La mecha Acuerdo negociado impar_OPMachinery 8/5/21 10:37 Página 63
LA MECHA
Un acuerdo negociado
T
RABAJÉ un par de años en el Departamento Técnifuerte, que advertía de su tesón. Su cara mostraba unos ojos co de Unión Española de Explosivos y otros dos en vivaces y un gesto sonriente sincero. Ex fumador, reía con Ingersoll-Rand, en el Departamento de Minería y carcajadas rasposas que terminaban en golpes de tos que delaConstrucción. Siempre entendí que esas etapas me servirían taban el estado de sus pulmones, fruto del polvo respirado y el para adquirir la mejor formación para dedicarme al campo de tabaco fumado. Lucía siempre un cigarrillo apagado entre sus la perforación y voladura, que era lo que me atraía y en Calabios entreabiertos o un palillo entre los dientes, en los que vosa encontré esa oportunidad. Cavosa contaba en su plantidestacaba un incisivo de oro. lla con gentes muy expertas en esas labores y algunos talluMe miró de arriba abajo sonriendo cortésmente, aceptando dos, con una bien ganada fama, para quienes yo era un nuevo la imposición de un jefe, mientras en su interior pensaba que ingenierito que, con traje y corbata, y seguramente sin tener yo sería un gilipollas, sin puta idea de voladuras. Me soportani puñetera idea de la fiesta, venía a ocupar un despacho. Pería como a una mosca cojonera, aparentando aceptar mis diro yo había cargado ya muchos barrerectrices, pasándoselas luego por debaCarvajal andaría nos y reparado y puesto en marcha jo de la bolsa escrotal. por los cincuenta. Era unas cuantas perforadoras. Tras terminar la obra del Piul, por la Uno de esos personajes era un viejo de estatura media y de que ni siquiera volví a aparecer, Carvaencargado, un tal Carvajal, al que le jal y yo comenzamos nuestra andadura complexión fuerte. había salido la primera dentición en Conservaba esa muscu- conjunta, en la que yo me debía ganar estas actividades. Tras su paso por difesu aceptación. Tenía tarea por delante. latura que se había rentes empresas en las que se había deEl primer trabajo en la nueva etapa formado en el gimna- consistió en la excavación, dentro de dicado al arranque de roca con explosivos en todo tipo de trabajos, arribó a sio del trabajo, en los una nave industrial de la empresa FunCavosa, donde, aunque con la categotajos donde cursó su diciones Azma, en Getafe, para rebajar ría de encargado, gozaba de una consiuna gran zona del piso de esta mediancarrera, en la que, deración especial por parte del gerente, pasando por todos los te voladuras. que tenía una confianza absoluta en él. Aunque habían retirado la maquinagrados,... alcanzó cate- ria del interior de la nave, el trabajo era La empresa contaba con unos técnigoría de encargado. cos, jefes de zona, con residencia en muy delicado pues no podían dañarse Madrid, responsables de grupos de obras, en cada una de las ni los cerramientos ni el techo de esta. Con una voladura mal cuales se contaba con el correspondiente jefe de obra a pie de dada podíamos arruinar la nave completa. Debíamos arrancar tajo y la estructura administrativa precisa, según la importanla roca esponjando el escombro lo suficiente para que una recia de esta. Pero Carvajal iba por libre y mantenía “línea ditro de tipo medio pudiera extraerlo, y todo ello sin llevarnos recta” con el gerente en obras de pequeño volumen y sin por delante ni el techo ni las paredes de la construcción. Me complejidad administrativa y no tenía a nadie por encima. sorprendió gratamente que Carvajal acepara el esquema de Conocí a Carvajal cuando el gerente me lo presentó en perforación que le planteé. Eso era un excelente síntoma, una obra que estaba realizando en El Piul, una finca ubicada aunque supuse que ello era debido a que debía pensar que no en el término de Rivas Vaciamadrid, ampliando un camino era idea mía, sino que procedía de alguien con experiencia. de acceso, junto a la laguna del Campillo, anexa al río JaraPero ante la duda, yo había ganado algún punto. Cuando me ma. Los trabajos consistían en unas voladuras en zapateras en acercaba por la obra mientras estaban perforando, Carvajal unos farallones de yeso que flanqueaban el camino y cuyos me trataba con simpatía y le notaba más cercano. desprendimientos producían su corte. El segundo escalón en su cambio de postuCarvajal andaría entonces por los cinra se produjo un día que, vestido con traje y cuenta. Era de estatura media y de una comcorbata, me acerqué hasta la nave, enconplexión fuerte. Conservaba esa musculatura trándome con el equipo de perforación paraque se había formado en el gimnasio del trado, un carro de Ingersoll-Rand Crawl bajo, en los tajos donde cursó su carrera, en CM250, con una perforadora de martillo en la que, pasando por todos los grados, peón, cabeza, una URD 475, que yo era capaz de ayudante, picador, barrenista, artillero... almontar y desmontar con los ojos cerrados, canzó la categoría de encargado, con un bacomo el Máuser de mi primer campamento gaje extraordinario de conocimientos por las de milicias, o el Cetme del segundo. experiencias de toda esa dura escuela. El equipo era alquilado y Carvajal esperaba Su cabeza era una esfera perfecta que se Esteban Langa Fuentes a que un mecánico de Ingersoll-Rand viniera unía al tronco a través de un cuello corto y a repararlo, pero cuando llamó para comuniIngeniero de Minas
Abril 2021/OPM/63