Diario de Viaje
Hola soy Alonso Quijano,conocido también como Don Quijote de la Mancha, por mis aventuras en las que deformaba la realidad acomodándola a mis fantasías caballerescas. Ahora os voy a contar una de mis miles aventuras de cuando estaba muy loco: Era un martes 13 de noviembre de 1547 cuando salí en busca de mi gran aventura nunca contada. Me fui de casa por la mañana, cogí mi caballo y acompañado de Sancho Panza cabalgamos hacia el Norte. Estuvimos unas dos o tres horas y nos perdimos, pero encontramos un lugar asombroso. Estaba lleno de animales, plantas y cualquier tipo de naturaleza. Era un bosque muy grande, lleno de liebres corriendo por la naturaleza, también había una granja muy grande, llena de gallinas y plantas medicinales. Entramos en la granja y nos abrió una señora muy mayor, que nos invitó a pasar la noche. A las cinco de la madrugada me desperté por el frío y me fuí a la chimenea para calentarme y de repente vino la señora mayor y me contó una historia sobre que en una cueva cerca de Ciudad Real se encontraba un tesoro muy grande que estaba protegido por una tribu ibérica que había sobrevivido de los romanos por estar escondidos en aquella cueva. La historia yo me la creí y por eso a la mañana siguiente me fuí con mi escudero para encontrar la cueva. Tardé trece días en encontrar la cueva, pero al final la encontré y me enseñó muchísimo sobre los íberios… Pero las cosas que ví hay me las guardo para mí porque aquello fue sobrenatural, lo bueno de esta historia es que conseguí el tesoro y me lo gasté en una casa más grande la del Duque de Alba y también conseguí dinero para poder publicar mi propio libro de caballerías con lo que había soñado durante muchos años.