COLUMNA
Somos pieza clave en
la prevención de obesidad en nuestros niños
Por: Naharaim C. González Portela
U
na buena alimentación en los niños es sumamente importante ya que debe asegurar un crecimiento y desarrollo saludable. Además de ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas, promueve un estilo de vida saludable y mejora el rendimiento tanto en la escuela como en actividades extracurriculares. Se debe tomar en consideración que están en una etapa de aprendizaje, por lo que se debe monitorear las prácticas alimentarias en el hogar. Además, se debe prestar atención a lo que ven en la televisión e inclusive de las personas que le rodean, ya que ésto influye en sus hábitos alimentarios. El incluir meriendas en la alimentación diaria del niño ayudará al control de porciones. Al realizar las meriendas se evita comer en excesos al momento de realizar las tres comidas principales. Es importante no saltarse ninguna comida, ya que en la próxima ocasionaría aumentar las porciones.
Otras recomendaciones para el control de porciones son:
El implementar Mi Plato a su vida cotidiana le ayudará a ingerir variedad de alimentos, además de, visualmente, identificar las porciones de cada grupo de alimento.
Alentar a los niños a dejar de comer cuando se sientan satisfechos, no obligarlos a comer todo lo que esté en el plato.
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No permitir que los niños coman directamente de los envases de los alimentos. Servir los alimentos en platos más pequeños. Realizar las tres comidas y una o dos meriendas. Añadir más frutas y vegetales ya que brindan sensación de saciedad. Comer despacio