Pero a medida que avanza sobre la casa, se va convenciendo de que no hay nadie más allá de su cuerpo y la furia de la cual es víctima, que está solo. Nada de lo que venía imaginando, de las posibles reacciones ante los posibles embates, todo se ha diluido, está disuelto, la euforia cae lentamente y con ese tiempo de caída, ingrávido casi, se despliega el puño, se abre su mano y finalmente se distiende. Cae sobre la cama abatido, porque es acá donde termina la búsqueda, acá en su pieza. Y a pesar del cansancio, de tantas corridas, de estar alerta en todo momento, se levanta despacio aunque lo que más quisiera en el mundo es estar acostado, descansar un poco, tomar una siesta que tanta falta le hace después de noches enteras durmiendo mal, con pesadillas, horas y horas sin poder alejarse de la vigilia. 307


Pero es imposible; sabe que no lograría consiliar el sueño ni unos minutos por más que lo intente. No en ese lugar, en su casa, en esa cama que bien compartió con ella. Tenía que irse ya, abandonar lo antes posible la casa, la cuadra, el barrio. No iba a estar tranquilo mientras esté dentro de ella. Quizás tampoco logre estarlo en otro lado, pero lo mata cada segundo de permanencia ahí. Domicilio que ella conoce. Que por lo tanto ya conocerá su padre, y con él sus vínculos, sus conexiones, ex policías, agentes retirados de la fuerza, penitenciarios, secuestradores, fiscales, jueces, magistrados. Pero… ¿ella conoce realmente el domicilio exacto de ésta casa? Sergio recuerda haberla visto bastante perdida en el colectivo, lo mismo cuando caminaron esas dos cuadras desde la parada. Salieron completamente despeinados, con los ojos chinos por la luz del día que los lastimaba a pesar de las nubes que cubrían el cielo, después de toda una mañana de estar encerrados en la pieza, en la penumbra del cuarto con las cortinas bajas revolcándose entre las sábanas húmedas; ella no sabía que colectivo tomar para volver 308


a su casa. Entonces Sergio la acompañó unas cinco o seis cuadras hasta la avenida. Hacía frío pese a la altura del año en que estaban. El viento movía las ramas de los árboles provocando una lluvia artificial que a más de uno le pareció el comienzo de un fuerte diluvio, siempre inconstante y raleado. La tormenta vino después, Santa Rosa, mientras estaba en el trabajo. Podía ver desde el escritorio la inmensa cortina de agua cayendo en todo su peso, revirada por momentos por los fuertes ventarrones que la azotaban sin darle descanso. Y se asomaba al ventanal. Apoyaba las manos en el vidrio helado, recordando las andanzas de esa mañana con una sensación de vacío en la boca del estómago (no había comido nada en todo el día para no extender más la tardanza que ya de por sí había sido bastante; ése miércoles entró al trabajo en el atípico horario de las tres de la tarde). Y el vacío de estar en ayunas a la vez se llenaba por la alegría que traía encima, tal vez por haber roto la monotonía de los días, la rutinaria serie semanal de siempre. Había un quiebre, una ruptura. O quizás era la sensación victoriosa que en ese 309


momento seguramente seguía viva, la jugada ganadora y triunfal que había concretado esa mañana, espléndida mañana de un día hábil cualquiera. Y entre tanto recuerdo, uno surgía en especial; no sabía bien de dónden ni cómo, pero lo mismo le surgía así, de la nada, y era ella, Valeria mirando su celular en plena esquina de su casa. Toma el teléfono entre las manos… entre sus blancas manos de marfil, y mira en torno como queriendo ubicarse. Marca algunas teclas, le dice a él que es una amiga, otra amiga, Rita no, y que por suerte no es un mensaje del padre ni de la madre. Sergio le cree… por qué debía dudar de eso… pero ahora, ahora es distinto, tiene razones para pensar que no era su amiga, ni siquiera Rita, y que en lugar de eso, anotaba el nombre de la calle, transcribía de los carteles a una nota en su teléfono los nombres de las dos calles que se interceptan a esa altura, ahí donde queda su casa. Organiza en su impaciencia todo lo necesario para estar afuera unos días. Agarra la mochila y la va llenando hasta que no cabe más 310


nada adentro; el cierre llega a juntarse con dificultad y esfuerzo de sus manos y dedos que pugnan por cerrarlo. Vuelve a la planta baja y en la mesa del comedor borra toda evidencia. Conversaciones, una por una. Amigos. Publicaciones, etiquetas, fotos, notificaciones; un breve, o no tan breve, repaso de los últimos dos años de actividad personal. Y se le mueven tantas cosas… resurgen de pronto esas personas olvidadas a fuerza de intentos sistemáticos y otra vez ella, y ella de nuevo, imágenes que vuelven del pasado y basta un mísero segundo para que sean presente y revivan con una vida tan real como la que fue. Pero sigue borrando, eliminando, suprimiendo; en serie, los parciales y los totales. Sacando todo minuciosamente, como sacó hace unos días de la cuenta de Valeria lo poco que quedaba. Se repite la operación, en diferente cuenta, pero se repite. Borrar su pasado. Lo está haciendo, a cada disparo de la tecla izquierda que va cediendo ante la presión insistente del dedo índice sobre su cuerpo liso y negro. La cuenta poco a poco va quedando vacía. “Ojalá pase lo mismo con mi memoria”, piensa. “ Y que todo lo 311


que no debe ser recordado se borre para no volver más” Los registros de sus relaciones humanas van desapareciendo rítmicamente, acompasados por el sutil repiqueteo de la tecla izquierda que sigue bajando y subiendo como un martillo automático. Y puede que todo esto sea un sinsentido. Que se preserve una copia del registro en algo así como la administración central de cuentas. <<Yo sigo igual, más sí>> se frena solo ante algún sonido sospechoso que viene de afuera y enseguida retoma, al comprobar que no era nada. Así, hasta que la cuenta queda vacía. Por último, elimina la cuenta misma. En dos semanas quedará totalmente inhabilitada. Sospecha que en ese lapso de tiempo generan algún tipo de copia de seguridad.

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XXXVI ÚLTIMAS PALABRAS

# Buenos días. Gerardo Rodriguez, le escribe. Quería hacerle unas consultas. #“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

Mi nombre es Estela Martín, representante y asesora legal del estudio. ¿En qué puedo ayudarlo? # Un gusto Estela. Le agradezco mucho el haberme dado respuesta tan prontamente. Dí 313


casualmente con su portal interactivo, por hallarme en búsqueda de información acerca de las consecuencias legales que puede tener un caso en particular. #“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

Con gusto le evacúo toda duda que tenga, en la medida que me sea posible. Recuerde que nos especializamos, particularmente, en todo lo que es asesoría por casos vinculados a violación, abuso, estupro, corrupción de menores, infantes y prescolares. # Sí, estuve leyendo atentamente la página de presentación del estudio. Mi consulta tiene que ver directamente con la especialización que destaca su firma. #“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

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Tanto mejor así. En primer lugar, voy a pedirle las edades y el sexo de los involucrados. # Quince años, mujer. Hombre de veinticuatro #“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

Antes que nada, es mi obligación aclararle que toda información brindada por éste despacho es privada y, por lo tanto, debe tomarse únicamente a modo de referencia y orientación del interesado. Yendo ahora al caso que usted me presenta, debo decirle que, primeramente, no es considerada como “mujer” una niña de la edad que usted refiere. Necesitaría me brinde ahora una referencia respecto al grado de acceso o contacto al que fue sometida la menor. # Fue únicamente en dos ocasiones. Y, en relación al grado de contacto, puedo decirle que fue contacto de tipo sexual. 315


#“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

Por los datos que usted me presenta, este delito cuadraría perfectamente en la carátula de estupro, agravado por reincidencia y alevosía. No es un delito excarcelable, y puede acarrear desde siete a treinta años de prisión, según los detalles legales del caso. El cuadro que acabo de presentarle se puede agravar, en caso de que los querellantes aleguen que la menor fue forzada en su voluntad y violentada. Tanto más se complica la situación del procesado, en cuanto se constate evidencia física de violencia en otras áreas del cuerpo, fuera de los ya implicados órganos sexuales de la víctima. Por otro lado, se acrecientan las penas en caso de haber existido ensañamiento con otros orificios del cuerpo. Es decir, en el caso puntual de que el agresor le haya practicado sexo anal a la menor de edad; o, del mismo modo, en tanto la haya obligado a practicarle una felatio. # Y ¿cómo pueden probarse este tipo de cosas? ¿Qué se considera una prueba concluyente, y qué no? 316


#“Armengol & Asociados” - 10 años defendiendo los derechos del niño

En la actualidad, dado el nivel de avance de la tecnología, más que nada en el campo comunicacional, todo es considerado una prueba concluyente. Desde un archivo de conversaciones, como ésta que mantenemos ahora mismo por ejemplo, hasta el registro de una comunicación telefónica. Y más aún, son tomadas en cuenta hoy día, por los jueces y magistrados del mundo, todo lo vinculado a redes sociales y al La sesión fue cerrada con éxito

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XXXVII DESAYUNO

00:13 hola!!! como estas, rita?

y vos kien sos¿ como saves mi nombre…..

00:19 soy

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kien kien sos? ablรก d una vs hacm s fabor no tngo todo el dia

00:27 Sergio! soy sergio ya esta te lo dije estas contenta ahora??

q crgio? mentira eso no dic tu nombre a part no conosco a ningun crgio

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00:30 segura que no conoces ningun sergio?? lo dudo el nombre de la cuenta es otro porque la cree con seudonimo

con q多

00:31 no puse mi nombre real eso es lo que importa

haaaaaa ya c kien sos!

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00:33 a ver‌ quien?

el amigo d vale

00:34 muy bien!! 10 sobresaliente con estrellitas y todo

ajjaj y q hacsÂż

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00:34 quería preguntarte algo y aunque nunca nos hayamos visto quisiera que me contestes con la verdad

….

00:42 está embarazada Valeria?

00:45 que pasa que no contestas…

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aka stoy mira, no t puedo dcir nada porq si t digo a mi el padre d vale me mata ya estaras al tanto d eso

00:47 ssi decime algo por favor

solo t puedo dcir q t qides y aunq nunxa nos vimos como vos dcis hab lamos algunas veces

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XXXVIII MENSAJES

Entra a su nueva cuenta como cualquier otro día. Escribe el nombre de usuario y la contraseña. La dirección fue abierta en otro destino. Así dice, y le niega a Sergio el acceso; mucho más lo preocupa y persigue. Pero no es nada complicado. Crear una nueva contraseña y listo. Se siente aliviado. Entrando, puede ver a la izquierda, ahí abajo, un cúmulo de lo que parecen ser fotos. Y está seguro de que todavía no puso fotos; un poco por el hecho simple de que hace solo tres días ha creado la cuenta; por otro lado, no lo abandona la angustia ni la repulsión a todo lo técnológico. 324


Estan chicas, no se ven bien. Todas juntas confunden y Sergio las abre inmediatamente seguido de la intriga, como ya se sabe, y un poco también de la urgencia y la pericia. Cómo descubre tantas fotos si él no había puesto ninguna… Hubiese preferido no haberlas abierto, de saber… Fotos de bebés todas. Algunos mutilados. Sin una pierna, sin un brazo. A otros les falta la cabeza directamente, han sido decapitados. Bebés de juguete, rotos. Borra todo. Sigue borrando como antes; como hizo con la cuenta anterior. La que llevaba su nombre real, su nombre de pila y documento. Qué más puede hacer con esas fotos… Sergio empieza a agregar algunos amigos a la nueva cuenta, de a poco se anima y vuelve. A los más entrañables y cercanos; nada de familia, Gina y la recalcada asunción del compromiso. Las borra por ellos y por él mismo. No sea cosa que alguien entre y vea esa colección de fetos. Muchos sacados, seguramente, de páginas dedicadas a gustos de ese tipo… al gore, lo 325


horrendo y mounstruoso. No vaya a entrar ĂŠl nuevamente, y encontrarse otra vez con todo ese espectĂĄculo de sangre, torsos y paĂąales blancos.

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XXXIX REGALOS

Se desviste en la alfombra del baño sin dejar de ver la escalera. A través de la puerta que dejó entornada, la mira y sigue mirando. Y ya está al otro lado de la mampara, del lado de adentro de la bañera. La hoja corrediza siguió la misma suerte que la puerta del baño: las dos abiertas completamente para mirar. El brillo de la baranda metálica, que destella los reflejos del sol allá arriba en la claraboya, y el agua de la ducha que le corre por la cara, se le escurre por todo el cuerpo, moja su pelo, y él sigue mirando, aunque por mirar se moje el suelo y el piso de cerámicos blancos. Se apura, pero el agua está linda y le gusta tanto que quisiera quedarse ahí por toda la eternidad, por los 327


tiempos de los tiempos, y a la vez quiere irse, escapar lo antes posible. No sabe por qué está en la bañadera, qué lo llevó a bañarse. Nunca fue demasiado pulcro y no es una situación que ameritaría empezar a serlo. Puede que esta conducta responda al típico acto de rebelión, que caracteriza a los hijos respescto de sus padres. Al viejo le encanta bañarse, lo hace todos los días a la mañana. Hasta puede incluso llegar a bañarse más de una o dos veces al día; cosa inimaginable en su primogénito. Tal vez necesitaba limpiarse un poco, física, mentalmente, una limpieza íntegra, completa y total. Sacarse de encima todo lo que traía puesto de días. Y mientras se baña, no saca la vista de la escalera; el ruido del agua que cae no le deja escuchar lo que suena allá abajo en el comedor, en el zaguán, un ruido que bien podría ser la puerta de calle abriéndose. Enseguida ve algo que le llama la atención, unos golpes que resuenan, y con cada golpe de esos, más se muestra ese algo que ahora descubre como pelos, y otro golpe más y cae en cuenta que es una cabeza la que trae el pelo encima, y otro 328


golpe que resuena (pero ya no son golpes sino pasos, pasos ahogados sobre los escalones) y ahora unos ojos que lo miran fijo, mientras van subiendo de a poco repletos de furia, sin dejar de mirarlo, suben, y ya ve su nariz, la boca, es él, viene por Sergio, sus hombros, sigue subiendo lentamente por la escalera, lo mira en su desnudez… vaya a saber cuántos otros vienen atrás; puede que venga solo, o con ella, para que mire como lo ahoga en la bañera mientras golpea su cara o la corta con alguno de los utensilios de tortura que trae. Juega con cada parte de su cuerpo y le muestra a su hija, para que vea el sufrimiento en sus ojos, el tormento por el que está pasando. Vale se ríe, alternando con momentos en los que me mira casi compadecida. Lo mira sin expresión. Parece divertirle todo eso, salvo en esos momentos en que está ida. Y ya no sabe si es un sueño o pura imaginación, si está pasando como bien podría pasar, o son solo desvaríos de su mente convulsa. Apura el jabón aunque odia bañarse apurado. Siempre tomó el baño como un momento de relajación, y sobre todo en invierno cuan329


do el agua caliente dilata los vasos internos y uno se pone como una uva arrugada, suave y sedosa; la piel vuelve al estado del nacimiento, la sangre corre a borbotones por las venas, sube y baja, atraviesa el cuerpo en todas las direcciones. El vapor sube y uno está alelado con las rodillas flojas, los párpados caídos, deseando que haya un colchón allá abajo para acostarse en lugar de cerámicos lisos y ya no esa alfombra con agujeros, alfombra de plástico adherente, alfombra que raspa y rasga la espalda en caso de que uno se acueste, en el caso de que lo tiren boca arriba como lo tira ese hombre después de subir la escalera yéndose derecho encima de él, para ahorcalo, aprisionar su cuerpo contra el suelo frío de la ducha y la rodilla y pelarle la cara haciendo tajos profundos. No se enjabonó todo el cuerpo como suele hacer. Esa especie de obsesión que siempre era llegar a sitios imposibles, invisibles –sobre todo cuando le toca el turno a la espalda– para llevar espuma y frotarlos con algún esfuerzo, realizando poses dignas de un contorsionista, para que no quede un sólo rincón 330


del cuerpo sin enjabonar. La prisa venció al hábito, una sensación de peligro desbarató las formas de la rutina. Quedaron huecos sin jabón, espacios de piel desnuda, lugares vacíos y despojados de las blancas ropas que da la espuma. Esas zonas se fueron ampliando con la llegada del agua, las pálidas vestiduras terminaron por caer al frío y resbaladizo suelo de la bañadera. Cierra la llave de la derecha aunque siente el cuerpo resbaloso. La derecha, que ahí es la fría como en todos lados salvo en el club. Sale igual. Se viste, elige enseguida la ropa más cómoda y suelta. Debe estar en condiciones para un posible escape, para correr plenamente sin molestias llegado el caso. Sale de su casa con el pelo mojado, mira para todos lados mientras cierra la puerta de calle. No sabe adonde va, pero a algún lado va a ir. Es urgente que salga del barrio, de las inmediaciones de su casa. La última escala fue el locutorio. Desde ahí estuvo llamando durante esos días, por miedo a que hayan intervenido la línea fija de la casa. Lo mismo con el celular: nada de mensajes, ningún llamado, no los atiende. 331


El hombre le indica la cabina 3. Llama a Pancho… y termina cortando antes de que atienda el contestador. Hace un nuevo intento y es igual. Entonces prueba con el Rengo al primer número: suena el tono, suena, “atendeme Renguito por favor, te necesito más que nunca”, pero corta antes de que baje la ficha y cobre. Al segundo teléfono ahora, a ver qué pasa… “Rengo Laburo” figura en los contactos del celular. –Hable... –Rengo, ¿cómo estás? –Bien acá, en el trabajo… ¿De dónde me estás llamando? –Estoy en un locutorio. ¿Puedo ir a tu casa en un rato, a eso de las siete? –Voy a estar en lo de Germán. –¿No habrá problemas si voy para allá? –No, para nada, véngase nomás. ¿Pasó algo? –Después te cuento bien. Pasáme la dirección por un mensaje. –Dale, hacemos así. Un abrazo. –Otro. Gracias, Rengo. Algo lo llevó a traer la mochila, y en cambio dejó el auto a la vuelta estacionado en la puer332


ta de su casa. Sale con la mochila al hombro. La avenida está colmada de autos, sería fácil dispararle desde la ventanilla de alguno. Imperceptible para él en primera instancia, y lo propio para los posibles testigos. Un auto que pasa a toda velocidad, disparan del interior, le dan en el pecho. ¡Quién lo vio! Nadie, por supuesto. Sigue camino al coche, que lo espera para salir finalmente de la zona crítica en la que se mueve. En cualquier otro lado va a estar mejor. Sube y arranca sin perder tiempo. La mochila hace las veces de copiloto en el asiento de acompañante. Tiene que ser sumamente cuidadoso con el auto de sus padres, pueden matarlo si lo encuentran chocado a su vuelta, esto es: si está vivo para ese entonces… si antes no se le adelantan sus captores. Está oscureciendo y el mensaje del Rengo que no llega. Da vueltas sin sentido ni rumbo. Hace tiempo. Sabe que Germán estaba viviendo por Barracas, así que se perfila para ese lado. Enseguida el silencio se hace insoportable. Estuvo dando vueltas sin poner música. En ningún momento se en333


teró de eso. Tal vez no quizo enterarse. Pone entonces el estéreo del auto para escapar de ese silencio sugerente que siempre sugiere lo mismo desde hace días y es Valeria y el padre, la madre y otra vez Valeria, y Valeria otra vez. Quiere que la música lo saque, lo lleve a la superficie de nuevo para respirar como antes y ya no en ese abismo oscuro, esa fosa negra y honda en la que cae y no deja de caer, y eso parece no tener fondo, es como cuando se busca hacer pie y no hay más que esa caída lánguida, desesperante y aterradora, y uno se pregunta hasta cuándo, hasta cuando más. “Que por lo menos me distraiga la música, vieja compañera. Que una letra capte mi atención y la mantenga”. Y mientras escucha, intenta perderse en las melodías y palabras y tonos, se sorprende pasando frente a la casa de Gina. Gina, que lo dejó, que finalmente no pudo soportar el peso del engaño, como él mismo no lo soportó en el pasado; Gina, tan parecida a fin de cuentas. Tan débil, Gina. Débil como él cuando antes. “No tiene sentido seguir. Mejor la música. Cambiar un foso por otro, qué caso tiene… caer en Gina, en 334


Valeria o atrás es caer igual. Es siempre caer. Mejor la música, mi compañera”.

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XL DESPEDIDA

Suena el celular allá abajo en la guantera. “Gracias Rengo, ¡como esperaba tu mensaje…!”. La casa de Gina queda atrás como ella misma, como el pasado, Valeria, como tanta gente y mujeres y amigos, familia. Y este simple viaje en auto parece ser una metáfora perfecta, bellísima. Todo va quedando atrás indefectiblemente. Ya es de noche, entonces se renuevan los miedos. El sol termina de ocultarse llevándose la claridad, único sustento de Sergio hasta ahora. Se sumerje en lo hondo de la ciudad. El panorama empieza a cambiar. La luz es ahora propiedad de los faroles, y en las calles por las que avanza no hay alumbrados tal parece, o están rotos. No hay nadie. Ni un alma en la calle. Tampoco autos circulando, solo algunos estacionados. Y no hay casas ¡se las llevaron! 336


Todo es fábrica y galpones. Talleres: altos y largos muros sin nada más que inscripciones, pintadas, ni siquiera un dibujo o un mural coloreado o en blanco y negro. Es todo ocre y sepia como estos días lo son. Mira el espejo, desde que salió lo estuvo viendo. Un coche bordó viene atrás. Se mantiene a cierta distancia. Lo sigue a lo largo de seis cuadras por lo menos. Sergio baja la velocidad y se echa a un lado de la calle, con intención de que el coche lo pase por la izquierda y siga su camino adelante. El auto disminuye su marcha y sigue ahí atrás. Las luces delanteras se reflejan en su espejo lateral y le dañan la vista cuando lo mira fijamente. Los baches hacen que anden despacio, saltando sobre el asfalto a cada pozo, en cada loma. En ese andar destartalado el auto bordó traquetea, y con cada sacudida de esas la luz le da de lleno en los ojos, lo termina cegando. Piensa doblar ni bien llegue a la primera esquina. Lo hace de hecho, dobla a la izquierda. A mitad de cuadra voltea la cabeza por encima del asiento, con la esperanza de ver la calle y nada más que la calle; esta vez no usa los espejos 337


misteriosamente. Una bocanada de aire nuevo le inunda los pulmones de alivio al ver que su deseo se va cumpliendo y que allá atrás es solo calle lo que ve, la calle oscura y angosta, la calle solitaria. Pero tan pronto como se alegra, el auto asoma a lo lejos y lentamente dobla en la misma esquina. Se adelanta al punto de chuparse muy cerca del baúl. Lo tiene ahí pegado atrás. Acelera enseguida. Le saca buena distancia y empieza a doblar en algunas calles para perderlo. Pero lo siguen por todos lados. No puede ver con claridad quién maneja ni cuantos ocupantes van adentro, la oscuridad de la noche los ampara, la falta de alumbrado ayuda en mucho a que no pueda verlos. Se pierde entre las calles de un barrio que desconoce. No sabe donde está. Teme meterse en la boca del lobo, aunque… ya está en ella al parecer. Apaga la música. Escucha ahora las frenadas en cada esquina, el chirriar de las ruedas al doblar. Le aterra la idea de entrar por error a una calle sin salida o a un pasaje demasiado angosto que se vaya haciendo cada vez más estrecho a medida que avanza por él, al punto de obligarlo a frenar. Su pie derecho 338


pisa con fuerza el pedal y la velocidad empieza a desbordarlo. No tiene tanta práctica como para andar así, y menos por esas latitudes tan poco conocidas. La inercia lo lleva. Al menos no hay gente en la calle, eso lo ayuda a seguir, aunque realmente no queda otra que seguir, no hay elección ni motivos que valgan, es solo pasar a quinta porque el motor así lo exige desde sus quejas que oye y responde y alivia con la quinta posición entrada en caja. Toma distancia después de pisar un poco más el acelerador. La última velocidad le dió un resto como para eso. Pone el giro a la izquierda y dobla a la derecha. Le salió así, sin pensarlo. Y esa inocente maniobra distractora lo llevó a doblar en una calle de sentido contrario. Atraviesa la calle a contramano, pasa a toda velocidad y dobla nuevamente para retomar el sentido. ¡Los perdió! No puede creerlo pero así es. Mira atrás para convencerse y no cantar victoria antes de tiempo: ya no están increíblemente. *** 339


Apenas llega de Germán, y después de saludarlo a él y al Rengo, se interna en una de las habitaciones de la casa. Toma un libro cualquiera de la pequeña bibloteca que hay sobre una pared de la pieza. Termina de leer el cuento con cierta sensación de tranquilidad, y enseguida vuelve la obsesión a ocupar su lugar perdido.Vuelve para quedarse, porque de nada sirve tener los ojos cansados, de nada ese momento de distancia. Se acuesta por enésima vez sin poder conciliar el sueño. Mientras el Rengo duerme, pone el chip en el teléfono por si sus padres habían querido comunicarse en algún momento. Prende el aparato. Durante un momento la pantalla se mantiene informando: “Sin conexión – Solo emergencias”. Enseguida camba el estado a “Conexión establecida” y ahí empiezan a caer los mensajes… uno a uno van llegando como dagas. ***

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Vale 22/12/13 05:55 Cag贸n de mierda, jugaste con mis sentimiento, cara rota ni si kiera Vale 22/12/13 05:55 tuviste los huevos bien puesto para decirme que todo era pasajero, Vale 22/12/13 05:55 yo te dcia TE KIERO y vs me dcias YO TB!, me vendiste una persona q Vale 22/12/13 05:56 ue no eras, sos un hijo de puta, ni siquieras stas en Cordoba pedaz

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Vale 22/12/13 05:56 o de pelotudo, mi papĂĄ te va a romper el culo pero te lo va a djar b Vale 22/12/13 05:56 ien grand para q aprendas, mi papĂĄ te llamĂł al celular y le negast Vale 22/12/13 05:56 todo tarado, me defraudast muxo serjio nunk pensĂŠ q ivas hacer eso, Vale 22/12/13 05:56 te di la oportunidad d dcir SI ahora cagate estupido, Vale 22/12/13 05:56 Y si hubieras tnido los huevos suficient para no negarle lo nuestro 342


Vale 22/12/13 05:56 a mi papá (q era tan evident xq él scuchó tda nuestra cnversación) Vale 22/12/12 05:57 hubieras podido safar d la situación legal, ya cntactó a la fiscal Vale 22/12/13 05:57 ia para q recuperen los videos dl hotel d dnd me llevast y cmpañera Vale 22/12/13 05:57 s mias cmo tstigo q van a dclar q cnocian nuestra relación, también Vale 22/12/13 05:57

cnoce q el 22 d 343


octubre me llevast a tu ksa para tner relaciones c

Vale 22/12/13 05:57 nmigo y vas a entndr q no se juegan cn ls sentimientos d una chik, Vale 22/12/13 05:57 y yo tngo 14 aĂąos y cumplo ls 15 en febrero y vs 24 y ojala cnserve Vale 22/12/13 05:58 s el msj dic mi papĂĄ q te vata servir muxo, q duermas tranquilo! Vale 22/12/13 05:58 Sorry, me olvidaba, dic mi papĂĄ q te acnseja q cnsults cn un buen a

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Vale 22/12/13 05:58 bogado penalista, sobre corrupcioo d menores y estrupo, te lo dfino Vale 22/12/13 05:58 : “relaciones sexuales cn menores�.

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XLI LIBRO DE NOTAS

A la noche cenan los tres juntos como siempre, Sergio y sus padres. Él se ocupa de levantar la mesa; mejor dicho, se ocupa de levantar los cubiertos, platos y vasos. También de regresar la comida a la heladera; la cena contenída en diversas fuentes y bandejas. Las botellas y jarras siguieron ese mismo camino, hasta quedar protegidas por el frío del refrigerador. Por último, y ahora sí, le pasa un trapo a la mesa sin levantarla ni nada de eso. Los padres se van a su pieza y Sergio queda sentado en la mesa solo, en silencio. Queda sentado en una de las tres sillas que estaban siempre en el comedor, los brazos sí apoyados en la mesa, con la mirada perdida y cabizbajo. 346


En eso suena el teléfono de línea, sonaron los teléfonos, porque había uno por cada ambiente de la casa. Y tuvo la mala suerte de estar en el comedor, justo en ese ambiente donde el teléfono suena primero y aturde, sobresaltaba a quien esté ahí haciendo lo que fuera que estaba haciendo. Después sonaba en los otros cuartos. Le seguía el estudio. El tercer lugar era para la pieza de sus padres; de ahí se trasladaba a su propio cuarto; y por último, culminaba sonando en una pieza destina a usos múltiples; algunos le llaman dormitorio auxiliar, pero no podía ser en este caso, porque no dormía nadie ahí. También le dicen sala de juegos, pero la verdad es que ya no hay juegos en la casa; ahora, el juego que hacían los teléfonos sonando, propagándose… eso era otra cosa, digna de enloquecer al más cuerdo y tranquilo. A Sergio le parece raro que nadie atienda arriba. Entonces quiere terminar esa serie de repeticiones, en distindo tono, que lo está volviendo loco. Levanta el inalámbrico del comedor, que era justamente el que sonaba más fuerte que los otros y se anunciaba primero y todo. 347


–Hola –dice, y solo puede escuchar un llanto de bebé al otro lado–, hola –insiste, pero nadie contesta. –¿Si? –responde una voz de mujer. Y ya Sergio puede olvidarse por un momento de esa criatura que estaba llorando. Ahora tiene un interlocutor en quien depositar su atención. Una buena distracción. –Sí, hola –vuelve a decir él. – ¿Matías, sos vos? –No, equivocado. –Ahh… –divaga la mujer. Le incomoda el hecho de que la señora no corte; si ya le había dicho claramente que no hay ningún Matías en la casa. Mucho más lo desespera que no hable, porque ahora es cuando vuelve a escuchar el llanto del bebé que ya había olvidado. No termina de entener tampoco por qué no corta él mismo, de una vez por todas. Así están unos segundos, escuchándose sin decir nada, sin colgar el teléfono tampoco, por supuesto. Finalmente corta Sergio, así como había descolgado el teléfono inalámbrico, siempre para callar algo. 348


Va a acostarse, pese al sonido de los teléfonos que todavía le zumban en la cabeza. Una vez tapado y todo, los sigue oyendo. Recuerda al bebé que lloraba. Está un rato así, acostado con los ojos abiertos.

*** De a poco va a briendo los ojos, se levanta lentamente de la cama y enseguida va al baño, caminando muy despacio, adormecido aún. –Alcanzame el jabón –dice una voz, que lo sobresalta y lo saca un poco de esa modorra agradable y placentera. Reconoce la voz en el acto; es su padre que se baña ahí, al otro lado de la mampara, seguramente porque su madre duerme y no quiere molestarla con el ruido de la ducha del baño que está adentro de la habitación de ellos; o porque ella misma se está bañando allí, ocupando el baño. Lo cierto es que Sergio agarra con cuidado el jabón, no fuera cosa que vaya a resbalarse de sus manos. 349


–Tomá –le dice, estirando su brazo con el blanco jabón que había sacado del lavatorio. Apenas lo agarra, Héctor empieza a frotar con fuerza la ropa que hacía solo un momento acababa de sacarse, para entrar en la ducha y entregarse así al agua, y ahora al jabón también porque su hijo ya se lo había dado. Entonces limpia el pantalón, lo tiene puesto aunque está bajo el agua. Y al mismo tiempo se enjabona el cuerpo. Después se pone shampoo, pero su hijo no saca la mirada del pote y lee la etiqueta, intenta leerla sin mucho éxito. –Permiso, ¿puedo verlo? –Tomá, usalo si querés, es muy bueno, eh. Johnson y johnson, leyó Sergio. Johnson´s baby bubble bath & wash. –No, gracias. ¿Qué hacés con esto, viejo? Es de bebé. –Qué tiene de malo… decime. Me gusta como me deja el pelo este, nada más. Aparte dicen que ayuda a la irrigación capilar. Al crecimiento del pelo, sería. 350


Sergio vuelve a mirar la etiqueta del shampoo, voltea la pequeña botella celeste y no puede hacer otra cosa más que tirarla contra el piso. –Eh, qué te pasa… –Perdón. Disculpá viejo. Disculpá.

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XLII PIZZA

Evito llegar a casa, pero en algún momento tengo que entrar. Y es siempre la misma puerta, la única entrada a mi refugio. Trato de hacerlo en horarios en los que intuyo alguien ya levantó las cartas, para no encontrarme con ella, con ellas: las cartas que dentro de sus sobres anónimos descansan sobre el piso del zaguán. Ahí se van acumulando según las dejan los carteros, sin saber –ni siquiera lo intuyen– que cuando lo hacen en mi domicilio, se convierten de pronto en los responsables de mi pesar; los culpables de renovar el recuerdo. Me dejan minas en lugar de cartas, y no necesito tropezar con ellas para volar en pedazos, 352


basta con que tropiecen mis ojos para eyectarme hacia el recuerdo más terrible, hacia el pasado más lamentable y atroz. Las veo ahí tiradas y me estremezco, se me congelan los músculos, me pongo torpe con la llave, se hace difícil abrir la puerta; la reja de entrada que apuro para agarrarlas y verlas lo antes posible, ya, quiero que sean todos servicios como han sido hasta ahora, pero cuando están sobre los mosaicos del zaguán pienso que hay una diferente a las otras, y que es una citación, una intimación, un llamamiento a declarar o algo que se le parezca. Las cartas me lastiman, acá en el pecho lo siento, tan solo de verlas. El apuro es doble: por verlas y por entrar rápidamente sin que me intercepten y entren conmigo, alguien indeseable, alguien que venga a perpetrar la venganza prometida y aplazada. El dolor pasa cuando compruebo que son todos servicios, a lo sumo una carta del correo, y sobre todo cuando ya estoy del lado de adentro con la puerta cerrada a dos vueltas de llave. *** 353


Y puede que en esas tardanzas voluntarias, en ese evitar la entrada a la casa en momentos donde posiblemente estan las cartas amontonadas en el suelo, su padre, tal vez su madre, o los dos al mismo tiempo han recogido lo que fuera una citación, y que por no preocuparlo hiciesen silencio, no dijeran nada a su hijo al respecto. Eso piensa Sergio. Los nota raros. En la mesa se miran con cierta preocupación en la cara, y él los ve mirarse; el padre dice que no con la cabeza, su madre asiente y sigue comiendo. En una ocasión les pregunta… –¿Hay algo que pasa y no me están contando? –No, hijo, qué va a pasar… Está todo bien. Si no, te diríamos, en caso de que algo pase… ¿Vos bien? Ese tipo de respuestas emite el padre, y otro tanto la madre. Desvian la conversación preguntándole por él, que cómo está, si todo anda bien. Y Sergio sugue intuyendo que algo pasa, algo ha cambiado y no es para bien necesariamente. *** 354


–Parece que se está dando cuenta, o algo sospecha –le dice Héctor a su mujer, una vez que Sergio está arriba, en la pieza. –Sí, sale a la madre en eso de darse cuenta. –Te avivas de muchas cosas, menos de hablar en primera persona. Ya te dije que no me gusta que hables así… la madre de aquí, la madre de allá… y vos sos su mamá. Dejate de chicaneos, haceme el favor. Pero Sergio está al borde de la escalera, y no en el cuarto como piensa su padre. Casi pisa el primer escalón; ese que es el primero en bajar cuando se está arriba, el último en subirse si uno viene desde la planta baja. De manera que ha escuchado todo. Eso lo lleva a estar ahí, parapetado en plena escalera, tomado de la baranda con las manos. En la misma escalera donde ha visto subir al padre de Valeria. Y en realidad no es mucho lo que escucha, no porque no oye bien, no es eso, sino que ya sabe que algo anda mal, que algo le ocultan. Lo sabe y esto es solo una confirmación más. La confirmación del ocultamiento. Una forma de confirmar. Ahora, ¿qué se oculta? eso no puede saberlo. El simple hecho de que sus padres no quieran decírselo ya habla por sí mismo. 355


XLIII FINAL DE FIESTA

Llega la segunda carta, y Héctor y su mujer se compungen. Ahora sí llega el momento donde se hace imposible seguir ocultándolo y tienen que decirle a su hijo, darle tan amarga noticia. La carta, que es una citación, certifica lugar y horario a concurrir, so pena de demanda judicial por inasistencia. Sergio es como que ya lo sabe. Se viene haciendo la idea. No le asombra demasiado esa noticia que sus padres le tiran así sin demasiado rodeo; aunque sí se siente finalmente algo triste y pesaroso. El abogado de la familia, hombre recto y de confianza, se encarga de todos los detalles. 356


Le dice a Sergio que se vista con la ropa más vieja que encuentre en su armario. Esa que ya le fuera ajustada, incluso. Si bien no iban más que a una primera citación, siempre es bueno dar un aspecto así de entrada. Las primeras impresiones cuentan y son definivas muchas veces, por eso el doctor Bermudez –y Sergio no entiende bien por qué eso de doctor, si es hombre de leyes y no médico– aconseja vestimenta, opina una vez listo su cliente; incluso le hace cambiarse ese pantalón corto, que si bien corresponde con la inteción de mostrarlo aniñado y adolescente ante la mirada parcial del mediador, no se ajusta en todo a la necesidad de que esté asimismo presentable y formal. Mínimamente. Según el doctor, “hay que lograr un equilibrio algo difícil. Sergio debe ser un niño, verse pulcro y prolijo a la vez, sin aparentar demasiado; algo pobre pero digno”. Cuando llegan al juzgado número tres, los recibe el mediador en una sala repleta de libros de leyes, tomos gigantescos que resultan pesados solo de verlos, cuadros en las paredes, una mesa y sillas de madera talladas en los apoyabrazos y el respaldo, con molduras 357


en las patas; la mesa era del mismo estilo que las sillas, bien sobrecargadas, con adornos y salientes. El mediador le aprieta muy fuerte la mano a Sergio, con más tranquilidad a su padre, y por último con delicadeza, por supuesto, al doctor; si es que algo tiene de docto Esteban Bermudez… Intercambian tarjetas como es usual, también con el abogado de la querella, que aparece de pronto por una puerta con Vale atrás y el padre. Y a Sergio le parece que sí es el de la foto, le suena esa cara. Por primera vez lo ve, pero más lo trae loco el hecho de ver a Valeria, aunque sea en ese contexto de tomos pesados y sillas raras, de personas que están en el medio, que estorban, salen sobrando; todo lo dice esa mirada. Entonces la figura del otro abogado surge presentando los cargos. A saber: –Este individuo –dice, dirigiéndose al mediador y señalando a Sergio con el dedo índice– no merece el más mínimo de los respetos, ni contemplaciones de ningún tipo. Sergio mira a Vale, y ella lo mira a él; se miraron, mientras el otro hombre dice siem358


pre en tono acusatorio y casi gritando, ¡sin contemplación!

–Las consecuencias de los delitos que cometió éste sujeto, no sólo van en perjuicio de la salud física y mental de mi cliente, sino que pueden afectar en forma directa a la criatura que lleva esta niña en su panza. Los embarazos que se dan en este tipo de condiciones, es decir, producto de una violación, engaño y posterior abandono, está probado que generan a menudo chicos mal formados, con deficiencias mentales, traumas agudos en la… –y Sergio sigue mirando a Vale, pero cuando el abogado dice algo del embarazo baja la vista por primera vez, le resulta difícil dejar de mirarla a la cara, a los ojos, y la ve de cuerpo entero. Valeria sigue sus ojos que le recorren el cuerpo, y mantiene una sonrisa que disimula cuando el padre le tira del brazo con fuerza para sacarla y que no se quede ahí mirándolo como una estúpida. Entones ella queda un poco de perfil, igual lo mira de reojo; sobre el hombro ve a Sergio, que ya ha dejado sus piernas, su pecho, para volver a los ojos, a mirar esos ojos que nada ni nadie puede evitar 359


que se encuentren y sigan encontrándose. Ni los tirones del padre, ni su miedo a que los tirones sean más fuertes, o fuesen otra cosa peor que simples tirones; pero no, piensa Vale, estando acá no van a ser más que tirones, no va a hacerme otra cosa. La presencia de otra gente y más que nada el contexto, le da un cierto resguardo, una garantía. Le asegura una tregua y algo de tranquilidad momentánea. Por lo menos hasta que salga de ahí, de ese edificio, y esten otra vez los dos solos en el auto.

En el Citröen. ¿Habrán venido en el Citröen?, se pregunta Sergio mientras le mira otra vez el vientre. No encuentra rastros de panza, ni pancita siquiera. Entonces vuelve la vista a sus ojos que lo siguen viendo, y se pierde otra vez en la belleza de esa niña, mujer, clienta, víctima, lo que sea que fuese, como ellos quieran llamarle; Valeria simplemente para él, aunque no se llamara así, porque bien dice el hombre que habla mucho y muy de prisa y sigue hablando, enuncia el nombre de la querellante, Diana Florencia Oliva. Sabe Sergio finalmente que ése es su nombre, lo cual no le importa demasiado. Para él sigue siendo Vale, 360


siempre va a ser Vale. Así la había conocido, así llegó, así vino. El padre lo mira con ganas de matarlo ahí mismo. Sergio lo ve en sus ojos, en la expresión violenta que trae en la cara. Pero el abogado se le pone adelante en todo momento, como previniendo una posible arremetida. Le tapa la vista, cosa que a Sergio lo beneficia porque prefiere con todo seguir mirando a su hija, más que al padre y ese gesto iracundo que trae encima. Hace tanto que no la ve… que no puede dejar de hacerlo. El primero en darse cuenta es él, porque la viene viendo y está atento a todo lo que pasa en esa porción del cuarto. Los demás tardan un poco, pero enseguida la ven doblada, agarrándose la panza con las dos manos. El padre se entera recién cuando su hija le suelta la mano, fuertemente apretada y presa de sus dedos gruesos. Es uno de los últimos en verla, por estar bastante ocupado mirando a Sergio con furia. El doctor Bermudez enseguida sabe que es todo un montaje. Una buena estrategia de su colega que ahí enfrente simula preocupación mal actuada. Buena actriz, piensa el 361


consiglieri de la familia. Sergio se preocupa aunque duda un poco. En eso Valeria se pone derecha otra vez, se incorpora con los ojos cerrados y respira profundo con la plama de las manos abiertas y los brazos empujando a su padre y al abogado que se acercan, como anciando con todas sus fuerzas que se pase el dolor, concentrándose en eso y los codos que empujan al mediador que también se acerca ahora. –¿Se siente bien, señorita? –Sí, sí, no es nada –dijo Valeria, abriendo los ojos–. Gracias… ¿podría pasar al baño? –Cómo no –dice el mediador, mientras señala el camino con su mano–, por acá. Valeria sale del recinto y él la ve perderse tras la puerta. Quiere seguirla, y lo hubiera hecho si no fuera por esa mirada controladora que le lanza el padre y que lo viene acosando desde el principio. El mismo padre de Sergio a su vez mira a ese que acusa a su hijo. Un triángulo de miradas. Pero la más intensa de todas se ha cortado al largarase Vale y dejarlo así. Sin saber que hacer, adonde mirar. No hay donde mirar. No resuelven nada las mesas con 362


sus adornos, ni las sillas. Le falta algo. Tiene el arranque de irse otra vez. No le gusta nada ver a su padre en esos líos por culpa suya. Pero si se va así, de buenas a primeras, puede tornarse tanto peor la cosa, para los dos. Aunque más le preocupa su padre que él mismo realmente. Siente por primera vez ese instinto de protección padre hijo-hijo padre. Y sabe que así será con su hijo, en caso de tenerlo. Tal vez ese mismo instinto es el que mueve al padre de Valeria, y el que le hace hacer las cosas que hace sin más remedio; esa fuerza paternal, la que motiva su mirada furiosa y penetrante que, junto a la ausencia de Vale, hacen cada vez más urgente la huída de Sergio. Deja de pensar en todo eso de padres, hijos, instintos y vuelve a plantearse la forma de escape. La mejor forma de escapar de ese cuarto que pierde todo sentido sin ella. Viendo que no hay el menor rastro de canilla, ni una mínima posibilidad de cocina, se centra en esa idea y está seguro de que lo mandarán al baño ante su pedido insitente y reiterado. Al baño o algún otro lugar… la cocina quizá. Pero es sabido que la instalación 363


sanitaria en cualquier dependencia está generalmente en un mismo sector. –Disculpe –dice, interrumpiendo el monólogo del abogado que otra vez se encendía incriminándolo siempre–, necesitaría un poco de agua para tomar un medicamento. Ponelo en la boca, que yo te lo hago tragar sin agua, hubiese querido decirle el padre de Vale. Pero se contiene, se viene conteniendo desde el principio. Lo mismo con su hija. Las personas que están ahí, y sobre todo el acuerdo que bien había hecho con su abogado, de permanecer con la sola condición de no entrometerse en su trabajo y estrategia, le frenan un poco el impulso, las ganas que tiene de echarse contra Sergio y su padre, el mediador y quien sea; hasta el mismo abogado que lo defiende correrá cierto riesgo en tal caso. –Por esa puerta. Al final del pasillo –dice el mediador, y ni bien lo ha dicho Sergio ya está en marcha rumbo a la puerta señalada. Sale del recinto y camina por el largo pasillo. La dependencia parece estar vacía. No se escucha ningún ruido ni se ve a nadie pasar. Llega al baño de hombres que es todo lujo. 364


Los azulejos brillan de limpios. Casi se refleja Sergio en ellos como en un espejo. Los cerámicos centellean la luz cálida de las lámparas. La mesada de mármol ancha, con unas vetas preciosas y abajo los cajones de madera oscuros que la sostienen firmemente. Oye un ruido mientras se mira al espejo, al amplio espejo que cubre toda una pared del baño. Es lo primero que escucha desde que salió del recinto. Apoya la oreja en la pared; tal era la limpieza del baño que permite este tipo de cosas. Corre agua al otro lado como si hubiesen tirado la cadena. Enseguida piensa que es Vale, que Valeria está ahí y que solo una pared los separa. Sale del baño sin secarse la cara. Las gotas le recorren por la frente, mejillas, la pera y terminan cayendo al piso. Es un reguero de agua que va dejando Sergio en su camino. No encuentra el baño de damas. Tampoco oye otros ruidos. Entonces piensa que seguramente Vale ya ha vuelto. Que el ruido de la cadena marca de alguna forma el final de su permanencia en el baño. Seguro se ha lavado las manos después de eso. Pero como sea, Sergio imagina que ella vuelve a entrar por la 365


puerta que le indicó el mediador y que ya está ahí tomada del brazo de su padre nuevamente. Eso le produce cierta tristeza, pero igual ya está desesperanzado desde el momento en que le señalaron otra puerta y no esa por la que ella había salido. Decide volver a la sala. De pronto se acuerda de su padre. Cómo estará todo allá adentro… y eso va pensando mientras camina por el pasillo. Siente que le tocan el hombro y se da vuelta a ver quién es. –Hola –dice Valeria y le parece tan raro verla después de tanto tiempo ya. –Por qué me mirabas así… –siguió. –Así cómo… –Como embobado… a vos no se te entiende. Me miras con esos ojitos y después te vas, como de hecho lo hiciste. –Nunca estuve en Córdoba. –No me digas. Ni enterada estaba la verdad… pero por favor, me venís con noticias de anteayer. Obviamente que no estuviste en Córdoba. Ya te lo dije. Lo sé desde siempre. –Creo que fue lo mejor, de alguna manera. Para los dos, ¿no? Aunque queríamos otra 366


cosa, eso no lo niego. Pero no podíamos.No se podía. Admitilo, por lo menos. –Yo voy a admitir que vos me dejaste… pero acordate de algo: de mí no te olvidás más. ¿Escuchaste? Y con esa última sentencia, sin poder decir tantas cosas que hubiese querido, Sergio vuelve al recinto. Los dos se van juntos por lo gritos que empiezan a escuchar que vienen directamente desde la sala. De haber sabido que era una falsa alarma no hubieran entrado. Pero ahí están y no queda otra. A estarse quieto sin excusa y sin chistar. Nada de ir al baño a tomar una pastilla, ni descomponerse en medio de una mediación. El mediador habla, y por fin se calla el abogado para alivio de Sergio y de todos a fin de cuentas. Saben, estando adentro, que él y no otro es el máximo responsable del griterío que habían escuchado desde el pasiilo. El primero da por terminada la sesión diciendo que, de confirmarse el embarazo y después de todos los análisis pertinentes a realizarse para determinar la paternidad del acusado, se llamará a una segunda citación en fiscalía, donde po367


drรกn abrirse, llegado el caso, las puertas a un juicio por paternidad.

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XLIV ANÉCDOTAS / EPÍLOGO

Al principio llegó a molestarme su forma de escribir; el ahorro de letras, sílabas enteras que desaparecían por completo. Me parecía como si eso hablara de una falta de educación, de una carencia en algún sentido. Pero después empezó a enternecerme en cierta medida. Entendí que no tenía nada que ver con su ignorancia, aunque en algunos casos sí había faltas y errores groseros de ortografía. Supe que era más bien un estilo, una forma de comunicarse con mayor rapidez y facilidad. Un signo, si se quiere, de esta cultura moderna; el ahorro, la urgencia sin motivo aparente de apremio. Pero en ella era distinto. Vale hacía un uso propio de estas formas tan usadas y conocidas hasta el hartazgo. Entonces dejé de asociarla a lo otro, a los otros que

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escribían parecido, nunca igual a ella. Gina, en cambio, siempre tan correcta. Todos los puntos, las mayúsculas, las tildes. En Gina me veo a mí mismo, será eso... Y es realmente aburrido. Es la perfección gris, inalterable, de las palabras, tal como son y las conocemos. Valeria era lo nuevo, la novedad, lo picardía. Decir d, cuando debía ser “de”, me volvía loco. Primero me enloqueció de fastidio, pero después lo pensé mejor y me di cuenta que esto iba un poco más allá del lenguaje y la comunicación puramente formal. La “d”, daba lugar a que uno mismo completara el significado; el que leyera debía agregarle la “e” que estaba faltando. Así, lo mismo con la “t”, la “v” corta, la “b” larga. Eran “te”, “ve”, “be”, y no precisamente de té con leche, ni ve de ver, ni los bebés que tanto me persiguieron por todos lados. Más bien era la letra “s” para decir “ese” (s chico, s compañero del colegio, por ejemplo), y la “x” (la equis) que suplantaba el “por”. (Por qué = x q) Pero entonces, aparece ahora y viene a colación, la “Q” (cu). En donde sí hay algo de capricho en este caso. Partiendo de que ella 370


la usaba para decir “que”, cuando la sonoridad de la letra no cumple ese rol, como sí se cumple en el caso de las otras que decía antes, a saber: t – v – b – d. Sin hablar de otros casos –son tantos que no podría mencionarlos, por más que quiera y haga el intento, el esfuerzo por recordar todos y cada uno de ellos–, de los que sí podrá hablar usted que lee, en cuanto quiera y le interese desmenuzar esta historia y la forma y los códigos, porque terminaban siendo eso, códigos, los códigos que nos comunicaban con Vale, y que quizá sólo nosotros alcanzábamos a comprender en toda su dimensión.

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