Revista solsticio #10 by Editorial Ocaso

Solstici Despertar Colectivo

Mayo 2020

NĂşmero: 10

Portada:

David MartĂnez

Editorial Ocaso

Solstici Despertar Colectivo

Mayo 2020

NĂşmero: 10

Revista de enfoque anarquista

CON TACTO Telefono: +57 304 674 8600 Email: editorial.ocaso@gmail.com Sitio Web: editorialocaso.wixsite.com/ocaso Facebook: /EditorialOcaso/ Producido por Editorial Ocaso. Esta publicación está pensada para ser digital. Si desea imprimir este número se recomienda el uso de papel reciclado/ecológico . Usted es libre de copiar, distribuir, y comunicar públicamente esta obra siempre y cuando reconozca los créditos de la obra y/o autor. No se puede utilizar esta obra para fines comerciales, así como tampoco se puede alterar la obra, transformar o generar obras a partir de esta. Las opiniones expresadas en esta revista digital no necesariamente reflejan las de aquellos que la publican, todo el material ha sido revisado y corregido, editorial ocaso no se hace responsable por “daños” provocados por dicho material.

CON TENI DO

1. Eternidades. Beatríz Eloísa 2. DIY La anarquía que avanzó con la tecnología Sinyu

Pg. 08

Pg. 12

3. La egoísta solidaridad León Darío

Pg. 16

4. Ni estatal, ni moral, ni social León Darío

Pg. 18

5. Los despropositos Laura Vanessa Bautista Niño

Pg. 20

6. El capitalismo de los árboles Juan Keller

Pg. 22

7. Abrazando la Nada Jaime Manso Castaño

Pg. 24

8. Herida abierta Juan Jesús Martínez

Pg. 26

9. 1984/2020. Fabián Correa

Pg. 30

10. Realidad aumentada Fabián Correa

Pg. 32

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Mamá terminó de estudiar en el Museo de La Plata. Después pujó fuerte haciendo fuerza con la panza, no con el cuello. Respiró, respiró y pujó tan, pero tan fuerte que le pareció que no había mayor fuerza en el mundo que esa que estaba en su panza saliendo. Y nací entre gritos de pulmones de estreno. Yo nací en un año triste, que fue 1976. Aunque no fue el único año triste de toda la historia. Eso lo sé ahora, que ya soy grande.

arriba se muestran huesos de dinosaurios y de otros bichos más chiquitos. Antes, pero no hace mucho, donde se estudia, había viviendo unas personas. Pero no querían estar ahí, las habían llevado unos eruditos sin pedirles permiso1. Después del jardín vamos y yo miro al monstruosaurio y a los escarabajos peloteros, y me imagino cómo sería vivir así sin poder salir. El más importante se llamaba Inacayal. Cuando se murió por estar encerrado en un sótano, fue también un año Abajo del Museo de La Plata se triste, 1887. Su cuerpo vestido estudian Ciencias Naturales. Y está en una vitrina, a mí me pa8

rece que es un muñeco, pero es de verdad y me da vergüenza mirarlo. Así que me apuro a donde están los gliptodontes, como pidiéndole perdón. Cuando mamá termina de trabajar, vamos a casa y cocina torta. Siempre me deja lo pegado en el bol y yo me lo como con una cucharita. Es lo más rico del mundo esa mezcla de huevo, azúcar y harina. Le pregunto por qué no habrá caramelos de masa de torta cruda, a las personas como yo nos gustaría muchísimo. A ella le parece divertido. Hay animales

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eternidades Beatríz Eloísa

donde hay viento, frío y las es- por ejemplo en 1977. Inacayal trellas brillan más. Después lo y la Tía eran demasiado libres y encerraron en el Museo y se los encerraron. murió. Muchas cosas que están libres las encierran. Yo tengo una Tía que tenía estrellitas pintadas en las uñas. En verano se dejó la ventana abierta y un 1 En 1884, luego del exterminio de su raza, un grupo de Tehuelches ramo de estrellas fugaces enfueron llevados prisioneros a tró y se le quedaron pegadas. Buenos Aires. El fundador del Por eso debe de haber sido Museo de La Plata los llevó a vivir a dicho museo, como trabajadores que después unos hombres esclavos. Del grupo la mayor que no dijeron como se llamaparte murieron al poco tiempo. ban la fueron a buscar y se la Humillados, tratados como objetos, no soportaron el encierro. llevaron. Las estrellas brillan Inacayal murió arrojándose por las demasiado fuerte en los años imponentes escalinatas del museo. Inacayal estaba bien vivo y era tristes, y a los hombres les dan En 1994 fueron repatriados sus restos a su tierra. libre en la Patagonia, un lugar miedo y tratan de apagarlas, que comen carne, otros plantas. Los escarabajos peloteros comen caca, y andan de acá para allá con la rica caca hecha bolita. Tampoco hay caramelos de caca. Los escarabajos que están en el Museo están muertos, porque los museos están llenos de cosas muertas, que ya no comen. Todas las veces que los miro siguen igual igual. Los escarabajos peloteros vivos están en el campo y son libres de comer la caca que quieran.

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Ahora sé que a la tía la metieron en un pozo con sus estrellitas pintadas.2 Los pozos van a ser bacheados, los van a tapar con cemento y asfalto para que no se noten. Es 2016 y algunos políticos inventados cocinan en televisión y se ríen en la cara de las personas arriba de los agujeros tapados.3 No saben nada de lo que las mamás, las tías y las estrellas les tendrían que haber contado cuando iban al jardín de infantes. El pueblo Quilme4 apresado caminó más de mil kilómetros para llegar desde Tucumán que era su casa al quilmes de la botella de cerveza y de los pozos tapados. Los huesos de los que se murieron en el camino quedaron en la tierra y vuelan orgullosos y libres con el viento. Los huesos brillan porque tienen fósforo y tienen luz de estrella. Ese fue otro año triste, ya hace demasiado. Por el 1600. Hace tanto que algunos se olvidaron, especialmente los que escribieron el Manual del Alumno Bonaerense5 de quinto, de sexto y de séptimo, porque no figura.

Voy al jardín 4 y mamá me va a buscar. Casi nunca me va a buscar, pero hoy pudo. Me da la mano y cantamos “ a la ese ese á, a la jota jota ká, como te va bien o mal o regular”. Mamá es joven porque corre conmigo, que me canso y nos sentamos en un banco que hay en la esquina. Las mamás Quilmes de nenes que viajaban caminando, los agarraban fuerte de la mano y les hacían upa con un manto que se llama aguayo. Mamá no me hace más upa porque yo ya soy grande y a ella le duele la espalda. Mientras caminaban seguro les contaban historias de libertad y los nenes soñaban, como me cuenta mamá antes de irme a dormir y de darme un beso en la frente y de decirme buenas noches y que la virgen me tape con su manto. Los nenes de las mamás dormían en el manto de la virgen que acá es de la Pachamama y es de lanita de vicuña. Muchos eligieron morir antes de ser esclavos y ahora están en las estrellas más brillantes. Y bailan con el viento.

Las mamás guapas de los nenes Quilmes daban más miedo que nunca cuando se abrazaban a sus hijos y se entregaban a la tierra libre. Se tiraban de sus barrancos con sus hijos en brazos, no se dejaron encerrar. Hay personas que estudian el cielo y los astros, hacen cálculos con números. Pero a mí las estrellas me cuentan historias. Cuando hablamos en la tierra mirando la noche, la voz suena distinta. Más chiquita y de entrecasa. Porque el cielo es tan pero tan grande que solo cabe en la imaginación. Cuando sea grande quiero ser científica y trabajar en un laboratorio. Mamá mira al microscopio y también lava los platos. Ella lava los platos siempre, aunque sea mujer científica.6 Y no solo cuando se les ocurre a algunos. Como estudia el mar se viene a vivir acá a la Patagonia, donde hay viento y el agua es más azul. Ella lava y yo seco y guardamos las cosas en los cajones. Le cuento de los libros

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que leo y ella de las algas que mira. A veces no hablamos y nos entendemos, ella con la esponja y yo con el trapo. Y ya es 1994. Pasa el tiempo y las estrellas siguen ahí, y pasan muchos otros años tristes, esos que me tocan vivir sola. Y es este año. Voy a Tecka, que queda ahí en el medio de la Patagonia, ente las ballenas y los Andes, me encuentro con Inacayal que devolvieron ya a su tumba, nos sentamos en los cantos rodados y con voz de viento me cuenta de lo eterno.

No grito, pujo. Así, largo el aire y la garganta protesta por tanto aire y tanta fuerza, y la panza apura el nacimiento. Y sale de adentro, mirá, de adentro. No tengo nada más en la panza que eso que sale de ahí abajo. Me asomo y ahí está. Mirá qué fuerza tenía que salió eso de adentro. Una cosa bañada en sangre y también en agua, bautizada por mi fuerza. La fuerza que viene de la panza y de los brillan desde el cielo. Y le entra aire en los pulmones y llora de tanta vida.

Y entonces llega mi momento de sentarme en la Sala de Partos y me acuerdo: si grito se me va la fuerza, mejor no grito y hago fuerza. Fuerza fuerte, no con el cuello, con la panza. Pujo con la panza. Respiro, respiro. Pujo pujo. Toda la fuerza con la panza, no con el cuello. 11

2 https://es.wikipedia.org/wiki/ Anexo:Centros_clandestinos_de_ detención_(Argentina). 3 En las elecciones de 2015 de Argentina, fue elegido Martiniano Molina, ex jugador profesional de handall, ex cocinero televisivo, como intendente de la localidad bonaerense de Quilmes(famosa por su cervecería). Ante la pregunta de un periodista sobre las investigaciones sobre el llamado “Pozo de Quilmes”, él contestó que en su intendencia los pozos iban a ser bacheados. 4 Pueblo originario del Noreste Argentino. 5 Manual de estudios primarios utilizado en la mayoría de las escuelas públicas de la provicia de Buenos Aires en las décadas del 80 y 90. 6 Referido al ministro de economía del presidente Menem, Domingo Cavallo, que mandó a lavar los platos a las mujeres científicas argentinas.

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DIY La anarquía que avanzó con la tecnología / Sinyu

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Donde gobierna compañía no manda capitán La tecnología hoy en día ha llegado a ese punto donde ha rebasado la capacidad del ser humano de ser creativo y convertirlo en un ente dependiente de las comodidades que este le ha proveído, muy diferente del ideal del progreso para una vida libre y ahora rebasado como la satisfacción al concepto de lo sencillo. ¿Cómo no lo sería? La tecnología ha simplificado las operaciones humanas, y uno mismo, abrazando con ingenuidad la comodidad, creemos en su posición neutra, nos dejamos asombrar por sus beneficios que solo piden por nuestra atención sin esperar algo a cambio. La ética de la tecnología pende de un hilo, donde las investigaciones y el desarrollo dejaron de estar en manos de los gobiernos quienes auspiciaban agencias y compañías para elaborar nuevos descubrimientos, ellos ponían el rumbo en que debía ir encaminada cada nueva creación. Ahora las compañías desarrollan con gran facilidad sus propias reglas y las imponen sobre cada nueva creación, implicando una dependencia hacia sus soluciones (tecnologías compatibles), cosa que no se ve a simple vista, pero de la que todos somos parte por sus caprichos tiranos. Las ofertas están a la vista, pues estos desarrollos sólo están al alcance de los monstruos corporativos como Google, Apple, Facebook, Samsung, etc. Las grandes compañías que ahora en día rigen el curso de las tecnologías de la información, crean guerras comerciales, tal es el ejemplo de Huawei y sus componentes que empezaron a abarcar el mercado extranjero, acción que no gustó a los mercados globales y tuvieron que imponer una sanción que terminó en una guerra política. Pero ¿qué hay de los usuarios?, personas que como tú y yo a diario usan dispositivos que recopilan información personal, que las comparten con estas grandes compañías y terminan siendo dueños de la misma, pero que negocian y usan para poder lucrar e incrementar sus ganancias. Internet nació como una promesa de colaboración y libertad, un mar abierto al conocimiento y la información, pero ¿De qué sirve un mar si no se tiene un barco en cual navegar?, más aún si el barco solo lleva el nombre como propio pero todo le pertenece a una gran compañía, que sabe dónde has estado, a donde te diriges y de dónde vienes. La tecnología nos ha rebasado por que ya no cuestionamos cuál es el avance que debe dar, hemos caído en la dependencia del gobierno corporativo expectantes de sus nuevas invenciones a las que les hacen ferias y festejos, solo estamos atentos a saber qué es lo que nos venderán y hacia dónde quieren que miremos. Sin las compañías que brindan el servicio de internet, se caen los principales medios de comunicación, sin compañías farmacéuticas nos quedamos sin medicinas, sin compañías de hidrocarburos perdemos la capacidad de producir la mayor parte de la electricidad, los transportes y los derivados. Estos grandes aglomerados ponen rumbo al destino de nuestros barcos, y nosotros sólo estamos contemplando la vista, pensando que todo es neutro por que el barco no tiene forma de pensar por sí mismo.

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Anarquía y el Orden Digital El mundo de la lógica en las computadoras pareciera algo metódico y dispuesto a cumplir las órdenes necesarias para acatar tareas sin cuestionamientos que pareciera imposible de concebir el que hubiese un espacio para la anarquía, pero su espacio no está dentro del sistema que gobierna una computadora, sino en las instrucciones que dicta una persona para llevar a cabo sus funciones, la anarquía está en cómo usamos la tecnología. ¿Cómo concebir la anarquía en un concepto tan ordenado?. De la misma manera que concebimos libros para difundir un concepto tan amplio y complejo. Un libro considera un orden (portadas, títulos, páginas, párrafos) para albergar información que podrá difundirse entre los lectores. Así como el libro que se vale del lenguaje y sus materiales como herramienta para informar, la tecnología del mismo modo se convierte en una herramienta que apoya la causa anárquica que busca el cuestionamiento de todos los sistemas de gobernanza, incluso de los mismos sistemas que gobiernan una computadora, llevándolo a la diversificación de pensamientos que encuentran un espacio en los nuevos medios de comunicación para difundir y colaborar con los diferentes movimientos, que buscan liberar al ser humano de las cadenas que buscan esclavizar sus necesidades frente a al engaño en la promesa de una vida simple y sin problemas. La forma en que se descubre el funcionamiento de los dispositivos y las máquinas que manipulan la información para poder gobernarlas y usarlas en la libertad del interés propio, más no en la restricción que implica la dependencia tecnológica de la propiedad comercial que incluso pena la intromisión en los sistemas de la tecnología patentada.

El DIY El movimiento Do It yourself (Hazlo tu mismo) nació en los la década de los 50s del siglo pasado, buscaba que las personas tuvieran la posibilidad de tener herramientas y materiales para crear objetos o instrumentos que en esa época solo podían hacerse en talleres especializados o fábricas, valiéndose de instructivos o planos que se mostraban en revistas, fomentaban la libre creación o alteración de los instructivos para hacer nuevos objetos. Con el tiempo este movimiento impulso a las personas a no depender de las compañías o industrias para producir sus propios accesorios, herramientas o producciones. El movimiento DIY fue precursor a todos los movimientos que buscaban una independencia de las agencias y sociedades mercantiles, implicando una anarquía en los medios de consumo, promoviendo la democratización de los diseños, dando la oportunidad a las personas de crear su propia música, sus propias máquinas, sus propias ropas, etc. Hoy en día el movimiento Maker busca retomar estos puntos y promover la idea de que todas las personas son capaces de crear sus propias cosas.

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El reto del Anarquista Tecnológico Lo que implica ser un Anarquista tecnológico hoy en día tiene que ver en cómo se cuestionan los avances tecnológicos en relación a los fines de quienes crean o desarrollan la tecnología, tanto a corto como largo plazo, exponiendo la discriminación de los sectores que no pueden acceder a ella, siendo que esto restringe sus oportunidades de crecimiento (como la Red 5G) . Pero más aún, implica un compromiso, tanto de conocer cómo funciona la tecnología como de buscar la forma en que pueda estar al alcance de otros. Existen actualmente movimientos como Arduino (Hardware abierto), Re Rap Hardware abierto) o FreeCad (Software abierto), que cuentan con comunidades abiertas con proyectos para la apertura de la información necesaria para que las personas no depender de corporaciones que se adueñan y restringen los accesos sus soluciones. Ser un dependiente tecnológico es ser presa buenas intenciones, a comprar la propaganda de la felicidad como accesorio y a no usar el razonamiento como medio de búsqueda. El reto está en asumir que no siempre se tendrá un interruptor para encender la luz y empezar a pensar en cómo hace el interruptor para encenderla.

Open Source al rescate Ante la pandemia actual las filas de los anarquistas tecnológicos salen a librar las batallas que las mismas instituciones van perdiendo, ya que, siendo libres de crear sus propios productos sin la restricción de las políticas empresariales ni los beneficios económicos, cuentan con el libre albedrío para lidiar con el problema social poniendo a la disposición de las personas sus soluciones. Ejemplo de ello son las soluciones disponibles en proyectos de GitHub, una red comprometida a la colaboración del Open Source que en medio de una pandemia a dotado de soluciones como respiradores hechos con software y hardware abierto, con lo que ponen los planos de su construcción y sus instructivos de armado para que las demás personas sean capaces de crear uno, ahora las instituciones están tratando de apoyarse de esta iniciativa para poder solventar sus necesidades. Otro ejemplo son los cubrebocas impresos en máquinas 3D con la capacidad de ser modificables y adaptables a las necesidades de las personas. No cabe duda que entender la tecnología y colaborar en su difusión, aporta una salida que busca la igualdad de oportunidades y el acceso a la información que permitirá que las personas dejen de depender de las organizaciones empresariales que acaparan los mercados con tecnologías cerradas que provocan la desigualdad entre las clases sociales por las restricciones en su acceso.

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Tan altruista ella, la solidaridad, la generosidad, nos dicen y nos enseñan desde pequeños la importancia del gesto solidario, de ser generosos, de no ser “egoístas” y compartir, de compartir los juguetes con los niños que venían a casa de la mano del padre y la madre amigos de los nuestros, aunque esos niños no nos gustasen nada, aunque estuviésemos tan comodamente jugando “a nuestro rollo” nos veíamos obligados a dejar nuestras preciadas propiedades a esos inoportunos invitados que tanto enturbiaban nuestro propio mundo...la solidaridad es una praxis humanista pues es el motor de las relaciones humanas que se sustenta en el dar, apoyar u ofrecer algo sin esperar nada a cambio,sin esperar nada a cambio relativamente, pues la solidaridad siempre conlleva a considerarse en reciprocidad, una deuda con quien se solidarizó; el que lo hizo espera una acción-reacción con el en un futuro cuando necesite de este acto de generosidad sin “esperar nada a cambio”, ahí queda una cuenta pendiente ya sea a corto, medio como a largo plazo pues dicha acción no implica nada “ipso facto”, no se origina una inmediatez sino que aguarda un momento de prudencia al momento circunstancial en recibir la “contraprestación” pues espera que cuando él lo necesite alguien le ofrezca su apoyo igualmente por “pura solidaridad”; es decir y podemos afirmar que este “gesto” es , obviamente, un “hoy por ti, mañana por mí”; la sociedad te “vigila”, la comunidad se apunta si tu fuiste solidario cuando alguien perteneciente a la comunidad lo necesitó y le hizo falta, por tanto es posible que si cumpliste “sin esperar nada a cambio”, que esa solidaridad o generosidad te sea devuelta igualmente “sin esperar nada a cambio”...y así marchando en lo sucesivo se va elaborando una cadena de acción y reacción ; si en cambio no diste apoyo, fuiste insolidario cuando una persona o una sociedad (de la que formas parte) lo necesitó, es muy probable que ese presunto ejercicio de altruismo, dedicación, prestación de algún servicio, producto u objeto que puedas necesitar no te sea despachado sin ahondar en la cuestión de porqué yo, como individuo, no me he querido o quizás no he podido saldar lo adeudado cuando se me ha necesitado o mejor dicho se ha esperado de mi, la comunidad no va a entrar a valorar qué circunstancias me han llevado a cabo a no responder con “espíritu solidario” ya sea de una manera involuntaria como incluso voluntaria; podemos decir, en base al 16

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LA EGOÍSTA SOLIDARIDAD

León Darío

texto, que la solidaridad, y aunque se quiera negar, tiene un sentido egoísta y sin criminalizar o estigmatizar el concepto egoísta que realmente se traduce en el principio de uno mismo, en la doctrina del individuo y su individualidad en base al interés propio,al interés del ego, yo mismo soy egoísta pues hago del “Yo” mi principio y finalidad y todas mis acciones y objetivos las baso en la obtención de un beneficio propio, de hecho si tengo la capacidad para ello me lanzaré a la obtención de un privilegio sin importar si lo hago en detrimento de la sociedad si con ello puedo obtener un beneficio para mi mismo y por extensión para mi círculo íntimo más inmediato; por tanto, el solidario no puede negar que también se beneficia en un acto egoísta pues sabe que después ese acto se convertirá en una “inversión” para cuando él requiera que acuda el antes solidarizado.

También voy a citar lo que yo mismo denomino la “solidaridad inmediata” una determinada reciprocidad entre semejantes con un fin establecido que tienen unos determinados intereses y necesidades individuales a saciar a la mayor brevedad. Podemos citar en este aspecto las luchas obreras, las huelgas y protestas activas de trabajadores en casos de destacados conflictos laborales, aunque estas luchas lo sean bajo el paradigma de la colectividad, realmente están actuando y desenvolviéndose en esta herramienta colectiva con un interés egoísta, un individuo reclamando lo que a él - sólo a él- le corresponde, sus “derechos” laborales, la mejora de su salario o la retribución de las horas extraordinarias que está haciendo en la fábrica para que la trabaja...pero unido a cientos o miles como él porque sabe y es consciente de que por sí sólo todo le saldrá en agua de borrajas y en pataleta sin repercusiones, son cientos o miles de individuos con sus respectivos intereses personales que unifican fuerzas entre sí para reunir la suficiente capacidad colectiva para paralizar la actividad de sus centros de trabajo, evitar la entrada al trabajo de sus compañeros “discordantes” (esquiroles) , colocación de neumáticos en llamas en los accesos a los polígonos...todo en eso con el objeto de que patronos cedan o negocien con respecto a las exigencias expuestas sobre la mesa. Sintetizando: “Yo” no puedo por mi mismo, no aglutino la capacidad de obrar con suficiencia para hacer ceder al patrón en mis exigencias como trabajador, necesito unirme a Ti, a tu Yo, que ,a su vez necesita también de mi, de mi Yo, de mi unicidad y a su vez, necesitamos a otros como nosotros, a otros “yos” y todos juntos después unificamos nuestras unicidades y particularidades para ejercer el tesón que nuestras reivindicaciones particulares necesitan. 17

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LEÓN DARÍO

Ni estatal, ni moral, ni social

Anarquía es “sin autoridad” y esto es algo que siempre se les olvida u “olvida” (lo que es más grave) a muchos; sin autoridad de estado,pero igualmente sin autoridad burocrática, de moral, ni colectiva, ni social, ni organizativa, ni dogmática, ni autoridad decisoria o asamblearia, de las mayorías, doctrinaria, ni siquiera la del bien o del mal...A cada cual su voluntad; a menudo tenemos que aguantar a muchos “repartidores de carnets”, a la par que dogmáticos de talante autoritario; el dictar (o más bien tratar de dictar) cómo debemos actuar e incluso pensar los demás , ¡incluso como vestir! y como somos “unos cuantos” quienes somos vilipendiados y tratados como malvados y apestados por nuestro “afán” de preservar nuestra más estricta integridad personal de las garras de las colectividades, asambleas, sociedades...a las que por supuesto nos sumamos pero con la capacidad y voluntad plena decisoria de poder disentir o mudar en el mismo momento que lleguemos a dicha consideración, por el motivo que sea, reflexión, cambio de mentalidad, de pareceres o por pura y mera estrategia si dicho colectivo, asamblea...la hemos usado para unos fines personales que ya consideramos satisfechos. El sujeto central de la anarquía es única y estrictamente el del individuo, aunque tantos años de influencia izquierdista, y/o simplemente simple ignorancia; hacen que cuando alguien reclama su unicidad se exponga como un muñeco de feria a todo tipo de “calificaciones” y desconsideraciones. A partir de aquí, y partiendo del sujeto central claro que todo es posible siempre salvaguardando el espíritu del individuo; un individuo puede considerar su afiliación sindical porque mientras vivamos en este sistema y nos toque trabajar, sabe que está expuesto a las potenciales vulneraciones que cometan los patrones sobre él y hay que protegerse al respecto, también puede valorar su unión a otros individuos afines a él con unos mismos sentimientos, maneras de ver la vida, lenguas o incluso gustos musicales Por otra parte, y a pesar de los enormes 18

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adelantos tecnológicos que gozamos en esta década de los años 20...existe un grave problema de vacío ideológico , especialmente entre las “nuevas generaciones” de considerados anarquistas que en lugar de beneficiarse de estos citados adelantos buscando fanzines, revistas, libros (o adquirir formatos físicos haciendo el pedido cómodamente desde casa) para poder formarse mínimamente (hay un abundante surtido en formato PDF) , en lo que invierten su tiempo es en la creación de dibujos , la difusión de eslóganes manidos, o la elaboración de “memes” con supuestas o no supuestas frases dichas por referentes anarquistas, pero que cogen “con chinchetas” y es a lo que se limitan...no diré yo lo que deben hacer, por supuesto, pero resulta un tanto gracioso el asunto al respecto de sus desconsideraciones y calificaciones. La riqueza de la anarquía reside en su multitud de formas y maneras de encararla... incluso dentro del propio individualismo anarquista nunca ha existido una corriente homogénea y han coexistido posiciones tan dispares (con sus respectivas polémicas) como la de Enzo Martucci, anarquista ilegalista italiano, que definía aquello de “mi libertad se detiene en donde termina mi fuerza” como la de Emile Armand, más defensor de un anarquismo individualista con respeto a la libertad de el de al lado. A propósito de esto, recuerdo igualmente a un presunto individualista, dogmático el, que me daba la brasa reiteradamente con diversos aspectos de mi vida personal que me apetecía mostrar por la conocida red social del cara libro; entre otras tantas, critica cada vez que viajo con mi compañera a Euskal Herría, diciendo que “debería abrir la mente y conocer otros mundos”, el muy torpe desconoce que esa es mi tierra paterna, que allí disfrutamos con mi-nuestra familia y de su hospitalidad, y que ostias -imperialismos y chauvinismos a parte- de una preciosidad paisajística, gastronómica. A mi me enamora mi tierra paterna y eso no me hace perder mi “unicidad”, muy al contrario, me siento muy feliz , mi individualidad se siente muy llena y tremendamente alegre cada vez que puedo desplazarme allí y disfrutar de sus montañas, bosques, playa, comida, deportes rurales o música; pero este presunto individualista pretendía aleccionarme sobre cómo deben disfrutar mis cinco sentidos, quería corregir mi felicidad para imponer su criterio. Aprovecho para mostrar mi gratitud de formar parte de este equipo en esta buena revista, que refleja precisamente lo que antes comentaba y además creo que no existe otra igual en lengua castellana, la única revista (“SOLSTICIO”) no dogmática, y en la que damos cabida a todo tipo de “plumas” con sus diversas tendencias anárquicas, cada cual escribiendo en y sobre lo que más cómodos se sientan. Vamos a por diez números más.

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Los despropósitos Laura Vanessa Bautista Niño Estando en el retorno de las volátiles circunstancias sociales y ambientales que nos han permitido un acercamiento a las condiciones más sensibles de la misma humanidad. Se visualiza desde la oquedad, el estado, fragmento que ha dedicado su retórica a difundir el miedo que por cientos de años solo ha sostenido una perversa transformación sutil y voraz sobre las personas de a pie. El siempre desdichado e inconforme proletariado se ve una vez más en la convulsión. Me pregunto si existirá en estos momentos de miedo y paranoia una versión del poder que se salga de manos del estado realmente. Pero un momento, nosotros somos el mismo estado y. ¿dónde está nuestro poder? Hablamos en voz de la crítica y la desobediencia que se queda en el mero hecho de decirlo, ya que la respuesta idónea en la praxis es ir a buscar el pan del día, pero hoy no se puede salir a buscar nada. Los condicionamientos han hecho de la revolución un rumor que se comparte con un like o una ambigua forma de despertar una empatía que, en vez de encajar con el sentimiento de la otredad de forma auténtica, se muestra aún más solapada e hipócrita que nunca. Compartir una noticia que sale de un antro de sujetos monitoreados por las bestias empresariales y gubernamentales se vuelve un predicamento de vida o muerte. Desde que se encuentra el hecho, desde que se edita y quién lo edita y finalmente, desde lo que se publica en pro o no de proteger una vertiginosa y opulenta maraña de formas de corrupción que solo imparten sugestión colectiva. La desinformación en su auge.

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Para el artista contemporáneo, la única verdad que existe es el maldito aire de vida que entra por sus narices y la dirección insurrecta que toman sus pies para llevarlo a romper los esquemas en forma de incidencias políticas con sus propias manos, con su cuerpo. Transformando todo lo que alcanzan a dimensionar sus ojos. Un paso al frente de una anarquía que empezó siendo burguesa, porque sí, el arte es y siempre ha sido burgués. Y en la soberbia mundana y putrefacta que hoy ha provocado las formas económicas del capitalismo, se tambalea como malabarista sobre una cuerda floja, tratando de no perder la gordura para hacer mostrar las verdades que al ojo proletario le es obvio y cotidiano, pero no se atreve a dejar en el olvido.

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El capitalismo de los árboles juan keller Cuando la ráfaga de viento cesa, el clavel del aire se posa sobre una rama del olmo. El parásito sorbe al anfitrión que se deja sorber. El clavel priva al árbol de sol, aire y lluvia. El viento vuelve a soplar pero el invasor está cómodo en su lugar. Con el tiempo, el árbol muere y el clavel muere.

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Abrazando la Nada Jaime Manso Castaño

Tras el asalto al cielo de Efialtes y Oto, en un claro ejercicio de desafío a la omnipotencia de los dioses, Zeus condenó a los individuos a ser divididos en dos y su rostro fue retorcido para que viesen constantemente el corte por el cual fueron seccionados, en recuerdo al castigo por su osadía. Más una vez que fue separada la naturaleza humana en dos, añorando cada parte su mitad, se reunía con ella. Se rodeaban con los brazos, se enlazaban entre sí deseosos de unirse en una sola naturaleza y morían de inanición, por no querer hacer otra cosa separados los unos de los otros. Apolo en un acto de falsa piedad, y en un acto de sincero egoísmo; ya que si la especie humana se extinguía nadie les adoraría, curó esta división dándole la vuelta a sus partes sexuales, facilitando su unión, y garantizando así la existencia de la especie. Mediante este mito heleno se representa la naturaleza tan necesaria del afecto humano a través del abrazo entre individuos y justificar así el por qué del principio del nombre de este artículo. En esta unión simbolizada a través del abrazo se puede llegar a un ser superior y mucho más fuerte que a la suma por separado de cada individuo, como lo era la figura del Andrógino, el cual era más fuerte y mejor siendo ambos sexos a la vez, que el varón y la hembra de forma aislada. A día de hoy, se puede traducir que; la unión hace la fuerza, o como nos demostró el príncipe Kropotkin, dos individuos tardarían menos en construir una torre y obrarían mejor, si la hiciesen conjuntamente que si cada uno hiciese una por separado. La individualidad nunca ha de estar supeditada a la unión, pero sólo mediante la unanimidad de sus intereses podremos ofrecer la mejor de nuestras versiones y nuestros más bellos actos. El ego del YO a través de la meritocracia nos ha moldeado en una idea de que cualquier forma de éxito social sólo depende de lo que cada uno haga, sin tener en cuenta la dependencia que tenemos de los demás. El individuo es una unidad social que está en constante interacción con el conjunto de individuos, cuya suma forma la sociedad, de la cual recibe multitud de estímulos y percepciones las cuales va filtrando y clasificando en su ser, adquiriendo una conciencia individual. Dicha conciencia no consta en las estadísticas, no conforma la opinión pública ni una voluntad popular. Nada es lo que queda ya de esperanza en poder solucionar la catástrofe a la que la propia civilización se ha abocado, y que procede de una forma tan lenta que aún pensamos que es reversible. “La esperanza está ligada a la espera, a rechazar lo que está ahí, a temer vivir. La esperanza ese lento pero constante impulso hacia el mañana que nos es comunicado día tras día, es el mejor agente de mantenimiento del orden.” como nos hace saber el Comité Invisible en su ensayo Ahora. ¡Consumir menos, para poder seguir consumiendo! Proclaman los decrecionistas en un absurdo intento de mantenerse en el tiempo, ¡reformemos lo que está mal! Declaran los progresistas, con el mismo resultado que obtiene quien echa perfume al estiércol, ¡mantengamos la situación como está! Gritan los conservadores con su rancio inmovilismo, pensado que aún se puede estar peor.

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Como apostaba Nechayev, ya solo nos queda reconocer la realidad negativa que nos rodea y destruirla por completo, dejando a las generaciones futuras la tarea y la responsabilidad de pensar las nuevas directrices en las que empezar a crear, pero en circunstancias totalmente diferentes a las que hoy nos enfrentamos, sin ataduras ni cárceles morales a las que hoy estamos sometidos y nos impiden ver más allá. La mentalidad por la que conceptuamos la realidad actual es regresiva ya que depende de grandes organizaciones (sistema capitalista, Estados, tecnología...) ya que depende de organizaciones sociales que colapsarán. Y una vez se hubiera perdido por una generación,llevaría siglos el reconstruirla, simplemente como costó siglos el construirla la primera vez. Y la sociedad industrial, si fuera construida desde el principio sin ayuda externa, sólo se podría hacer en una serie de etapas: necesitas herramientas para hacer herramientas para hacer herramientas para hacer herramientas... se requiere un largo proceso de desarrollo económico y de organización social. E, incluso en ausencia de una ideología opuesta a la imperante, no hay razón para pensar que alguien estaría interesado en reconstruir la sociedad actual tal y como la conocemos. Las viejas proclamas rupturistas suenan en su gran mayoría de forma seca y hueca, por ejemplo, una de las cuestiones centrales en sus discusiones es la autogestión de la vida a través del control de los medios de producción, de los servicios públicos, etc... pero algo así no cambiará la esencia del mundo ni la del individuo, sino que lo reproduce de forma autogestionada manteniendo la producción a gran escala, el control de la tecno-industria, la sociedad de masas, la metrópolis, etc... la cuestión no debería ser quien tiene los medios de producción sino la destrucción de esos mismos medios de producción y todos sus fundamentos estructurales, para ser cuestionados posteriormente y reinventados según su función social y verdadera utilidad. Destruyan, destruyan y destruyan hasta que desaparezcan de nuestras vidas las viejas y arcaicas formas de poder, antropocentrismo y autoritarismo, la destrucción tiene que ser profunda y constante. Abandonado la adoración por los objetos en un mundo de cosas muertas, basando las relaciones afectivas en la pasión y no en la repetición mecánica propia de la industria fabril, como decía la Internacional Situacionista; el aburrimiento es contrarrevolucionario. Solo a través de la continua evolución de nuestra conciencia y la continua comunicación y debate entre individuos, nos alejaremos de la eventualidad y las circunstancias. Abandonando también cualquier influencia religiosa, ya que Dios independientemente de la religión que lo interprete, no es más que la proyección de algo bien material existiendo debido a una reproducción de valores en cadena que nos enseñan desde pequeños, lo cual conlleva la prohibición de la reflexión y la crítica.

Herida abierta Juan Jesús Martínez Aquella vez regresaba de jugar fútbol. Cuando llegué, mi mamá me plantó sus ojos con rabia. ¿Qué tendrá?, pensé. A lo mejor se ha peleado con mi papá, o seguro mi hermano menor le ha hecho alguna broma pesada. En ese instante me increpó: – ¿Dónde está el reloj? – ¿Qué? –mascullé estupefacto. – ¿Qué has hecho con el reloj? –volvió a preguntarme. – ¿De qué reloj hablas, mamá? –le pregunté confundido. – Seguro ya lo vendiste –volvió a increparme. Me quedé en silencio y mi hermano me miró asustado. – ¡Ya no se puede contigo, Joel! ¡Ahorita te me vas de la casa! –sentenció mi madre con una ira que podía atravesar los ojos del mismo diablo. Sin dejar de gritar, fue como un rayo a mi habitación, y con algunas de mis ropas en sus manos, se dirigió a la puerta, la abrió, y me gritó: – ¡Lárgate de mi casa! Me quedé desconcertado, sin atinar a decir o hacer algo. Mi mamá me sacó a empujones, y luego tiró mi ropa. – ¡Lárgate! – volvió a decirme. Y al instante, me aventó la puerta en la cara. Me quedé inmóvil, parado frente a mi casa. Mi mente se nubló un instante, miles de ideas rondaban por mi cabeza. Sé que soy malcriado, pero no merezco esto. Me ha echado como un perro, pensé. Sentí que por mis mejillas corrían mis lágrimas. Recogí mi ropa, y comencé a andar sin rumbo. A pesar que intenté dejar de llorar, mis lágrimas seguían cayendo por mi rostro de manera inexorable. Sentí que algo me estrujaba el corazón. Me fui caminando hasta llegar cerca al túnel de Coishco. Allí me quedé esperando, a que se detuviera algún carro y me lleve hasta la casa de mi tía. Ya empezaba a atardecer y no paraba ni un automóvil. Y ahora cómo llego

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a Guadalupito, pensé. Ya estaba perdiendo las esperanzas, hasta que una camioneta se detuvo. – ¿Qué te pasó? –me preguntó la señora. – Mi mamá me ha echado de la casa -repuse, y me eché a llorar. La señora me dijo que subiera a la camioneta, y ahí le narré lo que me había pasado. Cuando terminé de contarle, sintió pena por mí, y me daba palmaditas en la espalda, diciéndome: – Ya no llores, hijito. No tengas pena, todo va a estar bien. Me iba pensando en lo todo lo que había sucedido. Me sentía un miserable. Minutos después llegamos a Santa, y la señora me indicó: – Hasta acá nomás puedo dejarte, porque me dirigo a otro lugar. Toma, esto te alcanzará para cojas un auto y te vayas a la casa de tu tía. Le di las gracias por haberme traído, y le aseguré que nunca iba a olvidar lo que estaba haciendo por mí. La camioneta se alejó, y yo me dirigí a tomar un auto para Guadalupito. Cuando llegué, mi tía se sorprendió al verme, porque ya era de noche. Le dije que mi mamá me había echado, acusándome de haber vendido el reloj de mi padre. Terminó reprochándome, y me dijo que por qué me había venido, que mejor me hubiera quedado. Pensé que iba a ponerse a mi favor, pero no fue así. Esa noche me quedé a dormir en su rancho. Al día siguiente nos fuimos a Chimbote. Ya en casa, mi tía le increpó a mi mamá: – ¡¿Cómo lo vas a botar de la casa?! ¿Acaso no es tu hijo? ¿No te da pena? – ¡Tú no sabes lo que hizo! –arguyó mi madre. – ¡Lo sé, pero eso no te da derecho a echarlo como si fuera cualquier cosa! – afirmó mi tía –. ¡Aquí se queda, y no se hable más! Mi mamá cedió y aceptó mi regreso, pero a regañadientes. Nunca le perdoné lo que me hizo. Dejó una herida abierta en mi corazón. Desde ese día empecé a odiarla. – ¿Odias a tu madre? -inquirió Julián estupefacto.

– Sí, porque me echó como un perro. Me dolió lo que me hizo, y todavía me duele cada vez que me acuerdo. Que le costaba decirme: Discúlpame, hijo. Pero nunca lo hizo. – Sí, tienes razón, no se disculpó contigo – admitió Julián-.Pero es tu mamá. ¿Y tu hermano no dijo nada? –volvió a preguntar. – Ese idiota me da cólera. Por su culpa me echaron de la casa. Él había perdido el reloj.

1984/2020 y Realidad Aumentada Fabiรกn Correa

REVISTA SOLSTICIO

1984/2020: El doble piensa ya llegó y la ilusión de la simulación se nos volvió realidad. Las voces acalladas. En tiempos de abrazos postergados. Y besos en tránsito. Corazones aletargados. Y caricias aplazadas. Ojos que ven demasiado. Son obligados a no mirar. El ojo por ojo será la tumba de su sistema. Eclipsados por mirar más allá. Por disfrutar la poesía de la revuelta Antes que la anestesia de la mercancía. De la apariencia. De la imagen invertida. La imagen divertida nos gobierna. Sociedad instagrameada, 1984 es 2020. ¿O no? El futuro una bota en la cara o una sonrisa forzada. Por canicas de control. El frío en la piel ya no nos detendrá. Un Cataclismo latente nos espera. En espera, en espera. Es aterradoramente hermoso el arder de las iglesias. Sus llaman nos llaman, bailando vamos hacia ellas. El amor y la alegría de la revuelta. La primera línea está en cada esquina. En cada instituto. En cada plaza. En cada barrio. Seamos solidarios con la lucha. Será nuestra hora o la nada. ¿Si nadie nos ve será que no existimos? Pero los “nadies” firmes siguen acá y cada vez somos más. La desesperación, la venda y el ruido. La turba clama castigo contra despotismo. El mendigo oprimido. El humano carcomido. El ruido, el grito, la venda ha caído. El fuego, la piedra, el destino.

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Realidad aumentada: “Se encuentran en la atmósfera porciones de aire que lo espíritus han dispuesto de modo que reciben rayos reflejados desde diferentes lugares de la tierra, los envían al espejo que tienen debajo de los ojos, de manera que inclinando el cristal en diferentes sentidos, se ven diferentes partes de la superficie de la tierra. Se verán sucesivamente todas si se ubica sucesivamente el espejo en todas sus posibles posiciones. Puedes pasear tu mirada sobre las viviendas de los hombres. Yo tome diligentemente ese espejo maravilloso y en menos de un cuarto de hora pasé revista a toda la tierra…” CH. FR. Tiphaigne de la Roche, La Ghiphante, 1760. Pantallas que nos ocultan y nos revelan. Amortiguan la luz en su composición translúcida. Tan rodeados de ellas que no las vemos. Modificándonos a nosotros y nuestra realidad. Alterando el ecosistema de nuestras sensaciones. Nuestras emociones titilantes. Conformándonos. Deformándonos. Refractándonos. En todas direcciones. Retazos de vos. Sinécdoques Litotes. Fetichizados quedamos. En todos lados pantallas. En todos lados miramos. En todos lados nos miran. Explotando nuestro narcisismo. Explotando nuestro voyeurismo. Y ¡No! No es paranoia mi vida. Perdido en ese mar –acecha el KrakenOculto en esa nebulosa. Viendo sin ver que, ve que no ve y ve que nadie lo ve. Enfermos por la imagen de uno mismo corremos a tientas tras ella. Detrás de las capas de filtros no sé si estás tú, o yo. Detrás de todas las apariencias, no sé si te encontrare.

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Ciegos de tanto vernos. Ciegos de imágenes aglutinadas en la nada. La nada que está en todos lados. La vacuidad de la pantalla. La ubicuidad de la mirada degradada. Con su centro en todos lados y su límite en ninguna parte. Inconmensurable vacuidad. Que estalla en tu rostro en cualquier momento. Y sin lamento lo asimilas. Y sin lamento lo apercibís. Las pantallas que apantallan. Nos tapan. Nos envuelven. Nos regurgitan soledades acompañadas. De la nada. De la nada. Pantallas que estallan. Estallan en guerras virtuales. Guerras reales. Virtuales reales. Ya no tiene diferencia. Ya no hay diferencia. Nos envuelve. Teleguiados a distancia. No hay discrepancia. En un rapto de lucidez, lo ves. Es todo al revés. Tu libertad es la condena brutal. Tienes la libertad de lo siempre igual. Y qué triste ironía que sea yo quién lo diga. Escribiendo a través de pantalla. Y tú leyéndolo a través de pantalla. ¡No hay salida! ¿Lo adivinas? Atrapados estamos y nosotros mismos nos entregamos. Piensa fuera de la caja te diría, luego piensa de nuevo. Fuera de la caja, hay otra caja, y otra caja y otra caja y otra caja. Como cajitas chinas, unas dentro de otras. Tras el limite otro límite más y así, hasta el fin sin parar.

PER SONAL Editor. Maximo Panclasta: editorial.ocaso@gmail.com Escritores. Juan Keller: juan.keller@sondarecords.com Vanesssa Bautista Niño Beatríz Eloísa León Darío Fabián Correa Sinyu Jaime Manso Castaño Juan Jesús Martínez Directores de arte. Maximo Panclasta: editorial.ocaso@gmail.com Factotúm. Jorge Aroca: deoptdnen_008@hotmail.com Diseño. Jorge Aroca: deoptdnen_008@hotmail.com David Martinez: editorial.ocaso@gmail.com Colaboradores. Diego Villalba• David Martinez • Sebastián Lemba • David Montaña • María José Castellanos • Violeta Fernández • Alelí Escasany • Zine Mefazemser • Coletivo R.U.A.S. Propuestas. Son bienvenidas todas las sugerencias y propuestas en cuanto a textos (ensayos, cuentos, poemas, críticas, reseñas, etc.) fotografías e ilustraciones. Si deseas hacer parte del equipo de colaboradores o tienes alguna duda, sugerencia, reclamo puedes enviarnos un mensaje o una muestra de tu trabajo al correo de la editorial: editorial.ocaso@gmail.com

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