jun fujita nenes bian Deleuze, Marx y el Cine-Capital
El ascenso del cuarteto revisionista
A PALOS SUPLEMENTO JOVEN Domingo 13 de abril de 2014 Buenos Aires, Argentina Año 4 Nº261
Un recorrido por los libros de ficción y no ficción que abordan los casos de mujeres jóvenes víctimas de la violencia
Además: Economía y locura en Río de Janeiro | Zambayonny y el largo y sinuoso camino para llegar a primera | El acoso callejero | 2015 y las generaciones políticas
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FUTBOL PARA EXTRATERRESTRES
No se preocupe Por Zambayonny Ilustración: Daniel Caporaletti Pasaba el otro día por los potreros pobres de las afueras de Rosario y veía a los pibes jugando al fútbol entusiasmados en medio de las ruinas confusas de una canción paliativa que repetía: Tomo para no enamorarme y juego para no pensar. Sin embargo en esos terruños infértiles y descuidados donde oscurece demasiado temprano, lo único que florece de vez en cuando son estrellas. Siempre que cruzo por delante de algunos de estos improvisados partidos ya sea en una plaza, en un descampado o en una canchita de fútbol 5, no puedo evitar aprovechar al máximo ese pequeño momento de contacto visual, mientras el colectivo avanza, para observar a través del último vidrio cómo termina una jugada cualquiera o para distinguir a algún futuro crack entre los demás mortales. Lo veo enganchando naturalmente frente a dos mastodontes, haciéndose lugar para perfilar un certero remate de zurda contra el arco que da al chaperío y festejar con la misma normalidad con la que se respira, antes de desgraciarse en la esquina, dejar embarazada a la novia de 14, romperse los ligamentos para no operárselos nunca y envejecer al doble de velocidad entre changas mal pagas y mates lavados. Los cazatalentos viven de mirar estos partidos para encontrar diamantes en bruto. Recorren la geografía nacional buscando promesas y no necesitan mucho más que un golpe de vista para darse cuenta si un pibe tiene las condiciones necesarias como para destacarse en el fútbol. De todos modos no es una tarea muy sofisticada ya que únicamente deben tener la vista adiestrada para descubrir a jugadores apenas muy buenos porque los verdaderos cracks se revelan solos. Cuando yo era chico se sabía que con solamente ver qué hacía un niño cuando le tirabas una pelota ya te dabas cuenta si servía para el fútbol o no: si la agarraba con la mano podía ser arquero o ladrón, si la esquivaba o la paraba mal o se cubría el rostro con temor o le rebotaba en la cabeza no servía, si la mataba de pecho y la dejaba mansita en los cordones podía llegar a tener alguna chance, pero si la empalmaba de lleno y te arrancaba dos dientes había que ficharlo y darle
la cinta de capitán. Por eso hay tantos cazatalentos sin dientes. Las pruebas de jugadores infantiles realmente dan miedo. A los que no saben cómo se realizan les cuento que consisten en partidos informales organizados por los clubes con la participación de muchísimos chicos a la vez mientras los técnicos seleccionadores van dejando en el campo de juego a los que consideran buenos y van cambiando a los que suponen malos por otros que buscan su oportunidad. Cada uno de los competidores sabe que tiene muy pocos minutos para aprovechar la situación, por eso es tan común verlos desesperados intentando esquivar a todos los rivales a la vez o pegándole al arco desde cualquier parte o metiéndoles planchas en las rodillas a cualquiera para demostrar aunque sea un poco de carácter.
Mercedesmoranismo
WHISKYPEDIA
El mercedesmoranismo es una estrategia bélica utilizada por los diferentes ejércitos del mundo para agredir a sus oponentes en batalla. Dicha estrategia fue utilizada por primera vez por quien fuera su fuente de inspiración, la actriz argentina Mercedes Morán, en la mesa del programa de televisión “Almorzando con Mirtha Legrand”.
Orígenes
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1. Definición 2. Origenes 3. Características 4. Influencias filosóficas
El primer registro de mercedesmoranismo se detectó en la mesa de Mirtha Legrand, en Canal 13, cuando la poderosa actriz argentina Mercedes Morán embistiera en duros términos contra el humilde diputado del Frente Renovador, Sergio Massa. Con ofensivas retóricas del tipo “linchar está mal” o “patear a alguien en la cabeza cuando está en el suelo no es un buen mensaje”, la actriz realizó un duro embate contra la postura consensual que transita la ancha avenida del punto medio aristotélico de Sergio Massa, quien rápida y afortunadamente fue defendido por los invitados, la conductora, ese canal de televisión y el canal América.
El sistema es tan injusto como eficaz. Al cabo de algunas horas la zaranda de esta marea deja en cancha a los más aptos y devuelve a la costa lo que no le sirve. Una vez pasado este feroz primer filtro los elegidos se enfrentan a otros seleccionados con la misma mecánica y nuevamente los más aptos continúan en camino. Esto ocurre en varias oportunidades hasta que finalmente queda escogido un puñado minúsculo de vencedores agotados y maltrechos. Puede ser que de vez en cuando se les escape a los cazatalentos algún niño con condiciones y por eso la historia está llena de excelentes jugadores que fueron despreciados en su primera prueba y terminaron alcanzando la gloria en otro lado, pero el sistema contempla estos escasos errores porque todos los clubes los cometen y todos los clubes los capitalizan. Por acá también se puede comenzar a comprender algunas de las causas de la tamaña desigualdad que existe en nuestro fútbol debido a que los padres prefieren llevar a sus hijos a probarse a instituciones grandes por más que compitan contra más postulantes, acortando el camino al rechazo y la frustración. Hace un tiempo alguien que no recuerdo me contó una anécdota que no deja enseñanza. Resulta que en las inferiores de un club de Buenos Aires muy reconocido por formar jugadores famosos había un crack que en cada entrenamiento se quería lucir solo y no daba nunca un pase, ni le interesaba jugar en equipo. Entonces un día el director técnico le quiso transmitir una lección para que entienda el problema de abusar del individualismo: lo puso solo frente a los 11 rivales y le dijo que intentara jugar. El crack tomó la pelota, los gambeteó a todos y metió el gol. En el vestuario donde se cambiaban tristes los que habían sido rechazados en las pruebas, había un cartel que trataba de darles ánimo para que no se fueran frustrados y al mismo tiempo reafirmaba la confianza en el sistema empleado para la selección. El cartel decía: “Si usted todavía no fue descubierto es porque no hay nada que descubrir, no se preocupe.”x
Características La principal característica de la estrategia del mercedesmoranismo consiste en disfrazar con una frase que a todas luces simula ser una mera opinión lo que en verdad se trata de un cruel y demoledor ataque sobre una figura pública, como ocurrió en aquél caso. Así, toda frase de “qué calor” o “cómo anda tu vieja”, en verdad bajo las directivas de un comando que beba en las aguas del mercedesmoranismo puede transformarse en un polémico ataque sobre Sergio Massa, o la figura que se considere en ese momento, aunque básicamente sea Sergio Massa el único que hasta ahora ha recibido semejante ataque. La segunda característica más importante del mercedesmoranismo la reflejó el diario Clarín que, ni lerdo ni perezoso, salió en defensa de la víctima al denunciar esa maniobra bélica, prohibida luego por la Convención de Ginebra. Dicho diario sostuvo que los ataques del mercedesmoranismo se implementaron “montados sobre el discurso kirchnerista”, dando una imagen real y concreta acerca de las medidas necesarias para un ataque con esta maniobra bélica. De esa manera, el mundo pudo conocer que el mercedesmoranismo es una estrategia bélica más bien del orden
de la utilización de los equinos como medio de transporte, más precisamente de aquellos equinos que tienen tendencia hacia todo lo que es la identificación con el discurso kirchnerista.
Influencias filosóficas En el sentido de que no se registran muertos o heridos por las tácticas vinculadas al mercedesmoranismo, algunos estudiosos de estrategia militar han llegado a afirmar, a contramano de las publicaciones independientes de Clarín o el canal América, que no se trata tanto de una estrategia bélica como de un intercambio de opiniones de una actriz con un diputado nacional, del cual el diputado nacional tuvo más bien dificultades para defender su postura de justificación a los linchamientos. Sin embargo, otros teóricos sugirieron que se trató de un ataque bélico aunque no en el sentido tradicional, sino más bien un ataque que, de manera nietzscheana, no es tanto un hecho como una interpretación periodística a posteriori, hecho que vuelve más peligroso el mercedesmoranismo y razón por la cual la Convención de Ginebra ha decidido su veto en la utilización como arma para pelear la guerra.
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ESTEREOTIPOS despedidas de soltero
Por Carlos Godoy
» »Toma vinos espumantes.
de Mickey o de empanada,
» »Su película favorita es "Despedida de soltero" con Tom Hanks.
» »Más de una vez lo cagaron a trompadas. » »Usa chombas rosas. » »Y zapatillas, también rosas.
» »Al final solo lleva el TEG » »Su programa favorito: Animales Sueltos. por si pinta jugar. » »Tiene el teléfono del tipo que alquila el Trencito de la Alegría.
» »Usa mucho lentes de sol. Lo peor: los usa como vincha.
» »En algún momento creyó que era sexy mostrarse ante su pareja con un slip con trompa de elefante.
» »Gusta desabrocharse un botón de más de la camisa y exhibir vello.
» »Ese momento todavía no pasó. » »Va a la costa y se trae remeras con frases. » »Su preferida: la de “Demasiada cerveza nubla la vista” con todas las letras borroneadas.
» »A principios de los 90 su padre se escapaba para ver a Lía Crucet en un piringundín en Haedo. » »Cree que no hay despedida de soltero si el novio no va en bolas en el baúl.
» »Todavía se ríe por eso.
» »Si es de familia con algo de guita, se fue a un crucero.
» »Es el que se ríe de sus propios chistes.
» »Va todos los años a festejar San Patricio.
» »Vacaciona en un tiempo compartido.
» »También se disfraza para Halloween.
» »Se viste en Siamo Fuori.
» »Es el que el organiza algo para el Día del Amigo.
» »Su biografía dirá que usó jeans nevados.
» »Puede gritar mucho.
» »Es de los que se abraza demasiado con sus amigos.
» »Es el que te caga a notificaciones del Candy Crush.
» »Puede vivir en una propaganda de Quilmes mental.
» »Usa camisa a cuadros.
» »Estudia en la Kennedy. » »Le gusta disfrazarse. » »Es el que toquetea y molesta a los tipos que laburan vestidos
» »En la playa se quiere hacer amigo del guardavidas. » »Es el primero en dormirse.
Gracias Eliana y Juanpi por los aportes
Estereotipo que viene «El que se anotó en un curso de cata de vinos» Si se te ocurre cómo describirlo, mandá tus ideas a contacto@niapalos.org o vía Twitter a @niapalos así lo publicamos. web
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Nenes Bian
Cuarteto revisionista
HOY: El que organiza las
» »Siempre sueña con llevar un burro drogado a la fiesta.
ruido de fondo |
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Decembrismo. El 2001 es un año clave para pensar en la relación de la ciudadanía con el Estado. El 2001 puede leerse como una anclaje generacional, como una línea que divide el ayer y el hoy. En el 2006 el poeta Santiago Llach acuñó, en una serie de posts de su blog personal (monolingua.blogspot.com), el término generación decembrista para referirse a la generación que en 2001 tuvo su “bautismo de fuego” en la militancia política. Es decir personas que por esos años tenían aproximadamente entre 15 y 35 años y que estaban en los últimos años de la escuela secundaria, cursando alguna carrera universitaria, en un movimiento piquetero, en alguna agrupación sindicalista o en algún partido de izquierda. Esta generación decembrista es la que se encargó, en los ya más de 10 años de existencia, de generar los contenidos culturales que consumimos a diario ya sean populares, underground o mainstream. El caso de los Nenes Bian con su disco De Pecho, que salió en los últimos meses del 2013, es un claro ejemplo de la renovación “decembrista” en el ámbito de un sector popular, intenso
falsa escuadra
Por Romina Sánchez “¿Te acompaño o te persigo?”, “Qué pinta de putita que tenés, mi amor”, “Ay, coloradita, qué ganas de que me hagas un pete”, “Gordita, te hago de todo menos upa”, “Qué culito, mi amor”, “Mamita, con esas tetas me salen dientes de leche de nuevo”. La lista sigue. Y podría continuar. Se trata de la campaña “Acción Respeto: por una calle libre de acoso”, cuyas intervenciones en la vía pública, mediante carteles contundentes, en Buenos Aires, el interior del país y en distintos puntos de Latinoamérica, se llevó a cabo en el marco de la Semana internacional contra el acoso callejero, del 7 al 13. Y el lema aflora, como firma de principios, en cada una de las frases: “Si te incomoda leerlo, imaginate escucharlo”. ¿El objetivo? Poner las cosas sobre la mesa, ningún mantel. Al desnudo, así, como pasa en la calle. Y cuentan quienes llevan adelante la campaña que del asunto no se habla o se habla poco porque está naturalizado. Y de allí deviene lo esperable: si te animás a pasar por una obra en construcción, sabés que hay altas chances de que te relaten todas las formas en que te la chuparían o las horas que estarían rompiéndote el culo. Esos varones no imaginan que la violencia engendra más violencia, oh,
y conservador como el del cuarteto cordobés. Revisionismo. Cuando hablamos de cuarteto solemos asociarlo con un viaje a Córdoba o con algún pariente, amigo o conocido cordobés. El territorio siempre propone un ejercicio de memoria. En esta línea la siguiente asociación inteligible es con Carlos Ruffino Jiménez, más conocido como La Mona Jiménez. El personaje sobrehumano que ya editó más de 80 discos en más de 40 años de carrera. Y que, en un punto, es el que inventó este género: el que le dio el golpe de horno final. Así como el territorio propone a la memoria sonidos, olores y sabores también propone una fauna. El cuarteto se ocupa de contar las historias de la fauna autóctona de la zona: sujetos históricamente condicionados por la marginalidad. Historias de amor con resoluciones trágicas, infidelidad, condicionamientos económicos, muertes y la cárcel como el peor destino. Si bien vienen sonando hace cerca de 4 años, en el 2013 con la presentación del disco De pecho, los Nenes Bian, sellaron su destino como la banda revelación de la escena musical cordobesa. No solo por la proliji-
dad de sus composiciones que mezclan rock, tango, reggetón, cumbia y, claro, cuarteto; sino porque estos músicos, que rondan los 30 años, proponen una actualización, un revisionismo sobre el concepto eje del discurso del cuarteto cordobés: la marginalidad. ¿Cómo es la “nueva” marginalidad cuartetera? ¿Cuáles son las diferencias con las categorizaciones de las viejas bandas de cuarteto? Los Nenes Bian, narran la expansión de una marginalidad “cultural” quizás producto de la ampliación de la clase media que incluye a estudiantes universitarios, la comunidad gay (temá tabú en el cuarteto cordobés) o los movimientos sociales y políticos. Los Nenes Bian proponen dentro de la escena del cuarteto cordobés una renovación del sujeto protagonista de sus historias y a su vez también propone un revisionismo sobre el concepto de marginalidad como maquinaria de sentido. nenesbian.bandcamp.com facebook.com/NenesBian ×
Papito, leete esto el lugar común, pero cierto: vean el capítulo 1 de Cualca, el segmento de humor que encabezaba Malena Pichot en Duro de domar. Realismo trágico. Piropos, se llama. Piropos. Hace poco se conoció la publicidad de Snickers Australia, empresa que tiene al mundo entero acostumbrado al sexismo, en la que, ¡otra vez!, unos obreros piropean a las mujeres con dichos relativos al empoderamiento femenino como “¿Sabes qué es lo que me gustaría ver? Una sociedad donde la cosificación sea desplazada por la interacción neutral de géneros, libre de pretensiones y expectativas”. ¿Hombres con conciencia de género? No, solo actúan así porque están, en el universo de la golosina, poseídos por el hambre. Y, en esa misma espiral, se viralizan en la web videos de mujeres diciendo guarradas a los tipos, minas disfrazadas de obreros haciendo de las suyas y minas disfrazadas de tipos haciendo de las suyas. Con la palabra. El estereotipo del obrero queda chico. “Hace años que busco la forma de poder hablar de esto de una manera que no genere resistencias y que produzca el efecto deseado”, dice Verónica sobre la experiencia que problematiza el “Callete y seguí caminando”. “Es terrible lo que se vive, las situaciones son reales, ninguno de los carteles fue inventado.
La idea es que quienes los lean puedan sentir lo que vivimos muchas mujeres cuando nos dicen este tipo de cosas: vergüenza, bronca, asco. Muchos justifican –de manera similar a como se justifica un abuso, de lo que también nos enseñaron a callar– que tienen derecho a expresarse, porque encima “algunas sonríen”. Sonrisa nerviosa o sonrisa de miedo no es sonrisa. “Es increíble que acá (por Facebook) haya varios tipos que representan tal cual el cliché de argumentos a favor de las agresiones: que somos exageradas, feministas locas, que nos gusta, que, claro, mirá cómo va vestida… Hay que entender que lamentablemente fueron criados en una sociedad donde estas cosas son tomadas como ‘normales’ y ‘no tan graves’. Paciencia”, comentó recientemente una internauta sobre la iniciativa. Y varixs, afortunadamente, coincidieron con ella. “Nunca entendí a los activistas que pegan 50 carteles con la misma temática uno al lado del otro. ¿Por qué no los ponen dispersos?, preguntó alguien sobre las escenas que por estos días vivimos en Buenos Aires, en la calle, en los subtes. Muchos se quedan mirando, pensativos. Desde la campaña le respondieron: “Tiene un sentido. Es una intervención que emula el bombardeo al que son sometidas las mujeres a diario”.×
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Retratos de la violencia
Nota
La violencia de género, y más específicamente, los casos de violencia contra mujeres jóvenes se convirtieron en el tema central de una serie de libros de ficción y no ficción aparecidos a lo largo de estos últimos meses. Investigaciones periodísticas, novelas y poemas abordan la cuestión ya sea a partir del análisis de los crímenes más conocidos -desde Ángeles Rawson hasta María Soledad Morales-, o de la representación del miedo y la violencia doméstica en historias y manifiestos generacionales que buscan darle a la problemática una visibilidad que trabaje también sobre la palabra. Un repaso por los libros y las formas de documentar la violencia y la juventud.
Por Walter Lezcano Los números no tienen alma. Pero tiene la particularidad de expresar y poner en la vidriera social un aspecto de la realidad. Ahí van algunos. Según un informe presentado por el Observatorio de Femicidios "Marisel Zambrano" de La Casa del Encuentro, en 2013 asesinaron a una mujer cada 30 horas por casos de violencia de género. Del total de casos, 83 tuvieron a víctimas baleadas, 64 apuñaladas, 37 golpeadas, 28 estranguladas, 17 incineradas, 13 degolladas, 9 ahorcadas, 3 ahogadas, 6 descuartizadas, 3 empaladas y 19 bajo circunstancias desconocidas. Hay más números. En un estudio presentado en marzo de este año denominado "Violencia en el noviazgo adolescente" y realizado por el Defensor del Pueblo de la provincia de Córdoba se denuncia que el 92,5% de los jóvenes, de 15 a 19 años, tienen noviazgos violentos. Entre las conclusiones del trabajo dice: "se observa un alto grado de aceptación de los estereotipos machistas entre la población encuestada y son los varones los que sostienen en mayor medida los estereotipos tradicionales de género y las actitudes conservadoras sobre el rol de la mujer". El tema detrás de estos números fríos, como ya se habrán dado cuenta, es una cuestión ardiente y
compleja que no parece detenerse: la violencia de género. De un tiempo a esta parte, esta problemática ha tenido cada vez más visibilidad en los medios de comunicación masivos y en internet. Producto de la aparición de casos cada vez más sangrientos, la violencia física y psicológica ejercida sobre las mujeres parece formar parte la cultura impuesta por paradigmas que, en Argentina, parecen difíciles de erradicar. Para tratar de comprender la magnitud de este fenómeno histórico aparecieron una serie de obras literarias y de no ficción que dan cuenta de una realidad en la que parece que todos los agentes sociales (la familia, la escuela, las autoridades gubernamentales, etc.) contribuyen a propagar la intensidad del problema. *** Ángeles. Mujeres jóvenes víctimas de la violencia (Ediciones del empedrado, 2014) es un libro que investiga los
casos más conmocionantes de los últimos tiempos. Las muertes de Ángeles Rawson, Candela Sol Rodríguez, Lucila Yaconis, Marianela Rago, María Soledad Morales, Natalia Melmann, Paulina Lebbos y Solange Grabenheinmer son investigados por los periodistas Cecilia Di Lodovico, María Helena Ripetta, Sol Amaya, Claudio Marazzita, Federico Fahsbender y Javier Sinay. Fahsbender, que cubrió el caso de Ángeles Rawson para la revista Noticias, dice que “el problema de la violencia de género es una cuestión muy grave en nuestro país. Estos casos que se abordan en el libro son muy dispares entre sí. Lo único que los une es el desprecio total por la vida, por la forma en la que fueron masacradas. Este libro lo que hace es poner las cosas en perspectiva: las muertes de estas chicas no se convierten en excepciones sino en regla”. Cuando le pregunto si piensa que es algo que ya forma parte nuestra cultura responde: “La violencia con las mujeres está establecida. Un tipo que va por la calle y le
“Estos casos que se abordan en el libro son muy dispares entre sí. Lo único que los une es el desprecio total por la vida, por la forma en la que fueron masacradas. Este libro lo que hace es poner las cosas en perspectiva: las muertes de estas chicas no se convierten en excepciones sino en regla”. Federico Fahsbender
pega a su mujer nadie lo detiene. Y son cosas que no se denuncian: por miedo, por conveniencia, por ignorancia. Como decía The Smiths: la barbarie empieza por casa. La violencia está en las casas. Es un virus cultural que se transmite de generación en generación. Y se va cambiar desde la educación y de eso se tienen que encargar organismos superiores”. Por su parte, Javier Sinay, que se encargó del caso Solange Grabernheimer y es autor del excelente Sangre joven. Matar y morir antes de la adultez (Tusquets, 2009), pone el foco en una cuestión de lenguaje: “Lo que me interesa mucho de este tema es un debate lingüístico que es el del término “crimen pasional”. Es un término impuesto por los formadores del léxico policial y que ahora es resistido en algunos
sectores de la academia encargadas de los temas de género. Prefieren el término “violencia de género” y no “crimen pasional”. Porque se usa a las pasiones como un manto que encubre la violencia de género”. A Sinay también le interesa el rol que ocupan los medios de comunicación: “los crímenes son los crímenes pero también están constituidos por el relato de los crímenes. Eso es parte de la violencia de los crímenes. El lenguaje crea cosas, modos de ver el mundo. Entonces del modo en el que usamos el lenguaje estamos interpretando de un modo u otro las acciones. Los que trabajamos con el lenguaje sobre los hechos violentos que terminan en sangre alguna responsabilidad tenemos con las víctimas y con los victimarios. Tenemos que ser conscientes de estas cosas. También
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tiene que ver mucho a la hora de tratar los crímenes en los medios: hacen un show de todo. Pero también creo que eso no es tan esquemático: no es que los medios dan un discurso y la gente es víctima de ese discurso y lo toma. La gente también pide show. Y en el medio, informar con seriedad y responsabilidad es una opción. Pero no es la opción mayoritaria. La violencia de género de alguna manera está embrutecida en los medios por la propia naturaleza de los medios que es ésta de contar historias”.
Cuando era adolescente, una chica de 19 años fue asesinada en un pueblo vecino. Le dieron una puñalada en el corazón, mientras dormía, en su propia casa y con los padres durmiendo en la habitación de al lado. Ese caso conmocionó a toda la región, no hablamos de otra cosa durante meses. A mí me causó una impresión muy particular. Fue una especie de revelación: tu casa no es un lugar seguro, en tu casa te pueden matar, si sos una chica te pueden matar. La historia de esa chica muerta volvía cada tanto a mi memoria. Con los años también vinieron otro tipo de reflexiones: la mataron porque era linda, porque era joven. Porque era mujer. Muchas veces pensé escribir su historia. Hace unos 5 años leí en un diario del Chaco el recordatorio del asesinato de una chica por la misma época, los años 80. Los dos casos sin resolver, cerrados. A la tercera historia la busqué. Escribí a diarios de todo el país, hasta que di con la tercera historia. Empecé la investigación, las entrevistas, fui a los sitios donde habían vivido y muerto las chica.
*** Gabriela Cabezón Cámara (Buenos Aires, 1968) es una escritora y periodista que viene trabajando con su narrativa (tres novelas: La virgen cabeza, Le viste la cara a Dios y Romance de la Negra Rubia) el tema de la violencia de género.
¿Tus obras las empezaste trabajando con una temática de género? No, las empecé como se empieza cualquier cosa literaria: por una imagen que te afectó, una emoción que sentiste en algún momento y después eso tiene una elaboración y mediatización enorme.
Tu libro se suma a otros que abordan desde distintas perspectivas la violencia de género, ¿considerás que ese tema tiene el lugar que se merece en el debate social?
¿Cuáles son los alcances de la literatura en temas como la violencia de género? La literatura tiene un alcance mínimo por la cantidad de lectores que hay. Igual cuando sale una película de Hollywood con este tema no le cambia la cabeza a nadie. Supongo que la única manera de cambiar esto sería con una educación fortísima de las escuelas tomada como una política nacional. Y con una política que obligue a las escuelas a dar esa clase de temas. Porque el Ministerio de Educación propone textos pero después las escuelas lo dan si quieren. Lo que me asombra mucho de la violencia de género es cuando se da en los más jóvenes. Tal vez no debería porque si se secuestran tantas mujeres para bandas de tratas quiere decir que se siguen consumiendo mujeres como si fueran cosas y eso sin lugar a dudas involucra a los más jóvenes. Uno tiende a pensar que los más jóvenes son mejores y no: no son mejores. *** La Ley 26.485 es una ley de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales. Fue sancionada el 11 de marzo de 2009 y promulgada de hecho el 1 de abril de 2009. Marie Gouiric (Bahía Blanca, 1985) es una de las mejores poetas jóvenes del momento y escribió un extenso poema con esta ley llamado, justamente, “Ley 26.485”. Circula, como todo en esta vida, por Internet. Estos son algunos de sus versos: Para la palabra violencia hay / imágenes: / Una cara envejecida antes de tiempo / como si un elástico le
“Con Chicas muertas quería contar la historia de estas tres chicas que hoy tendrían más o menos mi edad. Yo vengo de una clase social parecida a la de ellas, vengo de un sitio parecido al de ellas, tendríamos más o menos la misma edad. Pero ellas están muertas. Mientras escribía el libro me preguntaba si mi único mérito no sería seguir viva.” Selva Almada cruzara la frente; / el ruido delator de los platos rotos / y un patio que él cubrió con cemento la tierra / donde ella quería poner helechos y malvones, / gajitos que trajo del interior. // Ni cabida a todo lo que / arruine la manera que vos tenés de verte, corte espejo; / Que sea descansero, con lo que hagas. Manipulero./ Que atrevido / te malondee con si querés terminar el secundario, / cambiar el bar por una tiendita de ropa o / salir a vender pan casero.
¿Por qué escribiste ese poema? Lo que más me llamó la atención es que la ley es un manual de lo que es la violencia. Diferencia la violencia física de la psicológica. La física es la más fácil de identificar. Pero la psicológica es la que funciona todo el tiempo y es la que lleva a la física. Además de que está naturalizada. Ese tipo de violencia está muy explicada en la ley. Cuando la leí pude entender muchas cosas: se prendió una luz en un cuarto oscuro de mi cerebro.
Ese día escribí el poema como si mi texto fuera esa ley. Y es para que cada una tome conciencia de su situación y haga algo con eso. Que se tome conciencia de los lugares donde hay violencia. Y tratar de cambiar el discurso sobre una misma, quitarle poder a ciertas palabras que hay sobre ellas.
¿Era un tema que ya te interesaba? Todo el tiempo las mujeres viven situaciones de violencia. Y no soy una extrema en eso. Pero sí veo que mis amigas lo padecen. Además de que yo vengo de una historia familiar donde la violencia física y verbal es muy fuerte. Entonces fue una manera de poder hacer pie yo en algunas cosas. Pero no me interesaba como poeta. No es que busque un tema de actualidad. En la escritura traté de hacer un trabajo sobre el lenguaje para no dar tantas vueltas y poder nombrar con una palabra las cosas. Y
eso lo saqué de la ley porque es muy clara. Yo me propuse que el texto sonara como una denuncia. Y eso marcó como una entonación y un ritmo. Un tono muy arriba. Hay muchos discursos sobre la mujer: cómo se tiene que vestir, cómo tiene que ser, etc. Esa clase de discursos están en la cabeza de las mujeres, y de los hombres también. Entonces empecé a discutir con eso: ¿Tengo que tener un hombre? ¿Tengo que complacerlo? ¿Cuándo lo estoy complaciendo? Me puse a pelear con eso. *** En mayo, la escritora Selva Almada publica Chicas muertas, su primer libro de no ficción donde aborda casos de asesinatos de mujeres que no fueron resueltos.
¿Frente a qué necesidad o inquietudes te pusiste a escribir esta obra?
El tema de la violencia contra las mujeres y las niñas fue adquiriendo visibilidad en los últimos años. Dejamos de hablar de “crimen pasional” para hablar de femicidio. Es un avance. Que salga en los medios, que la televisión hable de violencia de género. Que haya campañas que animen a denunciar. Que haya organismos que acompañen a las víctimas. Se avanza despacio, pero se avanza. De todos modos, falta muchísimo. A veces tengo la sensación de que la misoginia avanza más rápido que cualquier campaña en su contra.
¿Considerás que obras como Chicas muertas y otras que transitan la misma vía pueden ayudar a concientizar y visualizar y modificar conductas? Con Chicas muertas yo quería contar mi mirada sobre la violencia de género, mi propia experiencia como mujer con la violencia de género y quería contar también estas tres muertes impunes, la estructura político-económica-social-judicial-policial que colabora para que estas muertes queden impunes. Quería contar la historia de estas tres chicas que hoy tendrían más o menos mi edad. Yo vengo de una clase social parecida a la de ellas, vengo de un sitio parecido al de ellas, tendríamos más o menos la misma edad. Pero ellas están muertas. Mientras escribía el libro me preguntaba si mi único mérito no sería seguir viva. No sé en qué clave vaya a leerse este libro. No creo en la literatura “edificante”… Sí quería escribir sobre lo que a mí me pasa con la violencia contra las mujeres y fue lo que escribí.X
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«De Marx y Deleuze me vino esta idea: el cine extrae plusvalía del trabajo colectivo de las imágenes parciales. El cine hace producir lo extraordinario a las imágenes ordinarias. A eso llamo “cine-capital".»
posibles?
Jun Fujita Hirose
«El cine extrae plusvalía del trabajo colectivo de las imágenes parciales» Jun Fujita Hirose es crítico de cine y profesor de la Universidad de Ryukoku (Kioto). Sus clases son conocidas por exponer -creativamente- ideas deleuzianas y llevarlas al terreno del cine, la política y la comida. Recientemente estuvo en la Argentina para presentar su libro Cine-Capital. Cómo las imágenes devienen revolucionarias (Tinta Limón ediciones, 2014). Un ensayo político y filosófico sobre el cine capitalista y las imágenes, donde -entre otros tanques occidentales- cruza a Deleuze, Hitchcock, Marx, Virno, Bergson y Rohmer sin perder su voz en el revuelto. Aprovechamos la publicación de su primer libro en castellano, para hablar -en perfecto español- de cine, del devenir revolucionario de las imágenes, del movimiento antinuclear en Japón y de empanadas criollas. Por Damián Huergo ¿A qué llamás Cine-Capital? La idea de “cine-capital” me llegó cuando comparé una frase de La imagen-movimiento de Gilles Deleuze con un pasaje de El capital de Carlos Marx. Hablando del cine, Deleuze dice: “la producción de las singularidades se hace por acumulación de ordinarios”. Y Marx dice por su lado: “lo que caracteriza la división manufacturera del trabajo es el hecho de que el obrero parcial no produce mercancía. Lo que se transforma en mercancía es sólo el producto colectivo de los obreros parciales. El capitalista paga a cada uno de los cien obreros su fuerza de trabajo independiente, pero no paga la fuerza combinada de la centena.” Me pareció que ambos dicen exactamente
lo mismo. De ahí me vino esta idea: el cine extrae plusvalía del trabajo colectivo de las imágenes parciales. El cine hace producir lo extraordinario a las imágenes ordinarias. A eso llamo “cine-capital”.
¿Cómo una imagen puesta en cooperación con otras imágenes ordinarias puede producir plusvalía? Imaginémonos por ejemplo que vos compraste un pajarito blanco. En la medida en que lo dejás vivir solo, tu pajarito se queda como un simple pájaro blanco. Pero si comprás además un pájaro celeste y lo ponés junto con el blanco en una misma jaula, ellos forman una pareja de pájaros argentinos en su conjunto. Al encontrarse con el celeste, el blanco deviene pájaro argentino aun siguiendo siendo un pájaro
blanco. Es lo mismo que decir que entrando en relación diferencial con el celeste, el blanco se desdobla en pájaro blanco y extra-pájaro argentino.
dable el hecho de realizarme como pájaro argentino.”
¿Cuál es la sensación ambivalente del explotado?
El proceso de liberación del sujeto empieza cuando ese sentimiento ambivalente se convierte en una vergüenza. Vergüenza de no poder realizarse sino sólo dentro del marco del régimen capitalista, vergüenza de no poder vivir sin contraer compromisos con el capitalismo. Es ese sentimiento lo que produce nuestra potencia revolucionaria. Es la vergüenza de ser incapaz de llevar la revolución la que nos fuerza a cada uno a devenir revolucionario.
Si vos llegás a obtener una pareja de extra-pájaros argentinos sin invertir nada más que el valor-capital equivalente al valor sumado de un simple pájaro blanco y un celeste, es el sobretrabajo de los pájaros lo que produce una tal “plusvalía” argentina. Vos explotas a los pájaros, poniéndolos a trabajar juntos en una jaula-fábrica. Por el lado de los pájaros, se experimenta sin embargo un sentimiento ambivalente. Todo sucede como si ellos dijesen: “claro que estoy explotado, pero, al mismo tiempo, no es tan desagra-
¿Puede haber liberación del sujeto mientras tal sentimiento prevalezca?
¿Cómo se da ese devenir revolucionario? ¿Es un acto de voluntad lo que abre a nuevos
Lo que está en juego es una voluntad. No se trata de la voluntad del cineasta sino de la de las imágenes. Todo lo que puede un cineasta es entrar en alianza con las imágenes resistentes. Al leer entrevistas, te darás cuenta del hecho que todos los cineastas del cine moderno hablan no tanto en sus propios nombres sino siempre en el nombre de las imágenes. Por ejemplo, Roberto Rossellini dice: “las cosas están aquí, ¿por qué manipularlas?”. Es un grito de las imágenes mismas, y ahí el cineasta italiano no hace nada más que entrar en alianza con esas imágenes que se ponen en resistencia contra la manipulación explotadora cine-capitalista. Lo importante es que la potencia nunca cae del cielo. Si uno quiere crear nuevos posibles, hace falta primero crearse una potencia, con la cual se identifica de tal suerte que aumente su propia potencia creativa.
¿Cuáles son las estrategias de resistencia del Cine-Capital para perdurar? Son las mismas estrategias que las que emplea el capitalismo contemporáneo: financiarización de la economía. La financiarización de la economía cine-capitalista apareció a principios de los ‘70 con una nueva forma de valorización, que consiste según Deleuze en “parodizar los clichés”. Desde los ‘60, la producción cine-capitalista cayó en un estado de crisis permanente, en el que los productos extraordinarios del trabajo colectivo de las imágenes ordinarias aparecían como meras repeticiones, estereotipos, clichés. Las fábricas de sueños hollywoodenses ya no podían hacer más que reproducir los sueños americanos (y las pesadillas, en el caso del cine fantástico) ya producidos. De ahí surgió la necesidad urgente de inventar una nueva forma de valorización: la parodia.
¿Qué papel tiene el espectador en esta valorización paródica? La valorización paródica, el valor de lo extra-ordinario ya no es determinado sólo por el trabajo de las imágenes sino también por el del público que lo interpreta. El cine integra así el trabajo del público espectador en el proceso de producción de plusvalía. Después del Nixon Shock, el espectador ya no se queda
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«Lo que está en juego es una voluntad. No se trata de la voluntad del cineasta sino de la de las imágenes. Todo lo que puede un cineasta es entrar en alianza con las imágenes resistentes.»
pasivo, inerte o improductivo, sino se vuelve activo, productivo, en tanto que especulador. En suma, se trata de una versión de aquello al que Jacques Rancière llama “espectador emancipado”.
En la revista Crisis escribiste sobre el movimiento antinuclear. ¿Cuál es la situación actual del levantamiento? El movimiento antinuclear desarrollado en Japón desde el comienzo del accidente de la central de Fukushima (dije “comienzo”, porque el accidente está siempre en curso) tiene un impacto importante en la sociedad japonesa contemporánea, sobre todo en la medida en que hizo surgir una nueva relación de fuerzas. Por un lado, la población japonesa reconoció por primera vez la existencia de la alianza estrecha entre el Estado y el Capital. Por otro, se esparció de manera inédita una imaginación colectiva de unidad nacional. Mucha gente se sintió de repente unida o unificada bajo una sola y misma nube atómica. Desde poco después del comienzo del accidente, recorrió todo el Japón una llamada a una unidad nacional que
decía: “nosotros somos todos iguales bajo la irradiación nuclear.” Así el movimiento antinuclear instauró un nuevo antagonismo (inédito al menos en la sociedad japonesa contemporánea), a saber: antagonismo entre la Nación y el poder complejo Estado-Capital. En efecto, todo sucede como si la dicha Nación se diera cuenta de repente de la opresión estatal-capitalista que padecía desde hace mucho tiempo y, al mismo tiempo, de su propia capacidad de oponerse o resistirse contra ella.
¿Existe esa unidad o es una ilusión nacionalista? A esa pregunta, un volante distribuido por una agrupación sindical muy combatiente da una sugerencia aclarante. El volante dice: “nunca somos iguales bajo una irradia-
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ción nuclear.” Es decir que los ricos y los pobres jamás están irradiados de manera igual. Los pobres están siempre más expuestos a la radioactividad que los ricos. Por ejemplo, los alimentos que provienen de la región atomizada son siempre mucho más baratos que los que provienen de las otras regiones. Y los pobres están siempre obligados a comprar y comer esos alimentos baratos. Además, los pobres o los precarios están siempre en peligro de trabajar en los lugares en donde el riesgo de irradiación es más alto, incluso en el sitio mismo de la central nuclear accidentada.
¿Qué impresiones te llevas de tu visita a la Argentina? El 24 de marzo asistí a las dos marchas del 38º aniversario del último golpe militar. La del gobierno me supuso un impacto enorme con su marea celeste y blanca. Es decir, con la presencia física e inmediata de una imaginación colectiva de unidad nacional y de identidad NaciónEstado. Claro que antes de venir acá, a través de internet estaba más o menos al corriente de la subida
«Un volante sindical dice: “nunca somos iguales bajo una irradiación nuclear.” Es decir que los ricos y los pobres jamás están irradiados de manera igual. Los pobres están siempre más expuestos a la radioactividad que los ricos.»
de una nueva versión del peronismo en el nombre de kirchnerismo, pero no la esperaba hasta un punto tal de masividad. Creo que hoy debería ser muy grande la tarea de la izquierda argentina. A grandes rasgos, habría dos tareas principales. En primer lugar, habría que descoser la identificación imaginaria de la Nación al Estado. Y después, habría que desconstruir la idea misma de la unidad nacional, reconociendo ahí donde se supone una unidad nacional la realidad de la existencia permanente de una división interna, a saber: división de clases. ¿Pudiste ver cine argentino? No conozco mucho. Durante mi visita en Buenos Aires, conocí a Mariano Llinás y sus películas. Llinás realizó una película cuyo título parece sospechoso desde el punto de vista de mi libro: Historias extraordinarias. Este título, ¿es una confesión de fe de un cine-capitalista? Llinás, ¿es uno de aquellos cineastas explotadores que no dejan de hacer contar historias extraordinarias a nuestras queridas imagencitas ordinarias? Precisamente no lo es. Si su película cuenta efectivamente historias extraordinarias, no son las imágenes las que las cuentan. Durante cuatro horas de la duración de la película, son exclusivamente las voces-en-off las que cuentan las historias (aun cuando los personajes hablan en las imágenes, sus actos de habla conservan siempre una autonomía respecto a las imágenes mismas). Acá ya
está un punto crucial. En la película hay algo al que podríamos llamar “rechazo de trabajo”. Las imágenes rechazan trabajar, dejando toda la producción de historias extraordinarias a cargo de las voces-en-off. Y rechazando así producir lo extra-ordinario por sí mismas, las imágenes aparecen como lo que son, como ordinarias. En otras palabras, “se autovalorizan” en su propia realidad ordinaria, aquella realidad a la que Deleuze llama “situación puramente óptica y sonora”.
En tus clases solés llevar también ideas deleuzianas a la cocina, ¿pudiste hacer una lectura de alguna comida argentina? Deleuze crítica siempre la fenomenología francesa, diciendo que la carne es demasiado blanda. Si los argentinos quieren “empanar” la carne (en empanada o choripan), a mi juicio es porque comparten perfectamente esa crítica deleuziana. Deleuze dice: para sacar la potencia de la carne necesitamos darle un hueso. El acto de empanaje consiste precisamente en dar a la carne un hueso o, más precisamente dicho, un caparazón.
¿A qué le decís Ni a Palos? A todas las posibilidades fáciles y fantasmagóricas que se venden en el mercado capitalista, a todas las esperanzas-mercancías ya sean Obama, Cristina, Evo, Mujica o Dilma. X
ECONOMÍA, POLÍTICA Y FÚTBOL DESDE LA ARENA MUNDIALISTA
Maluca Beleza Por Manuel Gonzalo A comienzos del siglo XIX, Rio de Janeiro experimentaba un fuerte y desordenado crecimiento urbano debido a la instalación de la corte portuguesa en 1908. La cantidad de alienados, como llamaban en ese entonces a la población con trastornos en sus facultades mentales, crecía sin que existiese tratamiento hospitalario alguno. Los que tenían familia, eran cuidados por ésta. Otros deambulaban por la ciudad. Y los más agresivos eran encarcelados, encadenados, o ambas. Este escenario fue adquiriendo tal notoriedad que se realizaron diversos informes médicos alertando sobre la situación de los alienados en Rio de Janeiro. Así, ya en 1841 José Clemente Pereira, abogado, comerciante y político conservador se inserta en la Santa Casa de Misericordia de Rio de Janeiro, institución lusitana en decadencia, dedicada al cuidado de enfermos y carenciados, e inicia una campaña pública para crear un hospital de alienados (y
reinsertarse en la vida política de la época, claro). Sobre fines de ese mismo año, Pedro II, el Magnánimo, segundo y último Emperador de Brasil, quien fue entronizado a los 5 años de edad debido al repentino retorno hacia Portugal de su padre, Pedro I, firmó el decreto de creación del Hospício de Pedro II - Hospício Nacional dos Alienados. Construido en la Praia Vermelha, al pie del Pan de Azúcar, entre 1842 y 1852, el hospicio que dio inicio a la psiquiatría brasileña fue el resultado del trabajo conjunto de José Monteiro, Joaquim Cândido Guilhobel y José Maria Jacinto Rebelo, tres de los mayores arquitectos de la época. Tanto la espectacular fachada exterior como su diseño interior, que lo convierten en uno de los mayores exponentes de la arquitectura neoclásica brasileña, buscaban dar cuenta del poder de la ciencia médica moderna. El objetivo del hospicio era rehabilitar a los pacientes a través de la terapia ocupacional, pese a coexistir con las prácticas convencionales para los
internados que se tornaban violentos y que consistía en el aislamiento, la camisa de fuerza y el encierro en una habitación oscura. Por esas trayectorias impensadas de la historia, más allá de la efectividad o no de la terapia ocupacional sobre la salud de los pacientes, lo cierto es que la organización en torno a labores de herrería, carpintería, ingeniería eléctrica, le otorgó un reconocimiento al hospital como lugar de formación de trabajadores, al cual varios empresarios de aquel entonces concurrieron en busca de mano de obra calificada. En sus casi 100 años de existencia, entre sus internados se destacan algunas figuras de la historia carioca como el escritor y periodista Lima Barreto, quien luego de su internación escribió Diário de Hospício y O cementerio dos Vivos. Ya con el advenimiento de la República a inicios del siglo XX, se comenzó a implementar con una parte de los pacientes una terapia denominada de assistencia hetero-familiar que consistía en el tratamiento ambula-
torio, apoyándose en la contención y las instalaciones brindadas por sus familias o por familias sustitutas. Esta terapia tendría la ventaja de crear la "ilusión de libertad". Hacia 1920 el hacinamiento de los pacientes y el deterioro edilicio marcaban la decadencia del nosocomio. En 1927 el predio es cedido a la Universidad de Brasil (antecesora de la Universidad Federal de Rio de Janeiro UFRJ), se trasladó a buena parte de los pacientes a otros hospitales y quedó en funcionamiento lo que hoy es el Instituto Philippe Pinel, en reconocimiento a uno de los pioneros de la humanización del trato hacia los pacientes psiquiátricos, quien propugnó por la eliminación del uso de cadenas en los pacientes. Más contemporáneamente, en 2001 se aprobó la Ley Federal de Salud N°10.216, que busca eliminar gradualmente la internación como forma de exclusión social. La ley es el resultado de un proceso que comenzó a gestarse en la década del 70 motorizado en ese entonces por
el Movimento dos Trabalhadores em Saúde Mental (MTSM), antecesor del actual Movimento por uma Sociedade sem Manicômios, integrado tanto por trabajadores como por asociaciones de familiares y usuarios del sistema de salud mental brasileño. Esta reforma, modelo en América Latina, implica un fuerte desafío institucional para consolidar una red institucional, territorial y familiar que permita la integración social de los pacientes a través del tratamiento ambulatorio, sin dejarlos a la deriva en términos de recursos. Hoy, el Instituto de Economía de la UFRJ, donde transcurren buena parte de mis horas en Rio, está emplazado en el mismo predio donde funcionó el Hospício Nacional dos Alienados y coexiste con el Hospital Philippe Pinel. En una disciplina como la economía (política) en la que la ortodoxia neoclásica sueña con agentes ultraracionales (y la ortodoxia marxista piensa en clave de leyes universales), bienvenida sea la ventana de oportunidad de la locura. ×
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La salidera
Genes Por Martín Rodríguez Algunos la llamamos “generación intermedia”, otros amigos “políticos commoditie”, pero si nombro a Massa, Scioli, Macri, Insaurralde, (¿Boudou, Bossio?), sabemos de qué hablamos. No es una generación según tal franja etaria, más bien se trata de una liga de políticos nacidos y criados en torno al peronismo de los años 90, y que gestionaron durante la década K. Su agrupamiento genético podría ponerles en la vereda de enfrente a una lista distinta de políticos de ideología que puede incluir a Carrió, Gil Lavedra, Moyano o Cristina. No paso por alto las diferencias ideológicas concretas de esta segunda lista, sí las intensidades medidas en dosis ideológicas (aunque sean de izquierda, peronistas o republicanas). Pues bien, de los intermedios salen los principales nombres con potencia electoral para el 2015. Y el 2015 es como la costa uruguaya: a veces se ve, a veces no, depende la visibilidad, la humedad, la hora del día… El dato de que de “esa” generación intermedia provenga el racimo frondoso de políticos es y debe ser puesto en análisis en el balance de la década ganada. ¿Qué clase de políticos surgieron estos años, cuáles fueron las concepciones electorales del populismo argentino, por qué el kirchnerismo no produjo candidatos propios, referentes cuya legitimidad pueda ser cristalizada en un conteo de voluntades? ¿Cuáles son los gobernadores, intendentes o sindicalistas “puros”? ¿Acaso no se subrayó aún más la diferencia entre militante y político, en desmedro de la tarea electoral? ¿Qué sistema de partidos deja la época aunque haya solucionado la “crisis de representatividad”? La exclusividad de Cristina y Néstor (que hicieron síntesis entre ambas cosas) hizo del kirchnerismo militante una mística un tanto des-territorializada, muy en torno a los movimientos del Estado, pero poco arraigada a territorios electorales. Hay cuadros, locales, comedores, despliegue, pero en una experiencia de cultura militante con escasísima productividad electoral. Digamos que la militancia es una cultura diferente a la de la política partidaria. El militante es habitué de formas resistentes, no es exitista, es organizado pero desprecia el “partido”, se auto-narra gloriosamente y construye un teatro de representación en el que coloca su concepción de Pueblo, Patria,
¡AGEN
DÁ!
manda tu gacetilla a salidera@niapalos.org
etc. Kunkel, Mariotto, Moreno, Conti, etc., son leyendas sin votos. Esto, que muchos llaman “exceso ideológico”, sin embargo es lo que luego confunde otros excesos. Ejemplo: cuando el kirchnerismo imaginó cómo enfrentar a Massa le antepuso una copia completamente “idéntica”. Es decir: hizo una construcción de espejo. Una especie de “Kent” de los intermedios: joven, rubio, vencedor de un cáncer, con novia modelo e ideas punitivas. Montoneros en su estrategia de 1973 tuvo una tensión directa con el Ejecutivo nacional, con Perón, a la vez que el despliegue de la Tendencia contabilizaba “gobernadores propios”, “diputados propios”, “sindicatos propios”. Ese desarrollo fue entendido a disgusto por Perón, que quiso tener todo propio, además del Estado nacional. Fue una construcción inversa a la de estos años de puro Ejecutivo nacional. El kirchnerismo es Nación, y de ahí para abajo, casi nada. Tarde, pero esa debe ser la tarea kirchnerista. Como me obsesionan la generación intermedia, pido disculpas y repaso un texto que escribí en mayo de 2012 para Le Monde Diplomatique: “Intérpretes menos rígidos capaces de leer el viento del tiempo. Ese es el capital de la generación intermedia. Aunque sea en la clave: buenos políticos con ideas horribles. Los intermedios (…) son políticos de primera línea que no se autodeclaran de derecha y que cumplen mandatos no escritos: se puede ser de derecha pero no se puede parecerlo, se puede ser de derecha y no saberlo y/o se puede ser de derecha por tener un pensamiento “natural y popular”. No se les podría discutir su condición de populistas y peronistas, son políticos con intenso despliegue en las clases más bajas. Su dicción es previa al relato de estos años de catecismo progresista en que se puso en el centro el debate distributivo. Sus experiencias de gobiernos municipales les permitieron márgenes y zigzagueos, siempre con las garantías sociales de un gobierno nacional situado a su izquierda. Gobernar por derecha una ciudad o provincia en un país con Asignación Universal disminuye los efectos sociales de cualquier política de exclusión. ¿Son de derecha? ¿Sabrán reconocer las condiciones de gobernabilidad del kirchnerismo? ¿Se animarán a correrse hacia ese centro?” De esas respuestas empieza a depender la configuración del nuevo orden.x
Lunes
opinar sobre el resto que rodea la banda. Si usted nunca se conmovió con alguna de sus letras, nunca agitó su cabeza revoleando los pocos pelos que le quedan, y nunca se le puso la piel de gallina por sentir a la patria hecha canción con riffs y distorsión, le recomiendo que anote este evento. El jueves 17 y por tan solo 200 pesitos va a poder disfrutar de un gran recital que no tiene un ápice de desperdicio. Si, es en ese mismo lugar a donde festejaste tu fiesta de egresados, Mandarine Park, ex Mint. Vaya, disfrute y sienta. (Ah, no vaya de colores, vaya de negro, doña)
Maruja Enamorada. Biodrama amoroso El Estepario Teatro - Av Medrano 484 - 21 hs Si te dicen "vamos a ver una obra de teatro que trata sobre la erotomanía", vos seguramente preguntes qué cazzo significa eso. Ahora, si te invitan a ver una obra inspirada en "un síndrome que hace creer ilusoriamente que otra persona está secretamente enamorada de uno", va tomando otro color. Eso es la erotomanía, y de eso trata Maruja Enamorada. De eso y de mucho más. Del amor, de la ficción, de la ficción en el amor y todas las combinaciones posibles, que de melosas no tienen nada. La obra es dirigida por Vivi Tellas que, junto a Maruja Bustamante, también escribió los textos. Tellas es una de las referentes más destacadas de la escena teatral porteña. Obra muy recomendable, sobretodo para un lunes. Reservas al: 2004-6507.
Miércoles Sotavento Big Band El Cubo - Zelaya 3053 - 21.30 hs Y como en La Salidera siempre tenés para todos los gustos, después de ir a escuchar rock el martes, podés sofisticar el oído y disfrutar de una muy buena Big Band de Jazz. Sotavento se presenta en El Cubo festejando sus 10 años de trayectoria y a 4 años de su primer trabajo discográfico. El año pasado presentaron su disco "10 años" en La Trastienda, y desde ahí no pararon de tocar en vivo. Sotavento Big Band nos propone unos arreglos con mucha identidad propia que hacen de soporte sonoro al rasgo característico del Jazz como género musical: la improvisación de los solistas. Esta combinación de mucho ensayo y de libre albedrío musical, hace de esta propuesta una muy interesante para parar el oído y volar con las melodías, armonías y ritmos.
Martes
Jueves
Las Pastillas del Abuelo
Toca Almafuerte, manga de "guachosforros"
La Trastienda Club - Balcarce 460 21 hs Cada tanto nos tenemos que dar el gusto de la clásica salida que consiste en ir a ver una buena banda de rock nacional. Esta semana tenemos esa posibilidad, ya que Las Pastillas del Abuelo se estará presentando en La Trastienda Club. Una gran banda en un gran lugar. Una salida clásica para hacer una escapada con tus amigos, o bien, ir con tu novia/novio, marido/mujer, o un simple "huesito". La entrada sale $280 e incluye una mesa sin numerar, en la que podés tomarte un copetín disfrutando de esta gran banda que no paró de crecer en los últimos años en el rock nacional.
Staff Director Federico Scigliano Editor Diego Sanchez
Redactores Pablo Móbili Martín Rodríguez Emiliano Flores Franco Dorio Julián Eyzaguirre Romina Sánchez Diseño original Nizo Mauas
Mandarine - Acceso Punta Carrasco - 17hs Declaraciones polémicas, respuestas derechosas, litros de saliva en la cara y una docencia poco amigable distinguen a Ricardo Iorio, cantante de Almafuerte. La mala prensa se la ha ganado, hay que decirlo. No vamos a olvidarnos de muchas de sus frases polémicas que a veces nos hacen dudar de la cordura del gran Ricardo. Sin embargo, la posta (además de caernos bien porque no tiene filtro) es que es un gran músico y con su banda, sin dudas, son "lo mejor del heavy nacional". Si usted nunca escuchó Almafuerte poco puede
Arte Diego Paladino Fotografía Patrick Haar
Redacción: Amenabar 23 (C1426AYB) Ciudad Autónoma de Buenos Aires Contacto: contacto@niapalos.org Departamento comercial: Tel.: 4776-1779
Viernes Barhopping Buenos Aires Night Tour Tips, resto y lounge - Thames 1514 - 22hs Es verdad, fuerte cambio de frente. De lo nacional y popular a lo careta palermitano. Es así, nosotros sabemos que vos jugás en todos los frentes, campeón/a. En esta ocasión te proponemos una nueva moda de la que tenes que estar al tanto porque probablemente te la cruces en algún barcito. "Barhopping", señores. ¿En qué consiste? Con 85 pé te registrás y arrancas una gira de bares que luego termina en un boliche y probablemente con vos de la capocha. Resulta que esta moda implica shots libres en el primer bar, shots de bienvenida en los otros tres y entrada sin fila en el cheboli en el cual finiquitás la noche. No parece un mal negocio entendiendo que lo único que chupás son shots. Si uno quiere consumir un fernét, por ejemplo, tiene que pagar lo que salga en ese bar. La entrada al boliche también la pagás pero supongamos que tomando alguna que otra birra toda la jodita salga alrededor de 250 pe la noche. Fijate, es yanki, pero puede llegar a ser muy divertido.
Internos: 156 y 159 Venta de ejemplares atrasados: Azopardo 455. Tel.: 4342-8476 Impresión: Editorial AMFIN S.A. Paseo Colón 1196. Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Distribución en Capital Federal y Gran Buenos Aires:New Site. Baigorri 103, CABA Distribución en el interior: Inter Rev S.R.L. Av. San Martín 3442. Caseros Pcia. de Buenos Aires