Trastornos de la alimentación por subalimentación o por sobrealimentación y su prevención
cuáles son las limitaciones fisiológicas, etc. Se le pide al sujeto que comience a registrar sus pensamientos, sentimientos y conductas sobre su apariencia en diferentes situaciones de su vida. Segunda fase: ajustar la auto-perfección. Se busca que el sujeto adquiera una visión realista de su cuerpo y para ello se pueden utilizar técnicas de autoobservación y comparación social con otras personas, medidas de autoajuste perceptivo, etc. Tercera fase: pensamientos sobre el cuerpo. El objetivo es la identificación de creencias y pensamientos que se tiene sobre la propia imagen y comprobar hasta qué punto son irreales y perjudiciales. Se trabaja con reestructuración cognitiva. Cuarta fase: Sentimientos sobre el cuerpo. Deben sacarse a la luz los sentimientos negativos que provocan la percepción o pensamiento sobre el cuerpo o sobre el defecto en cuestión, en nuestro caso la falta muscular. Se trabaja con desensibilización sistemática. Quinta fase: Comportamientos referentes al cuerpo. El objetivo es identificar que conducta relacionada con el cuerpo y el defecto imaginado es desadaptativa. Por ejemplo, conducta de evitación de situaciones sociales para que la gente no vea lo poco musculoso que es o practicar deporte de forma compulsiva para conseguir que su defecto desaparezca. Después de identificarlas las técnicas de cambio pueden ser contratos conductuales, preparación para la exposición, economía de fichas, etc. Sexta fase: prevención de recaídas. Entrenar al sujeto en cómo identificar situaciones de riesgo y cómo poner en práctica las estrategias aprendidas en la terapia. Otros dos grandes objetivos a tener en cuenta a parte de la imagen corporal son: Analizar y reeducar la dieta inadecuada, excesiva en cantidad o fundamentada exclusivamente en productos artificiales. 63