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Artículo
Luisa Bernhardt Franco
Facilitadora, mentora y asesora de gestión humana y bienestar organizacional
Organiza el evento de fin de año usando Design Thinking
luisabernhardtf@gmail.com @luisabernhardt
Fotos: Canva
Con el paso del tiempo, la idea original de las fiestas de Navidad se fue transformando y ahora parecen estar muy alejadas de la realidad. Estudios comprueban que, aunque estos eventos se organizan con la finalidad de unir a los colaboradores, hacerlos sentir valorados por su esfuerzo a lo largo del año o hacerlos sentir que son parte del éxito de la organización, la realidad es que realmente estos objetivos no son efectivos.
No se crea una conexión real, las personas van, disfrutan del momento y al día siguiente se encuentran con los mismos problemas (mal clima, poca comunicación, debilidad en el trabajo en equipo, etc.). Si te preguntas si mejoraste la comunicación o creaste un lazo real laboral con algún compañero con quien, por primera vez, interactuaste en la fiesta, ¿cuál sería tu respuesta? Probablemente la mayoría dirá que no.
Julia Kirby dice que “los dueños de las empresas deberían promoverconstantemente una relación eficaz y agradable entre sus trabajadores, no solo con grandes eventos que demuestren que su compañía sigue andando. Igualmentedeberíanponer más atención a las verdaderas necesidades de sus empleados. Las fiestas de navidad tienen más significado cuando compartes con tu familia o con personas que verdaderamente aprecias”.
El llevar a cabo un evento que no genere un impacto real que pueda medirse y verse reflejado en la organización, ya sea en aspectos de clima, rotación, evaluación del desempeño o liderazgo, por mencionar algunos, puede ser más un gasto superfluo que una inversión que beneficie a todos los involucrados.
Es posible que los empleados ya estén sobrecargados de trabajo y que pasen demasiado tiempo en la oficina junto a los gerentes y compañeros de trabajo, por lo que después del trabajo prefieren irse a casa y no asistir a dicha actividad.
Otros pueden preferir trabajar las horas que tienen asignadas e irse a casa al terminar, en lugar de pasar más tiempo pensando en el trabajo, como suele ocurrir cuando se socializa con compañeros de trabajo.
“A los seres humanos nos gustan las rutinas. Nos hacen sentir cómodos. Pero si no incorporamos variación, nos habituamos y perdemos el interés. Cuando la diversión desaparece, sólo queda un rito vacío. Esto es muy marcado en los encuentros de fin de año”, dice Ezequiel Kahan, director de la consultora Knowment, especializada en metodologías ágiles y Design Thinking.
Aunque hay algunas cosas que los colaboradores pueden hacer para intentar fomentar la inclusión, como, por ejemplo, hacer una encuesta al personal para determinar las necesidades y requisitos del total de los mismos, los empleadores siempre deben tener en cuenta las posibles discriminaciones. Antes de iniciar toda la planificación de estas actividades, identifica: * ¿Qué mejora te gustaría introducir? * ¿A quiénes va dirigida (conoce tu público)? * ¿Cuál es el objetivo? * ¿Cuáles son los resultados esperados? * ¿Cómo se evaluarán los resultados? *¿Cuál será la metodología?
Esta iniciativa puede ser llevada a cabo en organizaciones tanto públicas como privadas, de cualquier naturaleza, rubro o tamaño. Esta propuesta ¿Te hace sentido?