ESCUELA DEL TERROR

ESCUELA DEL TERROR .

VOL. I INTRODUCCIÓN A LA VIOLENCIA

La violencia es el poder de despojar a los cuerpos de la persona que los habita y usarlos como bandera del terror.

B i e n v e n i d x .

Usted ha elegido acceder a las bellas artes de la violencia y el terror. Este documento introductorio le enseñará a pensar los cuerpos como instrumentos de su poder.

Este curso le mostrará las técnicas más efectivas para la aniquilación, la tortura y la importantísima siembra del miedo.

Incluímos por supuesto, tips para el uso del lenguaje, que nos empodera y destruye a nuestras víctimas.

Le recordaremos también las ventajas de ser parte de nuestra LA ESCUELA DEL TERROR.

Capítulo 1: Grandes ideas violentas Capítulo 2: El poder del Terror Capítulo 3: La jerga del Poder

CapĂ­tulo l .

Grandes ideas violentas

Cómo generar las deshumanización de las víctimas para entenderlos como un medio de comunicar la violencia, instrumentos y posesiones, qué se hace para ello y por qué, cómo se enseña y cómo se transmite la labor del terror.

No es una mera práctica que se realiza de manera sistemática, pues lleva consigo un acto de alta consciencia en cada pequeña acción, se habla de que más que lo que hace la herramienta es cómo se utiliza la herramienta. Un acto performativo.

“La herramienta que tenga buen filo, ya se sabe por dónde se va a hacer el corte y no se necesita de fuerza. Se necesita de técnica.”

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Grandes ideas violentas

Bienvenido entonces a LA ESCUELA DEL TERROR, una vez tenga lista toda su indumentaria podrá incorporarse y empezar con nosotros a aprender el noble oficio de la violencia. Primero nos gustaría saber su procedencia y qué hacía en el pasado, pues así podremos sacar provecho de sus habilidades particulares, es decir, si sabe usar una pala o un azadón, matar un cerdo o alguna otra cosa, nos sirve.

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Grandes ideas violentas

Ahora bien, debe entender todo lo que nos mueve, el cómo y el por qué aquí se hace lo que se hace.

Secuestrar, desaparecer, torturar, matar y enterrar a tantas personas no es un trabajo sencillo que cualquiera pueda hacer, y es por eso que usted está aquí, para entender que toda la gente que retenemos está aquí por alguna razón, bien sea porque son traidores y pueden brindarnos alguna información relevante, o simples ejemplos que se utilizan para omunicar un mensaje. Y usted se preguntará: ¿Para qué?, pues bien, eso se lo explicaré más adelante, ahora lo que nos compete es que usted entienda que estas personas al no tener libertad, ya ni nombre tienen, nadie sabe quienes son o que son nuestras, no saben dónde están ni dónde van a terminar, es decir que nadie las busca o que simplemente ya ni existen.

Así que por culpas o remordimientos no se preocupe. Usted solo haga lo que se le ordena con obediencia y recuerde que ahora usted tiene el poder sobre esas personas, y que su poder se perpetúa a través de lo que le hace a esos cuerpos, usted adquiere el poder de infundir miedo en quienes lo rodean. Cada muerto va con usted y cada cuerpo es una nueva medalla.

Ahora lo segundo, y aquí es donde se tiene que empezar a concentrar: Si quiere que esta gente hable o que por el contrario se queden callados para que no hagan ruido, usted tiene que hacerles algo, pero enserio, la amenaza aquí se nos queda muy corta y hay que demostrarles que a nosotros nada nos queda grande para que así se sientan pequeños frente a nosotros.

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Grandes ideas violentas

Ya verá como todo es muy sencillo, cada nuevo cuerpo es como una hoja en blanco para que usted haga uso de su creatividad, tiene a su disposición cuchillos, palos, ladrillos, varillas o incluso fusiles y pistolas, la herramienta la decide usted, la técnica se la enseñamos nosotros. Por ejemplo usted les puede chuzar un ojo, les saca uno que otro diente, los quema en algún lado o les pasa corriente. Eso sí, siempre puede cascarlos duro, que es lo más rápido y fácil, pero con cuidado de no matarlos siempre y cuando nos sirvan. Esto como ya le dije, es para que esta gente aprenda cómo debe comportarse con nosotros, que ya son nuestros y nosotros decidimos qué pasa con sus cuerpos, mejor dicho, para que hagan caso.

Y tercero, pero no menos importante, cuando esta gente ya no tiene utilidad alguna, deben desaparecer. Para ésto le preguntábamos qué sabía hacer, ya que todo lo que aquí se hace, conlleva una técnica y se tiene que realizar correctamente. Ahora, si se pregunta la razón por la que hay que acabar con sus vida, la respuesta es sencilla: a nadie le conviene que alguien hable, los cadáveres no le van a contar nada a nadie, menos aun si nadie los encuentra.

Así que si digamos no sabe utilizar pala o azadón, puede poner a la gente a que lo hagan ellos mismos y así de paso, reafirma su posición y les recuerda qué significa el miedo.

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Grandes ideas violentas

Si por otro lado, sabe matar cerdos, nos va a funcionar mucho porque ya sabe cómo y dónde cortar un brazo, una pierna y hasta una cabeza. Pero en el caso contrario, puede tener la certeza de que aquí alguien le enseñará a disparar o a rebanar carne. Para eso se les enviarán constantemente ganado y cerdos para que no solo coman, sino que practiquen con los animales que son bien similares.

Para nosotros, matar es incluso más complejo de lo que parece, pues más allá de la mera acción de aniquilar a alguien, hay que seguir una serie de procedimientos para que se garantice una correcta ejecución.

Así que ponga atención si quiere aprender todo lo necesario para convertirse en un elemento importante.

Si quiere matar rápido, con un tiro en la cabeza o rebanándosela con un machete es suficiente, puede también cambiarse a un hacha e ir cortando algo y verá cómo con el transcurrir del tiempo se van desangrando, encontrará más satisfactorio cortar genitales ya que extienden un poco más el proceso.

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Grandes ideas violentas

Eso sí, y aprenda de memoria: para desaparecer los cadáveres finalmente, hay que enterrarlos en una fosa individual, pero los huecos que hacemos no son muy grandes para que nadie se dé cuenta que ahí hay un muerto, así que no se pueden enterrar enteros y hay que cortarlos en pedazos, luego de eso, hacerles un corte en el estómago para que después, cuando eso se esté pudriendo no explote con los gases que le quedan dentro y termine moviendo la tierra que quedó encima. Una vez que se hace eso, ya solo resta arrojar todos los pedazos juntos en el hueco y enterrarlos bien para que nadie los encuentre nunca, da igual si quedan con ropa o no, de todas maneras de ahí no van a salir.

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Grandes ideas violentas

CapĂ­tulo 2 .

El poder del Terror

C贸mo se doblega a todo un pueblo y se transforma en funci贸n del miedo, de una ley de silencio que impera y donde toda libertad individual se ha perdido. La resignificaci贸n de lugares conectados emocionalmente con la poblaci贸n y que se convierten en hospedaje de la violencia y de los perpetradores de esta.

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El Poder del Terror

Querrá saber dónde va a poder hacer todo lo anterior, pues sea bienvenido a Puerto Torres, este pequeño pueblito de Caquetá ya lo hemos tomado y adecuado para todas nuestras actividades.

Al incorporarse, se le asignará alojamiento en alguna de las zonas que tenemos dispuestas para usted y sus compañeros, bien puede ser en una finca, en una casa o en el colegio. En ese mismo colegio usted aprenderá todo lo que necesita saber, en el patio podrá entrenarse a diario hasta que domine todas nuestras técnicas y conozca de memoria todos los procedimientos, tenemos un árbol dispuesto para la práctica de tiro y la zona donde encontrará a los animales. Por otro lado, en la casa cural encontrará a todos los secuestrados para que pueda trabajar, mientras que en el resto del pueblo podrá hacer labores de vigilancia o encargarse de desaparecer los cadáveres en las múltiples fosas que se estan cavando constantemente.

Ahora bien, donde sea que se le ubique, usted puede tener la plena seguridad de saber que la totalidad del pueblo es de nosotros, es decir suyo, ésto gracias a todo lo que se le explicó en el capítulo anterior, pues con la desaparición de la gente es como tenemos el insumo necesario para doblegar a toda la ciudadanía que queda.

Así es como usted podrá caminar por las calles del pueblo con la frente en alto, los habitantes le mirarán reconociendo su poder, pues aquí nadie dice nada, porque ya nadie tiene esperanzas estando conscientes de lo que hacemos, saben que delatarnos los convierte en traidores, es decir, en nuevos objetivos.

Una vez que se logra comprobar que las promesas no se quedan solo en palabras vacías, el miedo se apodera de cualquiera, y el miedo de cada habitante es poder para nosotros.

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El Poder del Terror

CapĂ­tulo 3 .

La jerga del Poder

Ahora bien, en este último capítulo se le instruirá en la terminología de la violencia, ya que de lo contrario, no podrá entender mucho de lo que aquí se habla, a qué se puede referir alguien o cómo proceder en determinados casos.

Así bien, desglosaré ciertos términos que no solo deberá memorizar, sino apropiar y reconocer.

El Centro de Reentrenamiento es el mismo colegio, antes usado por los niños del pueblo ahora es el lugar donde aprenderá qué es la violencia y el terror, siempre con un suministro constante de personas para sus prácticas.

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La Jerga del Poder

Los Guerrilleros o milicianos son el enemigo, cualquiera que nos traicione o busque obstruir nuestras operaciones será perseguido, desaparecido y puesto a disposición de usted y sus compañeros para que dispongan debidamente de su cuerpo.

Trabajar un cuerpo significa desarticularlo, o en otras palabras, hacer cortes en la carne o cortar totalmente pedazos enteros de cuerpo como manos, brazos, piernas, genitales o incluso cabezas si lo que se necesita es matarlo.

Apartamentos es como llamamos a los huecos donde terminan todos los cadáveres, hay que estar constantemente haciendo nuevos por la alta demanda.

Nuestras operaciones tienen una razón de ser, no queremos calentar la zona, es decir, necesitamos trabajar y eliminar a esa gente sin levantar sospechas del gobierno, por esto los cuerpos se esconden en los huecos.

Un matarife es alguien que ya trabajó con carne antes y tiene los conocimientos de anatomía necesarios para trabajar un cuerpo bien sea de animal o de persona, un elemento importante para acoplar a nuestras filas.

Así pues, estos son los términos más importantes que debe conocer para defenderse recién sea incorporado a nuestras filas, el resto los podrá aprender sobre la marcha como un orgulloso miembro activo.

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La Jerga del Poder

De nuevo bienvenido a LA ESCUELA DEL TERROR y a Puerto Torres, esperamos de usted un gran compromiso y disposici贸n para aprender el bello arte de la violencia.

HALLAZGOS EN LA VERDADERA

ESCUELA DEL TERROR

“El cuerpo de la víctima es un texto sufriente sobre el cual el perpetrador escribe un manual, una lección; la víctima misma es elegida con una alta dosis de azar.”

I n t r o d u c c i ó n .

Lo más terrorífico de lo que sucedió en Belén de los Andaquíes, Caquetá, fue el altísimo nivel de violencia que grabó los hechos en la memoria de los colombianos y en su humanidad. No se trata solamente del asesinato extrajudicial; ni de la tortura previa que ya se podría pensar como un nivel mayor de violencia frente a la sola ejecución. Se llegó al punto de apropiación del cuerpo ajeno, a la utilización de las víctimas como instrumento pedagógico de horror. Como si se tratase de una hoja de papel desechable o un tablero viejo donde un profesor imparte una lección. Se enseña a los estudiantes a perder el respeto por la integridad y la libertad del otro para luego apoderarse completamente de él. Se construyen a través de los cuerpos vacíos significantes de un destino amenazante que enseña a los demás a temer.

La educación en el miedo, en el respeto al poder de la violencia, e incluso en las técnicas violentas, son enseñanzas que se logran desde un mundo lingüístico, desde un sistema de códigos. Es allí donde tal nivel de violencia es posible y comunicable a través del lenguaje que los agresores reproducen en sus acciones, de las descripciones de sus motivaciones y la jerga que se han hecho para sí mismos.

Aquí se ha analizado brevemente dicho código, utilizando el formato de Manual del Terror para reiterar sobre el modo en que los paramilitares definieron sus acciones. Se presentará en este aparte, con la crudeza que corresponde al caso los hallazgos más importantes que han nutrido la ruta de análisis.

“Y en el colegio, en donde antes se enseñaba para la vida, ahora se enseñaba para la muerte.”

Capítulo 1: Los Actos de violencia y sus significados Capítulo 2: Las motivaciones de los agresores Capítulo 3: El lenguaje violento

CapĂ­tulo 1 .

Los Actos de violencia y sus significados

Las acciones de los paramilitares hacen una resignificación importante del espacio y los símbolos cotidianos de la población, principalmente, por consecuencia de la manera cómo se re-define el cuerpo de los ciudadanos.

Por ejemplo, los casquillos de bala, las marcas en los árboles en el patio y otros elementos de los agresores encontrados en el colegio son resultado de una transformación del código con el cual la comunidad había definido su espacio. En otras palabras, un espacio de “vida”, de recreación, tranquilidad e inocencia se convirtió en una “escuela de terror” y al ser abandonado, se le dio un sentido diferente. Ahora, la marca de un evento dejó una desolación y “olor a muerte” qué identifica el espacio que sería leído por los investigadores. Esta redefinición sucedería en todo el espacio:

Casas, la casa cural, la iglesia e incluso algunos símbolos como el confesionario o la crucificción.

Otro nivel importante de violencia es temporal. Los agresores expanden en el tiempo la tortura del dolor físico y psicológico lo más posible. Primero generando miedo al amenazar a las víctimas con la posibilidad de que se les procure el mismo destino que a las personas que se les está torturando. El dolor se pretende hacer largo al aplazar el momento de la muerte por medio de la tortura y luego se sigue procurando el dolor más allá de la muerte de la víctima al desaparecer el cadáver y dejar a la familia sin la posibilidad de terminar su duelo. En el caso de que la desaparición sea muy efectiva, el duelo de la familia se puede hacer incluso tan largo como la vida de los familiares.

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Los Actos de violencia y sus significados

Se pretende entrenar a los nuevos reclutas de manera que la barbaridad siga produciéndose en futuras generaciones. Se podría decir incluso que se pretende infligir dolor indeterminadamente, de manera que el apoderamiento sobre la vida del otro no sea solo un préstamo sino prácticamente eterno.

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Los Actos de violencia y sus significados

CapĂ­tulo 2 .

Las motivaciones de los agresores

Los agresores tienen literalmente intenciones terroristas (a pesar de que el término ha sido abusado no hay uno mejor para describir los propósitos de estas personas y aquí se utiliza en términos de lenguaje, no políticos). Las motivaciones que los paramilitares describen sobre la obediencia o la culpabilidad de las personas son inventadas, no solo desde la metalepsis sino también al seleccionar las víctimas de manera tan aleatoria. Su discurso se utiliza prácticamente como excusa para establecer miedo o terror en las personas como medio para la perpetuación de su posición de poder. Además en sus declaraciones los mismos paramilitares aceptan la falsedad de sus “juicios” y su utilización para contrarrestar la culpa que sienten.

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Las motivaciones de los agresores

Es claro que la motivación de los paramilitares es establecida desde una perspectiva fanática o de culto. Justo al lado de la iglesia escribieron la declaración: “A los combatientes de las autodefensas que dieron sus vidas por defender la patria…” pues su causa se entiende como una cuestión de vida o muerte de la misma manera en que al “enemigo” se le somete a la pena capital. El hecho de que se escriba esa declaración junto a un templo y la importancia que se le da lo ubica en un código religioso. Incluso los valores que se defienden son en gran parte cristianos.

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Las motivaciones de los agresores

CapĂ­tulo 3 .

El lenguaje violento

El lenguaje “corriente” que se utiliza para referirse a las actividades violentas de los paramilitares muestra la necesidad de ocultar dichas actividades al banalizarlas, banalizando así también la violencia misma.

Por ejemplo se habla de “centro de acopio” para referirse al pueblo donde se perpetuaron las torturas como si se tratase de una plaza de mercado donde se juntan productos agrarios o desechos para el reciclaje. También se discute la utilización de un cuerpo para “tapar un hueco”, o el desmembramiento contado con el tono de una actividad normal para ocultar cuerpos en “apartamentos” (nombre que se le da a las fosas clandestinas). Uno importante es como la que aquí llamamos Escuela del Terror es llamada “Centro de Reentrenamiento”. Todos términos transportados desde un ambiente cotidiano, normalizando las acciones de los agresores desde el lenguaje verbal.

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El lenguaje violento

Comunicaci贸n 3 Dise帽o U. de Los Andes

Juan Soto Germรกn Izquierdo Michelle Ospina (Editorial e ilustraciones)