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Octubre (Октябрь)
Sergei Eisenstein
Sobiet Batasuna 1928 103 min Zuzendaria: Sergei M. Eisenstein Gidoia: Grigori Aleksandrov, Sergei Eisenstein Musika: Edmund Meisel Antzezleak: Vladimir Popov, Vasili Nikandrov, Layaschenko
La película “Octubre” (Октябрь) fue realizada en 1925 en conmemoración del décimo aniversario de la victoria rusa bolchevique. El film, está claramente estructurado en cinco partes que van siguiendo cronológicamente los hechos acontecidos durante la revolución bolchevique de Octubre de 1917. Comienza con una introducción previa al estallido de la revolución rusa, continúa con la llegada al poder del gobierno provisional, para luego después mostrar el avance del general Kornolov y la puesta en marcha de la revolución, y finalmente acabar con el triunfo de los bolcheviques y su posterior división en dos facciones. Octubre tiene el enorme valor de no ser una reproducción documental, sino la fiel recreación de principio a fin de los acontecimientos históricos, a través de la reconstrucción de los esquematismos sociopolíticos e históricos de la época. Constituye un reflejo insoslayable de un tiempo turbulento y el firme pulso político de un pueblo. En la película de Eisenstein no hay personajes principales. Sus narrativas trataban de evitar el individualismo e iban, en cambio, dirigidas a cuestiones más amplias de la sociedad, especialmente a los conflictos de clases. Sergei Eisenstein es uno de los realizadores rusos mas destacados de su época, sino él más, en ese periodo de esplendor para el cine ruso que fue la etapa muda por aquellos años. La habilidad de Eisenstein y su experiencia se ve en los rápidos movimientos y en el ritmo en el montaje, así como en la construcción de intensas secuencias, siendo además pionero en el uso de la edición en el cine. El director de “La Huelga” y “El Acorazado Potemkin” fue un revolucionario para su época y lideró una corriente pensadora en su país donde impuso modas, estéticas visuales y técnicas narrativas, mediante sus ensayos y escritos acerca de concepción del arte de dirigir y de la cinematografía como expresión artística máxima.
Sergei Mikhailovich Eisenstein (1898-1948) zuzendariak Arkitektura eta Arte Ederrak ikasi zituen, eta 1917ko urriko iraultzan herri milizietan sartu zen. 1920ean Langileen Antzokian sartu eta zuzendari izendatu zuten. Antzerkitik aldendu zen 1924ean,”Greba” bere lehen filma grabatzeko. 1925ean iraultzaren jatorria oroitzeko film mutua egin zuen,”Potemkin korazatua” izeneko bere maisu lana. Bere lanen artean hauek azpimarra genitzake: - “Greba” (1925) - “Potemkin korazatua” (1925) - “Urria” (1928) - “Lerro orokorra” (1929) - ”Gora Mexiko!” (1931) - “Ivan Izugarria” (1994)
La Revolución de Octubre de 1917, un intento de asaltar los cielos La Revolución Soviética ha sido uno de los acontecimientos más importantes en la historia de la humanidad. Aunque no es la primera revolución de trabajadoras y trabajadores en la historia, sí fue la primera que triunfó de manera decisiva. Bebiendo de un acontecimiento sucedido menos de 50 años antes, la Comuna de Paris de 1871, y de luchas de siglos, en Rusia se consiguió dar la vuelta a un sistema cuasi feudal para instaurar un estado de la clase obrera y campesina. Fue objeto de inmensas esperanzas y en aquel momento supuso un faro para todas las luchas por la justicia en el mundo. Previamente, en 1905, había habido un alzamiento revolucionario que fue truncado y acabó en una gran masacre por parte del gobierno zarista. Fue el primer intento de establecer soviets o consejos de gente obrera y campesina en Rusia. El gran cineasta S. M. Eisenstein retrató una parte de esos acontecimientos en El Acorazado Potemkin, esa obra maestra sobre la que más se ha escrito en la historia del cine. En realidad era parte de un proyecto de ocho capítulos que no llegó a completarse. Aunque en el imaginario popular la Revolución de 1917 parece un suceso histórico puntual, en realidad fue un proceso de largas luchas de muchos años de duración. Iniciada en febrero de ese año según el calendario juliano entonces vigente (marzo de nuestro calendario actual, el gregoriano) como una revolución interclasista, culminó en una segunda fase más radical en octubre, aunque se encontró con una dura oposición por parte de sectores de la burguesía y grandes propietarios que desencadenaron una dura guerra en la que finalmente triunfaron los bolcheviques tras dos años de lucha. No fue un camino fácil constituir el primer estado obrero de la historia. Un gran cronista de la época, el norteamericano John Reed, plasmó este acontecimiento de ma-
nera magistral en su obra maestra Diez días que estremecieron al mundo, que sirvió también de inspiración a Eisenstein para realizar Octubre. Sin embargo ya desde los años 20 se apartó a la disidencia, como en la dura represión del alzamiento de los marinos de Kronstadt que se levantaron para defender los soviets frente al llamado centralismo democrático o el aplastamiento de la revuelta anarquista de Nestor Makhno en Ucrania. Fue el principio de un larga lista de políticas Historian izan diren represivas y sectarias iraultzen memoria que condujeron a largo plazo a su fracaso. lapurtu digute. Gaur Pero también es cierto que durante los años que duró esa experiencia, más de 70, se lograron grandes avances de los derechos de las mujeres y los hombres y se realizó una experiencia que se enfrentó al capitalismo. Hoy día la memoria de grandes revoluciones anteriores nos la siguen robando.
egun matxinadak edonon sortzen ari dira eta gehienbat noraezean. Beraz, inoiz baino beharrezkoa dugu aurretiko esperientziak berreskuratzea, beraien erroreetatik ikastea, haien sektarismoak saihestea eta arrakastak errepikatzea. Horrela gure borrokeek ere etorkizun handiagoa izango dute.
En estos días convulsos que surgen alzamientos por doquier, generalmente sin dirección precisa, recuperar experiencias previas es imprescindible. Aprender de sus errores, evitar sus sectarismos e intentar repetir sus aciertos nos ayudará a poder sacar más partido de nuestras luchas actuales.