«HORIZON» Santiago Vélez - Jenny Owens
HORIZON 24 de abril de 2019 - 8 de junio de 2019 Santiago Vélez y Jenny Owens Artistas Manuela Velásquez Directora Sara Daniela Guarín Diseño Galería Lokkus Arte Contemporáneo Cra 36 #10A - 35 (Edficio La doble Elle) Medellín / Colombia www.lokkus.com 2019
«HORIZON» Santiago Vélez - Jenny Owens
«Hacia el insondable reflejo del HORIZONTE» Los traslados territoriales practicables tanto sobre el desierto como sobre el mar son experiencias definitivas que exponen al hombre a vagar por espacios de una nada extrema. Estos espacios se tragan todos los confines, la falta de referencias físicas y visuales para la orientación los convierte en lugares de gran incertidumbre y peligrosidad. En ellos, aparece el horizonte como uno de los intersticios más enigmáticos de territorialidad. Su presencia es engañosa, atisbamos a ver una línea imaginaria e inalcanzable que solo se debe a nuestra visión en la lejanía. En él se dan situaciones paradójicas irresolubles como espacio de esperanza y de pérdida, de atracción y de abandono, de aspiración y de fracaso. Conlleva el vértigo de adentrarse en un exclusivo territorio de ausencias. Se trata de un confín inestable que separa dos esferas de vida que están en nuestras mentes, en los deseos o en las proyecciones de superación en cada personal construcción del mundo, a la búsqueda de una promesa de vida al otro lado. Una trémula línea de luz describe habitualmente la imagen del horizonte. A partir de ese linde intangible al que nos enfrenta el reflejo de un horizonte, la artista irlandesa Jenny Owens y el artista colombiano Santiago Vélez dialogan con importantes significados que subyacen en él. Los intereses generales de la artista Jenny Owens (Dublín, Irlanda, 1983) se han centrado desde muy temprano en cómo funciona nuestra mente al mirar, consciente de las limitaciones de nuestra visión al observar el mundo y, por tanto, de la conveniencia de preguntarnos que se oculta tras las imágenes que obtenemos de él. Para ello utiliza una mirada tangencial, indirecta, que pone énfasis en los rastros como indicios fiables de la realidad. Su atención se centra en las relaciones entre lo visible y lo intangible, entre el dentro y el afuera de cada delimitación con el objetivo de fusionar las distancias incluso hasta revertirlas, empujada por la convicción de que los espacios limítrofes son barreras borrosas que absorben el sentido de las cosas, donde convergen las propias historias de ambos lados. Guiada por un especial interés que con frecuencia está presente en su trabajo artístico, el de los movimientos en libertad de los animales, el mes de marzo de 2018 Jenny Owens se dirige a Tarifa, el lugar más meridional de España situado en la provincia de Cádiz, para asistir a las migraciones de pájaros que masivamente atraviesan cada año el estrecho de mar que les permite pasar de África a Europa. Pero como ella misma comenta “no había aves, demasiado riesgo para que volaran. Aprendí que la migración es muy imprevisible y las aves esperan en las playas de Marruecos si hay mal tiempo”. Al otro lado, han de calcular cual es el momento climático favorable para no sucumbir en el intento de atravesarlo. Se encontró, sin buscarlo, ante el espacio metafórico de una espera.Una vez allí se siente interpelada por un elocuente e inquietante horizonte, vacío de vida, desde el cual debían venir las aves esperadas. La artista había ido a observar la fuerza de su libertad inscrita en el paisaje, pero la absoluta ausencia de pájaros le hizo prestar atención a un fuera de campo que le proporcionaba una no menos importante información indirecta sobre ellos. Optó por explorar ese límite marino y fotografiar aquello “que debían ver al llegar, los lugares por donde pasa la migración”. Desde esta inesperada observación tangencial el “mundo alrededor del mar”, su mirada pretendía undirse en la supuesta mirada de las aves. Con paciencia y sigilo fue capturando diversas escenas
como el persistente resplandor formando un hilo de luz blanca en esa línea temblorosa que dibuja el horizonte, pequeños buques perdiéndose en la neblina, una amenazante losa grisácea de cielo tormentoso, oleaje bravío contra las rocas, nubes agazapadas en las montañas, casas, faros y señales abandonados como ruinas atentas ante ese mar insaciable, sinuosos senderos desérticos, o pesadas siluetas de animales que asoman en aquel paisaje salvaje (cada vida salvaje ignorando a la otra) vagando solitarios en los límites costeros, ajenos a las turbulencias marinas y pluviales. En contraposición a la inminente y compacta invasión aviaria habitual en aquel vasto escenario, el clima sombrío de un territorio expectante le ofreció efímeros rastros, visiones entrecortadas, indicios inconexos. Una extensa cartografía de situaciones ordinarias un tanto irreales que ahondan conceptualmente en las ilusiones de la percepción, como la luna gigante cayendo y deformando aparentemente la línea plana del lecho del horizonte marino. Owens tomó conciencia de que había tropezado con otro aspecto de gran interés para sus habituales propósitos de confrontarse con situaciones limítrofes. La interrogación, una vez más, de cuál es la imagen idónea de ese nuevo límite proporcionado por un mar entre continentes, para continuar planteándose como “se puede mirar mejor” y “ver algo más allá” de las cosas concretas o conocidas. El repetido fenómeno cíclico de la naturaleza animal que había ido a observar perdió sentido frente a estas nuevas indagaciones visuales en un doble lugar donde no hay encuentros posibles. Por un lado, el horizonte geográfico a nivel del mar es un lugar en constante cambio ya que es una intersección ficticia entre la tierra en su estado acuoso y el cielo, que a cada instante se renueva. Y, por otro lado, el punto de encuentro entre los dos mares también es relativo como tal, ya que las aguas frías y poco salinas del Océano Atlántico se quedan en la superficie, mientras las más cálidas y salinizadas del Mar Mediterráneo se instalan en las corrientes del fondo, de manera que se sobrellevan sin llegar a fundirse unas aguas en las otras. ¿Cómo visualizar esas dos masas de agua con propiedades tan dispares que no se mezclan entre sí?, ¿cómo fotografiar el lugar donde dos límites invisibles se tocan?. De ahí surgen los dobles horizontes basculantes vistos a través de los ventanales-ojos de un barco, con los que hace referencia explícita al desencuentro de los dos mares. Sus conclusiones personales han sido que “un horizonte escapa como una mariposa (hasta convertirse en) un horizonte de mariposas”. Lo que significa constatar que había situado la cámara ante algo inasible, efímero y evanescente. La huidiza fragilidad que registran las imágenes de Jenny Owens procede de haberse enfrentado a la intersección de dos mares desde la observación fenomenológica de una materia multicromática que, en sus luces, opacidades y oscuridades, es puro reflejo indescriptible. Con las fotografías obtenidas en este incierto punto geográfico entre dos continentes la artista en cierto modo ha rescatado la vida latente de la travesía, no sabemos aún si placentera u hostil, que toda acción de libertad conlleva. Santiago Vélez (Medellín, Colombia, 1972) lleva casi una década analizando asuntos de frontera relacionados con el agua como horizonte metafórico de desigualdades, como barrera divisoria entre sistemas de vida. Sus primeros enfoques se centraron en la extracción manual de mercurio en
los ríos colombianos, en una mirada de delicada desnudez hacia unas explotaciones mineras con alarmante falta de salubridad para la población. A su llegada a Barcelona hace seis años realiza constataciones sobre la noción de ribera, la línea de tierra que está a ambos lados de una corriente de agua, y descubre que la palabra rival deriva de este término lingüístico, lo que le reafirma en la conceptualización del agua como línea divisoria que con frecuencia proporciona desencuentros irresolubles. En 2015 se propuso realizar un estudio sobre tensiones de frontera reales en su propio país, para analizar una importante ruta migratoria que se da en el Golfo de Urabá, una zona limítrofe del Caribe colombiano que linda con Panamá. Decidió explorar in situ, no sin dificultades, las condiciones de vida durante una parte del trayecto por el río Atrato, por el que peligrosas mafias conducen a los migrantes (en su mayoría cubanos, pero también africanos y asiáticos) hasta depositarlos en la espesa selva virgen del Darién que une ambos países. En la video-instalación resultante “Aquí no se moja nadie” el artista reflexiona sobre la superación humana en aquel arriesgado viaje emancipador y se enfrenta a los pactos de silencio e intereses en fricción, a las coerciones, a las ilusiones y a los temores, en aquel lábil y complejo límite territorial impuesto por la política de las naciones a la selva y al agua. El artista pone aquí el foco en un desconocido lugar de intensos flujos humanos que abusa del espejismo de la libertad buscada más allá del territorio de origen. Paradójicamente, frente a ese anhelo de liberación que implica trasiegos a veces infructuosos, precariedades y deshumanización para muchos colectivos humanos, allí tropieza con una tribu indígena, plenamente enraizada en aquella vasta zona por derecho ancestral con sus viviendas instaladas sobre el propio río, que podía circular sin problemas entre países a través de toda esa extensión acuosa y, sin embargo, entendía peyorativamente el concepto libre como sinónimo de desarraigo de lo propio y de extraña inclinación a un desamparo incomprensible. Tres mujeres indígenas interpretaron con una técnica textil ancestral (molas) las distintas rutas migratorias del lugar. En estas sencillas obras femeninas se funde una contradictoria percepción de la libertad, que habla del distinto modo que tienen las poblaciones humanas de conceptualizar territorio, naturaleza e historia. El encuentro de Vélez con Europa le hizo tomar conciencia de otra masa de agua conflictiva, el Mar Mediterráneo, un mar que a pesar de su plácido aspecto se traga infinidad de esperanzas y sueños en las crecientes migraciones humanas procedentes de África que se están dando en esta década. Preocupado por esa cuestión migratoria, se ha centrado últimamente en este lugar de constante traslado de personas abandonadas a su suerte, con el fin de concienciar al espectador de la doble cara de ese manto de agua como una temible tumba para muchos. En la instalación “Línea roja” una caja de luz hace aparecer en el horizonte una fina línea roja que se apaga y se enciende intermitentemente, una señal de alerta que por instantes viene a ocupar el lugar del magnético filo blanco que seduce la visión. El artista reflexiona al respecto “siempre he pensado en la sensación de ver el horizonte y no saber que es lo que depara ese pequeño fragmento de futuro que está ahí delante. Creo que debe ser el estado de incertidumbre máximo”. En el sustrato de sus obras está la experiencia vivida por los marinos rescatadores en las operaciones de Salvamento, quienes aluden a la dependencia de los despachos administrativos para salir al rescate, a los ínfimos segundos que separan la vida del ahogamiento, a los gritos nocturnos sin poder identificar a las personas en el agua, a las decisiones de a cuantos poder rescatar, a esa otra visión que no tenemos (desde la orilla) del mar enfurecido y engullidor….
Hay un pequeño texto que Vélez utiliza, escondido dentro de sus obras, a modo de resumen de este estado de la cuestión, The terrible thing about the sea is dying of thirst (lo terrible del mar es morir de sed). Es una frase extraída de Nietzche que define literalmente lo que subyace en la incesante búsqueda de un lugar ansiado para renacer en una vida nueva, el dilema de haber de enfrentarse a la posible muerte por la paradójica carencia de una materia que a su vez está actuando como vía de escape. El radical doble rol del agua. El artista trabaja con la idea de horizonte como cautivador lugar en el que se fraguan muchas esperanzas que impelen al hombre a atravesar hacia el otro lado esas aguas, con el objetivo de huir de estadios de vida insufribles en sus países de origen, propiciados por guerras, genocidios de estado o pobrezas endémicas. Habla en voz universal. Y para ello ha creado incisivas metáforas sobre las peligrosas condiciones de la travesía, con las que da a ver el sobrecogedor precio que comporta la consecución de un futuro digno. Las obras de Vélez hacen que nos preguntemos acerca de tantos seres humanos depositados en ese fondo oscuro, cuando se sucumbe para siempre en la experiencia abismal del horizonte. Y, sobre todo, ¿por qué ha de ser así ?. Sortear las aguas, ese gran linde natural entre países, tan opacas como los futuros que prometen, continúa siendo la más preciada esperanza para muchos individuos, pero Vélez alerta de que estas aguas se están convirtiendo en un gran y silencioso lugar que invisibiliza profundos dramas sociales. Su obra apela a miles de microhistorias que los hombres arrastran consigo al decidir surcar esos espacios líquidos de libertad sin garantías.
Teresa Blanch (Barcelona, 1952) Profesora en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona, de la que fue decana, y directora del Máster ProdArt de la citada universidad. Colabora regularmente con revistas especialidazas de España y el extranjero, además de escribir ensayos para museos y centros de arte contemporáneo.
Santiago Vélez
Medellín, Colombia. 1972 santiagovelez.net Maestro en Artes Plásticas (1999) con posgrados de Especialización (2003) y Maestría (2011) en Estética de la Universidad Nacional de Colombia, Maestría en Producción e Investigación Artística (2016) y actualmente en curso el Doctorado en Estudios Avanzados de Producciones Artísticas de la Universidad de Barcelona con el cual obtuvo la Beca para colombianos en proceso de formación artística y cultural en el exterior, Ministerio de Cultura de Colombia. Ha realizado las exposiciones individuales Mar de Fondo y El Mar que se Convirtió en Frontera (2018), Puertas al Mar y Ley de Páramos (2017), Los Límites del mar (2016), Náufragos (2015), Fluvial (2012 y 2011), Objetos de Agua (2010), Disoluciones (2008) y Paisajes de Agua (2005) y expuesto en diferentes eventos a nivel nacional e internacional como Medellín, une histoire colombienne Des années 1950 à aujourd’hui en el Museo Les Abattoirs de Toulouse, Francia (2017), Volta Show en Basilea, Suiza (2017), el Salón Nacional de Artistas URGENTE 41 (2008), el Salón Regional de Artistas (2015, 2009, 2007, 2003 y 2000), el MDE15 Encuentro internacional de arte de Medellín (2015), el Segundo Premio Bienal de Artes Plásticas y Visuales Bogotá (2012), ArteCámara (2012), la Bienal de Bogotá (2000, 2009), entre otros. Ha estado en los proyectos de residencia Puerto Contemporáneo (Cartagena, 2018), ProdArt Fabra i Coats (Barcelona, 2016) Contraexpediciones – Museo de Antioquia (Medellín-Belmira, 2014) y Residencia Mayo en Urra, (Buenos Aires, Argentina, 2014). Algunas de sus obras se encuentran en colecciones públicas como la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República, el Museo de Antioquia, el Museo de Arte Moderno de Medellín, el Museo Universitario Universidad de Antioquia; y en colecciones privadas como Arte al Límite Latinoamérica, Suramericana de Seguros y Argos. Se ha desempeñado como docente investigador en varias universidades de Medellín, fue co-director y fundador de Casa Tres Patios (www.casatrespatios.org), dirigió el Centro de Desarrollo Cultural de Moravia (centroculturalmoravia.org), co-dirigió la Fundación Cultural Viajelogía (www.viajelogia.org) y ahora coordina las convocatorias de estímulos de la Secretaría de Cultura de Medellín. Vive y trabaja en Medellín y Barcelona.
Europa Técnica mixta con puas y baño de oro Edición 1/5 + 1 P/A 38 * 48 cm 2018
Mar de fondo Impresión digital en acrílico Edición 1/3 + 1 P/A 7 * 250 cm 2018
El mar que se convirtio en frontera Escultura en alambre de puas EdiciĂłn 1/3 (TamaĂąos distintos) 10 * 7 * 147 cm 2018
Cortando fronteras - Fuga Malla metalica con baĂąo de oro 35 * 50 cm 2018
Linea roja Impresiรณn digital en caja de luz Ediciรณn 1/3 +1 P/A 38 * 65 cm 2018
Linea roja Impresiรณn digital en caja de luz Ediciรณn 1/3 +1 P/A 38 * 65 cm 2018
Jenny Owens Dublín, Irlanda. 1988
jennyowens.net Licenciada en Bellas Artes de La Universidad de Barcelona (2012), con Máster de Producción e investigación artística, La Universidad de Barcelona (2016) y actualmente en curso el Doctorado en Estudios Avanzados en Producciones Artísticas en La Universidad de Barcelona con la tesis titulada: “Relatos de lo intangible: La memoria y la narrativa en el arte.” Ha participado en las exposiciones colectivas Horizon, Tasneem Gallery Barcelona (2019), Horizon, Pontarte, Maastricht, Holanda (2018), La presencia del presente, Mufata, Barcelona (2018), Green in Art, Pontarte, Maastricht, Holanda (2016) Residencies fic-ProdArt16, Centro de Arte Contemporáneo, Fabra i Coats, Barcelona (2016), (expone desde 2010) 2015 - 2017: Biennale Jeune Creation Européenne. Le Beffroi, Ville de Montrouge, Paris; Kunstbygningen i Vrå, Dinamarca; Hala Stulecia. Wroklaw, Polonia; Science and Art center “Bruzis”. Cesis, Latvia; Spazio culturale Antonio Ratti. Como, Italia; Museu de l’Emporadà. Figueres, Catalunya; Amadeo de Souza-Cardoso Municipal Museum. Amarante, Portugal. Ganadora de beca de creación artística, La Fundación Guasch Coranty, Barcelona (2014). Su obra hace parte de las colecciones de Escultura en el patrimonio cultural de la Universidad de Barcelona (2012) y Fotografías en la colección artística del banco de Sabadell (2012) Realizó la residencia Fabra i Coats – Fábrica de Creación, Barcelona (2016) Actualmente vive y trabaja en Barcelona
Tarifa FotografĂa digital EdiciĂłn 1/6 Dimensiones variables 2018
Two seas Fotografía digital Edición 1/6 10 * 16 cm 14 * 20 cm 2018
Two seas Fotografía digital Edición 1/6 15 * 25 cm 2018
Moving horizons FotografĂa digital EdiciĂłn 1/6 10 * 16 cm 2018
Tarifa Series Fotografía digital Edición 1/6 16 * 24 cm 2018
Tarifa Series Fotografía digital Edición 1/6 14 * 14+ cm 2018
Two seas series Fotografía digital Edición 1/6 15 * 40 cm 2018
HORIZON se expuso en 3 galerías de arte contemporáneo entre el 2018 2019. Las gallerias involucradas son: PonteArte en Holanda, Tasneem Gallery en España y LOKKUS Arte Contemporáneo en Colombia