2 minute read
Work life balance
¿Qué es el work-life balance y por qué es importante?*
Descuidar el work-life balance al gestionar el trabajo puede salirnos muy caro; veamos por qué. Una de las características de cómo ha ido evolucionando el contexto laboral en las últimas décadas tiene que ver con lo difícil que resulta distinguir entre la vida personal y la vida profesional. Ante esta nueva realidad, y especialmente tras la aparición de la crisis del COVID-19 y la popularización del teletrabajo, se hace más necesario que nunca tener en cuenta lo que se conoce como work-life balance. Veamos en qué consiste y algunos consejos para gestionarlo.
Advertisement
¿Qué es el work-life-balance? Tal como su nombre en inglés sugiere, el work-life balance consiste en la situación de equilibrio entre el tiempo y
los recursos dedicados al trabajo remunerado, por un lado, y el tiempo y los recursos dedicados a todo lo demás,
por el otro. Por ello, se trata de un elemento necesario tanto para saber establecer una pauta de trabajo remunerado consistente como para, a medio y largo plazo, garantizarse unas condiciones de Por TOMÁS SANTA CECILIA
Psicólogo Consultor: Master en Psicología Cognitivo Conductual.
vida capaces de aportar bienestar físico y psicológico, y en las que sea posible mantener relaciones sociales sanas y funcionales. Así, quienes disponen de un buen work-life balance no solo gestionan correctamente el tiempo que dedican a trabajar “oficialmente” las horas necesarias; además, tienen acceso a la conciliación familiar, a la posibilidad de formar parte del tejido social (mediante relaciones con amigos, vecinos, etc.) y disponen del tiempo de descanso y de ocio adecuados para ser felices. ¿Por qué es importante tenerlo en cuenta al gestionar el tiempo y los recursos? Saber establecer un buen equilibrio entre la vida profesional y la vida privada es importante por varios aspectos relacionados tanto con el bienestar de las personas como con las relaciones de poder, pero cabe destacar tres motivos.
1. Sin pautas y límites claros, el trabajo tiende a cubrirlo todo
La ley de Parkinson dice que “el trabajo se expande para cubrir todo el tiempo disponible”, y algo parecido ocurre específicamente en el contexto laboral: si no se acota claramente el tiempo que dedicamos al trabajo remunerado y se establece de antemano la cantidad de recursos que podemos gastar en él a lo largo del día y de la semana, es fácil que, sin que nos demos cuenta, se extienda cubriendo todos los ratos en los que no tenemos claro qué hacer.
2. El bienestar físico y psicológico requiere este equilibrio
Los problemas de ansiedad y el burnout laboral están entre las formas de malestar emocional más habituales en situaciones de este tipo, así como las complicaciones médicas derivadas de ese estilo de vida insano: problemas en las articulaciones por mantenernos demasiado tiempo en la misma postura, sobrepeso por no disponer de tiempo para cocinar, etc.
3. Es necesario vivir más allá de las responsabilidades
Mucha gente cree que el work-life balance consiste en gestionar el tiempo dedicado al trabajo remunerado y al trabajo en el hogar o relacionado con la crianza de los hijos. Pero esto es un error: este equilibrio debe incluir los momentos de ocio y descanso dedicados a uno mismo, así como las situaciones de relaciones sociales informales, que no buscan una finalidad concreta más allá de estar en compañía de los demás. De no ser así, cada vez estaremos más aislados.