FA CE TAS CULTURA AL DÍA Ojo al ‘Séptimo arte’
La conspiración y la incertidumbre
Andrés Ricardo Duque R. Nueva exposición
Trazos de nuestra compleja humanidad
Hernán Camilo Yepes Vásquez El cuento
El testigo
Manuel J. Álvarez Didyme-Dôme
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IBAGUÉ, SEPTIEMBRE 15 DE 2013
La conspiración,
inquietud sobre la incertidumbre
Por Andrés Ricardo Duque Rincón*
La conspiración es un filme realizado por el actor y ahora director estadunidense Robert Redford. Si bien su primera película como director, Gente corriente (1980), le valió el premio Óscar como director, los trabajos cinematográficos fueron pocos y entre ellos cabe destacar Quiz show (1994) y El hombre que susurraba a los caballos (1998). Dicho cineasta estadunidense comenzó siendo un reconocido actor en las décadas de los 60 y 70, pero que se alejó de la industria cinematográfica de Hollywood al tener que luchar contra del estereotipo de sex simbol que le rodeó.
LISTA Entre las películas más relevantes en las que participó como actor Robert Redford están:
• Butch Cassidy and the Sundance (1969) • El candidato (1972) • Las aventuras de Jeremiah Johnson (1972) • El golpe (1973) • Todos los hombres del presidente (1976) • Memorias de África (1985).
Para Redford no fue fácil trabajar cuando no se valora la capacidad como actor sino solo el aspecto físico y se inquieta al cuestionar una realidad donde se vive adorando estereotipos de belleza. Si bien Redford luchó por conseguir personajes interesantes, reconoció: “Hollywood nunca quiso que dejara de ser su chico dorado. Me sentía como prisionero de mi propia imagen, y me preguntaba si era capaz de ser convincente como actor (...), pero a nadie le importaba el tipo de películas que deseaba hacer. Los medios continuaban hablando de mí como un símbolo sexual, y Hollywood esperaba que yo aceptara historias románticas superficiales”. (Citado por Kursk, p. 5) De ahí que en cierta manera dejó a un lado su carrera como actor y centro sus energías en crear el Festival de Cine Independiente de Sundance, donde impulsó el cine que se
Más adelante, empecé a sentir la necesidad de contar historias sobre la América que yo percibía. Historias que iban algo más allá de lo que la gente veía. Robert Redford
IBAGUÉ, SEPTIEMBRE 15 DE 2013 realizó fuera de las grandes compañías cinematográficas. Ahora bien, adentrándose en una de las últimas películas de Redford, La conspiración, ésta se adentró en un hecho de enorme relevancia en la historia norteamericana y más exactamente el asesinato del presidente Abraham Lincoln. Pero no es un filme más sobre la muerte de uno de los más emblemáticos presidentes norteamericanos, ya que apenas Lincoln apareció en la historia y la misma centró su trama en la manera como se llevó el juicio contra los culpables del crimen. En un comienzo, Redford no se sintió interesado en realizar dicha película, ya que era evidente que era una figura histórica de quien ya se había dicho todo y solo sería una película más, entre la gran cantidad que se han hecho acerca de Lincoln. Pero, para la sorpresa de Redford, la historia se basó en el proceso que se le llevó a una de las inculpadas en el asesinado del presidente Mary Surrat. En consideración de Robert Redfor, lo que aconteció en el juzgamiento de Mary Surrat fue completamente injusto y, para él, “muchos de los datos que aparecen en la película los tuvimos que rescatar de los archivos. Y debido a ello no sabemos si era culpable o inocente. Pero, para mí, este error de la justicia era la historia que valía la pena contar” (citado por Millet). Según la consideración de Redford (citado por Borja), el filme presentó lo que estaba sucediendo al interior del bando que salió vencedor en la guerra civil norteamericana, el norte. En aquellos años convulsionados de la guerra civil estadounidense una vez firmada la paz, en el bando que asumió el gobierno (el Norte) se presentaron serias divisiones entre quienes consideraban sancionar drásticamente el Sur o quienes eran más moderados al respecto y promulgaban el diálogo y la mesura frente al perdedor. Si bien el filme La conspiración presentó una parte poco conocida en la historia norteamericana, su fuerte radica en generar la incertidumbre en el público acerca de la veracidad sobre los hechos históricos, entendiendo que los mismos son el producto de la redacción del ser
na Fallaci (1978. p, 10) se pregunta si esa historia impuesta en la escuela y la cual se ha aceptado mansamente, no debiera cuestionarse y empezar a ser replanteada. Entonces lo que impulsa Oriana Fallaci es a rebatir lo que aseguran los libros de historia, aquellos textos que se quedan cortos al no dilucidar la verdadera naturaleza de grandes personajes históricos como Espartaco, Napoleón o Juana de arco. De ahí que la escritora ita-
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liana se lamenta cuando plantea: “Sabemos todo sobre sus batallas y nada sobre su dimensión humana, sus debilidades o mentiras o, por ejemplo, sobre sus chirridos intelectuales” (1978, p. 10). Pero Fallaci va mucho más allá y se inquieta al preguntarse si la historia no es otra cosa que el resultado del punto de vista de unos pocos y entonces la misma esté peligrosamente sesgada. De ahí que para no convertirnos en un “rebaño impotente” (Fallaci, 1978, p. 9) se deba no conformarse con una única referencia histórica, sino que se debe arriesgar a consultar diversas fuentes y cultivar una conciencia crítica acerca de los hechos que han ocurrido a lo largo de los años, para de alguna manera acercarnos a lo que realmente sucedió en el pasado. *Docente en lengua castellana
Referencias
Harold von Kursk. (2012) La TV aprendió a mentir. Recuperado de: encontrarte.aporrea.org/media/15/RobertRedford.pdf EVA MILLET (2011) La belleza es un arma de doble filo. Recuperado de: MILLEThttp://www.lavanguardia.com/magazine/20110909/54212970271/robert-redford-la-belleza-esun-arma-de-doble-filo.html BORJA, C. (2012) El abogado del diablo. Recuperado de: http://www.laverdad.es/murcia/ocio/20111202/cine/abogado-diablo-201112020041.html FALLACI, O. (1978). Entrevista con la historia. Barcelona. Editorial Norguer, S. A.
humano y como tal pueden poseer imperfecciones. Para el teórico ingles Collingwood (1952, p. 20), la historia es un tipo de investigación que pretende averiguar sobre actos humanos relatados en el pasado y que precede interpretando documentos. Documentos que fueron escritos por hombres, cuya información es considerada como verdadera por el historiador y que se denominan autoridades. Pero dichas autoridades, como seres humanos que son, llevan consigo cierto grado de subjetividad y además el historiador posee toda la potestad para dejar en muchas ocasiones “por fuera cosas que, por una razón u otra, decide que su obra no necesita o no puede utilizar” (Collingwood, p. 273). Entonces el criterio de verdad histórica no se basa en lo que la autoridad dice, a esa cuestión responde el historiador por su propia cuenta y por ello la historia sobrelleva cierto grado entre lo probable y lo dudoso. Al respecto, la escritora italiana Oria-
LA PALABRA DEL DÍA
Yugular
Es el nombre de una vena que recibe la sangre del cerebro, de la cara y del cuello, y desemboca en la vena subclavia, situada debajo de la clavícula. Proviene del latín vulgar iugularis, del latín clásico iugulus, -i ‘clavícula’, ‘garganta’, ‘cuello’, diminutivo de iugum ‘yugo’, vinculada esta a iungo, iungere ‘juntar’, ‘unir’, ‘uncir’. La yugular es uno de los principales vasos que se cortan al degollar a alguien; por esa razón, los clásicos latinos usaban el verbo iugulo, iugulare para referirse al acto de degollar, y iugulator, iugulatoris significaba ‘degollador’ y, por extensión, ‘matador, asesino’. El verbo mencio-
nado existe en español y es morfológicamente idéntico al sustantivo: yugular, con el significado de ‘degollar, cortar el cuello’ o, por extensión, ‘interrumpir bruscamente un proceso’.
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Trazos como hu
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Una exposición cargada de mucho color y que busca dejar refle artistas en la Sala de Exposiciones de la Universidad del Tolim
HERNÁN CAMILO YEPES VÁSQUEZ
Técnicas y visiones mixtas para dar cuenta de un mundo en apariencia regido por lo estético se contemplan en la exposición 'Trazos', que rige en la actualidad en la Sala de Exposiciones Darío Jiménez de la Universidad del Tolima. Lo abstracto predomina en esta obra, de siete artistas con siete colores distintos para reflejar la humanidad, entre muestras de reflexión a partir del óleo, el trabajo consciente sobre el error y la generación de interacción entre objetos.
Orden y desorden
Uno de los exponentes de esta inquietud es el bogotano Moisés Morales Duque, quien con su única obra en 'Trazos' demuestra que el desorden social también se puede reflejar en dicha 'exactitud' sobre la base del error. Su obra es de técnica mixta. Tiene un fondo en acrílico y está matizada por manchones de marcador, crayón, lápiz,
lapicero e incluso polvo, como especie de “deriva a la que se somete la tela”. El fin con esta atmóstera generada es único: “Representa esa huella de la humanidad, ese rastro, que interrogo con los fondos. Es pensar en la humanidad ahora, debido a la sobrepoblación, donde cada vez crece más un tejido y una aglomeración de algo que es igual”. En esa igualdad, a su vez, se genera una serie de reacciones químicas, que en su relación con el orden social se define desde “la profesión de cada persona, en como se transformaría esa materia que tenemos en nuestro entorno”. Su proceso “requiere de mucho tiempo, porque el comienzo es algo aleatorio y más bien expresionista, buscando esa huella. Luego, se racionaliza y trabaja sobre el error, porque muchas veces una mancha es pensada como tal, pero quiero recuperar el error y trabajar sobre él, como hace en general la humanidad, trabajar sobre el error”.
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exión y objetos a la imaginación es la que presentan siete ma. Hasta el 30 de septiembre está en exhibición.
EMPIRISMO Y ABSTRACCIÓN Moisés es artista plástico egresado de la Universidad de los Andes: ante dicho carácter, surge la pregunta sobre cómo un profesional logra plasmar su mundo mediante un abstracto en equivalencia con alguien surgido del empirismo. “Son cosas más de la relación entre la persona y la pintura. Depende de lo que esta le exprese y lo que el artista quiere expresar. Es algo muy relativo”, cuenta, y agrega que, en su caso, él busca darle un concepto. A este, después, “lo cargo con trazos y acciones humanas, que dejen un peso emocional en la obra, que luego intervengo para resaltar eso que tal vez no se valora porque se piensa que es estético, y es mi intención recuperarlo”.
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Hay artistas que no han estudiado y llevan su arte a un nivel deslumbrante. Moisés Morales
La obra de Moisés Morales fue elaborada el año pasado y tiene dos caras distintas, “con lo que niego el plano y la obra se vuelve tridimensional”.
LISTA Los siete ‘Trazos’
• Agnieszka Nowinska (polaca) • Camilo Pinto • Camilo Torres
• Fabiaña Peña • Hebert Sánchez • Moisés Morales • Alejandro Prado
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Óleo de Alejandro Prado. Perteneciente a la exposición Trazos, de la Universidad del Tolima.
EL CUENTO Por Manuel José Álvarez Didyme-Dôme*
Una vieja edificación, que antaño llegó a constituir el orgullo del viejo poblado y que sin saberse cómo ni cuando, pasó a ser una desapercibida mole de ladrillo y cemento oculta bajo las sombras de las construcciones vecinas, se tornó por unas horas en el centro de atracción de la revuelta. Curiosa circunstancia para un local de comercio que ya para entonces había perdido su antigua importancia al convertirse simplemente en el albergue de un abigarrado almacén, donde la farragosa confusión de mercaderías apenas si dejaba espacio para moverse a los cada vez más escasos clientes. Su propietario, un humanista metido a comerciante, de apacible mirada y escasa pero bien afeitada barba, había ganado fama de hombre de rectos procederes y preocupado por las gentes del poblado, pues tenía siempre una solución a mano para paliar la angustia del semejante. Ello llevó a los que mezclados con ella li-
El testigo deraban a aquella desbocada masa, a pedir a través de la autoritaria voz de Felipe Salazar que se alzó por sobre el rugido volcánico de la enloquecida turba, un alto a quienes llegaran siquiera a pensar en irrumpir en aquel negocio para apropiarse de lo que allí se expendía, así como el inmediato cambio de rumbo de sus alocadas expresiones de rabia y dolor concretizadas en llamas e intenso humo, exacerbadas por la desenfrenada ingesta de licor. Porque ¿cómo permitir que se le quite algo a quien ha dado muestras de su bonhomía y generosidad? O ¿cómo lesionar a quien ha atendido al caído en desgracia sin reparar en su humilde condición? Imperativo moral harto difícil de incumplir, tanto como podría excusarse el cumplimiento de un presagio nacido de una clara señal advertida en un sueño, ciertos de que si se le causara daño al comerciante y su negocio, con él se estarían afectando los buenos ejemplos de
servicio al semejante, tornando a aquel poblado con incipiente figura de ciudad, en un sitio más pobre, al constatar que con el menoscabo de ese hombre tocaba a su fin un infinito número de buenas cosas de aquellas que culminan, como calla la melodía al perecer un ruiseñor. Pasado un tiempo de aquel incidente en forma tan lenta que pareció interminable, e iluminados por las ahora agonizantes llamas de los incendios provocados por la turba que rompían intermitentemente la insondable oscuridad de la noche, poco a poco y de manera casi imperceptible comenzaron a dibujarse en lontananza las siluetas cada vez más definidas de diez batallones de soldados, cuyo acompasado paso producía un ronco rumor que al ir en aumento, iba acallando las consignas revolucionarias que aún se escuchaban, ahora ensordinadas, indicando que el vigor de la violencia demostrado en las primeras horas por la revuelta, se agotaba, ahogado entre exclamaciones de dolor, llanto y libaciones.
¡Llegaron los pastusos! Fue el grito que comenzó a escucharse para esparcir así la noticia, pronunciado como jubilosa expresión de gratificante alivió, entre aquellos ciudadanos que atemorizados por la suerte que pudieron haber corrido sus haberes y sus vidas en manos de aquella desenfrenada muchedumbre, se habían refugiado en sus casas o en las de aquellos que les brindaron cobijo al quedar atrapados sin salida, en el anárquico torbellino. El arribo de aquellos soldados operó como un freno para la desbocada algazara que llevó a aquel apacible lugar a vivir durante casi tres días la fascinación de la muerte. Y con el cese de la rebelión, en forma perceptible y lenta fue retornando una calma que ya desde entonces se sentía tan pesada debido a su irrealidad, presagiando aquello que veían venir los que la vivieron en carne propia: una guerra sin fín por años sin cuenta. *Escritor colombiano
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LA PROFUNDIDAD SOBRE EL SEXO
HISTORIA DE AVENTURAS
RELATO ACERCA DE TRANSFORMACIÓN
Editorial: Debate Título: S=EX2 La ciencia del sexo Autor: Pere Estupinyá Páginas: 482
Editorial: Norma Título: ¿Qué hace la gata por las noches? Autor: Katrin Wiehle Páginas: 32
Editorial: Siglo del Hombre Editores Título: Culturas bananeras Autor: John Soluri Páginas: 396
BOGOTÁ, COLPRENSA En medio del boom editorial de novelas rosas que están cargadas de elementos eróticos, es bueno siempre ver publicaciones que se toman en serio el tema del sexo, como lo hace el nuevo libro del químico y biólogo Pere Estupinyá. Es una innovadora aproximación científica al sexo y a la sexualidad, sin atentar contra su rigurosidad, pero resulta fascinantemente ameno y muy completo sobre un tema del que se habla mucho, pero del que se profundiza poco. Esta es una novedosa investigación científica en la que se acude a congresos internacionales de sexología, para contrastar esa información con asexuales, fetichistas, mujeres multiorgásmicas, anorgásmicas, intersexuales, e incluso en medio de la cultura swinger.
BOGOTÁ, COLPRENSA Bajo la colección denominada Buenas Noches, es editado el nuevo libro para niños escrito por Katrin Wiehle, en medio de una historia de aventuras mágicas y mucha imaginación. Mientras Lucho va a la escuela, juega, come y hace sus tareas, su gata duerme sobre un almohadón. Sin embargo, basta con que Lucho cierre los ojos… para que Gata se despierte y salga sigilosamente a vivir mil aventuras. A lo largo de este cuento, escrito en verso, se revela un gran misterio: ¿qué hacen los gatos por la noche? Este es el segundo libro de Wiehle, quien obtuvo en 2011 el premio para creadores noveles de la Academia Alemana de Literatura Infantil y Juvenil.
BOGOTÁ, COLPRENSA El poder discursivo de la metáfora “república bananera” hace fácil pasar por alto las diversas maneras en que el monopolio capitalista en los Estados Unidos dio forma a la historia del comercio del banano en el siglo XX. John Soluri cruza, en esta obra, los límites de varios campos académicos para escribir una historia enriquecida por las perspectivas de biólogos y geógrafos, además de historiadores culturales, ambientales y sociales. Incorpora, además, datos de censos manuscritos de Honduras, expedientes de las compañías fruteras, investigaciones científicas, correspondencia entre Honduras y EE.UU., y testimonios orales y efímeros de la cultura de masas de esta nación.
PUNTOS DE INFLUENCIA
Editorial: Grijalbo Título: Cambie lo que quiera Coautores: Kerry Patterson, Josept Grenny y David Maxfield Páginas: 270 BOGOTÁ, COLPRENSA Conocer las fuentes de influencias y cómo utilizarlas a su favor, con el fin de alcanzar las metas, es el objetivo de los autores de este libro, dirigido a quienes sienten que están atascados en una o más áreas de su vida. Según una investigación, son seis fuentes de influencia que afectan las decisiones diarias y son fundamentales para generar cambios efectivos. Disfrutar lo que disgusta teniendo en mente nuestro objetivo; poner en práctica nuevas técnicas y trucos para cambiar hábitos, y convertir a quienes nos fomentan los malos hábitos en aliados que nos motiven a conservar los cambios, son esas fuentes de influencia necesarias para salir adelante.
GERENTE: Miguel Ángel Villarraga Lozano EDITOR GENERAL: Edwin Ballesteros COORDINACIÓN: Redacción Cultural EL NUEVO DÍA PERIODISTA: Hernán Camilo Yepes Vásquez EDITOR: Óscar A. Varón B. DISEÑO: Néstor Iván Pérez FOTOS: Camilo Yepes. Colprensa. Suministradas. Internet TEL.: 2770050. Ibagué - Tolima - Colombia. PÁGINA WEB: www.elnuevodia.com.co CORREO ELECTRÓNICO: culturales@elnuevodia.com.co FACEBOOK: Cultura El Nuevo Día - Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial sin autorización expresa del Grupo Editorial Aguasclaras S.A.. ISSN: 021545-8.