Publicación de la Comisión Ejecutiva Nacional del Partido Popular Socialista de México, Año 1, Número 8, Mayo de 2009, 5.00
Fidel, Calderón, la influenza Cuauhtémoc Amezcua Dromundo*
F
idel escribió en una de sus reflexiones1 citando a Felipe Calderón: “Iba a ir a Cuba efectivamente en estos días o semanas pero como Cuba ha impedido los vuelos a México a lo mejor no voy a poder...” Calderón, cuando dijo eso, torcía las cosas de manera deshonesta para maltratar a Cuba. ¿Acaso el presidente de México vuela en avión de línea comercial? ¿Las relaciones internacionales de alto nivel, acaso se rigen por los protocolos de sanidad de uso común? No, nada de eso. Lo que sucede es que a Calderón, urgido de que lo vean aquí, falsamente, como el salvador de los mexicanos y del mundo entero –así se autoproclama a diario frente a la televisión, cuando estamos a siete semanas de las elecciones- le molestó que Cuba y otros paí-
ses, en uso de su soberanía, tomaran medidas de protección para sus pueblos frente al virus A/H1N1, sólo porque contrariaban su mentirosa autoproclama, por eso ha disparatado contra esos países y los ha acu-
LOS CAUSANTES DEL DESEMPLEO Juan Campos
E
l creciente desempleo en nuestro país es resultado de la dependencia de México respecto de Estados Unidos y del modelo neoliberal que promueven el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y todos los organismos que están al servicio del capital financiero internacional.
El empleo depende del crecimiento económico. Si la economía decrece, como actualmente sucede en nuestro país —instituciones del sector privado calculan que descendió 8% en el primer trimestre de 2009— el desempleo se incrementa. La economía de México cayó, en parte, porque la masigue en la página 3
sado hasta de “discriminar” a los mexicanos por “xenofobia”. También escribió Fidel: “Las autoridades mexicanas no le informaron al mundo la presencia de la misma esperando la visita de Obama...”, y eso ha moles-
tado más todavía a Calderón; y los medios de manipulación social en manos de la más proimperialista burguesía, han desatado un escándalo contra Fidel. Sólo que esa manipulación de Calderón ya había sido denunciada abundantemente, por lo que nadie puede acusar a Fidel de iniciar el cargo. Léase por ejemplo a Iván Restrepo “Una alerta que se dio demasiado tarde”2, trabajo que sustenta en numerosas fuentes de Francia, Brasil, estados Unidos y otros países. “¿De qué se quejaba el Presidente mexicano, con relación a las medidas que Cuba adoptó, de acuerdo a las normas establecidas y sin la menor intención de afectar al hermano pueblo de México?”, siguió escribiendo Fidel; “ahora nos amenazan con suspender la (visigue en la página 2
Adrian GarcÍa
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l magisterio oaxaqueño prepara su jornada tradicional de lucha para el mes de mayo, denominada, ahora, “por la educación y la justicia en Oaxaca”, fijándose como demandas centrales la lucha en contra de la Alianza por la Calidad Educativa y en contra de la reformas a los artículos 3º y 31 Constitucionales. Así quedó planteado en el documento de información, orientación y consulta, distribuido a todos los trabajadores de la educación que forman parte de la Sección 22 del SNTE. En este se mencionan algunos elementos del contexto internacional, importantes, por cierto; pero dejan en el olvido algunos otros imprescindibles. Así, no se toma en cuenta las contradicciones inter imperialistas que existen en el mundo; tampoco se otorgan mayores elementos que permitan comprender las razones históricas de la actual crisis económica y sus principales responsables; de igual manera, brilla por su ausencia la caracterización de la situación política de
Amèrica Latina, ponderando justamente la movilización popular independiente de los partidos políticos tradicionales, como el elemento que de manera regular ha sido sujeto de los cambios revolucionarios que se han gestado. En el aspecto nacional, hizo falta profundizar en los efectos de la aplicación de la política neoliberal por 30 años en nuestro país, destacando la eliminación de la intervención directa del Estado en la economía- vía privatizaciones- como su objetivo principal y, de ahí la eliminación, de facto, de los derechos del pueblo mexicano, aumentando su supeditación a los intereses de la burguesía imperialista y robándole su derecho a la autodeterminación y al ejercicio pleno de su soberanía. De esta misma forma, aún cuando señala a los procesos electorales como corrompidos y viciados de origen – lo cual está muy bien-, no se dan mayores elementos que caractericen de manera amplia al sistema político mexicano y su soporte: el sistema de partidos políticos con registro electoral.
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sita) del presidente Calderón que ya había sido suspendida con anterioridad por otras causas comprensibles y ajenas a la epidemia. En este momento nosotros y decenas de otros países pagamos los platos rotos y encima nos acusan de medidas lesivas a México.” En efecto, Felipe Calderón es un político falto de ética, todos lo sabemos. Un manipulador sin escrúpulos. En este caso, incurrió en falsedades y ofensas varias: intromisión en los asuntos de un país hermano, al censurar las medidas
que Cuba tomó en ejercicio de su derecho soberano; acusar a Cuba, como a otros países, de cuestiones insostenibles; mentir de manera descarada, al atribuir a la suspensión de los vuelos comerciales la cancelación de su visita a Cuba; y antes, la falta ya denunciada de no haber lanzado a tiempo el alerta internacional frente a la epidemia; y la gran irresponsabilidad frente al derecho a la vida y a la salud de los mexicanos, que por cierto está consagrado en la Constitución de la República, y que Calderón,
El documento en cuestión contiene cosas importantes; sin embargo, dado que busca informar, orientar y consultar a la base trabajadora, requirió mayor rigor científico y riqueza de análisis. Finalmente, en las conclusiones, se llega a una muy importante: luchar por cambiar el régimen mexicano; pero, en el momento de trazar la estrategia de lucha, todo se ahoga en la exigencia de solución de demandas gremiales y, a lo sumo, se plantean algunas de carácter local. Es necesario comprender que mientras no logremos resolver la contradicción principal señalada anteriormente, estableciendo un nuevo régimen de gobierno y modelo de desarrollo nacional, los cuales deben tener como objetivo primordial la elevación del nivel de vida del pueblo, poniendo en sus manos las riendas del rumbo nacional, ninguna demanda gremial o local puede ser solucionada de fondo y en forma satisfactoria. La lucha magisterial debe encaminarse a lograr la liberación nacional de Mèxico.
igual que sus colegas, Salinas, Zedillo y Fox han vulnerado al escatimar y reducir de manera dramática los recursos para ese fin, en tanto los han derrochado en cuestiones baladíes. Esa política de todos los gobernantes de la era neoliberal, que Calderón ha seguido también, es la verdadera causa de que el A/H1N1 haya matado a decenas, hasta hoy, si nos limitamos a las cifras oficiales, pero de muchas otras pérdidas de vidas por enfermedades curables, decenas de miles, tal vez. Por otra parte, quede claro: la reflexión de Fidel, que tituló “Lo que pasó por mi mente”, si se lee con atención, simplemente expresó, como su autor lo dice, “las ideas de lo que
sindicalismorevolucionario@yahoo.es
pasó por mi mente a medida que iban llegando las noticias.” No quiso polemizar con nadie ni tuvo otro fin. Noticias sobre el primer caso en Cuba del virus mencionado; noticias de las declaraciones de Calderón; noticias de las denuncias, como la de Iván Restrepo, sobre la forma en que el gobierno de México ha manipulado la información sobre la epidemia. En modo alguno, la cuidadosa, sentida reflexión de Fidel, tan cariñosa como siempre respecto al pueblo mexicano, en modo alguno merece el escándalo que los medios proyanquis y anticomunistas insisten en desatar. Un gran abrazo al hermano pueblo de Cuba. *Presidente del Partido Popular Socialista de México
Por la liberación nacional y el socialismo LOS CAUSANTES DEL DESEMPLEO Viene de la página 1
yoría de nuestro comercio internacional lo realizamos con Estados Unidos. Si en esa nación hay crisis y los estadounidenses compran menos, y en México sucede lo mismo, las empresas que operan en nuestro país se ven obligadas a disminuir su producción o se van a la quiebra, como sucedió entre octubre de 2008 y febrero de 2009, en que más de diez mil negocios tuvieron que cerrar sus puertas dejando sin empleo a decenas de miles de trabajadores. Como las crisis son siempre pasajeras, hay quien plantea que pronto habrán de recuperarse los empleos perdidos. Quienes así opinan, pretenden ignorar que la utilización de los avances científicos y tecnológicos aplicados a la producción generan un fenómeno relativamente nuevo: que la economía vuelve a crecer pero el empleo lo hace en una proporción mucho menor. Es decir, que se puede recuperar el crecimiento pero no el empleo, al menos no en su totalidad. Otro factor causante del desempleo, es el modelo neoliberal que deja en manos del sector privado, sobre todo extranjero, el papel de motor de la economía. Como el afán de todo empresario privado es el lucro, esa ambición determina sus acciones; en el presente influye en su poco interés por invertir en el renglón productivo, prefiere hacerlo en negocios que le dan elevados dividendos y cierto margen de seguridad. Según los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) relativos a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), correspondientes al primer trimestre de 2009, la población económicamente activa (PEA) —de 14 años y más disponible para trabajar— fue de 45.2 millones (57.8% del total).
TASA DE DESEMPLEO 6 5.1
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TASA DE DESOCUPACIÓN. PRIMER TRIMESTRE DE 2009 (Porcentaje de la PEA) Fuente: INEGI.
La clase obrera, los campesinos, y todos los trabajadores deben de luchar en contra de estas dos lacras que oprimen al pueblo mexicano: el imperialismo internacional, particularmente el yanqui, y los gobiernos neoliberales que se ponen a su servicio. De la PEA tenían ocupación 42.9 millones: en el sector primario o agropecuario, 5.5 millones (12.7%), en el secundario o industrial 10.6 millones (24.6%), y en el terciario o de servicios 26.6 millones (62%). De la población ocupada: eran trabajadores subordinados y remunerados 28.8 millones (67.1%) —en el sector primario 7.9%, en el secundario 27.7% y en el terciario 63.5%—; tenían acceso a instituciones de salud 15.4 millones (53.5%) y 14.6 millones (50.7%) disponían de un contrato por escrito, mientras que 13.9 millones (48.3%) no contaban con él; trabajaban por su cuenta 9.6 millones (22.5%); no recibían remuneración 2.6 millones (6.1%), y eran patrones 1.9 millones (4.3%). Si solamente se considera industria y servicios, estaban ocupadas 36.6 millones de personas: en micronegocios 17.8 millones (48.6%); en pe-
queños 6.5 millones (17.7%); en medianos 4.3 millones (11.8%); en grandes 3.6 millones (9.9%), y en otras 4.4 millones (12%). El sector informal ocupaba 12.1 millones (28.2%) y la desocupación se situó en 2.3 millones (5.1%), cifra que hacía muchos años no se veía y que hasta ahora es la más alta en lo que va del sexenio (ver gráfica). Estos datos evidencian que el desempleo y las condiciones precarias de trabajo se acrecientan, lo que incide en otro aspecto importante para los trabajadores: su nivel de ingresos y salarios que determina el número de habitantes que vive en condiciones de pobreza y miseria. El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que afianza la supeditación de la política comercial del país respecto de Estados Unidos, demuestra —en 15 años de operación— que su impac-
to en las condiciones de vida de los mexicanos es negativo. La privatización de empresas públicas y las políticas asistencialistas de todos los gobiernos neoliberales: De la Madrid, Salinas, Zedillo, Fox y Calderón, a la vez que acrecientan nuestra dependencia económica de Estados Unidos, exhiben su incapacidad para resolver el problema de la pobreza. Son políticas antinacionales y antipopulares. La clase obrera, los campesinos, y todos los trabajadores deben de luchar en contra de estas dos lacras que oprimen al pueblo mexicano: el imperialismo internacional, particularmente el yanqui, y los gobiernos neoliberales que se ponen a su servicio. De no ser así, no habrá desarrollo económico y cualquier mejoría en las condiciones de vida y trabajo de los mexicanos será temporal, por lo que su empobrecimiento absoluto y relativo será inevitable.
Las recetas del corrupto
y vende patrias Dr. Zedillo
José Santos Cervantes
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esulta que Ernesto Zedillo el servil y vulgar presidente lamebotas del imperialismo yanqui, ese que consintió el robo más grande de la historia a nuestra nación, nada más ni nada menos que a través del Fobaproa, cometido impunemente por los banqueros “nacionales” y extranjeros, ahora ante la ineptitud e ignorancia de Felipe Calderón (mayor que la del propio Zedillo), viene a México a aconsejarle la aplicación de las recetas zedillistas (que en realidad son las del FMI y del BM), algunas similares a las aplicadas durante su gobierno y otras que no pudo poner en práctica. ¿Cuál es la receta de Zedillo para salir de la crisis?, pues más fondomonetarista y bancomundialista, o para decirlo en su lenguaje más globalifílica que la de los propios instrumentos financieros del imperialismo, y muy sencilla “El pueblo debe estar más pobre”. Es decir, según su lógica no hay otra forma de salir de la crisis más que: comiendo menos, educándose menos, curándose menos, vistiéndose menos, etc., en pocas palabras que el pueblo “se apriete más el cinturón.” Por eso está proponiendo seguir aplicando las llamadas “reformas estructurales” que según él falta por llevar a cabo: la “reforma fiscal” y la “reforma laboral”, ¿en qué consiste la primera? en aumentar los impuestos y en aplicarlos a todo (alimentos, medicinas, libros, transporte público, etc). En cuanto a la segunda: que la legislación laboral permita a los patrones total libertad para contratar y despedir trabajadores cuando quieran y como quieran.
Zedillo ha de creer que nos estamos “chupando el dedo”, y que es muy fácil imponer una terapia de “shock”, con el pretexto de la enorme campaña mediática montada por el gobierno derechista para hacernos creer que la crisis económica se debe a la contingencia sanitaria impuesta por la presencia del virus de la influenza A/H1N1, y que por ésta razón la economía se desplomó en el último mes. Nada más falso. La crisis económica se ha venido agravando desde hace veintisiete años, porque antes de los gobiernos neoliberales y de derecha tampoco estábamos en un “lecho de rosas”, pero es exactamente a partir del gobierno de Miguel de la Madrid en que la economía nacional se empieza a desplomar. Veamos: Para darnos una idea de cómo se comportado la economía nacional, podemos observar el comportamiento de la tasa promedio anual de crecimiento del PIB desde 1940, la cual durante el gobierno del General Lázaro Cárdenas del Río fue del 4.52%; Manuel Ávila Camacho 6.15%; Miguel Alemán Valdés 5.78%; Adolfo Ruiz Cortines 6.42%; Adolfo
López Mateos 6.73%; Gustavo Díaz Ordaz 6.75%; Luis Echeverría Álvarez 6.16%; José López Portillo 6.51%; Miguel de la Madrid Hurtado 1.08%; Carlos Salinas de Gortari 3.91%; Ernesto Zedillo Ponce de León 3.39% Vicente Fox Quesada 2.32%; Felipe Calderón Hinojosa (2009) -4.5%. Según el censo de 1980 la población en México era de 67.3 millones y para el año 2007 ascendía a 105´790.7 es decir, creció en un 36% mientras que el PIB creció en promedio durante los cuatro sexenios un 16 %, cuando debió haber crecido un 36% por sexenio, ya que se requiere un crecimiento mínimo del 6% anual para tener una buena economía, y como se ve durante los últimos cuatro sexenios neoliberales y de derecha en ningún año hubo un crecimiento siquiera cercano. Por lo tanto la crisis general que vivimos tampoco se produjo con la crisis cíclica de sobreproducción relativa que padece el sistema capitalista mundial, ésta sólo ha venido a agravarla más. La crisis en México como en toda América Latina, ya estaba presente desde hace más de dos dé-
cadas, y se ha extendido a lo social, político, diplomático, medioambiental, etc., etc. Así que no va asustar ni a engañar al pueblo y la clase trabajadora, y el movimiento social no va a permitir ninguna “reforma estructural”, la derecha y los neoliberales están esperando tener mayoría en la Cámara de Diputados, y la van a tener, pero aun así esas cuestiones ya no se determinan en el Congreso de la Unión, ahora se resuelven en la calle, con la movilización social, antineoliberal y cada vez más antiimperialista. Zedillo mismo ya no pudo privatizar la industria eléctrica, debido precisamente al surgimiento en ese entonces del Frente Nacional de Resistencia Contra las Privatizaciones, si en ese entonces no pudo, menos podrá ahora Calderón, como se ha demostrado con la Ley de ISSSTE que no puede aplicarse a plenitud, con la llamada “Reforma Energética” que tampoco pudo sacar a su gusto, ni aliándose al PRI, como tampoco puede aplicar la mal llamada “Alianza por la Calidad Educativa” aun aliándose con la mafia sindical que dirige al SNTE. Este expresidente lamebotas, cínico y corrupto que remató entre otras empresas estatales, la de Ferrocarriles Nacionales para después hacerse socio de la transnacional gringa que los “compró”, se equivoca de pe a pa y no sólo no vamos a permitir más “contrarreformas neoliberales” sino que más temprano que tarde recuperaremos las empresas que remató y seguramente el pueblo en su momento lo llamará a cuentas para aplicarle todo el rigor de la ley junto con los demás vende-patrias.
Por la liberación nacional y el socialismo
la filosofía del proletariado Del ABC de
Martha Elvia García
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l marxismo es la filosofía del materialismo dialéctico, formulada por Carlos Marx y Federico Engels, a mediados del siglo XIX. Fue continuada y enriquecida por Lenin y después y hasta la fecha por diversos pensadores y partidos comunistas del mundo. Como lo expresara Lenin, el marxismo es el sucesor natural de lo mejor que la humanidad había creado hasta el siglo XIX: la filosofía clásica alemana, la economía política inglesa y el socialismo utópico francés. Ha constituido una revolución en el pensamiento filosófico, puesto que a diferencia de toda la filosofía creada hasta ese momento, el marxismo no es solamente un instrumento científico para explicar la realidad, sino también para transformarla.
¿En qué consiste el Materialismo dialéctico? Básicamente y esquematizando el significado, consiste en dos partes sustanciales: una teoría y un método, ambas partes conforman su nombre. El Materialismo es la teoría, la Dialéctica es el método. Esencialmente postula que es la materia la generadora del espíritu; que es el ser lo que produce la conciencia. Es decir, que es el ser social lo que determina el espíritu y la conciencia del hombre. Que en el universo nada es estático, que todo cuanto existe está en eterno movimiento e incesante conexidad compleja. Que no hay materia sin movimiento ni movimiento sin materia y que el movimiento no es un movimiento mecánico, ni rec-
tilíneo, ni uniforme, ni acelerado, sino íntimo e intrínseco de la materia o de todo cuanto existe, siempre. Que la fuente del movimiento se encuentra en la naturaleza misma de la materia, siempre sujeta a contradicciones, y que se rige por leyes naturales identificables. Estas leyes son fundamentalmente 1) la constante lucha y unidad de contrarios… 2) que genera los cambios cuantitativos y cualitativos… 3) que conducen a hechos y fenómenos nuevos que se niegan a sí mismos – negación de la negación-- para dar lugar a una realidad distinta y superior. La leyes y principios descubiertos y sustentados por el Materialismo dialéctico se prueban cada vez más y mejor. Con el tiempo la ciencia y la tecnología han demostrado con creces la vigencia de sus postulados. La esencia contradictoria e innovadora de la materia y su constante que es el movimiento, son ya irrefutables. Como ejemplos baste citar ---separando de manera muy arbitraria, sólo para concretar la idea, entre fenómenos naturales y sociales-en el campo de la naturaleza a la Teoría atómica y a la Teoría celular, en sus versiones más actuales; y, en el campo de lo social, la gran complejidad y riqueza de los fenómenos sociales que dan lugar a una realidad distinta cada día. El marxismo o Materialismo dialéctico es la teoría filosófica propiamente dicha, es decir, es la teoría general y el método general del conocimiento. Cuando esta filosofía se aplica al conocimiento de la naturaleza se denomina Dialé-
ctica de la naturaleza. Cuando se aplica al estudio del origen y desarrollo de la sociedad humana se le llama Materialismo histórico. Luego, a la aplicación del materialismo histórico en el conocimiento específico de un periodo de la historia de la sociedad humana, a la etapa del nacimiento y desarrollo del sistema capitalista, se le identifica como Economía política. Finalmente, a la aplicación del materialismo histórico y de la economía política en el conocimiento del tránsito del sistema capitalista al sistema socialista se le denomina Socialismo Científico. El Materialismo histórico afirma, básicamente, que la vida social está determinada por las condiciones materiales, estas condiciones materiales son tres: el factor geográfico, el factor demográfico y el factor económico. Dentro de estos tres factores señala como determinante al factor económico. El factor económico constituye la forma de producción de los bienes materiales. Dicha producción presenta dos características: 1) Las fuerzas productivas, 2) Determinadas relaciones de producción. Las fuerzas productivas son los instrumentos de la producción: la técnica y la fuerza humana, del trabajo. Las relaciones de producción establecen varios estadios productivos o modos de producción. A lo largo de su desarrollo la humanidad ha conocido cronológicamente y hasta la actualidad los siguientes modos de producción: comunismo primitivo, esclavismo, feudalismo, capitalismo, socialismo (en vía de
construcción) y comunismo científico (aun sin aplicación, es decir, en teoría). El factor económico o la forma de producción de los bienes materiales constituyen la base o estructura de la sociedad. Sobre la estructura se encuentran las superestructuras, que son el mundo de las ideas: el Derecho, la Política, las ciencias, el arte, la educación, la religión, la cultura en general. Tanto la estructura como las superestructuras son fruto y expresión del pensamiento humano, en incesante, compleja y rica interacción dialéctica. Vicente Lombardo Toledano explica que si la base o estructura de la sociedad es la forma de producción económica, a la forma de vida material en que la humanidad vive en determinada etapa del desarrollo histórico le corresponde de manera natural formas concordantes y también específicas del pensamiento, que constituyen las superestructuras; pero éstas a la vez y en un proceso simultáneo de interacción entre ellas, actúan sobre la base material (la estructura) de la cual han partido: “La acción de la base económica de la sociedad sobre las superestructuras es una forma de este proceso dialéctico. La acción de las superestructuras sobre su punto de partida es un proceso dialéctico, y la interacción de las superestructuras entre sí es también parte de un solo proceso que se da en todas partes. Es el caso de la sociedad humana, porque se trata del problema del pensamiento.” Continuará en el siguiente número.
El fondo de la batalla ideológica
La misión de la filosofía
Vicente Lombardo Toledano*
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urante muchos siglos la filosofía se propuso sólo el conocimiento de la realidad, la aprehensión de la esencia de las cosas para saber el lugar que ocupa el hombre en el seno de la naturaleza y la finalidad de su vida. En todos los países y en todas las épocas, ha habido doctrinas que han tratado de dilucidar estos problemas, porque el hombre no puede vivir sin darse una explicación de lo que le rodea y de sí mismo en relación con lo que observa fuera de su conciencia: falsa o verdadera, esa explicación le sirvió para ajustar su conducta y para ordenar las relaciones que constituyen la sociedad creada por el hombre mismo. Las doctrinas filosóficas, sin embargo, no brotaron de la cabeza del hombre de una manera arbitraria, fuera del tiempo en que le tocó vivir. Cada etapa del desarrollo histórico está representada por el pensamiento de quienes más ahondaron en los problemas que plantea la existencia del universo, del mundo y de la vida. En todos los casos no fueron ideas individuales, sino de una clase social, y no de todos los elementos que integran la comunidad humana, porque desde que en su seno surgieron diversas clases con in-
tereses opuestos, se produjeron también doctrinas distintas acerca de las cuestiones fundamentales de la existencia. A diferencia de los regímenes sociales que han aparecido en el proceso de la historia, —que se niegan los unos a los otros, al sustituir uno nuevo más progresivo al que había prevalecido—, las doctrinas filosóficas aparecen sin solución de continuidad, formando una cadena de ideas que perduran adoptando nuevas formas, porque desde que el hombre fue capaz de plantearse los problemas más profundos del ser y del devenir, el pensamiento filosófico sólo ha discutido alrededor de unas cuantas cuestiones. ¿La naturaleza está sujeta a leyes necesarias? ¿Los fenómenos naturales, participan del mismo substrato, o cada conjunto de ellos tiene su propia esencia irreductible? ¿El hombre forma parte de la naturaleza o es una excepción dentro de ella? Si la conciencia humana no es un producto del desarrollo del mundo, ¿cuál es su origen? ¿Se puede afirmar que hay un solo orden o diversos órdenes para el universo, el mundo y la vida? Materialismo e idealismo, metafísica y dialéctica, han sido siempre los términos del debate filosófico. El idealismo postula
la primacía del pensamiento sobre el ser; el materialismo, la primacía de la materia sobre el espíritu. La metafísica afirma la inmutabilidad del universo, y la dialéctica concibe al universo en perpetuo movimiento. En todos los períodos del proceso de la humanidad estas tesis se han discutido no sólo porque encierran los cuatro temas fundamentales del conocimiento, sino también porque están ligadas a las clases en que la sociedad se ha dividido, y se mantendrán hasta que la lucha entre esas clases desaparezca. Tales han sido los trazos principales del discurrir del pensamiento. Pero la filosofía no es sólo conocimiento de la realidad, sino también medio para transformarla. Desde que Karl Marx hizo este planteamiento sencillo y profundo, la filosofía dejó de ser especulación para convertirse en un instrumento de creación de la vida social constantemente superada. Porque lo característico de la razón es el hecho doble de ser producto de la evolución de la naturaleza —su fruto máximo— y, al mismo tiempo, fuerza capaz de modificar la naturaleza de la que proviene. Por esa causa las únicas escuelas filosóficas que merecen llamarse así, son aquellas que han contribuido a orientar a la sociedad humana. Surgida de su seno en un momento determinado de su evolución, cuando el régimen establecido llega a su crisis final, la doctrina filosófica de la clase beneficiaria del régimen trata de detener el curso de la historia. Pero frente a ella se levanta otra doctrina, la tesis de lo nuevo, que acaba por substituirla. De este modo y adoptando nuevas formas y nuevo lenguaje, continúa el proceso de la historia en medio de una permanente batalla ideológica. En esta hora de transición entre el capitalismo y el socialismo, las escuelas filosóficas se hallan, como en el pasado, en franca lucha. El idealismo, negador de la capacidad de la razón para conocer la esencia de las cosas, insiste en perpetuar el orden social que agoniza. Desde Kant hasta hoy, ha cambiado varias veces de nombre, formulando distintas maneras de su alegato, a veces artificiosas y en ocasiones sutiles; pero insistiendo en el principio básico del cual ha partido. La Filosofía de la Vida y otras denominaciones, han servido a Wilhelm
Dilthey, Georg Simmel, Oswald Spengler, Max Scheler, Martin Heidegger, Karl Jaspers y Alfred Rosenberg, para intentar la demostración de la incapacidad de la razón humana para construir un mundo nuevo, aconsejando o el mantenimiento del que existe o la fuga de la realidad. El Existencialismo contemporáneo es una adaptación de la Filosofía de la Vida a las condiciones actuales del mundo. El Materialismo Dialéctico, frente a esas corrientes filosóficas, afirma la existencia de la realidad con independencia del pensamiento y la posibilidad del conocimiento mediante la razón, porque si es verdad que la existencia determina la conciencia humana, ésta puede transformar la existencia. Y como la única prueba para la validez de una doctrina filosófica es la práctica, la demostración de su eficacia para mejorar la vida social, la crisis en que se debaten los sistemas idealistas, antintelectualistas, metafísicos, es definitiva. En cambio, la filosofía materialista y dialéctica ha servido para construir un mundo nuevo, que todos los días crece geográfica y políticamente, y que acabará por ser el único en la tierra que habitamos. La victoria del Materialismo Dialéctico ha consistido en haber dado al hombre la conciencia de su capacidad creadora y los medios para llevarla a la acción. El hombre se ha conocido, al fin, a sí mismo; pero no el hombre en abstracto, sino en concreto. Cada ser humano emancipado de la alienación material, intelectual y moral en que ha vivido la especie, es un constructor. Por eso en el mundo socialista ha florecido el humanismo, junto al cual el de otras épocas, a partir de la cultura clásica mediterránea, sólo tiene el valor de una esperanza para un pequeño número de individuos que pensaban en una vida ideal sobre las espaldas de sus esclavos. Este es el fondo de la batalla ideológica de hoy. Quienes niegan que tales son sus términos, viven sin mirar, oyen sin escuchar el ritmo veloz de nuestro tiempo. Viernes 6 de septiembre de 1963. Número 534, septiembre 18 de 1963. Escritos en Siempre! Tomo 1 Volumen 1 Filosofía, cultura, arte, publicaciones de CEFPSVLT
La clase trabajadora puede y debe unirse Luis Miranda
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l Séptimo Diálogo Nacional celebrado en la Ciudad de México los días 7 y 8 de febrero, entre otros importantes resolutivos, tomó el acuerdo, a propuesta del Sindicato Mexicano de Electricistas, de iniciar los trabajos organizativos y políticos para la celebración de un gran Convención Nacional de los Trabajadores, con el objetivo de constituir una nueva Central Nacional de los Trabajadores de la ciudad y el campo de carácter clasista y combativa ,que incorpore a la clase trabajadora a la lucha política nacional. La unidad de la clase es necesaria porque esta dividida y en crisis, sufre, desviaciones de derecha y de izquierda, errores en la concepción de lucha y sus objetivos, ignorancia de la historia del país, falta de estudio de los problemas fundamentales del pueblo y del modo de resolverlos, abandono o ignorancia de la teoría revolucionaria, rechazo de la filosofía del proletariado, oportunismo, corrupción, sectarismo, dogmatismo y otros factores, han colocado a la clase trabajadora en una situación difícil y complicada. Una de las cuestiones que más distrae la lucha y la unidad de la clase, lo constituyen sus enfrentamientos internos, se desgastan en calificarse y cuestionarse de manera mutua, se califican y se dividen como democráticos y antidemocráticos y olvidan que el enemigo común es la clase patronal, en lugar de orientar la lucha contra los explotadores, se enfrascan en una lucha desgastante de ataques intrascendentes. Dejan de lado que los sindicatos son organizaciones de carácter amplio, que agrupan en su seno a todos
los trabajadores, por el hecho de serlo, al margen de su concepción filosófica del mundo y de la vida y de su filiación política o credo religioso que profesen o sin él. La unidad de la clase trabajadora se puede alcanzar si se tiene respeto a las diversas concepciones políticas de las organizaciones y si llegan a acuerdos en las cuestiones esenciales de la lucha económica, política y social. La unidad se basa en la lucha antagónica contra el enemigo fundamental: la clase patronal. Los objetivos que contribuyen a lograr la unidad, en la actual etapa, residen en la decisión de combatir juntos a la clase gobernante que usurpó el gobierno del país para servir a los intereses del imperialismo y a la servil oligarquía criolla. Sólo unida la clase trabajadora puede alcanzar su emancipación proletaria y derrotar a su enemigo histórico. Y además que su acción gremial no se reduzca a la lucha por mejorar sus condiciones de vida, en el marco de las relaciones de producción capitalista, sino luchar en el campo político e ideológico para desplazar a las fuerzas neoliberales del poder político y económico, y construir un nuevo sistema de vida en donde se liquide la explotación del trabajo. En consecuencia, la tarea fundamental es contribuir a que el resolutivo del Séptimo Diálogo Nacional inicie los trabajos políticos y organizativos para convocar a todas las organizaciones sindicales y sociales a la Gran Convención Nacional de los Trabajadores como primer paso para consensar la agenda de análisis y discusión rumbo a la unidad de la clase en una Nueva Central de los Trabajadores.
E
l rey viejo (1959), una de las novelas más leídas. Es la primera de Fernando Benítez, trabajo en el que se muestra ya maestro en la narrativa. Ambientada durante los agitados años de la revolución mexicana, esta historia retrata los últimos días de la vida del Barón de Cuatro Ciénegas, Venustiano Carranza, exaltando el carácter magnánimo del prócer mexicano con su aspecto de patriarca pueblerino. Narrada a manera de diario personal por Enrique, imaginario asesor del presidente de la República con todos los privilegios y las prebendas que un alto puesto supone, El Rey Viejo recoge con hábiles trazos cronológicos, mezcla de ficción y realismo, la huida de la capital, el escape del gobierno en funciones y su séquito de empleados, a través de la sierra entre copiosas lluvias. Copados por las fuerzas de Obregón, rebelde al gobierno constitucional, Carranza decide dejar el Distrito Federal en trenes con tropas leales para llegar hasta Veracruz, con la esperanza de que su yerno le proteja ante la eventualidad de las traiciones que se suceden una y otra vez. La figura de Venustiano Carranza es central en El Rey Viejo. Los acontecimien-
tos van desde el 5 de mayo de 1920 hasta días después de la muerte del Presidente, asesinato que se pretende hacer pasar por suicidio, en la madrugada del 21 de mayo de 1920, en Tlaxcalantongo, en una choza sin luz. Las traiciones se suceden. Carrancistas eran los que habían ya asesinado a Zapata en 1919 y organizado un consejo de guerra para fusilar -- fue también asesinato-- a Felipe Ángeles en 1917. En 1920 el asesinado es Carranza y el crimen ocurre en aquel jacal oscuro de Tlaxcalantongo. Atmósfera densa y emotiva en esta novela con toques magistrales que le inyectan realismo, al estilo fluído y lleno de matices de Fernando Benítez, maduro escritor que ya reflejara su intensidad en otra magnífica novela, “El agua envenenada”. La novela es al mismo tiempo, un estudio de los personajes, de la vida sencilla del mexicano que sobrevive en las rancherías entre saltos de pobreza y golpes de miseria, y sobretodo, del aura que envuelve a los personajes que detentan el poder en México, con un aire mesiánico. Fernando Benítez nace en la Ciudad de México en 1912. (2000), Hizo carrera en el periodismo desde 1934, pero su pasión
por la vida de lo inmediato la complementó su devoción por la historia y la literatura. Fundó y dirigió varios suplementos culturales, entre ellos: México en la Cultura (1949-1961), La cultura en México (1962-1971), Sábado (1977-1986), y La Jornada Semanal (1987-1989) escribió una obra de teatro y varios libros de viaje, entre los que destacan, China a la vista (1953) y La batalla de Cuba (1960). Entre otras obras de Benítez, traducidas a varios idiomas, El agua envenenada (1961), La ruta de la libertad (1960), Los indios de México (4 tomos, 1967-1979), Lázaro Cárdenas y la Revolución Mexicana (1977), y ¿Qué celebramos, qué lamentamos?” (1992), además de Aquella Valiosa Historia de la ciudad de México, 1325-1982 (3 tomos, (1982), trabajo premiado en la Feria del Libro de Arte de Leipzig, en 1983. Un buen argumento para recomendar la lectura de este libro, será .el hecho de que la novela, escrita con la cronología de un diario, hace de éste, una manera amena e interesante para conocer, de manera” ligerita” pasajes de nuestra historia. odranoel_2303@hotmail.com