Barrero de la Rosa, José Luis “José Luis Barrero”

toros de Juan Salas, con Antonio Ortega “Orteguita” y José Mata, que resultó cogido. Oreja y vuelta fue el resultado artístico de su actuación, pero pese a tan buenos comienzos, su estrella comenzó a perder brillo, por lo que sus contratos cada vez fueron espaciándose. En 1966 toreó 8 corridas, 5 en 1967, y 8 en 1968, siendo esta temporada la ultima que estuvo en los ruedos como matador de toros, porque decepcionado, decidió cortarse la coleta en la plaza de Salamanca, el 6 de octubre de 1966, alternando con El Viti y Víctor Manuel Martín, en corrida concurso de ganaderías. José Luis Barrero le cortó una oreja al toro de Antonio Pérez-Tabernero, que fue precisamente el ganador del trofeo. Estuvo apartado del toreo hasta la temporada de 1971 que volvió a los ruedos como banderillero, haciendo el debut como tal en la cuadrilla de su paisano Julio Robles, para pasar en 1972 a la de Pedro Gutiérrez Moya “El Niño de la Capea”, con el que permaneció hasta 1985. Desde entonces toreó con José Luis Ramos, simultaneando su actividad profesional con la docente en la Escuela de Tauromaquia salmantina. Su hijo, José Luis Barrero de la Rosa continuó los pasos de su padre y debutó en público en Alba de Tormes (Salamanca), el 22 de octubre de 1989 alternado con Boni, Manuel Gimeno, Alberto Encinas y Andrés Sánchez en la lidia de reses de la ganadería de Tomás García. En 1992 continuaba en la brecha y sumó 28 actuaciones, sin que posteriormente se supiera de sus progresos. José Luis Barrero vivió una brillantísima etapa de banderillero en la que destacó muy pronto desde que cambió el oro por la plata. En total toreó 42 corridas de toros.

bArrero de lA rosA, José luis

“JOSÉ LUIS BARRERO”

Matador de toros y banderillero nacido en Salamanca, el 23 de febrero de 1976, hijo del matador de toros, y posteriormente banderillero, José Luis Barrero Alfonso que en sus comienzo fue conocido con el sobrenombre de “El Chato de las Peñuelas”. Su hijo, siguiendo los pasos paternos, quiso ser torero, y para ello, se inscribió en la Escuela Taurina de Salamanca, de la que su padre era profesor por ese tiempo. De ella salió para debutar en público el 22 de octubre de 1989 en Alba de Tormes (Salamanca), en una clase práctica vestido de corto, con novillos de José Tomás García y García, a eral por coleta, alternando con Bonifacio Martín “Boni”, Manolo Gimeno, Alberto Encinas y Andrés Sánchez. Un año después vis-

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tió por primera vez el terno de luces en público, el 14 de julio de 1990, en la plaza de Salamanca, con Álvaro de la Calle, Miguel Ángel Sánchez y Carlos Valencia, con erales de José Tomas García y García. Dos temporadas permaneció toreando novilladas sin picadores, hasta que en 1994 debutó con ellos el 6 de junio en Ledesma, de corinto y oro, en un festejo concurso de ganaderías, con Javier Olmedo, Alvaro de la Calle, Porritas de Guijuelo, Avelino Guerra y Miguel Ángel Sánchez. Tanto Avelino Guerra como Miguel Ángel Sánchez también debutaron con picadores ese día. José Luis Barrero, que estoqueó un novillo de “Los Agustinez”, fue el triunfador absoluto del festejo al cortar las dos orejas d su oponente. Cuatro años después, se presentó ante la afición madrileña de Las Ventas, de azul eléctrico y oro, el 31 de julio de 1998, en la 3ª novillada nocturna del I Certamen de Vía Digital, con novillos de Fernando Peña, y José Montes y Juan Antonio Alcoba “Macareno” como compañeros de terna. José Luis Barrero dio una vuelta al ruedo tras su faena con el novillo “Baracorta”, negro, número 69 y 453 kilos que le tocó en suerte en su debut. En el otro fue aplaudido. El triunfo le sirvió para repetir paseíllo en la misma plaza el domingo, 6 de septiembre con novillos de Diego Romero, alternando con Francisco Javier Corpas y José Mora, ambos debutantes en Madrid. No tuvo tanta suerte en esta ocasión y vio como se silenciaban sus dos faenas, lo que supuso un fuerte contratiempo en su carrera, porque si bien es verdad que en los primeros años de su carrera superaba la veintena de corridas por temporada, poco a poco fueron decreciendo en número sus contratos, y aunque en 1999 fue incluido en la feria de Salamanca en la 1ª corrida de la feria, con Javier Castaño y Antonio Lerma con novillos de los Herederos de Manuel Santos Alcalde, que debutaba en “La Glorieta”, como los tres espadas como matadores de novillos con picadores. La critica que hizo el diario “El País” de José Luis Barrero fue esta: “Lo demás no pasó de discreto. Barrero banderilleó a sus dos novillos reuniendo bien los palos por lo general, aunque no siempre cuadrando en la cara. Corrigió demasiado sus posiciones al final de cada pase en el primero, padeció algunos enganchones y su voluntad y algún muletazo lucido quedaron diluidos en un conjunto inexpresivo. En el cuarto comenzó muleteando por bajo, echándole sabor al asunto, pero ya erguido abusó del pico y de rematar los pases p’allá. Entre eso y que comenzó a chispear, se originó un cierto descontrol que no fue óbice para que el paisanaje le otorgara una oreja”. Ante la situación crítica de su carrera, decidió tomar la alternativa el 19 de agosto de 2000, de blanco y oro, en Guijuelo (Salamanca), con 5 toros de Martínez Elizondo y 1 de Criado