MONDO SUR
El bello verano
Tengo ganas de fiesta, de que acabe el invierno, de volver a nadar en el mar... Así comienza uno de los clásicos de Family y así arranca de nuevo el verano de 2024. El más atomizado de la última década y al que, como sigue la canción, soñamos con poderle cambiar el final.
RR Melilla acogerá la tercera edición de Iwa Fest con las actuaciones de Baiuca, Lala Tamar, Rocío Márquez y Bronquio, Kawtar Sadik o Verde Prato entre otros. Del 30 septiembre al 5 de octubre.
RR El próximo 16 de julio se publicará Super Acho, un particular homenaje al Super 8 de Los Planetas a cargo de once bandas extremeñas que se unen a este treinta aniversario de este disco referencial.
BREVES. SUR E
RRY siguiendo con homenajes expresos y tácitos a Los Planetas, el escritor y poeta malagueño, Alejandro Simón Partal, publica La Planta Baja. Diario de Rodaje. El autor relata como testigo de excepción, pero de forma tangencial, lo vivido en el rodaje de Segundo Premio, la premiada y alabada película de Isaki Lacuesta.
En marcha el noveno Big Up! de Murcia
l Congreso Big Up! Región de Murcia se celebrará del 3 al 5 de octubre en el Centro Párraga de Murcia, con un amplio programa de paneles de impacto, mesas de debate, talleres y charlas dirigidos a músicos, profesionales de la industria musical y prensa especializada. El objetivo es aportar herramientas y formación, inspirar para la motivación creativa y potenciar el encuentro y networking. Este Big UP! resalta la importancia de la música en generar impactos sociales, culturales, económicos, mediáticos, locales y globales. La formación Big Up! tiene como objetivo clave la profesionalización del músico, enfocándose en diversas áreas de un proyecto musical como el booking, directo, promoción, ma-
nagement o editorial, entre otras. Se proporcionarán claves para entender el funcionamiento de la industria musical y cómo mejorar para ser competitivos a nivel nacional. Además, se busca ser un escaparate de talento, desarrollando la necesidad en los profesionales de la industria de fomentar y descubrir talento emergente. Estos grupos emergentes podrán encontrar oportunidades para conectarse con profesionales y músicos experimentados que les sirvan de guía e inspiración. De nuevo, este año se podrá seguir el programa en streaming a través de la plataforma Vackstage. Las entradas del Congreso Big Up! Región de Murcia se podrán adquirir a partir del 15 de julio en la web bigupmurcia.es. MS
Mondo Sonoro edición Sur
DISCO DEL MES.
“Era un parón indefinido porque no queríamos presión y ha sido la hostia”
Perro
Los murcianos están de vuelta. Una de las bandas más personales y divertidas del panorama nacional tiene en ¿Te acuerdas? (Sonido Muchacho, 24), una nueva y brillante colección de canciones a la altura de su mejor producción.
Una entrevista con Perro es justo como uno se puede imaginar: caótica, imprevisible y repleta de bromas y esas tonterías tan necesarias y presentes en su música. A veces complementan sus respuestas como hacen con sus canciones, poniéndolas en común. Tras cuatro años fuera de los escenarios y reduciendo su actividad al local de ensayo, la oportunidad de grabar ha conducido hasta un nuevo álbum. Y las abundantes virtudes de ¿Te acuerdas? reflejan lo bien que les ha venido el descanso. “El primer concierto tras el parón fue el del Canela Party de hace dos años. Volvimos porque nos lo ofrecieron. Habíamos tocado allí hace un montón de años, cuando se hacía en sala. En ese momento estábamos tocando para nosotros mismos. Ahí la verdad es que nos motivamos un poco para volver, aunque no nos pusimos a componer hasta un año después”, recuerda Adrián. Guille explica las razones de un prolongado descanso, que “pudo ser de tres meses y ha acabado siendo de cuatro años” “Cada uno tenía su curro, y tocábamos bastante a saco. Después de varios años así, se nos hizo bola. Necesitábamos parar porque era demasiado. Teníamos que descansar la cabeza y coger un poco de fuerza. Cogerle ganas, porque al final se hizo un poco automático. Era un parón indefinido porque no queríamos presión. Y
ha sido la hostia”.
Fue Marco Velasco, viejo colega de El Mirador, quien les propuso hace un año volver a su estudio en Alhama (Murcia) a grabar un par de canciones. La banda había grabado con él su debut hace ya diez años. “No teníamos ni idea de si íbamos a sacar los temas. Nos moló, sacamos más sesiones y al final, cuando llevábamos seis canciones, dijimos: ‘Vamos a grabar disco. Ya que estamos, nos ponemos’. Lo hicimos en cuatro sesiones”, asegura Adrián. Sonido Muchacho entraría en la ecuación más tarde. Los tres admiten que aunque el título suena un poquito nostálgico, su intención no era ponerse melancólicos, sino aludir a una “coña interna, una frase hecha” de esas que abundan en sus canciones. Y no ven ninguna premeditación en los tintes más post-punk o post-hardcore que tienen unas cuantas de ellas. “Han salido un poco más oscurillas porque sí”, confiesa Guille. “Nada en nosotros es deliberado –se ríe Adrián–. Igual que hemos sacado disco porque un colega nos dijo que grabáramos con él, las canciones tampoco tienen una deliberación de vamos a hacer esto así”. La banda las trabaja esencialmente en el local. Puede que alguien traiga un riff “de tres segundos mirando de reojo a los otros”, pero en palabras de Fran “lo más normal es improvisar, grabar la sesión y ver lo que mola y lo que no”.
Por cierto, que “Me duele España” les adentra en terrenos abiertamente bailables. “Rsa es más washingtona”, dice Guille con sorna. “Es que nos gusta de todo. Desde el postpunk al electro. No nos cerramos a casi nada, no tenemos un estilo cerrado”. Y se entusiasman cuando se menciona a Devo. Las proyecciones absurdas e hilarantes de Héctor de La Puente en sus bolos inciden en esta visión absurda sobre las cosas que les caracteriza. Como dice Fran, “una simbiosis muy buena” “Es que nosotros y nuestros colegas somos así. Nos mola el rollo, y ya está”, asegura Guille. “A todo le sacamos la tontería, la parte absurda. Y tal y como nos comunicamos, así lo hacemos”, zanja Adrián.
Sus expectativas ahora son “disfrutarlo y pasarlo bien. Al final, nosotros hacemos esto porque nos apetece y ya está, porque queremos expresarnos artísticamente. No hay ningún incentivo económico. Por eso curramos de lo nuestro, y esto nos lo tomamos así”. Lo que no quita, dicen, que “mole mucho que esto que haces espontáneamente interese, poder compartirlo con la peña”. Fran se moja cuando preguntamos sobre su percepción de cómo están las cosas para un grupo como el suyo. Él lo ve también desde su proyecto paralelo Espiricom. “Yo, personalmente, lo veo mal. Está bien que haya de todo, pero si al final lo que disfrutas tú se va haciendo cada vez más pequeño y es cada vez menos accesible… A mí me gusta mucho la electrónica, y se están demonizando mucho las salas”. Además, “a grupos muy guay que no tienen tantos recursos se les hace muy difícil. Antes ibas a una sala y decías: ‘Para mí la taquilla y para ti la barra’. Ahora la tienes que alquilar, en cuanto terminas te echan porque tienen que abrir el bar. ¿Qué está pasando? Que salen grupos de la nada y ya están de cabeza de cartel en festivales. Se pierden toda la parte de girar, de las salas, de furgoneta y comer bocatas, que es quizá lo que mola más de todo esto. Mal para ellos y para nosotros. Todo se reduce a que si no vendes, no interesas, y pierde un poco el sentido”. “Pero esto son fases. Cuando empezamos también era súper chungo tocar. De repente se puso muy bien, pero al principio del todo era un puto jaleo tocar. Mientras haya gente con inquietudes, está bien”, matiza Guille en un tono algo más optimista.
JC PEÑA
eSCAPaRATe
AMIGAS!
vienen de Granada publican Todo importa tanto (Casa Maracas, 2024) en la onda Los Planetas, The Cure, Big House…
RR Amigas! se formó a principios de 2020 como dúo formado por María Navarro, compositora, e Irene, que escribe las letras. Nos dice María que “surgió una tarde en la que hablamos de poner música a algunas letras de Irene, solo por curiosidad y por pasar tiempo juntas.” Hasta que uno de sus amigos -y actual productor, Jaime Miralles,- se alentó al escucharla para crear una base musical y así completar. Ganaron el Emergentes y el año pasado escuchamos Mis movidas, pero ya tocaba disco; Todo importa tanto (Casa Maracas, 2024). No han tenido prisas y se han tomado el tiempo y el aplomo suficiente como para sacar una buena obra. Lo que era dúo quedó ampliado con Jaime Miralles a la guitarra, Marta Roca en el teclado, Teresa Aparicio en la batería y Javier Arregui en el bajo. Dice María que “Amigas! es un proyecto que busca la música en la cotidianidad y en las relaciones interpersonales de todo tipo. Habla de problemas tanto con un carácter más juvenil como con uno más adulto, habla de amor, de desamor, de gestión de emociones, de amistad y de diversión. Pretende poner voz y música
PALMERAS NEGRAS
vienen de Almería publican s/t (Aloud Music) en la onda Low, Godspeed You! Black Emperor, American Football...
RR Cuando surgieron a mediados de 2022, Palmeras Negras se definían a sí mismos como post-todo. Un EP, Ya no queda nada donde lo dejé (Desorden Sonoro, 2022), que dejaba claro que para ellos las etiquetas eran límites a estirar para romperse y entremezclarse con otros. Tres canciones que les llevaron a telonear a Monte Terror, a formar parte del cartel del Happy Moy Fest del año pasado junto a Viva Belgrado, y a grabar este nuevo disco publicado por Aloud Music. Si recordara, fue el adelanto que el pasado marzo vino acompañado de un vídeo, realizado por la dupla cineasta que son Cristina Meca y Rubén Carrillo con un resultado oscuro, romántico, ruidoso y sobresaliente. Y es que la conexión entre los miembros del ahora quinteto (antes trío) almeriense formado por Jesús Barrau (voz, guitarra y sintetizadores), Diego García (bajo y
“Somos la generación víctima de lo viral. Pero nos hemos dado cuenta de lo peligroso que es eso.”
a pensamientos generacionales e incluso servir de inspiración buscando un sonido fresco y pop”. Muchas letras proceden del estado de ánimo de la autora; María Navarro perdió a su madre el año pasado y de ahí mucho que ver con lo que oímos en el disco: “Todos en el grupo han sufrido conmigo esa pérdida”, apostilla. El concurso Emergentes les dio un giro viral, pero dice Jaime que “Podríamos haber ido mucho más rápido, aprovechando esa coyuntura del premio, pero queríamos ir con pies de plomo, lento. Creo que estamos en el buen camino y lo hemos hecho con mucho cariño y muchísimo mimo.” Contiene temas como “Afonía del alma”, “Nuevas formas de echar de menos”, “Pobre corazón”, “Techos bajitos” y el ya conocido “Mis movidas”. Dice María Navarro que “A Irene y a mí se nos ocurrían títulos, pero con el del disco no daba y me parecía lo más importante. No paraba de pensar en cómo debía llamarse. Y tras darle vueltas y vueltas llegué a la conclusión de que la realidad es tal como lo llamamos: Todo importa tanto y ahí quedó”. Sobre que sus canciones que son todas de tonos melancólicos, María se defiende: “Es que no sé componer canciones felices ni como no meter acordes menores. Me gusta la nostalgia; quiero hacer canciones felices y me lo paso bien, pero, joder”. Esta época donde se necesita lo viral, los likes y el número de visualizaciones, ellos lo ven como algo irreal, por lo que Jaime afirma que “somos la generación víctima de lo viral, pero nos hemos dado cuenta de lo peligroso que es eso. Yo lo he visto mucho en conciertos que te dice la gente ‘Pues este grupo tiene muchos seguidores y likes’ y luego están en una sala con cuatro personas de público”. María interfiere para decir que “hay que tener cuidado con los hype, los clicks y los likes y que se te suba a la cabeza”. El disco tiene un sonido esponjoso, más dream pop, porque los estados de ánimo están ahí. Comenta Jaime que “A veces tienes que encontrar tu lugar de reflexión y el que mejor te recrea. Y en este caso esa melancolía, esa nostalgia” y María enfatiza; “Somos el conjuntillo como de bailar llorando” OZANTOÑO TORRES
gritos) Jesús Torres (guitarra), Víctor Gutiérrez (batería) y Ángel Expósito (teclados y guitarra) es un guiso grabado, producido y mezclado por el propio Barrau pero que se empapa de todo y todos los ruidos desde el slowcore, al doom o tintes de un emo lejano. Aunque sinceramente eso es complementario, ya que s/t (2024) viene montado en un viaje de 30 minutos con 13 segundos repartidos en 6 cortes que ya huelen a invierno. DANIEL S. BOTELLO COHEN
Mondo Sonoro edición
festivales2024
22 de junio- 12 septiembre
SELVATIK
MÁLAGA
Juan Luis Guerra 4.40, Black Eyed Peas, Arcángel, Yandel, Bomba Estéreo, Juanes, Nicki Nicole, Ptazeta, Indie Day, Dembow Fest, Híbrida Fest, Image Fest... www.selvaticfest.es
3 al 13 de julio
FESTIVAL GUITARRA
CÓRDOBA
19 al 27 de julio
LA MAR DE MÚSICAS
CARTAGENA (MURCIA)
Eliades Ochoa, Julieta Venegas, Carmen Consoli, Baiuca, Joon, Ana Tijoux, Travis Bird, Buzz´Ayax, Carla Bruni, Marisa Monte, Ichiko Aoba, El Caribefunk, Nunatak... www.lamardemusicas.cartagena.es
25, 26 y 27 de julio
BRISA
MÁLAGA
Mikel Izal, El Kanka y Amigos, Lori Meyers, Maren, Dorian, Kiko Veneno, Xoel López, Ángel Stanich, Ciudad Jara, ElyElla.... www.brisafestival.com
Elliott Murphy & Band Featuring Olivier Durand, Cu4tro, Calexico, Europe, Robe, Rozalén, Julieta Venegas + Valeria Castro... www.teatrocordoba.es
26 y 27 de julio
VÉRTIGO ESTIVAL
MARTOS (JAÉN)
Joe Crepúsculo, Shego, Repion, Levitants, Vicente Calderón, Dalila, Tiraya, Pálida Tez, Clara Bardó, Ale Ocaña, Sr. Lobezno... www.acvertigo.es
OJEANDO
OJÉN (MÁLAGA)
La Plazuela, Queralt Lahoz, Ciervoss, Killmiya, Alameda, Salitre + Javi Medina... www.ojeandofestival.com
13 de julio
LA MONDA FEST
MONDA (MÁLAGA)
Astola & Ratón, Tabletom, Julia Martín, Cosmic Wachos, Desamparados en guirilandia... www.lacocheraentradas.com
19 julio al 24 de agosto
MÚSICA DEL MAR CÁDIZ
Camela, Mikel Izal, Melendi, Andy y Lucas. www.musicadelmarcadiz.es
ETNOSUR
18 al 21 de julio
ALCALÁ LA REAL (JAÉN)
Oumou Sangaré, Miguel Campello, Systema Solar, Jungle by Night, Queralt Lahoz, Son Rompe Pera... www.etnosur.com
23 de julio al 28 de septiembre
1 al 4 de agosto
Diana Krall, Simple Minds, Vetusta Morla, The Psychedelic Furs, Noa, Mikel Izal, Maria José Llergo, Patti Smith, Coque Malla, Amaral... www.1001musicas.es
30 de julio al 2 de agosto
TENDENCIAS
SALOBREÑA (GRANADA)
Salvador Sobra, Triángulo de Amor Bizarro, Javier Corcobado... www.tendenciasfestival.com
15 al 18 de agosto COOLTURAL
ALMERÍA
Mikel Izal, La Oreja de Van Gogh, Amaral, Dani Fernández, Two Door Cinema Club, Los Planetas... www.coolturalfest.com
13 y 14 de septiembre
(CÓRDOBA)
María José Llergo, Pahua, Selma Uamusse & Los 300, Lorena Álvarez, Kaleema... www.sonraiz.es
2 y 3 de agosto
DREAMBEACH
David Guetta, Loco Dice, Nicky Nicole, Joris Voorn, Reinier Zonevelde, Nina Kraviz, Wade, Gordo B2B Nico Moreno... www.dreambeach.es
2 y 3 de agosto
IMAGINA FUNK
POZO ALCÓN (JAÉN)
Osaka Monaurail, Tortured Soul, The Filthy Six, Shake.. www.imaginafunk.com
31 de julio al 3 de agosto
ALHAUTOR
ALHAURÍN DE LA TORRE (MÁLAGA)
Rodrigo Cuevas, Ángeles, Víctor, Gloria y Javier, Iseo&Dodosound, Space Surimi, Alcalá Norte... www.alhautor.com
13 y 14 de septiembre
Crystal Fighters, Arde Bogotá, Dani Fernández, Ginebras, Shinova, La La Love You, Claim... www.granadasound.com
NOSINMÚSICA
CÁDIZ
Álvaro de Luna, Coque Malla, El Kanka, Los Zigarros, Shinova, Tarque y la Asociación del Riff, Carlos Sadness... www.nosinmusicafestival.es
1, 2 y 3 de agosto
CONTEMPOPRANEA
OLIVENZA (BADAJOZ)
El Columpio Asesino, Sidonie, Surfin´Bichos... www.contempopranea.com
16 y 17 de agosto CABO DE POP
CABO DE PALOS (MURCIA)
3 de agosto BELLA MARBELLA (MÁLAGA)
Amara, Viva Suecia, La la Love You, Iván Ferreiro... www.bellafestival.es
23 y 24 de agosto
SIERRA NEVADA POR TODO LO ALTO
SIERRA NEVADA (GRANADA Mujeres, Hinds, Alberta Cross, Jordana B, Berrinches, Red Soul Community... www.sierranevada.es
Perro, Aiko el grupo, Sofía, Los Yolos, Las Petunias, Plataforma, Pau from Marc, Pedriñanes 77, Desaparezca... www.cabodepop.com
27 y 28 de septiembre
CABO DE GATA (ALMERÍA)
Los Hermanos Dalton, Ortopedia Técnica, Pedriñanes 77, Tetas Frías,... www.eventbrite.es
13 y 14 de septiembre BSIDE
MOLINA DE SEGURA (MURCIA)
Amaral, Iván Ferreiro, Siloé, Cala Vento, Samuraï, Perro, Sanguijuelas del Guadiana... www.b-sidefestival.com
26, 27 y 28 de septiembre
EXTREMUSIKA CÁCERES
Maka, Rels B, Saiko, Mala rodríguez, reincidentes, Foyone, Anier, Cristian Varela, Cano... www.extremusika.es
Mondo Sonoro edición Sur
Rodrigo
Cuevas
Hinds
CRÓNICAS
Warm Up
Lugar: Recinto La Fica. Murcia Fecha: 3 y 4/05/24
Lleno absoluto en la sexta edición del WARM UP Estrella de Levante, celebrado los días 3 y 4 de mayo en el Recinto Ferial La Fica, en Murcia. Sin duda, uno de los festivales más importantes para la música en directo en la Región, que volvió con su mejor cara después de la aciaga edición 2023, pasada por agua.
Poca gente llega a las 18h del viernes para ver el pop electrónico de Hoonine, pero ya hay más color con Mujeres. ‘Desde Flores y Entrañas’, su último disco, no para de dar alegrías a Yago, Arnau y Pol. Si mezclan canciones nuevas, como “Diciendo que me quieres” o “Si piensas en mí”, con “Un sentimiento importante”, Rock y amistad” o “Tú y yo”, tienen poco margen de error. Y ellos lo saben. Otra apuesta segura era La Paloma, con sus estribillos pegadizos de pop vibrante y ruidoso. Lástima que coincidiera con Johnny Marr. Un John Martin Maher que, pese a su extensa carrera en solitario y sus coqueteos con Electronic, Pretenders o The The, siempre será el guitarrista de The Smiths. Por si no quedaba claro, comenzó con “Panic” y terminó con “There Is a Light That Never Goes Out”. También sonaron “This Charming Man” y “How Soon Is Now?”. Y sin la firma Morrissey/Marr llegaron “Generate! Generate!”, “Spirit Power and Soul”, “Somewhere”, “Walk Into the Sea”, “Easy Money” o “Getting Away With It”, más la sorpresa de “The Passenger”, de Iggy Pop. Seguidamente, un poco de La La Love You da para comprobar cómo el punk pop de sus inicios ha llegado al mainstream gracias a “El fin del mundo”, “La canción del verano” o “Laponia”. Pero eran las 22h. y eso significaba re-
troceder 30 años, hasta la publicación de ‘Super 8’; no el mejor disco de Los Planetas, pero sí el más especial. De ahí la expectación en esta gira, que coincide con el estreno de la película ‘Segundo Premio’. Todo bien, salvo las ausencias de Banin y Eric, en otro episodio más dentro de la eterna guerra interna del grupo. J y Florent llevaron el timón del barco, con la ayuda de Miguel (Grupo de Expertos Solynieve) al bajo y Roberto (Unidad y Armonía) a la batería. Sonó el disco entero y en orden, como era de esperar: desde “De viaje” hasta “La caja del diablo”. Y las canciones mantienen tipo (salvo “10.000”, claro está). Además, “Manchas solares”, “David y Claudia”, “Prefiero bollitos, “Nuevas sensaciones”, “Pegado a ti” y “Mi hermana pequeña” en los bises. Con J acordándose de May Oliver… y hasta de Kurt Cobain. La auténtica resistencia del indie verdadero. Sen Senra presentó ‘PO2054AZ (Vol. I)’ con solvencia y finura arty, mientras el show de Sleaford Mods fue mucho más rudo. Ya saben, hooligans de Nottingham con orgullo de clase haciendo synth punk. Tras doce discos ya, el último es ‘UK GRIM’ (mismo título de la canción con la que empezaron su concierto). Después, “Tied Up in Nottz”, “T.C.R.”, “Jobseeker “, “Tweet Tweet Tweet”, “Nudge It”… aunque la mejor recibida sería “West End Girls”, de Pet Shop Boys. Seguro que acertaríamos al decir que Tennant y Lowe nunca han sido una influencia para Arde Bogotá, siguientes en el escenario principal. Nuevos ídolos regionales, su rock con ñ y altas dosis de testosterona mira hacia bandas como Héroes del Silencio o Parachokes, quienes lo practicaron con orgullo a principios de los 90. Nada nuevo, pero su tirón es indiscutible. Temas como “Cowboys de la A3“, “La salvación” o el cierre con “Los perros” fueron ampliamente coreados. Público también entregado con Ginebras
y su arsenal de artefactos pop: “Cosas moradas”, “Alex Turner”, “La típica canción”, “Chico pum”… Grupo que ha crecido mucho desde su anterior visita al festival. Morreo eran otros que repetían. Joseca y Germán siguen a lo suyo: actualizar la tradición andaluza y española de los 60, sumando las canciones de Alegría (2023) al estupendo catálogo que ya poseían. Se solaparon con la cumbia electrónica de Bomba Estéreo, que puso a bailar a La Fica; algo que también consiguió el dúo Delaporte, en una clave más electropop. Jimena Amarillo fue la primera en salir a escena el sábado con su mezcla de canción de autor, queer pop y rap. Nada que ver con el neoindie de los toledanos Veintiuno En el escenario más pequeño, entrando al recinto, le toca a Laura Sam. La totanera, sobrada de presencia y carisma, ofreció un show asombroso donde poesía, rap, artes escénicas y experimentación sonora se dieron la mano en canciones como “Tampoco puede ser eterno”, “La voz de los poetas” o “España”. Spoken word en su máxima expresión, con el apoyo de Derek Van Den Bulcke a los platos. Todo un descubrimiento. ¿Y el bolo de Sidonie? El mismo de siempre. Que no quiere decir mal. Pero visto uno, vistos todos. Marc, Jess y Axel llevan mucho tiempo mezclando grandes canciones (“El incendio”, “Fascinado” o “Sidonie Goes To Varanasi”, con la que cerraron) con otras que no lo son tanto, pero mueven el cotarro (“Un día de mierda”, “Estáis aquí”, “Carreteras infinitas”, “El peor grupo del mundo”…). De su nuevo disco, destacaron “No salgo más” y “Cedé”. Uno de los grupos internacionales que había que ver y oír (aunque cortos de volumen) era Black Lips. Con ese mix de raíces norteamericanas y garaje rock, los de Atlanta interpretaron temas nuevos como “Tongue Tied”, junto a “Hooker Jon”, “Angola rodeo”,
“Holding me holding you”… o hits incontestables del calibre de “O Katrina!” y “Bad Kids”. Con Cole Alexander y Jared Swilley a los mandos de la nave, destacó también Zumi Rosow al saxo. Luego vendrían los auténticos héroes locales, Viva Suecia, en uno de los conciertos más esperados (el de su décimo aniversario). Para esta ocasión especial contaron con refuerzos: sección de vientos, coros de Belter Souls y Carmen Alarcón (Hoonine) como una pata más del banco. Así las cosas, empezaron a caer los himnos, uno detrás de otro: “No hemos aprendido nada”, “Los años”, “Lo que te mereces”, “Hemos ganado tiempo”, “Amar el conflicto”, “Bien por ti”… Con colaboraciones de amigos: componentes de Second, Noise Box, Shinova, Ginebras y hasta Rozalén, para un final de fuegos artificiales. Literal. El trono en Murcia sigue siendo suyo. Tampoco faltan himnos en el repertorio de Cupido, siempre muy resultones en vivo: “Autoestima”, “Tu foto”, “La pared”, “Sobredosis de amor’, “No sabes mentir”, etc. Seis años ya dándole al pop, el urban y la electrónica, desde que se juntaron los caminos de Pimp Flaco y Solo Astra. Algunos más llevan Editors. La característica voz de Tom Smith y el pop oscurete que practican los de Birmingham (siempre a rebufo de Interpol en los primeros dosmiles) inundó La Fica con hits de antaño como “Bullets”, “Munich” y “Papillon” (de cierre). “Heart Attack” o “Karma Climb” fueron muestras de su último trabajo: EBM (2022). Veteranía de nivel. Curioso fue comprobar cómo Shinova no tocó ninguna de las canciones de su primer disco Latidos (2009), centrándose en otras como “El álbum”, “La sonrisa intacta” y las novísimas “Alas”, “Gloria”, “Lobos” o “Berlín”. Y con Perro llegó la hora de “la otra Murcia”, ganando la batalla sentimental a los parisinos The Blaze. Porque su vuelta (con ‘¿Te acuerdas?’) era de lo más esperado y porque han acumulado balas de sobra durante años para tener al público hipnotizado: “Catán”, “La reina de Inglaterra”, “Camiseta”, “Martillo”, “Marlotina”, “Ediciones Reptiliano”… Canciones pop, rock, kraut o tropicales, que hablan de ti y de mí. Quedaba cerrar la edición 2024 con la techno rumba de Ladilla Rusa. Solo por “Macaulay Culkin” y “KITT y los coches del pasado”, mereció la pena. Nos vemos en el 2025. VÍCTOR MARTÍNEZ
Mondo Sonoro edición Sur
Ramper + jai/egu
Lugar: Planta Baja. Granada
Fecha: 23/05/24
Planta Baja acogía el 23 de mayo una gran sesión doble: tocaban jai/egun y Ramper. El primero publicó el año pasado “Argiek Istilu” (Humo, 23), un debut sensacional en el que Aitor Martínez presentó su personalísimo acercamiento a la guitarra flamenca y su potente lírica en euskera arropada en una oscura producción electrónica. Los granadinos Ramper llevan unos años ganándose un público fiel con su particular acercamiento a géneros como el post-rock, el slowcore, el doom metal o el shoegaze. Su primer LP, “Nuestros mejores deseos” acaba de ser reeditado en vinilo por los propios Humo. El espectáculo lo inició jai/egun. Aitor entonó “Akapella” de pie, acompañado solo por una percusión electrónica que sonaba como un martillo golpeando un yunque. Su sombra recortada contra la oscuridad se alzaba imponente y nos introducía en el tenebroso mundo de su música. A continuación “Berriz” terminó de atraparnos gracias a sus furiosos guitarrazos, que nos barrieron en oleadas. “Alhacaba” fue un respiro con sus alegres ritmos y melodías de aroma cubano y su potente base electrónica. No duró la tregua: “Alkitran” volvió a llevarnos a caminos taciturnos. La interpretación de Aitor fue muy expresiva: la tristeza de su voz en los momentos más calmados y
el desenfreno del último pasaje de guitarra ponían los pelos de punta. Con las emociones a flor de piel llegó su canción más pegadiza, “Diabetes bat bezela”. Aitor enfatizó menos la melodía y subrayó más bien sus extremos emocionales: la primera parte casi la susurró, después comenzó a masticar las palabras con rabia y terminó golpeando las cuerdas de su guitarra descontroladamente.
Para cuando tocó “Armonikos” muchos oyentes de las primeras filas se habían sentado para disfrutar del concierto. Sonó después “Kaletik”, que tiene uno de los grandes giros emocionales de su repertorio: tras un estribillo en el que la densa base electrónica te asfixia, se hace un silencio roto únicamente por unos melancólicos acordes de guitarra. Entonces Aitor canta: “todo este destino me lo voy a comer yo, ¿quién si no?”. Un momento devastador; nos quedamos en silencio unos segundos antes de aplaudir. Aitor invitó a Ramper al escenario para despedirse con una versión ruidista de “Ta hala ere”, que mostró la cercanía emocional de ambos proyectos.
Ramper iniciaron su concierto con “Nuestros mejores deseos”, ya un himno del post-rock patrio. Esta interpretación lo demostró: con el público prendado, la banda conjuró tormentas de ruido, pasajes calmados y crescendos con un magnífico control de las dinámicas. Le siguió “Día estrellado”, un tema nuevo donde muestran su gusto por emplear elementos de
las músicas populares, con partes que evocan las marchas de Semana Santa e incluso el uso de la melodía de “Vamos a contar mentiras”. Enlazaron el final de este tema con la segunda mitad de “Un miembro fantasma”. La banda al completo estaba volcada, llegando a un clímax brutal con flauta, trompeta y clarinete y Álvaro cantando con una pasión inusitada. En una pausa anunciaron que estos dos temas estarán en su inminente segundo LP. No obstante, seguimos con dos clásicos del primero. El momento de “Pánico en las calles” en que el bajo acumula feedback antes de lanzarse hacia el atronador final fue uno de los más contundentes del concierto. Y qué decir de “Amalola”, lo más cercano a un hit de su repertorio. Un momento comunal para sus fans que ejecutaron a la perfección. Ayudó a ello que Álvaro iba buscando con la mirada los ojos del público y se sonreía cada vez que alguien entonaba con él la letra. El concierto culminó con “Poderoso puño”, un tema que, aunque pertenezca también al álbum inédito, es ya un clásico de sus setlists. Con Aitor de nuevo sobre el escenario, atacaron la canción con la intensidad acumulada de toda la noche, disfrutando de la triunfal despedida a la velada. Mientras sonaban las últimas notas de vientos, ya no había dudas: esta será una de esas noches que dejarán huella, que harán que la gente diga con orgullo: “yo estuve allí, yo vi a Ramper con jai/ egun”. JESUS MARTÍNEZ SEVILLA
Mondo Sonoro edición Sur
Alhambra Monkey Weekend
Lugar: Diversos Escenarios.
El Puerto Sta. María (Cádiz) Fecha: 14, 15 y 16/06/24
Se ha cantado y dicho de mil maneras diferentes, y así, con estos versos, lo dejó Félix Grande por escrito: “Donde fuiste feliz alguna vez, no debieras volver jamás”. Ni caso a Félix, claro. Tres años sin ir al “Monkey Chico”, al Puerto de Santa María, es demasiado tiempo y había que poner remedio ya, sí o sí. Cierto es que no estábamos en las mejores circunstancias… con un océano cada vez más grande entre medio, casi 1.500 kilómetros de distancia, sin equipo y con mucho trabajo acumulado de ida y vuelta, pero allá que vamos, bus, dos vuelos y tren de cercanías a las espaldas. Con la mochila aún a cuestas, la luz gaditana nos marca el camino hacia la primera cerveza y reencuentros en Bugalú, pulsera festivalera de Alhambra Monkey Weekend 2024 ya reluciente en la muñeca. Repasamos itinerario y nos disponemos a escalar las almenas del Castillo de San Marcos, fortaleza del siglo XIII como escenario (Alhambra) principal del festival y marco incomparable en esta jornada inaugural de viernes. Mención aparte y felicitación por la maravilla de despegable/ fanzine loco con los horarios y el diseño de monetes y unicornios mil. Por el bien de la humanidad debería haber merchan con estos diseños.
No llegamos a la descarga de Cuerda Huida, pero aún tiembla la tierra que pisamos y resuenan los ecos de su cóctel incendiario de post punk-hardcore. En
la brisa fresca de la recta final del debut en solitario de Ade Martín (ex bajista de Hinds), Shanghai Baby, tomamos posiciones, desgranando su flamante “EP2” (24). Distorsiones y revitalizantes melodías a base de indie-rock directo a la yugular, con aparición y colaboración estelar en uno de los temas del siempre omnipresente Paco Loco, productor del disco de Ade y figura imprescindible en el Monkey. Se nos queda pegada como salitre a la piel una rabiosa “I Could Never Beat You” que bailamos y cantamos hasta sin sabernos la letra.
Y casi sin tiempo a parpadear, con algún reencuentro más (y triste desencuentro) entre medias, dos de los cabezas de cartel a quemarropa, primero los cordobeses Viva Belgrado, y cerrando el patio del Castillo los sevillanos y mutantes Pony Bravo.
Cae la noche estrellada en el Puerto de Santa María y salen a escena Viva Belgrado para brindarnos el concierto más intenso y desgarrador de esta edición, demostrando una vez más (entre muchas otras cosas) que son puro fuego en directo y que su último “Cancionero de los cielos” (24), que recorren ampliamente, peleará con fuerza por coronarse como disco nacional del año. Así, en ese arder y arder, abriendo heridas y estrujándonos el pecho con cada interpretación como si fuera la primera y última vez, nos pasan por encima las nuevas piezas que suenan a clásicos instantáneos de la banda, fundiéndose a la perfección en un setlist que es pura balacera continua. De la inicial explosión en la cara con
“Una Soga” al cuello, a ese “al futuro que le jodan” al que nos aferramos como una estrella fugaz que nos quema las manos en “Cerecita Blues”, pasando por las devoradoras dudas hilvanadas en “Un Collar”, de efímera tregua con compás flamenco y que “por las noches me despiertan con un quejío singular”, para, antes y después, seguir “ahogando en el volumen toda mi ansiedad, ignorando el peligro, dejándome engañar…”, con “Chéjov y las Gaviotas” en el aire.
“La pena es pena, la cante quien la cante… Auscultando los recuerdos por si encuentro algún latido…”, quemaduras van y vienen con “Vicios” y caemos rendidos “en un loop en los anillos de Saturno”, con una “Jupiter and Beyond the Infinite” en la que nos habríamos quedado a vivir hasta el siguiente Monkey, más otros astros celestes compañeros de surcos, como esa crisis de fe que nos centrifuga por dentro en “El Cristo de los Faroles” o las bellísimas y dolientes, ay, “veinte formas de acordarme de ti”, deseando que se produzca el milagro/eclipse en la noche, salga el sol “y se ahogue un poco mi pena por el tragaluz…”. Pero no, “no deja de llover”, lo único que asoma por y tras “Un tragaluz”, son las fauces de “El Gran Danés” final, masticándonos las entrañas y empujándonos (con ese martilleante “no hay nadie, no hay nadie, nadie” dándonos vueltas en la cabeza) a la búsqueda de un cóctel doble (made in Monkey/Juan Franco rules) que afloje el nudo en la garganta. Aún trepan junto a las enredaderas por las paredes de bloques de piedras, el eco de ese “a donde quiero llegar yo, no existe,
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/ a donde quieres llegar, yo no existo” de “Júpiter y más allá del universo”, pero la fiesta debe continuar y Pablo Peña, Darío del Moral y Daniel Alonso, con el productor Raúl Pérez como cuarto miembro de una de las bandas más mutantes, genuinas e influyentes de los tres últimos lustros, los sevillanos Pony Bravo, ponen patas arriba el Castillo desde que pisan las tablas con la hechizante “Linda” de arranque. Otra de esas grandes formaciones que un día pasaron y saltaron por ese bendito trampolín de “conoce hoy las bandas del mañana”, lema, latido y espíritu primigenio del Monkey Week. De su aún humeante quinto trabajo, “Trópico” (24), también nos atrapan con la tántrica “C’est Chic - C’est Bon”, desplegando todo su universo costumbrista y mordaz ironía, pasando por la sensualidad disco-soul de la envolvente “Magic Feeling”, con ese “ay, qué feliz estaba yo, cuando tú te acuerdas de mí” cantado por todos. Y aunque alcanzamos el punto álgido de la verbena lisérgica de “Trópico” con la muy celebrada “Jazmín de Megatrón”, son las interpretaciones de los clásicos de la banda (repasando muchas de las cumbres de sus cuatro anteriores trabajos) con las que nos regalan vidas extras a cholón, kraut-funk y psicodelia andalusí a borbotones: De esa coplera “Niña (Ninja) de fuego” que inmortalizara Manolo Caracol y hacen libérrimamente suya, con la banda al completo en contagioso trance hipnótico, fundiéndose en cada embestida, mientras la personalísima voz de Daniel Alonso nos cala hasta los huesos; a otras masterpieces de ese fantástico “Un Gramo de Fe” (10), como la locura colectiva de “Noche de Setas” o ese siempre “fuego sanador” de “La Rave de Dios” (canción que tendrá marcado protagonismo también en la jornada del sábado, dejando para el recuerdo uno de los momentos más inolvidables de esta edición). No hay luna llena, pero, sin frenos y a tumba abierta, los cuatro Ponys bravos sigue galopando por la ribera del Puerto, “escapando de la rueda”, intercambiando posiciones e instrumentos con la naturalidad y magia que les caracteriza, bordando en oro “El Rayo”, teletransportándonos a la feria de abril más loca con el “Rey Boabdil”, al final de campaña de “El político neoliberal”, con escala por todo lo alto y bola de espejos en “Ibitza”, para terminar por rematarnos con el apoteosis empoderado del hitazo “Totomami” (“ole tu coño, / admiro tu valor, / dame amor”) y ese “Mi DNI” que sigue la estela blanquecina de una rave interminable, con Pablo Peña a la voz y maracas. Y sí, cantamos esa estrofa en la que se nos nombra: “No sé si fue ahí o fue en otra fiesta, / en una de MondoSonoro, / no sé, la gente estaba muy puesta, / no sé, la gente estaba muy puesta / y, por supuesto, yo el peor de todos”.
La fiesta continúa en el Monkey Chico, pero el cansancio, el corazón y el sombrero, me instan a una cobarde retirada a tiempo.
El sábado comienza temprano y las gafas de sol son imprescindibles para las que se acostaron tarde o los que aún no lo hicieron, desayunamos destilados espirituosos
con sabor a hierbabuena en la mítica Destilería Cacao Pico, la más antigua de España (fundada en 1824, sí, cumple 200 años) rodeado de alambiques y un patio con chambao de parras que dejan entrever el azul de un cielo totalmente despejado. Otra de las características exclusivas de este rara avis de los festivales, sus innumerables localizaciones para que cada concierto sea exclusivo y más inolvidable si cabe. La madrileña María de la Flor es la encargada de encender la mecha sonora, recorriendo su debut “Hilanderas” (22) y su último EP “Resalada” (24), embelesándonos con su voz, a medio camino del folclore nacional y los sones latinoamericanos. De “El día de hoy”, con el público sumándose a los coros, a las “Naves”, con solo de violín incluido, pasando por una “La Flor y la Espina” que nos agarra y paraliza, justo cuando ya nos íbamos. Un penúltimo trago de esa poción mágica mañanera (Soho’s Fino Spritz), a base de fino de la tierra y aromas naturales de hierbabuena, limón y bergamota, para despedirnos con ese “Sí, ya lo sé, cada paso que das / es leña para la hoguera / que con su fuego sanará” de “El Son del Camino”.
En busca de otro marco de ensueño y de otra delicatessen que nos tiene preparada el Monkey (el concierto más bonito de esta edición), de la mano de la mallorquina
Júlia Colom en el patio abierto al cielo del Museo Arqueológico Municipal, “El
Hospitalito”. Como la estatua de una diosa griega que recupera la vida, nos hechiza de principio a fin, con su sobresaliente debut, “Miramar” (23), en formato trío y a base de una voz celestial, folk y texturas electrónicas que nos mecen y no nos dejan tocar el suelo. Del futurista y urbano juicio final de “Estrófica” en el que no sabemos qué quedará de nosotros, a “Ell i Ella”, esa dolorosa espera interminable del corazón que, aunque no quiera, sabe que, habiendo hecho todo lo que estaba en su mano, es ya demasiado tarde (¿o no?) y debe irse lejos de allí. Si en la bellísima interpretación de “Camí Amunt” nos corta la respiración y para el tiempo a su antojo, seguida de la sentida aspereza de la tradición en la dramática “Tonada de Collir Figues”, es con la central y resplandeciente magia de “Canta para seguir” cuando nos termina por conquistar para siempre. Recuerden, Júlia Colom, no se la pierdan bajo ningún concepto. ¡Vaya mañana de diez!, que, como colofón, trago de “Sol y Sombra” (23) con las seis cuerdas oscuras y camaleónicamente flamencas en su raíz, de Pedro de Dios, mitad de Guadalupe Plata. ¿Dónde? En un templo del cante jondo auténtico por los cuatro costaos, la Tertulia Tomás el Nitri, donde se respira arte nada más entrar, con esas letras al fondo que rezan: “Como mejor se escucha es en silencio”. Instrumentales como “Bronco Bill”, “De Jaén” o la hermosísima “Stabat Mater” arrancan los aplausos
hasta de los más puristas de la peña, pasando por encrucijadas en las que el blues y el flamenco aúllan a la par en la puerta, como en el “Al infierno que vayas” final, pasando antes por ese “Ataúd” perdido y la pregunta pertinente de “¿Quién va a enterrar ahora al muerto?”, o esa resplandeciente oscuridad con latido de vals de “Ruina”, cantada a medias con Eugenia Cervialla. Gloria para Pedro de Dios y sus raíces a plena luz del día. Y no olviden escuchar su ultimísimo “Cantes Malditos” (24), junto al cantaor Antonio Fernández, quizás el primer gran disco en el que blues y flamenco se funden a la perfección, con extra de negritud marca de la casa. Imprescindible. Mini descanso para comer y recargar batería para afrontar la larga jornada que nos espera, con conciertos que se entrecruzan y solapan en diferentes lugares. Primera parada para echarnos un cantecito con Paco Loco y compañía en el mítico Karaoke “Los Jaguares”, en el pequeño escenario Garaje Bugalú, con la calle colapsada de gente y buen rollo a cada paso, cantando todos a viva voz, tema a tema. De “Suspicious Minds” a “La Chica de Ayer”, pasando por esa enérgica pregunta planetaria sin respuesta lanzada al aire del Puerto de Santa María, “¿Qué puedo hacer?”, con la que huimos de allí antes de que sea tarde, arrastrando y cantando sin darnos cuenta todo lo que le sigue (“...si después de tanto tiempo / no te dejo de querer, / y si después de
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todo el tiempo que ha pasado / si nos vemos no sé lo que hacer…”). Necesitamos sombra y ruidismo del bueno para dejar de tararear el clásico de Los Planetas, y eso nos dan Nuria Capote y Daniel Escortell, Nelo, ambos ya compañeros en los recordados Furia Trinidad. Ahora, bajo el olivo, en un pequeño rincón del castillo, se presentan como Masa, Nelo a la batería (“Soni”, bajista de Derby Motoreta’s Burrito Kachimba) y Nuria a la guitarra eléctrica y voces, provocando una tormenta sónica sin tregua, en la que el rock progresivo se funde con la psicodelia y el puro metal más afilado y abrasador. Se suman al aquelarre en la recta final las seis cuerdas Alejandro García (“Bacca”, guitarra también en Derby Motoreta’s Burrito Kachimba), agigantando el enjambre de riffs y la bola de fuego. No dejan títere con cabeza y hasta el olivo se contonea en cada embestida. El festival alcanza velocidad de crucero y nosotros también, de nuevo a “El Hospitalito” de cabeza, donde Los Sara Fontán, rodeados del numeroso y expectante público que abarrota el patio del Museo Arqueológico, siembran de ojos abiertos como platos la tarde. Sara Fontán y el omnipresente Edi Pou (mitad de ZA!), recorren su disco “Queda pendiente” (23), rezumando experimentación, riesgo y combustión instantánea en cada movimiento, con ritmos sorprendentes a la batería y loops interestelares de violín, cuidadísima electrónica espacial y capas sonoras y paisajes regrabados en los que orbitamos, sin tocar el suelo, a su antojo. Mutación constante en cada interpretación, fundiéndose desde el primer parpadeo en crisálida de dos cabezas y en la siguiente caída de párpados, metamorfoseando en mariposa/dragón de fuego. Totalmente hipnóticos y adictivos, con reminiscencias clásicas al violín por momentos, para saltar una y otra vez a abismos noise y post-hardcore, con resplandores de pop lisérgicos y sin seguir ninguna aparente dirección preestablecida, narrativa tradicional o imaginario concreto; todo más cerca de la improvisación “dirigida” y del arte efímero, que nace y muere en el momento, pero que no se olvida, ya que te arrastra como una cascada helada que cae
del cielo, o como una lengua de fuego que aparece, sin avisar, y te atrapa en esa justa y fina línea que separa la realidad del mundo de los sueños. Un torbellino sugerente de sensaciones, texturas y ritmos que te envuelven y empujan a avanzar constantemente, nada de zona de confort y simple contemplación para el espectador, somos arrastrados por un juego sin tregua, un fluir experimental que te lleva por delante con ellos, quieras o no quieras. Arte libre controlado e incontrolable, piezas que parecen apelar a la inquietud de ese justo instante, a la adrenalina que despierta afrontarla, transmitirla y sentirla antes de que deje de existir para siempre. Todos echando humo por las orejas y con una gran sonrisa dibujada en la cara, incluido Perrate, al que saludamos y nos dice, “no hay nada más contemporáneo que esto, son una pasada”. No hay tiempo ya para aterrizar, así que toca volar de un lado a otro para perdernos lo menos posible: la tarde dora las pieles y, a las puertas del Castillo, en la gran Plaza Alfonso X El Sabio, se sitúa el escenario gratuito (bravo a la organización), a rebosar con el flamenco José de los Camarones (y su portentosa banda de rock), auténtico y artista con solo respirar. Nos llevamos para el recuerdo ese precioso dueto con María de la Flor en “Diálogos con Teresa” y nos despedimos con sus reivindicativos “Tangos de la Libertad”. Intentamos ver a Jordi Ganchitos en la sala Milwaukee, pero la cola es kilométrica para entrar y pegamos el oído para escuchar a lo lejos “Calvo con Barba” y sentir que la fiesta y diversión está alcanzando cotas muy altas dentro. Tornado asegurado de ironía, surrealismo, diversión y loca metamorfosis en cada tema. Nos asomamos al Parque Calderón, sólo para ver a lo lejos que la pista de coches de choque está en su sitio y funcionando a todo gas, con Dalila de rave tempranera. Toca volver al escenario principal (Castillo de San Marcos) y fluir con la lisergia canaria de GAZ y La Estrella de la Muerte. Tardan segundos en sobrevolarnos con su ovni sonoro y provocar una abducción colectiva, de principio a final del show, a base de su genuina fórmula instrumental de rock progresivo y
psicodelia espacial. Virtuosismos y pasión sintetizada con la que tejen capas y capas instrumentales que nos envuelven y hacen levitar en cada interpretación. El sexteto se funde en uno y el atardecer hace lo propio en el anochecer, con la mejor banda sonora posible.
La psicodelia sigue reinando en el castillo, tomando el relevo de la corona lisérgica los madrileños Mohama Zas, añadiendo a la jornada sus aires de Anatolia, arabescos alucinógenos y ritmos épicos y ancestrales perfectos para defender la fortaleza ante cualquier ataque inesperado, con el baglama saz de Javier Alonso al mando. Del “Yai Yai” de su último “Máquina de Guerra” (24), con sabor a Caño Roto y a Grecas turcas, a “Quemar las naves”, que es lo que no dejan de hacer sobre las tablas en ningún momento. La mecha multicolor sigue su curso con el debut de Esperanto, con la brasa aún al rojo vivo de Melange en sus bases, con Dani Fernández y los hermanos Sergio y Adrián Ceballos de Mohama Saz, sumándose también a esta nueva aventura Javier Alonso. Suena su adelanto “Dónde estás” y gran parte de lo que será su disco debut… Nos dejan con ganas de mucho más y deseosos de hincarle el diente a ese primer trabajo discográfico de la banda.
Cogemos aire en una Plaza Alfonso X El Sabio llena hasta la bandera, con uno de los platos fuertes de esta edición, la banda asturiana pionera del “indie” nacional primigenio, Australian Blonde, que revisan de principio a fin su trabajo de presentación, disco imprescindible del género que celebra su 30 aniversario, “Pizza Pop” (93). Francisco Nixon a la cabeza, Paco Loco dándolo todo a la guitarra y la banda al completo en perfecto estado de revista, haciendo que cada una de las composiciones suenen con la frescura y energía de sus primeras veces, con la diversión y la nostalgia intacta en el ambiente. De la energía salvaje de la pista que da nombre a la banda, “Australian Blonde”, a ese “Straight Ahead” en el que Dinosaur Jr. y Daniel Johnston (siempre presentes en el sonido de la banda) se funden más que nunca, pasando por la sentida montaña rusa sentimental de una “I Want You” que pellizca por dentro, o
ese resplandeciente “It,s Over” que cierra el disco. No siguen el mismo orden que en los surcos de “Pizza Pop”, pero sí esa brisa unificadora y contagiosa efervescencia, cuando, de repente, comienzan a sonar los esperados acordes con los que se alcanza el clímax del show y esa frase inicial que se clava en el costao, “So tell me Why I love You…”, la esperada pieza de desamor que abría el debut, “Chup Chup”, un hit instantáneo que, hoy, treinta años después, es coreado por toda la plaza en el concierto más multitudinario del festival. A ver quién se quita ahora de la cabeza el “chup chup” y todo lo demás… Nos quedaban pocas balas y no haríamos ya movimientos ni planes arriesgados (aunque algunos hicimos y otro tuvimos en mente), así que decidimos defender el castillo y alrededores. En la Plaza, antes de entrar de nuevo a la fortaleza, disfrutamos con los Sick Buzos, que, aunque no tuvieron tan buen sonido como Nixon y compañía, sí dejaron ese sello tan personal que tuvieron y tienen, con el arrebatador fraseo (a medio camino de Lou Reed y Peter Perrett) de Chencho Fernández al frente. Repasan su cancionero y como guinda un “What Goes On” de la Velvet que bordan y que le vuelve a dar sentido a esta noche y a las venideras. Entramos al castillo y saboreamos uno de los conciertos que más a fuego teníamos apuntado en este Alhambra Monkey Weekend 2024, la presentación del sobresaliente “Jolifanto” (24) de Perrate y ZA! Y como era de esperar, superan las expectativas. El exorcismo de polirritmias comienza con nerviosas percusiones a cargo de Edi Pou, golpeando baqueta con baqueta, sintes y una trompeta paquidérmica a cargo de Pau Rodríguez, con Perrate arrancándose con la jondura que le caracteriza y pregonando en el mercado, vendiendo moras, piñas y esas “pelotitas americanas”, con los coros de ZA! en segundo plano y un despegue sónico que se torna enjambre de distorsiones, percusiones, teclados y atmósferas abrasivas. Ya nos tienen noqueados y este tratado dadaísta en el que la experimentación, que va de la raíz más profunda a la rave más espacial, nos mantendrá en un conti-
nuo estado de trance colectivo hasta que todo se acabe.
Sólo por vivir la “Seguirilla MIDI” en directo, ya vale la pena los 1.500 kilómetros (de ida y los 1.500 de vuelta que me haré en un rato), cubista y ancestral en cada quejío de Tomás, para terminar por desembocar en una sudorosa rave en la que humanos y replicantes de Blade Runner bailan hasta el final de los días. Siguen con el ritual y el hechizo continúa “abrazando la tierra” con la titular, “Jolifanto”, con sones africanos y jondura a borbotones que flota en una atmósfera fantasmagórica e industrial que nos absorbe a cámara lenta hasta el ojo del huracán. Cada interpretación supera con su crudeza y espontaneidad inquietante a las originales del disco, de una majestuosa “Posible Soleá” que abre el cielo en dos, con Perrate rompiéndose el pecho por La Serneta y los ZA! sembrando de tensión y sonidos futurista e industriales el ambiente, preparándonos poco a poco para el estallido polirrítmico y tormenta de distorsiones que se acerca, acelerando y metamorfoseando en bulerías en llamas, pura fantasía abrasadora que nos deja sin aliento y con ganas de más. El fin de fiesta rumbero, cibernético y alucinógeno, llegaría con ese “tú me estás matando y yo no puedo más, / y yo me voy contigo donde me quieras llevar”. Una “Milonga” con público bailando sobre las tablas, que cierra el disco como broche perfecto; pero aquí la noche se termina de rendir a Perrate y ZA! con la sorpresa que nos tenían preparada (esto solo pasa en el Monkey): “En algún lugar de Wichita / hay una carpa, hay una carpa, / donde va toda la gente del pueblo…”, sí, versión inolvidable, “van a la Rave de Dios, / a la Rave de Dios” con los Pony Bravo presentes entre un público que no para de saltar, bailar y cantar cada estrofa como si no hubiera mañana. “No hay mejor colocón que el que produce” Perrate y ZA! Fuego sanador para todas y todos. Tras lo vivido, no se me ocurre mejor final de fiesta para este Monkey de Puerto que con Los Voluble. Nos adentramos por los pasadizos del castillo y todo está preparado en la Bodega Caballero, con
los hermanos Benito y Pedro Jiménez (podrían ser los cabecillas que estaban bajo aquella carpa en algún lugar de Wichita…) Agitadores y activista de la experimentación audiovisual y sonora, grandes conocedores de la tradición y de la música andaluza que, siguiendo la estela de su anterior espectáculo, “Flamenco is Not a Crime”, nos ofrecen ahora este “Jaleo is a Crime”, exprimiendo el folclore y refrescando el lenguaje y la simbología flamenca, a base de imágenes de archivo y montajes desternillantes que señalan injusticias mil y la estupidez y falta de escrúpulos del ser humano, de ayer y hoy; a ritmo y golpe roto de afiladísima electrónica, en infinitas variables y formatos artísticos, pasando por la remezcla, el live cinema, el folclore digital o el political remix video. Un viaje indescriptible, entre el cante jondo y la electrónica, entre la reivindicación y el compromiso sin fisuras, con el pueblo palestino muy presente y la falta de humanidad de políticos y ciudadanos sin cerebro ni corazón, y todo bajo una inmensa bola de espejos que nos conduce a una nueva rave desenfrenada y sin fin.
La fiesta continúa con pinchadas, pero decido retirada tras Los Voluble, broche de oro de uno de los mejores Monkey Weekend que recuerdo.
Y me van a perdonar, primero por la tardanza en escribir esta crónica, y también porque irremediablemente se la tengo que dedicar a uno de mis mejores amigos, el que ha provocado que aún siga en shock y que estas palabras hayan ido brotando con lentitud y entre lágrimas... Justo cuando comencé a teclear, me enteré de que nos habías dejado, tú, que estabas en el mejor momento, tú, que ahora, a los 40, estabas yendo de nuevo a festivales, tú, Ignacio, que unías y disfrutabas como nadie. Seguro que ibas a venir al Monkey antes que tarde. Te seguiremos celebrando, en el Puerto de Santa María, en San Roque y en cada uno de los lugares a los que volvamos, porque volveremos siempre, allí donde fuimos felices y, aunque ya no será lo mismo, lucharemos por volver a serlo. Siga el baile.
DAVID PEREZ MARÍN
Mondo Sonoro edición
MASA.
PEDRO DE DIOS.
