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La misión de la iglesia1
¿CUÁL ES LA MISIÓN DE LA IGLESIA? I
“La peor tragedia en la vida no es morir, sino vivir sin un propósito”. (Myles Munroe)
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¿Cuál es la misión de la iglesia? La respuesta a esta pregunta puede ser obvia. Sin embargo, merece una respuesta puntual: La misión de la iglesia es HACER DISCÍPULOS. No tenemos otra misión como iglesia. El cumplimiento de esta misión define, inclusive, la propia identidad de la iglesia.3
Elena G. de White destaca que “LA IGLESIA es el medio señalado por Dios para la salvación de los hombres. Fue organizada para servir, y su misión es la de anunciar el Evangelio al mundo”. 4 Jesús no nos dejó otra misión o mandato sino solo de HACER DISCÍPULOS. Predicamos y evangelizamos para HACER DISCÍPULOS. Y es que el mandato es claro: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén” (Mateo 28:19,20). El maestro Jesús va más allá del hecho de comunicar o proclamar el evangelio en su mandanto final, pues dice: “hagan discípulos”. Es un verbo imperativo. La palabra griega traducida como “hagan discípulos” es matheteúsate, de mathētēs y significa “uno que es aprendiz o alumno”.5 Parte de la misión de la iglesia es evangelizar, testificar; pero no solo es comunicar, sino enseñar, instruir a las personas.6
3 Alejandro Bullón, El discipulado de todos los creyentes (Lima: Ediciones Universidad Peruana
Unión, 2017), 18. 4 Elena G. de White, Los hechos de los apóstoles (Buenos Aires: ACES, 1987), 9. 5 Bill Donahue, Cómo liderar grupos pequeños que transforman vidas (Miami, FL: Editorial
Vida, 2009), 50. 6 R. C. Sproul, ¿Qué es la gran comisión? (Orlando, FL: Reformation Trust Publishing, 2015), 27.
No tenemos otra misión sino la de hacer discípulos
Esta es la gran comisión. No hay otra. Y esta labor es continua. Es por ello que Mateo 28:20 finaliza diciendo: “y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin de mundo”. Estas palabras, “hasta el fin del mundo”, dan a entender claramente que Jesús veía la labor que les encomendaba como algo que continuarían haciendo a lo largo de toda la historia, desde su ascención, hasta el fin de los tiempos.7 Entonces, la Iglesia Adventista del Séptimo Día nació para cumplir la misión: Hacer discípulos. Ese fue el mandato de Cristo.
LeRoy Eims ilustra esta verdad con una fábrica de zapatos que no produce zapatos, a pesar de que la gerencia ha invertido mucho dinero y muchas horas de trabajo. La planta tiene cientos y cientos de trabajadores, sus máquinas están funcionando a toda potencia, pero en dos años no han producido ni un solo par de zapatos. Cuando el gerente le pregunta al jefe del personal la razón del por qué no hay producción de zapatos, él le responde: “No hay zapatos, pero estamos trabajando mucho, hemos estado tan ocupados que todos estamos casi extenuados. Hemos estado muy activos en nuestro trabajo. La fábrica de zapatos está tan ocupada en otras cosas, pero no hace zapatos. No cumple su misión”.8
Tristemente, como ya vimos en la introducción, tenemos solo al 5% de nuestra Iglesia cumpliendo la misión a través de los estudios bíblicos. Alguien puede pedir la palabra para decir: “Pero, ¿cuál es la misión de la iglesia? No dijistes que la misión de la iglesia es HACER DISCÍPULOS?”. Si esto es así, entonces, no podemos parametrar el hacer discípulos a MINISTRAR UN CURSO BÍBLICO o DAR ESTUDIOS BÍBLICOS”. ¿Qué les parece? A fin de entender la dinámica de la misión, podríamos decir que la misión se cumple a través de tres verbos:
7 Ricardo Hussey, Peldaños del discipulado (Miami, FL: Editorial Vida, 2010),14. 8 LeRoy Eims, El arte perdido de discipular (El Paso, TX: Editorial Mundo Hispano, 2008), 63, 64.
¡Hagan discípulos!
μαθητεύσατε
Yendo Enseñando Bautizando πορευθέντες διδάσκντες βαπτίζοντες poreuthéntes didáskntes baptízontes
El verbo principal de la oración es: “Hagan discípulos o discipulen”. La pregunta es ¿cómo? Y el texto refiere: yendo, enseñando y bautizando. Entonces, se hace discípulos: (1) yendo a todas las naciones.
(2) enseñando a que guarden todo lo que Jesús ha mandado.
(3) bautizando en el nombre de toda la deidad.
¿Cómo enseñar a guardar todo lo que Jesús mandó sin usar la Biblia? Se hace discípulos cuando enseñamos la Biblia, la Palabra de Dios. Todos los dones, los talentos y el ministerio en la iglesia deben finalizar abriendo la Biblia, enseñando a guardar todo lo que Jesús pidió. La palabra todo indica que no es un estudio simple, no es un sermón evangelístico o un programa de TV, es más que eso, es escudriñar la Biblia.
Cuando la persona estudia la Biblia y cuando aprende lo que demanda Jesús en su Palabra, ella entenderá que necesita ser bautizada y el proceso continuará. Una vez bautizado el creyente, ya discípulo, reiniciará el ciclo o proceso: irá, enseñará y llevará al bautismo a otro nuevo creyente, pero la dinámica es cíclica.
LA MISIÓN DE LA IGLESIA ES HACER DISCÍPULOS
La misión de la iglesia es hacer discípulos. Tal como lo refiere Bill Hull: “Hacer discípulos tiene que ser algo enclavado en el corazón de la iglesia, pues el compromiso de la iglesia es producir creyentes que lleven fruto; estos son llamados discípulos”.9 Las tres palabras imperativas de Mateo 19 y 20 son claras: Vayan, bauticen y enseñen. No hay ambigüedades en estas palabras, como algunos quieren
9 Bill Hull, El pastor hacedor de discípulos (Grand Rapids, MI: Ediciones Berea, 2008), 49.
suponer. La palabra vayan es un imperativo circunstancial, es decir, podríamos traducirla como “mientras van”. Esto indica un estilo de vida; es un asunto diario, es acción. Si queremos ganar al mundo para Cristo, es necesario salir. Hay que dejar el cristianismo sedentario para convertirnos en cristianos de acción. ¡Por eso, me encantan las Unidades de ACCIÓN de la Escuela Sabática!
Bautizar y enseñar a otros a obedecer constituye una muy completa descripción de la labor de la Gran Comisión,10 la de hacer discípulos de manera inequívoca.11
¡Vamos Juntos y conecta2!
10 Bill Hull, El pastor hacerdor de discípulos, 49. 11 Gerson P. Santos, “Mirando a las ciudades: Transforma comunidades urbanas por medio de la plantación de iglesias”, Revista del Anciano (Julio – Setiembre 2018), 11.