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Buscan editores botín, acusa chavista

reForMa / StaFF z Roberto Cardiel rindió protesta como encargado de la Secretaría Ejecutiva. dría empeorar si en la Cámara de Diputados eligen a cuatro nuevos consejeros afines a Morena.

“Este Consejo General podría ser tomado por asalto por una facción que trabaje oficiosamente en su demolición”, señaló.

Flores tomó el micrófono para rebatir al consejero:

“Se lo digo directo y a la cara: usted va a tener que hacer frente a todas las intrigas que se están sembrando, porque la reforma va a prevalecer, y usted va a tener la responsabilidad de llevar a cabo la organización de las elecciones con esas reglas”.

El morenista volvió a ser interrumpido por Córdova, quien molestó le gritó que si amenazaba a su compañero, no lo permitiría.

Flores lo negó, pero consideró delicado que intenten sembrar en la gente el ánimo de que no habrá elecciones en 2024.

El finiquito En un intento por cambiar la atención sobre los riesgos con las nuevas normas, los representantes de Morena exigieron a Córdova y Murayama que informaran del monto de su finiquito.

“Hicimos una consulta a la ciudadanía. Les manda preguntar, a un mes de que se larguen de aquí, ¿cuánto se van a llevar de finiquito? Se van a ir millonarios de este Consejo”, ironizó García.

“Sé que el autoritarismo tiene prisa, pero tenga paciencia”, le reviró Córdova, quien dijo que el monto será público cuando se vayan. García ya se enfilaba a la salida del salón, cuando Murayama le dijo: “Le voy a decir cuánto vamos a llevarnos. Multiplique el monto del salario por tres y, luego, 20 días por nueve, y súmelo. Si le es imposible, demande a quien le dio su certificado de primaria”.

Después un cruce de acusaciones de 2 horas y 32 minutos, Córdova tomó protesta a Cardiel.

“Usted estará, en los días en que ocupe esta función hasta que el orden constitucional sea restaurado, a la altura de Edmundo Jacobo Molina”, indicó.

Pide Presidente abrir los fideicomisos

antonio Baranda y Guadalupe irízar

El Presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó ayer que es un enigma el monto que tienen los fideicomisos del INE que desaparecieron con el llamado “Plan B”, por lo que llamó a los consejeros a aclarar a cuánto ascienden.

“¿Y cuánto es ese dinero? Enigma, no sabemos, y tenemos derecho todos a saberlo, ojalá y hoy aclaren esto”, externó en la mañanera.

También criticó la “caja de ahorro especial” que, afirmó, se llevarán los funcionarios que saldrán del organismo con la reforma, incluido el ex secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo. “Es que tienen una caja de ahorro especial en donde, con el presupuesto público, se les entrega una cantidad mensual que van ahorrando. Y este señor (Edmundo) Jacobo ahora que va a salir se lleva todo lo que ahorró”, criticó.

“Cuando termina su función o lo cambian se lleva todo ese ahorro. ¿Cuánto costaba mantener esa caja de ahorro especial cuando llegamos? Seis mil millones de pesos al año. Y la cancelamos, pero estos se ampararon”.

El Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, detalló que la reforma instruye a que desaparezcan dos fideicomisos del INE: uno de contingencias laborales y otro relativo a la administración de los inmuebles.

La industria editorial en México no pelea por la ciudadanía o la educación; pelea por un botín millonario, aseguró Sady Arturo Loaiza, director de Desarrollo e Innovación de Materiales Educativos de la SEP.

El funcionario, que antes de llegar a México colaboró para el régimen de Nicolás Maduro y ha declarado su militancia chavista, apoyó a su jefe Marx Arriaga, quien afirmó que las casas editoriales aprovechan un negocio de millones de pesos con los libros de texto gratuitos.

Loaiza moderó el seminario “Los Libros de Texto Gratuitos. Avances y retos de una nueva política”, organizado por el Conacyt y realizado de manera virtual.

En el seminario, el ponente estelar fue Arriaga, director de Materiales Educativos de la SEP, quien pregonó la salida de los empresarios de la educación para imponer la visión de izquierda en las escuelas.

“Hay empresarios de la educación que no van a dejar este espacio, este territorio así de fácil. El gran reto (de la SEP) es hacer entender a esta gente que se ha dedicado a comercializar la educación, que genera un mercado, genera mano de obra barata para maquila, para transnacionales, que dejen del lado la educación y que permitan que el sueño de la izquierda se haga real: que es que la educación, que la cultura llegue a todos los niveles socioeconómicos”, dijo.

Arriaga también afirmó que la tarea de la SEP es “convencer a ese sector empresarial que saque las manos de la educación” y no la vean como negocio para evitar, según juzgó, que tengan a padres de familia y maestros “cautivos de políticas que generan para hacer de esto un mercado”.

Loaiza apoyó los dichos y añadió que los libros de texto en México impusieron una ideología de la dominación aSÍ lO dIJO z Sady Arturo Loaiza y Marx Arriaga, funcionarios de la SEP dedicados al desarrollo de materiales educativos, en el seminario “Los Libros de Texto Gratuitos. Avances y retos de una nueva política”, organizado hace unos días por el Conacyt.

Sady Arturo Loaiza Funcionario de la SEP

¿Está realmente preocupada la industria editorial por la educación o sencillamente persiguen millones de pesos? Vemos ese negocio al igual que la educación o la salud”. Los libros de texto mexicanos situaron elementos de corte ideológico, que posicionan ideologías y van a ir hacia la construcción de hegemonías”.

Marx Arriaga Funcionario de la SEP del hombre por el hombre y que “ahora los materiales (de la Nueva Escuela) son capaces de externar las distintas contradicciones sociales que vive nuestro País, son capaces, adicionalmente, de mostrar esos grandes problemas estructurales e impulsar la transformación de las realidades de las niñas y niños”. especial

Hay empresarios que no van a dejar este espacio así de fácil. El gran reto es hacer entender a esta gente que se ha dedicado a comercializar la educación”.

Según Loaiza, los libros de texto mexicanos situaron “elementos de corte ideológico que van en contra de los derechos humanos”.

“¿Está realmente preocupada la industria editorial por la educación o sencillamente persiguen millones de pesos?”, cuestionó el colaborador de Arriaga

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