Diseño de Portada: Carlos Veiga Maquetación y Tratamiento de texto: Jenaro Vázquez Corrector: Rubén Rey Primera Edición: Junio, 2010 Editorial PICA Galicia
Si tienes interés en adquirir el libro encuadernado (edición en blanco y negro), contacta a través del telf. 687 977 790, o bien por medio del correo electrónico luisalbertoreylama@gmail.com Costo del libro, 27 euros. Entrega inmediata. Luis A. Rey Lama, enero 2010
Mi eterno agradecimiento a ADĂ N y a EVA, por descubrir el baloncesto.
A Carlos, a Juan, a Pardo, a Tati, a JosÊ Carlos, a Israel‌ y a todos los que se han ido recientemente.
- Luis, ¿me quieres explicar a qué viene este título tan
extravagante que le das a la nueva charla que aquí comenzamos? - Pues sí, te lo explico. Hay varias razones. “La primera: Mantenerte antenerte en tensión para que me atiendas desde el principio, como si estuviéramos en una sesión de entrenamiento real, con toda la inten intensidad necesaria, con absoluta concentración, con el máximo interés… ¿De acuerdo?... ¿Y qué pasa? ¿Te intriga el porqué qué del título?” “La segunda: Dar ar respuesta a un amigo que me lo p planteó con muy mala idea: “Tú que presumes de saber tanto de baloncesto, ¿seríass capaz de contestarme a este acertijo?:
¿Quién lanzó una manzana a la cesta que colgaba del árbol?”. Y de primera mera intención no lo conseguí. Necesité mi tiempo para dar con la respuesta. respuesta.” “La tercera: Una vez encontrada la respuesta, me parece interesante que se dé a conocer conocer, y por eso la expongo, para que todos sepamos dónde están los orígenes de nuestro baloncesto.” orque está están de moda los títulos largos, con “La cuarta: Porque frases que conllevan un signif significado insidioso, intrigante, misterioso, sorprendente… incluso absurdo. Hoy en día, sin utilizar un título rimbombante de este estilo, no se consigue despe despertar el más mínimo interés en el lector. Además, su atención se verá incrementada con esa pregunta nta tan sustancial que se plantea, con mucho meollo, llo, para mentes inteligentes como deben tener las gentes del baloncesto.” “¿Qué te parecen las razones? razones?, ¿Son suficientes?” - Si tú lo dices.
Pero de todas formas, en este inicio de conversación me encuentro algo aturullado, turullado, me cuesta comenzar la charla… Y es que tengo tantoss temas pendientes que relatar relatar, que aún no estoy muy seguro de que esta nueva tertulia resulte suficiente suficiente. Si ocurre esto, no o importa, ya nos ccitaremos otra vez a fin de continuar el relato. Para hablar de baloncesto siempre tendremos todo el tiempo del mundo… … ¿o no? Por otro lado, tengo que confesar sin rubor que el título de esta charla no responde a otra intención que no sea actualizar la imagen de esta nueva velada velada. Con ello, por nada del mundo pretendo hacer un descubrimiento histórico, ni tampoco un planteamiento filosófico, ni nada parecido. Simplemente, lo que ocurre es que sii la hubiese bautizado con el nombre de “Basket-2”, o “Del tiro de palangana al mate”, o “Bandejas y triples”, o “Botes de balón”, o “Un balón sobre el aro”, o “Vuelo hacia la caos en una nasta”… caeríamos aburrida normalidad. En n tiempos de la famosa trilogía de Lars Larsson, todo lo que no tenga como título una frase larga, que ofrezca dudas ya de partida, que intrigue al lector por lo inusual, que sorprenda por su extravagancia… poco tiene que hacer. En este caso, adornando aún más el estilo, hasta lleva un interrogante, nos preguntamos algo…
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CAPÍTULO I
LA PRESENTACIÓN DE
“Del patio al “siguing”
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Fue la primera persona en llegar. “Supongo que contarás
lo de Castellón…” “Pues… No sé, Margarita.” “¿Y lo del tren de Valladolid?“ “Tampoco.” “¿Y lo de “las Marías” de Santiago?” “No me acuerdo.” “Entonces Luis, ¿qué coño cuentas en el libro?” Margarita Aldazábal, jugadora del Estudiantes de los años cincuenta y sesenta, era -lo sigue siendo, doy fe- alta, esbelta, guapa, simpática, insinuante con la mirada; coqueteaba hasta con el viento y conquistaba al público masculino allá por donde íbamos. En el plano técnico, hacía con brillantez la rueda de calentamiento. Imponía por su porte en las fotografías, y animaba con especial arte desde el banquillo. Resumiendo, se trataba de una de esas jugadoras que no deben faltar nunca en un equipo: la alegría de la casa, la risa que serena el mal momento, los nervios que se curan a carcajadas… Yo no sabía nada de baile, y mucho menos “por bulerías” o “soleares”… Os juro que en Castellón hice pareja con Margarita hasta bailando “rumbas flamencas”… y el equipo de Sevilla nos aplaudió a rabiar…
“¿Me llevas a tu habitación?”, le susurró al oído a mi compañero de cuarto a media tarde. Estábamos alojados en una residencia de vacaciones de Educación y Descanso -organización franquista, según el régimen, al cuidado de los trabajadores-. La célebre Sección Femenina -organización franquista, según el régimen, al cuidado de las mujeres-, gestionaba todos los campeonatos deportivos femeninos del país. Para aprovechar las habitaciones, y reducir gastos, los entrenadores de los distintos equipos solíamos compartir cuarto. Mi colega andaluz, encantado de la vida ante la propuesta, se fue raudo al aposento, acompañado por Margarita. Ésta llegó, se dispuso a hacer la “petaca” en mi cama, se encontró con que ya estaba hecha, y… el sevillano acabó con una decepción total. “Pero que se creía el “guaperas” éste.” Cada vez que lo veíamos en el comedor o por los pasillos, nos tapábamos la cara para disimular la risa. Cosas de Margarita.
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Don José Nistal, nuestro presidente del Estudiantes, hombre bre de peso y de algunos años, acompañó durante muchas temporadas poradas al equipo femenino. En una Fase de Sector en Santiago,, la Sección Femenina nos alojó en una Casa de Maternidad. “Señor Nistal, cuando nos vean salir de aquí en manada, nos van a señalar: “Ahí Ahí vienen las preñadas.” La ocurrencia de Margarita fue recibida con risot risotadas… “Y lo peor, señor Nistal, es que le van a echar a usted toda la culpa.”…
José Nistal, presidente del Club Estudiantes de Vigo, y acompañante fiel del equipo femenino en todos sus desplazamientos. s. Testigo presencial de los sucesivos ascensos a Segunda y Primera División, sería persona decisiva en la conversión del conjunto estudiantil en Real Club Celta.
Por aquel entonces -Santiago, Santiago, años 60 60-, eran famosas “las dos Marías”. Con frecuencia se las veía paseando por las calles principales de la ciudad y por la céntrica Alameda Alameda, ataviadas de forma estrafalaria.. A la ho hora del vermut aparecían las dos hermanas cogidas del brazo, con sus pelos exuberantes, pint pintarrajeadas por todos los lados,, vestidos chillones, tacones altos, bisutería abundante y arrogan gantes ademanes de princesas. Con todo ello, su paso por las rúas com compostelanas era acogido con respeto por los santiagueses. Su fragilidad mental no constituía motivo de risas; intocables, parecían convertidas en personajes tradicionales de la capital… … y la tradición en Santiago m manda mucho. Pues bien, al día siguiente de la llegada del Estudiantes a la ciudad dad del Apóstol, algo pasadas las doce de la mañana, Ma Margarita Aldazábal, dazábal, ataviada de “tercera María”, se disponía ya en la acera a darse el paseo aseo reglamentario que “sus dos hermanas” acostumbraban a realizar. Menos mal que el señor Nistal se lo prohibió contundentemente… tundentemente… porque si no, la historia podía haber registrado do el nacimiento de la tercera de “las Marías”… Por cierto, Margarita lucía espléndida en el papel.
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“¡Mar-gari-tá! ¡Mar-gari gari-tá! ¡Mar-gari-tá!”... Coreaban sus admiradores en Santiago, Castellón, Vallado Valladolid, Madrid… Y cuando salía y cogía el balón, la expectación y el jaleo del público se hacían notar… Y no digamos si metía una canasta… la grada se venía abajo. En su última temporada en el Estu Estudiantes, nos proclamamos campeoness de España de 2ª División y ascendimos a Primera. Ella era una “jugadora ta talismán”: “Son jugadoras nece-
sarias… imprescindibles, diría yo.”
Margarita Aldazábal Aldazábal, temporada 1963/64
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En el acto de presentación de “Del patio al “siguing”, y tras los discursos en que se mencionaba el tema, Julio Castro se me acercó. Algo no le había gustado. ¡Claro! ¡Con toda la razón! “¡Nosotros ascendimos a División de Honor en 1957 1957!”, y enseguida nos enseñó los documentos acreditativos. “Esa copa del
Estudiantes que exponéis ahí hí sobre esa tarima… ¡lee, lee!... es de “Subcampeón de España d de Primera”, y ese título nos daba derecho al ascenso a División de Hon Honor. En esta fotografía puedes ver la recepción que nos hizo el alcalde Pérez Lorente. Nos ofreció terreno -en en donde hoy se ubica el Concello Concello- para que, por nuestra cuenta, construyéramos un peque pequeño pabellón cubierto, exigencia ineludible para partici participar en la máxima categoría. Tuvimos que renunciar. De aquella aquella, en División de Honor sólo había seis equipos: Real Madrid, Barcelona, Orillo Ve Verde, Aismalíbar, bar, Joventut de Badalona y Estudiantes de Madrid. Con el Español de Barcelona y nosotros se ampliaba la Li Liga a ocho clubs.”
Año 1957. Recepción en el Ayuntamiento de Vigo. El alcalde Pérez Lorente recibe al Club Estudiantes diantes de Baloncesto, que se acaba de proclamar Subcamp Subcampeón de España de Primera, título que conllevaba el ascenso a División de Honor. Joaquín García ía Picher, el capitán, le muestra el trofeo al alcalde. A la izquierda, Benito y Julio Castro; al fondo, Gonzalo y Carlos Cerdeira; a la derecha, el doctor Soneira, presidente de la Federación Gallega Zona Zona-Sur.
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El Estudiantes es recibido por los aficionados a su regreso a Vigo. Entre aplausos, Julio Castro exhibe en la puerta del autobús el trofeo conseguido en Madrid. Al fondo, el desaparecido edificio Rubira.
Diario “Marca” “Marca”, 16 de Mayo de 1957.
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A principio de los años cincuenta -recuerda Julio Castro-, comenzaba en el arbitraje un común amigo amigo. Parece ser que en sus inicios no caía demasiado bien a un sector del baloncesto vigués, a buen seguro, “caciquillos” intocables del momento. Eran gentes del Juventus y de Acción Católica, con probable influencia en la prensa local. A través de ella, un conocido abog abogado, valiéndose de “Enceste” -comentarista comentarista de un diario diario-, atacaba a menudo al colegiado.. La cosa debió llegar a mayo mayores, al borde posiblemente de la injuria, de tal forma que al acabar un par partido, el árbitro se fue a por el abogado abogado, y le propinó un formidable castañazo. do su condición profesional, preEl letrado, esgrimiendo sentó denuncia en el juzgado.. El juez san sancionó a nuestro amigo con una multa de cinco duros ros -veinticinco pesetas-. Una vez satisfecha, le envió un recado persuasivo por “Enceste”: “Tu amigo
que se ande con mucho cuidado, que ahora ya sé cuánto me cuesta meterle una hos...”
Campo de Taboada Leal, 1958.. Altercado grave en un Bosco-Estudiantes. Los árbitros Paco Nistal -con el balón- y Borrajo intentan poner orden. El bosquist bosquista Rolán separa a José Luis Quirós y a Ángel Román; Severo se lleva a Cerdeira de la refriega; y Benito agarra a Boliche para que no entre en conflicto. Con el jugador nº 12 del Bosco no va la guerra. El público a rebosar. ¡Eso sí que era ambiente!
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Víctor Posada, dirigente del Club Juventus durante los años cincuenta, y funcionario de Renfe, había oído hablar de los campos de ceniza que utilizaban los catalanes. Y así, ni corto ni perezoso, se hizo con los residuos del carbón usado en las antiguas máquinas del tren, depositados cerca de los talleres de la estación, y alfombró el campo po de A Barxa con este “moderno” material. Nos comentaron que los jugadores salían en ennegrecidos por todos los lados cuando acababan los partidos. Pero no qu quedaba ahí la cosa. Julio Castro nos relató con minucioso detalle lo que ocurría rría cuando empezaba a llover: se ponían tan negros con la ceniza de carbón,, que el árbitro ni distinguía si el jugador era de un equipo u otro. Era una auténtica fiesta de negros: diez jugadores negros, dos árbitros negros, doce pares de botas negras, un balón negro… la cosa se ponía muy negra para continuar el partido. ¡Mucho había que agudizar el ingenio por ento entonces para hacerse con un buen terreno de juego juego!
Campo de Taboada Leal, 1952. Pareja arbitral de lujo lujo, Víctor Posada y Paco Nistal. Ambos escribieron de baloncesto en “Faro de Vigo” y “El Pueblo Gallego”, respectivamente.
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La presentación de “Del patio al “siguing” en Baiona fue un acto, sobre todo, singular, de esos que difícilmente se pueden repetir. Bonito… más que bonito, emotivo diría yo. Entrañable, cercano, con más de doscientos asistentes, divertido por momentos, nostálgico en otros, emocionante para algunos que no se veían desde hacía tiempo y con una curiosa mezcla de edades. Julio Bernárdez, en su acertado discurso de presentación, pregonó que mi libro era un caos. La respuesta de los presentes, variopinta y simpática, certificó de largo sus palabras y la intención clara del autor: charlar de baloncesto, de cualquier baloncesto, tan legítimo el de ayer como el de mañana, tan auténtico el del campeón como el del último clasificado, tan meritorio el de las figuras consagradas como el del esforzado niño del minibasket… Baloncesto en estado puro. Araceli, Merche, María Rita, Mayca, Elena, Emilia, Purina, Ana… pudieron ver a sus maridos, tristemente ausentes, en las imágenes que adornaban el acto. Ellas: Maribel, Sole, Carmela, Gemma, Rosa… también estuvieron. La presencia en el aire de tantas y tantos, entre triste y alegre, se dejó sentir. Nos faltan demasiados, demasiadas… pero al menos queda vivo su recuerdo, siempre próximo en la gran familia y permanentemente activo en la historia nuestra. Y acudió Carlos Davila, uno de los tres fundadores del Estudiantes en los años cincuenta; Josechu Curiel, el superman vigués, internacional en cinco deportes; Julio Castro, jugador famoso en los cuarenta y cincuenta, mi entrenador, mi maestro; Hortensia, Margarita, Purina… las “niñas” de Luis; Amparo, Susana, Mary Carmen… las “niñas” del Celta; Enrique Lloves, del histórico Club Independiente; José Luis Rodríguez, del Bosco y del Manuel Álvarez, compañero primero, férreo marcador después, “Vengo a marcarte”, me dijo al llegar; el gran “Mani”, rival del Bosco y Xuventude, entrenador de mis hijos, fraternal amigo; María, Pit, Belén, Esther, Eva, Ana Ruth, Carmen… mis “otras niñas” de Baiona; Carlos Núñez, el alma del Ademar durante medio siglo, “Vienes a casa a comer y te cuento”, me citaba para julio; Alberto, Ángel, Marcos, Rubén, Alvarellos… la esencia del Rodaballo; “los Fiorucci” Rubén Marín y Fernando, buena gente;
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Ismael Pérez Izaguirre, la exuberancia verbal, la simpatía, la ocurrencia, la amistad; Suso Cobián, el jefe del Andersen, y menos jefe del Xuventude, alero del Ademar y del Bosco, hermano del estudiantil Pololo; Juan José Camba, fiel escudero de García Hermida en los ochenta; mi compañero de siempre, Rafa Tapias; mis alumnas de la escuela de Baiona, Lara, Cristina, Uxía, María, Raquel; también los chicos, Pablo, Alberto, Rubén, Daniel; los bosquistas Nacho Arroyo, Jose Fandiño, Curty -compañero mío en el Estudiantes-; Marisol Paíno, Pepa Calvet, Belisa González, Ángeles Araújo, Kely García… las grandes del Celta; el matrimonio Presa, seguidores fieles del baloncesto, al que aportaron cinco hijos jugadores; Manuel Bouzas, Seve, “Pampi”, Noelia… los cerebros del Club Baloncesto Baiona; Rufino, mi ayudante en la escuela; Miguel Méndez, el entrenador del Celta, y su pupila, la olímpica Laura Nicholls; Félix Muñoz, Miguel González, los grandes aleros del Skol, del Celta, del Porriño; el más pequeño de la reunión, Pablo -hijo de Miguel González-, con siete años y ya jugador de mini en Baiona; Zato, el presidente de la Delegación Viguesa, a menudo en peleas conmigo con el Rodaballo por medio; Carmen Patiño, mi discípula en el Celta Juvenil, y su hermana Rosa, la delegada; Roberto Canella, el rocoso todo-terreno del Ureca y padre de una seria promesa, Marta; otras promesas como Marta, de parecida edad, María y Alexandra, hijas de Ángeles Araújo y de Carmen Patiño; Javier Iglesias, el hábil dirigente del Airexa de Panxón; “Larry”, el solvente entrenador, que ¡por fin! ha vuelto de Verín; Tomás Alonso, base de excepción, duro contrario de mi hijo Camilo, y ahora, colega de profesión de Rubén, mi otro hijo; Lito Marzoa, el “viejo rockero” del Estudiantes, del Celta -lo dirigí-, del Ademar y aún hoy, del Canon; Armando Vázquez, buen pívot del Ademar, y mejor persona; García Migón, el tercer hijo del mítico Alfonso García Hermida, que tanto tuvo que ver con la historia del basket vigués; Serafín, impetuoso, en su línea, pero esta vez en voz baja y al oído, “Cuidado con esos, Luis. Son unos cabrones”, recordando viejas rencillas de cancha; Javi López, atento a todo lo que se mueve en el deporte de Baiona; José Manuel, representante de las botas And-1; Tamara y Fernando Rey, otrora grandes del tenis gallego, y ahora expectantes para Televigo; los amigos de Dorna
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Sport; esposas y maridos, madres y pa padres, amigos, familiares… Y Luis Felipe, el baionés de Leiría (Portugal), el nuevo amigo, un hallazgo, la sensibilidad de la imagen imagen, el vuelo de las notas en el aire… ¡VAYA FIESTA! ¡MUCHAS GRACIAS! GRACIAS!... y la nº 12, ¡qué bien se escapaba en contraataque ataque y có cómo lo remataba!… y por lo que se ve, todavía sigue acertando en el día a día día… No digo su nombre. Hasta tuvimos la canción ción del Rodaballo… y para los bosquistas, la de Pénjamo… y también de fondo, para los vigue vigueses con alma, ¿cómo no?, la música de del gaitero Carlos Núñez.
La singular reunión fue en Baiona, en Capitanía Marítima Marítima, el lunes, 27 de abril de 2009.. Presidió el alcalde, Jesús Vázquez Almuiña. A su lado, Paco Martín, pre presidente de la Gallega, Paco Araújo, jo, presidente del Celta Indepo, y Vicente Rodríguez, ex seleccionador nacional femenino. Julio Cé César Bernárdez hizo la presentación. Moderó, Rubén Rey.
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La presidencia: Julio César Bernárdez, rdez, Paco Martín, Jesús Vázquez Almuiña, el autor, Paco Araújo y Vicente Rodríguez. Al fondo, los carteles anunciadores con la portada y contraportada del libro. Delante, los viejos trofeos y un diploma se presentaban como testimonio de la historia historia.
El autor, con el alcalde de Baiona, Jesús Vázquez Almuiña Almuiña, entusiasta impulsor del acto.
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El autor y Julio César Bernárdez,, presentador del libro
“Del patio al “si-
guing”.
Rubén Rey,, moderador improvisado. Se echó en falta a Antonio Estévez, ausente por causa mayor, y testigo excelente de muchas historias de “Del patio al “siguing”.
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La sala durante la presentación: Lucía Molares, Alberto Zato y Carlos Núñez Gayoso. Amparo Dios con Josechu Cu Curiel. Alberto Gòmez y Mariló, Ángel Lizarralde y su esposa. Y de pie, García Migón Migón.
La internacional céltica de los ochenta, Ángeles Araú Araújo, con su hija María, alevín del Seis do Nadal, y nombrada hacía poco tiempo ”La Mejor Jugadora” del “IV Torneo Internacional de Mini-Basquet”” de Baiona Baiona. A la derecha, la también céltica de esa época, Carmen Patiño. y a su lado, su hermana Rosa, actual secretaria del Celta elta Indepo. A la izquierda de Carmen, su hija Alexandra, otra promesa, que juega en el infantil del Celta.
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Carteles anunciadores del libro -con con la portada y la contraportada-, y los trofeos ofeos de Campeón de España de Segunda División y Subcampeón de Primera consegu conseguidos por el Club Estudiantes en 1956 y 1957. A la derecha, un recorte de “Faro de Vigo” del 28 de abril de 2009, en el que se comenta la presentación del libro, además de algo de su contenido, y habla de cierto sueño del autor que se puede convertir en pesadilla para el baloncesto vigués.
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En esta página, el “Atlántico Diario”” da cuenta de la puesta de largo de “Del patio al “siguing”.
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Le preguntaron, con toda la intención, a Josechu Curiel acerca de su vieja agencia de autobuses, y respondió con la mayor naturalidad del mundo, como si se tratase de un hecho rutinario, de algo que hubiese ocurrido ayer… <<Fue en el campamento militar de La Granja (Segovia),
en el verano del cincuenta y ocho. Estábamos haciendo las Milicias Universitarias -el especial Servicio Militar organizado por Franco para los estudiantes-, y en el fin de semana, que comenzaba el viernes por la tarde, todo aquel que podía se marchaba a Madrid. Unos porque eran madrileños, y los demás por escapar de aquel infierno militar donde nos encerraban. “La Segoviana”, la empresa del lugar, nos trasladó en el primer viaje, imponiendo sus horarios, sus costumbres, su recorrido, su precio…>> <<Al siguiente fin de semana, yo ya había organizado “La Curielana”. Salía un par de horas antes, y acomodaba el recorrido y el regreso a las necesidades del grupo. Yo me pasaba toda la semana vendiendo billetes. Llegué a tener una flota de cinco autobuses. Iban gratis, Chus Codina, internacional del Estudiantes de Madrid e importante enlace mío con sus paisanos, y el capitán del campamento. Dotábamos cada autobús con quince litros de vino, el capitán nos resolvía cualquier problema que se nos pudiera presentar con la Guardia Civil -duro vigilante de las carreteras por aquel entonces-, y las expediciones de ida y vuelta funcionaron a la perfección durante todo el verano. >> <<Las novias de los madrileños, que iban a esperarlos a la llegada, guapas y arregladitas, recibían a sus parejas bastante borrachos: una pequeña pega de “La Curielana”… que por lo demás…>> <<Ganaba cinco duros -veinticinco pesetas- por cada viajero. Hice una fortuna. Al llegar a Vigo me compré una Vespa -un lujo en aquella época-… y me la cuidaba Camilo –y señalaba al mecánico baionés, presente en el acto-. Él es testigo de lo que cuento. >> <<Por mí, hubiera repetido varias veces la Milicia Universitaria… No me dejaron, y en cambio me enviaron de sargento al cuartel de Barreiro. >>
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Año 1952. Josechu Curiel debutó en el primer equipo del Club Deportivo Bosco con catorce años.
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Cuando Josechu se trasladó a Madrid a estudiar a finales de los cincuenta, vivió en la Residencia Cisneros. Todo estudia estudiante que llegaba a este centro estaba obligado a jugar al rugby, un deporte que en España daba sus primeros pasos. El equipo de Cisneros fue uno de los pioneros del rugby nacional, y Josechu Curiel se incorporó a sus filas nada más llegar. Después sería internacional, y hasta logró ocupar el puesto de capitán en la selección española. Su cuñada, la internacional Susana García, en uno de sus cientos de viajes con el Celta Femenino de baloncesto, se encontró en un aeropuerto con el equipo de rugby de Cisneros. Estuvo charlando lando con sus jugadores jugadores, y a uno le comentó que su cuñado Curiel había jugado do en el equipo de ellos hacía algunos años.. El chico no sabía nada del vigués, pero cuando se acercó a sus compañeros a comentárselo, lo, éstos le sacaron de su ignorancia: “Josechu Curiel es una institución en la Residencia Cisneros,
y después de veinte años, aún se le recuerda con veneración. Es un monstruo sagrado de nuestro club.” Era un atleta portentoso, y llegó a ser internacional universitario en baloncesto, balonmano y atletismo, y absoluto en rugby. Al margen de su condición deportiva, siempre ha sido reseñado como una persona agradable, franca y con la sonrisa en los labios. Forma parte del grupo de deportistas más populares de Vigo en el siglo pasado, y de los más queridos.
Taboada Leal, 1952. C.D. Bosco. Josechu Curiel, en el centro; a su izquierda, Fandiño, Alberto y Boliche; he; a su derecha, Cabaleiro Cabaleiro, Rolán y Abalo.
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CAPÍTULO II
MI AÑO CINCUENTA Y SIETE… Y MÁS
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“Papá, yo quiero que me entrene el chico de pelo blanco.” No sé muy bien qué me gustó más: si lo del “chico”, o que me hubiera elegido entre todos los entrenadores que tenía a su alrededor. Raquel, la hija de nueve años de Miguel González, aunque sea demasiado pronto para vaticinarlo, posee cualidades como para ser tan buena jugadora como lo fue su padre. Cuando dejé de entrenar en el C.B. Baiona, creé en la villa una Escuela de Entrenamiento Personal, dedicada fundamentalmente a trabajar el tiro a canasta. La bautizamos con el nombre D1EN1, y empezamos a entrenar -mi ayudante Rufino Leyenda y yo- a uno, dos, tres… cuatro jugadores como máximo, en sesiones de algo más de una hora. Daniel, el pequeño de los Villalobos, vino un martes a probar. Al finalizar la sesión, lo llevé en mi coche a su casa, en lo alto de Covaterreña. Regresé por la carretera de la Virgen de la Roca, y aún no había llegado a la última curva, y ya su madre me llamaba por el móvil con urgencia, para decirme que su hijo había llegado encantado, y que le reservase otro día más de entrenamiento. Que los chicos aprecien tu trabajo, es una enorme satisfacción para cualquier preparador. Si además, el aprecio llega desde la franqueza de los más pequeños, como Raquel o Daniel, entonces nos llenamos de orgullo y motivación. Y de inmediato, me viene a la memoria mi errónea sentencia: “En el baloncesto ya lo he visto todo. No hay nada
nuevo que se me pueda ofrecer.” - Ya ves colega, apenas iniciada esta nueva tertulia, y una vez más “mi gran pensamiento filosófico” se derrumba. Que yo sepa, a 10 de marzo de 2009, no hay ninguna escuela en la provincia que se dedique en exclusiva a esta labor: jugador a jugador, les enseñamos los fundamentos básicos del tiro a canasta. Por lo tanto, mi proyecto actual se muestra innovador nada más comenzar.
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Es algo elemental en el deporte de la canasta, pero a la vista está la deficiencia que asola las categorías inferiores del baloncesto provincial. Cómo es posible que infantiles, cadetes, juniors e incluso seniors, masculinos y femeninos, que dominan el bote, realizan pases complicados a una mano, disponen de excelentes movimientos de pies para ejecutar las más variadas fintas, hacen sistemas de ataque, presión en todo el campo, jugadas de fondo… ¿Cómo es posible que no sepan, en cambio, realizar un simple tiro a canasta desde cuatro o cinco metros, anotar personales con porcentajes discretos, y ya mucho menos, meter un triple? La evidencia no deja lugar a dudas: necesitan de un metódico trabajo técnico para mejorar algo tan dificultoso y lento de aprender como es el tiro… Y los que ya saben hacerlo, deben practicarlo a menudo durante una hora larga, desde todas las posicione y con las simulaciones del juego más comunes... para así, tratar de elevar su porcentaje de acierto. Esto es lo que ofrecíamos en nuestra Escuela de Entrenamiento Personal D1EN1. El primer discípulo fue mi ayudante Rufino -veintiséis años-, al que logré convencer -creo que por casualidad- de que podría ser un excelente tirador si se dejaba enseñar. Tras un par de meses de trabajo intenso en los campos de la Palma, consiguió el alta de tirador con buena nota: tiro interior, triples, personales y toda clase de entradas a canasta, además de un variado movimiento de pívot. Sólo me queda una comprobación pendiente: que sepa utilizar en los partidos lo que ya hace tan bien en los entrenos. Y es así como empecé mi actividad en lo que al basket se refiere, el año 2009, o lo que es lo mismo, el año 57 de mi vida baloncestística. ¡Total, nada: medio siglo y siete años de actividad!... ¡Y aún sigo!... ¡Ya hay que estar loco! Lo reconozco, pero es que con la edad se va perdiendo el sentido.
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A la izquierda, Rufino Leyenda, entrenador entrenador-ayudante de la Escuela D1EN1, con el trofeo al “Máximo Encestador” del “Memorial Fernan Fernando Vázquez 2009”, celebrado en el Pabellón Municipal de Coia. En la imagen de la derecha, dos pequeños alumnos, Miguel Ángel Vasconcellos y Daniel de Villalobos. Ambos de once años, del C.B. Baiona, y en su última temporada de Mini-Basket. Un pívot y un base que deben dar en el futuro un excelente rendimiento al baloncesto de su club. Daniel ya estuvo en la Selección de Vigo en la campaña 2008/09.
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Baiona, 2009 2009. A la izquierda, Raquel González, benjamín del C.B. Baiona. Con nueve años, ha sido la alumna más pequeña de la Escuela D1EN1. Es una firme promesa del basket baionés. La clase de su padre, M Miguel González, se le nota en la sangre.
A la derecha, Marta Rodríguez y Uxía Álv Álvarez,, dos infantiles de Baiona, en el acto de presentación del “Del patio al “siguing”. Alumnas de la Escuela D1EN1, destacarán muy pronto en las filas de su club. Están llllamadas a ser jugadoras importantes en el fut futuro del C.B. Baiona.
Baiona, 2009. Otros tres alumnos de la Escuela D1EN1. Joaquín Gómez, infantil del C.B. Baiona; Cristina Álvarez y Lara de Villalobos Villalobos, destacadas cadetes del club baionés, que ya han estado en selecciones infantiles de Vigo.
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- Como ves, colega de tertulia, la actividad de la canasta no cesa… y ahí me tienes, con un nuevo empeño, la escuela D1EN1. Si no es una cosa es otra, pero siempre tendremos algo de que hablar. Y tratándose de hablar, te recuerdo que me han quedado muchas anécdotas por contarte. Pero aún estamos a tiempo. Tú, ¡tranquilo! ¡A propósito! Me viene a la memoria como si estuviera sucediendo en este mismo momento: “¡Javi, tranquilo! ¡Estás sólo! ¡Tranquilo, estás sólo!”, se desgañitaba “Mani” desde la banda, gritándole a su jugador. Era el momento final de un partido dramático, y su alero se disponía a lanzar dos decisivos tiros libres… No recuerdo en qué acabaron los lanzamientos de las personales… ¡Pero qué razón tenía “Mani”! ¡Estaba sólo!... Siempre fue un sabio en esto del baloncesto. Mi sobrino Miguel tampoco para con “sus batallas”. El otro día estaban apabullando al contrario de mala manera. Al descanso, su equipo ya ganaba por más de treinta, y en esto, se le acerca el padre de un jugador rival y le dice. “Miguel, si le dejas meter una canasta a mi hijo, te doy diez euros.” Miguel se le queda mirando… pensativo… con dudas evidentes… “Quince.”, contesta tajante. Es insólito. Puedes jugártela a personales, a triples, a puntos anotados, a asistencias… A mi sobrino y a tres colegas de equipo, los subieron un domingo de categoría, es decir, de infantiles a cadetes. Ya en la rueda de calentamiento se vieron tan acomplejados con la estatura de los rivales, que una vez iniciado el partido, y dentro de la mayor seriedad y entrega, se les escuchaba desde la grada a cada parón del juego: ”Yo llevo dos”… “Yo uno”… “Voy ganando, llevo tres.”, y acompañaban las frases marcando la cifra con los dedos en alto. Seijas, el peculiar árbitro, le aclaró a sus padres en el descanso que los chicos estaban en un “Concurso de Tapones… RECIBIDOS.”
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¡Lo de los padres!… caso aparte. Miguel tiene un afinado sentido del humor, y se ríe muchas veces de los trascendentales sucesos que ocurren a su alrededor. Una noche, siendo jugador cadete, al llegar del entrenamiento contaba con ironía: “Hoy una madre se fue a por el entrenador con toda su furia -reservamos el nombre de ambos-, y le gritó:”Mi hijo viene aquí a apren-
der a jugar al baloncesto, no a hacer abdominales.”
Temporada 2008/09. Miguel Rey Mallén, jugador cadete del Club Maristas
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Yo, en esta cuestión, tampoco me quiero meter, pero estoy por entero con la protesta de la madre… tan sólo con una pequeña diferencia: las abdominales debían hacerlas algunas madres y algunos padres que se pasan de frenada… que no son pocos. El Día del Padre, mi hijo Rubén me regaló un CD con la canción del Rodaballo y la de Pénjamo -la que cantaba el Bosco de los Boliche, Rolán, Josechu, Cándido Gil…-. ¡Qué regalazo! ¡Qué sorpresa! Sonaban de maravilla… rejuvenecí medio siglo al escucharlas. “Localízame la de “¡Mala, mala, mala!...”, le dije ansioso. “Te mejoraré la herencia.”, le prometí… Estoy aguardando… pero sin demasiadas esperanzas. La verdad es que lo encuentro de lo más lógico… Mi herencia nunca tendrá un mínimo de sustanciosa como para motivar a nadie.
Carátula del CD con las canciones del “Rodaballo” y de “Pénjamo”.
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- Pero ya ves, colega, mi hijo me sorprendió. Al cabo de no pocos días llegó a casa con otro CD… aunque no contenía la canción que le había pedido. Esta vez era el famoso “Arroz con chícharos” que cantaban los hinchas del OAR de Ferrol mientras calentaban sus muchachos. ¡Qué placer! ¡Qué maravilla! ¡Qué grandeza! Revivir a través de la música aquella escena entrañable de la que fui testigo en el Pabellón de Ferias y Muestras ferrolano, completamente abarrotado de entusiastas seguidores… Con el base Saldaña, los aleros locales Miguel Loureiro, Suso Fernández y Manolito Aller, el ala-pívot vigués Alberto Abalde, el pívot canadiense Hansen… y la singular presencia del formidable internacional Del Corral. Prometo que le mejoraré la herencia a mi hijo Rubén.
- Luis, y ¿qué canción es esa del “Arroz con… qué? - Querido contertulio, ¿presenciaste alguna vez el solemne canto de “A Rianxeira” en el estadio de Balaídos, en los tiempos de los Mazinho, Mostovoi, Karpin, Michel, Makelele, Gustavo López…? ¡Algo grandioso!... Por desgracia para los célticos de corazón, ¡irrepetible! Pues el “Arroz con chícharos” de los ferrolanos del OAR era muy parecido. Son canciones de amor y de guerra, de ánimo y de dicha suprema, de unión de todos en busca del triunfo… Son esos cánticos que, escuchados en boca de miles de seguidores y entonados con tanta solemnidad y pasión, ponen la carne de gallina. ¿Comprendes, amigo? No sé si me he explicado bien. ¡Qué no lo tienes claro! Pregúntale a Alberto Abalde. Yo, de momento, te la canto. “Arroz con chícharos, patacas novas, repolo de Betanzos, e máis cebolas…”
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Uno de los históricos equipos del OAR ferrolano. Ya no ju jugaban en el provisional Pabellón de Ferias y Muestras. Estrenaban naban el flamante Pavillón da Malata… pero el “Arroz con chícharos” se seguía entonando con el mismo fervor de antes.
Dos vigueses en el OAR: Jesús García y Alberto Abalde.
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Tuve una jugadora en el C.B. Baiona que en todas las fotografías de sus equipos anteriores aparecía siempre por partida doble. Es decir, en la fila de arri arriba y en la de abajo. “Rosalía,
¿por qué eres tan fantasma? tasma? Por destacar destacar, hasta eres capaz de trucar las fotos y ponerte dos os veces en la misma toma toma.”, le recriminaba cuando me las mos mostraba. “Luis, yo en eso no tengo nada que ver. Fueron mis padres dres”, me contestaba en tono de disculpa, y algo ruborizada.
En esta fotografía de la Selección de Vigo Cadete del 2004 2004, tenemos a Rosalía Vázquez (11) en la de la fila de arriba… Su gemela Claudia (10) -al fin se aclaró la situación- está en la fila de abajo.
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Hace unos días le pedí a mi hijo Rubén que me facilitara los teléfonos de “Mani” y de Julio Berná Bernárdez. “Es para que me cuenten alguna anécdota ta de su larga vida baloncestística.”, le expliqué. “Das en el blanco, en el sitio preciso, los interlocutores perfectos -me me contesta con rapidez rapidez-. Julio y “Mani”, entre lo que
vivieron y lo que inventan, pueden darte materia para dos o tres libros más.” Me quedé pensando en la irónica respuesta de Rubén, y llegué a la conclusión de que tanto el uno como el otro acumulan tantas vivencias en su dilatado historial, que algunas de ellas deben ser demasiado insólitas como para que los jóvenes se las crean. n. Lo mismo que me pasa a mí con el baño que me di una noche en A Fonte dos Cabalo Cabalos, en la misma Praza das Platerías,, durante las Fiestas del Apó Apóstol… Quedé citado con ellos… pero por separado, no vaya a ser que Rubén bén tenga razón y me emborrachen con “sus múlt múltiples historias”.
¿Los conocéis? Uno, de jugador alevín, y el otro, de juvenil juvenil.
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En la década de los setenta, ssiendo yo segundo entrenador del Real Club Celta -Julio Julio Castro era el titular titular-, nos tocó en suerte el Real Madrid en una eliminatoria de Copa de España a partido único. Por si hay alguna duda duda, aclaro que, en ese momento, los madrileños eran los vigentes campeones de Liga y Copa de España, y también de la Copa de Europa. N Nosotros, en cambio, un modesto equipo recién ascendido a Segunda División. aconEl encuentro, como cabía esperar, resultó todo un aco tecimiento imiento en la ciudad. Por entonces entonces, los aficionados no tenían demasiadas oportunidades tunidades de ver al Real Madrid Madrid, ni en vivo ni por televisión -apenas apenas se ofrecían partidos de baloncesto en la pequeña pantalla-. Dicho esto, y con la particularidad de que la directiva céltica declaró el partido de “puer “puertas abiertas”, As Travesas presentó un lleno espectacular espectacular.
As Travesas, 1972/73. Equipo del Real Club Celta que se enfrentó al Real Madrid en eliminatoria de Copa De pie: Tati, Carro, Carlos Gonzalo,, Julio Castro (entrenador), Manolo Soto, José Torres y Antonio Nieto. Agachados: Casal, Enrique Bang Bangueses, Lito Marzoa, Simón, Carlos y Blanco.
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Pedro Ferrándiz era el entrenador, y venían Wayne Brabender, Vicente Ramos, Clifford ford Luy Luyk, Carmelo Cabrera, Cristóbal Rodríguez, Paniagua… La superioridad madrileña resultaba tan manifiesta, que a loss célticos se les hacía casi imposible el simple hecho de tirar a canasta. En un ataque de tantos tantos, nuestro ala-pívot Manolo Soto, 1,85 de estatura, recibe un balón en la línea de fondo a unos cinco metros del aro. Clifford ford Luy Luyk, el pívot americano, de más de 2 metros, tros, lo marcaba con gesto fiero, agitando los brazos hacia los lados y simulando una tremenda ac actitud agresiva… Claro que por lo “bajinis” lo animaba con autoridad autoridad: “Chaval, ¡tira, coño, tira!”… No hace faltaa explicar que el jugador vigués respondió a la “invitación”, anotando una canasta muy aplaudida por el abarrotado pabellón.
Manolo Soto, ala-pívot del Real Club Celta, temporada 1972/73
Para ganar un partido, tampoco hace falta aplastar al contrario. El Real Madrid se comportó con elegancia en esta ocasión, y su temible entrenador Ferrándiz -relacionado en su pasado con el baloncesto vigués-, apena apenas se mostró exigente con sus pupilos, algo poco habitual en su comportamiento. Después, hay algunos que presumen de un 115 115-4.
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Real Madrid, 1964/65. Campeón ampeón de Liga, Campeón de Copa, Campeón de Copa de Europa. z, Moncho Monsalve, Clifford Luy Luyk, James Scott, Robert De pie: Emiliano Rodríguez, Burgen, Miguel González y Durán. Agachados: Jaime, Sevillano, Julio y Lolo Sainz. En medio, de pie: Pedro Ferrándiz (entrenador) (entrenador).
Un equipo similar all de esta fotografía visitó Vigo en ocasión de la mencionada eliminatoria de Copa. Aparecen en ella nombres ilustres del baloncesto esp español: Emiliano Rodríguez, 175 veces internacional; Moncho Mo Monsalve, afamado o entrenador; Clifford Luy Luyk, 150 veces internacional y el primer americano en la selección española; el alero Sev Sevillano, capitán del equipo durante much muchas temporadas; Lolo Sainz, años después entrenador del Real Madrid, del Joventut de Badalona y de la Selección Nacional acional (1993-2000)… Y el mítico Pedro Ferrándiz, polémico, tan odiado como temido por sus riv rivales, y el técnico más laureado del baloncesto español: 12 Ligas, 11 Copas y 4 Copas de Europa. Hablando de anotar cien puntos en un partido, confesaré que yo tan sólo los alcancé dos veces en mi larga trayectoria en el baloncesto. En aquella época de jugador formal -de los años cincuenta a los setenta, más o menos menos- no había triples, ni tampoco la bandera roja de las cuatro per personales, ni mucho menos
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la necesidad de tirar a cesto antes de los 24 segundos de ataque, ni los ochos segundos obligados para pasar al campo contrario… Las faltas eran como ahora, pero su acumulación no otorgaba el derecho al lanzamiento libre cuando se trataba de una personal de banda. Evidentemente, todos estos cambios han supuesto factores determinantes para aumentar la anotación. En definitiva, que por aquel entonces alcanzar los cien puntos suponía casi una misión imposible, y el hecho de llegar a ellos constituía un logro que figuraba lustroso en un meritorio historial. La primera vez que lo conseguí fue en el año 1957, en el Seminario Menor de la Diócesis de Tui-Vigo. Jugaba el campeonato escolar con mi colegio, el Labor, y anotamos 152 puntos yo, 27-. Nuestros rivales debían estar más pendientes de asuntos espirituales que de jugar a la canasta. De hecho, lo que a algunos les parecería una hazaña reseñable, careció para nosotros del más mínimo valor deportivo… y es que realmente, no lo tenía… Si acaso, algo de vergüenza propia por la tremenda afrenta que le infligimos a aquellos buenos chicos. La segunda vez, en1972, con el Real Club Celta. La víctima, un equipo ourensano. Yo ocupaba el puesto de entrenador, pero por circunstancias que no vienen al caso explicar, también contaba con licencia de jugador. Es obligado reconocer que nos ensañamos con el rival desde el primer minuto, en una decidida “vendetta”; incluso salí al campo en los últimos minutos para poder participar con seis puntos en “la paliza”. Había viejas cuentas que saldar con los contrarios, que en su campo repartían leña generosamente con la permisividad de los árbitros. Después, en su visita a Vigo llegaban como “corderitos”, y hasta nos imploraban: “No nos metáis muchos”. En las canchas de Ourense y provincia -O Barco de Valdeorras-, sufrí las mayores barridas arbitrales de toda mi vida. Aún hace poco, en el 2008, padecí “una buena” con el modesto equipo femenino de Baiona. Si la memoria no me falla, nunca más participé ni como jugador ni como entrenador en un marcador centenario favorable. Desde el banquillo, dominé sutilmente la situación en cada momento, para evitar marcadores sonrojantes que dejan tan mal
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al que e los encaja, y no suponen nada en absoluto para el que los endosa. Y en loss peores tiempos del Rodaballo -en los momentos de la transición- nos machacaron dos o tres veces con cien puntos. Ahí supimos que había que dar paso a los jóvenes.
Cuatro de los grandes veteranos del Club Rodaballo Rodaballo: el pívot Carlos Cerdeira, el base José Ángel ngel Román, el alero Rafa Tapias y el también pívot Benito Lorenzo. Muchas batallas deportivas en su haber, resueltas la m mayoría con éxito. Formaron parte del Club Estudiantes que ascendió a División de Honor en 1957.
Y filosofando sobre los cien puntos puntos, todos nos sentiríamos orgullosos de participar, por ejem ejemplo, en un 102-101. Eso sí que tiene mérito… sobre todo si ganas… y si pierdes pierdes, también. Muy distinto a humillar al contrario con un 120 120-15.
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- Luis, y ¿qué me dices del 122-117 del Manresa-Barce-
lona de la pasada temporada 2008/09? - ¡Increíble! ¡Cuatro prórrogas! Y que un equipo modesto como el Manresa le gane a un todopoderoso Barcelona… ¡y en esas circunstancias!... ¡Más increíble todavía! Tres horas y quince minutos de duración; record de anotación en un partido en la Liga ACB; record de anotación de un equipo, 122 puntos; record de tiros libres convertidos por un equipo -55 tiros del Manresa-. ¡Cuánto me hubiera gustado presenciar ese encuentro! Yo que sentencié “que ya lo había visto todo…” Desde hoy voy a utilizar a menudo la camiseta roja del Manresa que compré en Barcelona para colaborar con el club. En el partido de ida, al que tuve la coincidencia de asistir, estaban en campaña de “venta de camisetas” solicitando ayuda del aficionado para la subsistencia económica de la entidad, y el Barça le autorizó a su venta en el mismo Paláu… ¡Y fíjate cómo le pagaron el gesto en el partido de vuelta! Mi equipo, tanto de jugador como de entrenador, disputó muchas prórrogas en los cincuenta y siete años de competición que viví… Tal vez unas cuarenta… y eso sí, presumo de haber perdido muy pocas… puede que cuatro o cinco, no muchas más. En dos ocasiones, que recuerdo como si fuera ahora mismo, jugué dos prórrogas en el mismo partido: en la Final del Campeonato de España Femenino de 2ª División, y en un decisivo partido de Liga del Grupo Norte de 2ª División Masculina. La primera de ellas, como entrenador del Club Estudiantes -a mis veintitrés años- en la temporada 1964/65 en Madrid. Igualada a 46 al final, nuevo empate a 50 en la primera prórroga de cinco minutos, y en la segunda, ya al primer punto anotado, un tiro libre convertido por Picuca Martínez nos valió el título de campeones. La otra vez que jugué dos prórrogas en un partido, fue unos años después como jugador del Club Estudiantes en el famoso Gimnasio de la Empresa Nacional Bazán en El Ferrol -de aquella “del Caudillo”-. Pardo, Quintanilla, Casal, Lobón, Picos, los hermanos Bermúdez, Dimas, Polo… fueron encarnizados riva-
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les de nuestro equipo po durante mu muchos años, y en su cancha resultaban prácticamente invencibles. vencibles. Pero ese año, 1967, cons conseguimos ganarles por cinco pun puntos después de un igualadísimo partido, y tras dos prórrogas durísimas durísimas. ¡Pero cuatro prórrogas en un mismo partido!... Nunca creí que pudiera suceder.
Diario “Marca”, 1964.
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Ferrol, Gimnasio de la E.N. Bazán, 1964 1964. Una de las históricas formaciones de la Bazán, con Pardo, Quintanilla, Casal, Polo, Picos Picos, Miranda… Como entrenador figura el vallisoletano Lobón, de pie a la derecha. En dos ocasiones ocasiones, los ferrolanos ascendieron a División de Honor, renunciando en ambas. La mayoría de sus jugad jugadores trabajaban en el astillero, y aunque tenían sus prerrogativas para entrenar, rresultaba inviable su participación en la más alta categoría nacional.
Detrás del grupo, se puede observar el primer marcador electrónico trónico de Galicia, con toda seguridad fabricado en el astiller astillero, y concebido por alguno de los ingenieros navales de la empresa. Asunto, por otro lado, bastante simple para un constructor tructor de corbetas, fragatas, destructores y demás embarcaciones de guerra. Señalaba el tanteo y el nombre de los equipos, dándole, con evidente caballerosidad, el primer término al visitante.
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El tristemente nte desaparecido Jaime Gómez Gómez, presidente de la sección de baloncesto del R.C. Celta durante los años setenta, era el mejor contador de chistes que jamás he conocido. Apoy Apoyado en sus excelentes condiciones de actor teatral aficionado, e escenificaba algunos de sus cuentos de manera excepcional. Con una seriedad absoluta y sin un gesto, lograba que ya riésemos antes de empezar a contar el chiste. El más celebrado ado de todos todos, “El del hombre que iba al médico a curarse de un tic nervioso que tenía al hablar…”, se lo pedían las jugadoras célticas cada vez que lo veían, es decir, ccasi todos los días. Y una vez tras otra otra, a reír sin parar. Parecía que con las continuas repeticiones lo contaba en cada ocasión mejor que en la anterior. Para ara mis jugadoras, agobiadas por la responsabilidad y por los nervios de la competición, aquellos chistes de Jaime va valían más que una semana de entrenamiento. Saber como relajar a un equipo po de la tensión deportiva ssupone todo un arte… y muy necesario, imprescindible diría yo. Jaime Gómez nos ayudó mucho. “… y el doctor Miñambres ssssss me lo curó del todo ssssss.
Ahora tengo este ssssss que al menos ssss ssssss es más agradable ssssss.” Si te encuentras algún día con Ángeles Liboreiro, o con Vicente Rodr Rodríguez, o con Marisol, o con el directivo Ismael Pérez Izaguirre, o con el eterno delegado Severino Vilas… pídele a cualquiera de ellos que te lo cuente. Aun Aunque el que mejor lo puede hacer no es otro que su hijo Marcos, cos, base del Rodaballo Rodaballo.
Marcos Gómez, base del Rodaballo.
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Jaime Gómez,, presidente de la sección de baloncesto del R.C.Celta en la década de los setenta.
¿Y la movida del café con leche? En el equipo del Celta femenino convivían varias “cafeinómanas”, afeinómanas”, y cuando viajamos a Belgrado para jugar la “Liliana Ronch Ronchetti”, surgieron por ese motivo algunos problemas en aquel modesto hotel donde nos ho hospedaron. “Café con leche”, le pidier pidieron al camarero en la pequeña cafetería de la entrada. “Only cofee cofee”, les contestó disponiéndose a servirlo. “Sólo no, con leche” leche”… ”¿Milk? Milk…”, les respondió, haciendo el gesto de arriba con la mano, e indicándoles el ascensor, y con los dedos, el séptimo piso. Subieron al piso indicado, y volvieron a pedir en la barra del bar bar: “Café con leche”. “Only milk”, les comunicó la camarera. “¡No,no! Café con leche” “Here, only milk. Cofee Cofee… hall”, y señaló con la mano el ascensor. Alguien del grupo,, en medio de la algarabía general y el correspondiente choteo, les sugirió a las del café con leche,
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que tomaran la leche arriba, bajaran deprisa en el ascensor, tomaran el café abajo, y que ya de inmediato se mezclaba en el estómago.”Ya sabéis, milk arriba, cofee abajo”. Durante bastante tiempo les daba la risa cuando pedían café con leche en los sitios de costumbre… ante el “mosqueo” del camarero de turno. En la temporada 1976/77 entrené al Club Ademar sustituyendo a Carlos Núñez, presidente, entrenador, delegado, utillero, relaciones públicas, cantinero, chófer… y otras funciones varias. Se operaba de una hernia discal, y había de permanecer fuera de los banquillos durante un año. Teníamos una excelente plantilla, bien cubiertos todos los puestos, y con la ilusión del ascenso a Segunda División como motivación. La mezcla de jugadores jóvenes con otros maduros daba como resultado un equipo preparado para ambiciosas aspiraciones. Lito Marzoa, alero de ese equipo, me envió un mail revelador de lo que pudo haber ocurrido aquel año. Como ya relaté en el libro anterior, el equipo se me fue de las manos en once segundos -la muerte de Franco, noviembre de 1976, provocó la suspensión de la jornada programada; su correspondiente aplazamiento tuvo bastante que ver en el desenlace final de la Liga-. Hasta el 8 de enero y hasta el minuto cuarenta de aquel partido aplazado contra el Santa María del Mar coruñés, celebrado en el Frontón Municipal de As Travesas, íbamos líderes imbatidos y ganando con autoridad todos los encuentros. En aquellos once últimos segundos -ganábamos por un punto- nos metieron una canasta desde siete metros -sin ninguna oposición por nuestra parte, y dando ya como finalizado el tiempo-, se nos fue el partido, el espíritu de equipo, la capacidad de esfuerzo, la Liga… y aún encima, cundió el rumor de que de dónde iba a sacar el modesto club los fondos necesarios para acudir a un sector de cinco días en Huelva, en caso, claro está, de proclamarnos campeones. Siempre fui de la opinión de que el jugador, y desde luego el entrenador -éste sin la más mínima disculpa-, deben aparecer a disputar los partidos correctamente presentados -casi como en una boda-: afeitados a la perfección, con el pelo cuida-
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do, bien vestidos aunque sea ea con ropa deportiva, ofreciendo una imagen correcta. El técnico,, a mi juicio, tiene que aparecer iimpecable, sobre todo en los entrenamientos. trenamientos. Su apariencia oto otorgará confianza y credibilidad dad a su trabajo. Es una opinión. Veo la fotografía que me envía Lito Marzoa, y mi criterio de la buena presentación se cae por los suelos. Me encuentro en una esquina, sentado,, irreconocible, melena al viento, barbas… ¡un desastre! Esta penosa imagen la debí de dar aquel fatal ocho de enero… y así pasó lo que pasó.
Temporada 1976/77 . Club Ademar Tercera División Nacional De pie: Caballero, Gonzalo Seijo, Manolo Soto, Antonio Nieto y Armando Vázquez. Agachados: Fito Montenegro (delegado) (delegado), José Torres, Lito Marzoa, Cuesta, Carro, Gustavo Vega… y Rey Lama. ¡PATÉTICO! Menos mal que no se me ve demasiado bien.
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Con los componentes de este ilustre equipo -Colegio Nacional de Árbitros- nunca me he llevado demasiado bien. Me han expulsado del campo como jugador del Es Estudiantes en una ocasión, y del Celta en otra:: ésta última en Vigo, ante el Canoe madrileño; y la primera en Santiago, ante el SEU. Ambas por protestar… y con justicia,, lo reconozco reconozco. Como entrenador “se serio” me han pitado alguna que otra técnica,, provocadas siempre por mí nada más que por pura estrategia, gia, para reclamar un arbitraje más atento y justo. Pasado a desempeñar labores de “coach “coach” en el deporte de tiempo libre, léase Rodaballo, he sido expulsado varias veces, y castigado a menudo con técnicas. Los incompetentes árbitros que nos rodean es casi lo único que pitan bien bien. Claro está, que nuestras protestas airadas son provocadas por su ignorancia y protagonismo, y sobre todo, por un abuso de autoridad insulta insultante y ofensivo… También hay excepciones. El escudo del “CNA” que vemos arriba es el de Paco Nistal, el mejor árbitro rbitro vigués de tod todos los tiempos… aunque Carlos Núñez menciona a otro: Vicente Fló Flórez. Ya hablaremos de este otro en la próxima tertulia… …
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CAPÍTULO III
EL CUARENTA ANIVERSARIO
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El 6 de septiembre de 1969 se firmaba el acuerdo. José Nistal, presidente del Club Estudiantes, y Rodrigo Alonso, presidente del Real Club Celta, en un acto celebrado en el recién estrenado Pabellón de As Travesas, lo anunciaban a los medios de comunicación: el Estudiantes se integraba en el club celeste y le cedía sus derechos, para formar así una nueva sección de baloncesto en el seno del primer equipo de la ciudad. Las críticas de un lado y de otro estallaron al momento. No se hicieron esperar ni un poco. Los apasionados hinchas estudiantiles se lamentaban con pena de la desaparición del equipo de sus amores. La causa no era otra que unas deudas insalvables, que abocaban al club, antes o después, a un final ineludible. Los que opinaban que había que aguantar a la espera de un milagro, al fin claudicaron. La deuda rebasaba las 600.000 pesetas, que en aquellos tiempos no suponía precisamente una cantidad pequeña. El Celta se hacía cargo de ella, y dotaba a la sección de un millón de pesetas de presupuesto. Así, al menos, la continuidad deportiva estudiantil se mantendría. Los medios de comunicación y la afición céltica -la del fútbol, claro está-, como ya se sospechaba, no tardaron demasiado en echarse encima de la directiva ante tamaño “despilfarro”. Con aquella importante cifra dedicada al baloncesto, podrían fichar a un delantero rompedor… o a un portero parapenaltis… o a un entrenador milagro… o a un central con agallas… o comprarle botas nuevas a los canteranos -por entonces usaban las viejas que dejaban los mayores-… o, apunto yo, amañar un partido, si hacía falta para no descender… El fútbol engulle todo el dinero que le echen… y mucho más… Al final casi siempre para nada; sus ambiciones no se logran. La mayoría de los clubs caen en la más completa ruina: nuestro querido Real Club Celta en ley concursal y en Segunda División. Con las “mentes futboleras” resulta difícil dialogar. El fútbol es el único deporte que existe, y lo demás son solamente “juegos”… ¿Los problemas multitudinerarios que lo asolan? Ya los resolveremos todos los españoles -a través de los impuestosNo se le paga a Hacienda, ni a la Seguridad Social, ni a los proveedores… se absorben cuantas subvenciones sean posibles: de
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la autonomía, del municipio, de la Di Diputación… se retransmiten pachangas por televisión para justificar una ayuda velada velada... te venden acciones que carecen de valor, que son una farsa… - ¡Pero Luis, ¿a a dónde vas vas?! ¡Para! - Pues sí, colega, paro, tienes razón… Pero es que
además más de todo eso, que le cobren a los infantiles, o a los cadetes,, o a los cientos de “rodaballos” que hay en el deporte vigués, por usar las instalaciones municipales… es un auténtico AGR AGRAVIO COMPARATIVO RATIVO con el R. C. Celta de fútbol -el de baloncesto sí paga-,, y resulta demasiado grave como para no enfurecerse… - ¡Para, Luis, para!! ¡Para de una vez! vez!... - De acuerdo, ya paro… Por cierto, ¿sabes quién fue nuestra primera internacional?
Mª del Carmen Martínez,, la primera internacional del baloncesto vigués, año 1972. Alero de excepcional anotación.
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Frontón Municipal, 1971. Liga de 1ª División Nacional Una de las primeras formaciones del Real Club Celta Celta. La mayoría de sus componentes, incluido su entrenador, procedían del Club Estudiantes. De pie: Paqui, Maribel Lorenzo, Rosa Sarmiento, Amparo Dios, Picuca Mar Martínez, Eugenia Sánchez nchez e Isidro Gallego (entrenador) (entrenador). Agachadas: Marga,, Tatá Pastoriza, Mª de del Carmen Pastoriza, Mª del Carmen Martínez y Rosa Bernal.
Por lo tanto, dentro de unos meses -escribo en mayo de 2009-, el Real Club Celta Femenino estará de aniversario: el cuarenta, que se dice pronto, aunque en el medio de su historial, el equipo como tal haya desaparecido parecido unos pocos años. La causa, ¿cómo no?: las “mentes futboleras” de los directivos célticos del momento. Ni que decir tiene que en tantos años de vida algo importante debió acontecer. ¡Y vaya si aconteció! ¡Total, nada! Dicen que es uno de los equipos gallego gallegos más laureado. El Real Club Celta llega a su cuarenta aniversario niversario con la maleta llena de tít títulos: ha ganado nado cinco Ligas y cuatro Co Copas, además, de tres Campeonatos de España Junior.
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Numerosas internacionales, nacionales, entrenadores de selecciones nacionales,, preparadores físicos de la selección absoluta absoluta, y muchos de ellas y ellos también olímpicos en Atenas y en Pekín. Todo odo ello avala la extraordinaria trayectoria del R.C. Celta, que además, es el equipo más antiguo de la élite del basket femenino.
Temporada 1973/74. R.C. Celta,, subcampeón de Liga Primera División De pie: Rey Lama (entrenador), Maribel aribel Lorenzo, Carmen Fraile, Am Amparo Dios, Virginia Barros y Ángeles Liboreiro. Abajo:: Mª del Carmen Veiga, Asun, Aurora, Picuca Martínez y Eugenia Sánchez.
Falta en la formación Susana García,, que junto a Ángeles Liboreiro, debutaba en Primera División a los 16 años. Desde entonces h hasta el día de hoy, con escasas ausencias, permanece en las filas de R.C. Celta. Total 36 años.
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Pabellón de As Travesas, 1977. Prolegómenos del decisivo partido Real Club Celta - Evax-Picadero de Barcelona, que daría el primer título de Liga al equipo vigués. Con Vicente Rodríguez, “Cholas” “Cholas”, como entrenador, las célticas alcanzaban un soñado logro que se repetiría cuatro uatro veces más a lo largo de la historia. Mezcladas con suss grandes rivales de aquella década década, vemos de pie a Carmen Martínez, Marisol Paíno, íno, Elena Sarmiento -la delegada-, Vicente Rodríguez, Maribel Lorenzo, Mª José Presa y Ángeles les Liboreiro. Y agachadas: Virginia Barros, Gloria Martínez, Amparo Dios -de espaldas-,, Pepa Calvet, Ángeles Todo y Susana García.
Por parte catalana, entre otras, las intern internacionales Fina García, Neus Bartrán, trán, Conchi Navío, Bové, Rosa y Mercedes Castillo, Katy Martínez… rrotado, el Real Club Celta ffemenino Con el pabellón abarrotado, vivía la jornada más brillante, a mi juicio, de toda su his historia. Se consolidaba con este triunfo, espectacular para un equipo de provincia, vincia, la trayectoria iniciada por las chicas del SEU en los años cincuenta, continuada por el Club Estudiantes con el asce ascenso a Primera en la década écada de los sesenta, y afianzada con el Celta en los primeros ros años de los setenta. Durante las décadas de los setenta y ochenta, Vigo se había convertido vertido en la capital del baloncesto femenino español, así reconocido por los medios de todo el país. Resultó é ésta, condición decisiva para que en el año 197 1974, se le concediera a la ciudad el Campeonato de Europa Junior Femenino, celebrado con un gran éxito de organización y de público.
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Vicente Rodríguez “Cholas”, el entrenador del éxito, es llevado a hombros al finalizar el histórico partido contra las catalanas del Evax Evax.
Seis mil espectadores llenaron el pabellón abellón de As Trav Travesas, y cuentan que quedaron fuera otros dos mil sin poder entrar. Un hecho sin precedentes en el baloncesto femenino de aquella época.
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As Travesas, 1977. En el histórico partido ante las catalanas del Evax, Marisol Paíno se dispone a lanzar a canasta sta bajo la vigilancia de Katy Martínez. Más atrás, Susana García observa el desenlace del ju juego.
Tras la victoria de las viguesas, Marisol Paíno sería pa paseada da en hombros por los incondicionales hinchas celestes. La vallisoletana, junto a la leridana Pepa Calvet, habían sido las dos primeras jugadoras llegadas das a V Vigo para jugar en el Celta. Ambas siguen en nuestra ciudad, donde han asentado su vida vida. Ciertos problemas con n la selección n nacional dieron lugar ese año a una serie de estridentes declaraciones de directivos catalanes, que trascendieron en e el ambiente baloncestístico de todo el país. Al final, nal, la situación denunciada se aclaró, y Marisol Paino continuó jugando con el Cel Celta durante varias temporadas, contribuyendo con su juego a los muchos títu títulos conseguidos en aquellos años. Muy querida por la afición, ha sido tal vez la mejor ala-pívot pívot de la historia céltica.
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Ángeles Liboreiro, emblemática jugadora del Real Club Cel Celta, durante el mencionado Celta-Evax que nos valió el primer títu título de Liga.
Debutó con el Real Club Celta en Primera División en la temporada 1973/74 con tan sólo quince años. E Era yo en aquel momento su entrenador, nador, y en el primer partido de Liga, C.D. Mataró-R.C. Celta, salió al campo po a los ci cinco minutos de juego, y ya desde entonces, se asentó como titular fija para el resto de su trayectoria en el equipo celes leste. Aquel mismo año, junto a Susana García y Carmen Fraile, fue internacional junior en el Campeonat Campeonato de Europa celebrado en Vigo. Las tres, más tarde, de, serían internacionales absolutas en muchas ocasiones. En la campaña de su debut, también el de Susana con dieciséis años, se proclamarían ían campeonas en la I Edición del Campeonato de España Junior. nior. Estaban dirigidas por Vicente Rodríguez. A sus cincuenta y un entorchados de internacional, hay que añadir el premio de “Mejor Deportista de Vigo 1975 1975”.
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La prensa viguesa dedicó planas enteras a la brillante jornada. “El Pueblo Gallego”, “Faro de Vigo” y “Hoja del Lunes”, se extendieron en toda clase lase de elogios hacia el equipo céltico.
Una panorámica de As Travesas. A lo largo de sus cuarenta años de existencia, muy pocas veces se ha podido repetir un lleno.
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Meses después se organizó un partido homenaje contra el conjunto francés del Clermont Ferrand, por entonces subcampeón de Europa. En “el equipo para la historia”, como lo titularon en la prensa, falta la pívot Carmen Martínez, que en esas fechas jugaba con la selección española junior en tierras catalanas. En la página siguiente, Anselmo López, presidente de la Federación Española de Baloncesto, loncesto, entrega el trofeo de Ca Campeón de Liga 1976/77 a la capitana del Real Club Celta, Amparo Dios. A su lado, aplaudiendo, el directivo céltico Ismael Pérez Izaguirre. Detrás, las gradas del pabellón repletas de afi aficionados que se sumaron con entusiasmo al homenaje a las campeonas, tributándoles generosos aplausos cuando una a una fueron rrecogiendo la reproducción de la copa. El Real Club Celta lta ya formaba parte de la se selecta lista de campeones de la Liga femenina, reservada hasta la fecha a cat catalanass y madrileñas, a excepción de un título ganado por el Med Medina de A Coruña a finales de los años sesenta.
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El equipo herculino,, entrenado por Fernández Trigo, y con las hermanas as Gómez de Frutos como principales estrellas, se convertiría más tarde en la Tabacalera Tabacalera. La acostumbrada rivalidad A Coruña-Vigo Vigo se extendería también al basket femenino, hasta que a finales de los os setenta el conjunto coruñés desaparecía.
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Los partidos R.C. Celta - Íntima-Picadero Picadero, años setenta, siempre resultaban vibrantes, con abarrote de aficionados en las gradas, y dispu disputa titánica en el parquet. La catalana Rosa Castillo por los suelos, en dura lucha con Marisol Paíno por hacerse con el balón.
Ángeles Liboreiro,, rodeada de las francesas del Clermont Ferrand, durante el partido celebrado en homenaje a las campeonas de Liga.
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Tras la marcha de ”Cholas holas”, después de una temporada llena de “problemas diversos” con algunas jugadoras e incluso con parte de la prensa local, asume la dirección del equipo José Benedicto, ”Chachi”, -entrenador dor que fuera del Bosco, y del M Manuel Álvarez-,, que, sin experien experiencia alguna en el baloncesto femenino, conduce al Celta, sin hacer ruido, a su segundo título de Liga.
Temporada 1978/79 Real Club Celta - Campeón de Liga Primera División De pie:: Elena Sarmiento (delegada), Carmen Martínez, Ma Maribel Lorenzo, Rosa Álvarez, Marisol Paíno, Ángeles Liboreiro y José Benedicto “Chachi” (entrenador). Agachadas: Virginia Barros, Rubí Álvarez, Begoña, Pepa Cal Calvet, Dori Barciela y Susana García.
A pesar del triunfo y de haber sido nombrado por los medios de comunicación, “Entrenador del año”, la directiva céltica no renovó a”Chachi” en su car cargo. Se habló en su día de unas pretensiones económicas que fueron rechazadas de inmediato inmediato, y que no se llegaron a negociar… … Es presumible que las relaciones entre ambas partes no fuesen precisamente cordiales.
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As Travesas, 1978.. El Real Club Celta se acaba de proclamar Campeón de Liga por segunda vez. Las jugadoras se abrazan alborozadas al finalizar el último encuentro que les otorgaba el título. Ángeles Liboreiro, Marisol Paíno, Maribel Lorenzo (14), Rosa Álvarez, Dori Barciela -a la izquierda izquierda-, Virginia Barros -con trenza-… En el centro, Chachi, el entrenador del triunfo, con rostro emocionado. A la derecha, Pousa, apasionado directivo del club.
El pabellón a rebosar, como de costumbre cuando se di disputaba encuentros decisivos. Las catalanas del Íntima Íntima-Picadero, vigentes ntes campeonas, serían de nuevo las grandes rivales. El d domingo, 11 de abril de 1979, quedaba acuñada como otra fecha histórica del baloncesto vigués. Las “niñas” célticas, a lo largo de toda una década, se habían ganado a pulso a su afición, que siempre les respondió pondió con asistencia fiel y ánimo incansable. Las jugadoras as gozaron en esos años setenta y ochenta de una popularidad impensable en un equipo femenino de b baloncesto. Eran conocidas y salud saludadas por las calles de la ciudad. Fueron tan queridas por los vigue vigueses, que tal vez por ello algunas foráneas se asentaron definitivamente efinitivamente en nuestra tierra tierra. La leridana Pepa Calvet, las vallisoletanas Marisol Paíno y Nieves Lobón, la salmantina Juana Ingelmo… todas ellas residentes en Vigo en la actualidad.
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As Travesas, 11 de abril de 1979.. Final de partido y alborozo en el banquillo vigués. Chachi, el entrenador, y las jugadoras Rosa, Virgi Virginia, Rubi y Begoña expresan su euforia. Con el triunfo sobre el Íntima por 56 56-46, el Real Club Celta ganaba su segundo título de Liga.
Un aficionado abraza a Marisol Paíno,, la máxima anotadora del encuentro con 18 puntos. A un lado Virginia Barros, y Chachi al fondo.
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Sería Paco Martínez el sucesor de “Chachi” en el banquillo celeste. Con on anterioridad, ya había sido entrenador de los equipos juniors del Celta. Por él pas pasaron en su formación inicial Ángeles Liboreiro, Susana García, Carmen Martínez… Las laboriosas gestiones del nuevo presidente de la se sección, Luis Fernández Castro, con los dirigentes de Citroën Hisp Hispania, llegan a un feliz acuerdo. La fotografía para la prensa da fe del acto: los dirigentes aparecen con las célticas, ya equipadas con los colores de la a empresa automovilística, amarillo y azulina, por aquel entonces. Por primera vez, el Real Club Celta Femen Femenino contaba con un sponsor. En vestimenta deportiva, la firma “Adidas” ya lo era desde hacía unos años. La nueva coyuntura arranca con el subcampeon subcampeonato de Liga, y sobre todo, con la primera Copa de la Reina que gana el equipo celeste. En la Fase Final -celebrada en Vigo-, se impone al Comansi de Barcelona por un contundente 74 74-58. Se iniciaba un patrocinio, el de Citroën, que duraría hasta 1988, momento to en que, por sorpresa, la directiva presidida por Ribadulla suprimía la sección de baloncesto.
Temporada 1980/81. Real Club Celta Citr Citroën Subcampeón de Liga y Campeón de la Copa de la Reina
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La fotografía de la página anterior recoge la escena final del acto. Se acababa de firmar el patrocinio de Citroën con el Real Club Celta Femenino, y los directivos de ambas entidades posan para la prensa con la plantilla del equipo. De pie: Ángeles Araújo, jo, Marisol Paíno, Luis Fernández Castro -presidente de la sección sección-, José Riego -presidente del R.C. Celta-, Luis Zapatero -director director de Citroën Hispania Hispania-, Paco Martínez -entrenador-, Elena na Sarmiento -delegada-, Juana Ingelmo y Rosa Álvarez. Agachadas: Sole Granados, Pepa Calvet, Ana Ruth Ce Cerdeira, Paula Crespo, Gemma ma Domínguez y Susana García.
As Travesas, temporada 1981/82. /82. Partido de División de Honor R.C. Celta - C.N. Canoe de Madrid. Marisol Paíno, en una de sus espectaculares suspensiones. Se puede observar cómo se eleva del suelo, haciendo casi imposible la oposición de sus contrarias. Ha sido una de las mejores jugadoras del Celta de todos los tiem tiempos. La vallisoletana marcó una época gloriosa en el baloncesto vigués vigués. Era muy admirada y querida por la afición céltica que, ante toda controversia, siempre estuvo a su lado.
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As Travesas, 1981/82. División de Honor R.C. Celta – C.N. Canoe de Madrid. La pívot céltica Carmen Martínez se dispone a anotar una canasta ante la impotencia de sus rivales.
Carmen Martínez, jugadora ugadora de la cantera, descubierta e iniciada por Paco Martínez, nez, era una jugadora temible bajo los aros. De gran potencia y excelente rebote, llegó a internacional en 39 ocasiones, y sucedió a la malograda Maribel Lorenzo en el puesto de pívot. Hasta los años noventa, la cantera viguesa siempre aportó excelentes jugadoras par para el primer equipo. Unidas a tres o cuatro refuerzos del exterior, nuestras representantes h han permanecido cerca de treinta nta años al más alto nivel del basket nacional. Sin embargo, en n los últim últimos tiempos las jugadoras locales han desaparecido aparecido lamentablemente de la primera plantilla del R.C. Celta. En esta primera década del 2000, tan sólo Tamara Abalde ha cubierto esa representación representación. La pregunta es evidente: ¿Por qué antes sí y ahora no? ¿Resulta más fácil, más seguro y más barato comprar que trabajar la cantera? Puede ser, pero la identidad tidad viguesa del Celta se pierde… y eso no gusta.
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As Travesas, 1980. La salmantina Juana Ingelmo en un partido contra el Íntima-Picadero de Barcelona.
Las catalanas, con anterioridad denominadas Club Picadero -el el club con los derechos derechos-, Piceff, Evax-Picadero, ÍntimaPicadero, y más tarde Comansi Comansi-Picadero, se convirtieron en las grandes rivales del Celta en los años setenta y ochenta. Juana Ingelmo, tras ras su retirada a mediados de los ochenta, trabajó intensamente con la cantera céltica. Al frente del equipo junior,, el Celta conseguiría su segundo título de Campeón de España de la categoría.
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Más adelante -tras tras la desaparición del Celta Celta-, lograría recuperar el puesto en la élite para nuestro baloncesto femenino, como entrenadora de un nuevo equipo, el Club Xerox-Vigo, del que ya hablaremos.
Pabellón de As Travesas, 1981 Real Club Celta Celta-Citroën, Campeón de Copa De pie: Miroslav Vorjic (preparador arador físico), Rosa Álvarez Álvarez, Juana Ingelmo, Paco Martínez (entrenador), Elenaa Sarmiento (delegada), Ma Marisol Paíno y Ángeles Araújo. Agachadas: Sole Granados, Gemma ma Domínguez, Pepa Calvet, Ana Ruth Cerdeira, Paula Crespo y Susana García.
Es de destacar en este equipo la presencia del preparador físico yugoslavo Miroslav Vorjic Vorjic, que a su trabajo profesional en el equipo de futbol, añadió por voluntad propia su valiosa aportación al baloncesto. Lástima que su estancia en e el Real Club Celta se redujera tan sólo a esa temporada. Debutaban en el equipo varias jugadoras: la madrileña Sole Granados, las salmantinass Juana Ingelmo y Rosa Álvarez, la lucense Gemma ma Domínguez, y las viguesas de la cantera, Paula Crespo y Ana Ruth Cerdeira. También su entrenador, Paco Martínez, hacía su debut en Primera División.
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Habテュan sido bajas,, en cambio, テ]geles Liboreiro -tal vez por maternidad- y Carmen Martinez, tentada por la buena oferta del Club Iberia-Alcalテ。 de Madrid.
As Travesas, 1981. Susana Garcテュa, capitana del Celta, alza la Copa de la Reina, tras vencer en la final con autoridad a las catalanas del Comansi-Picadero Picadero por 74-58.
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El domingo, 3 de mayo de 1981 1981, el R.C. Celta escribĂa otra pĂĄgina para la historia, con As Travesas al completo y vibrando de emociĂłn.
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No hubo jugadora, ni técnico, ni directivo, que haya aportado tanto al Real Club Celta como Susana García. Con dieciséis años ingresa en el equipo, temporada 1973/74, y en el 2009, en el momento de escribir esto, ejerce como ayudante del entrenador en el conjunto actual. Ha permanecido en el club durante más de treinta años. Varios títulos de Liga y Copa, más de 70 veces internacional, entrenadora titular del primer equipo, ayudante después, ayudante del entrenador en la Selección de España en los Juegos de Pekín, en los Campeonatos de Europa… Su historial es inacabable. Susana García es, sin duda, la baloncestista más valiosa de la historia del basket vigués.
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As Travesas, temporada 1981/82 Real Club Celta-Citroën, Campeón de Liga y Copa De pie:: Antonio Fernández (preparador físico), Carmen Martínez, Marisol Paíno, Juana Ingelmo, Nuria Vila, Gloria García García, Ángeles Araújo, y Nacho Polo (entrenador). De rodillas:: Elena Moreno, Sole Granados, Belén Iglesias, Rocío Jiménez y Ángeles Liboreiro.
Por primera vez,, temporada 1981/82 -sería la única a lo largo de los cuarenta años de su historial-, el Real Club Celta conseguiría adjudicarse judicarse el doble doblete: la Liga y la Copa de la Reina. Con una excelente plantilla plantilla, cuajada de internacionales, y dirigida por la mano experta del madrileño Nacho Polo -ex jugador del Porcelanas Santa Clara, y afincado en Vigo durante varios años-, el equipo alcanzaría zaría el título de Liga en un trepidante partido final ante un clásico rival, el Comansi de Barcelona. Tan reñida estuvo la competición, que se hubo de recurrir al basketaverage particular para decidir el campeón. Las catalanas habían vencido en su campo por 10 pun puntos, y el Celta ganó en Vigo por 66-55, diferencia mínima que le valió el campeonato campeonato, y que hizo vibrar hasta el último segundo de del encuentro a todos los aficionados que abarrotaban As Travesas Travesas. En un 28 de marzo, “Día de
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A Reconquista”, “las niñas” célticas conquistaban su tercer título de Liga.
Ésta es la extraordinaria plantilla del Real Cl Club Celta que consiguió ganar la Liga y la Copa de la Reina en la misma temporada temporada. Menos Juana Ingelmo y la novel Nuria Vila, todas internacionales.
Ell Real Club Celta Femenino escribía una nueva página para la historia. Ya había llenado a reventar el Pabellón de As Travesas en 1977 con el primer título de Liga Liga. Lo repetiría en 1979 con el segundo. Ahora, en 1982, lla fiel afición céltica asistía entusiasmada a la consecución del tercer campeonato campeonato.
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“Faro del Lunes” da cuenta en primera plana de la victoria del R.C. Celta, y de la extraordinaria jornada vivida en el Pabellón de As Travesas. Un público fi fiel y entusiasmado se volcó dando ánimo a las celestes desde el primer minuto de partido, y disfrutó emocionado con la consecución del tercer título de Liga. ¡Día de fiesta iesta para el recuerdo!
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En la temporada siguiente siguiente, 1982/83, el Celta no pudo siquiera aproximarse al éxito de la campaña anterior, a pesar de contar con una plantilla casi idéntica.
Real Club Celta-Citroën, 1982/83 Ingelmo, Ángeles Araújo, Nuria Vila y Carmen De pie: Marisol Paíno, Juana Ingelmo Martínez. Agachadas: Sole Granados, Belén Iglesias, Elena Moreno, Mónica Alcayde e Isa Gil.
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Marisol Paíno en una acción n defensiva ante el Creff madrileñ madrileño. Sus portentosas condiciones físicas quedan dan de manifiesto en esta instantánea instantánea.
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La internacional céltica Carmen Martínez Martínez, en un lance del juego ante el equipo madrileño del Iberia Iberia.
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En la temporada 1983/84 llega a Vigo la estadounidense Theresa Huff, alero de 1,83 -en relación al informe previo de su representante, había encogido un poco en el viaje-, jugadora de extraordinarias facultades, y ofrecida al Celta por el entonces reconocido agente Bruce Levy. Aterrizaba en Peinador el 30 de septiembre de 1983 para ponerse a las órdenes de Vicente Rodríguez. Fue la segunda extranjera contratada por el R.C. Celta. La primera en 1977, también con “Cholas” como entrenador, había sido la pívot peruana Katia Manzur, que no aportó demasiado a una plantilla plagada de internacionales españolas en aquel momento. Bien es cierto, que sus condiciones económicas no debían exceder mucho más allá del coste de los viajes y el hospedaje. Terry Huff vino al Celta con un contrato de 10.000 dólares, y su fichaje marcó el inicio de la llegada de extranjeras a nuestro país. Los medios se hicieron eco del acontecimiento, generando una fuerte polémica en el ambiente del baloncesto femenino nacional, que veía peligrar con la nueva situación la tradicional hegemonía de madrileñas y catalanas. Sin embargo, a pesar de la presencia de Terry Huff, la Liga de esa temporada se fue para el Canoe madrileño. No así la Copa, que por tercera ocasión se la adjudicaba el Celta, tras vencer al Canoe por 77-74 en una disputada final celebrada en Santiago. Por primera vez, un equipo femenino español conseguía un título con la aportación de una extranjera. Eran los comienzos de una nueva generación de prometedoras jugadoras. La leonesa Piluca Alonso, Belisa González, Mery Pereira, las hermanas Piñeiro… que junto a la vallisoletana Nieves Lobón –se incorporó en la temporada siguiente-, se proclamarían campeonas de España Junior en 1984/85, el segundo título de esta categoría que llegaba a las vitrinas célticas. El trabajo intenso de “Cholas” con este grupo, y su amplio conocimiento del “mercado” español, empezaban a dar sus frutos. En la etapa anterior, Marisol y Pepa habían sido sus grandes fichajes. Ahora, eran Piluca Alonso y Nieves Lobón, quienes aportarían muchos años de alto rendimiento al baloncesto vigués.
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Temporada 1983/84. Terry Huff,, la primera extranjera “con con contrato” llega da al baloncesto español, pañol, y la primera también en ganar un título nacional femenino, la Copa con el Celta-Citroën.
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Temporada 1983/84 Real Club Celta Citroën Campeón de la Copa de la Reina De pie: Carmen Martínez,, Ángeles Araú Araújo, Piluca Alonso, Vicente Rodríguez (entrenador), Elena Sarmiento (delegada), Floriano Fernández (preparador físico), Terry Huff, Mery Pereira y Juana Ingelmo. Lago, Elena Moreno, Susi Piñeiro y Agachadas: Belisa González, Isa Piñeiro, Celia Lago Ángeles Liboreiro.
Vicente Rodríguez,, en su segunda etapa como entren entrenador céltico, había reunido una formidable plantilla, enriquecida aún más si cabe, por la prometedora presencia de jugadoras juniors. El futuro estaba aba garantizado y la aportación de las jóvenes resultaba cada día mejor. Pero se avecinaban malos tiempos. Las di dificultades económicas micas mermaban las opciones de mantener una plantilla de tan elevado nivel. La esperanza estaba depositada en la cantera, y en ella se venía trabajando bajando con ahínco y esperanzadores resultados. Los directivos del fútbol apretaban, evidenciando un ínfimo interés por el baloncesto. oncesto. A Año tras año, trataban de rebajar el presupuesto del equipo femenino femenino.
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Real Club Celta-Citroën, 1985/86 ador), Pi Piluca Alonso, Sheila Ford, Mery Pereira, De pie: Vicente Rodríguez (entrenador), Juana Ingelmo, Carmen Martínez, Ángeles Araú Araújo y Floriano Fernández (preparador físico). Ángeles LiboAgachadas: Elena Moreno, Celia Lago,, Isa Piñeiro, Sole Granados, Án reiro, Belisa González y Susana García.
Las relaciones de Luis Fernández Castro Castro, presidente de la sección, con la directiva del Real Club Celta -de fútbol, naturalmente- empiezan a tensarse cada vez más. El fútbol pretende acaparar en su totalidad el apoyo económico de Citroën, y el presupuesto del baloncesto decrece año tras año. El patrocinio de la empresa automovilística había llegado de la mano del el baloncesto en el año 1980, después de una larga y laboriosa negociación de Fernández Castro con los mandat mandatarios de Citroën Hispania.. Años después, esa ayuda se amplió al fútbol con una mayor aportación tación económica. La avidez de los directivos del fútbol no tenía límite, y la situación se hizo tan insostenible, que Luis Fernández Castro se vio obligado a presentar su dimisión como presidente de la sección de baloncesto. Con él se iban el resto de los directivos: Elena Sarmiento -la veterana delegada delegada-, Ismael Pérez Izaguirre, Severino Vilas -delegado delegado de campo campo-, Pousa… Vicente Rodríguez, en solidaridad con su directiva, también abandona el club. Comienza una nueva etapa con otra directiva céltica, comandada dada por Victorio Alonso, Floriano Fernández, Alberto Morenza, Juan Ayres,, José María Gasalla Gasalla... Por desgracia, sería muy corta. Tan sólo tres temporadas más tarde, los dirigentes del
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fútbol -el presidente Ribadulla adulla y el gerente Quinocho como pri principales responsables- eliminarían del Real Club Cel Celta a la sección de baloncesto femenino.
Real Club Celta-Citroën, 1986/87 De pie: Floriano Fernández (preparador físico), Nieves Lobón, Piluca Alonso, Mery Pereira, Trina Trice y Pepe Merino (entrenador) (entrenador). Agachadas: Ana Ruth Domínguez, Nuria Figueroa, Belisa González, Rosa Costas y Susana García.
Tras el relevo directivo, los dirigentes entrantes se encuentran con una plantilla destrozada. Parte de las jugadoras se sumaron al plante de sus directivos y entr entrenador, y abandonaron el club por una causa u otra.. Seis bajas de importancia dejan al equipo en cuadro. Carmen Martínez y Ángeles Araujo, atendiendo tentadoras ofertas, fichan por el Alcalá y el Donosti respect respectivamente. La donostiarra Elena Moreno y la ma madrileña Sole Granados regresan a sus casas. Ángeles Liboreiro y Juana Ingelmo se retiran. Para dirigir el equipo fichan al madrileño Pepe Merino, que pasaría por Vigo con más pena que gloria. También hay que reconocer que la plantilla en ese momento no daba para mucho más que no fuera conseguir una mediana clasificación en la Liga, como así fue.
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La céltica Susana García, en una de sus clá clásicas entradas a canasta. Jugadora hábil, rápida y aún encima zurda, muy difícil de para parar en sus penetraciones. Buena lanzadora a media distancia, y excelente en el contraataque, estaba considerada una de las mejores bases del baloncesto nacional.
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Pabellón de As Travesas, temporada 1987/88 Real Club Celta-Citroën De pie: Rosa Costas, Carmen Martínez, Piluca Alonso, Floriano Fernández (preparador físico), Julio Bernárdez (entrenador), Lisa Vangoor, Anabel, Mery Pereira y Nieves Lobón. De rodillas: Carmen Patiño, Kim Hampton, Edita Pereira, Isa Piñeiro, Belisa González, Susana García y Susi Piñeiro.
Discreta actuación liguera del equipo dirigido por Julio César Bernárdez, técnico que debutaba así en el baloncesto femenino. Plantilla demasiado joven para poder optar a grandes logros, pero que en cambio ofrecía prometedoras expectativas con vistas a un futuro cercano. En la recta final de la Liga, unas palabras de Julio Bernárdez con el presidente del fútbol, Ribadulla, dieron lugar a su cese. La exigencia del máximo mandatario tuvo que ser atendida por los rectores de la sección de baloncesto, que, al parecer, esgrimieron motivos técnicos para esa decisión. Le sucedía en el puesto Susana García, que daba así sus primeros pasos en el banquillo celeste. Pero lo que ya se vaticinaba desde hacía bastantes años, llegó al fin. En agosto de 1988, cuando el primer equipo se encontraba en Canarias jugando un torneo de pretemporada, se
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recibe cibe la noticia: el Real Club Celta de baloncesto femenino se retira de la competición y desaparece. No hubo tiempo de rea reaccionar. Meses después, en Magistratura, el Real Club Celta de Fútbol hubo de atender lass demandas de varias de las jugadoras y técnicos, e indemnizarles con un montante de cuatro millones quinientas mil pesetas.. Con anterioridad anterioridad, ya le habían abonado un millón a la americana Sheila Collins Collins, y un millón seiscientas mil a la entrenadora catalana Car Carma Lluveras.
Concluía de esta forma tan triste, una brillante etapa del Real Club Celta Femenino. Quedaban atrás veinte años de historia, llenos de títulos, de internacionales, de jornadas memorables con un público entregado,, de enorme prestigio alcanzado en la cancha con el esfuerzo y la ilusión ilusión… ¡Qué pena!
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Ell baloncesto femenino vigués quedaba sumido en un decepcionante vacío. No sobrevivió casi nada, pero con ese “casi”, con muy poco, David Hortas, tomó el testigo. Este político lucense recién afincado en nuestra ciudad, fundaría la Agrupación Deportiva Vigo, que no hacía otra cosa que recoger los escasos restos del club desapareci desaparecido, e intentar algo que en principio parecía imposible: primero la supervivencia, luego el ascenso, y más tarde recuperar el lugar de privilegio que las “niñas” habían alcanzado a lo largo de su historia historia.
David Hortas, segundo por la derecha, en un acto de presentación de un torneo juvenil. A su lado, por la izquierda, el presidente de la Federación Gallega, Paco García, y el presidente de la Gallega-Sur, Sur, José Fernández Ferro. Delante de ellos, el cartel anunciador de la firma patrocinadora del club, XEROX, salvadora con su apoyo en los tiempos pos más complicados del baloncesto femenino. También se había logrado como sponsor de la vestimenta deportiva a la marca americana New Balance.
Las categorías inferiores serían acogidas por el Club Deportivo Bosco, y el primer equipo pasaría a denominarse Club Xerox Vigo. Comenzaba así una andadura de tres temporadas con el objetivo de reintegrar integrar e el baloncesto femenino vigués a la máxima categoría. De la mano de la ex jugadora céltica Juana Ingelmo, y con la colaboración en la preparación física de Floriano Fernández, el Club Xerox Vigo conseguiría el ascenso a División de
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Honor en la temporada 1990/91, objetivo imposible de lograr en menos tiempo. David Hortas tas ha había recuperado a dos jugadoras muy importantes tes para el equipo: Nieves Lobón y Ángeles Araújo. La valiosa aportación de ambas ambas, sin olvidar el excelente rendimiento de las jóvenes de la cantera, resultaría decisiva para el ansiado ascenso.
Parque de Castrelos, 1990. Entrenamiento de pretemporada del Club Xerox Vigo,, ya con la incorporación de las internacionales Nieves Lobón y Ángeles Araújo.
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As Travesas, 1990/91. Club Xerox Vigo. Ascenso a Primera División De pie: Milagros García,, Consuelo García, Susana Pomar, Anabel Rojo, Ángeles Araújo y Nieves Lobón. De rodillas: Kel Kelly García, Belisa González, Carmen Victoria, Mónica Núñez, Carmen Patiño y Rosa Costas Costas.
As Travesas, 1991/92.. Club Xerox Vigo. Primera División De pie: Lisa Ingrand, Anabel Rojo, Gem Gemma, Ana Scheidgen (Directora de New Balance), Mar Xantal, Oranda Rodríguez, Kelly García y Carol Lewis. De rodillas: Ana Álvarez (ayudante), Esther, Belisa González, Lidia Gesteira, Susi Pérez, Nieves Lobón y Carma Lluveras (entrenadora).
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As Travesas, 1991/92 Primera División Femenina Partido Club Xerox Vigo-Estudiantes Estudiantes Caja Postal de Madrid Kelly García, defendiendo el balón. A la izquierda, Ángeles Araújo
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Club Xerox Vigo, 92/93. Primera División. De pie: Jorge (Ayudante), Candy, Erika Burianova, Ana Álvarez (Entrenadora), ntrenadora), R. Jiriakova, Mar Xantal y Susi Pérez. Sentadas: Kelly García, Nieves Lobón, Carmen Victoria, Belisa, Lidia Gesteira y Mayte.
Club Xerox Vigo, 93/94. Primera División División. De pie: Ana Álvarez (entrenadora), Nieves Lobón, Piluca Alonso, Renata Jiriakova Jiriakova, Mar Xantal y Jorge (ayudante). De rodillas: Belisa González, Bea, Patri, Noa Villamor, Yolanda y Montse Coello Coello.
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El Club Xerox Vigo recupera recupera, entonces, el lugar de privilegio que había ostentado el baloncesto vigués en las décadas de los setenta y ochenta. Sus buenas clasificaciones en la Liga le dan derecho a participar durante varias temporadas en la co competición europea “Liliana Ronchetti”. El nombre de Vigo de nuevo en Europa: Francia, Rusia, Italia, Israel, Alemania… El renovado club marcaría una década, empezando desde abajo -como como lo hizo el Club Estudiantes en los años sesenta sesenta-, y escalando peldaños hasta alcanzar los primeros puestos de la Liga.
As Travesas, 1995/96. Club Banco Simeón Simeón-Vigo Detrás: Polona Dornik, Mar Xantal, Quene Quene, Nieves Lobón, Iria Villar y Silvia Crandley. Delante: Sandra, Andrea Avendaño Avendaño, Ana Álvarez (entrenadora), Belisa González y Alicia García.
Éste sería el último equipo de la Agrupación Deportiva Vigo antes de su definitiva desaparición. Sería también la última campaña para Nieves Lobón en las filas viguesas. En esta temporada hay cambio de sponsor. Del color rojo del Xerox se pasa al verde y all ma marino del Banco Simeón. El incipiente apoyo de la entidad bancaria, ncaria, sería heredado por el Club Deportivo Bosco sco en primer lugar, y por el Real Club Celta más tarde.
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La base Nieves Lobón, indicando jugada. Fue la jugadora más valiosa del Club Xerox Vigo durante la década de los noventa noventa.
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Pero los problemas económicos comenzaban a aparecer, y las consecuencias no tardarían en llegar. La deuda del club había ido creciendo poco a poco, y aunque se intentaba rebajarla apelando a presupuestos futuros, no sólo no se conseguía, sino que aumentaba día a día. El milagro en forma de ayuda institucional no llegaba, y la situación se hizo insostenible. Al finalizar la temporada 1995/96, la Agrupación Deportiva Vigo desaparecía. Todos los intentos por evitarlo resultaron inútiles. Se cerraba otra etapa del baloncesto femenino vigués. En el verano del 96, a la vista de la renuncia del Banco Simeón-Vigo, el último presidente del ciclo masculino del Bosco, José Manuel Gómez Carballo, y el actual presidente del Celta, Paco Araújo, se desplazan a Asturias para comprar plaza en Primera División al Juventud Astur de Oviedo. El C.D. Bosco se hacía con los derechos del club asturiano, recuperaría el nombre de R.C. Celta más adelante -con total independencia del fútbol-, y se disponía a emprender una nueva etapa en la élite del basket nacional. Resulta chocante que los rectores bosquistas no se hubieran dirigido en ese momento a la A.D. Vigo para evitar su desaparición, pero se supone que las elevadas deudas existentes aconsejaban la solución anterior. La herencia estrictamente deportiva, al fin y al cabo, permanecía disponible para su incorporación al nuevo proyecto. Comenzaba así la era moderna del Real Club Celta. Arrancaba la cuarta etapa del baloncesto femenino en Primera División: en su inicio, el Club Estudiantes, con José Nistal como presidente; después, el Real Club Celta de Jaime Gómez, Luis Fernández Castro y Victorio Alonso; luego, la Agrupación Deportiva Vigo de David Hortas; ahora, el Real Club Celta de José Manuel Gómez Carballo y Paco Araújo. Varias marcas comerciales hasta la fecha: Citroën, Adidas, Xerox, New Balance, Banco Simeón, Le Coq Sportive... Umbro, Vigourbán e Indepo llegarían más tarde. ¿El próximo sponsor? No se sabe. El baloncesto femenino siempre ha vivido en el alambre, contra las cuerdas. Ojalá el Real Club Celta actual logre salir adelante en estos tiempos tan complicados.
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As Travesas, 1996/97 C.D. Bosco-Banco Simeón. Subcampeón de la Copa de la Reina De pie: Ana Álvarez (entrenadora), Mar Xantal, Susana Senra, Polona Dornik, Iria Villar y Antonio Ramos (ayudante). Sentadas Sentadas: Laura Grande, Sandra, Alicia García, Andrea Avendaño y Paloma Sánchez.
En el debut del C.D. Bosco Bosco-Banco Simeón, llegar a la final de la Copa de la Reina, se puede considerar como el primer éxito de la etapa moderna del ba baloncesto femenino vigués. Tras eliminar al F.C. Barcelona-C.B. C.B. Universitari en cuartos, y al Hal Halcón Viajes de Salamanca en sem semifinales, se pierde dignamente la final ante el Pool Getafe. Sin embargo, su condición de finalista le daría derecho a participar en la próxima competición europea
“Liliana Ronchetti”. En la temporada siguiente, 1997/98, Vicente Rodríguez, ”Cholas”, se incorpora al reciente proyecto como entrenador. La directiva presidida por Carballo acierta de pleno con el fichaje, que servirá para consolidar el futuro del equipo, y asentarlo de nuevo entre la élite del basket nacional. El club ya compite con el nombre de R.C. Celta-Banco Banco Si Simeón, y recupera para su equipaje los clásicos colores celeste te y blanco blanco, con el correspondiente escudo céltico en la camiseta.
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Es la tercera etapa de ”C ”Cholas” como entrenador del Celta, e igual que en anteriores ocasiones, el éxito no se haría esperar. Con su esfuerzo y talento acostumbrados, u un año después se proclamaban campeonas de la Liga 1998/99, el cuarto título de su historia. Superaban 2-0 0 en el playoff final al Halcón Viajes de Salamanca.
Pabellón O Berbés R.C. Celta-Banco Simeón. Campeón de Liga 1998/99 Euforia céltica a la conclusión el partido decisivo. Con la copa de campeón delante, las jugadoras alzan sus trofeos individuales. A su alrede alrededor, el presidente Gómez Carballo, el segundo por la izquierda.. Al otro lado, Telmo Silva -preparador físico-, Paco Araújo -vicepresidente-,, Horacio Gómez -presidente del R.C. Celta de fútbol-, y Chema Figueroa -concejal concejal de Deportes del Concello de Vigo.
Falta en la instantánea Vicente Rodríguez Rodríguez,”Cholas”, el entrenador del triunfo. Era como una premonición, porque al término de la temporada dejaba el puesto, no se sabe si por vvoluntad propia, o por discrepancias técnicas con los directivos del club. Hasta se habló de algún veto hacia su persona de jugad jugadoras importantes ortantes de la plantilla, al parecer, por entrenar demasi demasiado. No sería la primera vez, ni tampoco la última, que la exige exigencia y dureza de sus us entrenamientos le ocasionaba problemas con las figuras. Pocos meses más tarde tarde, en el año 2000, Vicente era nombrado seleccionador nacional femenino. Su paso por el equipo absoluto de España no pasaría desapercibido.
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El viernes, 30 de abril de 1999 1999, el Real Club Celta ganaba por cuarta vez el título de Liga. En esta ocasión, el Pabellón de O Berbés fue el escenario enario de la hazaña. ¡Jornada gl gloriosa del baloncesto vigués!
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El Pabellón de O Berbés,, con gradas supletorias en los fondos, registró un lleno histórico. Partido trepidante, pleno de emoción e incertidumbre, y apoyo entusiasta de los aficionados célticos a su equipo.
La estadounidense Chasity Melvin dando una asistencia rodeada por las salmantinas Llamas y Bezos. Su compañera Iria Villar bloquea.
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La plana del “Atlántico Diario” da fe de la inolvidable jornada vivida en el Pabellón de O Berbés. Habían pasado diecisiete años desde el anterior título, y el Celta retomaba la hegemonía del basket femenino nacional. Al término de la fiesta hubo baño en la fuente de la Praza de América, escenario habitual de las celebraciones deportivas.
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No faltaron banderas, pancartas, globos, carracas, y tampoco la histórica “Peña del Bombo”… A cuatro minutos del final, con el partido decidido, la afición entonó “A Rianxeira” con una emoción desbordante.
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El sponsor, “Banco Simeón” Simeón”, felicita públicamente a las campeonas en las páginas del “Atlántico Diario”.
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Las campeonas de la Liga son homenajeadas una vez más en el estadio de Balaídos. En el centro del campo reciben en el aplauso de los miles de espectadores que llenaban las gradas.
Un equipo plagado de internacionales hizo vibrar dura durante toda la temporada a una afición entregada. Mar Xantal, Laura Grande, Pilar Valero, Betty Cebrián, Carme González, Paloma Sánchez,, Chasity Melvin, Iría Villar Villar… conquistaban el título diecisiete años después dell logrado en 1982, con el madrileño Nacho Polo como entrenador.
El vigués Telmo Silva,, de la mano del nuevo seleccionador Vicente Rodríguez, se convertiría en preparador físico de la Selección Nacional Femenina. Un éxito más del baloncesto céltico.
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Mar Xantal, la capitana céltica, levanta la copa de la LLiga 1998/99 en O Berbés. La ala-pívot badalonesa, junto a la base Laura Grande, fueron durante esa época las jugadoras más sobresalientes del Celta-Banco Simeón.
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Al Real Club Celta le esperaba la Liga Europea, reservada a los dieciséis mejores equipos del ccontinente. De inmediato surge la duda: ¿habrá presupuesto para participar en una co competición tan costosa? José Manuel Gómez Carball Carballo y su junta directiva deben resolver una complicada papeleta. Vigo confía en
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las ayudas que permitan a “su” Celta pasear por Europa el no nombre de la ciudad. La catalana Ana Junyer recoge el relevo de Vicente Rodríguez en el banquillo celeste.. La marcha del equipo no es satisfactoria, y a mitad de la temporada la directiva decide destituirla. Miguel Méndez toma las riendas de la plantilla,, endereza la situación, y comienza su larga etapa al frente del equipo celeste. En su debut gana la Liga 1999/2000, y una temporada después, la Copa de la Reina, el primer título del Celta en el siglo XXI.
Real Club Celta–Banco Simeón. eón. Campeón de Liga 1999/2000 Plantilla celeste: Laura Grande, Sandra Fernández, Luisa Bisseti, Mar Xantal, Paloma Sánchez, Iría Villar, Erika Dobrovikova, Betty Cebrián, Pilar Valero, Polona Dornik y Mireia Navarrete. Entrenador: Miguel Méndez. Ayudantes: Susana García y Antonio Ramos.
En enero de la temporada siguiente siguiente, 2000/01, en Las Palmas, el R.C. Celta-Banco Banco Simeón se proclamaría campeón de la Copa de la Reina. En la final final, disputada ante el Halcón Viajes de Salamanca,, vencería en un emocionante encuentro por 66-64. Era la cuarta Copa de la Reina que conquistaba el Celta en su historia: la primera, en 1981, con Paco Martínez como e en-
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trenador; renador; la segunda, en 1982, con el madrileño Nacho Polo en el banquillo; la tercera, en 1984, con Vicente Rodríguez; ahora, estrenando el nuevo siglo, con Miguel Méndez al frente de las celestes, se logra la cuarta.
R. C. Celta-Banco Simeón. Campeón de Copa de la Reina 2000/01 De pie: Patricia, Santomé (fisioterapeuta), Mar Xantal Xantal, Iria Villar, Razija Brcaminovic, Ingrid Joukute, David (delegado), Antonio Ramos (ayudante) (ayudante), y Miguel Méndez (entrenador). Sentados: Mireia Navarrete, Noemí Jordana Jordana, Andrea Carrera, Pilar Valero alero y Domingo Salinas (preparador físico) físico). El equipo céltico, a su regreso de Las Palmas, posa para la prensa gráfica en el P Pabellón de Ass Travesas. La Copa de la Reina luce delante del grupo, y las jugadoras alzan alborozadas lass reproducciones individuales recibidas como campeonas.
Dos meses después, la alegría del triunfo copero se vería empañada por el fallecimiento del presidente del club, José M Manuel Gómez Carballo, y del vicepresidente, Camilo Pérez, en desgraciado accidente e automovilístico cuando regresaban de Madrid de hacer gestiones en la Federación Española. Fue tal el mazazo sufrido por el club, que las aspiraciones deportivas para aquella temporada quedaron totalmente aparc aparcadas.
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La estrella croata Razza Mujanovic, toda una leyenda en el baloncesto mundial. Pívot de 2,02 de estatura, ha jugado en Bosnia, Italia, España, Brasil, Hungría, USA -en la WNBA-, y ahora mismo, 2010, con cuarenta y dos años, en su país, Croacia. Llegó al Real Club Celta en el año 2000 y permaneció dos temporadas en el club. Más adelante, en el 2007, jugaría una Liga más con el club celeste. Su palmarés es extraordinario: Campeonatos de Europa de Clubs, Ligas y Copas Nacionales, Medalla en el Europeo Cadete, Juvenil y Junior, Plata en los Juegos de Seúl, Plata en el Mundial-90. Plata en el Europeo-91…
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R.C. Celta-Banco Banco Simeón. Campeón de Copa de la Reina 2000/01 De pie: Mireia Navarrete, Ingrid Joukute, Domingo Sa Salinas (preparador físico), Suso Santomé (fisio), Antonio Ramos (ayudante) (ayudante), Susana García (ayudante), Miguel Méndez (entrenador), dor), David (delegado), Iria Villar y Razija Mujanovic. Sentadas: Mar Xantal, Patricia Quiroga, Andrea Carrera, Noemi Jordana, Pilar Valero y Laura Grande.
Unos días antes del desgraciado accidente, José Manuel Gómez Carballo, el presidente, posaba orgulloso con los trofeos ganados por el Real Club C Celta bajo su mandato: Subcampeonato de la Copa de la Reina 1997/98, Copa de la Reina 2000/2001 y título de Liga 1999/2000.
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Real Club Celta-Banco Simeón, 2001/02 01/02 De pie: Iría Villar, Racija Mujanovic, novic, David (delegado) (delegado), Susana García (ayudante), Miguell Méndez (entrenador), Antonio Ramos (ayudante) (ayudante), Domingo Salinas (preparador físico), Cindy Lima y Mar Xantal. Jordana, Marta CoSentadas: Laura Grande, Pilar Valero, Andrea Carrera, Noemí Jordana bián, María Vilouta y Mireia Navarrete.
Real Club Celta-Banco Banco Simeón, 2002 2002/03 De pie: Cindy Lima, Sonia Kireta, Iria Villar Villar, Renata dos Santos, Cristina Cantero, Olalla Fernández y Noemí Jordana. drea Carrera Carrera, Ángela (aficionada fiel desde los años Sentadas: María Vilouta, Andrea setenta) y María Revuelto.
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En la temporada 2002/03 se producen tres bajas impo importantes en la plantilla: Laura Grande, Mar Xantal y Pilar Valero. Las tres habían ían sido jugadoras fundamentales del Celta en los últimos tiempos. El club apuesta por jóvenes valores como Cristina Cant Cantero y María Revuelto, e inicia un nuevo ciclo marcado por el a aumento de presupuesto de la mayoría de sus equipos rivales. El mercado nacional se hace inaccesible, y el potencial del Celta se resiente. Los puestos de cabeza empiezan a quedar lejos. E El excelente rendimiento de la croata Sonia Kireta, permite salvar la temporada a con un discreto quinto puesto.
Susana García lo ha sido todo en el R.C. Celta: jugadora, entrenadora y ayudante. En este puesto cumple, en el 2009/10, su décima temporada en el banquillo celeste.
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Real Club Celta-Banco Simeón 2003/04 De pie: Domingo Salinas (preparador físico), Lucie Blahuskav Blahuskava, Elvira Torres, Cindy Lima,, Susana García (ayudante), Miguel Méndez (entrenador), Sheila Alaña, Emilia Podrug, Cristina Martín y David (delegado) (delegado). De rodillas: Andrea Rodríguez, Gemma ma García, Noemí Jo Jordana, Cristina Cantero, María Revuelto y Andrea Carrera. El 13 de Marzo de 2004 debutaba en este equipo Tamara Abalde con tan sólo 15 años.
Miguel Méndez,, al finalizar esta temporada y a voluntad propia, aban abandona la dirección del R.C. Celta tras cinco años en el banquillo, y con una Liga y una Copa de la Reina en su palmarés.
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Después de nueve temporadas apoyando el baloncesto vigués, el Banco Simeón deja de sponsorizar al Real Club Celta. La firma inmobiliaria Vigourbán recoge el relevo.
La internacional Alba Torrens con el nuevo equipaje céltico, en el que se presenta a la firma VIGOURBÁN como sponsor principal.
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Real Club Celta-Vigourbán 2004/05 04/05 De pie: Ega Garvao, Tamara Abalde, David (delegado), Carlos Iglesias (entrenador), Carlos Álvarez rez (videpresidente), D. Salinas (preparador físico), Sheila Alaña y Leila de Souza. Cantero, María Revuelto, Andrea CarreDe rodillas: Evanthia Maltsi, Elvira,, Cristina Cante ra, Gemma García, Cristina Martín y Ana Peleteiro.
El maño Carlos Iglesias sustituye en el banquillo a Miguel Méndez, que por propia voluntad deja el club para ir a entrenar a Francia, aspiración que no pudo concretar por falta de convalidación de su título español en Europa Europa. El entrenador vigués se vería en una desilusionante situación. La temporada ada comenzó titubeante, y a los pocos meses, la croata Natasha a Ivancevic hubo de ser sustituida por la brasileña Ega Garvao. Entre ella y su compatriota Leila de Souza, además más de buen rendimiento de la griega Evanthia Maltsi, se lograría enderezar el rumbo y terminar la Liga en un discreto quinto puesto. En la Liga 2005/06, el Real Club Celta sufre el peor m momento de su historia moderna. El entrenador Carlos Iglesias es destituido, ituido, y su lugar en el banquillo lo vuelve a ocupar Miguel Méndez. La situación no mejora, y hasta la última jornada no se lograría la salvación. Pese a la derrota final, las célticas evitan el descenso merced a una milagrosa combinación de resultados de otros equipos implicados en la lucha por la permanencia.
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Real Club Celta-Vigourbán Vigourbán 2005/06 2005/06. De pie: Ángela Zampella, Tamara Abalde, Ana Perovic, Leila de Souza y Paula S Seguí. De rodillas: Ana Lelas, Gemmaa García, Andrea Carrera, María Revuelto y Cri Cristina Cantero. Entrenador: Carlos Iglesias, y trass su destitución, Miguel Méndez. Ayudantes: Susana García y Pelayo Suárez. Preparador físico: Domingo Salinas. Falta en la fotografía Bridget Pettis.
Real Club Celta-Vigourbán Vigourbán 2006/07 2006/07. De pie: Alba Torrens, Tamara Abalde, Salinas (preparador físico), Miguel Méndez (entrenador), Susana García (ayudante), Cintia dos Santos y Elvira Torres. Sentadas: Leila de Souza, Ivana Vorackova, Gemma García,, Choche Alonso, Cristina Cantero y Elvira Elvira.
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En la temporada 2006/07 se revivía el sufrimiento de la campaña anterior.. El bajo rendimiento de las extranjeras, a e excepción de la brasileña Cintia dos Santos, lllevó al equipo a jugarse de nuevo el descenso enso en la última jornada. Un meritorio triunfo sobre el Puig Den Valls en Ibiza, p por 54-60, les salvó del desastre.
Real Club Celta-Vigourbán 2007/08 2007/08. De pie: Pelayo Suárez (ayudante), Maja Erkic, Razza Mujanovic, Susana García (ayudante), Miguel Méndez (entrenador), Laura Nicholls, Adrianne Davie y Telmo Siva (preparador físico). na Sviltica, Pilar Valero, Mónica Jorge, María Fer Fernández, Gemma Sentadas: Dragana García, Maja Miljovic y Maja Erkic.
La firma inmobiliaria Vigourbán abandona la colaboración con el Real Club Celta que mantenía desde 2004. La grave crisis mundial que afecta precisamente a ese sector de la economía, acaba privándo al equipo céltico de su excelente patrocinador. Menos mal que hubo suerte, porque d después de largas gestiones infructuosas, se consigue a última hora un nuevo sponsor: INDEPO,, empresa dedicada al montaje de instalaciones deportivas.
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Temporada 2008/09 Real Club Celta Celta-Indepo De pie: Barros (fisioterapeuta),, Alba Torrens, Laura Nicholls, Pelayo Suárez (del (delegado), Miguel Méndez (entrenador), Susana García (ayu (ayudante), Agne Ciudarene, Iva Sliskovic y Ramos (ayudante). Gemma García, Maja MiljSentadas: Dragana Svitlica, Pilar Valero, Blanca Marcos, Ge kovic y Milica Beljanski.
En la campaña 08/09, e el Celta afrontaba una difícil temporada tras el cambio de patrocinador -conseguido in extremis-, y notables limitaciones económicas a la hora de formar la plant plantilla. Las jugadoras nacionales nales de alto nivel se vuelven inaccesibles para el presupuesto céltico céltico. La cantera lleva bastantes años sin dar los frutos apetecidos, a pesar de un reciente título en el Campeonato de España Junior. nior. Al final, la presencia de extranj extranjeras ha sido inevitable. Los representantes europeos y americ americanos ofrecen un enorme catálogo de jugadoras, en todos los puestos y para todas las economías. conomías. El equipo de Paco Araú Araújo no tuvo otra solución ión que echar mano de las comunita comunitarias para, así, reunir una plantilla prometedora prometedora, pero también competitiva.
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La internacional Laura Nicholls, luciendo el nuevo equipaje del Real Club Celta con la firma INDEPO como principal sponsor.
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Las múltiples lesiones a lo largo de la temporada situaban al Celta en la mitad de tabla, suficiente para acceder a la Copa de la Reina celebrada en Salamanca Salamanca, resuelta con desigual rendimiento. Sorpresa en octavos con su victoria sobre el potente Rivas Ecópolis madrileño, y derrota en cuartos ante un asombroso Vive Menorca, que habí había dejado en la cuneta al equipo anfitrión, el Perfumerías merías Avenida. Dos meses después las charras se proclamarían subcampeonas as de Europa. A pocas jornadas dell final de Liga, las chicas de Miguel Méndez aspiran a clasificarse para los playoff definitivos, que le darían derecho a participar en Europa la siguiente campaña. El reto parecía complicado, y así fue fue. Un noveno puesto las alejó de la lucha por el título y de Europ Europa. Por otro lado, las dificultades económicas continúan, sobre todo, debido al retraso en el cobro de las subvencio subvenciones oficiales, y a causa del cierre de crédi créditos de los bancos por la crisis mundial.
La internacional Alba Torrens, en uno de su sus últimos partidos con la camiseta celeste. Las tentadoras ofertas nacionales se hicieron inaccesibles a las posibilidades del Celta. La mallorquina anunciaba su pase al Perfumerías Avenida de Salamanca, actual subcampeón de la Liga española, y subcampeón de la Copa de Europa Europa.
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Imรกgenes de la temporada 2008/09 2008/09.
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Con cuarenta años de vida, y manteniéndose en la máxima categoría nacional, el presidente Araújo continúa trab trabajando a destajo para sacar adelante al club año tras año. Las bajas para la campaña 2009/10 serán numerosas e importantes, pero la serenidad y experiencia del mandatario céltico garantizan una plantilla solvente para comp competir en el nivel acostumbrado.
La internacional Laura Nicholls también abandona el Club al final de la temporada 2008/09. Su destino será el Club Hondarribia de Irún. La croata Maja Miljovic sería otra baja importante para la siguiente temporada.
La base Gemma García tampoco seguiría en el equipo equipo. En el Celta desde el 2003, cerraba así su paso por Vigo.
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¿Que hay que empezar de nuevo? Tampoco pasaría nada. El baloncesto femenino vigués ya está acostumbrado a soportar situaciones límite, y siempre ha sabido recuperar su lugar dentro de la élite nacional. Desde su primer ascenso con el Estudiantes en 1964, pasando por el del Club Xerox-Vigo en 1991, hasta el presente R.C. Celta-Bosco, “las niñas”, las nuestras, las viguesas, han respondido sin fallo, con el temple y el talento necesarios para regresar a lo más alto. En esta temporada 09/10 -creo que es el camino-, los tres equipos de categorías inferiores del Celta se han clasificado para las fases finales de sus respectivos Campeonatos de España. Ahí es donde el club debe asegurar su porvenir, como ha ocurrido con el Estudiantes, con el Celta de los setenta, con el Xerox. ¿Por qué llevamos tantos años sin más aportación al primer equipo que Tamara Abalde y las suplencias de Andrea Carrera, Cristina Martín, Marta Cobián, Patricia Quiroga, Elvira Torres, Beatriz Pérez, Carola Bruzon…? ¿No habría abandono? ¿No resultó más cómodo utilizar el talonario y resolver la plantilla de esta forma? ¿Internacionales viguesas? María del Carmen Martínez, Maribel Lorenzo, Ángeles Liboreiro, Susana García, Carmen Martinez, Ángeles Araújo, Tamara Abalde… además de las foráneas que adquirieron en el Celta su madurez, tales como Carmen Fraile, Marisol Paíno, Pepa Calvet, Piluca Alonso, Nieves Lobón, Laura Grande, Mar Xantal… Hasta la reciente llegada de Tamara, hubo un vacío de más de más de veinte años, desde que Vicente Rodríguez, con la colaboración de Juana Ingelmo y Ana Álvarez, trabajó con la última generación que aportó jugadoras al primer equipo. Belisa González, Mery Pereira, las hermanas Piñeiro, Nuria Figueroa, Consuelo y Kely García, Lidia Gesteira, Carmen Patiño… además de los fichajes de “Cholas” de juveniles que luego crecerían ya de celestes, las mencionadas Piluca y Nieves. Hoy es noticia, junio de 2009, que el Real Club Celta es el primer club de la historia del baloncesto femenino que clasifica a sus tres equipos, junior, cadete e infantil, para las finales del Campeonato de España. ¿Volveremos al pasado? ¡Ojalá! Parece que esta vez Paco Araújo apuesta por una política de cante-
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ra que nunca se debió abandonar. La contratación de Carlos C Colinas en la dirección técnica se está confirmando como un éxito total. Esperemos que las estrecheces económicas permitan su continuidad en un puesto, que precisa de infinita paciencia y tesón. Los frutos llegarán pronto.
Carlos Colinas dirigiendo iendo a sus jugadoras ju juniors. El técnico del R. C. Celta es el seleccionador nacional femenino Sub-18. 18. Su indudable categoría nos abre grandes esperanzas en la cantera céltica.
La escolta Cristina Cantero,, después de cinco temporadas como jugadora en el Real Club Celta -desde 2002-,, se ha asentado en Vigo, y trabaja con la cantera del club. En 2008/09 fue responsable del equi equipo cadete, octavo en el Campeonato de España.
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Acto de presentación resentación de la cantera. Once equipos participaron en las competiciones 2008/09: Liga Femenina, Primera Nacional, Junior, Cadete Cai Caixanova, Cadete Maristas, Infantil Caixanova, Infantil Maristas, Infantil Embrujo Céltico, Alevín Caixanova, Alevín Maristas y Alevín Embrujo Céltico.
Plantilla de entrenadoress del R.C.Celta R.C.Celta-Indepo, 2008/09 De pie: Pedro de Miguel (preparador físico) físico), Carlos Colinas, Manu Martín, Pedro Preciado, Cibrán Barbosa, Antonio Ramos Ramos, Natalia y Susana García. Sentados: Nacho Silva, Borja López,, Cristina Cantero Cantero, Pelayo Suárez, Ana Álvarez y Miguel Méndez.
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Aquí está la esperanza del Real Club Celta: LA CANTERA.
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Paco Araújo, presidente del Real Club Celta, es la persona más importante y decisiva de la etapa moderna del equipo celeste. Ha permanecido desde sus orígenes, año 1996, al frente de la entidad. En los primeros tiempos como vicepresidente, y después, tras el lamentable accidente de José Manuel Gómez Carballo y Camilo Pérez, 2001, haciéndose cargo de la presidencia y cogiendo las riendas del club. En sus doce años al frente del club, lo ha vivido todo, desde los momentos de desgracia que mencionamos, hasta los días de máxima gloria con dos títulos de Liga y uno de Copa de la Reina, además de un Campeonato de España Junior. Ha sentido el orgullo de contar en sus filas con muchas internacionales españolas y extranjeras. Mar Xantal, Laura Grande, Betty Cebrián, Tamara Abalde, Cindy Lima, Alba Torrens, Laura Nicholls… Polona Dornik, Erika Dobrovikova, Racija Mijanovic, Sonia Kireta, Evanthia Maltsi….
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Ha visto a sus entrenadores ser elegidos para selecciones nacionales. Vicente Rodríguez, Miguel Méndez, Susana García y Carlos Colinas, al igual que algunos de sus preparadores físicos, como Telmo Silva y Domingo Salinas. Pasaron Campeonatos de Europa y del Mundo, Juegos Olímpicos de Atenas y Pekín, y Paco Araújo pudo contemplar con inmensa satisfacción como el Real Club Celta contaba con representantes propios en los eventos de baloncesto más importantes del planeta. Ha estado en la cumbre y al borde del descenso. Vivió cierta opulencia con sus presupuestos y también lidió con la estrechez de los actuales. Momentos recientes de angustia por falta de patrocinador… y tranquilidad efímera en el momento de conseguirlo, agobiado entonces por la premura del tiempo para fichar. Cierta alegría en el gasto en épocas anteriores, y mano recia cuando tocaba. Seguramente se habrá sentido cansado, mejor dicho, agotado, en su larga andadura con el Real Club Celta. Seguramente también habrá pensado en el abandono en muchos momentos de debilidad… y seguro, completamente seguro, que la vitamina inagotable de los recuerdos le sirvieron una vez tras otra para continuar. Hace un par de meses -escribo en junio del 2009- Paco Araújo alertaba a sus allegados de la gravedad de la situación económica. La firma Indepo finalizaba contrato como sponsor, y la importante crisis que se vive no parece que sea compañera favorable para una negociación exitosa con nuevas firmas. Sus más cercanos me comentaron: “No te preocupes Luis. Paco dice eso como estrategia ante la sociedad viguesa léase políticos-, pero seguro que ya lo tiene todo resuelto.” “¡Qué seguridad tienen éstos!”, me dije. “Esperemos que sea
verdad.” Y debe ser. Parece que el Real Club Celta ya tiene sponsor para la temporada próxima, 2009/10. “Habrá estrecheces, muchas estrecheces.”, se completa el rumor con este aviso. Estando Paco Araújo… El Sr. Nistal con el Club Estudiantes, Jaime Gómez y Luis Fernández Castro con el Real Club Celta de los setenta y
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ochenta, David Hortas con la Agrupación Deportiva Vigo, José Manuel Gómez Carballo en los inicios de est esta nueva era, y ahora, Paco Araújo con el Celta moderno. Todos ellos son los artífices del baloncesto femenino en nuestra ciudad durante más de medio siglo. Si estoy bien informado, que me parece que sí, aún hoy en día se está esperando a que los políticos se acuerden de premiar a estos dirigentes. Lo hacen con los deportistas, con los técnicos, con los equipos triunfadores triunfadores… pero, ¿y los dirigentes? Esos que no reciben aplausos, ni ganan trofeos ni medallas, que tan sólo salen en los medios cuando hay problemas, que arriesgan la estabilidad de su vida privada y su dinero… Al m menos, porque se lo merecen sin ningún género de dudas dudas, que los nombren, o aunque sea al actual en representación de sus ant antecesores, “Vigueses Distinguido istinguidos” del deporte.
Y ahora, en septiembre, al cumplirse el “Cuarenta Aniversario” del Real Club Celta, 1969 - 2009, las célticas lo celebran con la clásica tarta… apagando las velas… y ¿quién sabe qué deseo estarán pidiendo para su equipo?... ¿Un nuevo título?...
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Haciendo piña, Laura, gerente de VIDE, las jugadoras Pilar Valero, Blanca Marcos y Noemi Jordana Jordana, la ayudante Susana García y el entrenador Miguel Méndez, delante de los trofeos de campeones de Liga y Copa; y en primer plano, ¿cómo no?, la tarta del cuarenta aniversario. Se escenifica una instantánea que lo resume todo todo… bueno, casi todo. No explica xplica que Susana García ganó co como jugadora las Ligas gas del 77 y 79, y las Copas del 81 y 84. Ni tampoco que Miguel Méndez gano la Liga del 2000 y la Copa del 2001, y que en ambas tuvo a Susana García como segunda entrenadora. Hablan en pie de foto de un Celta indestructible, y ¡ojalá! acierten en el calificativo.. Ya en la década de los noventa de desapareció un tiempo, pero con su fuerza acostumbrada resurgió de nuevo. Es difícil enterrar rrar una historia tan larga y tan prolífica.
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¡¡¡ FELICIDADES AL CLUB, A LOS SACRIFICADOS DIRECTIVOS DE ESOS AÑOS, A LA LAS JUGADORAS DE TODAS LAS ÉPOCAS,, TAMBIÉN A LOS TÉCNICOS, Y POR SUPUESTO, A SU FIEL Y NUMEROSA AFICIÓN !!!
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CAPÍTULO IV
ECOS DEL RODABALLO
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- ¿Aún te acuerdas del famoso Rodaballo? - ¿Cuál de ellos, Luis? ¿El equipo que juega ahora en
Segunda División Local, o la canción que cantabais hace cincuenta años en las fiestas? - Vamos por partes, querido colega. El Club Rodaballo ya ascendió a Primera, que es donde tendría que haber estado siempre. Y la canción que mencionas despectivamente, la sigue cantando hoy en día la gente enxebre, la gente “auténtica”, que aún queda mucha. - Entonces, ¿qué es lo que me vas a contar? Hace ya bastantes días que Carlos Davila -uno de los fundadores del desaparecido Club Estudiantes de Vigo- había dejado un sobre a mi nombre en casa de una común amiga. Al abrirlo, cuál no sería mi sorpresa, me encontré con unos imponentes testimonios históricos: crónicas de prensa de los años cincuenta, fotografías reveladoras de la época, una nota escrita de su puño y letra… y datos importantes de lo que significaba el “Rodaballo” para la familia estudiantil. En el recorte de prensa más antiguo, mayo de 1950, del periódico deportivo “Meta”, aparece una fotografía del equipo del Colegio Labor. El comentarista destaca el sorprendente debut de los colegiales en la competición local, donde acaban de proclamarse campeones de su grupo de segunda categoría sin conocer la derrota, y que les otorgaba el ascenso a primera. Como delegado, y poniendo orden y disciplina como siempre hacía, el administrador del colegio, don Eduardo Castro. Entre los jugadores, Carlos Davila, Piñeiro, Malvar, Valeiras, Gil, Novoa, Pumar…
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Año 1950. Colegio Mezquita De pie: Julio Castro, Saturnino Lamas, Totó Castro y Joaquín García Picher. Agachados: Pepín Castro, Servando Lopo y Benito Lorenzo.
Año 1951. Una Selección de Vigo se enfrenta al Colegio Mezquita. De pie: De la Peña, Riveiro,, Álvarez, Josechu Curiel, xxxx, Benito Lorenzo, Yeyo Oubiña y Julio Castro. sío, Rolán, Alonso, Mito, Totó Castro, Pichicho Giráldez, Joaquín G. Agachados: Cossío, Picher y Carlos Davila.
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Diario deportivo “Meta” “Meta”, 17 de mayo de 1950
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A tenor de los numerosos recortes de prensa, la actividad de nuestro baloncesto no cesaba. En el año cincuenta, quince equipos pos completaban la primera y segunda categorías locales. En 1951, el Club lub Deportivo Bosco organiza dos interesantes torneos: el “I Trofeo Anís las Cadenas” para equipos de pri primera ra categoría, y la “Copa Preparación” para los de segunda. En esta última comienza a competir el SEU Industrial, que asciende a primera esa misma temporada, y que años más tarde se convertiría en el Club Estudiantes. En ese momento, el equipo del Colegio Mezquita -centro de enseñanza desaparecido parecido poco tiempo después después-, era el mejor de Vigo. En el se encontraba la ba base de jugadores que años más tarde conformarían el primer equipo del Club Estudiantes Estudiantes. La mayoría ayoría también pertenecía a la sselección de Vigo.
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Aquí está el testimonio. Poco hay que añadir. Serían los pr prolegómenos de la fundación del histórico Club Estudiantes.. Era el año 1951, y ya apare aparecen en la fotografía sus tres fundadores: Eugenio Giráldez “Pichicho”, elegantemente trajeado, Carlos Davila y Joaquín García Picher. El escenario, la tierra negruzca de la Cancha Central, situada en donde hoy es la calle Rosalía de Castro. Las líneas de juego pintadas con cal minutos antes de los partidos.
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Ya se observa en la camiseta del equipo el escudo del SEU -Sindicato Español Universitario-. Ese año jugaban en Primera División Provincial, y a Rafael Pérez, su entrenador, se le concedería el “primer rimer Rodaballo” de la historia.
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Es la “ORDEN DEL RODABALLO”. Carlos Davila me hace llegar esta interesante información escrita de su puño y letra. En el año 1953, el “Rodaballo 1” sería concedido a Rafael Pérez, el entren entrenador de la Escuela Industrial, del SEU, y más tarde, del Club Estudia Estudiantes. En 1954, los “Rodaballo llo 2” y “Rodaballo 3” se otorgan a Ca Carlos Davila y a Antonio López de Alda -destacados jugadores-, en homenaje a su valiosa aportación al Club, y como cálida despedida ante su inminente marcha. Ambos, peritos industriales, emigran a América, contratados por or una importante em empresa venezolana.
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El galard贸n se entregar铆a en una emotiva cena que sirvi贸 como acto de despedida y homenaje de jugadores, directivos y simpatizantes del Club Estudiantes a los dos significados deportistas.
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El humor que no falte. En el Club Estudiantes nunca falt贸 en su momento. Hubo mucho espacio para el baloncesto, pero tambi茅n otro bien grande reservado para la confraternidad entre toda la gran familia estudiantil.
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Se distinguen varias firmas de los asistentes: Camilo Nogueira, Sastre, Alberto Gayoso, Cofán, Carlos Cerdeira, Jaime Davila, Alberto Alonso, Enrique Lorenzo, Pilarín Pérez, Finita Ogando, Salvador Galbán, Eugenio Giráldez, Luis Martín Bargu Bargueño, Julio Castro, Antonio Castro “Totó”, Bern Bernardo Núñez, Pofirio Faro, Gonzalo Rodríguez, José Luis Álvarez “Pepote”… El acto se cerró con el clásico ceremonial: todos los asi asistentes, puestos en pie, cantaron solemnemente la canción del Rodaballo.
“Unha lancha de Marín, ten a proa de carballo, catro rapaces da Pobla ¡uy, ay, ay! ¡uy, ay, ay! roubaronlle un rodaballo…” Nos falta la fotografía de la escena… que según Carlos Davila, existe. ¡Entrañable acto! ¡Entrañable Estudiantes!... y ¡Entrañ ¡Entrañable Rodaballo!
Escudo del actual Club Rodaballo
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Año 1971. Centro Deportivo Municipal al de las Traviesas. Pista Roja La primera formación del Rodaballo Club de Baloncesto De pie: Carlos Cerdeira, José Ángel Román, Rafa Tapias, Benito Lorenzo y José Carlos Fábregas. Iglesias y Manuel Costa Fraga. Agachados: Luis Noya, Julio Castro, Severo Igle
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CAPÍTULO V
¿CÓMO ANDA LA CANTERA?
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Nunca la Delegación Viguesa ha contado con tantos equipos de categorías inferiores como ahora, en el 2009. En estos nueve años del siglo que corre, la cantidad de chicas y chicos que juegan al baloncesto debió aumentar de forma espectacular. No tengo datos precisos, pero puedo arriesgarme a vaticinar que, al menos, superó en un cuarenta por cien los registros de finales del pasado siglo. Esto es bueno, formidable diría yo. El baloncesto, como tantas actividades de la sociedad viguesa, progresa en nuestra ciudad por sí mismo. No sé si la DVB, o la FGB, tendrán mucho que ver en esa evidencia. Deduzco con pocas dudas, que los motivos hay que buscarlos en la creciente cultura del deporte, en los éxitos de la selección de los Gasol, Navarro, Rudy, Garbajosa, Calderón… en la reciente incursión en la popularidad de las Amaya Valdemoro, Laia Palau, Tamara Abalde, Alba Torrens, Laura Nicholls… en la calidad contrastada de nuestra ACB, en el aumento del interés por la NBA con la llegada de los “grandes” españoles… y esto sí, hay que reconocerlo, en la eficaz organización del baloncesto nacional por parte de la Federación Española. Eso por un lado, y ya desde la cercanía, las causas del crecimiento están en sus sacrificados y valiosos paladines que partiendo de cero, le han dado forma a esas demandas de basket que pide la juventud de su entorno. Manuel Bouzas en Baiona; Serafín, Javier Iglesias, Mario Álvarez… en Panxón; Ángeles Liboreiro, Jaime Molares, la madre Rosa Montoiro… en una entregada Compañía de María de Vigo; Alfonso Pazos en Arcade; Solla y Nico en Tui; Benito García, Darío Méndez y muchos más colaboradores en Porriño; Sergio González y su equipo en el Seis do Nadal; Suso Cobián, Joaquín García… en el Colegio Andersen; los Hermanos Maristas, los Salesianos, el Colegio Apóstol Santiago… y muchos más -mis disculpas por no mencionarlos- que trabajan en las sombras de un baloncesto sin brillo, sin boato, sin medallas, sin mención… para que haya algunos que no lo agradezcan… y otros que presuman del mérito que no tienen.
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Menos mal que de vez en cuando, la prensa se acuerda de estos clubes lubes asentados en la modestia, en la fuerte afición, y que superan, no se sabe cómo, las dificultades enormes que se le presentan para subsistir. Este es el caso del Clube Baloncesto Baiona, que se dispone en este tiempo de marzo del 2009, a organizar la IV Edición del “Torneo de Minibasquet Caixanova”. En tres días de competición reunirán nirán 36 equipos, 18 femeninos y 18 mascul masculinos, y más de 400 participantes ticipantes de toda Galicia, de Portu Portugal, de Valladolid, de Ponferrada, de Madrid… y que prometen superar en todos los órdenes a los ya brillantes torneos an anteriores.
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Los benjamines de Baiona aúnan voluntades, y con el ob objetivo máximo, se preparan a las órdenes de Manuel Bouzas y Juan Raposeiras para afrontar con éxito la competición. De izquierda a derecha: cha: Miguel Vasconcellos, Anxo, Mateo, Diego, Javi Carrera, Daniel de Villalobos, bos, Alex, José Luis, JJoaquín Gómez, Mauro, Santi y Bráis.
Las promesas de Baiona ensayan el tiro con buen estilo. Algunos ya lo hacen en suspensión,, a pesar de las dificultades en su ejecución para chicos tan pequeños. Pronto llegarán todos a dominar el tiro básico del baloncesto. Es cosa de un par de años.
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Sin embargo, hay algo en esta numerosa cantera de Vigo y su comarca, que es motivo de seria preocupación. Salvo contadas excepciones, que las hay y de inmejorable calidad, el nivel técnico de los equipos deja bastante que desear. Muchas razones se pueden esgrimir para justificar la situación: falta de instalaciones para realizar los entrenamientos deseados; discontinua asistencia de los jugadores -dicen que por los estudios- a las sesiones de preparación; recargadas actividades extras -inglés, música, artes marciales…- que no deja tiempo para un baloncesto trabajado… Y yo añado una causa de bastante importancia: el discreto conocimiento técnico de los entrenadores, que en cambio, ponen empeño y dedicación en preparar a sus equipos. Lo hagan bien, mal o regular, lo cierto es que dan mucho más de lo que reciben. Y es aquí donde quería entrar en profundidad. La sociedad está dispuesta a pagar al profesor de inglés, a pagar las horas de Conservatorio -con el costo añadido de su correspondiente instrumento musical-, al maestro “cinturón negro” de judo, a la profesora de ballet o de baile regional -que les exigirá varios “gastos extras” con los trajes de la función navideña, las Fiestas del Colegio, la exhibición fin de curso… Pero difícilmente asumirá el pago de una cuota mayor que la que le asigna el club a cada chico. Y sin una modesta mejora en la aportación de los padres, poco se le puede exigir a los preparadores, que en estas labores suelen cobrar mensualmente una cifra irrisoria. ¿Quién le financia al entrenador sus cursillos, sus clinics, sus desplazamientos a conferencias interesantes, las horas de dedicación de antes y después, el transporte diario para entrenar…? Y lo peor es que los posibles buenos se alejan desilusionados de “trabajos” tan mal considerados. En nuestro caso, es aquí donde entra en juego la Federación Gallega. No creo que dedique a la formación de entrenadores ninguna importante asignación de su presupuesto. Exigirá, eso sí, título de monitor, de preparador regional… para ocupar el banquillo de equipos poco más que básicos, y seguro, esto también, que organizará Cursos de Entrenadores muy bien pagados por los aspirantes. Y lo que ocurre a menudo, es que son los
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propios entrenadores los que financian con su trabajo la actividad de sus clubes. En mi juventud asistí sin costo alguno a cursillos de Mister Spalding -el primer americano que trajo la Federación Española-, de Díaz Miguel, de los coachs norteamericanos que pasaban en los veranos por nuestra ciudad, de Alfonso Rivera, de Moncho Monsalve, sin contar los cursos para entrenador nacional celebrados en Vigo en 1969, a los que no pude presentarme por razones profesionales -mi compañero Francisco Picos fue número uno de esta promoción, como ya comenté. Al final, como suele ocurrir, los dirigentes se olvidan del pueblo, de ese pueblo numeroso al que pertenecemos tú y yo… Siendo entrenador del Celta Femenino, le comenté a Ita Pozo, seleccionadora nacional, que dejaba de entrenar a las chicas. “No puedes hacerlo -me dijo-. Tenéis que seguir trabajando
para el baloncesto español y para su selección.” “En todo caso, seguiría trabajando para el Celta” -le contesté raudo-. “De trabajar gratis, no como tú, al menos hacerlo para el equipo de mis amores.” Y es que los rectores y los técnicos del deporte que están en lo alto, sólo quieren al pueblo para trabajar, para hacer muchos equipos, muchas licencias, para engordar sus estadísticas, para formar jugadores para ellos, para presumir de familia muy numerosa… ¿A cambio de qué? Si ahora, enero del 2010, le suprimimos de repente al deporte vigués a Guillermo Touza en el voleibol, a Paco Araújo en el baloncesto del Celta, a Pepe Conde y otros en el Gestibérica, a Pablo Beiro en el baloncesto en silla de ruedas, a Javier Rodríguez en el Octavio-Pilotes Posada… ¿Qué queda? Lo que ocurre es que los políticos saben de sobra que pesa mucho más en esta gente el amor a su deporte y a su club, que las enormes dificultades que encuentran a diario… que a veces son los mismos políticos los que las provocan con sus falsas promesas. Abusan del pueblo una vez más. Aún estoy esperando que un político se ponga algún día en la foto de un equipo perdedor, como si en la sociedad que ellos gobiernan sólo hubiera triunfadores. ¡Cuánto me alegraría equivocarme en este juicio!
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Real Club Celta-Caixanova Caixanova Infantil 2008/09 Campeón Gallego y duodécimo en el Campeonato de España. De pie: Nacho Silva (ayudante), Nuria Pérez, Rebeca Navarro, Ana Izquierdo, Eva Novoa, Iria Pérez y Borja López (entrenador). De rodillas: Alejandra G. Patiño, Iriaa Varela, María García García, Lucía Cameselle, Claudia Fernández y María Karpina.
La cantera del Real Club Celta, patrocinada por Caixan Caixanova desde hace cuatro años, parece que lleva buen camino. Como ya hemos comentado en páginas anteriores, las promesas cele celestes se han clasificado en las tres categor categorías inferiores para disputar la Fase Final de sus respectivos Campeonatos de España. Por primera vez en la historia del baloncesto femenino español junto al Gran Canaria de Las Palmas Palmas-, un mismo club estará presente en todas las posibles competiciones finales: junior, cadete e infantil. El hecho insólito hasta esta temporada, hace albergar esperanzas bien fundadas en la cantera céltica. La planificación del responsable, esponsable, Carlos Colinas, empieza a dar resultado, y co confiemos en que su trabajo tenga la continuidad necesaria para lograr los frutos apetecidos para el primer equipo. Las jugadoras de casa son tan necesarias para la economía y estabilidad del club, como o para recuperar la identidad viguesa en el conjunto
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céltico. Se echa de menos, mucho de m menos, a las Maribel Lorenzo, Picuca Martínez, María del Carmen Veiga, Ángeles Libore Liboreiro, Susana García, Carmen men Martínez, Ángeles Araú Araújo, Kelly García, Belisa González… Las últimas noticias hablan para la próxima temporada 2009/10 de una apuesta por jugadoras españolas, y de una decidida intención de apertura a la cantera propia. ¡BIEN!
Las infantiles célticas expresan en las camisetas sus voces de ánimo para Claudia Fernández, compañera de equipo repentinamente enferma de cierta gravedad. Todos los equipos dee categorías inferiores del Celta se sumaron a este mensaje de aliento. Un buen gesto, tan formativo como enseñarles a jugar al baloncesto.
Las pequeñas célticas lticas festejan la clasificación en la Fase del Inter-Sector Norte de la temporada 2008/09. La alegría desbordante las lleva por los suelos. La ilusión q que no falte nunca en un equipo. Cuando no o la haya, el grupo está acabado acabado.
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Tiempo muerto. Mariano Villalón, entrenador accidental de las infantiles, explica en la pizarra las indicaciones a seguir.
En categoría cadete,, la ex jugadora céltica Cristina Cantero ha hecho una excelente labor en la finalizada temporada 2008/09. 8/09. Con serias aspiraciones en la Fase Final del Campeonato de España,, las célticas tuvieron que conformarse con un di discreto octavo puesto, que no refleja ni las expectativas del equ equipo, ni su auténtica valía. Ahora,, cara a la próxima campaña, a comenzar de nuevo. Jugadoras importantes que pasan de categoría, y otras nu nuevas que se incorporan procedentes del equipo infantil. Es de e esperar que la situación se equilibre, y el Celta Cadete pueda optar a lo máximo en el próximo Campeonato de España. De momento, el trabajo de Cristina Canter Cantero y sus ayudantes ya empieza a dar frutos esperanzadores. Sus jugadoras Leyre Carrascosa, pívot de más de 1,90 y 15 años, así como su compañera María González Centeno Centeno, acaban de ser convocadas para la Selección Española Sub Sub-16. De no surgir algún contratiempo especial, ambas podría podrían estar pronto en el primer equipo. Parece ser que Miguel Méndez ya cuenta con ellas para da darles minutos.
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Real Club Celta-Caixanova Cadete 2008/09 Campeón Gallego. Octavo en el Campeonato de España De pie: Cristina Cantero (entrenadora), Raquel Coello Coello, Leyre Carrascosa, Maria G. Centeno, Sara Méndez, Zulema Castro y Cristina Castells (delegada) De rodillas: Paloma Miguez, Marta Canella, Carmen Llamas Llamas, Rebeca Navarro, Laura Alonso y Cristina Loureiro.
Celebrando la victoria por los suelos. ¿Por qué no? Una forma más de expresar la alegría del éxito. Confieso que no había visto nunca unas escenas parecidas en mis cincuenta y nueve años de baloncesto, pero por lo que vengo observando últimamente, es costumbre muy habitual en todos los equipos pequeños pequeños. ¡Qué lo repitan muchas veces!
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Tiempo muerto. Cristina Cantero da las indicaciones oportunas a sus muchachas. Atentas están, y no poco. Otra tra cosa es que después en el campo hagan lo ordenado por “la coach”... ¡Si yo os contara!
Las cadetes célticas a la espera de un reparto de premios. De izquierda a der derecha: Zulema Castro, Abi Vázquez, Iria Barbosa, María G. Centeno, Carmen Llamas, Leticia Rodríguez, Laura Alonso, Leyre Carrascosa, Verónica, Sabela Solla y Ania Casal. Sólo falta en la escena Marta ta Canella, aunque seguramente sea la que hace abdominales a pie de foto.
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Real Club Celta-Caixanova Junior 2008/09 Campeón Gallego. Décimo en el Campeonato de España De pie: Manu Martín (ayudante), Laura Cabaleiro, Leticia Rodríguez, Laura Alonso, María G. Centeno, Leyre Carrascosa, rrascosa, Iria Barbosa, Verónica y Carlos Colinas (entrenador). De rodillas: Sabela Solla, Abi Vázquez, Carmen Llamas, Zulema Castro, Ania Casal y Marta Canella.
El partido, en el Colegio Cluny de Santiago Santiago, está a punto de terminar. La victoria se percibe con claridad por el gesto relajado de técnicos y jugadoras. Faltan unos m minutos y la diferencia debe ser amplia.
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Estirando después de unaa victoria. Por sus caras sonrientes y brazos levantados, no se puede dudar que ha sido así. Sus gestos no pue pue-den ser más reveladores.
Ahora vienen los festejos. Está claro que las niñas del Celta tienen ingenio para sus celebraciones. Si lo emplean para el juego de igual manera que lo hacen en las horas de triunfo, tendremos garantizado un futuro esplendoroso en club celeste.
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Partido en el campo de las Calasancias de La Coruña. Llama la aten atención el mensaje del colegio que se exhibe en la pancarta pancarta: “Nosa ilusión, o equipo; voso esforzo, noso orgullo.” niors célticas a la espera de recibir su trofeo de campeón de sector. Al fondo Las juniors sus entrenadores, Carlos Colinas y Manu Martín.
Fotografía con la pancarta de los aficionados. Son del Celta… por si alguien tiene dudas. Este equipo tiene clase, se le nota… hasta en las celebraciones.
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Está bien claro que estas mozas no forman un equipo vulgar. Saben entrenar, saben jugar, saben competir, saben ganar… y saben divertirse en su momento. Apuesto a que darán muchas horas de triunfo al baloncesto vigués.
Así pues, nos toca ahora hacer resumen de la temporada 2008/09: décimas de España en juniors, octavas en cadetes y duodécimas en infantiles. El año próximo -me voy a mojar-, estos puestos se van a mejorar… y un Campeonato de España sseguro que cae. Al presidente Paco Araú Araújo, a Carlos Colinas, Manu Martín, Cristina stina Cantero, Nacho Silva, Borja López, Ana Álvarez, Cibrán Barbosa… a sus prometedoras muchachas, a al resto de sus dirigentes, a los aficionados fieles… los emplazamos a todos para asumir el reto. ¡ADELANTE!... y que pronto veamos caras vigu viguesas en la primera plantilla. Y con ellas, llegarán sus familiares, sus vecinos del barrio, sus amigos, sus compañeros de colegio, de universidad, de trabajo… Con ellas volverá el ca calor de lo propio a la grada, ese valor entrañable que en los tiempos modernos parece perderse, el sentimiento grande que hemos vivido en etapas pasadas… el deporte porte limpio, el mejor, el que se forja en el día a día con el esfuerzo generoso que tan sólo ambiciona el triunfo…
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No se pueden cerrar las páginas célticas de cantera, sin destacar el patrocinio importante de CAIXANOVA a las categorías inferiores del club. En el acto de presentación de principios de temporada, Jorge Santos, director de marketing de la entidad, dirige unas palabras a jugadoras, técnicos, dirigentes y aficionados del Real Club Celta.
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Si alguien ha trabajado sin descanso en la cantera de Vigo y su comarca, ese es Serafín da Silva. Primero en Tuy, donde reside, luego en la Compañía de María de Vigo, más tarde en el Colegio de las Jesuitinas, y ahora, año 2009 y desde hace nueve, en el Club Airexa de Nigrán, que el mismo fundó en su día contra viento y marea. “¿Airexa?” “Aire fresco en gallego.”, me aclara. “¡Qué bonito!... y ¡qué real!”, le respondo. Empezó con el nuevo siglo, en el 2000, y para la próxima temporada 2009/10, el Club Airexa presentará diez equipos en competición, es decir más de un centenar de jugadores en sus filas. Serafín da Silva ha entrenado al 99 % de los chicos del club: benjamines, alevines, infantiles, cadetes y seniors, tanto femeninos como masculinos. “¡Mucho gritas, Serafín!”. Me mira desafiante, “Eu son así, Luis. Non vou cambear agora de vello.” Ante su imagen guerrera y chillona en el banquillo, yo tenía mis dudas de sus relaciones personales con los jugadores. Al conocerlo de cerca y entrar en su ambiente, he podido comprobar que las niñas, los chicos, no sólo lo respetan, sino que también lo quieren. ¿Los padres? Ven una ayuda valiosa en Serafín para la formación de sus hijos, a pesar de sus malos modos ocasionales, y de alguna que otra palabra mal sonante… “¡Qué loco estás, Serafín!”. Asiente por debajo del bigote,
“Sí, algo loco debo estar. Pero esto es lo mío, Luis” “Y ahora te vas para Tuy” -diez de la noche-. “Nada, son veinte minutos.” A estas alturas de mi vida baloncestística siempre me hago la misma pregunta: “¿Quién tiene más mérito? ¿El que ga-
na medallas y títulos?... ¿o los que como Serafín alimentan de baloncesto a cientos de niños y niñas?”… Y luego, ¡qué poco reconocimiento! Los directivos que le ayudan a administrar el club y buscar los dineros, Javier Iglesias y Mario Álvarez, se pelean con Serafín permanentemente, sobre todo a causa de los papeles, y por su proceder independiente y resuelto. Yo, observador veterano, me doy perfecta cuenta de que para el Airexa es tan importante uno como los otros. Siempre parece que va a explotar todo… pero no pasa nada. Serafín, Javier y Mario, quieren lo suficiente al Club Airexa como para evitar cualquier desfeita. Su
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mérito, ahí está, a la vista. Marcos, Serafín, Pablo, Zaba, Sara, Roberto, Rey Lama… … ayudan en la pelea diaria sobre la cancha… Los niños y niñas hacen su deporte… y los padres deben de estar satisfechos. Nigrán puede presumir de su equipo de balo baloncesto, el Club Airexa.
Serafín da Silva tiene que estar star siempre al lado de un niño o de una niña, y con una canasta cercana. “Eu Eu son así. Esto é o meu”
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Campeón de Copa DVB 2008/09 De pie: Adrián, Ricardo, Pablo Blanco (entrenador), Gabriel e Izan. De rodillas: Guillermo, ermo, Sergio, Víctor, Arón, José y Pedro.
Los infantiles de Pablo Blanco ya están acostumbrados a copas y medallas. Esta vez las ganaban en la temporada 2007/08 2007/08.
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Club Airexa Alevín 2007/08. SaínDe pie: Sara Fernández (entrenadora), Jimena, María Sanromán, Marine, Elia, Saí za, Andrea Soto y Marta Morán (ayudante). De rodillas: María Fraga, Andrea Mendaña, Marta Iglesias, Belén Alba y Soraya. ya.
Víctor y Adrián,, del Cadete Masculino, y Belén Alba, del Femenino, tres de los más firmes valores de la cantera del Airexa.
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Club Airexa Alevín, 2008/09 De pie: Juan, Lucas, Teodoro, Serafín (entrenador), Carlos y Alberto. De rodillas: Emilio Montes, Ricardo, Andrés, Urbano y Amaro. “¡Cuidado con este equipo!”,, vaticina su entrenador Serafín, y debe tener ba bastante razón, porque entre los trillizos, Emilio Montes, Lucas, Alberto, Carlos, Amaro… … pueden armarla tan pronto crezcan un poco. ¿Talento? Todo el del mundo. ¿Afición? Incansable, muchas veces hay que echarlos de las canchas. ¿Lucha en el campo? Pobre del que no pelee.
Los hermanos trillizos: Teodoro, Juan y Urbano de Francisco Vargas.
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Club Airexa Infantil A 2008/09. De pie: Belén Alba, María Fraga, Rubén Zabaleta (entrenador), Sainza y Alba.. De rodillas: María Sanromán, Andrea Soto, Lucía, Elia y Paula.
Club Airexa Infantil B 2008/09. De pie: Sofía, Rosina, Viky, Cristinaa (entrenadora), Carolina, Uxía Uxía, Paula y Héctor Cacharrón (2º entrenador). Sara. De rodillas: Nair,, Marta Iglesias, Andrea, Helena y Sara
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Las “airexiñas” ya saben lo que es ganar medallas. Con sus entrenadoras Sara Fernández y Marta Morán en los extremos, lucen sus logros para el recuerdo: Jim Jimena, Elia, Belén Alba,, María Fraga, Soraya, Andrea Mendaña, Saín Saínza, Marta Iglesias, Andrea Soto y Marine.
Temporada 2008/09. Serafín en sus funciones de entrenador con las Infantiles B en un partido celebrado en el Pabellón de Panxón. De espaldas, Marta Iglesias; sentadas, Viky, Sara, Nair, Rosina y Caroli Carolina.
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Pabellón de Baiona, 2009. ”IV V Torneo de Minibasquet Caixanova” Club Airexa Alevín 2008/09 De pie: Sofía, Natalia, Alicia, Mara,, María y Sara Fernández (entrenadora) De rodillas: Ruth,, Claudia, Carla, Marta y Antía
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Ceremonia de clausura del “IV IV Torneo de Minibasquet Caixanova”. Las “airexiñas” desfilan a recoger los recuerdos de la competición.
La entrenadora Sara Fernández, muestra la placa de recuerdo de la participación del Club Airexa en el “IV Torneo de Minibasquet Caixanova” de Baiona.
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Nos faltan muchas canteras importantes de las que hablar largo y tendido. Varios libros como este necesitaríamos para comentar la actividad interminable del Club Porriño Baloncesto Base, de la Compañía de María de Vigo, del Seis do Nadal de Coia, del Colegio Andersen, de los Salesianos, del C.B. Tuy, del Colegio Marista, del Apóstol Santiago, de Las Acacias, de Los Sauces, del Arcade… y de bastantes más clubs y centros escolares que nos quedan por mencionar. Ya les llegará el momento. Sería una tarea laboriosa en exceso, enumerar la cantidad ingente de buenos jugadores que han salido de estas canteras mencionadas. Muchos de ellos convertidos después, con el paso del tiempo, en entrenadores de relieve. Sólo mencionar unos pocos como muestra: el escolta porriñés Javi Pérez, que militará en la próxima temporada 2009/10 en el Viscaya Bilbao Basket de ACB; la internacional y olímpica Tamara Abalde; el exseleccionador nacional femenino Vicente Rodríguez “Cholas”; Quino Salvo, exjugador de ACB y entrenador de Liga LEB; Susana García, más de 70 veces internacional, entrenadora-ayudante en la Selección Nacional y en el Real Club Celta; Ángeles Liboreiro, 51 veces internacional, al frente del baloncesto de la Compañía de María, y responsable de la Selección Gallega Cadete Femenina; Miguel Méndez, entrenador del Real Club Celta y exseleccionador nacional Femenino sub-16 y sub-18; Alberto Abalde, responsable del Gestibérica Junior; Cesar Iglesias, preparador del Rosalía de Santiago de LEB Plata; Rubén Domínguez, al frente del Breogán de LEB Oro… Y no debemos olvidarnos de la formidable saga de Preparadores Físicos de primera línea, que han tenido sus orígenes deportivos en alguna de las canteras nombradas: Telmo Silva, expreparador de la Selección Española Femenina; Domingo Salinas, actual preparador del equipo nacional femenino; y el número 1 de todos ellos, Pepe Casal, que a su larga lista de méritos, hay que añadir ahora el anillo de Campeón de la NBA conseguido por su pupilo Pau Gasol.
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Hablando de la cantera, no nos podemos olvidar del “Torneo de Minibasquet Caixanova” de Baiona. En su cuarta edición, el éxito ha superado al de ocasiones anteriores, que ya no fue poco. Más equipos participantes, y por lo tanto más jugadores, mejor nivel técnico, público a rebosar, organización rozando la perfección… y dos finales de ensueño: en la masculina, el Club Estudiantes de Madrid se impuso al Capitol de Valladolid; y en la femenina, el Club Arxil de Pontevedra venció en un partido trepidante al “Seis do Nadal” de Vigo.
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NOTICIA DE ULTIMA HORA: Agosto, 2009
Al cierre de este libro, las consecutivas noticias del ver verano confirman la excelencia del trabajo cĂŠltico a lo largo de la temporada 2008/09. El inicio de las celebraciones del cuarenta aniversario del Real Club Celta no puede ser mejor. ÂĄFELICIDADES!
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CAPÍTULO VI
HUELLAS… DE LOS CINCUENTA Y SESENTA
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Conozco a algunas personas que no les gusta nada la historia, y cuánto más antigua, menos les gusta. Una persona allegada me dice: “Yo prefiero que me cuentes las historias del futuro.” “El futuro aún no tiene historia.”, le contesto. “Lo sé.
No se llama historia, pero sí se puede hablar de lo que aún está por llegar.” Muchos mayores viven anclados en sus años de juventud, y sólo hablan de tiempos pasados… y dicen que fueron mejores. Puede que lo fueran, es opinable. Lo que sí han sido, es distintos… pero sobre todo, necesarios.
Amigo, ¿tú conoces a alguien que no tenga bisabuelos? Pues yo mismo. ¿Querrás decir que han muerto? ¿Qué no los conociste? ¡Ah, claro! Naturalmente. Ya sé que a los jóvenes no os gusta demasiado la historia. Pero te voy a enseñar en unas fotografías a tus bisabuelos, mejor dicho, a tus tatarabuelos del baloncesto. Sin ellos, como en la vida biológica, no tendrías tu deporte favorito. - ¡Luis, prométemelo! -me suplica juntando las manos en gesto de plegaria- Sólo me las enseñas, pero no me cuentes nada. -
Me va a costar un montón estar callado. Lo intentaré… aunque ya veremos si al colega no le entra la curiosidad de preguntar algo. Siempre le ocurre lo mismo: “No me cuentes batallitas”, y yo… mudo. Pero después pregunta. Y claro, lo reconozco, en la respuesta ya me alargo en exceso. No lo puedo evitar. ¡Es que lo estoy viviendo de nuevo! Encuentro en una foto a Lamela, el jugador del Manuel Álvarez, y hasta siento dolor en las rodillas de las zancadillas que me puso en sendos contraataques sobre el cemento picado del Campo de Granada. ¡Me veo con las piernas sangrando!
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Año 1952. Club Juventus. De pie: Carlos Cerdeira, Fandiño, Pousa, Vicente Comesaña y Bendaña. Abajo: Salgado, Gómez y Borrajo Borrajo.
Año 1951 Club Areosa. Campeón Torneo Apertura y Sucampeón de Liga De pie: Quico Méndez (entrenador-jugador jugador), Carlos Núñez, Oubiña, Sanmartín, Ismael y Cándido Gil. Agachados: Amoedo y Cossío.
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Año 1953. Alguien del SEU se ha lesionado. S Sus compañeros le atienden, el árbitro Paco Nistal vigila, y Julio Castro observa.
Taboada Leal, 1956. El capitán del Club Estudiantes, Eugenio Giráldez, “Pichicho”, en un intercambio de banderines con el capitán rival rival, Mister Rutgis, el famoso entrenador americano ericano de la Bazán, que a su llegada a El Ferrol también jugaba. El árbitro Nistal observa con cara escéptica, como pensando: “Ya veremos las buenas maneras cuando empiece el partido.”
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No se sabe ni el año, ni el escenario, ni los contendientes, pero ahí queda la escena de un campo que parece de hierba, y unas canastas “auténticas” del país. Podría tratarse del estadio de Balaídos en obras obras. Tal vez delante de la Grada de Gol.
Temporada 1958/59. Campo de Taboada Leal en un partido entre Bosco y Estudiantes. Cerdeira tirando bajo la canasta rodeado de rivales. A la izquierda Benito, atrás Boliche y Severo, y al fondo a la izquierda, R Román. Julio Castro a media cancha,, en su última temporada de jugador. Llenazo de espectadores, como de costumbre.
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Temporada 1954/55. Cancha de la Escuela de Peritos Industriales en un partido SEU-Bosco. Bosco. Mucho ambiente en las “gradas”, como era habitual en este tipo de confrontaciones. No se ve en el enfoque la “grada alt alta”, la calle en bajada donde también se acomodaba un buen número de espectadores.
Taboada Leal, 1962. Se estrenan canastas de cristal. ¡Qué avance! Las viejas de madera permanecen retiradas en primer plano antes de su desguace. Pero aún hay más novedades: las vallas de madera, la caseta de venta de entradas, y encima de ella,, el “marcador electrónico” con cubierta d de protección. Lo que no es nuevo es la lluvia, que no impide celebrar el clásico Bosco Bosco-Estudiantes que se está jugando.
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Año 1955. Todo el mundo atento en la “mesa” de anotadores. El colegiado Paco Nistal revisa el trabajo de los auxiliares, mientras los bosquistas Manuel Benito y Boliche, además de un contrario, aguardan la resolución del conflicto.
Taboada Leal, años cincuenta. Presentación de los equipos en una Fase de Se Sector. A la derecha, el S.E.U. de la Universidad de Salamanca. El jugador con el balón en la mano, Gil Nieto, era una de las figuras del momento.
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Año 1955.. El colegiado Paco Nistal se dispone a dar el salto inicial, tras las advertencias oportunas a las contendientes.
MINENTE! Directivos y árbitros reunidos en un acto que se Año 1955. ¡PELIGRO INMINENTE! cierra con esta fotografía. ¿Qué tramarán? En la fila de arriba, Francisco Rey -el popular director de la Coral Casablanca, y árbitro por entonces-, Rufino Gómez, secretario de la Federación Gallega Zona Zona-Sur, el Doctor Soneira, presidente de la Federación, Hilario Torrado,, secretario del Ayuntamiento Ayuntamiento… Abajo, los árbitros Víctor Posada, Ángel Ramos, Cancelas, Paco Nistal… el popular Valladares -con boina-, auxiliar de mesa…
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Mataró, temporada 1964/65. Partido de División de Honor entre el C.D. Mata MataróMolforts ts y el Club Estudiantes de Madrid. Arbitra el vigués Paco Nistal, el único de nuestra ciudad que llegó a la máxima categoría nacional.
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Temporada 1962/63. Partido de la máxima rivalidad, Estudiantes-Bosco, en el recién estrenado Campo de Granada. Josechu Curiel Curiel, de espaldas (10), a punto de correr al contraataque. Carlos Cerdeira acaba de lanzar ante la opo oposición de Freijeiro, mientras que Souto, Chacabuco,, Domín Domínguez y Severo acuden al rebote.
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Temporada 1962/63. El estudiantil Benito Lorenzo parece reclamar algo en la mesa de anotadores. Núñez, el árbitro, rbitro, e Iglesias, el presidente del Colegio de Árbitros vigués, median en el conflicto. J.A. Román, Julio Castro y Rey Lama expectantes ante la resolución.
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Año 1962. Dos renombrados colegiados vigueses, Paco Nistal y Ángel Ramos. El primero se comentaba que era estudiant estudiantil, mientras que al segundo se le consideraba bosquista. Puede que fuese cierto, pero los jugadores del Estudiantes nunca queríamos que nos arbitrase bitrase Nistal, porque su excesiva intención de neutralidad siempre terminaba perjudicándonos. Ambos se mues muestran elegantes en la instantánea… y hasta lucen cara de buenos… nos… pe pero esto último sólo sucedía para el momento de la fotografía inicial.
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Años sesenta. No se sabe ni el lugar, ni qué equipos son. Sólo se reconoce a la pareja arbitral, los vigueses Ángel Ramos y Paco Nistal. Por la ceremonia preliminar, debe ser alguna Fase de Sector celebrada fuera de Vigo Vigo.
Final de los cincuenta. Fase Final de la Copa del Generalísimo cele celebrada en el antiguo Club de Campo de Vigo, calle García Bar Barbón, sobre sus pistas de tierra batida. Eliminatoria entre el Real Madrid y el Orillo Verde catalán. El colegiado Paco Nistal entrega el balón a un jugador madril madrileño para el lanzamiento de una personal.
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Taboada Leal, 1955. Club Estudiantes de Vigo De pie: Rafael Pérez (entrenador), Gonzalo, Mito, Camilo Nogueira, Davila, Benito Lorenzo y Carlos Cerdeira. cher, Julio Castro y Severo Iglesias Iglesias. Agachados: Alonso, Joaquín G.Picher,
Taboada Leal, 1956. Club Estudiantes de Vigo De pie: Gayoso, Carlos Cerdeira, Camilo Nogueira, Mito y Benito Lorenzo. Agachados: Alberto Alonso, Julio Castro, Severo Iglesias y Joaquín García Picher.
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Año 1957. Foto de viaje del Club Estudiantes Estudiantes. Bares, Cerdeira, Nogueira, Pepe Vilas (directivo), Gayoso, Mito y Severo Severo. Iban a Madrid a conseguir el ascenso a Primera División.
ganado ese día el Club Foto de familia en Taboada Leal. Algo importante habrá ga Estudiantes. Sus fuerzas vivas se unen al equipo para la instantánea final del partido. Totó, Alonso, Cerdeira, Quiño, “el el herma hermano de Mito -así se le conocía en la hinchada bosquista-,, Nogueira, Benito, el presidente Javier Gonzalo, Mito, Picher, el directivo Pepe Vilas, Julio Castro, Gayoso, Rafa Rafael Pérez -el primer entrenador del club-, Severo, Sesé, Pepote…
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Año 1957. Club Estudiantes. De pie: el cubano Santana, Román, Cerdeira, Mito, Benito y el vasco Irastorza. Agachados: Davila, Severo Iglesias, un aficionado, Camilo Nogueira, Julio Castro y José Antonio Rodríguez.
Año 1958. Club Estudiantes. De pie: Benito Lorenzo, Carlos Cerdeira, Camilo Nogueira, Enrique Román, Irastorza y Joaquín G. Picher (entrenador). Agachados: Severo Iglesias,, Casal, Julio Castro y José Ángel Romá Román.
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Peniche, Cancha de la Escuela Industrial, 1957 1957. Partido de infantiles, Club Alerta-C.D. Bosco. Por el Bosco, de pie: Luis, is, el primero por la izquierda; en el centro García Migón y Gayoso; en el extremo de la derecha, Martínez Sidrach. De los demás, aunque compañeros del Colegio Salesiano y del barrio de la Ronda de Don Bosco, después de tantos años, no recuerdo sus nombres. Por el Club Alerta, agachados: Poldo, o, Juan Ramón Díaz Jácome, Rafa Tapias, Miró, Lito y Luis López Corona.
¿Quién Quién me iba a decir que después de tantos años me encontraría de nuevo con las camisetas con las que debuté en el baloncesto a los once años? Las blancas, de la parte superior, con cuello y puños en azul, nos las hicieron en casa a la medida en el año 52. En su día, con el correspondiente pantalón antalón azul, me pareció el equipaje más b bonito que jamás pude conocer. Desde entonces, tras mi recordado debut en la Cancha de Taboada Leal, las había perdido de vista para siempre. Nunca más las tuve delante, hasta que mi compañero Rafa Tapias -en el 2009- sacó esta fotografía del baúl de sus recuerdos. Deduzco que el presidente del Bosco, Antonio García Hermida, sie siempre necesitado de estos enseres, tuvo que adjudicárselas para sus equipos infantiles sin mediar negociación alguna. Tampoco sabía, hasta este testimonio testimonio, que mi buen amigo Juan Ramón Díaz Jácome, que fue periodista del “Faro de Vigo” y posteriormente teriormente director de “La Voz de Galicia”, se dedicase al balo baloncesto en su niñez.
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Cancha del Jardín Park, 1958. Club Estudiantes Juvenil. De pie: Castromil, Miguel Ángel, Romero Bello, Moreno, Rafa Tapias, Enrique Román y Alonso (ay (ayudante). Agachados: Rafael Pérez (entrenador), Emilio Abelenda, Luis Miramontes, José Carlos Fábregas y Falque.
Cuando yo pertenecía al C.D. Bosco Juvenil, obtuvimos una espectacular victoria sobre este formidable equipo del Est Estudiantes. Contra todo pronóstico, les ganamos el partido decisivo que nos valió el título de campeones de Vigo, y la clasificación para la Fase de Sector a celebrar en Lugo. En el Bosco formábamos Chacabuco, José Luis, Casales, Madera, Mingos… En Lugo poco pudimos hacer ante el Santo Tomás local, que además del apoyo de su público, reunía en sus filas jugadores de la talla de Lamela Lamela, Bourio, Armando, Latorre… La anécdota estuvo en que casi nos echan de la pensión… ¡sin apenas tener culpa de nada! Estábamos reunidos los diez jugadores en una misma habitación, descansando después de comer, y sentados casi todos en la cama. ¡De repente!... pasa una chavala de ensueño por delante de nuestra ventana… A Alguien ien dio la voz de alarma, acumulación de personal en el lateral de la cama más próximo a la ventana… y la cama que se rompe con tremendo estruendo… y nos deja esparcidos por el suelo y muertos de risa… ¡Lo injusto: la bella lucense salió inocente del caso!
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Año 1959. Club Estudiantes.. De izquierda a derecha: María del Carmen Veiga, Tucha Prieto, Pinky, Mely Canda, Julio Ca Castro (entrenador), Mely Badía, Pitusa Llopis y Hortensia Neira.
Año 1959. Selección de Vigo. De pie: Julio Castro (entrenador), María del Carmen Veiga, Pitusa Llopis, Picuca Martínez y Mely Badía. Montenegro, Marisa García y Cristina Acosta. Agachadas: Esther G. Bermello, Teté Montenegro
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Campo de Granada, 1960. Mª de Carmen Veiga en un lanzamiento a canasta. La mítica cancha del Estudiantes se estrenaba esa temporada, y de momento, aún no tenía vallas de separación. Detrás se ven los niñitos de La Gota de Leche, emocionados con la novedad.
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Campo de Granada, 1964. Mª del Carmen Veiga en una de sus clásicas entradas a canasta. Público elegante, como se puede comprobar. A la derecha, se ve a los jugadores Trigo e Isidro Gallego; a la izquierda aso asoma la cabeza de Víctor Posada, “Enceste”.
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Taboada Leal, 1958/59. Club Estudiantes De pie: Benito Lorenzo, Rafa Tapias, apias, Enrique Román y Carlos Cerdeira. Agachados: Julio Castro, José Ángel Román, Severo Iglesias y Camilo Noguei Nogueira.
Los Maristas, 1960/61. Club Estudiantes. De pie: Rafa Tapias, Camilo Nogueira, José Ángel Román, Isidro Gallego y Romero Bello. Agachados: J.A. Rodríguez, Rey Lama, Severo Iglesias y Julio Castro (entrenador).
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Taboada Leal, 1961/62. Partido de Segunda Nacional, Club Estudiantes-SEU de Santiago. Situación típica de la pareja de pívots estudiantiles: Carlos Cerdeira en la pelea de un rebote ofensivo, y Benito Lorenzo atento a lo que caiga. José Ángel Román, al fondo, vigila el balance defensivo.
Un balón de cuero de los años cincuenta.
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El ferrolano Manolo Pardo,, alero internacional, y uno de los mejores jugadores que dio el baloncesto gallego. Para aquella época, décadas de los cincuen cincuenta y sesenta, ta, gozaba de una depurada técnica individual. Era un puro estilista. Se fue un par de temporadas das al Club Hesperia de Madrid -equipo federativo de promesas-, pero la “morriña” lo devolvió a Ferrol, para seguir en la Bazán hasta su retirada.
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Año 1962. Club Concepción Arenal de El Ferrol. Cabido, Dimas, Bermúdez, Dopico… nos ponían muy difíciles sus partidos en el Gimnasio de la E.N. Bazán. Un arbitraje permisivo, ermisivo, por lo general, les consentía jugar al límite de la violencia. Como filiales de la Bazán, intentaban arañar algún punto a sus rivales más importantes.
El lucense Carlos Lamela,, el mejor base gallego de la década de los sesenta. Internacional juvenil.
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Temporada 1959/60. Club Santo To Tomás de Lugo. Armando, Bourio, Lamela, Jato… dirigidos por Quiñoá, serían los precursores del actual Breogán Breogán. De hecho, Miguel Bourio y Carlos Lamela llegaron a jugar en División de Honor con dicho equ equipo en los primeros años del ascenso, so, logrado en la temporada 1967/68 en Zaragoza.
El lucense Miguel Bourio, destacado alero de la década de los sesenta. Ascendió a División de Honor con el Breogá Breogán.
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Campo de Granada, 1962. Club Estudiantes Estudiantes-SEU de Santiago, partido de Liga de Segunda Nacional.. Fuerte lucha por el rebote, con ramillete de brazos en busca del balón. En primer término Rafa Tapias Tapias, con el santiagués Lamela a la izquierda, e Isidro Gallego al fondo, a la espe espera del desenlace.
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Lugo, 1962. Liga de Segunda Nacional, Santo Tomás de Lugo-Club Estudiantes. Entrada a canasta de Rafa Tapias Tapias. Son los últimos tiempos de las canchas de tierra. Lugo sería la primera capital de Galicia en contar con un Pabellón de Depo Deportes, “el templo”, le llamábamos.
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Palacio de Deportes de Madrid, 1963. Fase de Sector de Segunda Nacional. Club Estudiantes. De pie:: Vilariño (presidente), José Nistal (vicepresidente), Benito, Cerdeira, Tapias, Picos, Sesé (aficionado), Isidro y Fachusco (delegado). Agachados: Pepe Vilas (directivo), Severo, Abelenda, Román, Iglesias y Julio Ca Castro (entrenador).
.N. Bazán de El Ferrol Ferrol. La Coruña, 1962. E.N. De pie: Francisco Picos, Manolo, Polo y Manuel Pardo. Agachados: Antonio, Morate te y Sas, la gran promesa ferrolana.
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Campo de los Maristas, temporada 1963/64 Club Estudiantes de Baloncesto De pie: Rafa Tapias, Francisco Picos, Miguel Entrerríos, Juan Tapias, Pololo Cobián, Romero Bello, Isidro Gallego y Emilio Fernández “Fachusco” (delegado). Agachados: Magdalena, José Fernández Ferro, Enrique Bangueses, Rey Lama y Julio Castro (entrenador).
Esta fue una de las mejores plantillas del Club Estudiantes de toda su historia. En ella figuraban excelentes jugadores, entre los que destacaba Pololo Cobián, que llegaría a jugar muchos años en Primera División -actual ACB-, inicialmente con el C.D. Español de Barcelona, y luego en el C.D. Mataró. Del grupo hay que reseñar que Francisco Picos, en el año 1969, sería nº 1 de la promoción en el Curso de Entrenadores de Primera Nacional celebrado en Vigo con motivo de un Campeonato de Europa Junior Masculino. Si no nos falla la memoria, Aíto García Reneses, en aquel momento jugador del F.C. Barcelona, consiguió en este curso su título de entrenador. Pocos años después de esta fotografía, Magdalena se retiraría, y se convierte en uno de los mejores árbitros de la región. Y también es digno de mencionar, que en los años ochenta y noventa, José Fernández Ferro desempeñó el cargo de presidente de la Federación Gallega Zona-Sur de Baloncesto.
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Campo de Granada, 1965. Torneo Internacional Vigo Vigo-Oporto. Club Estudiantes-Vasco da Gama. El estudiantil Rafa Tapias en un lance del juego.
Este prestigioso torneo se celebraba en el mes de se septiembre por el sistema de liga a doble vuelta, y servía de est estupenda pretemporada para portugueses y españoles. La gran rivalidad y excesiva pasión que ffue generando el campeonato, dio lugar a su suspensión. Tristemente, no se pasó de la tercera ed edición. El problema arbitral fue una de las razones importantes para que desapareciera.. ¡Una pena! Por Oporto jugaban: Porto F.C., Vasco da Gama, Banco BPM y Académica. Por Vigo lo hacían: C.D. Bosco, Club Estudia Estudiantes, Manuel Álvarez y Club Ademar.
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Año 1965. Estos días de lluvia y viento no eran obstáculo para que los partidos se celebrasen. De aplazamientos zamientos anticipados debido al parte meteorológico, o de suspensiones siones por mal tiempo en el lugar del hecho… nada de nada. Ahí me veis con el balón, bien cogido con las dos manos -estaba estaba un poco húmedo húmedo-, y marcado a conciencia por el ferrolano Dimas. El cemento del Campo de Granada se nota al algo mojado, pero sin demasiados charcos. El brillo del suelo sólo son efectos ópticos a ca causa de la luz diurna. Partido de poco cartel: Estudiantes-Arenal de El Ferrol, motivo del escaso público, que de todas formas se juega bajo la atenta vigilancia, al fondo, de la autoridad.
- ¿Y ese? -me me pregunta el colega señalándolo con el d dedo. - ¡Bendita Bendita juventud!... Es un miembro de la Policía Arm Arma-
da, un “gris” como se le llamaba entonces. Los “grises” eran muy amigos de los estudiantes, sobre todo en las manifestaci manifestaciones. ¿Pregúntale por ellos a tus abuelos?
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Campo de Granada, temporada 1964/65. Rafa Tapias entrando a canasta con su contrario ya rebasado. Se puede observar que, como tantos jugadores, util utilizaba una rodillera de protecci贸n. Los campos de cemento lo aconsejaban.
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Temporada 1962/63. El vigués Manuel Filgueira en su época de estudiante universitario, militando en las filas del SEU de Santiago. Pocos años después sería el dentista de miles de ciudadanos de Vigo.
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Campo de Granada, 1964/65. Liga Nacional de Segunda División Club Estudiantes-Manuel Álvarez expectatiEn la imagen, Rafa Tapias (6) y Pedro Montilla luchan por el rebote. A la expectat va, José Luis (4) y Chiky Fuentes. La victoria sería para el Estudiantes.
Partido de enorme expectac expectación y máxima rivalidad. El Manuel Álvarez hacía su debut, y había formad formado su plantilla a base de ficharle le jugadores al resto de los clubs vigueses vigueses: Bosco, Estudiantes y Ademar. La completó pletó con los dos primeros foráneos llegados a Vigo para jugar al baloncesto, Pedro Montilla y Chiky Fuentes, procede procedentes de la cantera del Estudiantes madrileño.
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Año 1962. El célebre campo ampo de El Barco de Valdeorras Partido de Segunda Nacional, Iris de El Barco Barco-Bazán de El Ferrol El ferrolano Picos disputa un balón al contrario, tratando de eevitar su contraataque. A fondo a la izquierda, Manolo Pardo,, el formidable alero departamental, sigue el desenlace de la jugada. Por or la derecha, el colegiado vigués Paco Nistal garantiza un buen arbitraje.
Nistal era ra de los pocos árbitros gallegos que se hacía respetar con contundencia en aquella terrible cancha. Traía en jaque a los dirigentes locales, amenazándoles incluso con expu expulsarles de la competición si no se cumplía estrictamente el regl reglamento. El público, a pie de cancha cancha, estaba dispuesto en cualquier momento para agarrarte rte por la camiseta e impedir que salieses al contraataque, traataque, o lo que era peor, ponerte una zancadilla. Se trataba del escenario más temido del baloncesto de Gali Galicia, debido a su clima helado en invierno -campo al aire libre como se puede ver-, y sobre bre todo, a las irregularidades arbitrales que se producían. Los aficionados eran agresivos en ex exceso, y los colegiados, por sobrevivir, vivir, no podían arbitrar como quisieran. Hay que añadir, que en la mesa de anotadores -con auxiliares del pueblo- se llevaba el tiempo de juego manualmente -igual que en todos los campos-,, con lo que el partido se podía prolo prolongar o finalizar a conveniencia del equipo local. Los tres minutos últimos -existentes en ell reglamen reglamento de entonces- podían durar seis o siete, o solamente uno.
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Temporada 1960/61. Club S.E.U. de Santiago Santiago. El tercero por la izquierda es el vigués Manolo Filgueira Filgueira. El tercero por la derecha es el sudamericano Vitolo,, el cerebro del equipo. De los santiagueses se podía esperar todo: que aspirasen a campeones campeones, o que acabasen en los últimos puestos de la Liga. Formado por estudiantes, que llegaban a Santiago en el mes de octubre, fecha de inicio de la competición, arrancaban con la dificultad de una inexistente pretemporada.
Estudiantes-Celeste de Lugo. El primero por la dereJardín Park, 1957. Club Estudiantes cha es el popular Santiso,, jugador, entrenador, directivo, colaborador de “El Progreso”… … “Alma mater” del baloncesto lucense lucense.
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Los Maristas, 1967. El ala-pívot canario, Aguado, del Bosco de la Coruña, en un medio gancho ante la oposición del vigués Madera, del Manuel Álvarez. Los Hermanos Maristas y sus alumnos, con las sotanas y uniformes que hoy ya no se ven, testigos atentos de la jugada.
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Campo de Granada, 1962. Club Estudiantes-E.N.Bazán E.N.Bazán de El Ferrol del Caudillo Caudillo. Partido de alta tensión. Severo Iglesias en una de sus típicas penetraciones a la canasta, sin que los ferrolanos puedan pararlo ni con falta personal. Mucha marine marinería departamental entre los aficionados, siempre fiel seguidora de la Bazán cuando coincidían con su barco en puerto.
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Año 1962. Club Ademar. Tercera División Nacional. De pie: Carlos Núñez (jugador-entrenador), Juan Carlos Llopis, Alfonso Álvarez y Pirulo Domínguez. Agachados: Carlos Pomar, Manolo Rodriguez y Luis Miramontes.
Los Maristas, 1962. Ademar-Estudiantes Estudiantes. Pirulo Domínguez se hace con el rebote pese a la oposición de Paco Picos y la presencia cercana de Cerdeira. A un lado, la mirada vigilante de Queiro, conocido árbitro de la época.
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Campo de Granada, 1963. S.E.U. de Santiago Club Estudiantes-S.E.U. Partido de gran an rivalidad entre dos aspirantes al título de Liga, que daba el pase a la Fase de Sector de ascenso a Primera División División. Isidro Gallego, en una de sus clásicas entradas con bandeja a dos manos. Los santiagueses Vitolo y Carlos Lamela evitan cometer falta personal… hasta parece que le hagan una reverencia. Las sábanas de fondo no son para proteger del viento a aficionados y jugadores, como alguien pudiera pensar.. Simplemente se colocaba colocaban para invitar a “los curiosos” de la calle a pasar por taquilla.
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Temporada 1964/65. Club Manuel Álvarez Campeón Grupo Gallego de Segunda División Nacional De pie: Chus Codina, Isidro Gallego, Juan Carlos Llopis, Pedro Montilla, José Carlos Freijeiro y Chiky Fuentes. Agachados: Francisco Javier Ocaña, Luis Miramontes, Trigo, José Luis y José Antonio Rodríguez. guez.
Luis Miramontes e Isidro Gallego calentando ant antes de un partido. Detrás, el “coach”, José Carlos Freijeiro, vigila a sus pupilos.
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Lugo, 1965. Fase de Sector. Podría ser un “cinco inicial” del Manuel Álvarez de finales de los años sesenta. De pie:: Isidro Gallego, el madrileño Pedro Montilla y Juan Carlos Llopis. Agachados:: José Antonio Rodríguez y José Luis.
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Isidro Gallego, el bravo ala-pívot pívot de la cantera del Estudiantes, en una de sus dos temporadas defendiendo los colores del Manuel Álvarez.
Volvería al conjunto estudiantil, y terminaría su presencia en las canchas en 1972 con el Real Club Celta Celta. Tras su retirada, jugó en el Club Rodaballo, y entrenó una temporada al Real Club Celta Femenino de Primera División. Fue uno de mis compañeros del Estudiantes lamentablement lamentablemente perdidos en plena juventud. Como Severo Iglesias Iglesias, Jorge Domínguez, Joaquín G. Picher, Romero Bello, José Ángel Román, Emilio Abelenda…
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Los Maristas, 1958. Club Areosa de los H H.H. Maristas De pie: Riveiro, Pirulo, xxxx, Casca, Yeyo Oubiña y Salvador García (entrenador). Agachados: Freijeiro I, Cossío, sío, José Carlos Freijeiro y Carlos Núñez.
Ademar-Estudiantes de finales de los años cincuenta. El pívot estudiantil Cerdeira pelea por un balón emparedado por dos contrarios. Carlos Núñez a la espera del desenlace, y Cancelas, polémico árbitro de entonces, vigilando el desarrollo del ju juego. ¿El campo?
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Lucha por el rebote en un Estudiantes Estudiantes-Manuel Álvarez de los años sesenta. Parece que el estudiantil Isidro Gallego se hace con el balón, en fuerte disputa con Xoubanova y Rodríguez (12).
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Lugo, 1966. Paseo por el bosque de los jugadores del Manuel Álvarez para relajarse antes del partido de Fase de Sector a disputar en la tarde-noche. Luis Miramontes, el madrileño Pedro Montilla e Isidro Gallego se toman un breve descanso.
El ex atleta Luis Miró,, preparador físico del Manuel Álvarez, encabeza el paseo. A su lado, Luis Miramontes, Llopis, José Antonio Rodríguez, Isidro, Pedro Montilla, Gustavo Vega, Chiky Fuentes…
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Isidro Gallego, Luis Miramontes y Francisco Javier Ocaña, paseando por el centro de Lugo. En la pancarta se anunc anuncia el Campeonato de España de Segunda División, Fase de Sector, en el que está participando el Manuel Álvarez. Uno de los muchos intentos infructuosos del baloncesto vigués por ascender a Primera División
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Año 1962. Inauguración a pie de playa del Campo de Corujo Corujo. Isidro Gallego, que refuerza a los locales del Club Toralla,, lucha en el rebote con el bosquista Boliche (13). El entusiasmo de Paulino,, su promotor, no pudo evitar la desaparición del equipo de Corujo pasadas adas dos temporadas. Tras haber perdido su primer campo en El Bao, también se quedaría sin esta cancha de juego al poco tiempo.
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Año 1960. Tiempo muerto del Estudiantes. Julio Castro se dirige a sus pupilos Rey Lama, José Ángel Román y Severo Iglesias Iglesias. Sin la obligada planilla de entrenador -inexistente por entonces-, no estoy seguro que le hubiéramos hecho mucho caso.
Jardín Park, 1961. Estudiantes-Bazán Bazán. Los estudiantiles Román y Rey Lama persiguen el balón con la mirada. En medio de ambos, el fe ferrolano Pardo. Los fieles aficionados llenan a tope el estrado de la orquesta.
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Los Maristas, 1965. El escolta JosĂŠ Luis RodrĂguez en una de sus habituales entradas a canasta con tiro en bandeja a dos manos. Por entonces era un tiro muy utilizado.
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Jardín Park, 1956. El recorte de prensa -“El Pueblo Gallego”- no puede ser más elocuente: el Estudiantes se acaba de proclamar campeón de la Fase de Sector ccelebrada en Vigo. Con un campo abarrotado de aficionados, se ha impuesto en el partido decisivo a la Unión Deportiva Salamanca.
omán, en una de sus poderosas entradas a El base del Estudiantes, José Ángel Román canasta, que finalizaba con la mencionada “bandeja a dos manos” manos”, o “tiro de palangana” como también se le conocía.
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Taboada Leal, 1956. Estudiantes-Bazán Bazán de Segunda División Nacional. Joaquín García Picher se hace con un rebote emparedado entre dos rivales. Pardo (9) y los vigueses Mito (4) y Carlos Cerdeira (9) (9), aguardan el desenlace del juego. A pesar de su corta estatura, Picher era un gran reboteador, además de un eficaz defensor, director de juego con mando y excelente pasador.
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Jardín Park, 1958. Estudiantes-Grupo Grupo Covadonga de Gijón. Clásico palmeo de Benito Lorenzo,, pívot del Es Estudiantes, de excelente anotación bajo los aros.
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Campo de Granada, 1966. Estudiantes Estudiantes-Manuel Álvarez. Bandeja de Pedro Montilla, ante la impotencia de Francisco Picos y Rey Lama. Por detrás, Chiky Fuentes, Isidro Gallego y José Antonio Rodríguez. Los aficionados llenan el graderío, incluso la “grada de monte”.
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Campo de Granada, 1962. El pívot Carlos Cerdeira en su habitual lucha bajo los aros. Picos a la espera del desenlace. A la izquierda, un una pancarta de publicidad de “EL SPORT”, tienda de deportes de mi familia, de la que fui gerente durante muchos años.
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Año 1966. Los clásicos duelos Estudiantes Estudiantes-Álvarez. En la primera fotografía, Campo de los Maristas, los pívots Picos y Souto pelean por un rebote. En la segunda, Campo de Granada, lo hacen Montilla y Picos, con José Luis atento al juego.
Los Maristas. Picos lucha con Freijeiro por el control de la pelota.
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Campo de Granada, 1963.. El Estudiantes juega contra el representante ourens ourensano. Picos se hace con el balón ante le presencia impotente de sus rivales. De eespaldas, el ala-pívot Domínguez (15). Detrás del público, a la derecha, se ven nuestros “vestuarios de lujo”.
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Jardín Park, 1958. Partido amistoso del Club Estudiantes contra un combinado del portaaviones norteamericano “Camberra”, atracado en puerto durante unos días.
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Año 1962. ¿Campo? No consigo saber cuál puede ser. Lo que sí se adivina, en cambio, es que alguien del Estudiantes debió re recibir un buen empujón en una entrada a canasta. Contrarios y compañeros lo atienden, mientras “el hermano de Mito” recrimina la acción al jugador gador rival rival. Rey Lama parece pedir explicaciones a la pareja arbitral, Román (4) observa, y Paco Nistal consulta con su compañero de arbitraje, tratando de aclarar la situación.
Si el lesionado hubiera sido Isidro Gallego -no se sabe-, no tendríamos motivo ivo de preocupación. Isidro se “lesionaba” en casi todos los partidos de tal gravedad, como para ser retirado en ambulancia cada vez que essto ocurría. Al asistirle en el suelo, guiñaba un ojo, “Estoy descansando”, te decía en voz muy baja, y continuaba revolviéndose de dolor. Sólo en Ourense sus quejas tenían motivo, y bien justif justificado. do. Lo marcaba siempre su primo, Gallego, que de saludo le hacía a un “tapón”, no en el balón, sino en los m morros, e Isidro quedaba medio “K.O.”” al primer minuto de juego juego, y ya para el resto del partido.
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Los ourensanos han tenido, y siguen teniendo, buena fama de hospitalarios, pero en las canchas de baloncesto demostraban más bien todo lo contrario. Ourense era una de las plazas más “peligrosas” sas” de Galicia, igual que El Barco de Valde Valdeorras. Pero en otros lugares no se quedaban tampoco atrás. Yo también he sufrido las más variadas “barridas” en canchas de Villagarcía, de Santiago, de El Ferrol, de La Coruña, de Lugo… Podría hablar bastante de este tema… que al parecer, aún hoy en día sigue repitiéndose.
Cancha do Couto, 1960, situada en los aledaños del campo de futbol. José Perla, el jugador más valioso oso del C.D. Orense, sobre todo en los partidos de casa. Fuera, su rendimiento bajaba notablemente.
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Campo de Granada, 1962. Partido Estudiantes Estudiantes-Ademar. Los pívots estudiantiles Cerdeira y Picos saltan al rebote con la oposición de un contrario, que parece haber palmeado el balón hacia atrás. Alfonso (9), tan sólo muy alto, no será capaz de hacerse con el palmeo que le envía su compañero. El árbitro Ferrón atento al juego.
El pívot del Ademar, Alfonso Álvarez, con 2,02 de estatura,, fue uno de los primeros jugadores en acudir a la Operación Altura que por entonces empezaba a organizar la Federación Española. Después de dos años en Madri Madrid, regresó con escasos progresos, tal vez debido a una deficiente afición al baloncesto. Se retiraría pronto.
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Año 1963. Jorge Domínguez se hace con un rebote en un partido AdemarEstudiantes. El alero estudiantil, que también jugó en el Bosco, Álvarez Álvarez, Breogán de Lugo y Celta, fue en aquella década, uno de los mejores jugadores gallegos en su puesto.
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Campo de Granada, 1965. Margarita Aldazábal, muy en su pa papel, finge una gran sorpresa ante el trofeo de Campeón de España de 2ª División conseguido por el Estudiantes en Madrid, y que exhibe en sus manos ante las sonrisas de sus compañeras. A la izquierda, Picuca Martínez;; a la derecha, Maribel Lorenzo, Cristina Acosta, Hortensia Neira y Purina Villanueva.. Todas ellas con los trofeos individuales rec recibidos.
Las campeonas posan para la prensa. Olga Curty, Purina Villanueva, Hortensia Ne Neira, Amparo Dios, Cristina Acosta, Picuca Martínez, Esther G. Bermello, Margarita Aldazábal, Maribel Lorenzo y el entrenador, Rey Lama.
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Por entonces -se puede comprobar por este documento-, los clubs se llevaban con absoluta seriedad. A la vista está la transparencia del Club Independiente con esta Memoria que presenta. Su presidente Roberto Besada da cuenta detallada de las actividades del Independiente a lo largo de la temporada. No queda nada sin mencionar: resultados deportivos, donativos, las bajas como jugadores de Cabaleiro y M. de la Peña, las altas de Felix Calles y López Fontán, el primer trofeo conquistado en su primera competición, la mala suerte en el torneo siguiente… y
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por supuesto, sto, las cuentas del club, que no aparecen aquí por problemas de espacio.
Ejemplo del Independiente debían tomar los clubs de este ssiglo -sobre todo los de fútbol-,, sumidos sumidos, la mayoría, en unas memorias confusas, y en algunos casos, manipuladas manipuladas.
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Roberto Besada,, fundador y presidente del Club Independiente. Hombre del baloncesto, fue un colaborador incansable en la promoción de nuestro deporte d durante las décadas de los cincuenta y ssesenta. Desempeñó cargos directivos en la Federación.
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CAPITULO VII
ยกQUร COSAS!
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Querido amigo, ¿tú juegas con lentillas? Sí, claro. Sin gafas no me entero de nada. ¿Cuántas dioptrías tienes? Cerca de cuatro en cada ojo. Pues en mis tiempos de jugador no había lentillas, de manera que cada uno se tenía que apañar para jugar sin gafas. En el Estudiantes llegamos a estar en el campo cuatro miopes: Jorge Domínguez, Isidro Gallego, Rafa Tapias y yo. Menos mal que no había mucho que ver, tan sólo el resultado en aquellos marcadores artesanales que tenían las canchas. - ¿Y el tiempo de juego?... ¿y los veinticuatro segundos de ataque?... - ¡Qué cosas dices! En los años sesenta había marcadores de tanteo… y gracias. El tiempo de juego se preguntaba en la mesa, y los veinticuatro segundos no existían. Más tarde, a finales de los sesenta, se modernizó el sistema, y ya se colocaban unos cuadernillos en la mesa que indicaban el minuto de juego. Total, que los miopes del equipo teníamos que estar continuamente preguntando por el tanteo. Habría partidos, de esos ajustados, que seguramente empleábamos tanto tiempo en preguntar como en jugar. - Es decir, que si no veíais el marcador… del aro ya no te pregunto nada. ¡No metíais una! - Chaval, aunque no te lo creas, los compañeros que te nombré, y yo mismo, éramos muy buenos anotadores. ¿Cómo encestábamos a media distancia, e incluso a larga distancia?... ¿y en partidos nocturnos con cuatro bombillas de mala muerte como gran iluminación?... Ahora que lo dices, te confieso que no lo sé… Tendríamos un radar instalado en la cabeza… Antes había que agudizar mucho el ingenio. No como ahora, que todo está servido en bandeja. -
En la campaña 1978/79 llegaban al C.D. Bosco dos fichajes de lujo, el ala-pívot Alfredo Pérez y el base Pepe Conde. Procedían del Breogán-La Casera de Lugo, equipo que desapareció ese año, después de jugar durante varios campeonatos en Primera División.
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Alfredo Pérez había sido el Máximo Encestador de Primera en las tres últimas temporadas, por delante de las grandes figuras nacionales y extranjeras. Entre ellas, los excepcionales aleros norteamericanos Wayne Brabander y Walter Szcerbiak del Real Madrid. El seleccionador nacional Antonio Díaz Miguel, incluso lo había llevado alguna vez a la selección. La anotación normal de Alfredo Pérez en el Breogán pasaba de los treinta puntos por partido. Pues bien, Alfredo Pérez era tan miope como yo y como mis compañeros del Estudiantes. Tenía más de cuatro dioptrías en cada ojo, y cuentan los bosquistas Nacho Arroyo y Pachi Reigosa -coincidentes con él en esa temporada en el Bosco-, que les preguntaba el tiempo y el tanteo a cada rato, muchas veces, justo DEBAJO DEL MARCADOR -en el Frontón Municipal estaba situado en un fondo, a pocos metros de la cancha-. “No fallaba
un tiro. Era raro que bajase de cuarentas puntos en algún partido”, me comentan con admiración. En Lugo cuentan, que al inicio de un encuentro estaba fallando demasiados tiros, circunstancia completamente anormal en Alfredo Pérez. Llamaron a los árbitros, y le pidieron que comprobasen las distancias de la colocación de la canasta -en la que atacaba el Breogán-, y efectivamente estaba ligeramente fuera de su sitio reglamentario. Corregido el pequeño error, el alapívot recuperó su acierto habitual, y superó los treinta puntos. Está bien claro, que “el radar” -que yo mencionaba anteriormente- le detectó a Alfredo Pérez la anormalidad. Las gentes de antaño éramos muy precisos cerebralmente. Alfredo Pérez, internacional junior en el Campeonato de Europa celebrado en Vigo en 1968, estuvo a punto de fichar por el R.C. Celta un par de años después. Los directivos célticos de esa época, siempre se lamentaron de no haberlo fichado en aquella oportunidad. “Con él, estamos seguros de que hubiéramos ascendido a Primera”, comentaban cuando salía a colación el tema del ascenso.
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El ala-pĂvot internacional Alfredo PĂŠrez en su temporada en el C.D. Bosco.
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- Colega de tertulia,, tú ya sabes que nunca me gustó ar-
bitrar trar ni en los entrenamientos. Además, me dicen que cuando lo hago, por supuesto que por compromiso, arbitro bastante mal. - Es decir Luis, que eres tan malo como los árbitros de los que te quejas a cada momento. - Efectivamente, tienes toda la razón. También soy el primero en juzgar que no creo que haya un deporte tan difícil de arbitrar como el baloncesto. - Bueno, ¿y qué me querías contar? - El otro día, por primera vez en mis cincuenta y siete años de baloncesto, arbitré un partido oficial. Y yo que creía hace tiempo, “… que ya lo había vivido todo”… todo”…y ya ves. El árbitro no se presentó, y en el Colegio Covaterreña donde se celebraba el partido,, además de jugadoras, entrenad entrenadores y auxiliares de mesa, sólo estábamos un aficionado de once años y yo. Total, que me tocó. Menos enos mal que era un encuentro de infantiles femenino, y la superioridad del equipo de Baiona no dejaba lugar a dudas. “¿Qué tal lo hice?”, le pregunté al amigo aficionado de once años al finalizar. “Tuviste fallos”, sentencia sin dudar. “Hubo un fuera de banda tan claro, que a la jugadora del Co Compañía sólo le faltó correr con el balón por detrás del banquillo… ¡Y le perdonaste una técnica a Cristina Cristina!, ¡IMPERDONABLE!”. Este
amigo es un “enterado”,, no pierde una.
Cuatro jugadoras del Baiona Infantil, a las que tuve que arbitrar como “colegiado oficial”: María Rodríguez, Lara de Villalo Villalobos, Nuria Palamidessi y Cristina Álvarez. En el medio de las cuatro, el oso mascota. Según su padre padre, sus tíos y el aficionado,, Cristina fue merecedora de una técnica por botar la pelota violentamente contra el suelo… después de un fallo. “Ya ves, Cris, cría padres, tíos y amigos para que luego te acusen…”
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En los años cincuenta era completamente normal que al inicio de un partido sólo hubiera en cancha un único balón. Ahora, en el 2009, lo normal es que haya un balón por jugador, es decir, veinticuatro. ¡Qué diferencia! Y después los jóvenes se extrañan cuando les digo: “Ahora es imposible jugar mal al baloncesto.” Entre los balones -que no tienen nada que ver con los de antes-, las canchas cubiertas, el parquet flotante, el primer entrenador, el ayudante, el preparador de pívots, las camisetas “high-fly” que aspiran el sudor, el Gatorade, el preparador físico, el “fisio”, el entrenador de saques de banda y de fondo, el especialista en triples, las planillas, los miles de luxes de iluminación, el psicólogo, el “siguing”, el nutricionista… y la Biblia en verso… que alguien me diga si no es verdad mi sentencia. Pues en un partido de aquella época, un mal árbitro -seguramente bastante menos malo que los de ahora- le pitó una inexistente personal a Josechu Curiel, la quinta, que por lo tanto significaba su expulsión. El bravo jugador se revolvió de inmediato ante tamaña injusticia, y armó un revuelo de cuidado, reclamando la anulación de la falta. Se paró el juego, avalancha de jugadores sobre el árbitro principal -y único-, discusiones, abucheos del público, gritos… A Josechu no le borraron la personal… Dicho y hecho, Josechu se hizo con el balón, se lo llevó al vestuario, y amenazó que si no le retiraban la personal que no había cometido, no devolvía el balón… y por lo tanto no continuaba el partido. ¡Qué cosas! Las aventuras deportivas de Curiel son interminables, pero yo también soy de la opinión de hacer algo parecido con los arbitrajes que tenemos que soportar. Es una “deuda” que me queda pendiente en el baloncesto: “Expulsar a
los árbitros de un partido… y seguir jugando sin ellos… por supuesto, tranquilamente.” Ya lo intenté más de una vez con el Rodaballo -admitiendo de antemano que perdíamos oficialmente el partido-, pero ni mis jugadores, ni el equipo contrario me lo permitieron. (“Este párrafo no va a pasar la
censura, por incitación a la violencia.”) Lo que no sé, ni nadie me lo aclaró nunca, fue en qué quedó el ya famoso “secuestro de balón” de Josechu Curiel…
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Encontrarse con Carlos Núñez y hablar de baloncesto es inevitable. Si el encuentro es por la mañana, llegarás tarde a comer… Si es por la tarde… a cenar. Pero vale la pena.
<<El campo de arriba de los Maristas lo hicimos la gente del Ademar a pulso, palmo a palmo, con nuestras manos. Una capa de piedras, otra de carbonilla, otra de piedras menudas, otra de polvo de ladrillo… De toda aquella mezcolanza salió un piso rojo parecido al asfalto… también al cemento… algo intermedio entre uno y otro. Allí Luis, como tú sabes, se jugaron muchos partidos de Segunda Nacional. En la década de los sesenta fue nuestra cancha y la del Manuel Álvarez… después de echar una nueva capa de alquitrán. >> <<El día anterior a su estreno, Gustavo y yo, empujamos Taboada Leal arriba un rodillo de hierro que nos había prestado “El Cable Inglés” -en la subida a El Castro-, para darle la última pasada a la cancha. ¡Pesaba!... pero lo subimos. >> <<El nuevo y flamante campo se estrenó con un Ademar-SEU, que perdimos tan sólo por tres puntos, y estuvimos a punto de dar la gran campanada ante uno de los favoritos para el título. En nuestro equipo jugaban Pomar, Gustavo, Llopis… y yo; y el potente equipo de Santiago formaba con Fenollera, Manolo Filgueira, Barca, el peruano Vitolo, el portorriqueño Víctor Félix… >> <<¡Menuda jugada me hizo Vitolo!... Pero luego me felicitó. Eran los tiempos de las diabluras de los Harlem Globe Trotters. Yo marcaba por detrás a Vitolo, cerca de la canasta, atento a que no entrara o tirara a cesto. Se revuelve rápido, gira hacia el aro, me finta el tiro hacia la derecha, yo salté con agresividad para taponarle el lanzamiento… El balón lo había dejado en el suelo -a lo Harlem-, se volvió y anotó fácilmente la canasta por la izquierda… >> <<No pasaron ni dos ataques nuestros, y ¡ya le había devuelto la jugada al peruano! Él me fintó a la derecha, y yo lo hice a la izquierda. En los dos casos con canasta final, y eso sí, Vitolo me felicitó con nobleza dándome la mano. >> La verdad, es que yo nunca supe ni oí hablar de tal jugada en una cancha viguesa. Se lo vi realizar varias veces a los
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Harlem… y a nuestro entrenador entrenador, Julio Castro, que se lo hacía en los entrenamientos a los novatos novatos… y a veces, picaban.
<<Cuando Cuando fue la presentación de tu libro –sigue contando Carlos Núñez-, surgió en la conversación el “Torneo de Ases” que se disputó en el año cincuenta y uno. Julio Castro pre presumía de haberlo ganado, y yo tuve que aclarar aclararle que aquel torneo lo había ganado Ferrón (del Constitución Constitución), de segundo quedó Ismael (del Areosa), y de tercero yyo, en una mala actuación mía. Se trataba de un concurso de tiro: de espaldas -aro pasado-, desde la personal, desde las bandas… Yo de aquella las metía hasta con los ojos cerrados. “¡Hermano Herminio -le gritaba cuando se asomaba ba al muro de arriba arriba-, para usted! Llegué a meter cuatro seguidas desde de una esquina del medio del campo… de palangana, claro, si no era así así, no llegaba… ¡con los ojos cerrados, Luis! >> Yo no estoy seguro de si Carlos, en tantos años de ens ensoñaciones baloncestísticas, habrá confundido los sueños con la realidad.. A mí también me ocurre, y es que cuando nos hacemos mayores, y ha pasado tanto tiempo, no recordamos con exact exactitud si ha sido una fantasía de algún sueño o ha ocurrido de ve verdad. Yo le envidio idio no poder contar en mi cu currículum, ni con una canasta a lo Harlem Globetrotters, rotters, ni con esas canasta canastas con los ojos cerrados.
Año 1951. Ferrón, del Club Constitución del R. C. Celta. Ismael y Carlos Núñez, del Club Areosa de los Hermanos Maristas
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Carlos Núñez, igual que García Hermida, que los direct directivos del Estudiantes, que los de la empresa Álvarez… echaban mano de la “picaresca” tan pronto la ocasión lo permitía. - Carlos, ¿qué hacías tú en varias fotos con el Bosco? - Iba de refuerzo.. Tuvimos que fingir la desaparición
del Areosa -los los jugadores quedaban libres libres-, para que Román, Bares y Aquiles fueran con el Estudiantes a la Fase de Sector, y yo lo hice con el Bosco, en otra que se jugaba en Lugo. Por cierto, en ese viaje nos volvió loco locos José Luis Quirós. Dormíamos en la misma habitación, Rolán, él y yo. Y venga, que tenía la novia en Madrid, y qu que había que ganar para acudir a la Fase Final, y así poder ver a su novia novia… Y venga, que cómo íbamos a ganar… “A A los de Coruña les vino Manocho desde Madrid”… Y cómo o vamos a hacer… Y venga… “Y a nosotros Josechu Curiel”, le decíamos Rolán y yo yo… Por fin, les ganamos.” ¿Qué dices ahora?” “Sí, Sí, pero hoy tenemos que ganarle a Lugo… con Caraduje -la figura lucense lucense-.” Era una pesadilla. Al final quedamos campeones... ... El “gafe” de Quirós con sus mi miedos y sus augurios pesimistas nos lo hacía pasar mal, pero ganamos, fuimos a Madrid, y pudo ver a la novia novia.
Rolán, José Luis Quirós y Carlos Núñez en el Sector de Lugo.
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Me cuenta uno de sus compañeros de equipo, que Suso Montes siempre fue un hombre de bien, querido de todos, con mucha “retranca” y de muy atinado juicio. Durante un entrenamiento del Bosco en Balaídos -año 1984-, un juvenil se lesionó de cierta importancia en un tobillo, al menos eso daba a entender por sus gritos y gestos de dolor. Julio Bernárdez, el entrenador, se acercó raudo al chico y alarmado por la situación, recurrió enseguida a Suso Montes, que acababa de finalizar los estudios de Medicina. Tras unos minutos de observación sobre la articulación dañada, y ante la espera expectante de jugadores y entrenador por un diagnóstico certero y rápido, Suso se vuelve hacia Julio Bernárdez, y con la sorna que le caracterizaba, sin apenas levantar el tono de voz, le daba su opinión médica al respecto: “Julio, yo creo que debías llevarlo
a un médico.” Su diagnóstico de urgencia, por supuesto pleno de sano juicio, fue recibido por su grupo de compañeros con sonoras y largas carcajadas… “Se debieron de oír hasta en la sede social
del Bosco, allá en Taboada Leal.”… “E incluso me parece recordar, una amplia sonrisa del lesionado entre sus quejas y gestos de dolor.”
Suso Montes, en su época de jugador del C.D. Bosco. ¡Cuánto le hubiera gustado ver jugar a su hijo Emilio! Aún alevín, pero ya en infantiles, es una delicia en la cancha… y fuera de ella, como su padre.
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Vitoria, 1964. Club Náutico de Vitoria Vitoria. En este equipo jugó una temporada el vigués Rafa Tapias (nº 8), y por entonces entonces, su entrenador Javier Añúa era el principal propulsor del baloncesto en la capital vasca. Al poco tiempo de esta fot fotografía, el club se convertiría en el Kas y ascendería a División de Honor, trasladá trasladándose años después a jugar a Bilbao. Al cabo de unos pocos años regresaría de nuevo a Vitoria, y pasaría a ser el actual TAU TAU-Basconia. El basket en Vitoria goza de una fuerte implantación desde siempre. Cuenta Rafa, que el Frontón Municipal donde jugaban se abarrotaba en cada partido.
Javier Añúa, entrenador del Club Náutico de Vitoria y del F.C. Barcelona en las décadas del sesenta y setenta, entrenó una temporada en Francia. Pero a al parecer, no simpatizaba demasiado con la forma de ser de los franceses. Un día de aquellos,, comiendo en un restaurante junto a los doss americanos negros del equipo -cada uno, de más de dos metros de estatura y con más de cien kilos de peso peso-, andaba jugando muy cerca de ellos un niñito francés. Sus padres lo vig vigilaban con la mirada desde la mesa de al lado, y el niño, que estaba tomando un helado de cucurucho, sse aproximaba cada vez más al pantalón de Javier, con el peligro evidente de derramá derramárselo por encima. El entrenador vasco contuvo al niño con delic delicadeza, levantó la mirada hacia el padre para que mediar mediara, lo intentó de nuevo vo con el crio… y al fin, el helado acabó estrellado en el pantalón del entrenador.
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Javier Añúa, con evidente enfado, pero sin el mínimo gesto, cogió la copa de vino tinto que tenía delante, se levantó de su mesa con toda la calma, se a acercó al padre sin mediar palabra, y se la derramó enterita por encima de sus pantalones. Lo que no se sabe es si el francés aceptó lla represalia del español por su conducta permisible con el hijito… o simplemente les tuvo algo de respeto a los dos “guarda “guardaespaldas” que acompañaban a Javier Añúa.
Vitoria, 1964. Rafa Tapias se había trasladado a la capital vasca por motivos laborales. Con la recomendación de Díaz Miguel -que lo conocía del Estudiantes vigués-,, entró a formar parte del Club Náutico nada más llegar. Al poco tiempo se haría un jugador importante en el esquema del equipo. En las dos instantáneas se le ve en sendas entradas a canasta rodeado de contrarios, una de sus grandes virtudes. Se trataba de un alero habilidoso y rápido para ese tipo de jugadas jugadas.
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- Querido amigo, ¿te acuerdas de las Martas de la tem-
porada pasada que salían a mi alrededor por todos los lados como si fueran un enjambre de hormigas? - Me acuerdo, Luis. Jugadoras de tu equipo, del club, rivales, entrenadoras, amigas, vecinas, familiares… hasta una Marta fue testigo de tu última canasta oficial… - Pues este año va de Marías… y en algunos casos, varias en el mismo grupo que entreno. No sé ni cómo llamarlas. - Llámalas por el segundo nombre, que seguro que lo tienen: Mercedes, Jesús, Rita, Carmen, Ánge… - ¡Qué va! ¡Éstas sólo son María a secas! Son casi todas de la misma generación, y se ve que en esa época no estaba de moda ponerles nombres compuestos. - Entonces, no te queda más remedio que llamarlas por el apellido. - Sí, eso intento. Pero nunca doy con el correcto. A “la Rodríguez” le llamo Álvarez; a “la Álvarez”, Fraga; a “la Fraga”, Montes; a “la Montes”, Docampo; a “la Docampo”, Iglesias; a “la Iglesias”, Castiñeiras; a la “Sanromán”, Sangermán; a “la Castiñeiras”… ¿y yo que sé cómo? - Tranquilo, Luis. No te vuelvas loco… Total, para lo poco que les vas a enseñar, ¿qué más da? Tan sólo puede ocurrir que la pívot aprenda a jugar de base, la base de “cuatro”, el alero de “cinco”… Tampoco es nada malo. - ¡No, no! ¡Lo malo no es eso!. Lo malo es que les grito: ¡Álvarez, lanza a canasta más bombeado!”, y veo que responde otra alumna levantando el tiro hasta casi el techo del pabellón… o “¡Fraga, tira un poco más raso!”, y una distinta intenta meter la canasta por debajo del aro… o “¡Montes, bota más bajo!”, y la pobre niña se arrastra por el suelo para poder hacerlo… ¡Qué lío! ¡Esto es una locura! Pensarán que estoy loco, que no sé lo que digo… Algo de razón tienen… Bueno, se hará lo que se pueda. - Pues. Que haya suerte. - ¿Sabes una cosa? Prefería quedarme con las Martas del año pasado. Al menos ya estaba acostumbrado… A propósito, también este año tengo dos Martas… - ¡Qué Calvario! ¿Por qué no se llamarán Lara, o Clara,
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o Uxía, o Cris, o Sara, o Andrea…?¡Mira que hay nombres dónde elegir! - También tengo alumnas con esos nombres... pero por fortuna, ninguno repetido. - … ¿Y Carolina? ¿Y Eva? ¿Y Raquel?... - También tengo. - Pues, ¡apaga y vámonos! - Pues sí. << La más pequeña es “la Rodriguez”, con once años; la mayor, “la Docampo”, con más de treinta; “la Castiñeiras” es la hija de un entrenador colega; “la Montes”, hija de un jugador amigo que, por desgracia, falta desde hace unos años; “la Fraga” y “la Iglesias” son hijas de directivos… ¿La mejor? No sé qué decirte… ¿La más guapa? ¡Déjame que lo piense!... ¡Todas!… ¿La más simpática? Pues no sé qué te diga. Si juntamos “la Docampo” con “la Fraga”, le añadimos algo de “la Iglesias”, un poco de “la Montes”, la sonrisa de “la Rodríguez”… saldría una “miss Simpatía”… ¡Y la madre de otra alumna se llama también María! ¡Tu madre!, le digo a la hija… ¡eh!, pero con buena intención… El otro día me encontré con “la Herrero”, la juvenil del Celta que entrené hace años… ¡Y la mamá de mi sobrina Marta es mi prima María!… ¿Sabes cómo se llama la vecina que nos regala limones? María… ¡Esto es una locura! Aún encima, en La Arribada fui a un Concierto de Fados, y cantaron “María la portuguesa”… Para colmo, un guiri confundía la Pinta con la Santa María… ¡Me mandaron a comprar galletas “María”!... ¡Lo único que me faltaba: una alumna nueva, María… y de apellido Rodríguez, como la otra! Le pediré a don Moisés, el párroco de Baiona, que las rebautice a todas de nuevo… ¿Sabes lo que me contestaría? Marías hacían falta muchas más… Enciendo la televisión y ¡me encuentro con “la Patiño”!... “la Suárez” quiere cambiar de equipo… La hija de Ángeles Araújo es un portento, la mejor del Torneo de Minibasquet de Baiona. ¿Qué cómo se llama?... María… El otro día llegó de México la chamaquita mejicana, una pariente lejana, ¡se llama también María!... ¡Y en el campus de Panxón, sólo había Marías! Las de antes y una nueva, “la Sanromán”… y una de las dos monitoras era también
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María, “la Eléxpuru”, sobrina de mi antiguo rival, Juan Eléxp Eléxpuru... Dos cadetes célticas, campeonas de Europa Sub Sub-16, y una de ellas, también María, “la Cente Centeno”… Alumna nueva en el Airexa Cadete. ¿De nombre? bre? María… “la Matos”… Busco en el baloncesto hijas de famosos, y me nombran a “la Karpina”, la hija de Karpin… se llama María… “Sara, ¿quién es esta niña? -le pregunté a la entrenadora, enseñándole una fotogr fotografía de su equipo-.“ “María.”…>> - Querido amigo, estoy desolado. No sé cómo voy a sa-
lir de ésta. sta. Tantos años en la pelea, y ya ves, “las Marías” van a acabar conmigo. - ¿Acabar contigo? Luis, eso sí que no me lo creo. - Ni yo tampoco.
María Montes, pívot cadete del Club Airexa de Panxón; María Docampo, pívot del Club Baloncesto Baiona Senior nior 2008/09; María Castiñeiras, ala-pívot de Club Baloncesto Baiona Junior 2009/10.
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María Karpina, ala del Real Club Celta Infantil 2008/09.
María Herrero Herrero, pívot del Real Club Celta Juvenil de los años ochenta ochenta.
María Sanromán, escolta cadete del Club Airexa de Panxón 2009/10.
MaríaRodríguez, escolta del C.B, Baiona Infantil 2008/09.
María G. Centeno Centeno, ala internacional sub sub-16 del Real Club Celta Cadete 2008/09.
María Eléxpuru, ala del Club Airexa Senior Autonómico 2008/09.
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Temporada 2009/10. Arriba izquierda: María Iglesias, escolta cadete del Club Airexa. Arriba derecha: María Álvarez Fraga, base cadete del Club Airexa. iAbajo derecha: María Suárez Cerdeira, pívot infantil del Club Airexa.
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CAPÍTULO VIII
EL CLUB DEPORTIVO BOSCO
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La mitad de mi etapa de jugador la he pasado peleando por el Bosco, y la otra mitad lo hice peleando contra el Bosco. Cosas de la vida. Pero aunque de corazón me siento enteramente del Estudiantes, no por ello dejo de mantener en mi recuerdo al equipo de mis amores de niño. Tampoco me olvido de mis ídolos de entonces, Rolán y Boliche, de mi primer entrenador, Manolo Martínez, de mis primeras canastas en el campo de tierra de Taboada Leal… y ¿cómo no?, de mi primer presidente, Antonio García Hermida. A finales de los años cuarenta, Antonio García Hermida, Gonzalo Rey Alar -mi padre- y Prudencio Sánchez fundan el Club Deportivo Bosco. El equipo nacía al amparo de la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos de Vigo, de fuerte implantación en la ciudad en aquella época, y tratando de dar cobijo a la juventud con una novedosa oferta deportiva. Primero fue un equipo de fútbol -en el que llegué a jugar en mis años de juvenil-, luego se amplió con otro de baloncesto, más tarde con uno de balonmano, y hasta llegó a tener un representante en hockey sobre hierba. Andando el tiempo, el Bosco se independiza de la Asociación de Antiguos Alumnos Salesianos, y se centra exclusivamente en el baloncesto. Su presidente, Antonio García Hermida, ejercería como tal durante más de cincuenta años, en los que vio cómo desaparecían el Club Estudiantes, el Manuel Álvarez, el Porcelanas Santa Clara, la Bazán de El Ferrol, el S.E.U. de Santiago, el Skol, el Celta masculino en más de una ocasión, y tantos otros. El Bosco seguía, con más protagonismo o con menos, pero ahí estaba la mano recia de su presidente para continuar la marcha del equipo más longevo del baloncesto gallego en aquellos tiempos. Si hay un personaje importante en el baloncesto de la ciudad, ese es Antonio García Hermida. ¿Quién sabe cuántos vigueses habrán vestido el equipaje blanquiazul del C.D. Bosco? En su más de medio siglo de andadura, la cifra debe ser de varios millares. No creo que en toda Galicia exista un club que se acerque levemente al número de licencias que debió tramitar el club bosquista a lo largo de tantos años.
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Tampoco debe haber ninguno que haya logrado tantos triunfos, tantos títulos, tantos galardones… Desde el deporte en estado puro de sus comienzos, hasta el cambio a la modernidad de sus últimos años. Ese ha sido el baloncesto de García Hermida. A raíz de mi marcha del club en 1959, nuestras relaciones personales se hicieron distantes. “García” -así le llamaba mi padre- nunca pensó que el hijo de su íntimo amigo Gonzalo pudiese jugar en otro equipo que no fuera el Bosco. Cuando me fui -no se lo creía nadie-, debió considerar que volvería pronto. Nunca oí que se lamentara de mi “deserción”, pero andando el tiempo, comprendí que en su interior sintió toda la vida que me hubiera ido… y yo también. Pero en su día, aunque con lloros por mi parte -que lo sepa la familia bosquista de siempre-, era necesario. La primera vez que jugué contra el Bosco en las filas del Estudiantes, el encarnizado rival, fue en Taboada Leal, en su casa, la mía hasta hacía poco. Aguanté de titular todo el partido, me encargaron de marcar a una de las figuras bosquistas, Boliche -dijeron que lo había secado-, y anoté 14 puntos. Victoria justa y trabajada. Desde aquella, mucha gente del Bosco me llamaba “renegado”. Ahora, en el año nueve del nuevo siglo, cicatrizadas las pasiones, desaparecidos los “pequeños odios”, con el pelo encanecido por el tiempo, volviendo la vista atrás… me encuentro con el Bosco, con su presidente, con sus gentes, con los compañeros que sentí perder, con el entrenador -la causa de mi marcha- que no dudo que me quiso, con la tierra de su campo, con su bonito escudo, con el sentir salesiano… y los admiro a todos, les agradezco el tiempo que me han dado, lo mucho que me enseñaron, los sueños de niño cumplidos por vestir su equipaje… Les mando un abrazo, les doy las gracias… y presento mis disculpas si en algo pude ofender en “la batalla” a mi respetada familia bosquista.
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DON ANTONIO GARCÍA HERMIDA, EL PRESIDENTE.
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Este fue el mítico campo de tierra del Bosco Bosco, Taboada Leal, escenario de tantos partidos en las décadas de los cincuenta y sesenta. Se vivieron en él jo jornadas gloriosas. En los acontecimientos importantes, el Ayuntamiento cedía gradas portátiles, y los aficionados llenaban el recinto nto a reventar.
Jornada para el recuerdo: el Campo de Taboada Leal estrena iluminación. Un lujo para los tiempos de entonces. A partir de este momento, ya se podría entrenar por la noche. La cal sobre la tierra,, al resplandor de los focos, señala con más intensidad las líneas del terreno de juego.
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Taboada Leal, 1950. Uno de los primeros equipos del Bosco, que entre otras ccosas, no se muestra muy numeroso. En cambio, destaca por su excelente “calzado” de baloncesto. De izquierda a derecha: xxxxx xxxxx, Mundito, Sindo, Rolán, Juanito y Alberto.
Este conjunto debe ser del año siguiente siguiente. Ya aparece bien calzado, y utiliza, a modo de chandalls, esas pequeñas toallas por el cuello. Componen la plantilla: Álvarez, Rolán, Abalo, Mito, Boliche iche y Cabaleiro Cabaleiro.
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Estación de Renfe de Vigo, 1952. Primer viaje del club a una Fase de Sector Sector, celebrada en Salamanca. De pie: Julio Castro, Bahillo (directivo), Gar Gar- cía Hermida (presidente), Manolo Martínez (entrenador) y Fontenla. Agachados: Rolán, Mito, Boliche, Abalo y Josechu Curiel.
Visita de la expedición bosquista al Colegio Salesiano de Salamanca. Entre la familia salesiana era costumbre obligada que los equipos de Antiguos Alumnos -el Bosco en este caso-,, hicieran acto de presencia en la casa salesiana de la ciudad a donde llegaban.
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Despedida del equipo en la estación. Aficionados y familiares acompañan entusiasmados a los jugadores en la salida del tren. Caras conocidas entre ellos: Gonzalo Rey Alar -mi padre-,, cofundador del Bosco, el primero por la izquierda; por la der derecha, la primera señora es Daría Lama -mi mi madre madre-; Magdalena -años después secretario de la Federación Viguesa-, agachado hado por la izquierda; Benigno -destacado árbitro de fútbol-,, el primero por la izquierda de los ssubidos al vagón; Manuel Benito -que que llegaría a Secretario de la Federación Española de B Baloncesto-, en lo más alto; Araújo, Migón, Álvarez, Queiro, Yayo… ¿Y ese niño agachado en primera fila? Me parece que soy yo.
nata de la iglesia de los Padres Jesuitas. El equipo posa en la escalinata
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De paseo por las calles de Salamanca. lamanca. De pie: Picher, Manolo Martínez -el entrenador-, Abalo, Mito, Alfonso García Migón -hijo del presidente-, Fontenla y Julio Castro. En el centro, la Sra. de García Hermi Hermida, la segunda madre de muchos de los jugadores bosquistas de aquellos años. Agachados: Bahillo -directivo-, Rolán y Boliche.
Fase de Sector, Salamanca, 1952. Campo de Tiro-Club Deportivo Bosco. Los equipos formados para su presentación antes del comienzo del partido. Los salmantinos se proclamarían campeones al vencer a los vigueses por 40 40-35. Campo de tierra, pintado con cal y canastas extra.
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Tres pilares del juego bosquista: Josechu Curiel, Mito y Rolán.
- Querido y joven tertuliano tertuliano, ¿tú has viajado mucho? - Hombre, mucho, mucho… pues no. Conozco Ourense, A
Coruña, Madrid, Barcelona, toda Galicia, media España, Oporto, Lisboa, las Canarias, las Baleares… París, Londres… - ¡Para, para! No o sigas. En los años cincuenta, sesent sesenta … salir de Vigo a menudo no estaba al alcance de todos, aun aunque se tratase tan sólo de viajar por Galicia. Si te llevaban a Madrid, a Barcelona, a Asturias, urias, a Salamanca Salamanca… eso ya constituía un privilegio con el que el deporte podía premiar tus esfuerzos. - Luis, ¿y a qué viene a cuento este comentario? - Pues simplemente, que clasificarse para una Fase de Sector era una lógica aspiración deportiva, pe pero también una oportunidad tunidad única de conocer un poco de mundo. Por esas raz razones, había auténticas batallas en los campos para lograrlo. - ¡Va! No sería para tanto. - Eso lo decís los jóvenes es de ahora que lo tenéis todo -os envidio-.. La gente de los cincuenta sólo salía de casa para emigrar, o para cursar estudios en Santiago o en Madrid con un eesfuerzo familiar enorme. Por fort fortuna, eso ha cambiado totalmente.
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Taboada Leal, 1951. C.D. Bosco-S.E.U. S.E.U. de la Eescuela Industrial. Los bosquistas Mito y Boliche luchan por el rebote con Carlos Davila, mientras Tot贸 (13) y Barreiro, al fondo, permanecen a la espera del rechace.
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Taboada Leal, 1951. Club Deportivo Bosco De pie: ร lvarez, Mito, Rolรกn, Boliche y Benito Lorenzo. Agachados: Abalo, Teijeiro y Cรกndido Gil.
Foto de Familia.. El equipo acaba de cosechar un importante triunfo. Jugadores, directivos y aficionados posan para la posteridad.
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Frontón de las Traviesas, 1951. Partido amist amistoso ante un contrario de entidad, tal vez sea el Real Madrid. El rival ences encesta frente a la impotencia de Alonso, y el gesto preocupado de Mito y Boliche que adivinan la canasta canasta.
Taboada Leal, 1952. Club Deportivo Bosco. De izquierda a derecha:: Manolo Martínez (entrenador), Fandiño, Alberto, Boliche, Josechu Curiel, Cabaleiro, Rolán y Abalo.
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Boliche,, capitán del Bosco, entrega un banderín de recuerdo al capitán del S.E.U. de Santiago El público a rebosar, incluso subido a la muralla.
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Temporada 1953/54. Uno de los clásicos equipos del Bosco. De pie: Josechu Curiel, Barreiro II, Fandiño, Rolán y Abalo. Agachados: Barreiro I, Boliche, Mito, Cabaleiro y Cándido Gil.
Temporada 1954/55. C.D. Bosco. Fase de Sector en Lugo. De izquierda a derecha: Manolo González (delegado), Carlos Núñez, Alfonso García Migón, José Luis Quirós, Álvarez, Chachi, Barros, Manuel Benito, Rolán y Manolo Martínez (entrenador)
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Cancha del C.N. Canoe de Madrid, 1955 1955. De arriba abajo: Álvarez, Barros, Chachi, Manuel Benito, Alfonso García Migón, Rolán, José Luis Quirós y Carlos Núñez.
Al equipo, en la Fase de Sector de Lugo Lugo, se le unió Josechu Curiel desde Madrid, donde estudiaba. Se le ve en el centro, con el nº 14.
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Hay un hecho que llama la atención en estas salidas del Bosco a Fases de Sector. Y no es otro que la presencia en sus filas de jugadores de los clubs rivales de la ciudad. Los veteranos lectores, a buen seguro que ya lo habrán advertido. ¿Qué hace Julio Castro en un equipo del Bosco?... ¿o Picher?... ¿o Alonso?… ¿o Carlos Núñez?... No se sabe si las normas federativas de entonces permitían dos refuerzos en esta fase de la competición, o bien se trataba simplemente de la habitual “picaresca” de “camuflarlos” como jugadores propios. ¿Quién sabe? El presidente García Hermida, en uno u otro caso, se cuidaría bien de llevar su equipo lo mejor provisto de “refuerzos”. Eran otros tiempos. Los equipos no se conocían, no tenían referencias de sus plantillas, no había videos… no estaba implantado el “siguing”. ¡Pero ojo! Podía siempre surgir un espía que delatara la irregularidad, y diera lugar a una reclamación por “alineación indebida”. ¿Y de dónde salía el espía? Muy fácil, un infiltrado en el Servicio Militar o en la Universidad. De ahí podía venir el peligro. De todas maneras, el silencio administrativo ante las reclamaciones de ese tipo era lo normal, y el presidente bosquista lo sabía sobradamente. El fallo vendría después a toro pasado. Si existe alguna duda en este proceder de la justicia deportiva, que se lo pregunten al Obradoiro de Santiago. También llama la atención en ocasiones, la ausencia en las fotografía de jugadores emblemáticos del club. ¿Qué pasa con ellos? ¿Alguna lesión o enfermedad ocasional? ¿Algún viaje u ocupación laboral? ¿Cambio de equipo? Es posible cualquiera de estas razones. Pero hay una razón de mucho más peso para aquellos tiempos que se vivían: el Servicio Militar obligatorio. - Querido colega, ¿tú sabes lo qué era el Servicio Militar? - ¿Eso de la “mili” que cuenta mi padre, mis tíos, mi
abuelo…? - Sí, eso mismo, las “batallitas “de la “mili”. Nos tenían, más o menos, un par de años secuestrados con uniforme de soldado… o de marino. Por ese motivo faltaban a veces jugadores
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carismáticos en las alineaciones de los equipo equipos. Desaparecían una temporada, y luego volvían a ocupar su sitio sitio.
Fase de Sector. José Luis Quirós parece haber tirado de espaldas al aro, y a pesar de ello, el balón seguramente entrará. Manuel Benito (10) observa el desarrollo de la jugada. El abundante público asistente sigue con atención la marcha del partido.
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Década de los cincuenta. El Bosco inicia su renovación renovación, y juega un partido amistoso, probablemente incluído do en el cartel de Fiestas de algún pue pueblo cercano. Arriba, los jugadores clásicos con la novedad de Aquiles, el último a la derecha. Abajo, con las camisetas del Salesianos: Rafa Tapias, Cándido Hernández, Alfonso García Migón, Faustino,, Gayoso, Umberto, Mingos y Araú Araújo.
Manuel Benito, al retirarse como jugador, pasó a ocupar el puesto de secretario de la Federación Gallega Zona-Sur.. En 1968 1968, a raíz de su brillante labor en la organización y desarrollo del Campeonato de Europa Junior Masculino celebrado en Vigo, Anselmo López, presidente de la Federa Federación Española, se lo llevaría para Madrid como secretario, cargo que desempeñó a lo largo de mucho muchos años.
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Fase de Sector de Lugo, 1955. Alfonso García Migón Migón, hijo del presidente, excelente jugador de las décadas de los cincuenta y sesenta, y después de su retirada, entrenador del club por algún tiempo tiempo. Fuimos compañeros de equipo en la media temporada en la que mi milité en el Bosco de Segunda Nacional.
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Taboada Leal, 1957/58. De pie: Tato, Rolán, García Migón, Sanmartín y Manuel Benito. Agachados: Mingos, Boliche y José Luis Quirós.
Con el antiguo colegio salesiano de fondo, los bosquistas Boliche (3) y Mito (12), y Luis Miramontes (10) por el Ademar, persiguen el balón. De espaldas, un conocido colegiado de la época, Víctor Posada Posada. La escena sucedía a finales de la década de los cincuenta.
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Boliche en una entrada a canasta, taponado aponado por un jugador del Concepción Arenal de El Ferrol del Caudillo -tiempos tiempos de Franco Franco-. Son los últimos momentos del capitán en el Bosco. A la temporada siguiente se ausentaría de Vigo por un tiempo, y a su regreso, dejaría de jugar. Más adelante, entrenaría a varios equipos, entre ellos, al Club Estudiantes Femenino.
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Taboada Leal, 1961/62. C.D. Bosco Bosco-Santo Tomás de Lugo. Liga de Segunda Nacional. El bosquista Souto disputa un rebote,, con el lucense Lamela empujando con el codo. Rolán (6) espera el desenlace, y Miguel Bourio se apresta a iniciar un presumible contraataque. Se están celebrando los últimos partidos en la histórica cancha. Pronto el actual colegio salesiano ocuparía este espacio.
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Taboada Leal, 1959.. El capitán bosquista Boliche, en una de sus habituales entradas a canasta, finalizadas con la tradicional adicional “bandeja a dos manos”.
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Taboada Leal, temporada 1959/60.. C.D. Bosco Juvenil. De pie: Perfecto Veiga, Serafín Ocaña, Tapioles y xxxxx xxxxx. Agachados: Lito Trigo, Juan Eléxpuru, xxxxx, Francisco Javier Ocaña y García Migón III.
Taboada Leal, 1962. C. D. Bosco de Segunda División Nacional De pie: Tato, Chacabuco, Domínguez, xxxxx y Freijeiro. Agachados: Serafín Ocaña, José Luis Rodríguez, Rolán, Juan Elé Eléxpuru y xxxxx.
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Taboada Leal, 1962. Un Bosco-Estudiantes Estudiantes de alta tensión. Severo se hace con el balón tras la lucha entre Isidro y Chacabuco Chacabuco. Pero el árbitro Ángel Ramos parece indicar que hay que repetir el salto. Todos se quedan parados ante la dec decisión arbitral: Tato (7) a la derecha, Rey Lama (13) de espaldas, y Rafa Tapias a la izquierda. El numeroso público co se muestra totalmente con concentrado en el juego. Nadie se mueve, ueve, y no hay ni un solo espectador que no permanezca con la mirada fija en la cancha. ¡Vaya ambientazo!
Manuel Estévez Estévez, “Chacabuco”, el jugador más emblemático del Bosco de la década de los sesenta. Hábil, extraordinario pasador, excele excelente en el rebote, pívot de segura anotación… y fiel bosquista.
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Campo de Granada, 1962. Se estrenaba la nueva cancha del Club Estudiantes en la competición. El Bosco iniciaba la liga con la mitad de su plantilla renovada. De pie: José Carlos Freijeiro, Souto, Josechu Curiel, Tato y Chacabuco. Agachados: Serafín Ocaña, José Luis Rodríguez Rodríguez, García Migón y Rolán.
A los dos años de esta fotografía fotografía, en 1964, se fundaría el Club Manuell Álvarez. Los bosquistas José Carlos Freijeiro y José Luis Rodríguez,, trabajadores de la empresa cerámica, fueron personas decisivas en la creación del nuevo equipo equipo. El Bosco, además de los dos citados, os, perdería también a Souto Souto, y para agravar más su situación futura futura, Rolán, el capitán y toda una institución en el club, lub, abandonaría la ciudad para trasladarse a Madrid por razones laborales.. Hasta un entrenador bosquista, José Benedicto “Chachi”, se haría cargo de la dirección del equipo rival. El C.D. Bosco sufrió más que nadie la irrupción del Ál Álvarez en el baloncesto vigués. Su hegemonía deportiva, junto al Estudiantes, se vio mermada notablemente en favor de los “alf “alfa-
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reros” -así los llamaba la prensa rensa local local-, y su potencial, como consecuencia, bajaría de nivel nivel. El Club Ademar también vería muy menguados sus efectivos, y si ya anteriormente ocupaba un escalón menos, a partir de ahora ahora, y por unos años, pasaría a ser el cuarto equipo de la ciudad. En cambio, las canteras de ambos clubes seguían tan pujantes como siempre.
Empieza una década ada de cambio, los años sesenta, y vemos los últimos escarceos por la mítica cancha del Bosco. Tato salta al rebote en un partido contra el Santo Tomás de Lugo. Alfonso García Migón a la izquierda. Todavía se jugaba con el viejo balón de cuero.
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Tal vez el último partido Bosco-Estudiantes Estudiantes en Taboada Leal. Comienza la década de los sesenta. El estudiantil José Ángel Román pelea un rebote con Freijeiro. Camilo Nogueira, Mingos y Rolán expectantes. En el banquillo bosquista, Chachi, Tato y Madera.
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Jardín Park, 1959. El capitán bosquista Rolán recibe un trofeo de las autoridades, entre los aplausos de los aficionados.
Taboada Leal, 1959. El estudiantil Severo Iglesias se cuela entre Alfonso García Migón (8) y Boliche (5). Detrás, José Luis (4), atento a su par.
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Taboada Leal, 1964. Jorge orge Domínguez recoge el rebote anticipándose a su compañero Román. El bosquista Tato (7) observa sin opciones.
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Chacabuco se hace con el bal贸n apoyado por Josechu Curiel, y gan谩ndole la acci贸n al rival estudiantil. Tato e Isidro Gallego permanecen atentos.
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Taboada Leal, 1962/63. El bosquista Tato entra a canasta a pesar de la oposición de los jugadores ourensanos del Brandy 501. Espectadores conocidos en las “gradas”. Los directivos del Estudiantes, Luis Noya, Severino Vilas y José Nistal, vigilan al gran rival con atención. ción. Detrás de ellos Paco Picos, y pegado al muro, Cardi Graña, habitual seguidor del baloncesto.
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A pesar de las obras del Colegio Salesiano Salesiano, el Bosco no deja de cuidar su inagotable cantera. Arriba: Tapioles,, el primero por la izquierda; en el centro, Enrique Curiel -destacado político en la actualidad- y Pazos Pazos; el último, Trigo. Abajo: el primero, Ocaña; hacia la derecha, el tercero de los García Migón Migón, y Juan Eléxpuru, que llegaría a ser uno de los mejores bases gallegos de su época.
Otro equipo de promesas del Bosco. De pie pie: en el centro, Tomás López, base indiscutible del club durante muchos años; a su lado Carro, otro base, que pasaría más adelante al Celta y al Ademar; ell primero por la derecha es Manuel del Carmen, “Madelca”, comentarista de baloncesto de “El Pueblo Gallego” en la década de los setenta. Abajo: con el balón,, Magdalena Magdalena, que, como ya comentamos, se convertiría años después en uno de los mejores árbitros de la región.
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Chacabuco (5) recupera un balón para su equipo ante la oposición de Isidro Gallego. Los pívots Souto y Benito (10) -que evidentemente se marcan- siguen atentos la jugada, y Josechu Curiel se dispone a salir al contraataque. Lluvia, terreno embarrado, y muchos paraguas en las “gradas”. Los fieles seguidores de aambos equipos no se quieren perder ni un detalle del “derby”, y como se ve, aguantan todo lo que les caiga.
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Taboada Leal, 1963. El pívot bosquista Souto en la disputa de un rebote, que tal vez salga despedido hacia Juan Eléxpu uru. En la parte derecha de la imagen, se ve la única puerta de acceso al campo. Los aficionados de casa también entraban por laa “puerta falsa” del colegio salesiano.
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Con las obras del actual colegio salesiano, el Bosco se quedaría para siempre sin su tradicional cancha de Taboada Leal. Dejaba atrás más de quince años de historia, iniciada antes de los cincuenta en el viejo terreno de juego, y finalizada ahora a consecuencia de la remodelación del centro de enseñanza. Desaparecía el histórico escenario que vio nacer buena parte del baloncesto vigués, y en donde tantos destacados jugadores se iniciaron en el deporte de la canasta. Boliche, Rolán, Abalo, Gil, Josechu Curiel, Chacabuco, Tato, Madera, José Luis, los hermanos Ocaña, Eléxpuru, Pazos, los García Migón… Se acababan también los clásicos e inolvidables duelos entre el Bosco y Estudiantes sobre la tierra de Taboada Leal. Duelos plagados de victorias y derrotas para unos y otros, ante las fieles aficiones de ambos equipos. Nunca el baloncesto masculino volvió a contar con hinchadas tan apasionadas y tan presentes siempre en los acontecimientos de sus clubs. Hubo fundadas esperanzas en el futuro colegio, que a buen seguro iría a facilitar al Bosco unas mejores instalaciones, y le permitiría mantener su situación de privilegio en el barrio, conservando su afición y la eterna cantera del centro escolar. Mientras tanto, durante aquellas dos temporadas de exilio, al Bosco no le quedó otra alternativa que andar deambulando de una cancha a otra. Jugaba como local ante el Estudiantes en el Campo de Granada, contra el Manuel Álvarez y Ademar en los Maristas, en alguna instalación escolar… y por fin se asentó en el Colegio Nebrija. Después llegaría el ansiado regreso al Colegio de María Auxiliadora, pero… la “magia” de antes ya se había perdido. No hubo buen reencuentro con los padres salesianos, ni tampoco se gozaba de la anterior protección de la Asociación de Antiguos Alumnos. El desencuentro era evidente, y poco a poco el Bosco se iría alejando de su lugar de nacimiento. Con la inauguración del Centro Deportivo Municipal, la anunciada separación se consuma, y el club bosquista se independiza definitivamente de sus orígenes. En mi modesta opinión, y a la vista de los hechos, se cometió un error irreparable. Puede tal vez que no hubiera otra salida… pero ésta no resultó buena.
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Una de las tantas canchas que hubo de utilizar el Bosco en su exilio de los Salesi Salesianos. No sabemos ni cuál es, ni en dónde, ni tampoco con contra quién juega. Sólo conocemos que se trata de un partido de la temporada 1966/67… y que llueve. ¿O no?
Rolán,, el capitán bosquista de los años sesenta, y una institución en la historia del club. Alero anotador, zurdo, de extraordinaria rapidez rapidez, y mortal en los contraataques. De lo mejor en su época.
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“Cinco inicial”. El excelente pívot José Torres (6) ya empezaba a destacar en infantiles, pero no sólo por su estatura, sino también por su prometedora clase.
Los Maristas,, principio de los años sesenta sesenta. Varios de los juveniles a punto de dar el salto al primer equipo: Magdalena (10), X Xoubanova (12), Cardi (14), Geli (7)… Y Martínez Terzado (6), futuro entrenador dor del club durante mucha muchas campañas.
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Campo de Granada, 1963. Isidro Gallego parece hacerse con el rebote entre un ramillete de brazos. Los niños de La Gota de Leche Leche, a pie de grada, siguen atentos el desenlace del juego. Las sábanas banas de fondo han dado resultado en esta jornada: el graderío está repleto de aficionados aficionados.
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Los Maristas, 1964/65. Francisco Picos en uno de sus clásicos ganchos, ante la insuficiente acción defensiva de Pazos Pazos. Jorge Domínguez por el Estudiantes, y Gantes por el Bosco, siguen el desenlace del tiro.
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Los Maristas, 1964/65. Manuel Álvarez Álvarez-C.D. Bosco. Los dos equipos se enfrentaban por primera vez. A la rivalidad existente en la ciudad entre Bosco y Estudiantes, había que unir ahora a otro en discordia, eel Manuel Álvarez. El ex bosquista Souto entra a canasta perseguido por Pazos, mientras Josechu Curiel e Isidro Gallego -ex estudiantil- siguen el desenlace de la jugada.
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Colegio de Nebrija, 1964/65. C.D. Bosco Bosco-Manuel Álvarez A la espera de la finalización de las obras del Colegio Salesiano, los bosquistas se trasladan de cancha provisionalmente. Estarían aquí una temporada larga. En la instantánea, el madrileño Chiky Fuentes -fichaje estrella del Álvarez junto a Perico Montilla- entra a canasta marcado por Tato. Detrás, José Luis e Isidro observan. ectadores, los colegiales del Nebrija asisten al partido perfecAl fondo, entre los espectadores, tamentee uniformados. Eran las costumbres de la época.
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Colegio Nebrija, 1964/65. C.D. Bosco Bosco-Bazán de El Ferrol El vigués Madera entra a canasta seguido del ferrolano Rogelio Bermúdez, sobre un campo totalmente embarrado. El histórico equipo departa departamental vivía sus últimas temporadas.. Había ascendido a División de Honor en dos ocasiones. En ambas, renunció.
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Los Maristas, 1966. Manuel Álvarez-C.D.Bosco, Liga de Segunda Nacional. El base del Bosco, Juan Eléxpuru, se escapa de su marcador, Rodríguez, que pretende impedirlo con una flagrante personal. José Luis observa.
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El Bosco vuelve al remozado Colegio de María Auxiliadora, y celebra con notable éxito las primeras “XXIV Horas Seguidas de Baloncesto”. Se enfrentó en aquella larga jornada a su viejo rival, el Club Estudian Estudiantes, que salió claro triunfador del envite.
Boliche. De pie: Xoubanova (12), Enrique Cons Equipo de promesas dirigido por Boliche (11) y Geli (7). Agachados: Tomás, el primero por la izquierda, y Guindilla (9).
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Con la inauguración del Centro Deportivo Municipal, y la puesta en marcha de sus dos canchas cubiertas, el Pabellón Central y el Frontón, el baloncesto vigués entraría en un cambio profundo. El ansiado traslado a las nuevas instalaciones llevaría a los equipos, sin apenas percibirlo, a comenzar a perder poco a poco todos sus valiosos signos de identidad: su fiel hinchada de barrio, los ruidosos colegiales, su cantera inagotable, su casa de nacimiento, el entrañable ambiente de club, hasta sus olores, sus cánticos, sus árboles… Las tan deseadas canchas cubiertas resultaron ser una peligrosa arma de dos filos. Abandonados el campo de Taboada Leal, el Jardín Park, Las Cabañas, la Escuela Industrial, el Colegio Marista, el Campo de Granada… los equipos pasaron a tener una casa común: el Centro Deportivo Municipal de las Traviesas. De la misma manera empezaron también a compartir identidades, aficiones, posibles canteras, ambientes… Se habían convertido en equipos del Pabellón, equipos de ligera entidad, poco menos que equipos municipales. Y ya se sabe, las pertenecías municipales son de todos y de nadie. Los clubs históricos estaban perdiendo su alma, y cuando eso ocurre, se acerca muy pronto el final… aunque a veces se aguante más de lo esperado. Así fueron desapareciendo todos los clásicos, los que escribieron la historia página a página. Primero el Estudiantes, después el Celta Masculino, más tarde el Manuel Álvarez y el Porcelanas Santa Clara, de nuevo otro proyecto Celta, y en las postrimerías del siglo, los dos que quedaban, el Club Deportivo Bosco y el Ademar. ¡Qué pena! - Querido amigo de tertulia, ¡vaya sueño tuve hoy!... ¡y
qué pena que sólo fuera un sueño! - ¡Ya estamos! ¿El sueño iba de “los antiguos”, claro está? - Pues sí, de “los antiguos” también. Pero sobre todo de los de ahora y de los del futuro. Si quieres te lo cuento. De mala gana, resignado, me asintió con la cabeza.
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<<Asistía a un partido trepidante entre el Bosco y el Estudiantes. Se jugaba de noche, en una cancha cubierta situada en el patio de los Salesianos, y las gradas se encontraban repletas de aficionados. Lleno total. Pancartas, bocinas, bombos, bufandas, camisetas azules, camisetas rojas… Cada canasta era recibida con un ruido ensordecedor. Las hinchadas divididas, la bosquista en un lateral, y la estudiantil en el otro. >> <<Sólo conocía a algunos jugadores, eran todos nuevos y muy jóvenes. En el Bosco jugaban, entre otros: mi sobrino Miguel, sus compañeros Nacho y Antonio, el hijo de Abalde, el hijo de Julio Bernárdez, el hijo de Vicente Rodríguez… y ¡nada menos que Pau Gasol! >> <<Por el Estudiantes, estaban mis hijos Camilo y Rubén, Jenaro Vázquez, Andrés Cadahía, Suso García, Juan y Miguel Fernández, Tino, Nacho… y ¡Rudy Fernández!… >> <<Alfonso García Migón y Julio Castro hacían de entrenadores… y en la grada descubrí a Enceste y a Paco Nistal, los periodistas de antaño… Arbitraban Ángel Núñez y Zabaleta; en la mesa de anotadores mandaba Jacinto Cruz… ¡Y en el palco, lo nunca visto: García Hermida y el Sr. Nistal juntos!... ¡y los Vilas detrás, al lado de Bahillo, Ramos, Queiro, Manolo…! >> - ¡Despierta, Luis! - ¡Sería fantástico, querido colega! ¡Te encantaría! Un
pabellón con gradas en los Salesianos, otro en los Maristas, y el histórico Campo de Granada, con una cubierta de cristal y el correspondiente graderío... Y que volvieran el Bosco, el Estudiantes, el Ademar y el Manuel Álvarez… Con chicos nuevos, entrenadores de hoy, las aficiones de antes -eso sí-, el seguimiento de la prensa escrita de entonces… - Oye, Luis. Y tú, ¿de qué equipo ibas? ¿Quién ganó? - Yo, del Estudiantes. Pero ¿quién ganó…? Pues no lo sé. Me desperté con el atronador festejo de una canasta de mi hijo Rubén… Y sin embargo, lo que son las cosas, a “las niñas” les fue de maravilla en el pabellón de As Travesas... y les sigue yendo.
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Temporada 1969/70. El equipo ipo juvenil del Bosco ya juega en el Frontón Municipal. De pie: Enrique Cons, Carro, Tapioles, Berto y José Torres. Agach Agachados: Moncho, Tomás, Macías y xxxxx.
Frontón Municipal, 1970. Tiempo muerto. Victorio Alonso se dirige a sus jugadores juveniles, que como se puede observar, le prestan desigual atención. El del delegado le indica a uno de ellos que ya tiene dos personales.
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La cantera empieza a dar sus frutos, y las jóvenes promesas llegan al primer equ equipo. De épocas anteriores tan sólo queda Chac Chacabuco, el carismático pívot. De pie: Tapioles, Enrique Cons, Chacabuco, José Luis Fernández Brea y xxxxx. Agachados: xxxxx, Carro, Macías,, Moncho y Tomás López.
Tiempo muerto del Bosco con Alfonso García Migón en funciones de entrenador. Enrique Cons, Moncho,, Juan Tapias, Tomás… atentos a las indicaciones del “coach”.
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Frontón Municipal, 1976 OAR Pepsi de El Ferrol. Tercera División C.D. Bosco-OAR Lucha inicial. Rodrigo Puga salta por el Bosco, con Celso Rodríguez en la zona de ataque, Pachi Reigosa (14) en el centro, y en zona defensiva Tomás López (13) y José Curty.
Frontón Municipal, 1976. Club Deportivo Bosco De pie: Martínez (entrenador), Pachi Reigosa, Celso Rodríguez, Rodrigo Puga, Berto Piñeiro y Francisco Carro. Agachados: Dani, Tante, Fernando Pérez “Mani”, José Curty, Tomás López y José Fandiño.
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El Frontón de As Travesas esas -ahora en desuso para el baloncesto-, ha sido escenario de grandes jornadas en los años setenta y ochenta. En esta ocasión, temporada 1974/75, las cosas no parecen irle demasiado bien al C.D. Bosco. Al menos es esa es la sensación que se deduce del gesto serio, preocupado y de evidente desánimo de todos sus protagonistas. Paco Martínez, tínez, el entrenador, se refugia detrás del banquillo; Victorio Alonso, el dinámico námico directivo, pregunta: “¿Qué pasa?”; Juan Eléxpuru, el formida formidable base, ocupa su lugar en el banco,, agachado y de brazos caídos; Sal Salgado, inmutable en la desesperación; y Alberto Abalde, sentado en el suelo, se mue muestra totalmente abatido por lo que está sucedien sucediendo. ¡Y qué curioso! El espectador que abandon abandona el recinto con el partido visto para sentencia, no es otro que e el que esto escribe. Las imágenes lo dicen todo todo. No se necesitaba para nada la lectura de la fotografía que yo hago, pero por si algún lector no está muy versado en nuestro deporte, la explic explico un poco. Los que saben algo de esto, que lo habrán vivido alguna vez, no precisaban en absoluto de ninguna aclara aclaración. Es la escena perfecta de una total decepción.
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Tres de los jugadores del C.D. Bosco, temporada 1976/77: el base José M. Muñoz, el ala-pívot Xoubanova y el pívot junior Alberto Abalde.
El Bosco persigue con ahínco el ascenso a Segunda División. ”Madelca”, el comentarista de baloncesto de “El Pueblo Gallego”, le dedica un amplio reportaje: las aspiraciones del club, la plantilla al completo, los fichajes… Al final, el codiciado ascenso se conseguiría.
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Se iniciaba la temporada 1976/77 de Tercera División, y a las órdenes de Alfonso García Migón, con José Curty como ayudante, la plantilla ofrecía buenas perspectivas de cara a la campaña próxima a comenzar. Equipo equilibrado, y sobre todo joven, se le veía con enorme ilusión de conseguir el ascenso. Tres de los componentes de esta plantilla aún continúan en activo en el baloncesto vigués, naturalmente, en funciones de entrenador, y por supuesto, con un formidable rendimiento: Fernando Pérez,“Mani”, Alberto Abalde y Jesús Cobián. Este último todavía tiene el atrevimiento de jugar en las filas del Xuventude. ¡Qué suerte!
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Frontón Municipal, 1977/78. C.D. Bosco. Tercera División De pie: Martinez Terzado (entrenador), Juan Ramón Solleiro, Nacho Arroyo, M. Soliño, Wily y Celso Rodrígez. Agachados: C. Soliño, Pachi Reigosa, Fernando Pérez “Mani”, José Curty y Tomás López.
Frontón, 1977/78. Bosco-Álvarez, Álvarez, Tercera División. Solleiro da una asistencia a “Mani”, ante la presión de Rebollo y Naveira. Detrás Díaz y Nacho Polo. Al fondo a la derecha, el bosquista Curty.
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Frontón Municipal, 1978/79. C.D. Bosco, Segunda División Nacional De pie: Martínez Terzado (entrenador), Alfredo Pére Pérez, Suso Cobián, Nacho Arroyo, Juan Carlos, Colón, Pachi Reigosa y Juan José Camba (delegado). Agachados: Juan Ramón Solleiro, José Curty, Tomás López, Pepe Conde y Chiqui.
Al final de esta temporada se retiraría el base Tomás López, emblemático jugador bosquista de la década de los setenta.. Llegaba un buen relevo para suplirlo, el lucense Pepe Conde, que haría historia en el club, primero como jugador, y después como entrenador.
Tomás Lòpez, una institución stitución en el Bosco de los añ años setenta.
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Al presidente García Hermida le gustaba jugar a “records”. Ya había organizado las “XXIV Horas Seguidas de Baloncesto” en los años sesenta. Ahora, con igual o mayor éxito que entonces, celebraba “Las Primeras XXXVI Horas Seguidas de Baloncesto en España”. Elegía como rival a un Combinado Gallego y al Pontesa de Arcade para establecer el “nuevo record”. Con el impulso que tenía el “presi”, y el propósito ferviente de promocionar el basket, es muy probable que, de vivir hoy en día, estuviese celebrando la “Primera Semana Seguida de Baloncesto”… y estaría bien.
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Pabellón Municipal cipal de Ourense, temporada 1981/82 1981/82. C.D. Bosco, Liga de Segunda Nacional De pie: Carbó,, Moreno, Nacho Arroyo, Martínez Terzado (entrenador), Jaime Pascual y Manuel Suárez. Agachados: Boby Sarasola, xxxxx,, Pepe Conde, Augusto de la Concepción y Ángel Barbará.
Entrevista al entrenador Martínez Terzado antes de comenzar la temporada. Las perspectivas vas son buenas, según el “coach “coach”.
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Nacho Arroyo, el ala-pívot, que junto al base Pepe Conde y al alero Ángel Barbará, formaban un trío emblemático en el Bosco de los años ochenta.
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Entrevista a Nacho Arroyo al inicio de la temporada 1981/82, con motivo de su debut en el Bosco, y su llamada a la “Operación Nuevos Valores”.
Entrenamiento de pre-temporada temporada 1983/84. De pie: José Enrique, Javier Dana, Martínez Terzado (entrenador), Antonio Reigosa, Jaime Pascual y Jaime Molares (ayudante). Agachados: Boby Sarasola Sarasola, Nacho Arroyo, Ángel Barbará y Roberto Canella. Falta a la cita, entre otros, el base Pepe Conde Conde.
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As Travesas, 1984/85 - C.D. Bosco, Liga de Segunda Nacional De pie: Juan Aramburu, José Novas, s, Javier Dana, Julio Bernárdez (entrenador), Fernado Pérez “Mani” (ayudante), Nesi (preparador físico), Nacho Arroyo, Jaime Pascual, Suso Montes y Juan José Camba (delegado) (delegado). Agachados: Félix Muñoz, Ángel Barbará, Pepe Conde, Toni Soto, Telesforo y Fernando.
Cambio de entrenador en el b banquillo bosquista. Julio Bernárdez dez sustituye a Martínez Terzado, que deja su cargo de después de casi una década al frente del equipo. Finalizados inalizados sus estudios en Santiago, Julio Bernárdez vuelve a Vigo, toma las riendas del Bosco, y reúne una formid formidable plantilla. Varias incorporaciones poraciones valiosas valiosas: el venezolano Félix Muñoz, el madrileño Aramburu -ex junior del Real Madrid-, los jóvenes de la cantera, Suso Montes, Toni Soto, José Novas… El equipo podía aspirar a todo, y lo hizo bien, pero no lo suficiente como para clasificarse para la ronda final del ascenso. Fue una estancia efímera de los nuevos técnicos, Julio Cesar Bernárdez y Fernando Pérez ”Mani”, al frente del C.D. Bosco. Ambos abandonaban el club en la te temporada siguiente, y se hacían cargo de un novedoso Real Club Celta masculino nacido al amparo del equipo femenino, y respaldado por una nueva directiva celeste. Una vez más ás se producía una escisión en e el baloncesto vigués, que a lo largo del tiempo pocas veces consiguió aunar voluntades.
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En 1985,, el Club Deportivo Bosco consigue el primer sponsor de su historia: la di discoteca NOVA OLIMPIA.. La fotografía recoge el mo momento de la firma del contrato entre Alejandro Fernández Figueroa Figueroa, director-propietario de la sala de fiestas, y el presidente Antonio García Hermida Hermida.
El Bosco se daba un respiro en su situación económica, y afrontaba su futuro con mayor fi firmeza y seguridad. Martínez Terzado se hacía cargo nuevamente del puesto de entrenador, y ya contaría para esa temporada temporada, 1985/86, con una excelente plantilla, en la que destacaba la presencia del coruñés Tonecho Lorenzo,, procedente del Obradoiro de San Santiago. Se empezaba una etapa más ambiciosa que las precedentes, y la meta del momento no era otra que el ascenso a Primera División B, antesala de la máxima competición tición nacional -la actual ACB-.
Tonecho Lorenzo, el formidable alero coruñés.
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Frontón Municipal, 1985/86. BoscoBosco-Nova Olimpia. Liga de Segunda Nacional Arriba: Javier Dana, Moncho, Sanmartín, Martínez (entrenador), Moreno, Celso y Chema Bisbe. Abajo: Nacho Arroyo, Pampi, Sarasola, Pepe Conde y Tonecho.
Año 1986/87. Bosco-Nova Olimpia.. De pie: Suárez,, Moreno, Martínez (E), xxxx, Reigosa y Pascual. Agachados: Barbará, Augusto, Pepe Conde y Nacho Arroyo.
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Polideportiva Balaídos, 1987/88. Bosco-Conservas Carballo. Liga Segunda Nacional. De pie: Manuel Suárez, Víctor, Nacho Arroyo, Celso (delegado), Paco Termenón (2º entrenador), Vicente Becerra, “Chongo”, (entrenador), José Ignacio y Pedro. De rodillas: Miguel Polo, Vila, Ángel Barbará, Pepe Conde, José Novas y Rodolfo Fernández.
Un nuevo sponsor, CONSERVAS CARBALLO, toma el relevo de la Discoteca Nova Olimpia, y con ello, se va a producir un cambio significativo en los destinos de la entidad. José Manuel Gómez Carballo, co-propietario de la firma conservera, se integra de lleno en las labores del club, y acaba sustituyendo en la presidencia a Antonio García Hermida, el primero y único mandatario del Bosco desde su fundación a finales de los años cuarenta. Debuta en el equipo un joven entrenador, Vicente Becerra ”Chongo”, sustituyendo al veterano Martínez Terzado. Permanece en el puesto durante un par de temporadas, en las que el Bosco acaricia el primer puesto de la Liga, el único que daba derecho a intervenir en la Fase Final de Ascenso a Primera B. La llegada de un presidente joven y ambicioso, traería al Bosco nuevas ilusiones. Al cabo de tres temporadas conseguiría al fin, bajo su mandato, el codiciado ascenso a Primera División B en la Fase Final disputada en Cáceres.
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Pabellón Municipal de Porriño, 1989 1989. Club Frigolouro de Porriño-C.D. Bosco. Segunda Nacional Partido de máxima rivalidad entre dos serios aspirantes al ascenso a Primera B. El equipo porriñés estaba formado en su mayoría por jugadores de Vigo. El exbosquista Nacho Arroyo,, en su primera temporada en Porriño, se dispone a anotar una canasta sin demasiada oposición de del pívot rival. Al fondo, Pepe Conde parece reclamar más intensidad defensiva a su compañero.
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Recorte de prensa con acciĂłn ofensiva de Miguel Polo. El verinense Rodolfo FernĂĄndez (14), de espaldas, serĂa el gran protagonista de ese encuentro.
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As Travesas, 1989. Bonita instantánea nstantánea del histórico partido entre el Club Deport Deportivo Bosco y el Aguas de Cabreiroá de Verín, que terminó con el espectacular result resultado de 90-100.
Analizando la crónica anterior de “Faro de Vigo”, se vislumbra el potencial de ambos conjuntos, serios aspirantes al titulo que daba el pase a la Fase de Ascenso a Primera B. Dos vigueses en los banquillos, Vicente Becerra Becerra, Chongo, en el Bosco, y Juan Rodríguez Larrán, Larry arry, en el Aguas de Cabreiroá. En la cancha, fuerte rivalidad dad entre los jugadores, la mayoría de Vigo. En el equipo de Verín, que se proclamaría campeón de grupo, formaban los vigueses Tomás Alonso, Boby Corbal y M Miguel González, además del ex bosquista Rodolfo Fernández. En el Bosco debutaba esta temporada Jose Joserra Lete actual Secretario Xeral para o Deporte Deporte-, extraordinario escolta de destacada anotación. Junto a Ángel Barbará y Augusto de la Concepción, componía el tridente anotador de su equipo. El C.D. Bosco cimentaba el conjunto que dos años de después ascendería a Primera B, bajo la batuta en el banquillo de Paco Martínez.. Tras quince años de ausencia, el popular entrenador regresaba al club de sus comienzos baloncestísticos, y lo haría con el más completo éxito: el ascenso de categoría.
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En 1990 se celebran las Bodas de Oro del club, y se rinde homenaje a Antonio García Hermida. El emotivo acto sirvió como reconocimiento y despedida del que había sido su fundador y único presidente durante cincuenta años. Dos años antes, en 1988, García Hermida cedía las riendas del Club Deportivo Bosco a José Manuel Gómez Carballo, que a la postre sería el segundo y último presidente bosquista. La celebración de las Bodas de Oro se inicia en As Travesas con un partido preliminar entre “viejas glorias” del Bosco y Estudiantes, resuelto a favor de los primeros por un claro 86-62. El Bosco se tomaba cumplida revancha del día de las Bodas de Plata, en el que habían vencido con claridad los estudiantiles. La rivalidad, a pesar del tiempo transcurrido y de la desaparición del Estudiantes, aún se mantenía viva. Por el Bosco jugaron: Moreno (12), Moncho (22), Pérez (18), López (2), Tonecho (32), Curty y Carro. Por el Estudiantes: Alvarellos (16), Alberto (8), Jorge (2), R. Presa (24), Caballero (6), Lorenzo (1), G. Tapias (6) y J. Ferro. Luego, una potente Selección Gallega dirigida por Julio Bernárdez y Juan Corral, derrotaba al Bosco-Aguas de Mondariz por un contundente 78-97. Según cuentan las crónicas, el conjunto bosquista dirigido por Paco Martínez hizo el peor partido del año. Aunque en la primera mitad el resultado se mantuvo igualado, 42-43, en la segunda parte, la Selección, más entregada y metida en el partido, borró de la pista al Bosco, y lo arrolló hasta alcanzar la significativa diferencia de 19 puntos. Es de destacar la presencia en el combinado gallego de varios ex jugadores bosquistas, como Nacho Arroyo, Félix Múñoz, José Manuel Díaz, Toni Soto, Andrés Cadahia… Históricamente, el potencial del baloncesto vigués se vio siempre mermado por la disgregación de sus mejores elementos. En los años sesenta ocurrió con el Bosco, Estudiantes, Manuel Álvarez y Ademar, y luego, en las décadas de los ochenta y noventa, ya desaparecidos el Estudiantes y el Álvarez, fueron los equipos de Verín y Porriño, los que se aprovecharon de la debilidad del basket vigués para nutrirse permanentemente de nuestros mejores
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jugadores. En algunos casos concretos concretos, por la falta de ambición de sus clubes de origen,, y en otros otros, por las interesantes ofertas económicas que les hacían. d ha sido que n nunca un club vigués fue capaz La realidad de aglutinar el potencial que generaba nuestro baloncesto. Tal vez sea ese uno de los motivos de que Vigo no consiguiese al alcanzar metas más altas,, objetivo al que se llegó en El Ferrol Bazán y OAR-, en A Coruña -Bosco Bosco-, en Lugo -Breogán-, en Santiago -Obradoiro- y en Ourense -COB-. En estas capitales sólo hubo un equipo dominante, cosa que no sucedía en nuestra ci ciudad. Ahora mismo, 2009, pocos jugadores -por no decir ninguno- puede aportar la cantera viguesa a proyectos ambiciosos. Después de tantos años ausentes y alejados de un buen nivel baloncestístico, el potencial propio está muy lejano. El Ciudad de Vigo, que lo intenta en la actualidad, no puede contar ni con un solo jugador vigués, ni tampoco poco con téc técnicos locales. Es triste.
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Unos meses después de la celebración de las Bodas de Oro, el Aguas de Mondariz disputaba en A Coruña el Playoff de Segunda División, que daba paso a la Fase Final de Ascenso. No se pudo clasificar, y en Vigo se habló de decepción.
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El Leyma eyma coruñés, que ejercía de locatario, se clasificaría para la Fase Final que se disputaba en Cartagena. Dejaba en la cuneta al Bosco-Aguas Aguas de Mondariz, al Frigolouro de Porriño y al Aguas de Cabreiroá de Verín. A la postre, el equipo de A Coruña no tendría ía éxito en su intento de ascenso. Se jugaba la penúltima temporada, 1989/90, del Club Deportivo Bosco, que bajo la presidencia de Gómez Carballo, y con una fuerte inversión en la plantilla, estaba fraguando el d deseado ascenso a Primera División B, peldaño anterior a la máxima categoría del baloncesto nacional nacional.
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La crónica de Raúl Rodríguez en “Faro de Vigo” anuncia dos derbys importantes para el fin de semana, y dan una idea bastante clara de lo qué era era, principios de los años noventa, el baloncesto masculino de élite en la comarca viguesa: cuatro tro equipos en Segunda Nacional, Bosco-Aguas de Mondariz, Ultratur-Ademar, mar, Chocolates Sabú y Frigolouro de Porriño, este último formado por la mayoría de jugadores de nuestra ciudad. El pie de foto destacaba ba a Nacho Arroyo y a Pepe Blanch como las posibles “estrellas” de sus respectivos equipos, Frigolouro y Aguas de Mondariz. Al finalizar la fase regular de la Segunda División, temporada 1990/91, el Bosco-Aguas Aguas de Monda Mondariz se clasifica para jugar el playoff gallego allego en A Coruña, que daría paso a la Fase Final de Ascenso a Primera División a celebrar en Cáceres. Los eternos rivales de los últimos años vuelven a enfre enfrentarse, y esta vez, el Basketmar ketmar local y el Bosco-Aguas de Mondariz superarían al Frigolouro de Porriño y al Aguas de Cabreiroá de Verín,, y accederían a la final. El Bosco se disponía en Cáceres a ascender a Primera D División y a disputar los últimos partidos de su historia historia.
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La información de Alberto Ovenza en el diario “Atlántico” sobre el playoff gallego, da cuenta de los pormenores de la competición y anuncia la composición de los gruposs cara la Fase Final de Cáceres. El Bosco, como subcampeón subcampeón, estará presente en la ciudad extremeña.
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La suerte ya estaba echada, y el 16 de Junio de 1991, en Cáceres, el Bosco ganaba, ascendía a Primera División B, y jugaba el último partido oficial de su historia.
Tres jugadores carismáticos en el Club Deportivo Bosco de los últimos tiempos: el escolta Joserra Lete, el base Pepe Conde y el alero Augusto de la Concepción.
Al regreso de Cáceres, los acontecimientos discurren de la forma más ilógica e inesperada. Lejos de alimentar ilusiones, de reforzar el ánimo, de crear expectativas, de promover ambiciones… el logro de conseguir el ascenso no hizo otra cosa que propiciar la definitiva desaparición del Club Deportivo Bosco, después de medio siglo de existencia. Lo mismo que el Club Estudiantes, el Manuel Álvarez, el Porcelanas Santa Clara, el R.C.Celta, el Galeones Celta… sucumbieron por insalvables problemas económicos, al Club Deportivo Bosco también le llegaba la hora. El presidente Gómez Carballo ya había aportado de su patrimonio personal una importante cantidad. A la plantilla del ascenso se le debían varias mensualidades. El actual sponsor del equipo, Aguas de Mondariz, retiraba su apoyo. El inasumible presupuesto en la nueva categoría se elevaba a 80 millones de pesetas, y la falta de ayudas del Concello de Vigo, de la Diputa-
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ción Provincial cial y de la Xunta de Galicia, dio lugar a la renuncia final del Club Deportivo Bosco. Cunde el desánimo más absoluto en la directiva bosqui bosquista, y como consecuencia, decide ecide vender la plaza al Ayuntamiento de Cáceres. El 16 de julio de 1991 se firma la cesión de los der derechos, dicen que por la cifra de 12 millones de pesetas, una cantidad que al menos aliviaría las considerables deudas del club. El Club Deportivo Bosco cesa en su actividad y entrega todos sus derechos a la Federación ederación Gallega de Baloncesto, p pero…
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CAPÍTULO IX
ESPECTADORES…
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Si a un partido le quitásemos de repente los espectadores, parecería enseguida que se estaba asistiendo a un rutinario entrenamiento de la semana. Sin las voces de ánimo, los gritos de protesta a los árbitros, el aplauso generoso a la canasta local, el abucheo a la jugada sucia del contrario, la explosión de júbilo ante un “triple” propio… el baloncesto se quedaría medio muerto, lánguido, sin corazón… como a punto de sobrepasar los límites de la existencia. ¡Por favor, qué no se muera! Por eso, y por tantas razones que se podrían añadir, nuestros dirigentes han de intentar siempre a toda costa que el aficionado llene las gradas para ver a los grandes, a los medianos, a los que empiezan… para ver baloncesto con asiduidad. Soy de la opinión que es mucho más importante el calor de la grada, que el importe de una recaudación por taquilla que poco resuelve en estos tiempos. A menudo, el valor de las entradas aleja a unos espectadores ocasionales de poder convertirse en seguidores fieles, en hinchas apasionados, en aficionados de cada día. ¡Hay que conquistar al espectador! ¡Aunque sea uno a uno! En los años cincuenta y sesenta jugábamos con las “gradas” repletas en Taboada Leal, en la Escuela Industrial, en Las Cabañas, en el Jardín Park, en el Campo de Granada, en los Maristas… Las chicas del Celta abarrotaron el Pabellón de As Travesas en las décadas de los setenta y ochenta… Ahora, en el 2009, el Gestibérica -lo gestiona bien- empieza a recuperar el ambiente cálido del graderío ocupado. Tan sólo le falta consolidar ese apoyo con una asistencia continuada e incondicional. Está claro que, como en casi todas las actividades, se necesita de una motivación seria, de algo que atraiga al espectador con fuerza, que tenga el tirón suficiente… ¿Qué cómo se consigue? No es tarea fácil, pero hay que buscar soluciones con decisión… y encontrarlas. Ahí está el ingenio para conseguirlo, y la visión clara en los dirigentes de que la afición es necesaria, imprescindible diría yo, para el triunfo de tu equipo, para el éxito del proyecto. Qué mejor patrimonio para un club, que una hinchada fiel y numerosa. Si en alguna ocasión coincides por casualidad con una jornada de mini-basket, de esas en las que participan varios
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equipos masculinos y femeninos, te encontrarás con la agradable sorpresa de ver las gradas abarrotadas de padres, de abuelos, de tíos, de hermanos, de primos… que acuden con ilusión a presenciar el juego de las niñas y de los niños allegados. Salvo contadas excepciones, los dirigentes están volcados en conseguir los dineros para que pueda caminar el club sin agobios… y en fichar a buenos entrenadores que sean capaces de alcanzar logros deportivos importantes… y también en hacer los fichajes oportunos para reunir plantillas solventes… Todo esto está bien, son cuestiones de primera necesidad, pero que nadie piense que los espectadores surgirán en la grada por generación espontanea, como llovidos del cielo. Pocas veces las directivas se acuerdan de buscarlos con ahínco, con esfuerzo, sin descanso… con las condiciones que se exigen para alcanzar los logros difíciles. “Ellos se lo pierden”, deben pensar. ¡Qué error! ¡No los esperes! ¡Vete a por ellos! Los espectadores fieles, incondicionales, entusiastas, numerosos, sin edad… LA HINCHADA es el patrimonio más valioso de un club. ¡CUIDADLA! ¡Quién pudiera contar con aquella hinchada apasionada del Bosco de Taboada Leal!... ¡O con la algarabía y el entusiasmo de los seguidores del Ademar de los Hermanos Maristas!... ¡O con la clase e inteligencia de los “peritos industriales y mercantiles” que apoyaban con devoción al Estudiantes en el Jardín Park y en el Campo de Granada!... ¿Y las “niñas” del Celta? Llevaron tras de sí a toda una ciudad durante cerca de dos décadas, y en ese tiempo, tal vez el baloncesto vigués haya vivido los momentos más gloriosos de su historia. Ahora, a punto de comenzar el curso 2009/10, nuestra esperanza está en el Gestibérica. ¡SUERTE! ¡MUCHA SUERTE!
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Espectadores en la grada de As Travesas Travesas: el colaborador de radio, el base jubilado que jugaba con el 13, y el periodista de las ondas ondas.
Partido del Celta Femenino:: dos que aprenden, uno a arbitrar y a entrenar, y el otro a dirigir tanto a damas como a caballeros. “¿Me preguntas quiénes son? Rubén Zabaleta y Pablo Blanco.” Sus miradas atentas, fijas, como en éxtasis, parecen reflejar cierta ensoñación de poder contemp contemplar algún día a sus jugadoras ejecutar jugadas tan brillantes. Son las célticas, no es pedir poco.
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Juega el Celta Femenino. El maestro explica a sus pupilas la lección. Manuel Bouzas al lado de Sara, Leticia, Marta y Noa. Detrás, Carmen, Tamara, Laura, Alba y Marta Colón.
Las “airexas” senior nior con el patrón mayor, y a su lado, el aprendiz de jefe. Marta, María, Sara, Pablo y Paula sonríen a la cámara, mientras Serafín, con gesto serio, no parece muy convencido en posar sin su consentimiento previo.
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¿Qué le estará apuntando Guillermo Tárrago a Vicente Rodríguez? Puede que le recuerde su paso por Tui durante el servicio militar, y los permisos que le daba para ejercer de entrenador en el Celta Femenino. El marino siempre fue un seguidor fiel -lo sigue siendo- de “las niñas” célticas.
Pablo Beiro,, el impulsor incansable del Baloncesto en Silla de Ruedas, convers conversación con Rosa Patiño,, la secretaria del Celta.
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Ángela Blein, en el centro, es la seguidora más antigua del Celta Femenino. Desde mis tiempos de entrenador, temporada 1975/76, en la que debutó Susana García, Ángela es asidua en las gradas de As Travesas cuando juega su equipo. Se ha convertido en un personaje tradicional de la gran familia céltica, y seguramente sea la protagonista más querida de todos.
Carmen Patiño, la ex céltica, asistiendo en As Travesas a un partido de su equipo. En su mirada parece leerse un poco de envidia de no poder estar moviéndose por el parquet con la camiseta celeste.
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¡Ni lo sueñes! No es el Pabellón de As Travesas. ¡Quién nos lo diera! Se ttrata del nuevo Pabellón Würzburg de Salamanca durante la Fase Final de la Copa de la R Reina 2009. Ni un hueco en las gradas. El equipo salmantino del Perfumerías Avenida mueve pasiones en su ciudad.
El Perfumerías Avenida se acaba recientemente de proclamar Subcampeón de Europa 2008/09 en ese mismo escen escenario, superadas en la final por el potente representante ruso. Los vigueses tenemos que conformar conformarnos con nuestro viejo jo Pabellón de As Travesas, inaugurado por el alcalde Port Portanet en 1968 cuando aún no había llegado la democracia. Ha alvergado varios arios Campeonatos de Europa de Ba Baloncesto, un Campeonato nato del Mundo de Patinaje, un Campeonato de Europa de Hockey sobre Patines, Finales de Copa de la Reina, partidos iinternacionales de Baloncesto, Balonmano, Fútbol-Sala… Pero se ha quedado viejo, sin los múltiples servicios que exige un pabellón actual, sin los aparcamientos adecuados para los grandes acontecimientos… Una vez más, los políticos vigu vigueses dan muestras evidentes de su fracaso. El reciente Campeonato eonato del Mundo de Hockey sobre Patines nes 2009, tuvo que celebrarse en el IFEVI con una instalación provisional especialmente montada para el evento. As Travesas ya no cumple con los requisitos. ¡PENOSO!
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- Colega, ¿quién es este espectador enfurecido? No
parece que el escenario sea el Pabellón de As Travesas. - Luis, tú sabrás abrás mucho del baloncesto de las caver cavernas pero del actual… poco, por no decir nada. - ¿Qué pasa? - ¡Qué es Jack Nicholson!
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- ¡Es verdad! Ya a me parecía una cara conocida. Yo soy
un ferviente admirador suyo,, veo todas sus películas. - Pues Jack Nicholson ve todos los partidos de los Ángeles Lakers. En un hincha apasionado, como se puede observar, y siempre presente en el Staples Center. - ¿Qué estará reclamando? ¿Tres segundos en la zona?
Dicen que en el Staples Center de los Ángeles Lakers, cuando do llegan las Finales, hay más famosos que en el Kodak Theatre en plena entrega de los Oscars Oscars. Denzel Washington es otro asiduo a los partidos de los Ángeles Lakers. Es de suponer que este año hab habrá disfrutado con el título de la NBA conquistado por su equipo, con nuestro Pau Gasol como gran figura.
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La cantante Rhianna y el actor Leonardo Di Caprio Caprio, son otras de las celebridades que asistieron a la decisiva victoria de los Ángeles Lakers en la Final de la NBA.
Y ell que habrá asistido puntual a al partido final de la NBA del 2009,, por supuesto que con la máxima emoción emoción, no sería otro que el vigués Pepe Casal, aunque fuera frente a la pant pantalla del televisor. Su pupilo Pau Gasol tenía mucho en jueg juego esa noche, su primer “anillo”, el trofeo más codiciado del baloncesto mundial.
Lo que no dice la reseña de la revista oficial de la NBA, es que Pepe Casal es de Vigo, y que sus comienzos como atleta los hizo en nuestro Real Club Celta. Es un orgullo para la ciudad el contar con un vigués en lo más alto del deporte mundial. ¡ENHORABUENA PEPE!
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Dos espectadores de excepción en el Celta Celta-Indepo - C.Soller: Juan Rodríguez Larrán, “Larry”, y Manuel Povea. El veterano entrenador vigués -por cierto, no acaba de regresar a Vigo-,, habla maravillas de su compañero de grada. Hemos oído la misma opinión en boca de personajes destacados de nuestro baloncesto, y no sólo refiriéndose iéndose al aspecto técnico, sino también a su comportamiento personal. ¡Suplicamos que Manuel anuel Povea permanezca muchos años en el “Gesti” “Gesti”! … Sería muy buena señal… ¿Incluso de ACB?
El lucense Moncho López en las gradas de As Travesas presenciando el partido femenino Celta-Indepo – Club Soller.. El ex seleccionador nacional, afincado en Tui en la actualidad, entrena a la Selección Nacional Masculina de Portugal desde el año 2008.
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Las alevines de Baiona ya han visto el partido del Celta, han jugado un rato en el descanso, y al final, se hacen la foto con las internacionales Laura Nichols y Alba Torrens.. Ésta, lesionada, deja ver sus muletas por el suelo. También aparece Ángela, la seguidora céltica.
Ahora las alevines lo hacen con la base Gemma García. Igual que en la fotografía anterior, encontramos en el grupo al benjamín Lucas Tank, que ya da mucha guerra en las canchas... y la que dará.
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Alevines del C.B. Baiona. Si son tan buenas jugadoras como guapas, no hay por qué preocuparse. Sara, Leticia, Marta y Noa Noa, tendrán mucho que decir en el baloncesto.
Rosa Patiño, la actual secretaria del Real Club Celta Femenino. En mis tiempos de entrenador, en los años ochenta, la había fichado como delegada de equipo. Era el Celta Juvenil uvenil dónde jugaba su hermana Carmen… y de ahí, a la secretaría del club.
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Los espectadores del Pabellón de las Traviesas rinden homenaje al Real Club Celta Femenino por su brillante llante actuación en la Liga de Di División de Honor 1973/74.
Ahora reciben el homenaje en el Estadio de Balaídos antes de un partido de Liga de Primera División… categoría, que ue por cierto, ¡cuánto se echa de menos!
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Colegio Nebrija, 1966. A éstos stos fieles seguidores del Bosco, la lluvia les tiene completamente sin cuidado. Forman su pequeña pirámide de paraguas… y ¡qué chova!
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Taboada Leal, 1960. Los sufridos hinchas de Bosco y Estudiantes no se quieren perder nada, llueva lo que llueva. Éstos stos sí que son espec espec-tadores meritorios… y no los de ahora, que dicen enseguida que “hace mucho calor” en este pabellón... o “mucho frío”.
No es que los espectadores de los años sesenta se viesen obligados a ir trajeados a los partidos. Son simplemente los alumnos del Colegio Nebrija con sus uniformes.
Los niñitos de La Gota de Leche asisten a un partido del Estudiantes Femenino por primera vez… y están muy atentos: María del Carmen Veiga -fuera de imagen-, se dispone a encestar.
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Año 1962. Uno de los primeros partidos celebrados en el Campo de Granada. El Club Estudiantes se enfrenta a la Bazán del Ferrol. Hay muchos espectadores que no cogen la entrada correspondiente…
¡Por favor, espectadores!! ¡Pasen por taquilla! Los de la “Grada de Monte” se hacen los locos, como si la invitación no o fuera con ello ellos.
Ni poniendo las famosas sábanass se conseguía que pasasen por ta taquilla.
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Como ya comentamos más de una vez, lla sala de baile de verano del Jardín Park, donde jugaba el Estudiantes en los años cincuenta, contaba lógicamente con un palco para la orquesta. En los partidos solemnes dicho palco se convertía en “palco de autoridades”, y en el resto de las ocasiones era asaltado por los espectadores para gozar de una privilegiada situación, a salvo del sol y de la lluv lluvia, y con una perfecta visión del encuentro. Esta vez se celebraba un apasionante EstudiantesBazán del Ferrol. Pardo y Rey Lama en primer término, siguen el desenlace de la jugada; detrás, el banquillo estudiantil; más atrás, los afortunados de “palco”, que en el caso de los hombres parece que deb debían asistir a dicha localidad con traje y corbata.
Espectadores en Taboada Leal. Éstos, a falta de “palco de autoridades”, que no lo había o estaba ocupado, se sitúan placenteramente en el muro de cierre del campo. La visión era perfecta… y ¿peligro de caerse? En aquella época no había esos pel peligros. En la cancha, se saludan mientras tanto eel capitán bosquista Boliche, y su homónimo del SEU de Santiago. Interesante partido, de ahí el lleno.
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Década de los sesenta. El SEU de Santiago en A Praza da Quintana, con sus fieles seguidores llenando por completo la escalinata que tiene de fondo a la célebre Casa da Parra. Como se puede comprobar, los espectadores, para acceder a grade graderío tan especial, han de cumplir un requisito ineludible: vestir chaqueta y corbata… y eso que lucía el sol a tope en Compostela.
La escalinata de A Praza da Quintana con A Casa da Parra al fondo.
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Jardín Park, 1958.. A los aficionados no les preocupa preocupaba demasiado que pudiese llover. Van bien pertrechados con sus gabardinas, y a vivir la emoción del Estudiantes de Vigo-Unión Unión Deportiva de Salamanca que se está disputando. Una cuerda, sostenida por estacas, se observa por delante del graderío y alrededor de todo el perímetro del campo de juego. Eran “medidas de seguridad” impuestas por la Federación Gallega Zona-Sur, Sur, a raíz de la famosa invasión de ccampo en los Maristas, en el año 1955.
En primera línea, como buscando algo, nos encontramos con un espectador de eexcepción, Valentín Franco,, uno de los pioneros del baloncesto vigués de los años cuarenta. Propietario de la mítica tienda de ultramarinos en El Arco de Quirós, no es ni más nii menos que el padre del conocido periodista Fernando Franco.
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Pabellón Municipal de Baiona, 2009. Se disputa el “IV Torneo de Minibasquet Caixanova”, y ahí tenemos a una parte importante de la hinchada baionesa. Arriba, las infantiles del club, Paula, María, Lara, Nuria y Cristina. En el medio, tres “coachs”” y tres seniors: Hector, Juan, Rufino, Carmen, Marta y Pit. Abajo, los alevines: Alex, Daniel, Miguel, Brais, Joaquín y Mateo.
Las gradas del Pabellón Municipal de Baiona parecen quedarse cortas en la jornada final del “IV Torneo de Minibasquet Caixanova”. Y ello, a pesar de la grada supletoria instalada en uno de los fondos. ¡Vaya éxito!
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¡Triple de Alba Torrens! La grada céltica lo celebra con delirio: brazos en alto, puños cerrados, bocas abiertas en gritos de entusiasmo, palmas que aplauden, gestos de admiración… Yo, en cambio, tan tranquilo en medio del agente 007 y del periodista de las ondas, y flanqueado por detrás por Manu Martín y otros aficionados eufóricos… Pero, ¿cómo me va a sorprender a mí un triple de Alba Torrens? Es lo normal en una jugadora de esa categoría.
Cerremos este capítulo de “Espectadores” con esta imagen tan sugestiva, que nos sirve incluso como despedida a una de las mejores jugadoras de la historia del Real Club Celta Celta, la mallorquina ALBA TORRENS NS.
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CAPÍTULO X
ESCENAS
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A veces el baloncesto nos sorprende con escenas únicas, que aunque algo tienen que ver con nuestro deporte, emanan sin pretenderlo, un contenido tan inesperado como insólito. Las hay de carácter político, de increíbles ambientes bucólicos, con impensables amagos de danza, de inocentes expresiones animales… - Ya empiezas a decir tonterías, Luis. Tú sueñas demasia-
do. Te inventas muchas películas. - Puede que tengas razón, querido amigo. Pero yo prefiero soñar que estar dormido todo el día, sin apreciar, sin sentir, sin admirar… la multitud de cosas llamativas que nos rodean. - Te refieres a las chavalas guapas. - A ellas también. Pero observa estas escenas que te voy a mostrar, y tú mismo decides qué pensar sobre ellas. Si no sacas nada en limpio, alguno de los dos es tonto: por ver de más o por no ver nada.
“Basket en el zoo”La jirafa “PIVOT” está entrenando para ser mascota en el EUROBASKET´79 de Barcelona.
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“Peligro entre la arboleda”. Como a es estos chicos se les vaya demasiado alta la pelota, la perderán entre los árboles para siempre siempre. ¿A ver cómo la recuperan? Los asistentes a la escena parecen n confiados en que eso no va a ocurrir ocurrir. Entre ellos, el primero por la izquierda es Fernández Trig Trigo, el que fuera entrenador del Medina y Tabacalera de La Coruña, y gerente del Real Madrid hasta hace poco.
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“¿El fascismo?” Taboada Leal, 1955. En la presentación de los equi equipos, los rivales del C.D. Bosco alzan su brazo derecho en declarado signo fascista. No sabemos que se estará interpretando: ¿“El himno nacional”?... El bosquista Cándido Gil mira sorprendido, algunos lo hacen de reojo, y otros se muestran muy serios. La cosa no era para bromas… Se vivían tiempos difíciles políticamente…
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“Faldas al viento” se podría llamar esta escena de ballet. La protagonista principal se eleva al cielo a dejar la ofrenda, mientras que las damas de oscuro se aprestan a recogerla para iniciar la danza de gracias. El abundante público contempla extasiado la belleza de la acción… y pronto aplaudirá entusiasmado…
… y acaba saltando al escenario para abrazar a las artistas. El director, a la izquierda, de polo blanco, se escapa de la avalancha.
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“Fruta madura” Entre árboles, ramas y hojas cae la fruta madura, y estos chicos de pantalón corto se la disputan. El comisario Núñez vigila que no haya violencia, y las gentes de paso se quedan observando con curiosidad.
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“Ofrenda al cielo”. El ciudadano Tato se eleva entre árboles y nubes a depositar la ofrenda a la “Diosa Canasta”. Sus enemigos le permiten la acción piadosa, y su amigo Josechu le ayuda con la mirada.
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“¿Exaltación al franquismo?”. Eso parece hacer este grupo de fanáticos seguidores. ¡Pues, nada de eso! Son simplemente las chicas del Club Estudiantes de Vigo y sus directivos, haciendo una visita de cortesía al Ayuntamiento de Santiago. Agachados, concejales compostelanos… … y al fondo, presidiendo, Su Excelencia.
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“Paso a dos”. La bailarinas danzan con pasión, y luchan por el elixir de la vida en la oscuridad de la noche.
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“Cita en la nieve”. No exactamente. No es que estos señores del Club Ademar se hayan citado en algún monte cercano para tirarse copos de nieve. Es simplemente que todos los que hemos ido a jugar a El Barco de Valdeorras durante varios años, en alguna ocasión, sin remedio, nos hemos topado con la nieve por el camino. A veces era motivo de satisfacción -los los vigueses no estamos acostumbrados a estos lances-,, y otras, en cambio, de mucho miedo, con el coche medio derrapando por carreteras sinuosas, y abiertas a hermosos paisajes… en esos momentos más pel peligrosos que bellos. ¿El culpable de la situación? Él que sigue… pero esto ya lo expl explicaremos en la próxima tertulia.
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“Intrigas fraudulentas”. Febrero de 2009. El Celta Indepo está pro probando al alapívot Shawn n Jackson. Las lesiones importantes que asolan al equip equipo celeste, obligaron a Paco Araújo jo y su cuerpo técnico a buscar soluciones urgentes. Alguien, no se sabe quién, tuvo la feliz idea. Todo estaba preparado: peluca rubia con flequillo y coleta, sujetador ortopédico, depilación laser, los mates estarían prohibidos para disimular,, algunas lecciones de pasarela… Un chivato se fue de la lengua… Una pena, yo creo que sería el revulsivo lsivo necesario p para el conjunto de Miguel Méndez… ¿Pero qué sucede en el Pabellón?...
El Celta también ficha al base Tim Smith, y al ala ala-pívot David Bernárdez… ¡Ojo! ¡También cambios espectaculares en el Gestibérica! Ya visten sus colores Agne Ci Ciudarene, Iva Slikovic y Alba Torrens… ¡Qué equipo más guapo! Mientras los rivales se distraen con los bellos fichajes del conjunto de Manuel Povea, los Tim Frost, Der Derogatis, Joseph… pueden certificar el ascenso. ¡Qué estrategia del basket vigués! Siempre hay que superar las dificultades… ultades… En esto último, el deporte de Vigo tiene mucho arte. Que se lo pregunten a Paco Araujo, a Javier Rodríguez, a Pablo Beiro, a Guil Guillermo Touza, a Pepe Conde...
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“¿Qué pasa aquí?...” ¿Es un jugador con seis piernas?... ¿Son las piernas de seis jugadores?… ¡No, no! Sin son tres pares de botas, serán de tres jugadores… ¿Pero qué hacen?... ¡Ya sé! ¡Presión a muerte! Los dos jugadores del Airexa le hacen una presión brutal al jugador de las botas Adidas…
- Pero, ¿qué dices, Luis? Lo único que están haciendo es
colocarle bien las botas a Tamara Abalde para que les firme un autógrafo en ellas.
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“Lucha de titanes”. El chico negro le pone un tremendo tapón al chico blanco. Sólo la red podría invalidarlo, pero a lo mejor ¿quién sabe?, con el juego trepidante que utilizan estos muchachos, los árbitros ni se enteran de lo que pasa.
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CAPÍTULO XI
PERSONAJES
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A través de más de medio siglo de andadura, desde los años treinta hasta hoy, 2009, han pasado por el baloncesto vigués una serie de personajes que resultarían imprescindibles para el desarrollo de su historia. Algunos casi en la sombra, otros más a la vista, muchos con riesgos diversos de toda índole, unos pocos autoexpulsados por problemas surgidos… La mayoría no han metido canastas, no han dirigido equipos, no han arbitrado… no han pisado las canchas de juego. Hubo varios, en cambio, que lo han hecho todo: jugar, entrenar, dirigir, crear… Sin ellos, no estaríamos hoy aquí hablando de hazañas, anécdotas, triunfos, retos incumplidos, fracasos estrepitosos, éxitos incomparables… Son los PERSONAJES DEL BASKET, que han entregado toda su ilusión, su sacrificio, su tiempo… la mitad de su vida a nuestro deporte. De todos los componentes de la gran familia baloncestística, son los que merecen el máximo respeto y admiración. Esa, al menos, es mi opinión. - Querido amigo de tertulia, ahora mismo, sin esperar un
momento más, te guste o no, quiero pasar a recordarlos. Todos ellos, ya lo comprobarás, han tenido un mérito enorme. - Luis, ¿me vas a hablar otra vez de los “antiguos”? - Los personajes que te voy a mostrar en este momento nunca serán “antiguos”, y los amantes del baloncesto, les debemos respetar y guardarles nuestro agradecimiento y admiración. Ellos han forjado el deporte que hoy disfrutamos. ¡Aprende! Toma buena nota de esta lección. - Lo haré, Luis. Si te empeñas… En este modesto homenaje al trabajo incansable de tantos, me quedarán sin mencionar algunos que, o bien no tengo información de su labor, o no dispongo en este momento de la imagen obligada para su recuerdo. Tiempo habrá en próximas charlas. No me olvido de Amador Lama, ni de Julián Prado…
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Antonio García Hermida, el presidente del Club Deportivo Bosco durante más de cincuenta años, el número 1 de la historia del basket de Vigo.
Si analizamos la historia del baloncesto vigués, y pretendemos destacar al personaje más importante, o hablamos de alguien imprescindible, o nombramos al más longevo de todos, o citamos al de mayor experiencia, o recordamos al dirigente de brillantez sobrada, o señalamos a un presidente con infinidad de recursos, o elegimos al más hábil en la negociación, o buscamos al organizador incansable… estamos refiriéndonos a la misma persona: Antonio García Hermida.
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Y detrás de un gran hombre dicen que siempre hay una gran mujer. Maruja Migón, la esposa de Antonio García Hermida, fiel al dicho popular, ha sido de todo en el C.D. Bosco. Desde costurera, a lavandera, zurcidora, planchadora… hasta cocinera… De impulsora espiritual de su marido en sus afanes bosquistas, a ejercer de segunda madre de muchos de sus jugadores… De hospitalaria señora de su casa con los chicos del club, a animosa acompañante en los viajes cuando podía… No ha tenido ningún cargo… y los ha desempeñado todos.
A su lado en esta fotografía, Manolo González, directivo del Bosco durante muchos años, y colaborador activo del “presi”. Firmaba con el pseudónimo “Escarcha” en sus colaboraciones periodísticas sobre el fútbol modesto.
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Eugenio Giráldez “Pichicho”, Carlos los Davila y Joaquín García Picher han sido los tres fundadores del histórico Club Estudiantes Estudiantes.
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Rafael Pérez y Manolo Martínez fueron los dos primeros entrenadores de cierto renombre en el baloncesto vigués. Eran los años cincuenta.
Dicen que el primero primero, del S.E.U. y del Club Estudiantes, era un hombre estudioso, que desguazaba minuciosamente las revistas especializadas que le hacían llegar sus amigos desde Estados Unidos. Cuentan que de estas lecturas, sacó la primera defensa de zonas que se implantó en nuestro basket basket. Por razones profesionales tuvo que e abandonar Vigo, y su aportación al club estudiantil se vio suspendida en el momento más brillante de su etapa. Al poco tiempo, año 1957, el Club Estudiantes ascendía a Primera División. El segundo, del C.D. Bosco, se dedicaba sin descanso al trabajo de cantera, y de sus manos salieron la mayoría de los jugadores bosquistas de los años cincuenta y sesenta. En la cancha de Taboada Leal se le veía a diario entrenando a grupos de chicos, además de preparar al primer equipo del club. Problemas con la vista le alejaron pronto de esta eficaz labor, aunque se mantuvo siempre en la directiva del Bosco preocupándose por la continuidad de su trabajo. Manolo Martínez fue mi primer entrenador, y e el que me enseñó ó a botar, a pasar, a entrar a canasta, a tirar…
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Severino Vilas, José Nistal, Emilio Fernández “Fachusco” y Pepe Vilas, directivos importantes del Club Estudiantes en las décadas de los cincuenta y sesenta. Los dos primeros continuaron ejerciendo como tales en el R.C. Celta durante varios años.
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No se concibe la historia de del baloncesto vigués sin la presencia destacada de Carlos Núñez Gayoso Gayoso. Desde principios de los años cuarenta,, lo ha sido todo en el Club Ademar de los H.H. Maristas -en sus inicios bajo el nombre de El Pilar y Club Areosa-. Brillante jugador en sus comienzos, y líder indiscutible del basket del Colegio Marista.. Permaneció en activo hasta cerca de los cuarenta años, alternando al mismo tiem tiempo las funciones de entrenador. Eterno presidente, utillero, d delegado de campo, chófer, cantinero… … y amigo entrañable, querido y respetado por toda la familia marista. Cuando cedió el man mando del Ademar, lamentablemente, el club no tardaría mucho en desaparecer.
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El popular Hermano Miguel Miguel, personaje principal del deporte del Colegio Marista de E El Pilar entre los años sesenta y ochenta. El baloncesto -igual igual que el fútbol, el balonmano y el voleibol-,, tuvo su apoyo incondicional, y bajo su tutela, fue de desarrollándose hasta asentar a Los Maristas como una de las ca canteras más relevantes del basket sket gallego. Eso no quita que se pelease se a menudo con Carlos Núñez…
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Gustavo Vega lo fue casi todo en el Ademar: jugador, entrenador, directivo directivo, y lo más importante, la persona de confianza del presidente Carlos Núñez.. Con él conv convivió la mitad de la historia del club en un fraternal entendimiento. “Gustavo fue
siempre un hombre bueno.”
Fito Montenegro, ha desempeñado labores de delegado de equipo en el Ademar durante las décadas de los setenta y ochenta. Colaborador incondicional del “presi” en el ajetreo diario de los equipos.
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Jaime Gómez, Elena Sarmiento, Ismael Pérez Izaguirre y Agustín García Maldonado llevaron la dirección del R.C. Celta en la década de los setenta, junto a José Nistal y Severino Vilas. Fue laa época más brillante del club club.
385 Luis Fernández Castro tomó el relevo de Jaime Gómez en la presidenci presidencia del Celta Femenino. Con el mismo equipo directivo de su an antecesor alcanzó éxitos notables y mantuvo la notoriedad deportiva del club en la élite nacional. Como ya comentamos,, b bajo su gestión se conseguiría el primer sponsor, CITRÖEN HISPANIA, que en años sucesivos iba a ampliar también al futbol su importante colaboración económica económica. Al compartir esa ayuda, laa avaricia sin límite del fútbol -que rebajaba cada año el pr presupuesto del basket-, provocó unas diferencias insalvables que llevarían a una dim dimisión en pleno de la directiva del baloncesto.
Victorio Alonso, que fuera con anterioridad eficaz directivo del C.D. Bo Bosco, se hizo con las riendas del club para superar la grave crisis. Junto a Floriano Fernández, Juan Ayres, José Pereira, Alberto Morenza, Carlos Pereira,, José María Díaz Gasalla… … formaron el cuadro directivo del Celta Femenino -también también masculino ese año- con nuevos ímpetus, y con la esperanza del cambio. Corría la temporada 1985/86, y al poco tiempo, tal como se veía venir, agosto de 1988, el presidente céltico Ribadulla adulla eliminaba la sección de baloncesto del Real Club Celta.
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Alberto Morenza, Juan Ayres y José María Díaz Gasalla.
Floriano Fernández, preparador físico del Real Club Celta durante muchas temp temporadas, y directivo importante en la etapa de Victorio Alonso. Tras la desaparición del equipo femenino, continuó su labor en el Club Xerox Xerox-Vigo de David Hortas.
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David Hortas salvó al baloncesto femenino vigués de su inmediata desaparición. Recogió los restos del extinguido Real Club Celta, fundó la Agrupación Dep Deportiva Vigo, y con el indispensable patrocinio de la firma Xerox, consiguió recuperar la máxima categoría en el tiempo po mínimo de tres temporadas.
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Bahillo fue un colaborador importante de la directiva del C.D. Bosco en la primera época de su fundación, allá por los años cincuenta. Eran tiempos de la cancha de Taboada Leal, y de fuerte asentamiento en el Colegio Salesiano de San Matías.
Juan José Camba, en cambio, fue el “brazo derecho” del presidente García Hermida en los últimos veinte años del club bosquista. Como delegado, acompañó siempre al primer equipo en su andadura por la Segunda División Nacional, hasta alcanzar la Primera División B… y paradójicamente, el éxito deportivo fue acompañado del final del Club Deportivo Bosco.
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José Manuel Gómez Carballo Carballo, el último presidente del Club Deportivo Bosco -sucesor sucesor de Antonio García Hermida Hermida-, y el primero de la actual etapa del Real Club Celta Femenino.
Bajo su mandato, de tan sólo tres temporadas, los bosquistas había conseguido en 1991 el ascenso a Primera B antesala de ACB-, a la que renunciar renunciaron por graves problemas económicos, y por falta de ayu ayuda de instituciones y empresas de la ciudad. En el verano de 1996, ante el más completo caos del b baloncesto femenino vigués por la desaparición de la A.D. Vigo, Gómez Carballo y Paco Araújo, jo, compran la plaza de Primera División a un equipo asturiano para iniciar una nueva etapa del Celta. Un desgraciado accidente privó al basket vigués del más destacado dirigente de los últimos años del siglo XX, y de los primeros del nuevo siglo. En menos de una década al frente del C.D. Bosco y del R.C. Celta, lta, José Manuel Gómez Carballo dejó constancia de su eficacia y brillantez en sus labores de presidente.
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José Carlos Freijeiro y José Luis Rodríguez han sido los máximos responsables sponsables de la fundación del “Club Manuel Álvarez”,, que tanto revuelo formó en el momento de su creación, y dio lugar a una grave desestabilización del baloncesto vigués. Trabajadores ambos de “Álvarez”, y destacados jugadores del C.D. Bosco, co, se lanzaron al nuevo proyecto a raíz de a alcanzar con un equipo de la empresa el título de Campeones de España de Productores en un campeonato celebrado en Vigo a mediados de los años sesenta.. A don Moisés Álvarez, el jefazo, parece que le encantó la idea. A ese se equipo lo habíamos reforzado Jorge Domínguez, Chacabuco y yo, y por supuesto, dent dentro de la más absoluta legalidad. Fuimos “trabajadores” de la empresa durante un par de meses. Estas “chapuzillas” eran muy corrientes en esos campe campeonatos -tanto tanto en baloncesto como en el resto de los deportes deportes-, que en aquella época franquista gozaban de un enorme prestigio,, y formaban parte de la propaganda activista de Educación y Descanso, la organización dedicada a defender los intereses de los productores.
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CAPÍTULO XII
GALERÍA DE IMÁGENES
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- Hoy amigo, te voy a enseñar un montón de fotografías
interesantes. Algunas te dejarán asombrado. Son historia auténtica de nuestro basket, y una a una te iré explicando quiénes son los protagonistas, sus equipos, sus hazañas, sus fracasos… Hay de todo. - ¿Y las hay también de la prehistoria? - Sí, las hay. De cuando se jugaba con pelotas de trapo, con taparrabos, con los pies descalzos, las canastas se colgaban de los árboles, y el árbitro con un garrote golpeaba al que cometía personal… Era divertido… ¡Ah! ¡Se me olvidaba! Y cuando antes de los partidos, en los campos de tierra -que eran todos-, se marcaban las líneas con cal. - Luis, no me tomes el pelo. - No te tomo el pelo. Sobre todo en lo último, hasta puedo aportar testigos… y no pocos. Algunas son escenas simplemente curiosas, otras son sorprentes testimonios del pasado, las hay de personajes famosos, de acontecimientos únicos, también del presente… y a veces, ¿cómo no?, hasta se deja el futuro en el aire. Muchas madres, incluso abuelas de hoy, se encontrarán de niñas en los equipos. Se reconocerán, y avivarán el recuerdo de algo de su niñez que ya tenían olvidado. “¿Ésta eres tú,
mamá?”. “Sí hija, sí. Y ésta es tu tía Pilar.” “¡Qué delgaditas! Parecéis unas niñas… ¡y qué monas!”. “Es que lo éramos: niñas y monas.” Ingenieros, veterinarios, políticos, informáticos, abogados, médicos, economistas, empresarios… se encontrarán de principiantes en Mini-Basket, de infantiles, de juveniles, de seniors… en esas fotografías de mediados de siglo. “¡Qué tiempos!
¡Quién los pescara de nuevo!... ¡Mira! Félix, Juan, Tino… No los volví a ver. ¿Qué será de ellos?” … ”¡Mis pupilas! Ana Presa, Rita Tourón, la pontevedresa Begoña… Ya deben ser madres…”
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Frontón Municipal de las Traviesas. Temporada 1972/73. Club Ademar Maristas de Tercera División De pie: Fito,, Armando Vázquez, Vicente Rodríguez “Cholas”, Caballero y Felipe de la Osa. Agachados: Jorge Doval, val, Collazo, Pepe Doval, Fernando Queralt y Carlos Pomar.
Es notoria la ausencia en la fotografía de Carlos Núñez Gayoso, presidente, entrenador y “alma mater” del club durante cerca de cincuenta años. Seguramente en ese momento estaría en la mesa de anotadores tadores dando el “cinco inicial”… y también es posible, que discutiendo con los árbitros alguna ci circunstancia pre-partido. El histórico di dirigente era muy amigo de recursos ante los Comités de Competici Competición, y poca cosa necesitaba para darle motivo, y elaborar uno con urgencia. Lo que de verdad hay que lamentar tras ras su retirada, es que el Club Ademar haya desaparecido. Destaca en el grupo la presencia de Vicente Ro Rodríguez Cholas -al al final de su corta etapa de jugador jugador-, y también la de otro ex entrenador de las célticas, Felipe de la Osa Osa. Años después, Pepe Doval, sería preparador del propio Ademar. Lo mismo que Collazo, que más tarde dirigiría al Mercantil Femenino durante una campaña.. Con anterioridad a esta fotografía, Pomar había sido compañero mío en el Club Estudiantes, y posterio posteriormente, tanto Caballero como Armando Armando, estuvieron a mis órdenes en una temporada que entrené al Club Adema Ademar.
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“Los viejos rockeros nunca mueren.” Ángel Barbará parece culpar a Suso Cobián de la última derrota del Xuventude. de. S Se puede comprobar, por su sonrisa, que el acusado no le hace ace el mínimo caso. Ambos continúan alargando su amplio historial jugando en el veterano equipo, junto a Pepe Conde, Julio Bernárdez, Moncho, Teixeira, Rober, Jenaro… … y siguen haciendo da daño, desde luego, bastante menos que cuando vestían la camiseta bosquista.
Suso Cobián, en la actual actualidad, además de intentar jugar al baloncesto en el Xuventude, sigue en la tarea de director deportivo y entrenador del Colegio A Andersen. También forma parte del equipo técnico de la FEB para categorías inferiores. Debemos informar para el que no lo sepa, que en estas funciones se maneja ahora mismo mucho mejor que en la cancha como jugador. Ángel Barbará, en cambio, anda metido últimamente en asuntos de empresa, y esto, muy a su pesar, es bastante pes pesado, y le resta la exuberante te velocidad que lucía en su época del Bosco.
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As Travesas, 2008. Club Gestibérica Gestibérica-Ciudad de Vigo De pie:: J. Martínez (delegado), Shawn Jackson, Iago Estévez, Adrián Joseph, M Manuel Povea (entrenador), Fernández Hevia (ayudante), Marcos Egidi Egidio, Martín Calvo, Tim Frost y Rafael fael Zugasti (médico). Abajo: Ross Derogatis, Tim Smith, Alex Fernández, Mario Díez, Jaime Silva y J. A. Rojas.
¿Será esta plantilla, o al menos parte de ella, la que a ascienda a ACB en el 2010, tal como se anuncia en mi libro “Del patio al “siguing”? Todo do parece indicar que se trata de un grupo excepcional, empezando por el entrenador Manuel Povea y su grupo técnico, y siguiendo con cada uno de los jugadores. El más pequeño de todos ellos, se está mostrando como el más grande. Que jugadores como Tim Smit Smith, de tan pocos centímetros, 1.76, 76, sean capaces de jugar al nivel de este chico, es algo increíble. Es de esas figuras de las que te cuentan haz hazañas… que tú no crees demasiado… hasta que, en este caso, p pasas por As Travesas a ver al “Gesti” “Gesti”. Y algunos de los más altos, como Adrian Joseph y Tim Frost, siguen “creciendo” desde que llegaron aquí por el mes de septiembre. El resumen es, que un equip equipo formado para mantenerse en LEB Plata, se está agrandand agrandando de tal manera, que se va a LEB Oro casi sin proponérselo. o. El mérito es de todos, pero la mano sabia y recia que los conduce es lla de Manuel Povea. ¡Ojalá!, en el mes de mayo, se pueda dar el pronóstico como válido.
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As Travesas, 2007.. Aquí vemos al exjugador de la NBA Tractor Taylor, con el responsable de prensa del Gestibérica, Jenaro Vázqu Vázquez. Estuvo entre nosotros un par de meses, y su rendimiento fue desigual. Con bastantes años, bastantes lesi lesiones a cuestass y bastantes kilos de más, Taylor estaba para diez minutos escasos en mpo. El Gestibérica necesitaba en ese momento un pívot resolutivo durante al el campo. menos tres cuartos. De todas formas, mas, el americano tuvo destellos del gran jugador que había sido.
Jenaro Vázquez, en n sus años mozos, destacó en el C.D.M. infantil y juvenil, y más tarde en el R.C. Celta de Tercera División. En su etapa junior, jugó también con el Celta que militaba en esa temporada en Primera Divisón B, hoy Leb Oro. Posteriormente, jugó en el Ademar Maristas varias temporadas, hasta su “flamante” fichaje en el Xuventude, donde continúa en la actualidad. En su faceta de entrenador trenador de ccategorías base, desempeñó las funciones de monitor en las Escuelas Municipales, y fue ayudante de Mani en los equipos del C.D.M. y en el Colegio Santiago Apóstol. Se puede comprobar en las siguientes fotografías, que Jenaro ha sido compañero de grandes jugadores de nuestro baloncesto: Suso so García, Andrés Cadahía, Félix Muñoz, José Manuel Díaz, Miguel Polo, Miguel González… el americano Winters… Y como entrenadorr han pasado p por sus manos, Jesús Núñez, Miguel Tapioles, Rubén Rey, Samuel…
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Pabellón del Carmen, temporada 1982 2/83. Centro Deportivo Municipal Infantil De pie: Chao II (delegado), Fernando Pérez “Mani” (entrenador), Juan Fernández, Jenaro Vázquez, “Chons” Marín y Suso García. Agachados: Nacho Chao, Rafa, Miguel Fernández, Félix, Tino Lojo y Camilo Rey.
Final viguesa infantil: C.D.M. - Colegio olegio Marcote. Tiempo muerto. “Mani” da instrucciones al “cinco” en cancha. Jenaro y Tino a su izquierda, y Camilo, Chons y Juan a su derecha.
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El Ferrol, Pavillón da Malata, 1985. 5. C.D.M. Juvenil, subcampeón intersector nacional norte. De pie: Chao II (D (D), Andrés Cadahía, “Chons” Marín, Morenza (directivo), José Castro, Miguel Polo y Suso García. Agachados: Félix, Tino Lojo, Miguel, Juan Fernández, Camilo lo Rey, Jena Jenaro Vázquez y Nacho Chao.
Este ha sido uno de los mejores equipos juveniles de la historia del basket vigués. Entrenado por F. Pérez, “Mani” -falta en la foto-, luchó contra el OAR de Ferrol por el título regional. Libraron ron entre ellos unos duelos épicos, aún hoy recordados por los aficionados, y resueltos a favor de los ferrolanos por cortas ventajas. El C.D.M. desarrollaba un juego brillante, con la chispa y velocidad de su base Tino, con la cerebral dirección de su otro base, Camilo, y la fuerza, anotación y habilidad de sus aleros, Juan, Miguel, Félix, lix, Jenaro, Nacho… Bajo los aros, Suso, Miguel, Cadahía, “Chons”… imponían su potencia y calidad. Era un equ equipo de ensueño,, con mucho equilibrio y largo de efectivos. Las circunstancias de la vida, y el momento de un balo baloncesto vigués sin peso, los dispersó. De nuevo se perdía una oportunidad prometedora, de un conjunto llamado a importantes logros. Los “pequeños” acabaron sus carreras de Medicina, Imagen, Ingenierías, Veterinaria… eterinaria… Los “gran “grandes” jugaron muchos años en Segunda Nacional y en Primera B. Suso García jugó en División de Honor.
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Temporada 1985/86 - Estrella strella Roja de Mini Mini-Basket, de las Escuelas Municipales Vigo. Arriba: Carlos,, Miguel Tapioles, Jesús Núñez, Manolo y Samuel. Abajo: Israel, Nacho, Miguel, Emilio y Rubén Rey. Detrás Detrás: Jenaro Vázquez (Entrenador).
En sus funciones de entrenador, Jenaro Vázquez dirigió a este equipo de mini, en el que ya empezaban a destacar jugad jugadores como Jesús Núñez, Emilio, Miguel Tapioles, Samuel, Rubén Rey… Las Escuelas Municipales gozaron en aquella década de formidables equipos en todos los deportes. Del Centro Deportivo Municipal -hoy I.M.D.- salieron extraordinarios jugadores de las más variadas especialidades. El Gobierno del PSOE en el Concello, con Javier Álvarez Salgado de concejal de deportes, suprimió los equipos sin contemplaciones. Hoy en día, las Escuelas Mun Municipales no parece que tengan ni el auge, ni el prestigio de entonces, ni son la inagotable cantera que fueron en esos años.
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Pabellón de Balaídos, temporada 1985/86 - Real Club Celta de Tercera División. Partido por el título ítulo de tercera divisón ante San Rosendo de Ferrol De pie: Fernando Pérez “Mani” (segundo entrenador), Floriano Fernández (preparador físico), Suso García, cía, José Manuel Díaz, Miguel Fer Fernández, Andrés Cadahía, Miguel Polo, José Novás,, Trillo (delegado) (delegado), Julio Bernárdez (entrenador) y Juan Ayres (directivo) Agachados: Tino Lojo, o, Juan Fernández, Toni Soto, Fé Félix, Jenaro Vázquez, Félix Muñoz y Juan Pedrido.
Excelente equipo, sobre todo, esperanzador. Se adjudicaron la Liga de Tercera con autoridad, y lograron el ascenso a Segunda. Al año siguiente, los os estudios de los más jóvenes fuera de Vigo redujeron jeron la plantilla a la mitad, pero de todas formas, el Real Club Celta, volcado en las féminas, no tuvo presupuesto para abordar el ascenso censo de categoría categoría. Una vez más se perdía la oportunidad. El Celta masculino desaparecía de nuevo, no por falta de éxito deportivo, portivo, sino por motivos económic económicos. Cuando no fue por una cosa, fue por otra. El baloncesto vigués ha vivido durante más de med medio siglo una eterna condenación: no llegar nunca a alcanzar la División de Honor -hoy ACB-. El desaparecido C. Estudiantes lo había conseguido en 1957, pero por falta de campo cubierto se vio obligado a renu renunciar. Después, pués, el propio Estudiantes lo intentó y ya no lo volvería a conseguir, como tampoco poco lo hicieron el Bosco, Manuel Álvarez, Porcelanas Santa Clara, Celta, Cíes Cíes… Ahora lo intenta el Gestibérica… Pero llega la noticia triste: los jugadores del Gestibérica en huelga ga por falta de pago. Se les adeuda adeuda, a mes de Mayo, cuatro mensualidades. lidades. ¿Será el fin de una nueva etapa? La crisis
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mundial que nos asola, no parece la mejor compañía para reso resolver la dramática situación. ción. R Responsables del “Gesti” también comentan en la prensa la falta de pa palabra de los políticos, con repetidas promesas incumplidas. Con el playoff en juego, sólo pedimos suerte, mucha suerte, la vamos a necesitar por todos los lados.
El recorte de prensa de “Faro de Vigo” es bien elocuente. No da pie a más comentarios. Tan sólo reseñar el gesto triste, apesadumbrado, impotente… de una plantilla, que hasta el momento había cumplido por encima de las expectativas. El “Gesti” se encontró con un conjunto y un cuadro técnico de una formidable calidad humana, que a lo largo de la campaña, a alcanzó un nivel técnico capaz de lograr el objetivo máximo, el ascenso a LEB Oro. Con el natural desánimo nimo han afrontado con derrotas los últimos tramos de la Liga, y a primeros de mayo, disputan el playoff de ascenso con el contratiempo más acentuado, si cabe,
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por las lesiones producidas. Difícil situación para técnicos y jugadores, pero también para ra los directivos que están cerca de tirar la toalla. Sólo lo un triunfo podría salvar el ánimo, pero es tan poco probable...
El tiempo fue pasando, y tal como se esperaba a raíz de los últimos acontecimientos, la eliminatoria del playoff no resultó favorables. La inscripción ción para la temporada 2009/10 se acercaba, sin que la directiva del “Ciudad de Vigo Vigo” pueda definir su futuro. Se vislumbran demasiadas dificultades económicas, incl incluso parecen debilitarse los ánimos, y llas fechas decisivas se acercan inexorables exorables a su minuto final.
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El 10 de junio, un amplio comentario de “Faro de Vigo” a toda plana, expone con claridad la delicada situación, y recuerda con detalle el fracaso del baloncesto vigués en las disti distintas épocas de su historia. “El Gestibérica se encuentra al borde de esa fosa común en la que rreposan los sueños de medio siglo.”, comenta Armando Álva Álvarez. Esperemos que no sea así.
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El “22 de julio de 2009” queda como fecha importante para nuestro baloncesto. Parece que todo está prácticamente resuelto, no sólo para que el Gestibérica continúe vivo, sino también, y por añadidura, para que participe en LEB Oro. La crisis económica generalizada afecta a todos, y varios clubes en evidente peligro como el vigués, no resolvieron sus dificultades, y tuvieron que retirarse y abandonar su plaza en la segunda liga más importante del país. La FEB ha dado el visto bueno a la inclusión del Gestibérica en la categoría de oro; los políticos de nuestra Diputación, viendo a su alrededor como en Ourense se apoya al COB, en Lugo al Breogán, y en la Xunta al Obradoiro, no se han querido quedar atrás, y están echando una mano decisiva; y Pepe Conde y demás directiva tratan de aportar el imprescindible aval, incluso poniendo en juego su patrimonio personal.
Pepe Conde, en su época de jugador del Club Deportivo Bosco.
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¡MUCHO CUIDADO CON ÉSTOS! ¡SON UNOS MON MONSTRUOS! Aunque parecen buenos chicos, tan sonrientes, tan desenfadados,, tan juveniles… ¡TE ENGA ENGAÑAN! - Colega, ¡hazme caso! Si alguna vez juegas al tenis,
tú forma pareja con el MONSTRUO de pantalón blanco. Nunca te pongas al otro lado de la red. Lo mismo te digo para el baloncesto. Enfrente, ¡jamás! Si quieres un base que te dé toda clase de asistencias asistencias, que te lleve el contraataque para que tú lo remates, que te coloque para el triple, para hacer un dos contra dos… juega con el MONSTRUO de las manos anos en los bolsillos. Hasta podría hacerte internacional. Si quieres jugar de base, y necesitas encontrar un ala en el desmarque, en el corte, en el bloqueo, en el triple… elige al MONSTRUO de la derecha. Con éstos es mucho mejor ir de amigo. Que visten equ equipaje rojo, tú de rojo. Amarillo, de amarillo. ¿Qué no te dejan jjugar con ellos? Hazte ayudante del entren entrenador, masajista, utillero, encordador ador de raquetas… lo que sea para estar a su lado. ¿Qué tampoco te dejan ser nada de éésto? Entonces sólo te queda ser hincha.
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Esta entrevista de “El País” con Pedro Ferrándiz no tiene desperdicio. El entrenador español más laureado de la historia, fue punto de partida del progreso del baloncesto español. Polémico, odiado, innovador, genial… irrepetible. Coincido con él en una opinión: “La Final de los Juegos de Pekín es el m mejor partido que he visto en mi vida.”
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En el verano de 1960, Joaquín Hernández vino a Vigo invitado por el Club Estudiantes, y nos entrenó con intensidad durante quince días en la cancha del Jardín Park. Aquí nos dejó las enseñanzas del baloncesto más avanzado del momento.
Fue capitán del Real Madrid, más tarde su entrenador, internacional, y en el periodo 1962-64, seleccionador nacional. Por entonces, estas figuras aceptaban nuestra invitación tan sólo por el gasto del hotel, y por evidentes razones de amistad. Por desgracia, a los pocos años de estar en Vigo, fallecía tras una rápida y dolorosa enfermedad. Sin llegar a los cuarenta años, se había ido un buen amigo.
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Baiona, año 1963. Antonio Díaz Miguel, seleccionador nacional y gran amigo del Club Estudiantes, hace un alto en la “Vuelta al Castillo” para charlar con sus acompañantes, los estudiantiles Benito Lorenzo y Francisco Picos. Gente elegante… ¿o no? Díaz Miguel le contaba por teléfono a nuestro entrenador Julio Castro, de cómo tenía que enseñarnos el novedoso “tiro en suspensión”
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Jornada de clausura de la temporada 1952/53 de la Federación Gallega Zona-Sur de Baloncesto. A tenor de su programa, cabe pensar que el “DÍA DEL BALONCESTO” debió resultar todo un éxito. Al término de los últimos partidos del año y de tantos premios repartidos, la gran orquesta “NUEVOS RITMOS” amenizó un gran baile. ¡Ya pueden copiar los de hoy en día de cómo celebrar un “Fin de Temporada”!
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Salón Regio del Real Club Naútico de Vigo, 1966 Acto final de la “III Fiesta del Deporte” Deporte”, que organizaba por esos años la Asociación de la Prensa de Vigo. Los galardonados posan para los medios informativos al término de la entrega de premios.
El primero por la izquierda es José Nistal, presidente del Estudiantes, diantes, entidad premiada; le sigue el tenista Álvaro Dotras, con más de diez títulos gallegos en su haber; el “Mejor en Vela”, Cholo Armada, varias veces ces campeón de España de snipes; el futbolista del R.C. Celta, Antón n Lasheras; Antonio García Herm Hermida, presidente dente del C.D. Bosco, club premiado por su intensa actividad deportiva; tiva; el periodista Matías Prats, habitual pregonero de la Fiesta del Deporte; el atleta internacional y olímpico, Javier Álvarez Salgado; Rey Lama, a, el “Mejor en Baloncesto”; el pres presidente del Club Ciclista Vigués, José Luis Iglesias; el luchador Ramón Incera. Sentados, entre otros, Camilo Veiga, el popular preside presidente del Círculo Mercantil de Vigo; la atleta y baloncestista, Marisa García, “Premio de Honor”;; Martín Barreiro, presidente del R.C. Náutico; José Reguera, presidente de Montañeros Celtas… Hasta a su lamentable desaparición, finales de los setenta, esta prestigiosa Fiesta del Deporte siempre contó con represe representantes de nuestro baloncesto entre ntre los galardonados.
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As Travesas, 1986. Real Club Celta Juvenil Bronce en el Campeonato de España De pie: Rey Lama (entrenador), r), Cristina Silva, Marta Méndez, Begoña, María Herrero, Nuria Figueroa y Carmen Patiño. Abajo: María José, Edita Pereira, Cristina Rey, Raquel y Montse.
As Travesas, 1986. Presentación del Real Club Celta Senior Masculino y Femenino. pos masculinos en el grupo. El sénior se proclamaría campeón Escena insólita: equipos de Tercera División y ascendería a Segunda. El junior fu fue subcampeón gallego y acudió a una Fase Intersector, donde de hizo un papel destacado. A la temporada siguiente desapareció de nuevo el baloncesto masculino del Real Club Celta. ¡Una pena! Había futuro.
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Pabell贸n de la Ciudad ad Deportiva, temporada 1980/81 C铆rculo Mercantil Junior eto (delegado), Ana Presa, Mayt Mayte Gorospe, xxxxx, Rosa Prieto De pie: Fernando Prieto y Rey Lama (entrenador) Agachadas: Cristina de Benito, Rita Tour贸n, Techy Rial, Paula Crespo y Tere Ladero.
Cuatro de mis mejores jugadoras en esta etapa ccomo entrenador del Mercantil Junior: las p铆vots Nuria Vila y Rosa Prieto Prieto, y las alas Techy Rial y Tere Ladero.
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Colegio Montecastelo Infantil, Campeón Gallego De pie: Juan, Miguel Fernández, José María y Ramó Ramón Quirós. Agachados: Ängel, Rafael fael Prieto, Fernando Caride y Héctor Cacharrón (entrenador)
Campo de Granada, 1964, Club Estudiantes Juvenil De pie: Argibay, Jorge, xxxxx, Cobas, Juan Tapias, José Luis Fernández Ferro, Chamorro y Benito Lorenzo (entrenador) Abajo: Vizcaíno, Magdalena, Pololo Cobián Cobián, Corona, De la Osa y xxxxx.
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Centro Médico O Castro, 2009. Antonio Rodríguez, jugador cadete del Maristas Linorsa B, se lesionó de gravedad en una rodilla durante un partido de competición frente al C.B. Vigo, y es visitado por jugadores y cuerpo técnico del Gestibérica Ciudad de Vigo Basquet.
Días antes había hecho conmigo una sesión de tiro en el Pabellón de Baiona. Cuando me informaron del desgraciado per percance, ce, me dio mucha pena que a un chico tan joven le hubiese ocurrido do ese contratiempo. Le deseo una pronta recuper recuperación, y confío plenamente te que cuando salga a la luz este libro, ya esté corriendo rriendo por las canchas de baloncesto con sus compañeros. En la fotografía, los entrenado entrenadores del Gestibérica, Manuel Povea y Alberto Fernández Fernández, y los jugadores Shawn Jackson y Tim Smith,, le hacen una visita en el Centro Médico O Castro, y le llevan una camis camiseta y un balón firmado por la plantilla. El gesto emocionado onado del chico lo dice todo, y las pa palabras de apoyo y de ánimo que le dedicaron, con toda seguridad, le habrán n servido para aliviar su dolor. Es de aplaudir el bo bonito gesto de estos profesionales, sionales, que vienen a confirmar la gran grandeza en valores humanos os que atesora este grupo del Gestibérica. A pesar de su importante lesión, su “coach” Vicente Rodríguez no lo deja vegetar. Me cuentan que lo ha nombrado Delegado de Equipo, y ese cargo, tan cerca de “Cholas” , va a ser de gran ocupación
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Selección Nacional, 1972 Agachadas: Tere Pérez Villota, Pepa Senante, Neus Bartrán, María del Carmen Martínez y Carmen Famadas.
La jugadora céltica María del Carmen Martínez fue la primera viguesa en vestir la camiseta nacional. Ala rápida, de fácil anotación a base de penetraciones, y con un excelente tiro a distancia, iniciaba en esta selección la larga lista de internacionales del Real Club Celta. Por entonces, la actividad de nuestra selección era prácticamente nula, y sólo muy de vez en cuando, se producía un encuentro internacional. El catalán José Lluis Cortes, que fuera base del Real Madrid y 116 veces internacional, resultó designado para solventar este compromiso, aunque sin estar para nada al tanto del baloncesto femenino. De hecho, no volvió a ejercer en el cargo. María del Carmen Martínez se retiró al año siguiente, perdiendo así la oportunidad de volver a ser convocada para la Selección Nacional. Precisamente, a partir de la temporada 1973/74, el equipo español aumenta su actividad, y participa por primera vez en
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los Campeonatos onatos de Europa de categoría senior y junior. En seniors, niors, las célticas Maribel Lorenzo y Carmen Fraile formaron parte arte de nuestra selección; en ju juniors, las representantes viguesas serían, rían, Ángeles Liboreiro y Susana Ga García, además de Carmen Fraile, palentina de nacimiento. nacimiento..
Vigo, año 1974 - Selección Española Junior Arriba: Rosaa Castillo, Carmen Fraile, Marga, Rosa Monsalve y Ana Herrero. En el medio: Ángeles Liboreiro, oreiro, Mercedes Castillo, Natalia Balagué y Ruth Epalza. Abajo: Conchi Navío, Pepa Calvet y Susana García.
Vigo, As Travesas, 1980 - Selección Española Se Senior De izquierda a derecha:: Carmen Martínez, Elena Moreno, Rosa Castillo, Rocío Jiménez, Conchita Martínez, Susana García, Mely Suárez Suárez, Carmen Fraile, Marisol Paíno y Neus Bartrán.
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Temporada 1987/88. Real Club Celta Juvenil Juvenil. Campeón Gallego. De pie: Nieves Lobón, Juana na Ingelmo (entrenadora), Consuelo García, Rosana So Sousa, Ana Lima y Susana Pomar. Álvarez, María Pérez y Patricia García. De rodillas: Loly, Mónica Núñez, Lilian Álva
As Travesas, 1988/89. Club Bosco A Juvenil Juvenil. Campeón Gallego. De pie:: Milagros García, Susana Pomar, Consuelo García, Yolanda Fontenla Fontenla, Kelly García y Ana Lima. De rodillas: María Díaz Díaz, Lilian Álvarez, Patricia García, Mónica Somoza y Rosana Sousa.
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Crónica de Alberto Ovenza en el “Atlántico Diario” sobre una jornada de la competición juvenil femenina en el año 1989. Por lo que se adivina a través de su comentario, existía una fuerte rivalidad. En el Compañía de María daba sus primeros pasos como entrenador, Miguel Méndez. Al Bosco A lo dirigía la excéltica Juana Ingelmo, y Ana Álvarez al Bosco B. Paco Sá Sáez era el preparador del Liceo Marítimo de Villagarcía. A la vista está la calidad de est estos entrenadores. Juana Ingelmo, un año después, ascendería al Xerox Vigo a Primera División. Ana Álvarez, dirigiría a este equipo en la máxima cat cate-
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goría durante varias temporadas. mporadas. Miguel Méndez lle llegaba al R.C. Celta en el 2000,, para proclam proclamarse campeón de la Liga y de Copa.. Paco Saez cubría los primeros tiempos de lo que es hoy el Extrugasa.
En las formaciones de estos equipos descubrimos a jug jugadoras que más tarde llegarían a formar en Primera División: Consuelo y Kelly García, Susana Pomar, Lidia Gesteira… Observamos en las filas del Bosco A a Lilian Álvare Álvarez, años después concejala del Concello de Vigo Vigo; en las del Compañía de María a Blanca González, una de las tres hermanas que jugaron al basket; al Mercantil lo dirige su jugadora sénior Jimy Fernández; en el Liceo Marítimo empieza a destacar Siña Abeijón…
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Después de la liga local, el Sector Gallego se celebraría en Vigo, y el Bosco A, dirigido por Juana Ingelmo, se proclamaría campeón de Galicia. En las filas del Gran Hotel de Lugo, forma el ala ala-pívot Anabel Rojo, que durante varias temporadas jugaría con el Club Xerox-Vigo Vigo en la máxima categoría nacional.
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Febrero, 1979. Inauguración del Pabellón Municipal de Tui. Partido amistoso C.B. Tui-C.D. C.D. Bosco De pie: Mauro, Suso Cobián, Serafín, Pepín, Nacho Arroyo, Solla, Pac Pachi Reigosa, Alejo Solleiro y Martínez Terzado (entrenador del Bosco). Agachados: Rodrigo Puga, Juan Ramón Solleiro, Juan Carlos, Colón, Moncho Lago, Valverde, Wily, Juan, José Curty y Suso Silva.
En el largo periplo del Club Rodaballo por la categoría provincial, allá por la década de los setenta, visitamos en una mañana de domingo la villa tudense para enfrentarnos a un equipo debutante: butante: el Club Baloncesto Tui. Jugamos en una ca cancha de tierra, habilitada provisionalmente en un lateral del ca campo de futbol, y con unas canastas de ma madera, en las cuales resultaba casi si imposible encestar encestar. Los aros, además de estar más altos de lo normal, l, tenían una acusada inclinación hacia arriba arriba, y conseguir anotar en estas circunstancias era toda una hazaña digna de reseñar. Para agravar la situa situación, el piso tampoco se encontraba demasiado liso. Creo recordar que ganamos 25 25-31. En resumen: aquel campo de los inicios del C.B. Tui, fue el peor que he pisado en mis cincuenta y siete años de baloncesto. Hay que admitir que se trataba de una emergencia ocasional, ya que al poco tiempo de ese partido, se inauguraba un estupendo Pabellón de Deporte Deportes. Lo atestigua la fotografía, y a partir de ese momento,, el baloncesto en Tui empezó a crecer crecer.
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Pabellón Municipal de Tui, 1980. Uno de los primeros equipos del Club Baloncesto Tui. De pie: Lino Cendón, Serafín, Jimmy, Muñoz y Juan Ramón Solleiro. De rodillas: Juan Valverde, Solla, Alejo Diz,, Alejo Solleiro y “Huevó “Huevó”.
Hoy en día, año 2009, el C.B. C.B.Tui cuenta con una estupenda cantera, tera, y participa en las competiciones de la Delegación Viguesa en casi la totalidad de las categorías. Su equipo sénior masculino es ya un clásico de la Liga Autonómica Autonómica, en la que lleva compitiendo con notable éxito desde hace más de una década. En los inicios del club, Solleiro, Serafín, Solla… han dedicado generosamente muchas has horas de trabaj trabajo y esfuerzo para poner en marcha la que sería una fructífera cantera. En la actualidad el C.B.Tui es una entidad reconocida, respe respetada y consolidada dentro del panorama regional. Su labor ha calado con fuerza en la sociedad de la villa, y así se lo debieron reconocer los políticos, que en este mismo año han inaugurado su segundo Pabellón de Deportes. ¡Va ¡Vaya suerte!... Aunque dicen algunos,, que la suerte hay que buscarla... y con insistencia. tencia. Las acostumbradas promesas políticas parece que en este caso se han cumplido. El equipo que debutaba a principios de los setenta en aquel campo infame, cuenta ahora mismo con dos estupendos pabellones deportivos.
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Porriño, 1975/76. Círculo rculo Recreativo Cultural Cultural-Xoane Ascenso a Tercera División Nacional De pie: Bernardo, Colón, F. Rivas,, Antonio, Chus y Alberto Alcalde (entrenador). Agachados: Coto, Quique Docampo, Solleiro y Miranda Miranda.
En este campo all aire libre en el Círculo Recreativo Cultural, con este mismo club, y con una planti plantilla similar, comenzó el baloncesto de Porriño a dar sus primeros pa pasos. Era la década de los setenta. Años más tarde empezaría zaría a crecer de una forma arrolladora. De categoría provincial se ascendería a Tercera División, llegaba su primer pabellón, luego el segundo, y pronto se viviría la brillante etapa pa de su equipo d de Liga EBA en los años noventa. Mientras tanto, sus escuelas de base crecían sin cesar, y a actualmente, en el 2009, el Club Porriño B.B., desde hace ya bastantes temporadas, constituye tituye una cantera inagotable de jugadores, tanto masculinos sculinos como femeninos, y se mantiene durante más de una década como el primer er club de la DVB en número de licencias. Alberto Alcalde, Giráldez, ldez, Enrique Docampo, Suso Silva… con su esfuerzo y dedicación de muchos años, han sido personas fundamentales en los comienzos. LLuego llegaría el presidente Manuel Valverde,, para dirigir los tiempos del club en Liga EBA.
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Temporada 1983/84. Club Efeco, Campeón de la Liga Provincial De pie: Paco Conde (directivo),, Serafín Ocaña, Crespo, FFrancisco Rivas, Felipe Martín, José Manuel Díaz, Antonio López y Emilio Ledo (delegado) (delegado). De rodillas: Cholo Gonzalo,, José María, Guillermo Alv Alvarellos, Ángel Diego y Blanco.
Club Canon-Ademar, un clásico de la Liga Local de la Delegación Viguesa. En su haber cuenta con varios títulos de Liga y de Copa. De pie: Paco Martín (delegado), Quique Fernández, A. Parada, Pedro González, onzález, Nico y Jacobo Caruncho. De rodillas: Gonzalo Seijo, Lito Marzoa, zoa, Ángel Caruncho y Pablo Caruncho.
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Santiago de Compostela, 1961 Vigo. Segunda Nacional SEU de Santiago-Estudiantes de Vigo
Se juega en el Gimnasio Universitario Universitario, que había sido habilitado como cancha de baloncesto durante los años cincuenta y sesenta. ta. Junto al Gimnasio de la E.N. Bazán de Ferrol, y poco después, junto al Palacio cio de Deportes de Lugo, eran lo los únicos campos cubiertos de toda Galicia en aquella época. Se puede apreciar que entre el rectángulo de juego y el público blico no existía separación alguna, y en los partidos con lleno, como el de la foto, los aficionados se te tenían que apartar para permitir al jugador sacar de banda. Las canastas estaban ancl ancladas a las paredes de los fondos, dos, y la “grada” no era otra que el pequeño pasillo superior -sólo sólo por un lateral lateral- que se observa abarrotado. A lo largo de esa década década, en esta cancha me ha pasado de todo. La escena que recoge la fotografía fotografía, corresponde a un partido decisivo contra el SEU, en el que perdimos la Liga, y yo me lesioné de una contractura muscular a los cinco minutos. En esta cancha, por protestar al árbitro, me expulsaron del campo por segunda vez en mi vida deportiva, y dicho sea de paso, con todo merecimiento. En esta cancha hice uno de los partidos más brillantes de mi historial. Con un abarrote de público espectacular, lle gana-
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mos a un formidable SEU en la disputa de un trofeo amistoso, y mi equipo, el Estudiantes, estuvo imponente ese día. Yo anoté 19 puntos, y le hice un marcaje impecable a Carlos Lamela, el mejor base gallego de aquellos tiempos. En esta cancha, una jugadora del Estudiantes muy allegada, disputando un partido de los Juegos Universitarios, rompió el acta al finalizar el encuentro en el momento de ir a firmarla como capitana. Habían sufrido un bochornoso arbitraje, y ya lo anunció: “No voy a firmar el acta… Si voy, la rompo.” Recibió varias amenazas de inhabilitación de por vida y otras lindezas, pero nadie en definitiva se atrevió a tomar represalias después de aquella escandalosa encerrona que tuvieron que soportar las viguesa de la Escuela de Comercio. En Santiago, con los arbitrajes, podía ocurrir cualquier cosa, siempre con una inteligente sutileza cuando se trataba de barrer para casa. En esta cancha, siendo entrenador del Celta Masculino de 3ª División, y jugando contra la S.D. Compostela, sufrimos la “barrida” más sutil que haya tenido sobre un campo de baloncesto. A nuestro mejor jugador, José Torres, “lo cargaron” con cuatro personales al minuto 7, y hubo que cambiarlo. En ese momento, el resto de sus compañeros no tenía ni una sola personal, lo que parecía dar a entender una total neutralidad en el arbitraje. Como aún así no podían con nuestro equipo, a continuación, el club local levantó una diferencia de 18 puntos a base de personales de banda -no había cupo como ahora- convertidas en personales de tiro sin más. Al descanso 31/32, y los santiagueses habían convertido 21 puntos en tiros de personales. Al final, naturalmente, perdimos. En esta cancha, con el Estudiantes Femenino, ganamos un Sector Interzonal, que nos llevaría días después a Madrid para conseguir el Campeonato de España de Tercera División y el ascenso a Segunda. En esta cancha, el SEU de Santiago tuvo grandes equipos durante esos años. Amparándose en su condición de ciudad universitaria -la única de Galicia-, reunía unas formidables plantillas con los estudiantes llegados de toda España, y también con la presencia de muchos sudamericanos, por entonces, bastante asiduos a la Universidad compostelana.
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En este recorte del “Atlántico Diario” se recoge con claridad lo que fue aquella temporada para el Real Club Celta Masculino: UN DESASTRE
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El bonito cartel anunciador del europeo junior del 68.
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Pabellón de As Travesas, esas, agosto, 1968 III Campeonato de Europa Junior Masculino Masculino. Ceremonia inaugural. Las doce selecciones participantes alineadas frente al palco presidencial. En primera fila, los árbitros del torneo.
Vigo estrenaba su recién inaugurado Pabellón de Depo Deportes con un Europeo Junior nior que aún hoy en día permane permanece en el recuerdo de los que tuvimos la oportunidad de presenciarlo presenciarlo. Nunca en nuestra ciudad se había visto un baloncesto de tanto nivel. Las selecciones de Rusia, Yugo Yugoslavia, Italia, Bulgaria… además de España, ofrecieron un espectáculo sin precedentes precedentes. La ciudad disfrutaba de su ansiado Pabellón de Deportes y lo celebraba con un torneo que haría historia. Rusia se procl proclamaba Campeona de Europa en una final contra Yugo Yugoslavia, que hizo el delirio de los espectadores. En Vigo comenzaba su andadura una generación de extraordinarios jugadores que marcarían una época en el concierto europeo: los italianos Dino Meneg Meneghín, Renzo Baribiera, Massimo Lucarelli; los rusos Alexandr Belov elov -el anotador del último cesto decisivo, con tres segundos de posesión y balón en la canasta propia, que les valió el oro y levantó la polémica mundial sobre su validez, en la famosa final olímpica URS URSS-USA de los Juegos
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de Munich-,, Eugeniy Kovalenko, Saulus Patkauskas; los yugosl yugoslavos Zoran Slavnic, Dragan Kapicic, Vinko Jelovac; los españoles Cristóbal, Luis M. Santillana,, Gonzalo Sagi Sagi-Vela, Alfredo Pérez, Estrada, Carmelo Cabrera,, Luis Costa Costa… Al éxito de la competición desde el punto de vista técn técnico, hubo que añadir la extraordinaria asistencia de aficionados, la atención que los medios y autoridades locales prestaron al campeonato, y una perfecta organización dirigida por el vigués Manuel Benito, secretario de la Federación Gallega Zona Zona-Sur.
Escena de uno de los partidos de España. Los pívots españoles Cristóbal Rodríguez (6) y Luis Miguel Santillana (4) (4), no pueden evitar la canasta del jugador rival bajo el aro.
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España-Checoslovaquia.. El madridista Cristóbal Rodríguez intenta un palmeo que parece conseguir, a pesar de la presencia cercana de cuatro rivales. La selección española dirigida por Antonio Díaz Miguel realizaría un buen papel consiguió un quinto puesto-,, en un tiempo en que España se movía en la más abs absoluta mediocridad dentro del ranking europeo. Años después empezaría a escalar posiciones más relevantes.
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A raíz del Europeo Junior, se celebró en paralelo el curso anual de entrenadores nacionales -el máximo nivel-. Tres vigueses y un ferrolano consiguieron el título: Julio Castro (Estudiantes), García Migón (Bosco), José C. Freijeiro (Álvarez) y Francisco Picos (jugador en activo del Estudiantes). Este últ último, alcanzaría el número 1 de la promoción, por delante, entre otros, de Aito García Reneses Reneses, número 2, jugador del F.C. Barcelona.
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En la década de los sesenta, se suscitó en el mundillo del basket europeo el debate sobre la conveniencia de establecer categorías según la estatura de los jugadores. Nuestro país, por entonces con graves problemas de centímetros en sus componentes, era una de las naciones que lideraba esta corriente de
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opinión, y apoyaba con enorme interés el novedoso proyecto, pensando en buena lógica que en ese nivel podríamos tener muchas posibilidades de destacar. ¿Por qué no podían los bajitos jugar al baloncesto con opciones de éxito igual que los altos y los altísimos altísimos? Así como en el boxeo había varias categorías según el peso de los deporti deportistas, en el baloncesto también se podrían crear en razón de la estatura. n junio de 1967 se juega el “I Torneo InterPor fin, en continental 1,80” en la Ciudad Condal Condal, organizado por la FIBA en plan experimental, tal, y con la colaboración entusiasta de Esp España. Debió resultar un fracaso total a juicio de los técnicos inte internacionales, puesto que nunca más se volvió a experimentar en dicha idea. Enorme batacazo para los que apoyaban la novedad. Sospecho, que al igualar la altura de los jugadores, se per- día como consecuencia la auténtica esencia del basket: un “grande”, que coge los rebotes y juega siempre cerca de la ccanasta en defensa y en ataque;; un “pequeño” “pequeño”, que corre con el balón hábilmente, dirige y distribuye el juego juego; y un “mediano”, que juega a medio camino del aro, ni lejos ni cerca, y que entra y tira de lejos. Esto no es otra cosa que baloncesto elemental. A los monitores de las categorías gorías inferiores inferiores, les recordaría a menudo que no se olviden nunca de enseñar este concepto base de lo que es el basket. En el siglo anterior y en el presente nuestro deporte sigue teniendo la misma esencia. Jardín Park, 1957 1957. Estudiantes de Vigo Vigo-Selección del portaaviones americano “Camberra”.
Staples Center, 2009. Ángeles Lakers LakersOrlando Magics.
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Algunos aficionados se creen que sólo con el talento ya es suficiente. ¡Enorme equivocación! Al talento hay que darle de comer todos los días… y si no es así, se quedará absolutamente en nada. Se lo comerán los físicos, los trabajadores, los luchad luchadores, los esforzados… Le pasarán por encima. Hay poca conciencia en el gran público de lo mucho que trabajan estas figuras del deporte como Pau Gasol. Pau Gasol, recién conseguido su anillo de la NBA, y ap apenas llegado a España, ya se po pone a trabajar con su preparador Pepe Casal,, para mantener y cuidar al máximo sus condiciones físicas. Siendo Casal preparador físico del F.C. Barcelona, año 1999, empezó a cuidarse del jugador más grande del baloncesto español de todos los tiempos. El entrenador del Barça, Aito García Reneses, se lo entregó con especial recomendación. Un chico espigado, con 19 años, de 2,12 de estatura y 89 kilos de peso, iniciaba su carrera meteórica hacia la NBA.
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Contaba Pepe Casal en una entrevista de radio, que en muchos días de descanso para la plantilla, a Pau se le obligaba a acudir al gimnasio. Al principio iba enfurecido… pero pronto aprendió la lección que los maestros, Aito y Pepe, le estaban enseñando.
Sin duda, el mejor jugador de Europa de todos los tiempos.
(En octubre de 2009, ha alcanzado tal nivel de popularidad en Estados Unidos, que hasta tiene un pequeño papel en un par de series de TV.)
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Es la a mejor noticia que podíamos recibir antes de cerrar esta tertulia. El 24/9/09,, a una semana del comienzo del ca campeonato, llega la confirmación:: e el “Gesti”, ahora con el nombre provisional de “Ciudad de Vigo Basquet”, y después de las múlt múltiples agonías del verano, saldrá por fin en la próxima Liga Adecco Oro. De momento la buena nueva es suficiente, no podemos ni debemos pedir más. “El milagro Povea” hará el resto, y de hecho, el primer milagro ya se ha producido: esperar hasta el último instante porr el equipo de Pepe Conde Conde… contener a varios buenos jugadores es para que rechazasen ofertas, y aguardasen como él a la resolución favorable vorable de la FEB de incluir al club vigués en la segunda liga española. Con el más modesto presupuesto de la categoría, la m mano milagrosa de Manuel Povea conseguirá lo demás, que no será otra cosa, que dar la cara con dignidad, salvar el descenso, y ¿quién sabe si lograr algo más? De antemano, ya se alcanzó un objetivo inmejorable:: la continuidad por una temporada más. Se comenta que tan sólo un jugador del CAI Zaragoza, la estrella del equipo desde luego, va a cobrar una ficha equivalente a todo el presupuesto del “Ciudad de Vigo Basquet”.
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La empresa,, a la vista está, se presenta bastante complicada. No se precisan grandes conocimientos baloncestísticos para darse cuenta. Se inicia inevitablemente un camino tortuoso, lleno de dificultades de todo tipo, pero también se abre una e esperanza, esperanza casi milagrosa, pero esperanza… El baloncesto to vigués se queda en deuda con Pepe Conde y sus colaboradores, y con Manuel Povea y sus fieles jugad jugadores. Sin su esfuerzo, sin su riesgo, sin su audacia audacia… sin su enorme corazón, Vigo se quedaría privado otros veinte años de un basket de nivel.
Los artífices de la participación: Pepe Conde Conde, con la solución económica, y Manuel Povea, con la solución técnica.
¡NUESTRO EFUSIVO HOMENAJE! … y qué el “Ciudad Ciudad de Vigo Basquet” continúe por muchos años… y ¿quién sabe?, la ACB puede lleg llegar. La esperanza debe permanecer viva… ¡MUCHA SUERTE!
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ÍNDICE Página I La presentación de “Del patio al “siguing” ........................ 11 II Mi año cincuenta y siete… y más… ....................................... 30 III El cuarenta aniversario ...................................................... 55 IV Ecos del Rodaballo ........................................................... 136 V ¿Cómo anda la cantera? ..................................................... 151 VI Huellas… de los cincuenta y sesenta .................................. 179 VII ¡Qué cosas! .................................................................... 246 VIII El Club Deportivo Bosco ................................................. 263 IX Espectadores… ................................................................. 338 X Escenas ............................................................................. 361 XI Personajes ....................................................................... 374 XII Galería de imágenes ....................................................... 391
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Mucho nos gustaría tu intervención en nuestras charlas, a través de tus comentarios, de tus fotografías, de tus recuerdos, de tus anécdotas… y ¡¡también de tus críticas!! luisalbertoreylama@gmail.com
¡Mil gracias!
Muy pronto <<CHARLAS
BAJO LA CANASTA>>
Charla tercera
Bodas de platino + 5 Charlaremos de los orígenes del baloncesto vigués, de los “secretos” de Carlos Núñez, del Club Ademar, de la cantera, de estampas de los cuarenta y cincuenta, de las sagas familiares de nuestro basket, del Círculo Mercantil Femenino, del regreso del Obradoiro… y abriremos la clásica “Galería de imágenes”.