REVISTA COMUNITARIA UVM

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Práctica de Grupo y Comunidad ESCUELA DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES CARRERA de TRABAJO SOCIAL Junio, 2021 - Viña del Mar, Chile.

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Bitácora, en Trabajo Social: Capturando realidades comunitarias en Forestal. Práctica de Grupo y Comunidad ESCUELA DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES CARRERA de TRABAJO SOCIAL Junio, 2021 - Viña del Mar, Chile.

Práctica de Grupos y Comunidades

Profesora guía: Sandra Rojas Cáceres. Co-investigadora: Viviana Donoso Donoso 2


ÍNDICE

Prólogo 4 Autoras: Alejandra Duarte Figueroa y Guísela Galarce Aranda Cambio desde las raíces

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Construyendo recuerdos al compás de la música

La necesidad de estar presente

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La atemporalidad del ayer

Forestal alto un asentamiento potente con rostro de mujer. Desde la juventud del presente para el Forestal del futuro.

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Autores (as): Sergio Rojas Loyolaa, Sofia Soto Parraguez, Isabel Soto Guzmán. Conciencia ecológica territorial Pino Huacho “MI verdad”

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No hay bien alguno que no nos deleite si no lo compartimos Uno a uno todos somos mortales… Juntos, somos eternos

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AUTORES: Rita Allard Larraín, Felipe Araos Muñoz, Marianela López Concha Forestal: Territorio, participación, sentido de pertenencia Pedro Jofré Orellana: “El Joven

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Combatiente”

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forestal: territorio, participación y sentido de pertenencia Emilio Barraza Durán: el poeta del

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eterno ascenso

Bienvenida al nuevo ciudadano, con un futuro ya trazado por la marginación, inequidad y falta de oportunidades.

Autoras: Laura Acosta Hutinel y Nicolette Pérez Fernández

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NO bajare mis brazos, como símbolo de Resistencia y lucha ante la extinción de mi cultura y cosmovisión, por parte de un Estado opresor.

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Participación de la Comunidad de Forestal en Tiempos de Pandemia del Covid-19 La dirigencia deportiva y la Participación infantil en el Territorio de Forestal Participación: Patrick Castillo y el Tranque Navegable Viviendo el Territorio Participativo e Inclusivo

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PRÓLOGO La gran cita con la fotografía social, tiene que salir de una pasión. Usted tiene que ser, literalmente, activado por la gente a quien fotografía para entender el sufrimiento que está pasando, que la vida es valiosa. La vida es bella. La vida es preciosa, y muy corta. Eugene Richards.

El presente trabajo es producto de una construcción conjunta entre estudiantes de trabajo social más el vital aporte de líderes y lideresas locales del cerro de Forestal en la comuna de Viña del Mar. Bajo el proyecto titulado Resiliencia Comunitaria: la percepción visual y la huella que genera la fotografía como rescate y refuerzo de la identidad local del territorio de Forestal, Viña del Mar, ante el contexto de crisis socio-sanitaria del Covid-19, siendo parte del fondo de investigación interna de la Universidad Viña del Mar. Los relatos, las imágenes, los rostros y espacios se conjugan para dar cuerpo a historias locales, espacios íntimos, recuerdos, construcciones, años caminados por calles polvorientas y micros llenas, lluvias, sol, frío, calor, en fin resistencias vividas. Historias construidas con memoria y proyección de crecimiento y ,mejor aun de desarrollo... generación tras generación, niños, niñas, personas mayores, hombres y mujeres de lucha con sello de identidad, pertenencia, rincones familiares... Un homenaje a voces acalladas y desafíos pendientes, presentación de nuevas marginaciones, expresiones de sociedades cada vez más individualistas, pero sin duda con un sello de solidaridad social que les hace sobrevivir. El quehacer del Trabajo Social como profesión enfrenta múltiples desafíos dentro de un contexto en el cual abundan las preguntas y los cuestionamientos, se está asistiendo a un tiempo-contexto de quiebre de certezas y paradigmas. Por ello que en esta nueva relación entre Estado- Sociedad Civil, la práctica profesional exige encarar un proceso de construcción y resignificación del campo profesional, cuestionando y problematizando marcos teóricos, estrategias y metodologías de intervención y sobre todo dando el sitio de protagonismo que la comunidad y su territorio merecen.

Sandra Rojas Cáceres Doctora © en Trabajo Social Académica Universidad Viña del Mar

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Autoras: Alejandra Duarte Figueroa - Guísela Galarce Aranda

Cambio desde las raíces

Desde la recuperación de espacios públicos como el parque, donde la instalación de juegos de primera infancia en la plaza y otras actividades realizadas por la comunidad, se ha vuelto un espacio donde se encuentran los vecinos, si el espacio público está abandonado, no hay lugar de encuentro, los vecinos no se conocen y por tanto no se generan lazos y con ello no hay conexiones que ayudan a desarrollar actividades de participación y colaboración.

Un vecino del sector de Forestal Diego Barraza Orrego, señala “Ese lugar significa algo tremendamente especial para nosotros, ya que allí precisamente los vecinos del sector se han encargado de poner sistemas de riego (como captar la llovizna y a través del plástico se riegan las plantitas) también ese parque posee varios basureros y son los propios vecinos quienes se encargan de su mantención. Técnicamente, ese lugar se sostiene gracias a la astucia y la gente joven que quieren un cambio desde las raíces culturales. La participación es clave, para Incluir a toda la comunidad desde el inicio hasta el final en la recuperación de estos espacios públicos, lo cual llevara a entender, respetar y a cuidar el lugar en el que viven.

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La necesidad de estar presente

La participación comunitaria es una muestra clara de cómo se puede aportar y ayudar al beneficio de la misma comunidad. Es por eso que el aportar las propias ideas, las opiniones de manera indicada puede ayudar a lograr esa meta. Ignacio Gutiérrez Álvarez señala “Yo creo que es un trabajo social y se ha transformado en una necesidad de estar en constante contacto con los vecinos y buscar una mejor calidad de vida de los vecinos, cada una de las instancias en las que uno va participando y que va aportando va mostrando el desarrollo que se puede forjar junto a la comunidad, entonces eso es como lo más importante es que el trabajo social se transforma en una esencia y un pilar fundamental del desarrollo como uno como persona.” Tanto la Participación como el fortalecimiento de la Comunidad pueden resumirse en un proceso de empoderamiento del territorio. Para que de esa manera las personas tengan el sentido de pertenencia en sus localidades y los motive a seguir apoyando y contribuyendo con lo que necesita la comunidad.

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Forestal alto un asentamiento potente con rostro de mujer. Cómo no poseer resiliencia y sentido de pertenencia en los residentes del asentamiento precario del sector alto de Forestal, a los que se les va la vida tratando de mejorarla y poder proyectar un futuro para familia, la resiliencia es más poderosa, con escases de servicios básicos como agua potable, alcantarillado y electricidad, lo que en el día a día eso agotaría a cualquiera. Si bien no poseen título de propiedad en el sector ya se sienten arraigados y parte de Forestal desde donde miran con anhelo el ser incluido como parte importante de Viña del Mar. De igual modo, existen actores sociales que se deben destacar y sobre todo con un sentido de pertenencia tal que son capaces de pasar sobre sus prioridades por la de los demás, como es el caso de la señora Katherine Riffo Leiva Dirigenta del Campamento Felipe Camiroaga y presidenta del Comité Vista las Palmas II, una mujer con suficiente sentido de pertenencia que tienen un gran ímpetu en su quehacer dirigencial, gran mujer: empoderada, persistente, perseverante, con sus metas claras inalterables e invariables. Se puede observar un gran sentido de pertenencia, muy enraizado en el sector alto de Forestal, donde vieron construir sus vidas tabla a tabla, ladrillo a ladrillo, si bien con una escasez económica cla-

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ra, pero con mucha esperanza al torcer la mano al destino y forjar una mejora en sus vidas, comenzar de cero y sentir que están construyendo sus vidas a punta de su esfuerzo. Todo lo nombrado anteriormente no sería algo concreto sin personas altruistas como la señora Katherine quien con su sentido de participación logra estimular a sus pares día a día procurando el bien de manera desinteresada, impulsando a la comunidad a avanzar y salir adelante , parándose una y otra vez si es necesario, se destaca aquí un común denominador que los une a esta valiosa dirigenta, que es buscar con gran lucha una mejor calidad de vida levantándose y renaciendo las veces que sea necesario, pero cada vez con más fuerza.


Desde la juventud del presente para el Forestal del futuro.

Si se habla de medio ambiente, aún no es tarde para decir que todo está perdido, pues aún hay esperanzas, donde la conciencia ambiental se podrá encontrar en el propio entorno, ya que sólo se debe confiar. ¿En qué? se preguntarán muchos, sin apreciar que en algunos sectores se han hecho las cosas bien, ya que si se mira el alrededor se puede encontrar una juventud que cree en el futuro y que se puede retar al destino y cambiarlo favorablemente. Es por eso que no se puede dejar de lado el ejemplo de Ámbar Bascuñán Bazaes quien es una joven Forestalina de nacimiento, estudiante de derecho de la Universidad Católica de Valparaíso, comprometida con su comunidad y con el medio ambiente, lo cual es un reflejo de “si un árbol tiene raíces sólidas este crece de manera firme”, en el caso de Ámbar su raíz, sin duda, es su familia, desde donde floreció el sentido de pertenencia, compromiso comunitario y la participación. Reflejo de que la realidad de la juventud del sector de Forestal no es tan alejada y que posea conciencia social, sumado a ello el compromiso ambiental y apuntar a movilizarse por un fin en común. Buscando apoyo entre sus pares con la esperanza de recuperar los espacios verdes perdidos, eliminar los microbasurales que han aflorado en este periodo y sobre todo poder realizar una reeducación en la comunidad e instalar desde la infancia este sello ecológico, para así asegurar un Forestal a las generaciones posteriores. Ámbar comenta “ …como jóvenes tenemos que empoderarnos, la idea es reeducar y dar el ejemplo con el “hacer “ todo con la esperanza de que se puede un cambio partiendo por uno”…, entonces nos queda solo confiar que la infancia Forestalina pueda seguir los pasos de la juventud de ahora.

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Autores (as) Sergio Rojas Loyola. Sofia Soto Parraguez. Isabel Soto Guzmán.

Conciencia ecológica territorial

A mí me preguntan por qué empecé a reciclar en Forestal, obviamente porque nací y me crie ahí y siempre voy para allá. Me gustaría mucho que Forestal fuera una zona punto verde que le llamamos nosotros en jerga ambiental, que recicle 100%, que vaya un camión grande ojala mío, que vaya por las casas reciclando y la gente yo sé que lo va a hacer, porque yo me visualizo así. Para mí es importante Forestal ya que mi familia y mis amigos viven ahí, es más que un cerro en realidad, porque igual significa harto Forestal, por el tema de las tomas, mm es peligroso, pero es peligroso en todos lados, yo vivo en el centro de Viña y es más peligroso que estar en Forestal, en mi casa han entrado cuatro veces a robar. Entonces en realidad si dicen: a ves aahh es que tu si viven en el centro, es súper entretenido vivir en el centro, vas a pie a todos lados, todo el tema todo lo que querai, pero el tema de seguridad es malo aquí en Forestal nosé en Achupallas, donde vivas pasa lo mismo.

Esta imagen fue tomada en el territorio de Forestal en la calle Caupolicán. Refleja la infancia de Tamara Duran Altamirano (1984) , quien se desempeña actualmente como actora social dedicada al reciclaje dentro del territorio de Forestal.

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Pino Huacho

Este valle lo llamamos el “valle del peral”, porque a su entrada hay dos perales silvestres, está ubicado en la parte alta de Forestal, como a 100 metros hacia el interior, pasando la carretera. Es un lugar conocido por aquellos que les gusta caminar y recorrer los cerros de Forestal. Para mí es especial porque durante 20 años lo usé como centro de formación y convivencia con la naturaleza, para enseñarles valores a los integrantes de nuestro grupo scout Madre Tierra. Dos veces al mes subíamos a este valle por dos días y en el verano instalábamos un campamento por una semana, cada cierto año. Durante esos años hemos formado buenas personas, muchos de los cuales ahora son profesionales y todos residentes de Forestal. Además, paralelamente, también usaba este valle para recrear a los niños y niñas de la banda escolar que dirigía en el colegio Blanca Vergara y de la patrulla de transito que también dirigía en el mismo colegio. Personalmente, fue mi “segunda casa”, por decirlo de una manera, ya que cuando mi estrés estaba por explotar me iba solo a este lugar que lo llamaba “Mi valle” y me quedaba hasta el otro día y volvía a la civilización más calmado y relajado. Haaaa y aun antes que tuviese y dirigiese estas actividades, ya lo usaba para llevar a los niños de mi calle, les estoy hablando de más menos cuando tenía 20 años, por esto es lo más significativo para mí. Finalmente, para llegar a este valle se debe usar como referencia geográfica, el llamado “pino huacho”, único de su especie en ese paisaje. Es un relato de Miguel Saavedra Rivera. 12


“MI verdad”

Sandra Ramos Calderón, 58 años, profesora de Religión y Moral de la Universidad Católica de Valparaíso. “Enseñar siempre: en el patio y en la calle como en la sala de clase. Enseñar con la actitud, el gesto y la palabra” Ya lo decía Gabriela Mistral en su máxima de educación y Sandra ha hecho de esta frase una consigna de vida. “¿Qué significa para mi vivir en Forestal? Una oportunidad de ver la realidad de nuestro país, una realidad social porque sabemos que Viña tiene diferentes realidades(...) yo nací en Forestal, viví en el paradero 3 donde aún era más precaria la realidad, donde había más pobreza. Yo soy parte de esa realidad por eso empecé a trabajar con la gente, desde los 12 años en un sector donde no habían caminos, sin locomoción, no había alcantarillado, ni agua potable, eso indicaba una línea de pobres, porque eran lugares que se tomaban y se construían las casas. Esa era la realidad, de esfuerzo, donde no llegaban los beneficios estatales y por eso la iglesia en la Parroquia se convierte en el lugar de ayuda, en mi trabajo, como instancia de ayuda económica para las personas, de alimentación, de abrigo en la entrega de vestimenta, entre otros. Y bueno en la dictadura la realidad fue más dura porque era un grupo de personas sometida por el sistema, maltratada, perseguida, por lo tanto, siempre había que sacarse la mugre, esforzándose, nada era fácil. Ese tiempo fue de muchas luchas sociales y fui afortunada de poder ser protagonista porque igual hay mucha gente que estaba en sus casas y no tenían las instancias de poder hacer algo cuando la gente necesitaba y yo lo logré. Nunca me voy a arrepentir de haber nacido y crecido en Forestal, todavía tengo la esperanza de volver algún día a vivir allá”. Con esta sonrisa **relata Sandra sus memorias de vida comunitaria y adulta en lo que ha sido su trabajo como lider. Su identidad, sus memorias y esa resiliencia son producto del amor innegable que tiene a su territorio y que se ha visto reflejado en las acciones colectivas que realizó en la Parroquia de Forestal. Es que el arraigo que ella expresa es algo más que “echar raíces”. Es un sentido de pertenencia que se evidencia por la solidaridad hacia sus pares; niños y niñas, jóvenes y adultos que estando en situaciones de precariedad acuden a la Parroquia “Nuestra Señora de Fátima” donde ella participó activamente en prestar ayuda social y donde se define como una “Educadora y Promotora de actividades para la Comunidad”.

Además de estas acciones, desempeñó un rol como coordinadora en la pastoral Juvenil, donde señala que “no era el lugar para juntar jóvenes para ir a rezar o para ir a recibir el sacramento, sino que era el lugar que teníamos los jóvenes para vivir juventud, para compartir, para soñar que otra sociedad era posible, para pensar qué si podíamos hacer algo para ayudar a los niños, sobre todo de la población y también a otros jóvenes a construir una vida más justa”. Finalmente , enfatiza “En mi casa siempre me dijeron que la mejor forma de tener un mejor pasar es educándose y después de tener la posibilidad de entrar al Liceo fui a la Universidad y creo que fue una posibilidad también de mostrarle a los demás que eran de mi edad que si se podía ir surgiendo”

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Bienvenida al nuevo ciudadano, con un futuro ya trazado por la marginación, inequidad y falta de oportunidades.

Primera visita en el hospital Gustavo Fricke a puérpera y recién nacido por parte de una funcionaria, entregando una flor como símbolo de nuestro cariño y compromiso con el “nuevo ciudadano” así como la entrega de una citación para un próximo control. Chile, uno de los países más inequitativos del mundo, donde los ricos son cada vez más ricos, los pobres cada vez más pobres, es la consecuencia de un modelo neoliberal impuesto por la dictadura. Esto explica en gran parte que sea “la cuna en donde uno nace, lo que determina el lugar que ocuparas, en la escala social y económica en el futuro”. Es reproducción de la pobreza y de la riqueza. El dónde vas a nacer determina las oportunidades y tu futuro. Sin embargo, no todos las pueden desarrollar a plenitud, en la medida que crecen y se desarrollan, por falta de oportunidades. Ya que según el quintil de ingresos económicos al que pertenezcas, será el futuro que te espera y donde los determinantes sociales son los que condicionan el nivel de salud, educación, cultura. El doctor Juan Soto Vergara, relata: Siendo director del consultorio Las Torres de Forestal Alto, el cual atiende a la población más pobre 14

de la ciudad jardín, donde las inequidades son más evidentes. Me encontré con un equipo inquieto e innovador, coincidiendo con la necesidad de focalizar los esfuerzos en el periodo de la infancia, si queríamos contribuir a elevar la calidad de vida de esa población. Al poco tiempo se tomó conciencia de realizarlo desde la gestación. Los otros centros continuaban focalizando sus esfuerzos en los adultos mayores. En ese entonces fue muy criticado: muchos sujetos con poder nos la hicieron difícil, pero, aun así, el equipo del consultorio desde el año 1999 fue pionero en plantearse la necesidad de focalizar esfuerzos en el nuevo ciudadano, desde la gestación, con el objetivo de colaborar en disminuir dichas inequidades, en la esfera de la salud.


NO bajare mis brazos, como símbolo de Resistencia y lucha ante la extinción de mi cultura y cosmovisión, por parte de un Estado opresor.

La necesidad de dar a conocer su cultura y cosmovisión, fue lo que motivo al LonKo Segundo Currilen Chueuquen trasladarse a la región de Valparaíso, específicamente en la parcela 11 de Forestal, ciudad de Viña del Mar, la vegetación, árboles de Canelo y otras especies, un rio que cruza en la parte posterior de la comunidad, lo que recrea su localidad de origen, el Sur. “Aquí en la parcela once y la comunidad tenemos que apoyarnos entre nosotros ya que las autoridades dan respuesta solamente en la parte del plan. Señala Segundo. Nosotros como comunidad Mapuche otorgamos importancia, a la naturaleza, los pajaritos y animales, con ellos convivimos y por eso son importantes y hay que protegerlos, es nuestra mirada Ancestral del cuidado de la naturaleza ya que son conocimientos traspasados por nuestros abuelos, mire si usted corta una rama de un árbol, ese árbol NO DARA NUNCA MÁS LA MISMA SOMBRA, nosotros utilizamos la medicina en base a hierbas, aquí vienen a buscar hierbas, esta como Medicina natural, ojala se pu-

diera complementar con la medicina occidental, pero tenemos que tener reconocimiento del pueblo originario, pero cuando se habla de desarrollo para el pueblo originario el Estado comienza con todas las trabas, otra cosa, comenzamos la discusión de la ley indígena en donde presentamos 36 proyectos, pero en el fondo todo lo que formamos nos desplumaron como una gallina y dejaron solo 8, no dan la opción de tener un representante por etnia que represente su cultura y lenguaje. Otro problema es la tenencia irregular de los terrenos lo que provoca incertidumbre, aunque cuidamos los bosques nativos, ya que son el pulmón verde, por eso ojalá este espacio sea de nuestra propiedad, por eso nos unimos con los otros comités de forestal para unir fuerza y hacer presión.

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Autoras: Laura Acosta Hutinel y Nicolette Pérez Fernández

Construyendo recuerdos al compás de la música

Transcurrían los años 70` y la Sra. María Villegas Yáñez llega a lo que ahora es reconocido como Forestal Alto, ubicado en la ciudad de Viña del Mar. Una localidad que aún no era consciente de la velocidad con la que crecería, ocupando gran parte de los cerros que la rodeaban. A sólo una casa de distancia se encuentra “(…) don Abelardo Hernández**, el que logró transmitir un especial entusiasmo para que visitara la sede, oye, él me decía; no, si vamos a trabajar juntos. Fui a clases de dirigentes, aniversarios de la población…” (María Villegas, 2021). Con un ímpetu siempre de querer ayudar dentro de su comunidad (y mucho antes de llegar a ella) es que la Sra. María acepta la invitación de don Abelardo y se une a la Junta de Vecinos (don Abelardo, hombre alto delgado de lentes) y comienza esta bella historia en la que se enmarca bajo el concepto de participación debido a que la Sra. María se levantaba temprano en la mañana y “ yo me metía en la municipalidad e iba a conseguirme con uno y con otro, mira me dio en este tiempo doscientos mil pesos- como se llama este chico que vivía acá- me dio el Tapia que era concejal, total que en la municipalidad me junté trescientas cincuenta lucas.” Esos recursos fueron destinados para viajar con sus chicas, organizando además club de baile “(…) el día martes era el día de la cueca y venían los chiquillos y el día viernes para el tango y ahí nos juntábamos todos hacíamos una comida y estábamos hasta las tantas (…), les encantaba venir, es que hacíamos las medias comilonas”. (María Villegas, 2021). Como se expresa de manera precedente la Sra. María logra generar una alta participación, debido a su gran compromiso con la comunidad, algo que se refleja dentro de sus relatos, si bien por temas de edición no se logra exponer tantos recuerdos como se quisiera, pero su reconocimiento por su cumpleaños Nº 90 y por su participación activa como dirigente vecinal, en el año 2006, tras décadas de compromiso a manos del ahora Diputado Rodrigo González Torres ex alcalde de Viña del Mar, realza y da sustento al concepto delegado hacia ella. Y gracias a su incidencia en la comunidad es que ella se vuelve una candidata rica en historia y experiencias que permiten elaborar una intervención basada en sabidurías y vivencias reales que trazan una línea desde un antes y un durante y porque no decirlo, también, un después.

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La atemporalidad del ayer

Se continúa contextualizando dentro de Forestal Alto, pero esta vez para resaltar no la participación comunal, sino para destacar la comunidad base de vida: la cohesión familiar, que se mantiene dentro del núcleo de la Sra. María (mujer sentada en la foto a la derecha). Tiene 5 hijos, 3 mujeres y 2 hombres (mirar primera foto a la izquierda), hijos que hacen que ella se sienta feliz y muy agradecida por tenerlos y aseverando que “muy buenos niños” (María Villegas, 2021) señalar que gracias a su primogénito ella tiene la vivienda donde hoy reside y la cual se constituye en un centro de reuniones familiares permanentes, como se expresa en las fotos viendo a hijos, nietos, bis nietos, y hasta un tataranieto. Al hablar con la Sra. Clara, una de sus hijas (mirar foto de la derecha), indica con una brisa de nostalgia y alegría, que su participación en la sede vecinal fue por mucho tiempo estimulada por su mamá y para los grupos de la tercera edad, recordando los club de bailes, comidas y cumpleaños, todo participando codo a codo con su madre. Al recorrer los espacio de la casa en la que residen, figuran muchos recuerdos de sus nietos a distintas edades, en la que se destaca la unión en ellos, a pesar de que la vida adulta hace que no se reúnan todo lo que les gustaría, ya sea por trabajo, salud, o distancia geográfica, al visitar su hogar, sin embargo estas aristas no han sido impedimento, ya que el amor de familia expresados en las paredes habla por sí solo. Como se expresa en la foto anterior la Sra. María recibió un reconocimiento para su cumpleaños Nº90 y vale destacar que ahora a sus casi 100 años su cariño a la vida y a su familia la mantienen, para seguir proyectando la imagen de mujer fuerte, autosuficiente, un poco terca (según su hija) y con mucho amor para entregar aun, quizás ya no tanto a la comunidad por la que tanto tiempo se ocupó, pero si a su familia, que es el centro de su ser, demostrando que al cuidar las raíces de sus 5 arbolitos se aseguró de que el día de mañana le brindaran sombra, y demarcando más aun de que la historia es atemporal y que somos producto de nuestra historia.

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No hay bien alguno que no nos deleite si no lo compartimos

Don Pablo Palacios Ortiz, locutor de radio Cultura *F.M sus inicios fueron en la radio Portales aproximadamente a sus 21 años de edad, en el programa por “Amor a la Camiseta”, y así transitó por 4 radios más durante 25 años, enfocándose en el deporte amateur, hasta llegar a su actual radio Cultural F.M, siendo el pionero en las transmisiones del futbol en Viña del Mar, no obstante a su vez ha cubierto distintas áreas del deporte y actividades deportivas como Hockey patín, Derby, Rayuela, entre otros. Tal como aparece en la imagen un gran ejemplo de su participación en el campeonato internacional de Hockey Patín, en el auditorio Raúl San Martin de Viña del Mar. También se destaca por la ayuda a los niños, niñas y jóvenes, recolectando juguetes para entregarlos en las poblaciones y escuelas del sector, a su vez con implementos deportivos debido a contactos que tiene en el extranjero, expresa sentirse contento con poder realizar estos aportes, y destacando la frase “hay que dar hasta que duela” (Pablo Palacios,2021). Desde la radio se realizó un convenio con la Asociación del futbol de Viña del Mar, cubriendo la primera división, transmitiendo todos los sábados, siendo un éxito, ya que mucha gente no podía asistir a ver a su club por distintas situaciones. No obstante se dejó de hacer debido a la pandemia. Don Pablo comenta ser muy fuerte para él esta situación, de pasar a estar todos los fines de semana en las canchas, beneficios, convivencias a encontrarse solo en su casa, siente que le quedan muchas cosas por hacer. Aun así sigue trabajando, apoyando y cooperando con la comunidad.

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Uno a uno todos somos mortales… Juntos, somos eternos

Don Alejandro Toledo Bravo, dirigente social, político y cultural, residente de la población Indus en Forestal, desde que tenía 6 meses de nacido, habitada por trabajadores industriales y sus familias. En donde comenzó su participación con la población, entre sus 15 a 16 años de edad creó junto a amigos un centro juvenil que funcionó por 3 años, hasta el golpe militar, para luego en Enero del año 1975 realiza la primera junta juvenil, con ayuda de un cura amigo, llegando 150 jóvenes, lo que dio pie para crear un centro juvenil en varios sectores de Forestal, lo que hoy son las Capillas. Ubicando a antiguos curas que habían trabajado en Forestal y a causa del golpe militar tuvieron que irse, crearon la Capilla Jesús de Nazaret, luego el 4 de Abril del mismo año, se abrió el primer Comedor infantil de Forestal, contactando al centro de madres de la Parroquia de Fátima, entre otros centros de madres del sector, ya que las condiciones económicas eran bastante precarias debido a las políticas económicas que se implementaron en esa época, llegando a atender a 300 niños y sus familias, posteriormente ampliándose a sectores aledaños. Con ayuda de la Iglesia Católica, se promovió la solidaridad comunitaria a través del desarrollo de proyectos como talleres y programas tales como: “Comprando Juntos”, atenciones médicas, becas, entrega de alimentos para situaciones más dramáticas o como la que se muestra en la fotografía con la implementación de una amasandería en el sector de Tranque Sur en Forestal, así convirtiéndose en uno de los precursores en organizaciones sociales, políticas, comités de derechos humanos, organización de jóvenes, a nivel de todo Forestal, a su vez ayudando también con la democratización de las juntas de vecinos, teniendo una buena llegada con toda la población y creando relaciones humanas con los niños, niñas y jóvenes junto a sus familias, también destacando su gran aporte en el libro “Imágenes para una ciudadanía invisible”

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FORESTAL: TERRITORIO, PARTICIPACIÓN, SENTIDO DE PERTENENCIA PEDRO JOFRÉ ORELLANA: “EL JOVEN COMBATIENTE”

Comunicador Audiovisual, Gestor Cultural, Fotógrafo y Líder Social, entre otras cosas. Fue en el tranque donde se conoció a este muralista, en una conversación previa, antes de concederme la entrevista. Es una persona seria, comprometida que vibra con los desafíos, que sabe bien lo que quiere. Para él era fundamental saber sobre el proyecto antes de embarcarse, existe una suerte de desconfianza, porque como él relata, en el cerro personas externas “…se han aprovechado de la gente, han abusado…” Sus abuelos llegaron a Forestal provenientes de San Vicente de Tagua Tagua, cuando el territorio era muy distinto, “…por decirlo así fueron parte de los colonos también de la parte alta del cerro, de hecho, fueron parte de los fundadores de la Población Loma Sur…” así que se puede decir que fue nacido y criado en el Barrio de Forestal, donde aún vive a sus 30 años de edad, un lugar que define como mágico. Pedro habla de los graves problemas que como territorio viñamarino les aqueja, la estigmatización, la mala conectividad, la falta de seguridad, falta de arte y cultura como en otros tiempos, cuando gestionó muchos eventos en el cerro, donde participaba la familia completa y la poca esperanza 22

de encontrar soluciones por el abandono en que los tienen las autoridades “es un lugar castigado”. Para el estallido social, Pedro fue uno de los principales convocantes, en donde también participaron organizaciones y Juntas de Vecinos, para la marcha que partió desde lo más alto “…fue el cerro completo unido, para manifestarse…expresar el descontento social…” para llegar hasta la Plaza de Viña del Mar, en donde los vecinos de Forestal destacaron por su masiva participación “…siempre estuvo esa latencia de querer manifestarse, es un cerro muy activo, con gente muy potente…”. Sin embargo, los ojos de Pedro brillan cuando habla de su cerro, del sentido de pertenencia y del arraigo de sus vecinos, tiene esperanzas en que la pandemia pase pronto para poder retomar sus actividades, sus sueños y proyectos y esa cohesión comunitaria que ahora siente que falta “… si te dieras el tiempo de caminar, de recorrer los espacios que hay acá en Forestal, te podrías dar cuenta de esa mística que hay acá, y que la verdad es que es algo transversal, toda la gente acá tiene ese sentido de amor al cerro, amor a su territorio, a sus vecinos, y la verdad es que es algo muy bonito y que genera mucho orgullo.”

AUTORES: Rita Allard Larraín, Felipe Araos Muñoz, Marianela López Concha


FORESTAL: TERRITORIO, PARTICIPACIÓN Y SENTIDO DE PERTENENCIA EMILIO BARRAZA DURÁN: EL POETA DEL ETERNO ASCENSO “Si a Forestal hubiera que definirlo en una palabra, es el ascenso”, relata don Emilo Barraza Duran, Profesor de Castellano jubilado, escritor y poeta, quien a sus 65 años tiene a su haber dos libros publicados, El Callejón de los Corderos (2013) y Sueño Ecuacional (2015) dedicado a su madre “A mi madre, analfabeta. Sin embargo, me enseñaste a leer los signos del mundo mejor que nadie…” que le valió el Premio Nacional de Poesía, Chile. Además tiene cuatro libros por publicar y la inclusión de sus textos en importantes antologías chilenas y extranjeras. Su familia emigró de Salamanca siendo él muy pequeño, en donde fueron recibidos de allegados por unas amistades de Forestal, cuando “no habían tantas casas, ni tantas tomas”. Luego se cambiaron a otro barrio, pero siempre había algo que lo hacía volver al cerro, un sentido de pertenencia inexplicable y fue allí donde conoció a su esposa Susana y se quedó en este barrio para siempre, hasta el día de hoy en que se dedica a escribir con pasión. Ha vinculado su arte con el territorio (poesía lárica) que se desarrolla en los lugares donde se habita, con la población como musa. Él habla de los problemas que él percibe en la gente de su barrio, alcoholismo, drogadicción, pobreza “Cristo/ subes/ todos los días/por las escalas del edificio/con

tu pesada cruz/de bolsas plásticas/todos los días/ enfermo y sólo/arruinado/por Caifás y compañía/ con una jubilación/de porquería”. Fragmento del poema Cristo del Edificio. Les ha tocado vivir los engaños de la clase política “Cuando se han roto las esperanzas/ y el saldo de la cuenta es cero pesos/ y el bolsillo pide auxilio desde lo profundo del forro/ y sólo sale un papel gastado que dice/ vote x nosotros…” Fragmento del poema Artista de Micro. Habla de sus aportes en el barrio, haciendo clases en la sala de una junta vecinal a los trabajadores del PEM y del POJH en plena dictadura, “la educación llevada al plano poblacional” dice con orgullo. Recuerda cuando fue invitado por la Presidenta de la UNCO a la inauguración de una Biblioteca Pública, en donde realizó una lectura de poemas “fue una experiencia muy grata, porque fue un encuentro directo con la población de nosotros, con gente nuestra que estaba ahí escuchando y fue muy gratificante, muy emocionante”. Los vecinos de Forestal son “gente muy trabajadora”, relata que las nuevas generaciones son de profesionales y obreros calificados, porque los padres se han preocupado de la educación de sus hijos para salir adelante. 23


Participación de la Comunidad de Forestal en Tiempos de Pandemia del Covid-19 Claudia Espinoza Montes, Presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Forestal (U.N.C.O)

Participación, Territorio y Sentido de Pertenencia son 3 conceptos claves que definen al barrio de Forestal, un lugar único dentro de la Comuna de Viña del Mar, donde confluyen diversos sectores, con una población variada y lugares especiales que sólo se pueden encontrar ahí, como el Tranque de Forestal.

mordial en el territorio de Forestal, puesto que, durante todo el periodo de crisis social producto de la pandemia, ha gestionado ayuda para diversas ollas comunes del barrio de Forestal, aportando con víveres para las familias que lo necesitan y con pañales para los adultos mayores postrados.

Forestal, uno de los cerros más grandes de la comuna, históricamente abandonado por las autoridades, tan cerca del centro de la comuna y a la vez, tan alejado el centro de los vecinos, lugar de encuentro, lugar con historia, lugar de una comunidad unida, pese a los contextos sociales imperantes.

En la fotografía se muestra a Claudia en compañía de vecinos de Forestal, cuya participación ha sido primordial para poder canalizar la ayuda hacia las familias que lo requieren, entregando los alimentos básicos para el funcionamiento de las diferentes ollas comunes del territorio y así asegurar el alimento a las familias más vulnerables del sector.

Aquel lugar que en días recientes se ha visto fuertemente afectado por la Pandemia del Covid-19, no solo en lo relacionado a salud de la población, si no al impacto socioeconómico que se ha percibido en el territorio, en palabras de la lideresa Claudia Espinoza Montes: “La pandemia ha visua-

El rol de Claudia como presidenta de la U.N.C.O y el rol de los vecinos y vecinas, ha mostrado que la participación y el sentido de pertenencia, de ellos hacia la comunidad, es importante para el desarrollo de las ayudas sociales que van en beneficios de las personas más vulnerables del barrio de Forestal, puesto que ahí donde las autoridades no llegan, si lo hace una comunidad unida y una lideresa que tiene gran apego y cariño por el territorio de Forestal.

lizado las dificultades económicas de las familias, el hambre se ha hecho presente y es nuestra responsabilidad poder ayudar a nuestros vecinos”. Es en este contexto que el rol de Claudia ha sido pri24


La dirigencia deportiva y la Participación infantil en el Territorio de Forestal

Juan Gutiérrez Quinio, Dirigente Deportivo Emblemático de Forestal

La Participación de los niños, niñas y jóvenes en el área deportiva han sido un pilar fundamental en la vida de Juan, líder deportivo del barrio de Forestal, que por décadas ha estado vinculado con diferentes organizaciones, entre ellas la Asociación de Jockey de Viña del Mar, Presidente del Centro de Padres y Apoderados del Colegio Blanca Vergara y Presidente del Club deportivo Real Horizonte, lugar que marcó su vida, ya que ahí gestionó ayudas comunitarias en diferentes actividades, como ramadas estudiantiles, campeonatos deportivos y encuentros de los habitantes de Forestal.

El deporte nutre a las personas de una vida saludable, una vida con sentido y más si es en el lugar donde se vive, ya que genera una pertenencia al territorio y un mayor cuidado de éste por parte de los mismos vecinos y vecinas. Volver a que Forestal sea un lugar de encuentro de la comunidad, donde se comparta, se participe y se ayuden colaborativamente unos con otros.

“Hacer las cosas bien para ser un ejemplo para los demás …”, relata Juan como misión de vida, ya que ser un líder implica ser un referente para las demás personas. En parte de su relato, destaca que la unión de Forestal por años ha sido una característica importante del barrio, una unión que pasados los años y dadas las condiciones del estallido social y pandemia, ha ido disminuyendo, convirtiendo a los vecinos y vecinas más individualistas, lo cual implica que la participación ha caído, si bien destaca que el último tiempo la solidaridad si ha estado presente en los vecinos y vecinas que no pueden cubrir sus necesidades alimenticias, lo cual ha sido bueno para volver a encontrarse como comunidad. En la fotografía se muestra uno de los logros más importantes en el rol de líder deportivo de Juan, que es el equipo de fútbol del Club Real Horizonte, el cual dio muchas alegrías a las y los forestalinos, y era un lugar de encuentro del Territorio de Forestal todos los fines de semana, ya que concentraba a madres y padres que acompañaban a sus hijos a los partidos de fútbol en el barrio. Este líder deportivo de destaca la importancia de volver a desarrollar actividades deportivas en el barrio de Forestal, ya que el deporte une a la comunidad y fomenta la participación y el compañerismo, los cuales son valores importantes en la formación de niños, niñas y jóvenes. 25


Participación: Patrick Castillo y el Tranque Navegable

Relevar y visibilizar las fortalezas y debilidades comunitarias de este histórico y emblemático barrio de la ciudad, ese es el desafío. Al sumar los últimos acontecimientos socio políticos y sanitarios del país, se ha percibido, a través de los líderes sociales una baja en la participación comunitaria; ellos, con diferentes oficios y profesiones, a través de sus relatos se ha ido rescatando por medio de distintas vías, prevaleciendo la distinción antes de la pandemia, donde era posible destacarlo como un barrio participativo, sin embargo, también estigmatizado por los asentamientos precarios irregulares, conocidas como tomas de terreno y la ausencia de las autoridades pertinentes que permitieran desarrollar junto a la comunidad, una forma real de dar respuesta a las necesidades que han persistido por décadas. El territorio, la Participación y el Sentido de Pertenencia, destacan en el trabajo voluntario y autogestionado con la motivación de embellecer espacios olvidados por las autoridades. En la fotografía se ve a un vecino de Forestal ayudando a uno de los líderes sociales, don Patric, artesano, que generó el proyecto de hacer pequeños barcos navegables para embellecer el Tranque de Forestal, es digno de destacar.

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Viviendo el Territorio Participativo e Inclusivo

“La historia (local) es una historia hecha con la gente misma, permite que el protagonismo no se circunscriba sólo a la élite, sino que abarque también a la gente anónima, consigue que la historia pase por dentro hacia afuera de la comunidad. Ayuda a los menos privilegiados y sobre todo a los más viejos a recuperar su dignidad” (Paul Thompson). Al visibilizar la participación y el sentido de pertenencia en el territorio de Forestal, los vecinos toman roles protagónicos al empoderarse de su espacio, decidir embellecerlo y poder disfrutar del aire libre y la naturaleza. Esta foto da cuenta de una vecina disfrutando del Tranque después de una limpieza comunitaria a minutos de botar estas embarcaciones al agua, dándole un nuevo sentido a un espacio que era espacio de contaminación y basura.

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