NOTA HUMANA Marisol Recondo:
La opción de prevenir y acompañar a mujeres de la Araucanía
Resiliencia y vocación de servicio forman parte del viaje de Marisol Recondo, quien desde un diagnóstico de cáncer decidió formar “Caminando por la Vida”, agrupación que ella preside, la que se orienta a la educación y prevención del cáncer de mamas, cáncer cervicouterino, y a la sensibilización de temas como violencia de género en la comuna de Padre Las Casas, región de La Araucanía. El inicio No en vano, seis años como religiosa y treinta y cinco años como coordinadora parroquial, aportaron significativamente a la construcción del ADN social de Marisol Recondo, sin embargo, ya casada y con hijos, su historia dio un giro en 360 grados tras ser diagnosticada con cáncer cervicouterino, una infección viral persistente asociada al Virus Papiloma Humano (VPH). Con el apoyo de su esposo, su familia y tras un año completo de tratamiento en el Hospital Hernán Henríquez Aravena de Temuco, decidió hacer algo para evitar que otras mujeres pasaran por la dura etapa que ella vivió. Respaldada por la matrona de su consultorio, comenzó de forma individual a visitar mujeres que no se habían realizado el examen para poder orientarlas, aunque también señala, hubo cierta resistencia. “Fue complejo, porque las mujeres no están acostumbradas a que alguien les diga ¡empodérate y preocúpate de tu salud!, pero de a poco se fueron abriendo las puertas; luego, me encontré con una amiga, Marisol Ruiz, que me dijo “yo te acompaño”, y no me preguntes cómo llegaron 25 personas y formamos la agrupación”, recuerda sobre el proceso la fundadora de la agrupación Desde entonces, sus esfuerzos se han centrado en seguir integrando a más voluntarias con distintas patologías y crecer también por medio de capacitaciones en diversas áreas. “Cada vez que tocas la puerta de una casa, te encuentras con un abanico de necesidades. Tu vas a invitar a las mujeres a que se hagan la prueba de Papanicolaou y te encuentras con mujeres recién golpeadas, abusadas, postradas, con embarazos adolescentes o con adultos mayores que no estaban inscritos en el consultorio, entonces eso nos llevó a pedir en la Seremi de Salud que nos educaran en distintas temáticas y hoy ya contamos con cinco certificaciones para poder orientar y dar una solución”, señala Recondo. 10