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04 HOMENAJE 13 de octubre de 2009. Teatro Bellas Artes

VALERIO LAZAROV

hasta siempre,

VALERIO POR elsa moya

fotografía: santi burgos

Realizador transgresor, directivo valiente, productor decidido; marido, padre y abuelo. Así fue Valerio Lazarov y así le recordaron amigos, compañeros y familiares en un emotivo homenaje celebrado en el Teatro Bellas Artes de Madrid.

Un hombre que lo dio todo por la televisión y cuya vida dejó llena de historias, anécdotas, éxitos y proyectos.

Amor, cariño y admiración. La tarde del 13 de octubre, en el Teatro Bellas Artes de Madrid se respiraba emoción; un sentimiento transmitido por las más de 300 personas que quisieron rendir homenaje a una de las figuras más importantes de la televisión en España fallecida recientemente: Valerio Lazarov, un profesional que revolucionó el medio y que marcó un antes y un después en la pequeña pantalla. Un hombre que, como señaló Manuel Campo Vidal, presidente de la Academia de Televisión, consiguió, como pocos, dejar huella en todas sus facetas profesionales y “alcanzar la excelencia en tres territorios televisivos tan distintos y tan distantes como Rumanía, Italia y España”.

Alfredo Amestoy, Ignacio Salas, Agustín Bravo, Isabel Gemio, Juncal Rivero, Pedro Rollán, Pedro Piqueras, Paula Vázquez, Carlos Sobera o el escritor Álvaro Santamarina, autor de la biografía de Lazarov, fueron algunos de los académicos, amigos y compañeros de profesión que quisieron dar el último adiós a Valerio en un homenaje conducido por Concha García Campoy y planteado como un “viaje profesional” a través de los testimonios, anécdotas e historias de personas que compartieron con él parte de su vida. “Una reunión de amigos”, en palabras de Fernando Navarrete, coordinador del acto, quien afirma que este homenaje tenía que hacerse porque Valerio es y será “referente de los profesionales de la televisión” Querido Valerio

Durante el homenaje, se demostró que Valerio Lazarov no dejaba indiferente a nadie; tuvo amigos, enemigos, compañeros y rivales, pero sobre todo, fue muy querido: “Valerio y yo hacíamos la misma línea de programas aunque con una estética completamente diferente –contó el realizador Fernando García de la Vega– pero nunca hubo enfrentamientos entre nosotros; al contrario, surgió una gran amistad”.

Jordi García Candau, ex director de RTVE, recuerda que aunque el comienzo de su relación no fue buena, ya que la línea que marcó Valerio en los inicios

Manolo Escobar acreditó la generosidad de Valerio

diciendo: “Si le llamaban Mr. Zoom era porque siempre que le necesitabas, estaba cerca”.

Rafael Ansón, ex director de TVE durante la Tran-

sición, destacó de Valerio, no sólo su creatividad, sino su conocimiento de las nuevas tecnologías: “Con la magia que aportaba a las imágenes, le dio un tono diferente a la televisión, identificándola con el período que estábamos viviendo, donde lo que predominaba era la libertad creativa”.

Paolo Vasile, actual Consejero Delegado de Telecin-

co, trabajó para Valerio cuando éste era Director General de Videotime. Vasile reconoce que Lazarov “ha sido un artista toda su vida”. Entre el relato de anécdotas señaló: “Fue el primero de la tele que no reproducía la realidad, sino que construía una fantasía en ella; eso se había hecho en cine, pero no en la tele”.

La actriz y cantante Elsa Baeza leyó un soneto escrito por su padre, el poeta chileno Alberto Baeza, soneto que le dedicó hace años a ella y a Valerio.

El actor Andrés Pajares definió a Valerio Lazarov como valiente al apostar por Tío Willy, la historia de una pareja de homosexuales en clave de humor.

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VALERIO LAZAROV de Telecinco fue la de atacar a TVE, después se hicieron grandes amigos. Una amistad tan grande que, además de vacaciones en familia, Jordi fue quien le comunicó a Lazarov que sería cesado como Director General de su cadena: “Le recomendé que se dedicase a la producción, que podía ser fabuloso. Y poco tiempo después apareció con Hostal Royal Manzanares”.

Fue una noche muy especial en la que se pronunciaron palabras tan emotivas y cercanas que, por momentos, parecía que Valerio estuviera presente. Mediante una carta, Tacho de la Calle, vicepresidente de la Academia, pidió a Lazarov: “Estés donde estés no dejes de darle a la cabeza y de hacer ver a los que aún están aprendiendo, los fallos que todavía cometemos”. Las palabras de Concha Velasco recordaron la calurosa acogida por parte de Valerio cuando se fue de TVE a Telecinco: “Sentí que traicionaba a Fernando Navarrete, con quien hacía ¡Viva el espectáculo!, pero Valerio me hizo ver que no era así. Me regaló todo su talento y el Querida Concha”.

Lina Morgan revivió el momento en el que Valerio

le dio “fuerza y mucho cariño” para emprender Hostal Royal Manzanares tras el fallecimiento de su hermano.

También quisieron rendirle homenaje compañeros de profesión, de ayer y de hoy, que trabajaron mano a mano junto a Valerio en su larga trayectoria. Luis Mariñas, primer director de informativos de Telecinco, recuerda cómo, cuando hablaba con Lazarov en su despacho, atendía a la vez los televisores que tenía y se daba cuenta de cualquier error: “Siempre aprendías con él”. Y terminó diciendo: “Valerio era tan querido, que estará siempre en el cuadro de honor de todas las televisiones en España”.

Miguel de los Santos, presentador de Especial Pop, echó la vista atrás para contar alguna de las “locuras” a las que le sometió Valerio, como sumergirle en una montaña de hojas secas mientras una máquina Remington aparecía sobreimpresa en su cara, dando la impresión que Miguel iba escribiendo los comentarios que decía: “Este era el Valerio genial –comentaba– Otro fue el productor terco que me hizo aprender varias frases para felicitar la Navidad en rumano”.

María Ligor, embajadora de Rumanía en España, leyó un comunicado del Ministro de Cultura, Theodor Paleologu, donde definió a Valerio como un homo faber del espectáculo televisivo y como “responsable” de cambiar el concepto europeo de programa de televisión: “Aunque se haya ido, queda su memoria, una memoria activa que llevará la herencia del Maestro”

Moncho Ferrer, asesor artístico de Valerio durante los últimos quince años, quiso destacar su lado humano: “Nunca estaba reunido para nadie, atendía a todo el mundo. Era bueno y extremadamente discreto”. Joseba Ortega, responsable de nuevos proyectos durante dos años en Prime Time, enumeró el sinfín de formatos y proyectos que manejó Valerio con “la ilusión de un niño”.

“Nunca en mis veinte años de profesión me lo he pasado tan bien como junto a él”, concluyó. buscando una estrella

Valerio parecía tener un don especial para descubrir el talento, y en su larga trayectoria, abrió las puertas a profesionales como Emilio Aragón, quien, a través de un vídeo, le recordó como un apasionado de la televisión “que contagiaba a todo su equipo” y a quien agradeció el haberle brindado la oportunidad de hacer un programa como Vip Noche “por abrirme la puerta a un mundo nuevo dentro de la tele”.

Remedios Cervantes, también recuerda cómo gracias al entonces Director General de Telecinco pudo trabajar en una televisión nacional tras su paso por Canal Sur: “Quería darle otro aire a la cadena y me dijo que yo sería ese principio”. Años más tarde, la actriz consiguió su primer papel fijo en una serie, En plena forma, producida por Prime Time para Antena 3.

La cantante y actriz Ángela Carrasco agradeció a Valerio la experiencia y el aprendizaje que le dio en sus primeros años de carrera: “Me obligó a recibir

José María Iñigo recordó el día en el que Valerio

Lazarov le llamó para decirle <<Mi jefe quiere verte mañana en Milán>>. “El jefe era Berlusconi. Él y Valerio querían contar conmigo en sus planes para la televisión en España”.

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VALERIO LAZAROV clases de dicción para perfeccionar el castellano y me enseñó que el ojo de una cámara son los ojos de toda la gente que te está viendo Recuerdos de familia

Enrique Cerezo recordó a Valerio como un atlético

de pro: “Se ha divertido, cabreado, llorado… pero, sobre todo, disfrutó con ese Atleti que llevaba en su corazón”.

Si ya el homenaje representaba una noche emotiva en sí misma, la hizo más aún ver unidas a cuatro de las mujeres de Valerio y a todos sus hijos varones: Agusta Lazarov, Adonella Azzoni, Didi Sherman, Elsa Baeza; Andrea, Sergio, Roberto y Valerio Lazarov quisieron estar juntos en un día tan especial y sensible para recordar la figura del hombre que tanto marcó sus vidas.

Elsa Baeza, su primera mujer, rompió el hielo sobre el escenario, donde rememoró sus inicios en TVE junto a Lazarov confesando el privilegio que tuvo de vivir un nuevo estilo de hacer televisión “con un derroche de imaginación y con una estética revolucionaria que marcaron un antes y un después en los programas musicales”. En su intervención, al igual que en la de Didi Sherman, no pudieron faltar unas emotivas palabras para recordar al Valerio que formó parte de sus vidas. Ambas destacaron que, a pesar de los sacrificios, para Valerio, “lo primero siempre fueron sus hijos”.

Durante sus años de matrimonio, la actriz Didi Sherman compartió con Valerio su célebre etapa televisiva en Italia, y en el homenaje, quiso recordar el éxito del estreno del programa musical Tilt: “Al día siguiente, los medios de comunicación compararon a Valerio con Walt Disney por la magia de sus imágenes”.

Tal fue el triunfo de Lazarov que Berlusconi “le cortejó hasta conseguir llevarle a Canale 5 en busca de los mayores éxitos, revela Sherman.

Carta de Augusta Lazarov La última intervención en el homenaje a Valerio, coincidió con el momento más emotivo de la noche.

Augusta Lazarov, esposa y colaboradora del “Maestro” en los últimos siete años, subía al escenario del Teatro Bellas Artes para agradecer las enormes muestras de cariño de todos los compañeros y para dedicarle unas dulces palabras a su marido: “Valerio, pienso en ti cada momento y te siento siempre a mi lado. Tú, Valerio, nunca te irás de mi alma, de mi corazón. Tú mismo te has ganado este lugar maravilloso para toda mi vida. La gente que te quiere y te admira siempre pensará en ti. A lo mejor ahora estás aquí, con nosotros, y te gustaría opinar y cambiar algo siguiendo tu estilo tan peculiar y genial; pero debes saber que aunque nos equivoquemos en pequeñas cosas, nuestro cariño y dedicación a tu nombre y figura son inmensos.

Aunque seguro que lo sabes”.

Adonella Azzoni llegó a España de la mano de Valerio, donde en Telecinco, ocupó el cargo de Directora del departamento On-Air Promotions. Adonella aún recuerda el primer encuentro con Valerio: fue en un pasillo del centro de producción donde ambos trabajaban: “Me puse roja cuando me dijo que me parecía a la cantante Anna Oxa y no supe qué contestar. Me sorprendieron tanto sus ojos, tan llenos de vida, sus rizos tan revueltos…” 25 años después y una semana antes de su muerte, Adonella vio por última vez al que fuera su marido: “Sus rizos seguían revueltos y sus ojos llenos de vida… al despedirnos me dijo: <<estás muy guapa>>, y me volví a sonrojar…

Como se mostró durante el homenaje, Valerio fue un hombre de gran éxito tanto en lo profesional como en lo personal, ya que tuvo 5 hijos. Sergio Lazarov es el único que ha seguido el camino de su padre y el que habló en nombre de sus hermanos: “Mi padre, además de un gran profesional de la imagen, fue un enamorado de su trabajo hasta el último día; ante todo, un soñador que siempre quiso transportarnos a su mundo”, expresaba emocionado Sergio, quien quiso compartir la lección más importante que aprendió de su padre: a no rendirse y superarse cada día: “Era perfeccionista, perseverante e incansable: podía cambiar un montaje a última hora, pero eso demuestra que creía en lo que quería transmitir”.

Paralelamente, Valerio y Andrea Lazarov, hijos mayor y menor respectivamente, han querido dejar constancia en estas páginas del cariño y admiración hacia su padre: “Mucha gente conocía la faceta más pública de Valerio Lazarov, la del trabajador inagotable –explica Valerio– Pocos, sin embargo, conocían al padre y abuelo familiar que disfrutaba jugando con sus nietos, reuniendo a sus hijos los domingos, o viendo un partido de su Atléti. Él nos enseñó a estar unidos y a llevar el apellido Lazarov con orgullo”. Por su parte, Andrea, destaca: “Se fue demasiado rápido, como uno de sus zooms o esos frenéticos movimientos de cámara que tanto le gustaban. Era un enamorado de las imágenes, empeñado en reinventar con originalidad todo lo que le rodeaba”.