Revista San José 2019

Obra Don Guanella

Pía Unión del tránsito de San José

Número 5 / Año 89 Septiembre/Octubre 2019

HOGAR DE ANCIANOS DON GUANELLA

Nuestro Hogar pertenece a la obra de los Siervos de la Caridad, fundada por San Luis Guanella. La casa funciona desde hace más de 70 años en la localidad de Tapiales.

La propuesta de nuestra institución responde al carisma de la congregación; nuestro trabajo busca facilitar el desarrollo físico, psíquico, afectivo y espiritual para potenciar al máximo las posibilidades de las personas mayores y acompañar su proyecto de vida.

A muchos puede sorprenderle la idea de proyecto de vida en personas de edad avanzada, pero creemos que la vida tiene sentido siempre y cada instante, tiene importancia por cómo se vive y no por la edad que se tenga.

En este caminar tenemos presente que cada persona es única y su existencia tiene un sentido profundo que nos invita a descubrir el misterio de nuestra propia existencia.

Septiembre/Octubre 2019

Año 89 N° 5 Septiembre/Octubre 2019 - Revista bimestral de la “Obra Don Guanella” Pía Unión del Tránsito de San José. Centro Nacional (Sede Central: Roma) - Av. Emilio Castro 6391, (C1408IGA Bs. As.) TeleFax (011)4642-4731 Fax. (011)4644-1984 - Reg. Prop. Intelectual N° 714733 - Para comunicarse con la Pía Unión por E-mail, puede dirigirse a: piaunionsanjose@gmail.com

EDITORIAL ¡SOLAPADAMENTE NO! Hay maneras de decir solapadamente “NO” a Dio y no caemos en la cuenta de eso.

Muchos somos especialistas en ese sen do y perdemos oportunidades, a veces únicas en la vida.

Son modos suaves de decir a Dios que no.

Por ejemplo, empleando el “después”, “luego”, “mañana”, o cualquier adverbio que hable de acción futura. Eso, en realidad es decir rotundamente: NO!

El susto de su pareja y la sorpresa de los padrinos e invitados dejaría bien claro que para todo la respuesta había sido: “NO”, sencillamente “NO”.

Así hacemos a veces nosotros con Dios.

De esto tenemos ejemplos en el Evangelio.

“Mientras iban caminando, alguien le dijo a Jesús: “¡Te seguiré adonde vayas!” Jesús le respondió…

Y dijo a otro; “Sígueme”. Él respondió: “Señor, permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre”. Pero Jesús le respondió: “Deja que los muertos en erren a sus muertos…”

Otro le dijo: “Te seguiré, Señor, pero permíteme antes despedirme de los míos” Lc 9, 51-62

J. Grida, en su libro “El ateísmo de los jóvenes” ha ejemplificado esta postura muy gráficamente: imagina que en una boda de casamiento dos novios está junto al altar del compromiso. El Sacerdote se dirige al novio y le pregunta: “¿Quieres recibir por legí ma esposa a…?”

Entonces el novio responde: “Todavía no”

Padre Sép mo Zanella

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MADRE TERESA DE CALCUTA 5 de Septiembre

(Agnes Gonxha Bojaxhiu; Skopje, actual Macedonia, 1910 - Calcuta, 1997) Religiosa albanesa nacionalizada india, premio Nobel de la Paz en 1979. Cuando en 1997 falleció la Madre Teresa de Calcuta, la congregación de las Misioneras de la Caridad contaba ya con más de quinientos centros en un centenar de países.

Pero quizá la orden que fundó, cuyo obje vo es ayudar a “los más pobres de los pobres”, es la parte menor de su legado; la mayor fue erigirse en un ejemplo inspirador reciente, en la prueba palpable y viva de cómo la generosidad, la abnegación y la entrega a los demás también enen sen do en empos modernos.

Nacida en el seno de una familia católica albanesa, la profunda religiosidad de su madre

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despertó en Agnes la vocación de misionera a los doce años. Siendo aún una niña ingresó en la Congregación Mariana de las Hijas de María, donde inició su ac vidad de asistencia a los necesitados. Conmovida por las crónicas de un misionero cris ano en Bengala, a los dieciocho años abandonó para siempre su ciudad natal y viajó hasta Dublín para profesar en la Congregación de Nuestra Señora de Loreto.

Como quería ser misionera en la India, embarcó hacia Bengala, donde cursó estudios de magisterio y eligió el nombre de Teresa para profesar.

Apenas hechos los votos pasó a Calcuta, la ciudad con la que habría de iden ficar su vida y su vocación de entrega a los más necesitados.

Septiembre/Octubre 2019 Durante casi veinte años ejerció como maestra en la St. Mary's High School de Calcuta. Sin embargo, la profunda impresión que le causó la miseria que observaba en las calles de la ciudad la movió a solicitar a Pío XII la licencia para abandonar la orden y entregarse por completo a la causa de los menesterosos. Enérgica y decidida en sus propósitos, Santa Teresa de Calcuta pronunció por entonces el que sería el principio fundamental de su mensaje y de su acción: “Quiero llevar el amor de Dios a los pobres más pobres; quiero demostrarles que Dios ama el mundo y que les ama a ellos”.

El enorme pres gio moral que la Madre Teresa de Calcuta supo acreditar con su labor en favor de “los pobres más pobres” llevó a la Santa Sede a designarla representante ante la Conferencia Mundial de las Naciones Unidas celebrada en México en 1975 con ocasión del Año Internacional de la Mujer, donde formuló su ideario basado en la acción por encima de las organizaciones. Cuatro años más tarde, san ficada no sólo por aquellos a quienes ay u d a b a s i n o t a m b i é n p o r g o b i e r n o s , ins tuciones internacionales y poderosos personajes, recibió el premio Nobel de la Paz.

En 1947, como culminación de aquella dilatada lucha liderada por Gandhi, la India alcanzó la independencia. Un año después, Teresa de Calcuta obtuvo la autorización de Roma para dedicarse al apostolado en favor de los pobres. Mientras estudiaba enfermería con las Hermanas Misioneras Médicas de Patna, Teresa de Calcuta abrió su primer centro de acogida de niños. En 1950, año en que adoptó también la nacionalidad india, fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad, cuyo pleno reconocimiento encontraría numerosos obstáculos antes de que Pablo VI lo hiciera efec vo en 1965.

En 1986 recibió la visita de Juan Pablo II. En el curso de los años siguientes, aunque mantuvo su mismo dinamismo en la lucha para paliar el dolor ajeno, su salud comenzó a declinar y su corazón a debilitarse. En 1989 fue intervenida quirúrgicamente para implantarle un marcapasos, y en 1993, tras ser objeto de otras intervenciones, contrajo la malaria en Nueva Delhi, enfermedad que se complicó con sus dolencias cardíacas y pulmonares. Pocos días después ingresó en la unidad de cuidados intensivos del asilo de Woodlands, en Calcuta, donde falleció. Miles de personas de todo el mundo se congregaron en la India para despedir a la Santa de las Cloacas. Seis años después de su muerte, en octubre de 2003, y coincidiendo con la celebración del 25º aniversario del pon ficado de Juan Pablo II, la Madre Teresa de Calcuta fue bea ficada en una mul tudinaria misa a la que acudieron fieles de todas partes del mundo. A finales de 2015, el Va cano aprobó su canonización; el 4 de sep embre de 2016, ante más de cien mil fieles congregados en la plaza de San Pedro, el papa Francisco ofició la ceremonia que elevaba a los altares a Santa Teresa de Calcuta, cuya fes vidad (5 de sep embre), incorporada al santoral católico, se celebró por primera vez al día siguiente.

Al empo que su congregación, cuyas i n t e g ra n t e s d e b í a n s u m a r a l o s v o t o s tradicionales el de dedicarse totalmente a los necesitados, abría centros en diversas ciudades del mundo, ella atendía a miles de desheredados y moribundos sin importarle si profesaban el cris anismo u otra religión: “Para nosotras no ene la menor importancia la fe que profesan las personas a las que prestamos asistencia. Nuestro criterio de ayuda no son las creencias, sino la necesidad. Jamás permi mos que alguien se aleje de nosotras sin sen rse mejor y más feliz, pues hay en el mundo otra pobreza peor que la material: el desprecio que los marginados reciben de la sociedad, que es la más insoportable de las pobrezas.”

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SEMBRANDO ESPERANZA Por: P. Dennis Doren L.C

Para mí la vida es un ideal, es una misión que tengo en mis manos y que tengo que realizar a lo largo del corto empo que pase por la erra..., por eso te invito a que reflexiones y pienses un poquito en tu vida, en tu sueño y en tu ideal...

Sé firme en tus ac tudes y perseverante en tu ideal.

Haz empo para todo y, todo lo que es tuyo, vendrá a tus manos en el momento oportuno.

Aprende a esperar el momento exacto para recibir los beneficios que reclamas.

No seas esclavo del pasado y los recuerdos tristes, aprende de ellos y proyecta tu futuro.

No revuelvas una herida que está cicatrizada.

No rememores dolores y sufrimientos an guos. ¡Lo que pasó, pasó!

De ahora en adelante procura construir una vida nueva, dirigida hacia lo alto, y camina hacia delante sin mirar hacia atrás.

Haz como el sol que nace cada día, sin acordarse de la noche que pasó.

No te detengas en lo malo que has hecho, camina en lo bueno que puedes hacer.

No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.

Deja que el amor te toque y no te defiendas de él.

Vive cada día, aprovecha el pasado para bien y deja que el futuro llegue a su empo.

Busca a alguien con quien compar r tus luchas hacia la libertad, una persona que te en enda, te apoye y te acompañe en ella.

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Si tu felicidad y tu vida dependen de otra persona, despréndete de ella y ámala sin pedirle nada a cambio.

Aprende a mirarte con amor y respeto, piensa en como en algo precioso.

Que tu alegría sea contagiosa y viva para expulsar la tristeza de todos los que te rodean.

La alegría es un rayo de luz que debe permanecer siempre encendido, iluminando todos nuestros actos y sirviendo de guía a todos los que se acercan a nosotros.

Trabajo es sinónimo de nobleza. No desprecies el trabajo que te toca realizar en la vida.

El trabajo ennoblece a aquellos que lo realizan con entusiasmo y amor.

Da valor a tu trabajo cumpliéndolo con amor y cariño y así te valorarás a mismo.

Dios nos ha creado para realizar un sueño, descubre ese sueño y descubrirás tu misión.

Vivamos por él, intentemos alcanzarlo.

No te des por vencido, piensa que si Dios te ha dado la vida, es porque sabe que tú puedes con ella.

El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino.

Tú y sólo tú escoges la manera en que vas a afectar el corazón de otros y esas decisiones son de lo que se trata la vida.

Que este día sea el mejor de tu vida para alcanzar tus sueños, realizar tu misión y te vayas de este mundo con las manos llenas.

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EL DULCE NOMBRE DE MARÍA 12 de Septiembre

El evangelista San Lucas revela el nombre de la doncella que va a ser la Madre de Dios: “Y su nombre era María”. El nombre de María, traducido del hebreo “Miriam”, significa Doncella, Señora, Princesa.

Estrella del Mar, feliz Puerta del cielo, como canta el himno Ave Maris Stella. El nombre de María está relacionado con el mar pues las tres letras de mar guardan semejanza foné ca con María. También ene relación con “mirra”, que proviene de un idioma semita. La mirra es una hierba de África que produce incienso y perfume En el libro “Mes de María” del Padre Eliecer Salesman, se explica que María en el idioma popular significa: “La Iluminadora”. (S. Jeronimo ). En el idioma arameo significa: “Señora” o “Princesa” (Bover). El significado cien fico de María en el idioma hebreo es: “Hermosa” (Banderhewer).

Incluso hay quien cree que puede significar “mar amargo”, por la situación de amargura en que vivía el pueblo de Israel.

Recuerda que muchos israelitas ponían a sus hijos los nombres que más expresaran las situaciones sociales y económicas en que vivían.

También es importante destacar que en 1683, el Papa Inocencio XI declaró oficial una fiesta que se realizaba en el centro de España durante muchos años y que es la del “Dulce nombre de María”.

Se cuenta que la primera diócesis que celebró oficialmente la fiesta fue la de Cuenca.

Pero, la onomás ca del “Dulce nombre de María” ene fecha propia, y es la del 12 de sep embre. Es bueno que sepas que hay muchas “Marías” que celebran su fiesta durante este día y no el 15 de agosto.

En el idioma egipcio que fue donde primero se u lizó este nombre significa: “La preferida de Yahvé Dios”. (Exodo 15, 20). Mar o Myr, en Egipcio significaba la más preferida de las hijas. Y “Ya” o “Yam”, significaba: El Dios verdadero -Yahvé-. Así que MAR-YA o MYR-YAM en egipcio significaría: “La Hija preferida de Dios” (Zorell).

Celebración Su belleza, amada de Dios, estrella del mar, señora y también el de iluminada. Todo depende de las múl ples interpretaciones que se hagan de las palabras que forman el nombre, tanto en griego como en hebreo.

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NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES 15 de Septiembre

L a V irgen d e lo s D o lo res es u n a advocación de la Virgen María. También es conocida como Virgen de la Amargura, Virgen de la Piedad, Virgen de las Angus as o La Dolorosa.

Su fiesta es el 15 de sep embre; su ves dura por lo normal es negra o morada.

Se la invoca en la n como María Virgo Perdolens o Mater Dolorosa y es una de los numerosas advocaciones a través de las cuales la Iglesia Católica venera a la Virgen María. La advocación (Dolores) destaca el sen miento de dolor de la madre ante el sufrimiento de su hijo.

Los “siete dolores” hacen referencia a los siete episodios de la vida de Jesucristo, relatados por

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los evangelios, que hicieron sufrir a María, quien acompañaba a su hijo en su misión de Redentor.

La devoción a la Mater Dolorosa se desarrolla a par r de finales del siglo XI. En 1239, en la diócesis de Florencia, la Orden de los Servitas u Orden de frailes Siervos de María, cuya espiritualidad estaba muy ligada a la Santa Virgen, fijó la fiesta de Nuestra Los Siete Dolores 1.

La profecía de Simeón (Lc. 2, 22' 35) ¡Dulce Madre mía! Al presentar a Jesús en el templo, la profecía del anciano Simeón te sumergió en profundo dolor al oírle decir: “Este Niño está puesto para ruina y resurrección de muchos de Israel, y una espada traspasará tu alma”. De este modo quiso el Señor mezclar tu gozo con tan triste recuerdo..

2.

La persecución de Herodes y la huida a Egipto (Mt. 2, 13-15) ¡Oh Virgen querida!, quiero acompañarte en las fa gas, trabajos y sobresaltos que sufriste al huir a Egipto en compañía de San José para poner a salvo la vida del Niño Dios.

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Jesús perdido en el Templo, por tres días (Lc. 2, 41-50) ¡Virgen Inmaculada! ¿Quién podrá pasar y calcular el tormento que ocasionó la pérdida de Jesús y las lágrimas derramadas en aquellos tres largos días? Déjame, Virgen mía, que yo las recoja, las guarde en mi corazón y me sirva de holocausto y agradecimiento para con go.

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María encuentra a Jesús, cargado con la Cruz (Vía Crucis, 4.ª estación) Verdaderamente, calle de la amargura fue aquella en que encontraste a Jesús tan sucio, afeado y desgarrado, cargado con la cruz que se hizo responsable de todos los pecados de los hombres, come dos y por cometer. ¡Pobre Madre!

Quiero consolarte enjugando tus lágrimas con mi amor.

La Crucifixión y Muerte de Nuestro Señor (Jn. 19, 17-30) María, Reina de los már res, el dolor y el amor son la fuerza que los lleva tras Jesús, ¡qué horrible tormento al contemplar la crueldad de aquellos esbirros del infierno traspasando con duros clavos los pies y manos del salvador! Todo lo sufriste por mi amor. Gracias, Madre mía, gracias.

María recibe a Jesús bajado de la Cruz (Mc. 15, 42-46) Jesús muerto en brazos de María. ¿Qué sen as Madre? ¿Recordabas

cuando Él era pequeño y lo acurrucabas en tus brazos?. Por este dolor te pido, Madre mía, morir entre tus brazos.

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La sepultura de Jesús (Jn. 19, 38-42) Acompañas a tu Hijo al sepulcro y debes dejarlo allí, solo. Ahora tu dolor aumenta, enes que volver entre los hombres, los que te hemos matado al Hijo, porque Él murió por todos nuestros pecados. Y Tú nos perdonas y nos amas. Madre mía perdón, misericordia.

Contacto con Dios Jesús está a la puerta de tu corazón. Golpea con el latido del arrepentimiento y llama con la voz de las inspiraciones, ¿te parece abrirle?

San Luis Guanella

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7 HECHOS SOBRENATURALES DE SAN JOSÉ DE CUPERTINO, conocido como el santo volador

18 de Septiembre

San José de Cuper no (1603-1663), patrono de estudiantes y conocido como el santo volador, fue bendecido por Dios con muchos milagros que él siempre atribuía a la intercesión de la San sima Virgen María.

Aquí siete sucesos sobrenaturales que ocurrieron durante su vida: 1.- Volaba por los aires San José de Cuper no caía constantemente en éxtasis y sus hermanos frailes y los fieles lo vieron “volar” en varias ocasiones. Cierto día los religiosos lo vieron elevarse hasta una estatua de la Virgen que estaba a tres metros y medio de altura y darle un beso al Niño Jesús. Luego rezó en el aire con

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intensa emoción.

El más famoso de estos sucesos se dio cuando diez obreros deseaban llevar una cruz pesada a una montaña alta, pero no lo lograban.

Entonces Fray José se elevó por los aires con la cruz y la llevó hasta la cima del monte.

2.- Exorcizaba con una frase obediente Sus superiores lo eligieron para exorcizar demonios, pero el Santo se consideraba indigno de hacerlo. Por ello usaba la siguiente frase contra los malignos: “Sal de esta persona si lo deseas, pero no lo hagas por mí, sino por la obediencia que le debo a mis superiores”. Y los demonios salían.

Septiembre/Octubre 2019 3.- Podía estar en dos lugares a la vez. El don de estar en dos lugares al mismo empo se llama bilocación. Cuentan que cuando la madre de San José estaba muriendo en el pueblo de Cuper no, el Santo que estaba en Asís lo supo. El fraile entró con una gran luz al cuarto de su mamá y después de verlo par ó a la Casa del Padre.

En Asís, sus superiores preguntaron a San José por qué estaba llorando amargamente y él les contestó que su madre acababa de fallecer.

M á s a d e l a n t e f u e ro n m u c h o s l o s q u e ates guaron que el Santo acompañó a su madre en Cuper no.

4.- Curaba con la señal de la cruz Cierta vez un hombre arrogante le dijo a San José: “impío, hipócrita, no por , pero por el hábito de religioso que llevas tengo que respetarte. Yo creería en todo lo que haces si con la señal de la cruz sobre mi llaga me sanas”.

El Santo humildemente respondió que todo lo que decía de él era cierto y haciendo la señal de la cruz sobre la llaga, el hombre quedó curado.

Asimismo hizo recobrar la vista a un ciego poniéndole su capa sobre la cabeza. Los mancos y cojos eran sanados al besar el crucifijo que San José ponía ante ellos. Los enfermos de una plaga de fiebre al sima fueron curados cuando el Santo les hacía la señal de la cruz sobre su frente.

Al día siguiente regresó el príncipe con los dos hombres y cuando el Santo elevó la Hos a en la Misa, la cruz de la Sagrada Hos a se puso negra. Esto le causó un gran dolor y llorando levitó con la forma durante unos 15 minutos. Este milagro conmovió el corazón del príncipe por lo que él y su acompañante decidieron conver rse a la fe católica.

6.- Se comunicaba con los animales: Cuando pasaba por un campo y se ponía a rezar, las ovejas se reunían a su alrededor y escuchaban atentas sus oraciones. Las golondrinas volaban en bandadas alrededor de su cabeza y lo acompañaban por varias cuadras.

7.- Profe zó el futuro de los Papas: Cierta vez lo llevaron ante el Papa Urbano VIII, quien deseaba saber si eran ciertos los éxtasis y los episodios de levitación del fraile.

San José compareció ante el Pon fice y se elevó por los aires ante el asombro de los presentes. De este Papa y de Inocencio X, el Santo predijo el día y la hora de la muerte de ambos.

5.- Leía los corazones y conver a protestante: El príncipe luterano John Federick a sus 25 años de edad fue a Asís con dos escoltas, uno católico y otro protestante. Ingresaron a la iglesia donde San José estaba celebrando Misa y en el momento de la consagración el Santo no pudo par r la Hos a Consagrada porque estaba dura como piedra y tuvo que devolverla a la patena.

El P. José empezó a llorar de dolor y se elevó a casi un metro de altura.

Al bajar, logró par r la hos a con mucho esfuerzo. Sus superiores le preguntaron por qué había pasado eso y él respondió que se debió al corazón duro de la gente que asis ó a la Misa.

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SAN PÍO DE PIETRELCINA LOS ESTIGMAS DE CRISTO 23 de Septiembre

Durante su primer año de ministerio sacerdotal, en 1910, el Padre Pío manifiesta los primeros síntomas de los es gmas. En una carta que escribe a su director espiritual los describe así: “En medio de las manos apareció una mancha roja, del tamaño de un centavo, acompañada de un intenso dolor. También debajo de los pies siento dolor”. Estos dolores en las manos y los pies del Padre Pío, son los primeros recuentos de las es gmas que fueron invisibles hasta el año 1918.

Una vez el dolor que el Padre Pío experimentó fue tan agudo, que se sacudió las manos, las cuales sen a que se le quemaban, a lo que su madre le preguntó: “Que es eso?, es que ahora también tocas la guitarra?”. El Padre se limitó a no responder. Este empo en su pueblo

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natal fue un período de grandes combates espirituales con el demonio, pero también de grandes consuelos a través de éxtasis y fenómenos mís cos, tanto interiores como exteriores, espirituales y sicos. El demonio solía aparecérsele de dis ntas maneras. Algunas veces lo hacía en la apariencia de animales, de mujeres bailando danzas impuras, de carceleros que lo azotaban e incluso bajo la apariencia de Cristo Crucificado, de su Ángel de la Guarda, San Francisco de Asís, la Virgen María, también bajo la apariencia de su director espiritual, su provincial, etc. pero después de estos asaltos del demonio, era consolado con éxtasis y apariciones de Jesús, la San sima Virgen María, su Ángel Guardián, San Francisco y otros santos.

El día 12 de agosto de 1912 experimentó

Septiembre/Octubre 2019 por primera vez la “llaga del amor”. El Padre Pío le escribió a su director espiritual explicándole lo sucedido: “Estaba en la Iglesia haciendo mi acción de gracias después de la Santa Misa, cuando de repente sen mi corazón herido por un dardo de fuego hirviendo en llamas y yo pensé que me iba a morir”.

Por siete años, Padre Pío permanece fuera del Convento, en Pietrelcina.

Naturalmente, esta vida estaba en contraste con la regla franciscana y algunos hermanos frailes se quejaron de esto. Fue entonces cuando el Superior General de la Orden pidió a la Sagrada Congregación de los Religiosos la exclaustración del P. Pío. Fue un golpe muy duro para él y en un éxtasis se quejó con San Francisco de Asís. La Congregación de los Religiosos no escuchó la solicitud del Superior General y concedió que el Padre Pío siguiera viviendo fuera del convento, hasta que estuviera completamente restablecida su salud.

El día 17 de febrero de 1916, el Padre Pío salió de Pietrelcina rumbo a Foggia, donde los superiores lo llamaron para dar un servicio espiritual. Gracias a las oraciones de Rafaelina Cerase, una señora muy enferma y cercana a la muerte, el Padre Pío puede regresar defini vamente a la vida comunitaria. Esta buena señora se ofreció a Dios como víc ma para que el Padre pudiese oír confesiones y con ello traer gran beneficio a las almas.

el Padre Guardián y su breve visita fue del 28 de julio al 5 de agosto. Durante esta visita, la salud del Padre parece haber mejorado un poco lo cual agradó al Padre Provincial y este lo mandó bajo obediencia a regresar a San Giovanni por un empo, hasta que mejorase más su salud. El Padre regresó al Monasterio del Gargano el día 4 de sep embre de 1916. En los designios del Señor, lo que en un inicio se pensó sería temporal, duró 52 años, hasta la muerte del Padre.

Sin duda alguna lo que ha hecho famoso al Padre Pío es el fenómeno de los es gmas: las cinco llagas de Cristo crucificado que llevó en su cuerpo visiblemente durante 50 años. Un poco más de un mes después de haber recibido el traspaso del corazón, el Padre Pío recibe las señas, ahora visibles, de la Pasión de Cristo.

Aunque el Padre nunca más pudo regresar a Pietrelcina, su amor por ella nunca disminuyó. Durante la Segunda Guerra Mundial, el Padre, refiriéndose a su pueblo dijo: “Pietrelcina será preservada como la niña de mis ojos”. Y antes de morir, hablando profé camente dijo: “Durante mi vida he favorecido a San Giovanni Rotondo. Después de mi muerte, El Padre describe este fenómeno y gracia favoreceré a Pietrelcina”. espiritual a su director por obediencia: “Era la mañana del 20 de sep embre de 1918. Yo estaba Padre Pío fue invitado a San Giovanni por en el coro haciendo la oración de acción de

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Pía Unión del Tránsito de San José El provincial de los Capuchinos de Foggia invitó al Profesor Romanelli, médico y director de un pres gioso hospital, para que estudiara el caso y diera su parecer. El Doctor Romanelli no tuvo la menor duda del carácter sobrenatural del fenómeno. Poco después la Curia Generalicia de los Capuchinos en Roma envió a San Gionanni Rotondo a otro especialista, el profesor Jorge Festa. Sus conclusiones fueron que “los es gmas del Padre Pío tenían un origen que los conocimientos cien ficos estaban muy lejos de explicar. La razón de su existencia está más allá de la ciencia humana”.

La no cia de que el Padre Pío tenía los es gmas se extendió rápidamente. Muy pronto miles de personas acudían a San Giovanni Rotondo para verle, besarle sus manos, confesarse con él y asis r a sus Misas.

gracias de la Misa y sen poco a poco que me elevaba a una oración siempre más suave, de pronto una gran luz me deslumbró y se me apareció Cristo que sangraba por todas partes.

De su cuerpo llagado salían rayos de luz que más bien parecían flechas que me herían los pies, las manos y el costado. Cuando volví en mí, me encontré en el suelo y llagado. Las manos, los pies y el costado me sangraban y me dolían hasta hacerme perder todas las fuerzas para levantarme. Me sen a morir, y hubiera muerto si el Señor no hubiera venido a sostenerme el corazón que sen a palpitar fuertemente en mi pecho. A gatas me arrastré hasta la celda. Me recosté y recé, miré otra vez mis llagas y lloré, elevando himnos de agradecimiento a Dios”.

Los es gmas del Padre Pío eran heridas profundas en el centro de las manos, de los pies y el costado izquierdo. Tenía manos y pies literalmente traspasados y le salía sangre viva de ambos lados, haciendo del Padre Pío el primer sacerdote es gma zado en la historia de la Iglesia (San Francisco Asís no era sacerdote).

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La palabra “es gma” proviene del griego y significa “marca” o “señal en el cuerpo”, y era el resultado del sello de un hierro candente con el cual marcaban a los esclavos. En sen do médico, es gma quiere decir una mancha enrojecida sobre la piel, que es causada porque la sangre sale de los vasos por una fuerte influencia nerviosa, pero nunca llega a ser perforación. En cambio los es gmas que han tenido los mís cos son lesiones reales de la piel y de los tejidos, llagas verdaderas como, en este caso, las han descrito los doctores Romanelli y Festa.

Actitudes interiores Observen a la abeja: de todas las flores, incluso del tomillo silvestre, toma el néctar que luego transforma en miel. Todos los temperamentos, todos los caracteres, iluminados y fortificados por la gracia, pueden dar la miel de la más bellas virtudes.

San Luis Guanella

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ÉSTO ME BASTA Anécdotas

Un piadoso musulmán rezaba todos los días ante Dios, y todos los días pedía por una gracia que deseaba que le concediese. Se colocaba siempre, para su oración, en el mismo lugar de la mezquita y, tantos años pasaron y tantas veces repi ó su oración arrodillado sobre la misma piedra que, según cuentan, las señales de sus rodillas y de sus pies quedaron marcadas sobre el mármol del suelo sagrado. Pero Dios parecía no oír su oración, ni siquiera enterarse de que alguien le pedía algo.

hasta Dios! ¿Qué más puedo desear? ¿Qué me importa no haber recibido lo que le pedí a Dios? Lo que cuenta es que Dios me oyó, que la oración me puso en contacto con Él”.

Esto es el sen do autén co de la oración.

Así concebida la oración de pe ción es casi independiente de su resultado. Yo, por ejemplo, escribe C. Vallés, sané de mi pulmonía, después de tres meses en la cama y tres meses de oraciones de mi mamá por mí. Y, en cambio, no obstante que mi mamá y yo hemos rezado Un día, por fin, se le apareció al devoto mucho, mi padre murió. musulmán, en su oración, un ángel de Dios y le En la oración no se trata de manipular a dijo: “Dios ha decidido no concederte lo que pides”. Al oír este mensaje del ángel aquel buen Dios para que se acomode a nuestros gustos hombre comenzó a dar voces de alegría, a saltar personales y cambie las leyes de la naturaleza en de gozo y a contar a todos el mundo lo que el nuestro favor. No podemos dar consejos a Dios, sino rezar convencidos, ya desde el comienzo, ángel le había dicho. que Dios nos en ende y responde, para bien, a La gente le preguntó sorprendida: “¿Y por nuestras oraciones. “Por eso les digo: todo lo que qué te alegras, si Dios no te ha concedido lo que le pidan en la oración, crean que ya lo han recibido y pedías?” A lo que él contestó: “¡Es verdad que me lo obtendrán”. Mc 11, 24. lo ha negado, pero, ahora sé que mi oración llegó

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DEVOCIÓN A SAN JOSÉ

alma; de este santo tengo experiencia que socorre en todas las necesidades, y es que quiere el Señor darnos a entender que así como le fue sujeto en la erra, que como tenia nombre de padre, y le podía mandar, así en el cielo hace cuánto le pide.

Querría yo persuadir a todos que fuesen devotos "Tomé por abogado y protector al glorioso de este glorioso santo por la gran experiencia que San José, y encomiéndeme mucho a él. Vi claro tengo de los bienes que alcanza de Dios". que así de esta necesidad, como de otras Otros santos que también propagaron la mayores, este padre y señor mío me saco con más bien de lo que yo le sabía pedir. No me acuerdo devoción a San José fueron San Vicente Ferrer, hasta ahora haberle suplicado cosa que la haya Santa Brígida, San Bernardino de Siena (que dejado de hacer. Es cosa tan grande las escribió en su honor muy hermosos sermones) y maravillosas mercedes que me ha hecho Dios por San Francisco de Sales, que predicó muchas veces medio de este bienaventurado santo, de los recomendando la devoción al Santo Custodio. peligros que me ha librado, así de cuerpo como de Una de las más fervientes propagadoras de la devoción a San José fue Santa Teresa de Ávila. En el capítulo sexto de su vida, escribió uno de los relatos más bellos que se han escrito en honor a este santo:

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Septiembre/Octubre 2019

¿ME SIENTO PREPARADO PARA MORIR? Por: P. Mariano de Blas LC.

Nos vamos a fijar ahora en los efectos que produce la muerte. Recordemos serenamente, fríamente lo que hace con nosotros la muerte. En primer lugar, la muerte te separa de todo, es un adiós a los honores, a la familia, a los amigos, amigas, a las riquezas, es un adiós a todo. Por eso, si un día tengo que separarme a la fuerza de todo, es absurdo apegarme desordenadamente a tantas cosas. Cuanto más apegado estés, más doloroso será el desgarrón. El ideal es vivir tan desprendido que, cuando llegue la muerte, tenga poco que hacer.

Aunque hubiera una sola posibilidad entre cien de morir mal, habría que tener mucho cuidado.

Tratándose del asunto más importante de mi existencia, no puedo andar con probabilidades, sino con certezas. Las máximas seguridades son pocas. Ninguno de nosotros está confirmado en gracia, ninguno de nosotros puede afirmar que no se perderá eternamente, ningún santo estuvo seguro de ello durante su vida. Mi situación a la hora de morir quedará eternamente fija, no podrá ya cambiar: me salvé, Pero lo más importante es que la muerte no me salvé. Será para siempre. determina lo que será mi eternidad. Como el La muerte, en tercer lugar, cierra el fotógrafo fija un momento concreto en una placa, así la muerte fija las posiciones del alma, y del empo de hacer méritos. Después que el árbitro lado que cayeres, izquierdo o derecho, así toca para finalizar el encuentro de fútbol, no permanecerás toda la eternidad. Ya no se podrá valen las jugadas ni los goles, se ganó o se perdió.

Lo que señala el marcador es lo que queda. Si a la cambiar nada. hora de mi muerte he ganado pocos méritos, con

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Pía Unión del Tránsito de San José esos pocos méritos me quedaré para la tú? ¿Qué es para la vida y el empo? eternidad. Quedará solo el lamentarse por no La vida, de la que tanto se habla, es uno de haber aprovechado mejor la vida, la única vida los dones que más se pisotean. Al ver cómo viven que tenía. muchos hombres, uno debe creer que odian la Tú te preparas para un examen, te vida y prefieren la muerte. arreglas para una fiesta. Para el momento del cual depende toda tu eternidad... ¿te preparas? ¿Estás preparado en este momento? ¿Estás Pianello Lario preparado siempre, o, al menos, casi siempre? ¿Podría morirme tranquilamente este día? Si no, Llegó el otoño de 1881. El ¿por qué? ¿Me siento preparado para dar ese 1° de octubre el obispo lo paso? es decir, ¿he llenado mí vida hasta este nombró vicario espiritual de momento?

Conviene no dejar pasar un solo día sin llenarlo de algo grande y bueno, de méritos, porque, de la misma manera que se me han ido de la mano tantos días vacíos o casi vacíos, se me irán en lo sucesivo, si es que no pongo un remedio eficaz.

Pero, “hay empo todavía, no hay por qué preocuparse ahora”. Eso parecería lógico, el no preocuparse, si se supiera el día y la hora. Pero no lo sabes. ¿Quién te asegura que no anda lejos?

“Ya me prepararé cuando llegue la hora...” Creo que esto es absurdo, porque hay muertes fulminantes, imprevistas, como la de los accidentes, las repen nas, etc. Hay muchas muertes en que el interesado ni se da cuenta.

Tenemos una eternidad para descansar y una vida bien breve para trabajar y hacer méritos.

An cipar las vacaciones no es bueno, porque salimos perdiendo. Si la muerte cierra el empo de merecer, entonces, mientras tenemos empo por delante, habrá que aprovecharlo y no dejarlo ir de las manos. ¡Qué poco apreciamos la vida!. Nos damos cuenta verdaderamente de lo que vale la vida en una enfermedad.

Dicen muchos que el empo es dinero.

Que se queden con el dinero. Que es placer. Que aprovechen. Para otros el empo es Reino de Dios, es cielo, es eternidad feliz... ¿Qué escoges

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Pianello Lario. Había muerto allí, pocos meses antes, el párroco Don Carlos Coppini.

El piadoso sacerdote había fundado un asilo para huérfanos, inválidos y ancianos, confiándolo a los cuidados de unas cuantas jóvenes piadosas a las que había reunido en Pía Asociación con el nombre de Ursulinas, bajo la dirección de una de ellas: Marcelina Bosatta.

Cuando, en los primeros días de julio, conoció Don Guanella la noticia de esta muerte, tuvo el presentimiento de que él estaba llamado a ser el continuador de las obras del Santo sacerdote.

Y así fue, en efecto.

San Luis Guanella

Septiembre/Octubre 2019

SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS

1 de Octubre

“Si alguno es pequeño que venga a Mí” (Proverbios 9,4). “Entonces yo fui” -escribe Teresita- preguntándose qué haría Dios con el granito pequeño que era ella. Leyendo Isaías 66, comprendió que no podía subir sola la escalera de la perfección, pero que Jesús la tomaría en sus brazos y la subiría como en un ascensor rápido.

Desde entonces Teresita no encuentra ningún obstáculo, al contrario, será pequeña y ligera en los brazos de Jesús y será santa por un camino rápido.

Su San dad Teresa, apasionada adolescente, ha decidido ser santa. En el Carmelo, cuando era postulante, escribió a su padre: “Labraré tu gloria haciéndome una gran santa”.

Pero, muy pronto, va a comprobar su debilidad y su impotencia cuando se compara con los santos. Le parecen una montaña mientras ella no es más que un granito de arena. “Mi crecimiento es imposible” piensa, pero no se desanima. Si Dios ha puesto en ella esos deseos de san dad es porque debe tener un caminito para escalar “la dura escalera de la perfección”.

La palabra de Dios le descubre el camino:

A s í c u e n t a S a n t a Te r e s i t a e l descubrimiento de “su caminito” (Manuscrito C, 2 ) . S u d e s c u b r i m i e nto e s q u e D i o s e s esencialmente Amor Misericordioso. En adelante verá todas las perfecciones divinas, incluida la jus cia, par endo de la Misericordia.

Esto conlleva una confianza audaz: “Quiero ser santa, pero siento mi impotencia y te pido, Dios mío, que seas Tú mismo mi san dad” (Acto de ofrenda).

Dejar hacer a Dios no implica ningún infan lismo fácil. Teresa hará todo lo posible para mostrar, cada día y cada minuto, su amor a Dios y a sus hermanas en una total gratuidad: la del amor. En todas las situaciones y en todos los actos de su vida Teresa aplica esta regla: Si Dios le pide algo y ella se siente incapaz de hacerlo, Él lo hará por ella. Un ejemplo: amar a todas sus hermanas como Jesús las amas le es imposible.

Entonces, uniéndose a Él, será Él quien las amará en Teresa: “Sí, lo sé, cuando soy carita va, es únicamente Jesús quien actúa en mí. Cuanto más unida estoy a Él, más amo a todas mis hermanas” ( Manuscrito C, 13 r?).

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Pía Unión del Tránsito de San José

He aquí un camino de san dad que se abre a todos, a los pequeños, los pobres, los que sufren: aceptar la realidad de las propias debilidades y ofrecerse a Dios tal como uno es para que Él intervenga en nosotros. Todo se comprende mejor cuando vemos que la frase anterior de Teresa está en las an podas de la cursilería y muy cerca de la infancia evangélica predicada por Jesús: “Jesús se complace en mostrarme el único camino que conduce a esa hoguera divina. Ese camino es el abandono del niñito que se duerme sin miedo en los brazos de su padre” (Manuscrito B, 1v?).

Sus intuiciones hacen de ella una precursora de las grandes verdades del Va cano II: primacía, sobre todas las devociones, del Misterio Pascual de Jesús, camino de san dad para todo bau zado.

Confianza en la Providencia El Señor es un Padre tan generoso que sus criaturas dona su propio Corazón a cambio del corazón humano tan pobre.

En esto reside la fuerza del principio y progreso de las Obras de la Casa de la Divina Providencia: no se cansen los Superiores de afirmarlo, y los subordinados de oírlo repetir. Con estas máximas en la mente y en el corazón, todos los miembros de la Casa deben sentirse dichosos y transparentar su alegría, porque son hijos de la Divina Providencia, de la cual agradecen la bondad.

San Luis Guanella

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ÁNGELES CUSTODIOS 2 de Octubre

Dios ha asignado a cada hombre un ángel para protegerle y facilitarle el camino de la salvación mientras está en este mundo. Afirma a este respecto San Jerónimo: “Grande es la dignidad de las almas cuando cada una de ellas, desde el momento de nacer, ene un ángel des nado para su custodia”.

En el an guo testamento se puede observar cómo Dios se sirve de sus ángeles para proteger a los hombres de la acción del demonio, para ayudar al justo o librarlo del peligro, como cuando Elías fue alimentado por un ángel (1 Reyes 19, 5.)

En el nuevo testamento también se pueden observar muchos sucesos y ejemplos en los que se ve la misión de los ángeles: el mensaje a José para que huyera a Egipto, la liberación de

Pedro en la cárcel, los ángeles que sirvieron a Jesús después de las tentaciones en el desierto.

La misión de los ángeles custodios es acompañar a cada hombre en el camino por la vida, cuidarlo en la erra de los peligros de alma y cuerpo, protegerlo del mal y guiarlo en el di cil camino para llegar al Cielo. Se puede decir que es un compañero de viaje que siempre está al lado de cada hombre, en las buenas y en las malas. No se separa de él ni un solo momento. Está con él mientras trabaja, mientras descansa, cuando se divierte, cuando reza, cuando le pide ayuda y cuando no se la pide. No se aparta de él ni siquiera cuando pierde la gracia de Dios por el pecado. Le prestará auxilio para enfrentarse con mejor ánimo a las dificultades de la vida diaria y a las tentaciones que se presentan en la vida.

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Pía Unión del Tránsito de San José Para que la relación de la persona con el ángel custodio sea eficaz, necesita hablar con él, llamarle, tratarlo como el amigo que es. Así podrá conver rse en un fiel y poderoso aliado nuestro.

Debemos confiar en nuestro ángel de la guarda y pedirle ayuda, pues además de que él nos guía y nos protege, está cerquísima de Dios y le puede decir directamente lo que queremos o necesitamos.

También se les pueden pedir favores especiales a los ángeles de la guarda de otras personas para que las protejan de determinado peligro o las guíen en una situación di cil.

Cuida tu fe Actualmente se habla mucho de los ángeles: se encuentran libros de todo po que tratan este tema; se venden “angelitos” de oro, plata o cuarzo; las personas se los cuelgan al cuello y comentan su importancia y sus nombres.

Hay que tener cuidado al comprar estos materiales, pues muchas veces dan a los ángeles atribuciones que no le corresponden y los elevan a un lugar de semi-dioses, los convierten en “amuletos” que hacen caer en la idolatría, o crean confusiones entre las inspiraciones del Espíritu Santo y los consejos de los ángeles.

Es verdad que los ángeles son muy importantes en la Iglesia y en la vida de todo católico, pero son criaturas de Dios, por lo que no se les puede igualar a Dios ni adorarlos como si fueran dioses. No son lo único que nos puede acercar a Dios ni podemos reducir toda la enseñanza de la Iglesia a éstos. No hay que olvidar los mandamientos de Dios, los mandamientos de la Iglesia, los sacramentos, la oración, y otros medios que nos ayudan a vivir cerca de Dios.

Por: Lucrecia Rego

Confianza en la Providencia El Señor es un Padre tan generoso que sus criaturas dona su propio Corazón a cambio del corazón humano tan pobre.

En esto reside la fuerza del principio y progreso de las Obras de la Casa de la Divina Providencia: no se cansen los Superiores de afirmarlo, y los subordinados de oírlo repetir. Con estas máximas en la mente y en el corazón, todos los miembros de la Casa deben sentirse dichosos y transparentar su alegría, porque son hijos de la Divina Providencia, de la cual agradecen la bondad.

San Luis Guanella

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NACIMIENTO Y VIDA FAMILIAR 4 de Octubre

Francisco nació en Asís, ciudad de Umbría, en el año 1182. Su padre, Pedro Bernardone, era comerciante. El nombre de su madre era Pica y algunos autores afirman que pertenecía a una noble familia de la Provenza.

Tanto el padre como la madre de Francisco eran personas acomodadas. Pedro Bernardone comerciaba especialmente en Francia. Como se hallase en dicho país cuando nació su hijo, la gente le apodó “Francesco” (el francés), por más que en el bau smo recibió el nombre de Juan.

En su juventud, Francisco era muy dado a las román cas tradiciones caballerescas que propagaban los trovadores. Disponía de dinero en abundancia y lo gastaba pródigamente, con ostentación. Ni los negocios de su padre, ni los estudios le interesaban mucho, sino el diver rse en cosas vanas que comúnmente se les llama

“gozar de la vida”. Sin embargo, no era de costumbres licenciosas y era muy generoso con los pobres que le pedían por amor de Dios.

Cuando Francisco tenía unos 20, estalló la discordia entre las ciudades de Perugia y Asís, y en la guerra, el joven cayó prisionero de los peregrinos. La prisión duró un año, y Francisco la soportó alegremente. Sin embargo, cuando recobró la libertad, cayó gravemente enfermo. La enfermedad, en la que el joven probó una vez más su paciencia, fortaleció y maduró su espíritu.

Cuando se sin ó con fuerzas suficientes, determinó ir a comba r en el ejército de Galterío y Briena, en el sur de Italia. Con ese fin, se compró una costosa armadura y un hermoso manto. Pero un día en que paseaba ataviado con su nuevo atuendo, se topó con un caballero mal ves do que había caído en la pobreza; movido a

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Pía Unión del Tránsito de San José compasión ante aquel infortunio, Francisco cambió sus ricos ves dos por los del caballero pobre. Esa noche vio en sueños un espléndido palacio con salas colmadas de armas, sobre las cuales se hallaba grabado el signo de la cruz y le pareció oír una voz que le decía que esas armas le pertenecían a él y a sus soldados.

Francisco par ó a Apulia con el alma ligera y la seguridad de triunfar, pero nunca llegó al frente de batalla. En Espoleto, ciudad del camino de Asís a Roma, cayó nuevamente enfermo y, durante la enfermedad, oyó una voz celes al que le exhortaba a “servir al amo y no al siervo”. El joven obedeció. Al principio volvió a su an gua vida, aunque tomándola menos a la ligera. La gente, al verle ensimismado, le decían que estaba enamorado. “Sí”, replicaba Francisco, “voy a casarme con una joven más bella y más noble que todas las que conocéis”. Poco a poco, con mucha oración, fue concibiendo el deseo de vender todos sus bienes y comprar la perla preciosa de la que habla el Evangelio.

Aunque ignoraba lo que tenía que hacer para ello, una serie de claras inspiraciones sobrenaturales le hizo comprender que la batalla espiritual empieza por la mor ficación y la victoria sobre los ins ntos. Paseándose en cierta ocasión a caballo por la llanura de Asís, encontró a un leproso. Las llagas del mendigo aterrorizaron a Francisco; pero, en vez de huir, se acercó al leproso, que le tendía la mano para recibir una limosna. Francisco comprendió que había llegado el momento de dar el paso al amor radical de Dios. A pesar de su repulsa natural a los leprosos, venció su voluntad, se le acercó y le dio un beso. Aquello cambió su vida. Fue un gesto movido por el Espíritu Santo, pidiéndole a Francisco una calidad de entrega, un “sí” que dis ngue a los santos de los mediocres.

San Buenaventura nos dice que después de este evento, Francisco frecuentaba lugares apartados donde se lamentaba y lloraba por sus pecados. Desahogando su alma fue escuchado

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por el Señor. Un día, mientras oraba, se le apareció Jesús crucificado. La memoria de la pasión del Señor se grabó en su corazón de tal forma, que cada vez que pensaba en ello, no podía contener sus lágrimas y sollozos.

A par r de entonces, comenzó a visitar y servir a los enfermos en los hospitales. Algunas veces regalaba a los pobres sus ves dos, otras, el dinero que llevaba. Les servía devotamente, porque el profeta Isaías nos dice que Cristo crucificado fue despreciado y tratado como un leproso. De este modo desarrollaba su espíritu de pobreza, su profundo sen do de humildad y su gran compasión. En cierta ocasión, mientras oraba en la iglesia de San Damián en las afueras de Asís, le pareció que el crucifijo le repe a tres veces: “Francisco, repara mi casa, pues ya ves que está en ruinas”.

El santo, viendo que la iglesia se hallaba en muy mal estado, creyó que el Señor quería que la reparase; así pues, par ó inmediatamente, tomó una buena can dad de ves dos de la enda de su padre y los vendió junto con su caballo. Enseguida llevó el dinero al pobre sacerdote que se encargaba de la iglesia de San Damián, y le pidió permiso de quedarse a vivir con él. El buen sacerdote consin ó en que Francisco se quedase con él, pero se negó a aceptar el dinero. El joven lo depositó en el alféizar de la ventana. Pedro Bernardone, al enterarse de lo que había hecho su hijo, se dirigió indignado a San Damián. Pero Francisco había tenido buen cuidado de ocultarse.

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NSTRA. SRA. DEL ROSARIO DE NUEVA POMPEYA 8 de Octubre

El culto de la Virgen nace en Pompeya, Italia, en 1876, cuando el beato Bartolo Longo recibió el mensaje de una amigo muerto años atrás pidiéndole “Salva a esta gente, Bartolo.

Propaga el Rosario. Haz que lo recen. María prome ó la salvación para quienes lo hagan”. El beato, ferviente devoto de María, comienza a difundir el culto de la Virgen del Rosario de Pompeya a par r de un cuadro que consiguió en un convento de Nápoles que hizo restaurar.

Por ese entonces (fines del siglo XIX) exis a en la zona sur de Buenos Aires un barrio llamado “de los Corrales” o “Bañado de Flores”. El mismo se había cons tuido en un verdadero basural sólo habitado por gente de muy escasos recursos y no pocos mal vivientes.

luego se encontró completamente sana.

Conocida la milagrosa cura y el voto hecho por ella, más de 5.000 personas acompañaron a la señorita Calviño en peregrinación al Santuario de Pompeya el 4 de julio de 1902.

Desde aquel día la afluencia al templo de fieles llegados de todos los ámbitos de la ciudad y sus aledaños, fue en constante aumento y ello se reflejó muy pronto en la condición del barrio.

Es la iglesia considerada más popular de Buenos Aires.

Las damas vicen nas de la parroquia de San Cristóbal comenzaron a llegar deseando extender su acción benéfica a los habitantes. Las mismas damas junto con Darío Broggi, un sacerdote italiano, establecieron en el barrio una capilla bajo la advocación de Nuestra Señora de Pompeya, la que se inauguró el día 15 de se embre de 1895 y que resultó pequeña para dar cabida a los numerosos fieles que asis an a los oficios religiosos.

Por ese entonces, vivía en Buenos Aires una joven de nombre María Luisa Calviño, la que padecía una rara enfermedad y viendo que los más eminentes médicos de su propia familia y otros no la podían curar, hizo voto de organizar una peregrinación al templo de Nueva Pompeya, si por mediación de la San sima Virgen del Rosario de Pompeya, Dios le concedía la salud.

Apenas formulada la promesa se sin ó mejor y

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SAN JUAN XXIII

11 de Octubre

“¡Oh, los santos, los santos del Señor, que por doquier nos alegran, nos animan y nos bendicen!”, decía San Juan XXIII, llamado el “Papa bueno” y cuya fiesta es el 11 de octubre. Angelo Giuseppe Roncalli, más conocido como San Juan XXIII, nació en Italia en 1881. Ingresó desde muy joven al seminario y fue ordenado sacerdote en 1904.

explicaciones de esta curación.

Oración: Dios, Padre amado, que nos diste como Santo Padre a San Juan XXIII, llamado por todos el Papa de la paz y el Papa bueno. Te pedimos Padre por su intercesión ser portadores en esta erra del don maravilloso de tu paz y ser por tanto hombres y mujeres de diálogo, comprensión y tolerancia. Ayúdanos Señor a ver a En la Segunda Guerra Mundial, siendo todos los que nos rodean como hermanos e hijos Obispo, salvó a muchos judíos con ayuda del de un mismo Dios y a buscar en todo momento el “visado de tránsito” de la Delegación Apostólica. entendimiento sin desvirtuar tu luz y tu verdad.

En 1953 fue creado Cardenal y a la muerte de Pío Queremos, como San Juan XXIII, que nos XII, es elegido como Sumo Pon fice en 1958.

Poco a poco se ganó el apela vo de “Papa Bueno” reconozca el mundo entero porque, como por sus cualidades humanas y cris anas. El discípulos tuyos, nos amamos unos a otros. mundo entero pudo ver en él a un pastor Gracias por este ejemplo de virtudes. Y unidos a humilde, atento, decidido, valiente, sencillo y todos los santos del cielo y en especial a este Papa ac vo. Se enrumbó por los caminos del bueno te suplico Padre Santo esta gracia ecumenismo y del diálogo con todos. Escribió las par cular que necesito (haga aquí su pe ción). famosas encíclicas “Pacem in terris” y “Mater et Gracias te doy de antemano, Señor, magistra” y convocó al Concilio Va cano II. Es llamado a la Casa del Padre el 3 de junio de 1963, porque al ruego de tan gran intercesor estoy bea ficado por San Juan Pablo II en el 2000 y seguro de que me será concedida. Amén. canonizado por Papa Francisco en abril del 2014.

El milagro para su bea ficación se basó en la curación de Sor Caterina Capitani, una religiosa que tenía una dolencia estomacal muy grave. Las hermanas de la paciente, que conocían de la gran admiración de Sor Caterina por Juan XXIII, oraron pidiendo la intercesión del “Papa bueno” y colocaron una imagen de él en el estómago de la paciente. Minutos después la religiosa empezó a sen rse bien y pidió comer. Más adelante, Sor Caterina relataría que vio a Juan XXIII sentado al pie de su cama y que le dijo que su plegaria había sido escuchada. La ciencia no pudo dar

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MARGARITA MARÍA DE ALACOQUE Por: P. Angel Amo

Mar rologio Romano: Santa Margarita María Alacoque, virgen, monja de la Orden de la Visitación de la Virgen María, que progresó de modo admirable en la vía de la perfección y, enriquecida con gracias mís cas, trabajó mucho para propagar el culto al Sagrado Corazón de Jesús, del que era muy devota. Murió en el monasterio de Paray-le-Monial, en la región de Autun, en Francia, el día diecisiete de octubre (†1690).

Fecha de bea ficación: 18 de sep embre de 1864 por el Papa Pío IX Fecha de canonización: 13 de mayo de 1920 por el Papa Benedicto VI En la fes vidad de San Juan evangelista de 1673, sor Margarita María, que tenía 25 años, estaba en adoración ante el San simo Sacramento. En ese momento tuvo el privilegio par cular de la primera de las manifestaciones visibles de Jesús que se repe rían durante dos años más, todos los primeros viernes de mes. En 1675, durante la octava del Corpus Chris , Jesús se le manifestó con el corazón abierto, y señalando con la mano su corazón, exclamó: “He aquí el corazón que ha amado tanto a los hombres, que no se ha ahorrado nada, hasta ex nguirse y consumarse para demostrarles su amor. Y en reconocimiento no recibo de la mayoría sino ingra tud.”

16 de Octubre

A los nueve años hizo su primera comunión y a los 22 recibió la Confirmación, a la que se preparó con una confesión general: empleó quince días escribiendo en un cuaderno la larga lista de sus faltas para leérselas luego al confesor. En esa ocasión añadió al nombre de Margarita el de María. Después, habiendo vencido las úl mas resistencias de la madre, que hubiera preferido verla casada, pudo entrar al convento de la Orden de la Visitación, fundado 60 años antes por San Francisco de Sales, ofreciéndose desde el día de su entrada como “víc ma al Corazón de Jesús.”

Las extraordinarias visiones con que fue favorecida le causaron al principio incomprensiones y juicios nega vos hasta cuando, por disposición divina, fue puesta bajo la dirección espiritual del jesuita Santo Claudio de la Colombière. En el úl mo periodo de su vida, elegida maestra de novicias, tuvo el consuelo de ver difundida la devoción al Corazón de Jesús, y los mismos opositores de un empo se convir eron en fervorosos propagandistas.

Murió a los 43 años de edad, el 17 de octubre de 1690.

Margarita María Alacoque, escogida por Jesús para ser la mensajera del Sagrado Corazón, hacía un año que ves a el hábito de las monjas de la Visitación en Paray le Monial. Había nacido el 22 de agosto de 1647 en Verosvres, en Borgoña.

Su padre, juez y notario, había muerto cuando Margarita era todavía muy joven.

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SAN JUAN PABLO II 21 de Octubre

Karol Józef Wojtyla, conocido como Juan Pablo II desde su elección al papado en octubre de 1978, nació en Wadowice, una pequeña ciudad a 50 km. de Cracovia, el 18 de mayo de 1920. Era el segundo de los dos hijos. Su madre falleció en 1929. Su hermano mayor Edmund (médico) murió en 1932 y su padre (suboficial del ejército) en 1941.

A los 9 años hizo la Primera Comunión, y a los 18 recibió la Confirmación. Terminados los estudios de enseñanza media, se matriculó en 1938 en la Universidad Jagellónica de Cracovia y en una escuela de teatro.

Cuando las fuerzas de ocupación nazi cerraron la Universidad, en 1939, el joven Karol tuvo que trabajar en una cantera y luego en una fábrica química (Solvay), para ganarse la vida y evitar la deportación a Alemania.

A par r de 1942, al sen r la vocación al sacerdocio, siguió las clases de formación del

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seminario clandes no de Cracovia, dirigido por el Arzobispo de Cracovia, Cardenal Adam Stefan Sapieha. Al mismo empo, fue uno de los promotores del “Teatro Rapsódico”, también clandes no.

Tras la segunda guerra mundial, con nuó sus estudios en el seminario mayor de Cracovia, nuevamente abierto, y en la Facultad de Teología de la Universidad Jagellónica, hasta su ordenación sacerdotal en Cracovia el 1 de noviembre de 1946.

En 1948 volvió a Polonia, y fue vicario en diversas parroquias de Cracovia y capellán de los universitarios hasta 1951, cuando reanudó sus estudios filosóficos y teológicos. En 1953 presentó en la Universidad Católica de Lublin una tesis tulada “Valoración de la posibilidad de fundar una é ca católica sobre la base del sistema é co de Max Scheler”. Después pasó a ser profesor de Teología Moral y E ca Social en el seminario mayor de Cracovia y en la facultad de

Septiembre/Octubre 2019 Teología de Lublin.

[2] y 1999).

El 4 de julio de 1958 fue nombrado por Pío XII Obispo Auxiliar de Cracovia. Recibió la ordenación episcopal el 28 de sep embre de 1958 en la catedral del Wawel (Cracovia), de manos del Arzobispo Eugeniusz Baziak.

Ningún otro Papa se ha encontrado con tantas personas como Juan Pablo II: en cifras, más de 17.600.100 peregrinos han par cipado en las más de 1160 Audiencias Generales que se celebran los miércoles. Ese número no incluye las otras audiencias especiales y las ceremonias religiosas [más de 8 millones de peregrinos durante el Gran Jubileo del año 2000] y los millones de fieles que el Papa ha encontrado durante las visitas pastorales efectuadas en Italia y en el resto del mundo. Hay que recordar también las numerosas personalidades de gobierno con las que se ha entrevistado durante las 38 visitas oficiales y las 738 audiencias o encuentros con jefes de Estado y 246 audiencias y encuentros con Primeros Ministros.

El 13 de enero de 1964 fue nombrado Arzobispo de Cracovia por Pablo VI, quien le hizo cardenal el 26 de junio de 1967.

Desde el comienzo de su pon ficado, el 16 de octubre de 1978, el Papa Juan Pablo II ha realizado 104 viajes pastorales fuera de Italia, y 146 por el interior de este país. Además, como Obispo de Roma ha visitado 317 de las 333 parroquias romanas.

Entre sus documentos principales se incluyen: 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 11 Cons tuciones apostólicas y 45 Cartas apostólicas. El Papa también ha publicado cinco libros: “Cruzando el umbral de la esperanza” (octubre de 1994); “Don y misterio: en el quincuagésimo aniversario de mi ordenación sacerdotal” (noviembre de 1996); “Tríp co romano - Meditaciones”, libro de poesías (Marzo de 2003); “¡Levantaos! ¡Vamos!” (mayo de 2004) y “Memoria y iden dad” (su publicación está prevista para la primavera de 2005).

Juan Pablo II ha presidido 147 ceremonias de bea ficación -en las que ha proclamado 1338 beatos- y 51 canonizaciones, con un total de 482 santos. Ha celebrado 9 consistorios, durante los cuales ha creado 231 (+ 1 in pectore) Cardenales.

También ha presidido 6 asambleas plenarias del Colegio Cardenalicio.

Desde 1978 hasta hoy, el Santo Padre ha presidido 15 Asambleas del Sínodo de los Obispos: 6 ordinarias (1980, 1983, 1987, 1990, 1994, 2001), 1 general extraordinaria (1985), y 8 especiales (1980, 1991, 1994, 1995, 1997, 1998

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Pía Unión del Tránsito de San José

GRACIAS A PUBLICAR Becas Sacerdotales Carlos Sandoval de Ing. Juárez- Formosa.

Colaboración para la Pía Unión

Susana Fernández de Capital Federal.

Elvira Faraldi, Flia. Villán- De Stefano, María Teresa Vida, Beba Romano, María Cris na Vallecillo, Lidia Galende, Ana Molina, Silvana Carranza.

Nuevos Inscriptos en la Pía Unión de San José en Vida Julio y Agosto 2019 Lisa de Lataire, Marcelo Lataire, Claudio Alberto Macri, Silvana Nora Carranza, Fabricio Carlo Macri, Fiorella Agos na Macri, Daniel Horacio Macri, Ernesto Hugo Carranza, Caterina Danielle, Agus na Carranza, Ramiro Hugo Carranza, Mar na Carranza, Ismael González, Alejandra Cano, Guillermo Wilson, María Virginia Demichelli, Agus na Demichelli, María Florencia Demichelli, Daniela Con ,, A lio Demichelli, Margarita Wilson, Francisco Guillermo Vallecillo, Francisco Javier Vallecillo, Ignacio Vallecillo, Margarita Tealdo, Teresa Vallecillo, Gustavo Wofcy Diez, Rosa Gladys Nicolás, Patricio Wilson, Norma Leonardi, María Cris na Vallecillo, Walter Krieger, Verónica Krieger, Nicolás González Krieger, Ignacio S lp, Alejandro Miguel Rojo, Alejandro Rojo, San ago Rojo, Horacio A. Vidal, María Teresa Vidal, Silvia Vidal, Rubén Ortega, Guillermo Vidal, Laura Vie es, Adriana Acuña, Norma Navarro, Luis Arzadum, Antonia Lanze a, Elisa Espeja, Fernando Rojo, Esther Canatelli, Jorge Pastorino, Susana Alfonso, Susana Ramona Molina, Luis Ríos, Lucas Mariano, Luciana Ríos, Isolina Ponce, Mari Almirón, Mónica Ca aneo, Teresa Macias, Adriana Russo, Cris na Traszorras, Silvia Porta, Oronzio Cafarelli, Elsa López, Luciano, López, Estrella de López, Fermín Díaz, Delia de Díaz, Susana Portas, Diana Montañana, Jorge Bassano, Delia Polo, Eduardo Lamas, Beba Romano, M. Laura Lamas, Hernán Petrillo, Alejo Petrillo, Joaquín Petrillo, Eduardo Mar n Lamas, Camilo Lamas, Andrés Lamas, Daniela, Rosita Romano, Alberto Rima , Romina Rima , Guido Rima , Guada Rima , Tony Romano, Alicia Lamas, Carlos García, Mariana García, Mariela García, Pablo García, Susana Pérez, Osvaldo Álvarez, Daniela Seco, Mariana Seco, Facundo Álvarez, Rodrigo Álvarez, Emiliano Álvarez, Rosita Palombo, Carlos Eisemberg, Alejandra Iglesia, Guillermo Rimoldi, Mariángeles Rimoldi, Adriana Notario, Carlos Rusconi, Viviana Solari, Emilio Palferro, Susana, Carlos Gorostegui, Silvia Limardo, Claudio Lijden, Cecilia Lijden, Claudia Lepore, Silvia Ferrio, Raquel Rivas Pablo Romero Lamas, Norma Robbio, Juan Carlos Robbio, Olga Fenos, Tony Fenos, Marta Tirri, Mariela, Lina, Graciela Alanís, Nicolás Vázquez, Alfredo Scalzo, Nidia Vanesa Scalzo, Beatriz Noemí Scalzo, Cecilia Lorena Scalzo, Gustavo Alfredo Scalzo, Mariela Galende, Juan Carlos Galende, Yakelin Galende, Vanesa Galende, Héctor Amarfil, Alicia Ocampo, Oscar Reina, So a Scalzo, Nicolás Scalzo, Luciana Scalzo, Mariela Balbi, Valeria Pastor, Gonzalo Panessi, Julio Alcides Panessi, Nahuel Panessi, Antonia Panessi, María Sol Panessi, Cris na Lara, Lucas Durán, Antonio Sánchez Prieto, Mercedes Ignacia Galende, Margarita María de la Cruz Galende, Carlos Sánchez, Carlos García, Horacio Amaya, Camila Rosario Amaya, Liliana Aurora Lo S molo, Andrés Francisco Lugano, Andrés Lugano, Adelina Lugano, Roberto Andrés Orlando, Ines Maisterrena, Eliseo Maisterrena, Juan Cruz Maisterrena, Fermín Maisterrena, San ago Maisterrena, Amelia Krieger, Hipólito Krieger, Catalina Krieger, Daiana Baque.

Inscriptos en la Pía Unión de Sufragios (Rezamos por el descanso eterno) Julio y Agosto 2019

Domingo Mobrici, Juana Grillo, Urbano Carlos Carranza, María Micaela Ayastuy, Eduardo Estevan, Florinda Carranza, Urbano Carranza, Isidro Ayastuy, Florinda Bonelli, Josefa Oña via, Pascual Macri, Palmira Massaro, Francisco Vallecillo, Concepción Vallecillo, Manuel Vallecillo, Alfredo Rodríguez, Raúl Wofcy Diez, Alejandra Lamber ni, Celes no Traba, Eduardo Vallecillo, Roberto King, Mónica Whelan, San ago Whelan, Saro Cacciola, Olga Cacciola, Patricia Cacciola, Gladys Cacciola, Alicia Ravera, Romero Ravera, Ricardo Cuesta, Roberto Díaz, Ángela Díaz, Elina Banfi, Horacio Vidal, Roberto Oscar Rojo, Roberto Rojo, Alicia Pla, Celina Pla, Omar Pla, Teresa Electra Vidal, José María Vidal, Cheza Vidal, Andrés G. Vidal, Guillermo Vidal, Raimundo Córdoba, Beba Pla, Esther de Espeja, Lorenzo Espeja, Margarita Fontana y Flia., Isidora Valenzuela, Sara Aldama, Daniel Ponce, Agus n Aniello Acquavella, Fortuna Arlia, Enrique Acquavella, Oscar Acquavella, Luis Acquavella, Lelia Mármol, Susana Navone, Zulema Acquavella, Raúl Eugenio Bertoni, Lucia Vendi o, Juan Carlos Pedro Bertoni, María Rosa Cayetana Bertoni, Lucia Concepción Bertoni, Oscar Imizcoz, Jorge Portas, Liliana de Portas, Raúl Miguel Bertoni, Ángela Acquavella, Carlo Massari, Mabelita Gorosito, Josefina Chiarelli, Tranquilina Spínola, Alejandro Acquavella, Hilda, Virgilio Romano, Luisa Lepore, Camilo Pérez, Mangui, Elvina, Francisco Lepore, Josefina Aquino, Roberto seco, Horacio Bennazar, Emiliano Lijden, Agus n Agüero, Cris na Roca, Antonio Romano, Rosa, Isabel Polo, Lidia Polo, Franco Aquino, Eduardo Lamas, Pochi, Bety Buela, Antonio Manuel Galende, Petrona Muñoz, Ida Rosa D´Ingirna, Ramón Pérez, Nelly Beatriz Kindsvater, María Patricia Maisterrena, Haydee, Antonia Filomena Facciuto, Héctor Abel Hernández.

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5 RAZONES PARA SER SACERDOTE Dar Pan de Vida Llevar esperanza Perdonar los pecados Sanar enfermos No hay lógica humana, sino amor divino

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