Diario La Calle - Nº3

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La Calle Nยบ3 - 2017

28% de inmigrantes vive en condiciรณn de pobreza

VIVENCIAL

REPORTAJE

Fabio Sรกnchez

La ayuda especial para inmigrantes en situaciรณn de vulnerabilidad

El cara y sello de ser inmigrante Pรกg. 6

Segรบn el Ministerio de Desarrollo Social hay una cifra importante de inmigrantes en la calle. En casos donde se observan inmigrantes en albergues, se busca informaciรณn que deriva a instituciones especializadas.

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Editorial: Lejos de abrazar el respeto, igualdad e integraciรณn Pรกg. 2

Columnas: Innovaciรณn social: Tu tiempo de calidad Por Patricio Massardo

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La Calle

EDITORIAL

Lejos de abrazar el respeto, igualdad e integración El 80% de los inmigrantes en Chile presentan un promedio que supera los 10 años de educación, teniendo incluso mayor nivel de escolaridad que los chilenos. Según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Chile se ha convertido en el país con mayor aumento de inmigrantes en la región con un alza de 4,9% por año entre el 2010 y 2015, superando así a México y Brasil.

lidad corresponde al 28% del total de extranjeros. Poco a poco han aparecido casos de migrantes cuya única alternativa de sobrevivencia es la calle. Si bien las cifras no oficiales que se manejan son insignificantes, el fenómeno se está instalando y es necesario tomar medidas concretas y mirar expePara muchos Chile resulta atractivo por la estabilidad económica, se- riencias exitosas que otras naciones han desarrollado frente al tema. guridad y opciones laborales. De acuerdo con el informe de la Canadá, por ejemplo, desde prinagencia de Naciones Unidas, el cipio de los setenta ejecuta la po80% de los inmigrantes en Chile lítica del multiculturalismo y abrió presenta un promedio que supera las puertas a nuevas culturas inlos 10 años de educación, tenienmigrantes abrazando el respeto do incluso mayor nivel de escoy rechazando la xenofobia y dislaridad que los chilenos, esto se criminación. Hoy conscientes del da principalmente en peruanos, éxito que ha traído esa mirada, haitianos, uruguayos, argentise configuran como una sociedad nos, colombianos y ecuatorianos. rica y diversa donde el extranjero que llega tiene las mismas oporEl dato anterior cobra relevancia toda tunidades de desarrollo laboral y vez que la gran mayoría de los inmigrantes desempeña funciones en educacional, se aprovecha la fuerza, deseos de superación y las foráreas que poco tienen que ver con sus profesiones y formación, en el me- talezas de cada migrante como un aporte para el desarrollo del país. jor de los casos toman lo que el mercado les ofrece con la mirada puesta en asentarse en el país y cambiar la suerte en un corto o mediano plazo. A Chile le falta mucho para avanzar en esa dirección, se necesita un cambio cultural y un remezón educativo que sea capaz de Sin embargo, la pobreza ha cubierto con su manto los sueños de más crear nuevos cimientos para un trato basado en la igualdad, respede 89.000 inmigrantes que viven en condiciones de hacinamiento. to e integración y evitar así que el incipiente fenómeno del inmiCifras de la Fundación Techo, dicen que esta rea- grante en situación de calle se convierta en un caminar sin retorno.

Más de 89.000 inmigrantes viven en condiciones de hacinamiento. Según la Fundación Techo, esta corresponde al 28% del total de extranjeros.

COLUMNAS

Innovación social: Tu tiempo de calidad Hoy como sociedad convivimos con la presión del tiempo, de las responsabilidades, de una vida ajustada en relaciones, en esperanzas, en economía, en familia y en la nula posibilidad de darse el tiempo para mirarse, para ver qué quiero o qué debo elegir y no solo quedarme con lo que me toca vivir, no vemos a quien está al lado, de cómo me mira o qué piensa de mí o de él o de nosotros. ¿Así como podemos innovar o cambiar el foco de la mirada? Hace un año que en conjunto a un equipo de trabajo formamos la fundación “trato hecho vecino”, su objetivo base, es ofrecer un servicio doméstico para la mantención de casas a un barrio especifico, la condición es que en el convivan una junta de vecinos y una hospedería o centro de acogida de “personas vulnerables o en situación de calle”, estas últimas en conjunto con un grupo de voluntariado familiar ejecutamos los trabajos a bajo costo y con la retribución de que el vecino o “cliente” nos reciba en su casa con un almuerzo o “tentempié” y con su presencia, generando instancias de comunicación y vinculación. Donde se rompan prejuicios y se conozcan las personas que residen en un mismo territorio. Hay personas que necesitan una mano para avanzar en su andar, otras que necesitan mano de obra para conservar sus casas dignas a bajo costo y barrios que cuentan con todos los ingredientes! mezclarlos lo único que genera son beneficios, buscar instancias de encuentro nos ha demostrado que es la clave para la vinculación, para mirar al otro, para conocer su realidad y derribar prejuicios, para darse cuenta que somos todos iguales, que existen capacidades humanas invisibles, que muchas veces ni uno mismo se las aprecia. Estos descubrimientos generan gratitud, respeto y una mejora de la autoestima y por sobre todo un agradecimiento al espacio vivido.

Nosotros como fundación, estamos en la búsqueda de instancias vivenciales reales, de personas que necesiten generar algún recurso, de personas que necesiten conservar sus hogares, de juntas de vecinos que estén motivadas en ser un servicio para la comunidad y de familias voluntarias dispuestas a vivenciar en conjunto una experiencia enriquecedora y educativa. Básicamente buscamos “tiempos reales” y que estos puedan mejorarse, que sean instancias de calidad y que aporten a la comunidad y por sobre todo que potencie la autoestima que es el motor principal para evolucionar.

Patricio J. Massardo M. Presidente Fundzador Fundación “Trato Hecho Vecino”

“…buscar instancias de encuentro nos ha demostrado que es la clave para la vinculación, para mirar al otro, para conocer su realidad y derribar prejuicios, para darse cuenta que somos todos iguales, que existen capacidades humanas invisibles, que muchas veces niuno mismo se las aprecia”.


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VIVENCIAL

Una historia de esfuerzo más allá de las fronteras Jhon Roullet: “Desde un comienzo todo fue complicado, el sistema de vida, el lenguaje, la cultura, sumado a los estigmas y constante discriminación que tiene la gente por las personas extranjeras”.

Por José Pineida

Roullet es un joven haitiano de 25 años, desde hace 4 años vive en Chile con un solo sueño: conseguir un trabajo estable con el que pudiera ahorrar y en un par de años pudiera traer a su familia a vivir desde Haití. Sin embargo este camino no ha sido para nada sencillo, en sus primeros meses tuvo que conocer la realidad de la calle de manera muy abrupta, venía de un país muy pobre y llegó prácticamente con lo puesto, por lo que no pudo conseguir un lugar donde alojar en su primer tiempo de estadía.

riencias y poder conocer un poco más del idioma y datos importantes para movilizarse dentro de la ciudad. Las primeras barreras

Sin embargo, el camino para poder dejar el mundo de la calle no fue fácil, los constantes problemas para obtener su documentación y las reiteradas ocasiones en que se le negó un trabajo o una oportunidad solo por su origen marcaron el primer intento por dejar esa dura realidad y tener la posibilidad de empezar El comienzo fue muy duro, el cam- nuevamente, entendía que no sebio era muy grande y habían días ría de un día para otro, pero nunen que no le alcanzaba para comer ca perdió la esperanza de lograrlo. algo, en eso momentos la caridad en la calle no fueron muy fructíferas, Sintió el rechazo de la gente por su copor lo que tuvo que deambular por lor de piel y procedencia, pero no fue los distintos albergues de Santiago, impedimento para seguir luchando, ahí pudo conocer a otros haitianos gracias a unos amigos extranjeros que que le sirvió para compartir expe- convivieron con él durante un tiempo, comenzó a trabajar como vendedor ambulante con lo que consiguió un poco de dinero para el arriendo de una pieza. Con ello fue progresivamente dejando la calle, pudo optar a un mejor trabajo y un hogar digno, es así como se desempeñó en una bomba de combustible por dos años. Nueva vida Con el paso del tiempo, Jhon Roullet pudo establecerse de mejor forma en el país, logró enviar ahorros a su familia, pudo optar a una mejor calidad de vida y obtuvo una visa definitiva para permanecer legalmente en Chile, desde su llegada destaca que: “Desde un comienzo todo fue complicado, el sistema de vida, el lenguaje, la cultura, sumado a los estigmas y constante discriminación que tiene la gente por las personas extranjeras”, consciente de que el idioma fue una gran barrera, pasó de hablar un par de palabras en es-

pañol a comunicarse de manera más fluida gracias a la integración en su trabajo y ambiente de vida diaria. Durante el último tiempo Jhon se ha consolidado como auxiliar de aseo en el Metro de Santiago, está de forma estable y con un contrato, con esto siente que su vida cambio totalmente: “Estoy muy a gusto en este lugar, me gusta lo que hago y soy feliz. Tengo la esperanza de algún día poder reencontrarme con mi familia, para ello haré todo lo posible”. Actualmente en su tiempo libre asiste a un centro de ayuda para inmigrantes, donde recibe capacitación y apoyo, además brinda sostén a compatriotas que llegan al centro, enseñando español orientando en trámites de extranjería.

“Estoy muy a gusto en este lugar, me gusta lo que hago y soy feliz. Tengo la esperanza de algún día poder reencontrarme con mi familia, para ello haré todo lo posible”.

Decano Facultad de Comunicaciones: Sergio Campos Ulloa. Director responsable: Ignacio Paz Palma. Periodistas: Débora Alarcón Gutiérrez, Paulina Arenas Goycoolea, Pía Maturana Meza, José Pineida Bastías, Roberto Ramírez Alzamora, Héctor San Martín Inostrosa. Diseño Gráfico: Héctor San Martín Inostrosa. Escuela de Periodismo, Facultad de Comunicaciones. Universidad Central de Chile. Auspicia y patrocina: Progama de Desarrollo Social - Vicerrectoría Académica. Dirección: Lord Cochrane 417. Torre A - Piso 1.


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CRÓNICA Exclusión social:

La calle es más densa cuando se es inmigrante Vivir en situación de calle trae consigo problemas asociados, entre los más frecuentes son el hambre, el frío y en gran medida la soledad pero ¿Qué ocurre cuando se vive en situación de calle como inmigrante? Por Paulina Arenas - Fotos gentileza de Movimiento Acción Migrante.

Quizás los datos acerca de esta problemática no son masivos, ya que tampoco hay estadísticas que logren cuantificar con exactitud los migrantes que viven en la calle, sin embargo, según información del Departamento de Extranjería y Migración en el año 2014 los inmigrantes residentes en el país alcanzaban las 410 mil personas, pero si consideramos a los migrantes que ingresan indocumentados, se podría alcanzar las 600 mil personas. En Chile existe el Movimiento de Acción Migrante (MAM), entidad encargada de promover y defender los Derechos Humanos de la comunidad migrante, desde esa vereda, Eduardo Cardoza explica que “hasta el momento, los migrantes que viven en situación de calle no parecen ser muchos”, agregando que a diferencia de los que viven en situación precaria, las cifras podrían aumentar considerablemente.

que de esta forma se crean fantasías poco realistas con la idea de cambiar de vida aspirando a una mejor, cuando las condiciones del país al que llega no son como esperaban y terminan viviendo en condición de calle. La visión explicada por Carlos Lorca se asimila a la opinión de Cardoza: “la imagen de Chile afuera es una ilusión, la gente no sabe la realidad del país y terminan en la calle por falta de información”, reflexionando además que tal vez si todos esos migrantes supieran que al llegar a Chile deberían vivir en la calle quizás nunca se hubiesen venido. Invisibles socialmente Además de las razones por las que pueden llegar migrantes a Chile que posteriormente terminarán viviendo en precarias condiciones y en situación de

“Tal vez si todos esos migrantes supieran que al llegar a Chile deberían vivir en la calle quizás nunca se hubiesen venido”. Eduardo Cardoza, Movimiento Acción Migrante.

Chile país de ilusiones Al pensar en inmigración el concepto es la búsqueda de mejores oportunidades para vivir, visto de esta perspectiva entonces ¿cómo puede un migrante llegar a un país desconocido, muchas veces con barreras idiomáticas, y quedarse en situación de calle? Para Carlos Lorca, sicólogo clínico de la Universidad Católica, se podría tratar de personas que llegan al país con falsos ideales, “suponemos que estas personas esperan cambios, y el discurso de sus pares suele ser idealizado, haciendo creer que la situación es mejor que en su país natal”, además aseguró

calle, esto trae consigo otras consecuencias de carácter sicológico, que podrían terminar en problemas de autoestima e incluso depresión. Para Carlos Lorca, observado desde el punto de vista sicológico, el problema se centra en el sujeto y las consecuencias negativas que esto significaría para él, quedando absolutamente desprovisto producto de los cambios culturales, sociales e idiomáticos que pudiesen existir.

podría terminar en la anulación como nocidas, en vez de una amenaza”. personas”. Esto se explica porque se deja de lado la interacción social y se Tal como explicó la socióloga Mipasa a ser un marginado de la sociedad. llycent Contreras, se puede sacar provecho a la migración, aporPese a que se estima que las cifras de tando en el conocimiento de nuemigrantes en situación de calle son ba- vas culturas, nuevas sociedades jas, desde el MAM aseguran que se trata y compartir experiencias basaen su mayoría de inmigrantes haitianos, das en diferentes realidades, pero que se concentran por lo general en las en vez de eso, la situación se les cercanías de la Plaza Yungay en la Re- complica aún más a los migrangión Metropolitana, esto guarda directa tes y cuando hay discriminación relación con la perspectiva sociológica, étnica y racial, parece que la calle según Millycent Contreras, magíster en termina siendo una de las pocas sociología de la Universidad Católica, posibilidades para vivir en Chile. “la mayoría de los inmigrantes en situación de calle provienen de países más po- “Las personas llegan bres y de raza negra, a lo que se le suman más barreras que finalmente los llevan al país con falsos ideaa quedar en situación de calle, como la discriminación”, agregando que en Chi- les, esperan cambios, y le esta es la base de la desigualdad social. el discurso de sus pares Considerarlos como una oportunidad

Esta situación no hace más que afectar negativamente el funcionamiento social ya que según Contreras “al ser los inmigrantes sujetos a prejuicios por nuestra sociedad, verlos en situación de calle no hace más que reforzar ideas como el decir que son flojos, o sucios, cuando la migración debería ser vista como una oportunidad para comSegún el especialista es así partir experiencias y realidades descocomo “surgen problemas de autoestima y extrema exclusión social, por no sentirse parte de la sociedad lo que finalmente

“Verlos en situación de calle no hace más que reforzar ideas como el decir que son flojos, o sucios, cuando la migración debería ser vista como una oportunidad para compartir experiencias”. Millycent Contreras, magíster en sociología de la Universidad Católica.

suele ser idealizado, haciendo creer que la situación es mejor que en su país natal”. Carlos Lorca, Sicólogo.


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REPORTAJE

Foto referencial

El apoyo a inmigrantes en situación de calle Según el Ministerio de Desarrollo Social en la actualidad habría entre 60 a 80 inmigrantes en situación de calle principalmente en la Región Metropolitana y en el norte de Chile. Junto con la aplicación movil “Noche Digna”, se ha podido confirmar otro tipo de información de los inmigrantes. Por Debora Alarcón - Fotos gentileza de Acción Solidaria.

Durante el último tiempo Chile ha sido testigo del fenómeno migratorio, cada vez es más la llegada de inmigrantes a diferentes comunidades del país, ya sea en trabajos, barrios o colegios. Las últimas estadísticas realizadas por la Policía de Investigaciones (PDI) sobre el ingreso de inmigrantes haitianos a Chile, revelan que su incremento supera las cifras del 2016 que arrojaron 43.898 personas. En la actualidad, la cifra va en 44.289 ingresos (desde el 1 de enero al 26 de julio), esto según El Mercurio. Esta situación también se ve reflejada en la realidad de las personas en situación de calle, las cifras de inmigrantes en los albergues van en aumento. Según los datos que entrega el Ministerio de Desarrollo Social (Mideso), hace un año eran aproximadamente 20 inmigrantes alojados en los albergues a lo largo del país, en la actualidad la cifra está entre 60 a 80 personas las que se concentran mayoritariamente en la Región Metropolitana y las regiones del norte. La vida de un inmigrante en situación de calle Un ejemplo de esta realidad es Frank Morales, de 40 años. Es un ecuatoriano, que padece de un desorden de bipolaridad y vive hace 10 años en Chile. Viajó por una relación amorosa que mantenía con una chilena, luego de que las cosas no resultaron como lo

esperaba, Frank queda en la calle. Durmió a la intemperie y también en algunos albergues, hasta que le ofrecieron apoyo a través de un programa llamado trampolín. De esta forma llegó a las Casas Especiales Compartidas, donde vive desde noviembre del 2016. Frank Morales nos comenta que el servicio que le han facilitado ha sido de gran ayuda para superar la realidad que le tocó y para un desarrollo diario: “Me ha servido porque todos lo días se conversa, uno puede hablar de su experiencia si te sientes bien o te sientes mal”. Esta casa recibe hombres y mujeres de 18 a 59 años, que tengan condiciones de discapacidad mental de leve a moderado, ya sea cognitivos o psíquicos. Sobre la discriminación Frank nos comenta que es habitual, que fue muy complicado encontrar trabajo, ya que no lo recibían por ser ecuatoriano. Ahora trabaja en una empresa de aseo y ornato. También comenta que está juntando dinero para viajar a Ecuador y comenzar una nueva vida.

“Cuando hay inmigrantes en los albergues se intenta recabar más información para generar alguna coordinación con otra institución que les preste un servicio más completo para su desarrollo”. Claudia Diaz, Mideso deja en claro que en estos programas no se hace discriminación de persona que viva en la calle por ser extranjera, sino que su enfoque es proteger la vida humana sea o no inmigrante. “Cualquier persona que requiera alojamiento, alimentación, un kit de aseo y dormir bajo un techo la ingresaremos a los albergues, siempre estando disponibles los cupos.”

Agrega que en algunos casos donde se observan inmigrantes, se intenta recabar más información, como conocer su historia, los motivos por los que está en el Apoyo del Mideso a los país y cuánto tiempo lleva en esa inmigrantes condición. Esto se realiza con el fin de poder generar alguna artiLa coordinadora nacional del culación o coordinación con otra programa Noche Digna, Claudia institución que les preste un serDíaz, comenta sobre el papel que está tomando el Ministerio de Desarrollo Social, frente a este fenómeno que se está dando. Primero

“Fue muy complicado encontrar trabajo, ya que no me recibían por ser ecuatoriano”. Frank Morales.

vicio más completo para su desarrollo, ya que en su mayoría son personas que no están acostumbrados a llevar una vida en calle. Las determinaciones que debe tomar el ministerio frente a esta realidad aún deben ser evaluadas, Diaz comenta que “es un tema ministerial que lo estamos analizando dentro de la política pública, cuáles son las acciones que debiéramos hacer los ministerios vinculados con esta temática”. “Esto es algo nuevo para los ejecutores de Noche Digna. Los recursos o dispositivos específicos para esta temática no los tenemos, es parte de un desafío en la política para las personas en situación de calle”, explica Claudia Diaz. Foto referencial


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VIVENCIAL Fabio Sánchez, colombiano

Desde el caribe una historia de superación Por Roberto Ramírez

Fabio Sánchez es un joven colombiano de 26 años, que desde su ciudad natal Cali, al igual que muchos de sus compatriotas, buscó estabilidad económica y laboral fuera de las fronteras caribeñas. Chile fue su destino elegido. Su primera instancia al sur del mundo fue en octubre del año 2013 entró por el aeropuerto Arturo Merino Benítez, tuvo una buena estadía, vivía de manera cómoda en una pieza amoblada que arrendaba gracias al trabajo de construcción y aseo que alternaba entre el día y la noche. A pesar de la estabilidad tuvo que renunciar obligadamente a lo que había conseguido hasta ese minuto y por razones familiares vol-

ver a Colombia a ver a su familia. Diferente a la primera vez que llegó a Chile por cosas económicas, Fabio viajó por vía terrestre a nuestro país a principios de julio del presente año. Tenía que cruzar desde Bolivia y entrar por Región de Tarapacá. En la frontera los auxiliares del bus empezaron a bajar equipaje y Fabio Sánchez notó que estaban dejando en la calle sus maletas, bajó a recuperar lo que le pertenecía, y en ese intertanto, le cerraron la puerta del bus donde quedaron sus documentos y billetera: “me robaron, quedé sin nada tirado en la calle sin saber cómo entrar a Chile”. Al perder sus documentos no podría ingresar a nuestro país legal-

Su primera estadía en Chile fue en 2013 vivía de manera cómoda en una pieza amoblada que arrendaba gracias al trabajo de construcción y aseo que alternaba entre el día y la noche, pero razones familiares lo obligaron a regresar a Colombia. mente. Pese a este drama, el joven colombiano decidió seguir su rumbo hasta llegar a Santiago donde pensaba que podría conseguir un trabajo y un lugar donde vivir. Luego de varias peripecias llegó a dedo a la capital. Apoyo institucional Al llegar a Santiago fue a pedir ayuda al Consulado pues había quedado en situación de calle. Ahí le dieron como alternativa el estadio Víctor Jara y una casa de acogida del hogar de Cristo Padre Lavín: “es un recinto muy acogedor, donde se vive en un buen ambiente, pero que hay que vivir bajo determinadas reglas que hay que acatar para tener una mejor convivencia”, comenta el caribeño.

En la frontera los auxiliares del bus empezaron a bajar equipaje entre las cosas estaban sus maletas, bajó a recuperar lo que le pertenecía, y en ese intertanto, le cerraron la puerta del bus donde quedaron sus documentos y billetera: “me robaron, quedé sin nada tirado en la calle sin saber cómo entrar a Chile”.

El lugar tiene reglas y se acatan, una de ellas es el horario de entrada y salida de los residentes. Fabio Sánchez sale a trabajar a las 8 de la mañana, después de tomar su desayuno, realiza comercio ambulante en la calle en comunas como Lampa y Colina, en las afueras de Santiago, principalmente porque, tal como él explica “si lo hago en Estación Central corro el riesgo de que los carabineros me quiten la mercancía y quedarme sin materia prima para vender”. Después de su jornada laboral regresa entre las cinco y siete de la tarde a la casa de acogida. La casa de acogida Padre Lavín y el consulado de Chile han sido de gran ayuda para Fabio Sánchez, por un lado la estabilidad y por la otra el apoyo para obtener nuevos documentos para que este joven colombiano pueda vivir legalmente en nuestro país.


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BREVES

Por Héctor San Martín

Desde hace ya varios años, Chile se ha transformado en un país atractivo para los inmigrantes provenientes de diferentes latitudes del mundo, los cuales vienen en busca de una nueva vida y un sostenimiento económico, sin embargo, muchas veces estos deseos se ven truncados por diferentes razones, teniendo que vivir una realidad que aqueja a gran parte de la sociedad chilena: la pobreza. Encuesta Casen

El año 2015, la encuesta CASEN arrojaba una población de 354.581 inmigrantes viviendo en nuestro país, donde el 25,2% vivía en condiciones de pobreza. Ya en el 2016, la encuesta arrojaría que la población inmigrante de Chile, ascendería a 465.319 habitantes, donde el 88,8% de estos, vendrían desde países de América Latina, donde peruanos, colombianos y argentinos marcan mayor presencia en el país, sin embargo, un 33% de esta población, estaría viviendo en situación de pobreza.

Desde el año 2006, el Ministerio de Desarrollo Social lleva a cabo la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (CASEN), la cual muestra diferentes cifras con respecto a temas sociales como la economía, el crecimiento del país, la pobreza, etc. Asimismo, uno de los ítems que desarrolla es el de la población inmigrante en el país. En la primera encuesta, la población inmigrantes llegaba a 154.643 personas, cifra muy diferente a la realidad de hoy.

Este año, no hay cifras exactas, debido a que la encuesta oficial del Ministerio de Desarrollo Social, aún no ha sido publicada (normalmente, sale a finales de año). Sin embargo, las estadísticas estimadas, arrojan que la población inmigrante en Chile sería de alrededor de 600.000 habitantes, cifra que vendría incluida gracias al último censo de este año. No obstante, la Fundación Techo, estima que hay un 28% de la población

migrante que vive en situación de pobreza. El capellán de la Fundación Techo, Juan Cristóbal Beitía, declaró en La Tercera, que algunas de las razones de la pobreza y hacinamiento de los inmigrantes son debido al engaño y los precios abusivos de los arriendos, “se aprovechan del temor de los extranjeros o de que estos no entienden qué se les pide”. El futuro A la espera de los resultados del Censo y de la encuesta CASEN, el Gobierno ya firmó el proyecto para una nueva Ley de Migración, la cual buscará la creación de un Registro Nacional de Extranjeros, además de un catálogo de prohibición de ingresos, que suman a la visa de turista, las de visitante, residencia temporal y de zona fronteriza. El proyecto se encuentra en el Congreso para su discusión, para así poder mejorar la vida de miles de inmigrantes que llegan al país, buscando una nueva vida.



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