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I S L A S C A N A R I A S, UN PARAÍSO PARA DESCONECTAR Infinidad de playas donde elegir. Naturaleza sorprendente, refugio de una valiosa biodiversidad, y paisajes de ensueño retratados en profundos barrancos, imponentes acantilados, bosques milenarios… Islas volcánicas que irradian mil colores y una energía especial que invita a recorrerlas y disfrutar de sus contrastes en cualquier época del año. Una estancia inolvidable en el mejor clima del mundo para volver a brillar.
> NATURALEZA QUE REVITALIZA
único, el lugar perfecto para revitalizar cuerpo y mente, todo un plus de salud y bienestar. Impactantes paisajes que parecen de otros mundos, con impresionantes campos de volcanes de mil colores y mares de lava solidificada donde la vida también es capaz de surgir y desarrollarse, creando contrastes inimaginables. En este territorio insular, los frondosos bosques de especies endémicas como el pino canario han colonizado las laderas de profundos barrancos y son el hábitat de aves y otros animales, muchos de ellos exclusivos de estas islas. Y todo bajo los cielos más limpios y claros de Europa, de los mejores del mundo para observar las estrellas y el universo.
El viajero que llega a las Islas Canarias también se sorprende con su increíble y variada naturaleza marcada por el origen volcánico del archipiélago. Siete islas, distintas entre sí, cada una con personalidad propia, a las que se suma un conjunto de pequeñas islas e islotes denominado Archipiélago Chinijo para terminar de componer un territorio singular y
Mientras, en el subsuelo y bajo las transparentes aguas del océano, la vida también fluye y recrea estampas de ensueño en cuevas y tubos volcánicos y en los espectaculares paisajes submarinos que son un santuario para muchas especies, un enorme atractivo para buceadores que vienen a estas islas desde distintas partes del planeta.
Las Islas Canarias son mucho más que playas paradisíacas y un clima excepcional, una eterna primavera en la que los inviernos son suaves, con 19º C de media, y los veranos agradables, en los que sus 23º C de media las sitúan muy lejos del calor sofocante que sufre el continente en los meses de estío. También este archipiélago atlántico es mucho más que el lugar con más horas de sol de Europa, lo cual permite disfrutar del deporte y de cualquier actividad al aire libre todos los días del año.
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