COMERCIO EXTERIOR ¡NUEVA SECCIÓN! Reunión China - Mercosur
CHINA - MERCOSUR,
socios para el desarrollo
Por el Dr. Ariel Martín Rolando
China ¿es un socio para el desarrollo del Mercosur en términos de expansión de corrientes comerciales, pero no solo en productos primarios, sino también atendiendo las tensiones internas que se generan por la competitividad de sus exportaciones industriales? El retorno al diálogo como bloque, luego de casi 15 años de silencio, invita al entendimiento de la partes y a repensar el juego de las negociaciones, para darle continuidad y construir una agenda positiva, con el objetivo de promover la cooperación, identificando áreas de mutuo interés y que promuevan el comercio y las inversiones respectivas. Con esta aseveración estaríamos adelantando anticipadamente nuestra respuesta al interrogante inicial. Uruguay ha barajado, durante su anterior administración pro tempore del Mercosur, la posibilidad de buscar un acuerdo de libre comercio bilateral con China, pero lo cierto es que no se dieron pasos concretos en ese sentido, ante la reticencia del Mercosur. En aquella declaración se señalaba que las partes intercambiarían información sobre su situación económica y evaluarían el comercio de bienes y el flujo de inversiones. Se comprometieron a seguir compartiendo información sobre normas y a dar pasos para facilitar el comercio. Pactaron también que se intercambiarían datos sobre las conversaciones comerciales que ambas partes llevan adelante con otros actores. En los últimos quince años, como sabemos, la presencia China en América del Sur ha crecido notablemente. De una posición marginal en la que se encontraba en el año 2000, pasó a colocarse como el principal destino de las exportaciones brasileñas y, si se toma en cuenta a la Unión Europea en su con14
junto, es el segundo proveedor de importaciones tanto para la Argentina como para Brasil; lógicamente inserto en un fenómeno global de crecimiento de la influencia de los intercambios comerciales con el continente asiático a largo plazo, asociado a su industrialización y demanda de bienes primarios. En lo referente a las relaciones entre el Mercosur y China, parte del debate académico de los últimos años estuvo centrado en los impactos, tanto positivos como negativos, derivados de la profundización de las relaciones comerciales y de inversión entre los dos actores. Muchos académicos demostraron que gran parte de la reprimarización de las exportaciones del Mercosur tiene que ver con la voracidad con la cual China demanda los productos primarios exportados competitivamente por la región sudamericana, lo que en definitiva, ha permitido sostener las elevadas tasas de crecimiento económico del país asiático, pero también el buen desempeño económico de América Latina en los últimos años. Es inteligente saber identificar algunos cambios en lo que tiene que ver con las oportunidades comerciales con Asia en general y con China en particular, donde el nuevo patrón de consumo es a expensas de una nueva clase media que ha permitido vislumbrar nuevas corrientes comerciales en bienes agrícolas o agroindustriales con mayor proceso, o en otros bienes no tradicionales de origen industrial.