Luz y Tinta Nº 143

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Núm. 143 - Mayo 2024

Cambio de ciclo

Recuerdos, de mis tiempos del colegio –o tempora...– unos versos cuyo autor se ha perdido en los meandros de la memoria, pero que resumen perfectamente lo que es el paso de los días,en el suceder de las estaciones a través del trabajo en el campo: “Es tiempo de sementera/ y en los surcos de la arada/ se escucha ya la tonada/ que ayer se cantó en la era”. Los que vivimos en las ciudades y no estamos sujetos a los ciclos del campo hoy apreciamos el cambio de estación por los anuncios de la televisión y por las informaciones del telediario que puntualmente nos habla del “tiempo” y nos informa del que hace, del que ha hecho y del que hará. Los campesinos de que hablaban esos versos que recordaba antes se regían por las señales del cielo, el paso de las nubes y otros signos que ellos interpretaban de manera certera y acorde con las necesidades de sus cultivos. Sea como fuere, y no entraré a valorar ni las inclemencias del cambio climático ni las variaciones estacionales que nos anuncian los medios y que aceptamos como propias, estamos ante un cambio de ciclo: la primavera se anuncia con todo desparpajo a poco que uno se asome a la ventana y vea los brotes delos árboles del parque. Otro tanto ocurre en cuanto se deja el centro de la ciudad y se sumerge uno en algún sendero que se bifurca borgianamente en busca de destinos pererennes. Llegados a este punto apetece acogerse al tópico. “la primavera ha venido y nadie sabe cómo ha sido”. Y sin embargo, todos sabemos cómo ha sido posible: sencillamente porque antes hemos vivido el invierno y porque estamos deseando desperezarnos del todo y sumergirnos de lleno en el verano.

Cambio de ciclo, sí. Igual que periódicamente nos cambiamos de ropa; igualque periódicamente acudimos algunos a la peluquería e igual que las cigüeñas de nuestros campanarios y las golondrinas de nuestros aleros hacen sus recorridos de ida y vuelta, las estaciones se suceden en orden, con mayor o menor puntualidad, pero en orden, exigiendo que nuestros cuerpos se acomoden a los cambios de temperatura que cada una de ellas trae y a las exigencias ambientales que cada una de ellas promueve.

Cambio de ciclo, efectivamente. Lo único que no cambia de un ciclo a otro, de una estación a otra, es Luz y Tinta. Aquí seguimos, mes a mes, las más de las veces puntuales, sorteando las dificultades personales y entregándonos, mes a mes, en primavera y en verano, en otoño y en invierno, a esta labor hermosa de combinar imágenes y palabras, tinta y luz, buscando comunicar lo más cercano a la belleza que n se somete alos cambios de ciclo estacional.

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Fracisco Trinidad

PROMOTOR y DIRECTOR DE FOTOGRAFÍA: José Luis Cuendia, «Guendy»

Lola González

Reservados todos los derechos de reproducción total o parcial tanto del texto como de las imágenes. Las imágenes están protegidas por las leyes de copyright internacionales. Para cualquier consulta o sugerencia contacte con nuestro correo electrónico

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DIRECCIÓN, DISEÑO Y MAQUETACIÓN: Francisco Trinidad DIRECTORA DE COMUNICACIÓN:
info@moldeandolaluz.com Número 143 Mayo 2024 Fotografía de portada: Duong Dinh Cambio de ciclo ......................... 2 Relatos de verano. Francisco Trinidad ...... 5 El huevo. Gloria Soriano .................. 9 IV. Llegó la hora de partir. Juan Depunto ... 11 La mala memoria. Laudelino Vázquez ..... 19 El pasar del tiempo. Monchu Calvo ....... 23 Arturo Vigil ........................... 27 Duong Dinh .......................... 59 Aljohara Jeje .......................... 82 Daniel Kordan ........................ 104 Anna Biret ........................... 138 Laura Murphy ........................ 157 Linda Hollinger ...................... 180 Evgeny Popov ........................ 201 Eddie Leach ......................... 228 Pep Bonet .......................... 281
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Relatos de verano Francisco Trinidad

Había escrito aquel relato durante dos semanas, una o dos páginas cada tarde, según iban saliendo, hasta completar veinticuatro páginas a través de las cuales fluía una historia estructurada en seis episodios que habían de constituir otras tantas entregas.

Cuando tuvo el relato completo, lo corrigió morosamente, deteniéndose en cada palabra, acariciando cada frase, sumergiéndose en las posibilidades de la sintaxis y resaltando significados y contrastes, reflejos y veladuras. Una vez satisfecho del conjunto, lo entregó en el periódico que se lo había encargado y convino su publicación en la primera semana de septiembre, de lunes a sábado, un capítulo cada día.

Se le planteaba sin embargo el problema de que en el pueblo donde veraneaba no se recibía aquel diario local, cosa que hoy nos parece imposible y muy lejana en el tiempo, pero en aquellos años estábamos muy lejos de internet, de los móviles y de toda la tecnología que hoy nos domina y dominamos.

Cuando lo supo su amigo Fabián, compañero de tertulias literarias y cómplice de algunas francachelas y juergas que les habían llevado muchas a veces a cruzar la bocana del amanecer entre risas y versos, se ofreció a enviarle diariamente un fax con el capítulo correspondiente.

–Te lo cobraré en güisqui –le dijo mientras apuraba un trago generoso y le guiñaba un ojo, divertido.

Así convenido, no le costó encontrar un estanco donde todos los días, a primera hora, esperaba el envío de su amigo Fabián que aprovechaba la carátula del fax para hacerle algún comentario, el primer día irónico y el resto de los días confirmando el interés de aquella historia. “Esto promete, se nota que tienes experiencia en carretera”, había escrito subrayando el planteamiento del primer capítulo, en el que un camionero recogía a una jovencita, a la salida de un pueblo, y, cómplice a la fuerza,, acabó embarcándose con ella en una fuga que, capítulo a capítulo, les llevó de hoteles a pensiones, siempre hacia el Sur, de Gijón a Cádiz, aprovechando caminos secundarios y pespunteando el recorrido del camión con las exigencias del transporte y las necesidades de la huida.

Muy hábil en su planteamiento, el narrador, a base de diálogos aparentemente triviales, iba trazando una historia subterránea de desesperanza, angustia y sufrimiento que unía a los dos personajes frente a un destino turbio. Capítulo a capítulo, pueblo a pueblo, mientras huían sin sentido (nunca supieron realmente si había perseguidores o sólo sombras tras ellos), el narrador fue matizando una relación que se estrechaba por momentos y que hacía presentir, entrega tras entrega, que su huida hacia delante era en realidad un encuentro inevitables, una posibilidad de que dos estrellas errantes se encontrasen en un cúmulo abierto.

El viernes la narración concluía cuando el camionero y la joven, tras mirarse hondamente al borde de un beso, iniciaban lo que el lector adivinaba como última etapa. Fabián subraya su interés escuetamente: “Espero impaciente el desenlace”.

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Pero el sábado el fax se hizo esperar más de lo acostumbrado. Ya habían sonado las señales de la diez en la radio que cascabeleaba en una esquina cuando comenzó a salir el último envío. “Para usted”, le dijo la chica del estanco, tendiéndole únicamente una carátula en la que su amigo había escrito una sola frase, escueta y lapidaria: “Eres un canalla”.

No entendió nada. Se le nublaron los ojos, comenzó a dolerle la cabeza, sumido en un vaivén de posibilidades contradictorias y de enigmáticos laberintos sin salida. ¿Qué era realmente lo que había le había molestado a Fabián? ¿Aquel tatuaje en forma de mariposa que le había colocado a la protagonista en una nalga en recuerdo del que Fabián le había comentado que su esposa tenía en un omoplato? No podía ser aquel inocente guiño. Nadie hubiera pensado que aquella complicidad ingenua pudiera encerrar un doble sentido. ¿Acaso el clima de la última escena? La asfixiante soledad de los protagonistas no era motivo suficiente para que nadie llamase canalla a un verdadero amigo. ¿O se habría colado una errata, incluso un párrafo entero de mano ajena, que a Fabián le hubiese impulsado a pensar en una traición jamás imaginada?

De nuevo en Madrid, después de las vacaciones, tras haber desechado todas las hipótesis y buscando respuesta a todas sus preguntas, fue una tarde a visitar a su amigo y se encontró con un puñetazo rotundo y despiadado. Nunca supo la razón y nunca hubiera imaginado que la lámina que en su cuento había colocado, a modo de correlato irónico, sobre el sofá en que el camionero y la joven consumaban su amor en una fonda de mala muerte; nunca hubiera sospechado, en fin, ni sabría jamás que aquella reproducción de “El sueño del caballero”, de Rafael, se correspondía exactamente con la litografía que Fabián había comprado un par de años antes en la National Gallery, de Londres, y había colocado en su propio dormitorio.

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“El sueño del caballero”, de Rafel, Galaería Británica, Londres
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El huevo

El caos, el vacío de un bostezo, el origen de todo.

HESIODO

Apoyada en el cabecero reparo en los detalles. Aquí todo está en su sitio, no como en casa: montañas de ropa limpia sobre la cama de invitados, en una silla prendas sin lavar, cajas de las compras por internet para llevar al contenedor. La habitación del hotel es una tierra de nadie pulcra y cautivadora. Regulo las luces y dejo una iluminación relajante, insuficiente para leer. Los libros y yo dormitamos, los días pasan. Este escenario es para otra manera de vivir. En casa hago pollo a la petitoria, escribo, investigo senderos; actividades que me mantienen por encima de las pelusas flotantes del pasillo, los cacharros sucios del fregadero, el moho de las juntas de silicona. En el hotel todo me place pero no puedo centrarme en la poesía. A ratos escribo notas sobre el viaje alejadas de lo literario.

Al volver a casa, el caos me resulta ofensivo. Hay cucarachas que corren a ocultarse entre los cartones. Las elimino, desinfecto el suelo, pongo lavadoras. He descubierto que las líneas rectas ordenan y llaman al orden. Cuadro las toallas, enfilo los cojines, alineo los lápices, el bloc en un ángulo, la pantalla y el teclado paralelos. Organizo las fotos, las notas del viaje. El estudio parece más luminoso.

Los días transcurren sin inspiración. La mota de polvo en el mueble y la mancha en el suelo me distraen. Limpio y ordeno, ordeno y limpio, y me detengo para contemplar el brillo de las cosas. Continuo así hasta el bostezo. Entonces, de un manotazo, tiro lápices y cuadernos y me pongo a escribir. Los papeles vuelven a amontonarse sobre la mesa, las hormigas se adueñan de la cocina, la basura crece.

Cuando por fin doy por concluido el poemario, extiendo triunfal los brazos y los dejo caer sobre el tablero. Un huevo frito salta del plato y se estrella en el monitor. El texto chorrea lágrimas de recién nacido.

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El Papa Luna en su castillo

IV. Llegó la hora de partir 1

Juan Depunto

Llegó la hora de partir y de decirnos el adiós. Tradicional escocesa, Robert Burns, s. XVIII

El cáncer es una enfermedad sobre la que todavía cuesta hablar abiertamente…, hay muchas personas que evitan llamarla por su nombre. El problema está en que “nos enteramos más de los casos de personas que mueren por esta enfermedad que de los que sobreviven. Si se conociera que mucha gente se cura, a lo mejor se desmitificaba la palabra cáncer…”

María Ramírez, psicóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer

Cáncer

Acababas de estrenar nueva pareja a la que, por tu ya avanzada edad, tu historia sentimental y, sobre todo, por las características de ella, consideraste tu última oportunidad.

Al mes de iniciar la relación, te acompañó a la extracción de sangre para analítica de control de la próstata tras dos años de no habértela podido hacer por la pandemia reciente y las dificultades subsiguientes que retrasaron diagnósticos

1 . Se puede ver en el n.º 75 de Luz y Tinta, página 46, la nota “Cambio de rumbo” acerca de la estructura general de la obra “El tiempo pasa”, de la que forma parte este capítulo. Publicada la 1ª parte, “Cantando bajo la lluvia”, hemos seguido con capítulos de su segunda parte, “Toda una vida”, de la 3ª parte “Qué tiempo tan feliz” y ahora de la 4ª parte “Llegó la hora de partir”. Enlace: https://issuu com/guendy/docs/luzytinta 75

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Bolnuevo de Mazarrón

y tratamientos hasta límites increíbles tan solo dos años antes. La pandemia acabó de un zarpazo con esa sanidad modelo y envidia europea de la que tan ufanos presumíamos hipervalorándola.

A los pocos días vino el resultado: subida destacada del marcador tumoral de la próstata. Buscaste a tu urólogo de confianza, al que en su día promocionaste por sus méritos, y su dictamen fue tan crudo como el del pronóstico que tu neumólogo te hizo hace 41 años y gracias al cual dejaste de fumar: tienes cáncer y hay que biopsiar para confirmarlo.

Tú, que estabas un poco horrorizado con las biopsias prostáticas desde que asististe a la que le hicieron a tu amigo y colega, no te la hubieras dejado hacer de no haber sido tan contundente tu urólogo. Así que tras el palo del análisis y el de su interpretación por el experto lo asumiste como inevitable, junto con tu reciente compañera de vida, que mejor no pudo reaccionar. Cualquiera en su lugar hubiera salido despavorida y no sin razón. Al fin y al cabo, no llevabais ni tres meses juntos..., pero asumió tu mala pata como si fuera ya una curtida esposa que está contigo en las alegrías y las penas. Nunca se lo agradecerás bastante. Y eso solo fue la punta de lanza de lo que vendría después.

A Mg la conociste en una noche de vinos y canciones en casa de los amigos de la playa en la que te hospedabas. Tras la cena empezasteis con los cánticos y se presentó ella. Era vecina y estaba sola, se unió a la escolanía y pudiste escuchar su potente y grave voz, de mezzosoprano, con perfecta entonación. Vosotros estabais con la chuleta de las letras que recogen esos libritos de canciones populares, pero ella no las necesitaba, se las sabía todas de memoria...

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Tortosa

Pero volvamos a la historia que estábamos contando: lo que vino después de la indicación de biopsia fue buscar a la uróloga responsable de tumores y acordar con ella fecha para esa prueba. Estaba de acuerdo con su compañero, pero quiso precisar antes cómo se mostraba la próstata y su tumor mediante una resonancia magnética de alta resolución, y ver si había metástasis, para lo que entre otras pruebas te pidió una TAC y una gammagrafía ósea, ambas de cuerpo entero.

Se realizó la resonancia con los típicos y desagradables “martillazos” metálicos que produce el aparato mientras hace su función, que por muchos auriculares con música ambiental que te ponen, no dejan de oírse, sólo se amortiguan un poco. Sería deseable que se acoplara a la máquina el mecanismo antirruidos que tienen algunos automóviles de muy alta gama, consistente en un emisor de ondas de sonido inversas a las que produce el motor y los neumáticos en su rodadura, o sea negativas respecto a las de los ruidos emitidos, lo que los neutraliza totalmente. Pensando en esta aplicación se te pasó el tiempo de la media hora que dura la prueba.

Otro día te tocó la TAC y la gammagrafía, que te facilitó enormemente Is, la compañera de tu amigo R. En ésta te dieron el resultado sobre la marcha: sin metástasis, tras lo que respirasteis tú y Mg hondo.

Tras la espera correspondiente de días con una cierta ansiedad, vino el resultado de la resonancia, que confirmaba y delimitaba el diagnóstico analítico: tumor de aspecto maligno de 2 cm. Preciso aparato este de la resonancia. Con su dato, tu uróloga te dio fecha para la biopsia, temida por el lugar afectado y por los múltiples pinchazos que conlleva.

En tu caso, los pinchazos fueron algo más de una docena. Se hacen a través del ano, introduciendo un corto pero grueso tubo cuyo extremo enfoca el lugar donde propulsa la próstata. A través de ese tubo se pasa la aguja de punción biopsia que tras traspasar la pared del intestino recto llega a la próstata. No es que sea muy doloroso, pero claro, se siente lo que es un pinchazo y que, por serlo en tan delicada parte, encoje el alma.

Luego, la “convalecencia” de la biopsia apenas molesta, sangra un poco (en algunos casos puede ser mucho, lo que supone una urgencia que puede requerir

Acueducto romano d Tarragona

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ingreso hospitalario). Lo peor es la espera ansiosa del resultado, pues, aunque ya sabemos de qué estamos hablando, hay hasta una decena de grados y subgrados de malignidad y en función de esos grados se realiza un tipo u otro de tratamiento y es distinta la supervivencia.

A los 15 días te citaron para recoger los resultados: carcinoma grado V, o sea, intermedio. Tú, como siempre, en el medio de todos los resultados, sin destacar ni por arriba ni por abajo. Se te vino el mundo encima, por el diagnóstico y, sobre todo, por tu pareja a la que sin querer habías involucrado en esta desagradable faceta de tu mala salud.

Pero bueno, te consoló la médica y tú mismo, que también lo eras, pensando que podía haber sido peor. Disponiendo ya de todas las pruebas, la uróloga B.C. te dio a elegir: cirugía o radioterapia. Elegiste la segunda, de lo que se extrañó tu uróloga diciéndote: ¡Pero si tú eres cirujano! Y le contestaste: ¡Por eso! Tú habías visto ese tipo de operaciones y sabías lo traumáticas que son, dejando además secuelas en la función sexual, por mucho cuidado que se tenga al extirpar la próstata. Por otro lado, la supervivencia a corto y largo plazo y en cuanto a metástasis, son exactamente iguales con ambas técnicas.

Pero no todo iba a ser llegar y topar. Estábamos en abril y antes de la radioterapia convenía disminuir el tamaño de la próstata hipertrófica, para evitar daños secundarios, lo que supuso un tratamiento hormonal adicional durante unos cuantos meses. Este tratamiento es también el que se emplea para tratar los tumores de elevado riesgo, con lo que ya de paso se está tratando el cáncer y no se le deja seguir creciendo. Pero claro, como no hay rosa sin espinas, el tratamiento hormonal tiene sus efectos secundarios: sudoraciones intempestivas y desaparición de la líbido, lo que en tu recién inaugurada relación sentimental te sentó como un tiro. Ambos, Mg y tú, lo afrontasteis con estoicismo, no quedaba otro remedio.

A propósito de la líbido, hay dos testosteronas: la buena (la hidroxitestosterona) para el sexo en general y la “mala” (la dihidrotestosterona, derivada de la anterior y 5 veces más potente) que influye sobre todo en el desarrollo de la

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Alicante

próstata y con ella del posible cáncer que pudiera contener. En nuestra cultura cristiana todo es doble, excepto Dios que es triple, aunque en el fondo es de una sola naturaleza (no vayamos a que nos empapele la neoInquisición...). Por eso los cristianos son más evolucionados que judíos y musulmanes que solo tienen un solo Dios, Yahvé (con múltiples profetas que comparten con los cristianos) y Alá (éste con solo 1 profeta). Así pues, tenemos todo doble: 2 ojos, 2 pulmones, 2 riñones, 2 brazos, 2 piernas, 2 ovarios, 2 testículos, 2 colesteroles (el bueno HDL y el malo LDL), 2 bilirrubinas (D e I) y 2 testosteronas como se dijo al principio del párrafo.

Volviendo a la situación que se describía, os dedicasteis a realizar vuestra recién inaugurada nueva vida como si no pasara nada. Y no lo pasaba, salvo las crisis de sofocos, similares a las de la menopausia en algunas mujeres, y la alteración de la sexualidad, que también toreasteis como mejor pudisteis. Subisteis al Ampurdán, recorristeis el delta del Ebro, parando en Tortosa y Tarragona, visitasteis Peñíscola, Valencia, Alicante, Benidorm, Bolnuevo de Mazarrón en Murcia y Sanlúcar de Barrameda; acudisteis a la reunión anual familiar que en este año fue en Málaga y paseasteis por el Estrecho de Gibraltar. Como si no hubiera ocurrido nada, que es lo mejor en estos casos.

A finales de noviembre comenzaste con la radioterapia. Aquí no hubo más molestia que el tener que aguantar la orina durante la media hora de la sesión, para separar los intestinos delgados del foco prostático donde se concentran las radiaciones y que éstas ataquen solamente al tumor. Son veinte sesiones interrumpidas los fines de semana y fiestas (Constitución, Inmaculada, Navidad, Año Nuevo).

Parecía que todo marchaba bien, pero en esas fiestas de Navidad y Reyes, mientras recibías la radioterapia (que baja las defensas, otro efecto secundario) terminaste contagiándote de un virus, el “sincitial respiratorio” (VSR), ¡qué cosa más mala! Se cebó en tus ya dañados pulmones por el tabaco y la contaminación y el mismísimo día de Reyes te reanimaron los del 061/112 y montaron en una UVI móvil camino del hospital donde te ingresaron; tuviste que interrumpir la radioterapia los primeros días de este ingreso. Finalmente superaste el episodio gracias a tus médicos y enfermeras, terminando las sesiones de radioterapia, algo incrementadas por las interrupciones.

Volviste a recuperar la vida normal (los análisis así lo decían), fueron desapareciendo los sofocos, volviste a recuperar la líbido y reanudaste con tu pareja los viajes con un par de interrupciones tras la feria de abril ese año por la Covid que cogisteis (leve por las 4 dosis de vacunas recibidas) y luego en el “Cavino de Santiago2” otra Covid más, igualmente leve.

Y ahora, con el cambio de año, queréis dar por terminado ese bienio de enfermedades tras la pandemia y cambiar de tercio, siguiendo con las oportunidades que nos da la vida, recomendando a todos los lectores de este episodio que aprovechen bien su tiempo.

2 El “Cavino de Santiago” es un camino que se hace de bodega en bodega desde La Rioja, la Ribera del Duero, las viñas del Bierzo y las del Miño (Ribera Sacra) hasta llegar a Santiago (los que llegan…).

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Acelerador lineal de Radioterapia con su técnico Animaciones en Radioterapia
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La mala memoria Laudelino

Vázquez

Esta sensación. El desgaste de preguntarse a cada momento qué y por qué. El cansancio de saberse perdido una vez más, como cada día: la falta de memoria es desesperante, absolutamente desesperante, a pesar de que algunas de las cicatrices del camino tienen algo de familiares: la zanja inesperada, una piedra acompañada de otras mucho más pequeñas, hijas de un derrabe que tiene aspecto de haber ocurrido hace mucho, la estaquera fundida y tirada en medio del camino, y , sobre todo la verja herrumbrosa, que se distingue a lo lejos, en medio de un muro que parece proteger una propiedad abandonada.

La falta de memoria empuja. Te obliga a seguir caminando porque no sabes para qué avanzas, hacia dónde vas, ni qué pretendes. La única certeza es que no puedes parar. Nunca parar a pesar de esta sensación de dejá vu, de cansancio infinito ante algo que debió repetirse muchas veces antes de que perdieras la memoria.

La verja no da paso a ninguna propiedad, sino a un cementerio antiguo, en que los restos de cruces y tumbas se amontonan sin orden ni concierto. Paseas entre los cascotes, buscando entre los nombres algo que te traiga la memoria de golpe. Seguramente, por eso estás aquí. Algo habrá que active el botón de los recuerdos y te diga al fin quién eres, y sobre todo para qué eres, si es que estás en este mundo por algo.

El escaso sendero, por el que se puede circular sin caminar sobre las tumbas, se acaba bruscamente: una cruz caída se atraviesa sobre el camino e impide seguir adelante, así que giras con un encogimiento de hombros, y te vuelves por el mismo sendero, buscando una salida, aunque un pequeño cartel con un nombre y una cita «seguramente un epitafio», piensas, te llama la atención.

«Laudelino Vázquez». El nombre parece traerte alguna resonancia de otro tiempo, pero por más que te esfuerzas, no te dice nada. Después una fecha, ya borrada, una cita-epitafio: «Que conste que no estoy aquí por gusto». Curiosamente la frase empuja una pequeña tormenta que se revuelve dentro. Por alguna razón indefinible, te parece haberla oído antes en alguna parte.

En ese momento, te das cuenta de que estás cansado, muy cansado. La caminata, aunque no puedas precisar cuándo empezaste a caminar ni de dónde vienes, pesa en las pobres piernas, demasiado delgadas para tu gusto, tú recuerdas vagamente la preferencia, el deseo de unas piernas fuertes y poderosas, así que te diriges hacia el único edificio que se mantiene medio en pie entre tanta devastación. Aún conserva el letrero roído y oxidado, colgando de una punta no menos oxidada, que indica cual fue su uso en otro tiempo: “Depósito”. Apartas los restos podridos de la madera, y entras en un espacio sombrío y fresco, que contrasta con todo lo que has pasado hasta ahora: es curioso cómo la sensación

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de calor asfixiante, llega justo cuando la sombra te cobija y protege. Miras hacia el exterior, y te das cuenta, no sin sorpresa, de que el sol está subiendo y con él, el calor , porque no habrías sido capaz de darte cuenta en qué momento del día te encontrabas hasta el mismo instante en que miraste hacia el cielo y sentiste que el extraño sol, más rojo que anaranjado, que brillaba en el cielo, iluminaba un mundo extraño, pero que de alguna manera también era tuyo. Eso sí, no podrías explicar ninguna de estas sensaciones con ideas racionales.

Creo que entonces debiste dormirte, porque nada de lo que te rodeaba cuando abriste los ojos, parecía ser lo mismo que estabas viendo. Lo atribuiste a la luz del sol rojizo que entraba a borbotones por los boquetes del techo, iluminando a medias la estancia. Miraste alrededor buscando algo que el olvido parecía querer desenterrar entre tanto abandono, pero sólo había hierros retorcidos y algunos instrumentos tirados junto a la piedra que debió servir para realizar autopsias en un tiempo remoto. Hasta que una mínima ráfaga de viento te llamó la atención, sobre un libro desgastado y polvoriento que aún conservaba algunas hojas dispersas.

Te levantaste parsimoniosamente y lo abriste por una de las páginas que aún conservaban cierto tipo de texto: pronto comprobaste que era el libro de registro del cementerio, y lo único que contenía eran nombres, con su ubicación en el camposanto y la fecha en que habían fallecido. Hojeaste desganadamente el libro, parándote en los pocos nombres legibles, con la esperanza de que alguno te explicara qué estaba ocurriendo. Nueva decepción, incluso cuando tus dedos se desplazaron sobre el mismo nombre que antes habías visto en la cruz caída.

¿Qué me quieres decir, Laudelino Vázquez? Preguntaste en voz alta, a pesar de saber que la única respuesta seguiría siendo el silbido del aire. La fecha de la muerte era ilegible, al igual que en la tumba y lo único que podías discernir con mucha dificultad era uno de los números de la edad. Pero tal y como estaba el papel, era imposible determinar si era la primera o la segunda cifra, por lo que seguía estando exactamente igual que antes.

De pronto un estruendo en la puerta, además de darte un susto de muerte −obsérvese el humor negro−, atrajo inevitablemente tu atención: un hombre joven, vestido como un robot de color naranja, acababa de derribar los últimos restos de la puerta.

Se quedó quieto, mirando con sumo cuidado a cada rincón, mientras gritaba con una voz temblorosa, en la que vibraba el miedo: «Jefe, esto está imposible, hay que traer la máquina grande». A lo lejos, alguien respondió autoritario: «No seas cagón, que traer la máquina cuesta en una hora el salario de diez como nosotros. Entra ahí y mira a ver cómo nos apañamos con la pequeña».

Después de un buen rato de silencio, el joven, que apenas había puesto un pie en el interior del depósito, soltó un chillido y saltó hacia atrás.

−Jefe −gritó de nuevo−, yo aquí no entro.

−No me jodas, Kai −respondió el jefe−. No me digas que te crees las historias de fantasmas de este cementerio.

−No son historias, jefe. Venga aquí y entre. Hace un frío del carajo, con el calorazo que hay fuera, y apenas se entra… esto debe estar lleno de espíritus…

−Quita, gilipollas, quita. Déjame.

No sé por qué la actitud del jee te sentó tan mal, por qué te inundo la ira de repente, pero le lanzaste el libro con intención de desgraciarlo. Con poca eficacia, es cierto, porque tus escasas fuerzas, apenas te dieron para apartarlo un par de metros. Eso sí con bastante estruendo y, sobre todo, con una considerable cantidad de polvo, cuando alcanzó el suelo.

−Joder, chaval, vas a tener razón. Yo aquí no entro. Acabo de ver un libro enorme volar hacia mí. Esto no es normal.

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−¿Ve, jefe? Que venga la máquina grande y arrase con esto, y si le sale caro a la empresa que le salga.

Con muy poco decoro, los dos, arrancaron a correr, y se perdieron por la puerta que también habían arrancado.

¿Así que soy un fantasma? −te preguntaste saliendo del depósito y dirigiéndote a la puerta−. Un fantasma, ahora me lo explico, por eso…

Unos momentos después, salías por la puerta, sabiendo que había pasado algo importante, algo que por unos momentos había dado sentido a todo lo que había ocurrido. Pero es lo que tiene la mala memoria, que al llegar al final del camino, aunque los recuerdos se removían dentro queriendo salir, diste la vuelta porque algo habías olvidado; y aunque algunas de las cicatrices del camino te parecían familiares, no tenías más remedio que seguir adelante, a ver si con suerte, algo despertaba en tu interior, y la vida, eso que está construido con ladrillos de recuerdo, volvía de nuevo. Porque si no somos capaces de acordarnos de quien o qué somos, igual no somos nada, ¿verdad?

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El pasar del tiempo

Monchu Calvo

Estos días distraje mi ocio con un artículo de Ignacio Abella, El paisaje legado, se titula, y retrata muy bien los cambios que hubo en ciudades y pueblos, siendo estos últimos, como que a mí me quedan más cercanos, porque los viví de forma directa muchos de ellos.

Cuando en mis entrevistas a gente mayor del Alto Nalón, como los que figuran en el collage, estos me relatan lo que les tocó vivir, y lo que hacían para lograrlo, no puedo más que admirar la enorme capacidad de sacrificio de aquellos hombres y mujeres, que nada les echaba para atrás, en tiempos en que vivir ya era toda una aventura. Ellos y ellas, fueron en gran parte responsables del paisaje manipulado por el hombre, que hoy contemplamos. Manipulado, pero sin herirlo. Muy importante este matiz.

Contemplando ese muro de piedra, que rodea el prado cercano a mi casa, casi centenario, que parece estar allí desde siempre, y conociste a los canteros de Tanes, Luis Prado, y Ángel Armayor, que trabajaron precisamente en la construcción de ese muro, que todavía aguanta las tormentas y temporales, sin inmutarse.

Sin embargo, el terreno que guarda el muro, antaño verde y atendido en épocas de siega, ahora lo ves invadido por helechales y maleza. Luis y Ángel, hace años que nos dejaron, y sus herederos lo que menos piensan, es en cuidar aquel prado. Ellos, si fueron artífices de portillas, plantaron árboles que daban su fruto, aunque ahora nadie piense en recogerlo. Solo así podemos explicarnos como llegaron hasta nuestros días, ecosistemas interdependientes unos de los otros, aparentemente complejos, pero no para aquellos hombres y mujeres de antaño, que les iba la supervivencia en la buena o mala gestión del territorio.

Tengo una buena amiga que está preparando una exposición en Infiesto, para el mes de mayo, de la que informaremos en el número de dicho mes, y ahí vemos la tremenda evolución de nuestras casas, a través de la parte visible que es la

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fachada. Ella las realiza en cerámica, y ciertamente son obras de gran fidelidad a la casa original. Por eso al pasear por nuestros pueblos uno tiene la sensación de trasladarse a otro mundo, porque hay cambios de importancia en su fisonomía, pero no hay vida en ellos.

Parece que los recursos que provienen del mundo rural, ya no hacen falta, pues vemos las estanterías de las grandes superficies, atiborradas de lo que antes producían los terrenos de cultivo propios.

Pero no nos confundamos, si despreciamos lo nuestro es que estamos consumiendo, o más bien explotando otras regiones del planeta de forma injusta e insostenible. Vendemos paraíso, pero eso no deja de ser más que una fotografía, ya que se olvida el factor humano, ya que sin él nada es posible.

Con esa pérdida desaparece toda una cultura, y aquella sierra que contemplamos, que la gente mayor era capaz a nombrarte todos sus pasos, riegas, prados y cabañas, con la desaparición de esa memoria histórica, que se cierra para siempre, se pierden las raíces que nos amarraban a la tradición, a la tierra, y al mundo que tú conociste.

Esa sensación tengo cuando paseo por Tanes, Tarna, Caleao o La Felguerina, por nombrar alguno de los pueblos de Caso. Una sensación de vacío que palpas en el aire, porque posiblemente haya unos ojos tras aquella contraventana, pero tú los querrías ver en la calle, o plantando unos tomates o lechugas en los estériles huertos casi en abandono.

Hoy resulta más fácil y cómodo ir a la gran superficie y comprar todo lo que necesites, que producirlo en tú huerto. Quedan los últimos nostálgicos, que, de forma discreta, siguen repoblando, cuidando sus prados y ganados, y viviendo de lo que la naturaleza les ofrece. Todavía hay lugar para la esperanza, y que este mundo dejen de matarse unos y otros, y se dediquen a cuidar de esta tierra que nos da el alimento, y la vida.

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Arturo Vigil

Nuestro especial colaborador Arturo Vigil, nos adentra en el mundo submarino de los mares de Filipinas.

Los corales de los mares de Filipinas son conocidos por ser algunos de los más diversos y espectaculares del mundo. El archipiélago filipino, situado en el Océano Pacífico occidental, alberga una gran cantidad de ecosistemas marinos ricos en biodiversidad, y los arrecifes de coral son una parte integral de este entorno marino.

Filipinas se encuentra en el llamado “Triángulo de Coral”, una región que abarca Filipinas, Indonesia, Papúa Nueva Guinea y otros países vecinos. Esta área es conocida por tener la mayor diversidad de especies de coral en el mundo, y los arrecifes de coral de Filipinas son una parte esencial de este ecosistema.

Estos arrecifes de coral son hogar de una amplia variedad de especies marinas, incluyendo numerosos tipos de corales duros y blandos, así como una gran diversidad de peces tropicales, crustáceos, moluscos y otros invertebrados marinos. Alrededor de 500 especies de coral se encuentran en las aguas filipinas, lo que representa aproximadamente el 20% de las especies de coral conocidas en todo el mundo.

La belleza y diversidad de los corales en Filipinas atraen a buceadores y amantes del snorkeling de todo el mundo. Lugares como los arrecifes de Tubbataha en el Mar de Sulu, el Parque Nacional Apo Reef en el Mar de Mindoro y el Parque Marino Nacional de Coron en Palawan son destinos populares para los entusiastas del buceo. Estos sitios ofrecen impresionantes paisajes submarinos con arrecifes de coral vírgenes, paredes de coral, cuevas y una gran cantidad de vida marina.

Sin embargo, los corales de los mares de Filipinas también enfrentan desafíos significativos debido al cambio climático, la contaminación y la pesca destructiva. El calentamiento global y el aumento de la temperatura del agua pueden provocar el blanqueamiento de los corales, un fenómeno que puede resultar en la muerte masiva de los corales. Además, la pesca con explosivos y la pesca de arrastre pueden dañar gravemente los arrecifes de coral y destruir los hábitats marinos.

A pesar de estos desafíos, se están realizando esfuerzos para proteger y conservar los corales de los mares de Filipinas. Organizaciones gubernamentales y no gubernamentales trabajan en la implementación de áreas marinas protegidas, campañas de concientización y programas de educación ambiental. La conservación de los corales y los ecosistemas marinos es fundamental para mantener la biodiversidad y la salud de los mares filipinos, así como para garantizar su sustentabilidad a largo plazo. En conclusión, los corales de los mares de Filipinas son una maravilla natural de increíble belleza y diversidad. Estos arrecifes de coral son hogar de una gran variedad de especies marinas y atraen a buceadores y amantes de la naturaleza de todo el mundo. Sin embargo, también enfrentan amenazas significativas y es crucial tomar medidas para proteger y conservar estos valiosos ecosistemas marinos.

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Los viejos moldeadores nunca mueren y ahora viven en Luz y TinTa

Duong Dinh

Duong Quoc Dinh, es un viejo conocido de nuestra desaparecida red social de fotografía Moldeando la luz, comenzó con la primera versión, fue fotógrafo del mes en aquella versión y son incontables las fotos que fueron seleccionadas por la comunidad de fotógrafos. Es un fotógrafo reconocido internacionalmente y acumula cientos de premios a través de los certámenes fotográficos más importantes del mundo.

En esta ocasión nos muestra una selección de sus mejores desnudos artísticos, aunque su verdadera especialidad es el “Bodypainting”. En los próximos números de Luz y Tinta, Duing colaborará con esta difícil especialidad.

El bodypainting, también conocido como arte corporal o pintura corporal, es una forma de expresión artística que implica pintar directamente sobre el cuerpo humano. Esta práctica tiene una larga historia que se remonta a las antiguas tradiciones culturales de diversas civilizaciones, donde se utilizaba como parte de rituales, ceremonias y celebraciones.

El bodypainting moderno ha evolucionado como una forma de arte contemporáneo que combina la creatividad artística con el lienzo vivo del cuerpo humano. Los artistas del bodypainting utilizan una variedad de técnicas y materiales para crear diseños y patrones sobre la piel, transformando el cuerpo en una obra de arte en movimiento.

La belleza del bodypainting radica en su capacidad para fusionar el arte visual con la forma humana. Los artistas pueden utilizar la anatomía y las curvas del cuerpo como elementos fundamentales en sus composiciones, creando diseños que se adaptan y realzan la belleza natural del individuo. El cuerpo se convierte en una “lienzo viviente” que permite la expresión artística en una forma única y dinámica.

La técnica del bodypainting requiere habilidad, precisión y creatividad por parte del artista. Se utilizan diferentes tipos de pintura corporal, como pinturas a base de agua, pinturas al óleo, aerógrafos y maquillaje especializado. Dependiendo del diseño y el efecto deseado, se pueden aplicar capas de pintura, utilizar pinceles de diferentes tamaños y texturas, y combinar colores y sombras para crear profundidad y realismo.

El bodypainting puede abarcar una amplia gama de estilos y temáticas. Algunos artistas se inspiran en la naturaleza, utilizando elementos como flores, animales o paisajes para crear diseños orgánicos y exuberantes. Otros se centran en la abstracción y la experimentación, utilizando formas geométricas o diseños abstractos para lograr efectos visuales impactantes. Además, el bodypainting también puede ser utilizado como medio de expresión política, social o cultural, transmitiendo mensajes y provocando reflexiones en el espectador. Duing Quoc Dinh nos lo explicará mejor con sus trabajos a partir del mes de Junio.

Este arte no se limita a un solo momento, ya que el bodypainting puede ser fotografiado o documentado en video, lo que permite capturar y compartir la obra de arte a través de diferentes medios y plataformas.

Es importante destacar que el bodypainting se ha convertido en una forma de entretenimiento popular en eventos, festivales, exhibiciones de arte y competencias internacionales. Los concursos de bodypainting reúnen a artistas talentosos de todo el mundo, quienes compiten para crear diseños impresionantes y originales en un tiempo limitado.

En resumen, el bodypainting es una forma de arte corporal que combina la creatividad artística con el cuerpo humano como lienzo. La belleza y el arte de esta técnica radican en la fusión de la forma humana con la expresión visual, permitiendo a los artistas crear diseños únicos y cautivadores que transforman el cuerpo en una obra de arte en movimiento.

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Aljohara Jeje

Aljohara Jeje, nacida en 1962, puede describirse como un artista distinguida y versátil con una rica experiencia en diseño de productos, fotografía artística y técnicas artísticas medievales. Demuestra una dedicación al aprendizaje permanente a través de sus diversas actividades educativas, incluidos cursos de Historia del Arte, Religiones Comparadas y Ética. La pasión de Aljohara por las artes es evidente en su continua exploración y dominio de diversas disciplinas artísticas.

La práctica de Aljohara profundiza en la exploración de las dinámicas sociales y culturales, inspirándose en contextos históricos y cambios contemporáneos. Su trabajo está profundamente arraigado en la narración de historias, utilizando narrativas visuales para transmitir intrincadas capas de significado, interactuando profundamente con la historia, la cultura y los desafíos contemporáneos, invitando a los espectadores a reflexionar sobre las complejidades de la experiencia humana.

Su voz artística es única y surge de sus agudas observaciones de su entorno. Tiene la capacidad de traducir estas observaciones en arte, lo que la convierte en una artista versátil. Con sensibilidad y ojo crítico, su práctica artística es una exploración multidimensional de cuestiones sociales, utilizando una variedad de técnicas y medios visuales para transmitir sus mensajes.

El nombre de Aljohara y sus obras premiadas son cada vez más conocidos y encargados dentro y fuera de la región debido a su amplia gama de bellas artes elaboradas por expertos. Galardones notables como el reconocimiento del Ministerio de Cultura de Arabia Saudita, su ‘Premio Allard de Fotografía a la Integridad Internacional’ y su preselección por instituciones prestigiosas como la Fundación Bill y Melinda Gates, son buenos ejemplos.

Más allá de sus logros artísticos, Aljohara participa activamente en enriquecer el discurso cultural, a través de talleres, charlas, publicaciones y participando en foros internacionales, demostrando su firme dedicación a fomentar la comunicación a través de las artes.

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Daniel Kordan Indonesia, Sulawesi

Luwuk and Ba

Indonesia es un país archipelágico y diverso ubicado en el sureste de Asia. Está compuesto por miles de islas, incluida la isla de Sulawesi, una de las más grandes de Indonesia. Sulawesi se destaca por su forma única, que se asemeja a una orquídea o un pulpo.

Luwuk es una ciudad situada en la costa este de la provincia de Sulawesi Central, en Indonesia. Es la capital del regencia de Banggai. Luwuk está ubicada en una zona pintoresca con hermosas playas, verdes colinas y un vibrante ecosistema marino. La ciudad sirve como puerta de entrada a muchas atracciones naturales de la región.

Una de las atracciones destacadas cerca de Luwuk son las Islas Banggai, que son un grupo de islas conocidas por sus impresionantes arrecifes de coral y su rica biodiversidad marina. Esto lo convierte en un destino popular para los entusiastas del buceo y el snorkel. Las islas también ofrecen oportunidades para paseos en barco y saltos de isla, lo que permite a los visitantes explorar la belleza escénica del área.

Ba, también conocida como Isla Ba, es una de las islas del grupo de las Islas Banggai. Está ubicada frente a la costa de Luwuk. La Isla Ba es conocida por sus playas prístinas, aguas cristalinas y abundante vida marina. El buceo y el snorkel son actividades populares aquí, ya que las aguas de la isla albergan coloridos arrecifes de coral y una amplia variedad de especies de peces.

Además de su belleza natural, Luwuk y Ba ofrecen una visión de la cultura local y el estilo de vida. La gente de Sulawesi tiene diversos orígenes étnicos, y cada grupo tiene sus propias tradiciones, costumbres e idiomas únicos. Los visitantes pueden disfrutar de música tradicional, actuaciones de danza y probar la cocina local, que a menudo incluye mariscos frescos.

En resumen, Luwuk y Ba, ubicados en la pintoresca región de Sulawesi en Indonesia, ofrecen oportunidades para los amantes de las playas, los entusiastas de la naturaleza y aquellos interesados en explorar el patrimonio cultural de la zona.

La mejor época para visitar Luwuk y Ba en Indonesia es durante la estación seca, que generalmente se extiende de abril a octubre. Durante este período, el clima tiende a ser más estable y hay menos lluvias.

Durante la estación seca, las condiciones son ideales para disfrutar de las playas, el buceo y otras actividades acuáticas en Luwuk y Ba. El mar está tranquilo, las aguas son claras y hay una mayor visibilidad para explorar los arrecifes de coral y la vida marina.

Es importante tener en cuenta que Indonesia, incluida la región de Sulawesi, tiene un clima tropical, por lo que incluso durante la estación seca pueden producirse lluvias ocasionales. Sin embargo, estas suelen ser cortas y no afectan significativamente las actividades turísticas.

Por otro lado, la estación húmeda, que abarca los meses de noviembre a marzo, suele tener un clima más lluvioso y mayor humedad. Durante este período, puede haber tormentas y el mar puede estar agitado, lo que puede limitar las actividades acuáticas y dificultar el acceso a algunas áreas.

En resumen, la mejor época para visitar Luwuk y Ba es durante la estación seca, de abril a octubre, cuando el clima es más estable y propicio para disfrutar de las atracciones naturales y el paisaje marino de la región.

Si estás interesado en la fotografía, la mejor época para visitar Luwuk y Ba desde ese punto de vista dependerá de tus preferencias y objetivos fotográficos. Aquí hay algunas consideraciones:

Temporada seca y luz: Durante la estación seca, el clima suele ser más soleado, lo que brinda condiciones ideales para capturar paisajes vívidos y coloridos. La luz del sol es más intensa y puede resaltar los colores de las playas, los arrecifes de coral y la vegetación

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circundante. Además, durante esta época, las puestas de sol y amaneceres pueden ser espectaculares, lo que ofrece oportunidades fotográficas únicas.

Vida marina: Si estás interesado en la fotografía submarina o de vida marina, es recomendable visitar Luwuk y Ba cuando las condiciones del agua sean óptimas. Durante la estación seca, las aguas suelen estar más claras, lo que facilita la captura de imágenes nítidas y vibrantes de los arrecifes de coral, los peces tropicales y otras criaturas marinas.

Eventos culturales: Si deseas capturar la vida y la cultura local, puedes investigar si hay festivales o eventos especiales que tienen lugar en Luwuk y Ba en ciertos momentos del año. Estos eventos pueden ofrecer oportunidades únicas para fotografiar tradiciones, danzas, vestimentas y celebraciones coloridas.

Recuerda que la fotografía es un arte subjetivo y personal, y cada estación y momento del año puede brindar diferentes oportunidades creativas. Al planificar tu visita, también puedes considerar la disponibilidad de alojamiento y la afluencia de turistas, ya que algunos meses pueden ser más concurridos que otros.

En definitiva, la elección de la mejor época para visitar Luwuk y Ba desde el punto de vista fotográfico dependerá de los intereses específicos de cada uno y el tipo de imágenes que se desean capturar.

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Anna Biret

Nació en la Polonia soviética, donde encontró su vocación en la percepción espacial y los patrones geométricos de la arquitectura.

Después de graduarse en arquitectura, se mudó a París, donde vive hasta el día de hoy.

Descubrió la fotografía callejera en noviembre de 2018, cuando decidió proceso participar en uno de los talleres de Maciej Dakowicz en Myanmar.(Birmania)

Fue la primera chispa que inició toda una serie de talleres y viajes fotográficos, desde Bolivia hasta la Bahía de Bengala en la India, sus fotos están inspiradas en las personas que conozce en cada aventura.

Declaración de Anna

Vivo para encuentros espontáneos que sólo pueden darse en las calles, miradas, composiciones y colores me llevan a crear retratos a través del contacto y la empatía.

Una mujer con los ojos vendados para protegerse del sol, una sombra que inunda los bordes de un puesto de frutas, un pañuelo arrastrado por una repentina ráfaga de viento, estas escenas ordinarias se convierten en fragmentos extraordinarios que componen mis fotografías.

Cuando salgo a la calle con mi cámara, no tengo una idea concreta de lo que voy a fotografiar... la calle, la luz, los colores y sobre todo la gente corriente me inspiran.

Siento que algo mágico está sucediendo conmigo, cambiando el mundo que me rodea mientras tomo fotografías.

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Laura.Murphy

Laura Murphy

Laura Murphy (Reino Unido, 2000) es una fotógrafa de bodegones que vive en el sudeste de Inglaterra y se graduó recientemente en la Licenciatura en Fotografía de la Universidad de Middlesex. Gran parte de su trabajo surge de un interés en la percepción y en cómo algo reconocible u ordinario puede modificarse y verse de una manera completamente diferente. Experimenta con estilos de trabajo más abstractos y está influenciada tanto por el color como por la forma.

Declaración de Laura Murphy

“El confinamiento se ha sentido muy aislado. Estar confinados en nuestros hogares, normalmente lugares que conocemos bien, se ha sentido cada vez más surrealista debido al exceso de familiaridad. He explorado este concepto tomando objetos cotidianos y mundanos de la casa y usándolos para construir algo. más abstracto. Me he centrado específicamente en el color y la forma para alterar nuestra percepción de cómo se verían normalmente. Este cuerpo de trabajo se compone de múltiples miniproyectos. Cada uno de ellos ha utilizado materiales domésticos para explorar temas como la forma, la geología , textura y abstracción”.

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Linda Hollinger

Linda Hollinger es una fotógrafo de bellas artes que vive y trabaja en Filadelfia, Pensilvania. Después de graduarse en diseño e ilustración, cambió sus pinturas y pinceles por películas y la cámara. Su proyecto más reciente ha sido fotografiar zonas remotas de México y América Latina. Considera que los lugares más interesantes e intrigantes están fuera de lo común y, por lo tanto, rara vez son visitados por forasteros. Se esfuerza por encontrar la magia y la poesía que existe en la vida cotidiana, una armonía entre magia y cultura.

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Algunas cosas para considerar en los bodegones modernos

Los bodegones modernos en fotografía son una forma de arte que se centra en la captura de objetos inanimados, como alimentos, utensilios, flores y otros elementos comunes. Aunque el bodegón es un género que ha existido durante siglos, la fotografía ha permitido a los artistas explorar nuevas formas de representar estos objetos y crear composiciones visualmente interesantes.

En la fotografía de bodegones modernos, los artistas suelen prestar especial atención a la iluminación, la disposición de los elementos y la elección de los objetos. La iluminación puede ser suave y difusa para crear una atmósfera tranquila y evocadora, o puede ser más brillante y contrastante para resaltar los detalles y texturas de los objetos. La disposición de los elementos es crucial para establecer un equilibrio visual y crear una composición armoniosa. Los objetos se seleccionan cuidadosamente para transmitir un mensaje o una historia, y a menudo se eligen por su forma, color o simbolismo.

En los bodegones modernos, también es común el uso de técnicas contemporáneas, como enfoques minimalistas, fondos desenfocados o el uso de efectos especiales en la postproducción. Los fotógrafos pueden experimentar con diferentes estilos y enfoques, desde bodegones realistas y detallados hasta composiciones más abstractas y conceptuales.

Además, con el advenimiento de las redes sociales y las plataformas en línea, los bodegones modernos en fotografía han ganado popularidad como una forma de expresión artística y comercial. Muchos fotógrafos comparten sus obras en línea, creando imágenes estéticamente atractivas que pueden ser utilizadas en publicidad, diseño gráfico, gastronomía y otros campos.

En los bodegones modernos, los fotógrafos pueden adoptar diferentes estilos y enfoques para crear imágenes únicas y distintivas. Algunos se centran en la precisión y el realismo, capturando cada detalle y textura de los objetos. Otros optan por un enfoque más minimalista, utilizando líneas y formas simples para crear composiciones limpias y elegantes. También hay quienes experimentan con la abstracción y la manipulación digital, creando imágenes que desafían la percepción y exploran conceptos más abstractos.

La elección de los colores y las tonalidades es un aspecto clave en los bodegones modernos. Los fotógrafos pueden optar por una paleta de colores suave y apagada para crear una atmósfera tranquila y nostálgica, o pueden utilizar colores vibrantes y contrastantes para llamar la atención y generar impacto visual. La combinación de colores puede ser cuidadosamente seleccionada para crear armonía o contraste, y algunos artistas incluso utilizan elementos de color complementario para lograr un equilibrio visual interesante.

La composición es fundamental en los bodegones modernos. Los elementos se disponen cuidadosamente en el encuadre para crear una imagen equilibrada y atractiva. Los fotógrafos pueden emplear técnicas como la regla de los tercios, la simetría, el uso de líneas y la colocación estratégica de los objetos para guiar la mirada del espectador y crear un flujo visual interesante. También se pueden utilizar elementos como fondos desenfocados o negativos espacios para resaltar el objeto principal y crear un efecto de profundidad.

Aunque los bodegones modernos suelen representar objetos inanimados, pueden transmitir mensajes o contar historias de diferentes formas. Los fotógrafos pueden emplear elementos simbólicos o metafóricos para evocar emociones

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o reflexiones en el espectador. También pueden jugar con contrastes, como la combinación de objetos antiguos y modernos, para explorar temas como la tradición y la evolución.

Además, se emplean en revistas, catálogos y sitios web para crear una estética visual atractiva y transmitir un mensaje de calidad, estilo y atención al detalle. En resumen, los bodegones modernos en fotografía son una forma de arte que permite a los fotógrafos capturar y representar objetos inanimados de manera creativa. Los estilos, colores, composiciones y conceptos utilizados varían según el enfoque del artista, ofreciendo una amplia gama de posibilidades expresivas y estéticas. Estas imágenes son apreciadas tanto en el ámbito artístico como en el comercial, y se utilizan en diversas industrias para transmitir mensajes visuales y captar la atención del espectador.

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las necesidades de composición y el tamaño del campo de juego. Son especialmente útiles en deportes donde los sujetos pueden estar a diferentes distancias.

Si deseas capturar la atmósfera general del evento deportivo, los objetivos gran angular pueden ser útiles. Pueden capturar la acción en un amplio campo de visión y también pueden ser útiles para fotografías de equipo, tomas de paisajes deportivos o para capturar la interacción entre los atletas.

Recuerda que la elección de la cámara y los lentes dependerá de tu presupuesto, las preferencias personales y el tipo de deporte que fotografíes con mayor frecuencia. Es importante probar diferentes combinaciones de cámaras y lentes para encontrar la configuración que se adapte mejor a tus necesidades y estilo fotográfico.

Utilizar un objetivo con una apertura amplia en la fotografía deportiva ofrece varias ventajas:

Los objetivos con apertura amplia, como f/2.8 o incluso f/4, permiten que entre más luz en el sensor de la cámara. Esto es especialmente útil en situaciones de poca luz, como eventos deportivos en interiores o en condiciones de iluminación deficiente. Una mayor entrada de luz permite utilizar velocidades de obturación más rápidas para congelar la acción, evitando el desenfoque de movimiento.

Los objetivos con apertura amplia también suelen tener sistemas de enfoque más avanzados y rápidos. Esto es crucial en la fotografía deportiva, donde los sujetos se mueven rápidamente. El enfoque rápido y preciso te permite capturar imágenes nítidas y enfocadas de los atletas en acción.

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Al utilizar una apertura amplia, se obtiene una profundidad de campo más reducida. Esto significa que el sujeto principal estará enfocado y destacado, mientras que el fondo se desenfocará, creando un efecto de bokeh atractivo. Este efecto ayuda a aislar al sujeto del fondo y a crear una imagen más impactante y focalizada en la acción deportiva.

La apertura amplia permite utilizar una velocidad de obturación más rápida, ya que hay más luz disponible para exponer la imagen correctamente. Una velocidad de obturación rápida es fundamental en la fotografía deportiva para congelar el movimiento y capturar detalles nítidos de la acción.

Al permitir una mayor entrada de luz, los objetivos con apertura amplia brindan más flexibilidad para fotografiar eventos deportivos en condiciones de poca luz sin necesidad de aumentar demasiado el ISO. Esto ayuda a reducir el ruido en las imágenes y a obtener una mejor calidad general.

En resumen, utilizar un objetivo con una apertura amplia en la fotografía deportiva ofrece ventajas como una mayor entrada de luz, enfoque rápido y preciso, control de la profundidad de campo, mayor velocidad de obturación y flexibilidad en condiciones de poca luz. Estas características son especialmente beneficiosas para capturar la acción rápida y dinámica de los eventos deportivos.

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Pep Bonet

Repertorio de fotógrafos españoles

Pep Bonet

Pep Bonet (Mallorca, 1974) es cofundador de Imágenes NOOR y embajador Nikon Europe.

Pasó. su adolescencia en Tarifa, donde comenzó. a practicar windsurf, afición que le llevaría a trasladarse a Hawai para competir a nivel internacional en esta disciplina deportiva. En 1997 se instala en Amsterdam y estudia. fotografia, a la que se dedica profesionalmente tras visitar una exposición de Ed van der Elsken que le produciría un gran impacto.

Hoy Pep es un cineasta y fotógrafo premiado que ha recorrido profundamente momentos que representan el mundo desequilibrado en el que vivimos. Sus proyectos a más largo plazo se centran en cuestiones africanas, y su proyecto más conocido es “Fe in Caos”, un ensayo fotográfico sobre las secuelas de la guerra en Sierra Leona. El trabajo en curso de Pep en todo el mundo sobre el VIH/ SIDA y la identidad ha llevado a varios libros de fotografía y a muchas exposiciones en todo el mundo.

También es conocido por un reportaje a largo plazo sobre la banda rock ‘n roll Motörhead. Pep pasó muchos años (2008-2015) en la carretera con Lemmy Kilmister, la legendaria cantante de la banda, y creó un documento visual excepcional de las muchas horas que pasaron en la carretera con Motörhead.

Pep se convirtió en documentales de tiro. Esto dio lugar a varias películas documentales cortas y largas, entre las que el premiado ‘Into the Shadows’, una búsqueda en la vida de cientos de miles de africanos que viven en la ciudad interior de Johannesburgo. El trabajo de Pep ha sido reconocido con muchos premios de la industria. Empezó en 2002 cuando fue seleccionado para la World Press Photo Joop Swart Masterclass con su obra “Fe en el Caos”. Ese mismo año fue nombrado “uno de los 30 mejores para ver” por las noticias del Distrito de Foto. Pep ganó el fotografo de Kodak Young del año en 2003 en el festival Visa pour L`image, y la Fundación Luchetta en Trieste le otorgó el mejor fotógrafo de prensa del año 2004.

Fue beneficiario del otorgamiento de W. Eugene Smith Humanistic Grant in Fotography en 2005 y en 2007 ganó el segundo premio en el concurso de Foto Mundial de Prensa en la categoría Deportes por su trabajo en la liga de fútbol de los amputados en Sierra Leona. En 2009 Pep ganó un segundo Premio Mundial de Foto de Prensa por su trabajo “Identidad Forzada”, que representa la vida de los transexuales en Honduras. En 2013, Pep ganó su tercer premio mundial de fotos de prensa en la categoría Multimedia for Into the Shadows. En 2015 Pep ha sido el beneficiario del Premio Horbach. Su lista de publicaciones incluye “Generación Perdida” (2010), “Notable Sudafricanos” (2009), “Fotoboolsillo”, un nuevo Fotoboolsillo de La Fabrica con una colección de fotógrafos españoles, “One Goal” (2007) y “Somalia: The Invisible Trace” (2007), “Quadern de Bitacola”, un libro de texto escrito por Carles Domenec y POSITHIV+ (2005), Watching in Silence (2011), 17 milagroso (2009), 217A; un libro NOOR (2008), Nosotros el pueblo de Wacken (2014) Röadkill, Motörhead (2013)

Pep es fotógrafo, cineasta y DOP, trabaja en proyectos personales, dirigiendo en su mayoría películas documentales, y en asignaciones para clientes y ONG. Con frecuencia, da conferencias sobre fotografía y película y organiza conferencias y talleres.

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Publicaciones:

National Geographic, New Yorker, Newsweek, New York Times, US News and World Report, The Times (UK), MSF (Medecins sans Frontieres), Corriere della Sera, El Pais, EPS (El Pais Semanal), PF(Magazine), Man, Brisas, Ultima Hora, PDN, El Mundo, El Periódico, El Dominical, Profifoto, American Photo, Zoom, Foto-noticiario, Fotografia, Metro, City, Credits, Arte, Fotografia reflex, Transversal, IO Donna, Il Fotografo, Goteborgs Posten, Photo Italia, Digital Photographer, El Mundo, El Periodico, La Vanguardia, NRC Handelsblad & M Magazine, Trouw, de Volkskrant, Het Parool, Onze Wereld, IS (Internationale Samenwerking), Algemeen Dagblad, Vrij Nederland, News Settimanale, Internazionale, Le Soir, De Morgen, The Globe and Mail, Esquire (Russia), Days (Japan), Verdensmagasinet, C Magazine, Private, Specchio (La Stampa), Courrier International, Le Nouvel Observateur, Elsevier, Independent, World Economic Forum, Minority Rights Group, Open Society Institute, British Medical Journal, Harper’s & Queen, Esquire Russia, Impactaids, Playboy, Rolling Stone, Life, Politiken, …

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Filmografía

IB3 & CEF Productions “NORATS” as Director of Photography for the 4 episodes 2023 / 2024

Videoclip “Drama” by Cartesian Ghost as Director of Photography 2024

“HBO MAX” House of the Dragon, (Season 2) as Director of Photography, BTS. Spain & UK 2023

PARAMOUNT “Lioness” as Director of Photography, BTS and EPK main cast Interviews. 2023

AMAZON PRIME “Last Exit Schinkenstrase” Key Art / Set photographer / Behind the scenes. 2023

“Der konig von Palma” UFA/RTL series. Behind the scenes / Key Art / Studio photographer. 2023

“HBO MAX” House of the Dragon, the prequel to Game of Thrones as Director of Photography, BTS 2021

“HBO MAX” The Climb, a rock climbing series with Jason Momoa and Chris Sharma as Director of Photography, BTS 2021

“ICC Educational videos” Director and DOP (14 films) for the International Criminal Court. 2022

“Seeds” Short fiction film as Director of Photography. Directed by Toni Bestard . 2022

“ICC Educational videos” Director and DOP (14 films) for the International Criminal Court. 2021

“Der konig von Palma” UFA/RTL series. Behind the scenes / Key Art / Studio photographer. 2022

“Hellbangers” Documentary film on Botswana´s undergroung Heavy Metal secene. Director and DOP 2020

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“Lüderitz Speed” 25 short films on Speed Windsurfing in Namibia. Director and DOP 2019 / 2020

“Meero Education films” Kadir van Lohuizen, Jon Lowenstein, Sanne de Wilde, Sebas Liste. 2020

“El sueño efímero” Documentary film (as DOP) Barcelona. Director Toni Bestard. 19 min. 2020

“Into the Shadows” Documentary film, Director and DOP. South Africa. 52, 75 and 5 min versions. 2013

“Forced” Child labor and exploitation , Director and DOP. Bangladesh. 26 min. 2013

“I’m not for sale” Documentary film on Human Trafficking. Director and DOP. 14 min. 2017

“Rise Up” Documentary film on Human Trafficking. Director and DOP. 24 min. 2017

“Fortunes Gift” 14 Positive stories of refugees / Denmark. DOP. 28 min. 2016

“Girlztalk” Documentary film on South African voices of young women. DOP. 25 min. 2014

“Right to Identity” Documentary film on birth registration. Tanzania. DOP. 13 min. 2015

“Suffering in Silence”, Obstetric fistula in Asia. Director and DOP. 13 min . 2015

“El rey de la Habana” Photographs from Cuba, directed by Agustí Villaronga. 2h 5 min. 2015

“Motherland”, Another Crimea. 20 min Documentary film. Director and DOP. 2014

“The most beautiful hell I know”, Child mortality in Chad. Director and DOP. 26 min. 2017 (on FILMIN)

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“Guyane, the invisible border” 2017. DOP. 52 min Upfront production.

“Kenya, the internal border” 2018. DOP. 52 min Upfront production.

“Family planning” Bolivia and Papua New Guinea for UNFPA. Director and DOP. 2018

“Out of Plastic” plastics in the Mediterranean (as DOP) 52 min. 2018

“Ponerse al día”, short fiction film. Director and DOP. 14 mim. 2014

“Fel de la terra” Documentary film. Director and DOP. Mallorca, Spain. 80 min. 2017

“3 Wise Monkeys”, short fiction film (as DOP). Spain. 12 min. 2015

“Lucía, del verbo lucir” short fiction film (as DOP). Spain. 13 min. 2016

“When the sky comes looking for you” Motörhead Official videoclip. Director and DOP. 2016

“Heroes” (David Bowie cover) Motörhead Official videoclip. Director and DOP. 2018

“Libre” Taifa Official videoclip. Director and DOP. 2016

“Acústico Embrujado”. Taifa Official videoclip. 25 minutes . Director and DOP. 2016

“Transparaiso” Transgender in Chile. (work in Progress) 2014

“Afronauts” Zambian quest for space. (work in Progress) 2014

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