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Conclusiones
co, Norte de Torreón y Norte y Poniente de San Luis Potosí; Monterrey-Saltillo y Libramiento Norponiente de Saltillo, Morelia-Salamanca, Palmillas-Apaseo el Grande; los puentes Anzaldúas, Guadalupe Tornillo, Lerdo-Stanton, La Unidad, San Luis Río Colorado II, Suchiate II; Río Verde-Ciudad Valles y Salamanca-León, Santa Ana-Altar, Tepic-Villa Unión, Tuxtla Gutiérrez-San Cristóbal de las Casas y Libramiento de Puebla (paso elevado), entre otras concesiones.
El mismo Fondo Nacional de Infraestructura, además de carreteras libres, financió las siguientes autopistas que se incorporaron a su red: Durango-Mazatlán, Tulancingo-Tuxpan, Gutiérrez Zamora-Tihuatlán, Las Choapas-Ocozocuautla, Libramiento Amecameca-Nepantla, Libramiento Felipe Carrillo Puerto, Chihuahua y Sur II de Reynosa, Mitla y Tehuantepec (tramos extremos), Salina Cruz-La Ventosa, San José del Cabo-Cabo San Lucas, Viaducto Elevado de Tlalpan y Libramiento Ciudad Valles-Tamuín.
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En este importante esfuerzo, la ingeniería mexicana ha localizado y proyectado para estas autopistas un sinnúmero de puentes especiales de grandes claros, así como túneles que hacen más funcionales las carreteras y brindan al transporte economía, seguridad y comodidad. Para ello la secretaría ha ampliado el número de ejes troncales de transporte a 15, que ahora totalizan 19,245.3 kilómetros.
La red de autopistas de peaje cada día cobra más importancia en el transporte de bienes y personas y mayor interés de los gobiernos estatales de 13 entidades que tienen concesionados 1,718.2 km de autopistas estatales de peaje. Destacan Chihuahua, Nuevo León, San Luis Potosí, Puebla y el Estado de México, así como la iniciativa privada que desdobla sus concesiones mediante ampliaciones en número de carriles o longitud de sus tramos en operación y a nuevos proyectos e incluso a la modernización de carreteras federales libres de peaje, alimentadoras de sus propias concesiones; este último esquema fue desarrollado por las áreas de planeación de autopistas de la SCT y ya ha demostrado sus bondades y capacidad para seguir creciendo.
Situación actual
Transcurridos 96 años desde el inicio de los programas carreteros, México cuenta con una red nacional de carreteras, que es uno de sus patrimonios más valiosos que no ha dejado de conservar y aumentar, ya el constante crecimiento demográfico y económico así lo demanda; esto se ha traducido en un esfuerzo continuo que se refleja en los resultados del estudio desarrollado por el Instituto Mexicano del Transporte, que, con los apoyos de la SCT y del Inegi, encabezó el levantamiento de la información sobre ubicación y longitud de la infraestructura caminera en nuestro país hasta el mes de septiembre de 2020, donde se muestran los distintos segmentos de la red nacional de caminos, entre los que destacan:
Alejandro Morales Ramírez En esta mesa sobre la planeación de la infraestructura en México hemos escuchado en diferentes ponencias sobre la relevancia de la construcción de consensos, en particular entre las autoridades gubernamentales y el sector privado, pero ¿cómo debería la sociedad civil incorporarse a este esfuerzo de planificación de largo plazo, siendo que los mecanismos de democracia representativa parecen insuficientes?
César Herrera Toledo Me parece que la sociedad civil tiene dos formas de participación: una con instrumentos que permitan dar continuidad a los proyectos, pues ella no se rige por periodos sexenales; las organizaciones pueden estar presentes a lo largo del tiempo como una contraloría social que esté pendiente de programas de largo aliento en los que debe participar también para propiciar que se lleven a cabo. Pero la sociedad civil también está buscando espacios cada vez más importantes y estratégicos; por ejemplo, en la nueva Ley de Aguas Nacionales o Ley General de Aguas, están presentes organizaciones de la sociedad civil que buscan tener voz y actuar sobre las acciones que se ejecutan en torno al agua; también puede participar con iniciativas sobre todo para promover soluciones de infraestructura verde, como la recuperación de algunas lagunas, la de Xico, en Cuautitlán Izcalli, por hablar del Valle de México, en donde están presentes.
Alejandro Morales Ramírez Y en este ámbito de las decisiones estratégicas, una fundamental se refiere a la energía. ¿Las energías renovables realmente son más baratas que otros tipos de generación? ¿Y qué tanto problema causa que algunas sean intermitentes en términos de la red?
José Luis Fernández Zayas El progreso ha dado lugar en los últimos 70 años a que el aprovechamiento de las fuentes alternas de energías, particularmente la eólica y la solar, sea mayor y sus costos se vayan reduciendo. México participa un poco en investigación de materiales por ejemplo.
Las fuentes de energía alternas y limpias están progresando en la dirección de hacerse cada vez más atractivas económicamente; el marco de referencia normativo cada vez es más efectivo, la educación de los operadores que instrumentan esta medidas es cada vez de mejor calidad internacional. Surge la intermitencia, porque el sol produce el calentamiento de manera intermitente y el viento sopla de manera intermiten-
En 1932 se inicia formalmente la construcción de las redes estatales de carretas con subsidios federales; en 1934 se promulga la Ley de Construcción de Caminos en Cooperación con los Estados (actualmente abrogada), que condicionaba al subsidio federal a la creación de un organismo descentralizado de carácter estatal que se denominaría Junta Local de Caminos del Estado. De esa forma se constituyeron 31 juntas, 28 en los estados y tres en los entonces territorios federales. Su organización, normatividad y supervisión quedó a cargo de la SCOP, que nombraba a su representante ante cada junta, el cual desarrollaba funciones de director general.
te. Se le puede ver de dos maneras: una catastrófica porque se distancia mucho del uso del diésel que sabemos utilizar desde hace 200 años, entonces aplicamos las mismas reglas de operación a las plantas generadoras y ya no nos da, porque tenemos intermitencia.
Mi visión es completamente diferente. Considero que la intermitencia de la que hablamos es una nueva oportunidad de negocio; en México tenemos expertos que conocen de estas cosas, saben analizar dónde conviene poner diferentes etapas de almacenamiento y de amortiguación de las intermitencias, y se puede hacer de muchas maneras. Mi propuesta favorita es usar el rebombeo en las plantas hidroeléctricas, utilizar el embalse de las hidroeléctricas, que son extraordinariamente potentes en México, como un vaso almacenador de energía, de mayor capacidad que la del propio escurrimiento que reciben. Entonces nos daría oportunidad de innovaciones.
Alejandro Morales Ramírez Aprovecho para preguntarle a Héctor López Gutiérrez. Es fascinante la obsesión del mexicano por el Altiplano; eso ya me quedó muy claro con su presentación y su breve recuento histórico. Me queda claro que el desaprovechar las tierras cercanas al mar es un desperdicio. ¿Puede usted abundar en cuál debería ser la política de largo plazo que debe adoptar el país para desarrollar apropiadamente esas regiones?
Héctor López Gutiérrez Desde que los españoles llegaron a la gran Tenochtitlan y supieron que aquí estaba el poder político y que el oro y la plata estaban en el Altiplano, decidieron que esa era la forma de desarrollar su colonia y así ha sucedido hasta la fecha; no me refiero al oro y la plata, pero sí al poder político y todas las consecuencias que eso tuvo. Sin embargo, si examinamos las políticas de desarrollo, la percepción de riesgos en inundaciones en las partes bajas ha hecho que éstas no se aprovechen cabalmente; pero si hubiéramos construido bordos en esas lagunas y sistemas muy simples de compuertas para derivar hacia esas lagunas los picos de las avenidas, tendríamos en épocas de estiaje aguas para riego, para agricultura de temporal tecnificada, incluso si las dimensiones lo permitieran, acuacultura, y en época de avenidas, pues simplemente tomar el pico de la avenida derivando hacia esas lagunas el exceso del agua.
Propuse que existiera un organismo –yo lo viví en la época que me tocó dirigir el programa de puertos industriales en el área técnica– que dependiera directamente de la Presidencia de la República para el manejo de todos estos recursos. Si se analizan las leyes existentes para regular las actividades en las regiones costeras, incluyendo los puertos, nos encontramos una verdadera Torre de Babel, por la cantidad de leyes y reglamentos. Con la creación de un comité se podrían derivar de ahí comités regionales, que permitirían hacer una planeación integrando los tres niveles de gobierno. Entonces, la creación de un comité nacional que podría estar incorporado en este órgano nacional de planeación, que se propuso, podría lograr una planeación integral y desarrollar en México una cultura marítima y costera.
Alejandro Morales Ramírez Demos paso a tres preguntas del auditorio. Roberto Guerrero pregunta sobre la gobernanza de los recursos hídricos del país, si sería posible pensar en una organización mixta. Entiendo yo que esta organización mixta se refiere no sólo a los diferentes niveles de gobierno, sino también a instancias de la sociedad civil.
Héctor López Gutiérrez Tuvimos una experiencia muy importante en el caso de los puertos; las inversiones privadas en la explotación de la infraestructura son una modalidad que no genera deudas como otras, porque si la inversión privada es en negocios, lo único que hace uno es alquilar los bienes del dominio público para que ahí se desarrollen negocios. El que está exponiendo es el inversionista privado y no se genera al gobierno la obligación de pagar la aportación que pudo haber hecho el inversionista privado.
Creo que incorporar esas modalidades facilitaría realmente la posibilidad de que tuviera éxito la participación y fuera atractiva; desde luego, con certeza legal y jurídica podría dar buen resultado.
Alejandro Morales Ramírez En relación con la sostenibilidad ambiental y la sostenibilidad social, Laura Treviño pregunta: ¿qué mecanismos podrían implementarse para asegurar que la planificación incorpore a estas dos perspectivas y no sólo a la económica?
José Luis Fernández Zayas Hay que tomar en cuenta dos cosas: una, el objetivo final es el bienestar de la población, no nada más el lucro de algunas empresas privadas o la participación de los expertos del gobierno, sino el beneficio general para toda la población; en el beneficio social es donde se fundamenta el principio del desarrollo basado en principios democráticos.
Como ya se ha dicho muchas veces, es fundamental la participación social no nada más en la planeación, sino en la gestión: estar satisfechos de que el proceso que se ha planteado se está completando, se está satisfaciendo. En la presentación que hizo el ingeniero Herrera surge muy clara la conveniencia de ver en el largo plazo y la enorme inconveniencia de seguir trabajando en el corto plazo. Lo que necesitamos es ese organismo que pueda ser asesor de los órganos reguladores del gobierno federal, pero que tenga a su cargo la supervisión del avance de las obras, del avance de los servicios, en términos de la planeación a largo plazo.
Alejandro Morales Ramírez. Octavio Arellano comenta sobre la diversificación del desarrollo a todo lo ancho del territorio. ¿Es necesario hacer una revisión profunda de los objetivos del desarrollo nacional, o podríamos pensar que estamos en la ruta y lo que nos falta es simplemente afinar mecanismos?
César Herrera Toledo Siempre hay que aprovechar lo que se ha hecho; hay que seguir adelante con lo que tenemos. No podemos, por ejemplo, desconocer el daño que hemos hecho a la naturaleza a lo largo de tanto tiempo, pero tampoco podemos estar lamentándolo o reinventar todo, sino a partir de este punto seguir adelante. Me parece que las oportunidades están aquí, vamos a tomar las cosas como vienen y seguir adelante.
Alfredo Bonín Arrieta Yo estimo que la expresión última del ingeniero Zayas es la adecuada: se debe establecer que la planeación sea vinculante para todos los órganos y todos los niveles de gobierno, de tal forma que tengamos una planeación a largo plazo de respeto.
El Plan Nacional de Desarrollo Urbano en los años setenta y principios de los ochenta establecía que el desarrollo se debía dar en un rango de elevaciones de hasta 500 metros sobre el nivel del mar, porque ahí existen los recursos tanto de agua como de tierra y la comunicación por mar, que tan claramente estableció Héctor López Gutiérrez. También establecía que el Valle de México ya no debía desarrollarse, que no se debía seguir generando y estimulando la creación de centros de trabajo y de producción, sino que debían desincentivarse. Esos planes fueron interrumpidos en la siguiente administración y ya no hubo forma de retomarlos, cuando habían estado registrados y legislados. Entonces, si no se hace un esfuerzo en este sentido, de que la planeación se respete y no cambie sexenio con sexenio, la situación no va a cambiar.
Héctor López Gutiérrez El objetivo final es asegurar el bienestar social de la población. Nuestros objetivos de planeación se pueden medir en competitividad, en factores técnicos, pero eso no asegura necesariamente el bienestar de la población; entonces, necesitamos un criterio de sustentabilidad y de mejora de las condiciones sociales. No debemos olvidar que existen alrededor de 60 etnias diferentes, muchas de ellas todavía en condiciones de subdesarrollo pero que aseguran su supervivencia y sustentabilidad con la práctica de usos y costumbres, y como no entienden los índices de desarrollo ni los factores de competitividad, se resisten a cambiar eso que les ha permitido sobrevivir. Entonces, si no desarrollamos una planeación técnica y social de largo plazo, no creo que avancemos muy positivamente en el desarrollo del país.
José Luis Fernández Zayas La idea de madurar los organismos formales con mucha participación social para vigilar que se concreten los objetivos que mencionó Héctor López Gutiérrez se ha planteado en otras ocasiones el día de hoy; es una evolución natural que está siendo bien recibida, que se aparta de manera brutal de la práctica de asignación presupuestal de México. Hay que entender que en general los políticos mexicanos –no me refiero sólo a los de los últimos pocos años, me refiero a los de las últimas varias décadas– han utilizado el recurso de la planeación para poder asignar recursos públicos a obras favoritas.
Es importante preservar la ley y observarla. En el caso de la participación del Colegio de Ingenieros Civiles de México, traigo a colación el artículo 5º constitucional, que nos da como ingenieros el poder para gestionar de la manera más inteligente nuestra profesión. En México tenemos antecedentes positivos de quienes sí gestionan bien los recursos profesionales; los médicos, por ejemplo, los que yo conozco son personas entregadas a su profesión y mantienen los mismos o mejores estándares que los internacionales.
En México estamos muy lejos de observar los estándares de planeación internacionales, y creo que ese es un reto específico para el CICM, derivado del artículo 5º constitucional y, desde luego, de la Ley General de Profesiones, que es una ley reglamentaria.
Alejandro Morales Ramírez Efectivamente, los profesionales de la ingeniería civil tenemos una responsabilidad muy importante en la planeación del futuro sostenible del país.