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LA INCLUSIÓN Y EL

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SISTEMA INMUNE

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Bienestar

LA INCLUSIÓN Y EL DESARROLLO EMOCIONAL

La inclusión y el desarrollo emocional son conceptos que en la actualidad tienen un gran auge, sin embargo, no es tan usual o común verlos en conjunto. Desde el punto de vista de la psicología social y comunitaria, la inclusión busca que todos los individuos y grupos sociales, especialmente aquellos en riesgo de exclusión, puedan tener la oportunidad de formar parte de la sociedad sin distinción alguna. Por otro lado, el desarrollo emocional se refiere al proceso por el cual se construye la identidad, el autoestima, la confianza en sí mismo y en el entorno.

El desarrollo emocional sano de una persona está relacionado directamente con sus vivencias, experiencias y su entorno, por lo que la inclusión es una parte clave en este proceso, recordando que lo contrario de la inclusión es la exclusión, lo que dificulta o imposibilita la participación en la sociedad. A pesar de que el crecimiento emocional de una persona tiene un componente de desarrollo individual tanto de su autoconciencia, autorregulación y empatía, componentes como la regulación social y motivación se construye en su gran mayoría de las experiencias con el entorno. Es por esto que es tan necesario sensibilizar en los sectores educativos, sociales y laborales, entendiendo que la inclusión no es una opción sino una responsabilidad y un derecho. La inclusión es un concepto que va más allá de nuestra creencias y valores; por ejemplo, inclusión es facilitar herramientas a jóvenes en zonas remotas para poder asistir a la escuela; inclusión es tomar en cuenta la diversidad dentro de un aula de clases e ir alternando las metodologías de enseñanza; inclusión es respetar, inclusión es eliminar las barreras que impiden el desenvolvimiento de las personas y es apreciar a todos los miembros valiosos de la comunidad, brindando un trato justo y equitativo.

Recordemos que nuestras acciones pueden ayudar a que tengamos una sociedad más inclusiva y tolerante, lo que impulsa desde temprana edad a la formación de seres humanos con un desarrollo emocional más sano y fuerte.

Por la Lic. Laura Colón Psicóloga

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