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De la COVID-19 y otros pandemonios a propósito de la aviación 2022
POR: C.T.A. CARLOS A. ACOSTA
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uando se reactivó la aviación por allá en septiembre del 2020, después de casi cuatro meses de suspensión de vuelos casi en su totalidad, muchos pensamos que era el peor escenario de la aviación y que a la fecha lo habíamos superado por lo menos en una gran parte.
La industria ha venido reaccionando a todos aquellos fenómenos, tanto sociales como laborales y técnicos, rezago de las medidas tomadas para palear las consecuencias de la covid-19 y, aunque se esperaba una reactivación armoniosa hemos visto un fenómeno algo contrario a esas pretensiones.
La primera disrupción encontrada una vez se reactivó la industria desde el punto de vista de la aviación comercial regular de pasajeros fue el incremento de los incidentes aéreos debido a la baja de la conciencia situacional tanto de tripulantes como de controladores aéreos. Otro elemento que ha venido en aumento es la aparición y consecuente traumatismo a la operación con los pasajeros problemáticos que cuestionan las medidas de bioseguridad y que buscan a cualquier costo no cumplirlas.
Pero un hecho relevantemente traumático para la operación aérea ha sido la reincorporación de los pilotos a su actividad laboral después de la inactividad obligada por la covid-19. Muchos de ellos han tenido que aceptar condiciones desventajosas en su reingreso laboral, la mitad del salario que venían percibiendo, licencias laborales no pagadas, entre otros, y a los que peor les fue son los que tuvieron que afrontar el despido, la desvinculación de su fuente de ingresos o su trabajo. Traemos en este articulo tres ejemplos de la nueva situación de las tripulaciones del mundo.
Una es la falta de pilotos para poder operar un sinnúmero de aeronaves que deben permanecer en tierra debido a que no se cuenta con la suficiente cantidad de pilotos para poder volar esas aeronaves. Otro escenario poco amigable en este proceso de reactivación total de la aviación mundial es el de la fatiga que se interconecta con el anteriormente descrito: pilotos volando al límite del agotamiento precisamente porque tienen que suplir a los pilotos que fueron desvinculados y a los que están en las licencias no remuneradas, por ejemplo. Por último, le echaremos una muy breve mirada a la situación de Rusia, donde la autoridad de aviación de ese país no quiere certificar a los pilotos que quedaron cesantes luego de las decisiones de ese estado después de haber entrabado la confrontación bélica con Ucrania. Muchos pilotos quedaron cesantes debido a las sanciones propiciadas por otros estados al estado ruso y esta negativa ha ocasionado que los pilotos desempleados no se puedan ubicar en otros países que sí requieren de sus servicios. En este orden de ideas toda esta problemática en el sector de la aviación desencadena un efecto dominó.
“La escasez de pilotos regionales que afecta a la industria de las aerolíneas, American Airlines (A1G) (AAL) ha impulsado la difícil decisión de finalizar el servicio en Islip e Ithaca, Nueva York, y Toledo, Ohio, a partir del 7 de septiembre”, informó la aerolínea en un comunicado enviado por correo electrónico a AeroTime. “Estamos muy agradecidos por la atención y el servicio que los miembros de nuestro equipo brindaron a nuestros clientes en Islip, Ithaca y Toledo, y estamos trabajando estrechamente con ellos durante este tiempo. Nos comunicaremos de manera proactiva con los clientes programados para viajar después de esta fecha para ofrecer arreglos alternativos”, dijo la aerolínea con sede en Fort Worth. “Hemos notado que tenemos 100 aviones regionales en tierra que queremos volar, pero no podemos debido a la falta de pilotos regionales”, agregó la aerolínea.
Sin embargo, Estados Unidos no es el único país afectado por este fenómeno. En Europa los problemas de viaje continúan, EasyJet, por ejemplo, se vio obligada a recortar los horarios de vuelo del verano de 2022 debido a retrasos en el ATC y escasez de personal en el aeropuerto. “A medida que la demanda de viajes se acerca a los niveles de 2019, las aerolíneas de todo el mundo se apresuran a adquirir pilotos tras la ola de jubilaciones anticipadas provocada por la pandemia. Según un informe publicado por The Dallas Morning News, la consultora de aviación Oliver Wyman pronostica una escasez global de alrededor de 19000 pilotos para fines de 2022. La firma estima que la escasez aumentará a un déficit de alrededor de 60000 pilotos en 2029.
“Al igual que muchos operadores de red, hemos reducido nuestros vuelos regionales en los últimos meses en respuesta a la escasez de pilotos regionales”, continuó la declaración. De otra parte, los pilotos de Delta Airlines han anunciado posibles interrupciones en el servicio debido a movilizaciones de las tripulaciones de cabina de mando, los pilotos, liderados por los diferentes sindicatos de las empresas afectadas, exigiendo mejores salarios y condiciones de trabajo. La protesta tuvo lugar el pasado 30 de junio de 2022, solo unos días antes del Día de la Independencia (4 de julio), una concurrida fiesta nacional en los Estados Unidos, que se caracteriza por el incremento de vuelos nacionales. La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (ALPA), que representa a más de 65000 tripulantes de vuelo en EU y Canadá, ha estimado que sus casi 14000 miembros en EU actualmente trabajan más horas a pesar de que las aerolíneas cancelaron miles de vuelos de pasajeros debido a la escasez de personal, indicó una fuente que prefirió mantenerse en el anonimato. Los objetivos de la protesta son exigir mejoras en las políticas de carga de trabajo, salario, jubilación y protección laboral, dijo ALPA en un comunicado fechado el 27 de junio de 2022.
El sindicato también destacó que los niveles salariales de las tripulaciones de vuelo no han cambiado desde la pandemia de covid-19 y menos aún después de haberse superado ella, asimismo, denuncian una sobrecarga de trabajo que ha elevado drásticamente los niveles de fatiga y de estrés de los pilotos afectando la seguridad operacional. Por último, la negativa de la autoridad de aviación rusa respecto a la certificación de sus pilotos para que estos puedan desempeñarse en el exterior luego de haber sido despedidos de las empresas locales ha aumentado la escasez de estos profesionales en el contexto mundial generando un cuello de botella en la industria de la aviación mundial. La Agencia Federal de Transporte Aéreo, también conocida como Rosaviatsia, ha realizado medidas tendientes a evitar que los pilotos desempleados obtengan trabajo en compañías aéreas extranjeras, según los medios rusos.
Es así como después que Rusia lanzó una acción armada en contra de Ucrania, la mayoría de los vuelos internacionales se suspendieron en todo el territorio ruso debido al riesgo que significaba la incautación de los aviones alquilados y las reacciones de los diferentes estados por la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Cuando las compañías aéreas locales dejaron de volar internacionalmente, cientos de pilotos en Rusia se quedaron sin trabajo y muchos se vieron obligados a buscar empleo en el extranjero. Sin embargo, la Agencia Federal de Transporte Aéreo parece estar interviniendo de manera decisiva en el éxodo de sus pilotos al negarse a verificar sus licencias como parte del procedimiento estándar cuando recibe solicitudes de compañías aéreas extranjeras, informó el diario comercial Kommersant el 28 de junio de 2022, citando fuentes de la industria no reveladas.
Siguiendo las reglas estándar, un posible empleador de una nueva aerolínea enviará una solicitud de verificación a la Agencia Federal de Transporte Aéreo solicitando a la autoridad de aviación rusa que proporcione los datos necesarios, incluida la fecha de emisión de la licencia de piloto y su relevancia, aseguró el medio de comunicación en su reporte.
Teniendo en cuenta el panorama de los pilotos para el próximo semestre del 2022, veremos la apertura de fronteras para recibir pilotos de otras latitudes en aquellos estados donde se presentan situaciones coyunturales como las descritas en este artículo, y con el éxodo de estos profesionales veremos también la reactivación a muy alta escala de la aviación postpandemia. De no ser así, el panorama será más sombrío no solo por mantener las aeronaves en tierra, o sea, a pérdida, sino que las tripulaciones que se mantengan volando lo harán a desgano y con altas cargas laborales que le generarán a su vez estrés y fatiga lo que puede incrementar también los índices de siniestralidad e incidentalidad en la aviación mundial, ya vimos como hace menos de dos meses los dos pilotos de un Airbus 320 se quedaron dormidos al realizar un vuelo con muy altas cargas de fatiga. El vuelo de ITA Airways que había despegado de Nueva York con destino Roma el 30 de abril y que, durante más de 10 minutos, mientras sobrevolaba espacio aéreo francés, no tuvo contacto con los controladores de vuelo; de ahí al accidente un paso.
¿Será que aún estamos a tiempo antes de que tengamos que lamentar un accidente tan o más grave que el de Los Rodeos, en Tenerife, en marzo de 1977?