Pluma Vol. 1

Volumen 1 Oct. 2017

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Índice

Pájaro Cantor de Ismael Maimouni................................................ 5 Taciturno de Roger Buendía............................................................. 8 [Sin título] de Desirée Baltanás........................................................ 9 Mía de Txell Navarro.........................................................................10 Crazy Eyes de Miguel Almança....................................................... 11 El Sueño de Diego Rosado................................................................ 12

Diego Rosado

1 de octubre de MMXVII Queridos lectores, frente a vosotros se encuentra el primer volumen de Pluma, una publicación dedicada a promover el trabajo de jóvenes artistas.

En ella encontraréis ensayos, poemas, relatos y otros textos literarios, acompañados de fotografías o ilustraciones. Con este proyecto pretendemos dar un enfoque diferente a la literatura, mostrando que no toda la gente joven desprecia los libros y que incluso algunos de ellos se arman de valor para escribir.

Atentamente, Miguel Almança y Diego Rosado

A todos los escritores que nos motivaron a coger una pluma.

Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ Relato

Pájaro Cantor Simplemente, no podía dormir, era incapaz de ello. Llevaba dando vueltas en la cama durante dos horas. De repente, unos sutiles golpes comenzaron a sonar en la ventana de su habitación. La primera vez los ignoró, pensó que no sería nada.

Volvieron a sonar y entonces se puso la almohada por encima de la cabeza. Su paciencia se agotó cuando oyó esos golpecitos una tercera vez. Se levantó de la cama, con ofuscación e intriga al mismo tiempo. Para su sorpresa, encontró un uirapurú al otro lado de la ventana, un ave amazónica rodeada de misticismo, de un canto de increíble belleza y de difícil acceso. Reconoció al ave rápidamente, y se fascinó del gran golpe de suerte que había tenido. ¿Cómo había llegado hasta su ventana un ave que vive en la selva? De repente, el pájaro alzó su vuelo y desapareció rápidamente. Acto seguido, irrumpió en el silencio de la noche el precioso canto del animal proveniente del tejado. Al oír el bello canto, no se lo pensó dos veces, abrió la ventana y salió por ella en busca de la preciosa melodía, igual que se persiguiese el canto de una sirena.

El pájaro se había posado sobre la chimenea, y desde ahí ofrecía aquella maravilla de concierto, hasta que notó la presencia de un espectador. Cesó su canto tajantemente, y miró al humano fijamente a los ojos, como si quisiera decirle algo. Volvió a despegar rápidamente, y esta vez se dirigió directamente hacia el improvisado espectador que tenía. De la sorpresa, este comenzó a rodar tejado abajo sin ningún control, dirigiéndose al abismo. Por suerte, un clavo suelto del canalón enganchó su pijama, lo que frenó bruscamente la caída. Pero no la evitó. Dolorido en el jardín trasero de su casa, alzó la vista al oír de nuevo el canto de aquel ser que había propiciado su caída. Se había posado sobre la cara fuente japonesa que compró años atrás, y aunque ___________________________________________________________________ 6

Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ cantaba, volvía a tener la mirada fija en el hombre al que casi había matado.

-¡Maldita bestia!-gritó iracundo el hombre desde el suelo- Primero me atraes con tu bello canto, y ahora casi me matas del espanto. Ya seguro que no logro dormir, pero al menos, dime, ¿Qué es lo que quieres de mí?-preguntó confuso, arrastrándose hacia el animal.

Llegó junto a la fuente, y logró levantarse a duras penas, pero el pájaro seguía con la mirada fija en él, sin moverse del lugar. En aquel momento, el ave se giró mirando hacia la charca que formaba la fuente, sin detener su canto. El hombre se asomó para observar qué había atraído la atención del pájaro, y de repente, se asombró. La bella selva del Amazonas, el gran pulmón de nuestro planeta, se mostraba reflejada en el agua. Aparecía grande, imponente, y sobre todo pura, cuna de naturaleza y vida. Pero algo cambió en aquella visión. Comenzaron a llegar enormes monstruos metálicos, con garras y dientes que arrancaban los bellos árboles de aquel lugar, y se llevaban por delante a cualquier animal que por allí merodease. A los hombres que dirigían aquello poco les importaba destruir aquel bello oasis en un mundo decadente, tan solo les importaban los maletines llenos de billetes que conseguían por ello. Después de aquello, la visión mostró una imagen de la tierra, en la cual se apreciaba como el vivo verde del Amazonas se tornaba en un color oscuro y estéril, que comenzó a extenderse por todo el planeta como un cáncer, hasta sumirlo totalmente en las tinieblas.

La visión terminó, y el hombre, aterrado, volvió a hablar al pájaro.

-Oh, majestuoso ave, ¿Por qué me muestras esta visión?

Dime, ¿no tiene la tierra salvación?

Entonces, el ave dirigió su mirada de nuevo hacia el hombre, y dijo:

-De una sola manera la tierra se puede salvar, el egoísmo ___________________________________________________________________ 7

Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ del hombre, de un modo u otro, se debe erradicar-dicho esto, voló elegantemente hacia la oscuridad de la noche, fundiéndose con ella.

El hombre se quedó de pie con la mirada perdida en el horizonte, reflexionando sobre lo que acababa de presenciar.

Sabía que lo dicho por el ave era cierto. En ese momento comprendió que todos tenemos a ese pequeño pájaro cantarín en nuestra conciencia, pero por desgracia, la gran mayoría lo mantiene preso en una jaula.

Ismael Maimouni

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Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ Poesía

Taciturno Nocturno en el momento oportuno, Atento a la farola que ilumina su mundo, Él mira la luna solo, antes la miraban juntos.

Noctámbulo de los rectángulos de nada, Sus bártulos acompañados por cascadas, Son ángulos oscuros de palabras Y sus cálculos desórdenes en tablas.

Camina hacia ninguna parte, Su único destino el final de la calle Hay muchas puertas, él sigue sin llaves.

En medio de eso apunta a la luna.

Se nublan sus recuerdos, se acumulan sus deseos: Ella y sus besos, ella y sus te quieros.

Ileso de besos presos Por eso lleno de negro Y solo quedan meros recuerdos Ninguna noche tan oscura Ningún mal cien años dura Pero mientras tanto, todo son torturas.

Desea perderse por el universo de ella, Abrazarla cual cinturón de asteroides.

Pero está todo muerto, como las estrellas. ___________________________________________________________________ 9

Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ Negro, gris, marrón mierda Ese es su arcoiris; su utopía Encontrar calor entre sus sábanas frías Llega a casa cansado y harto, Se quita sus bambas manchadas de barro, Ya solo piensa en un disparo.

Se tumba y derrumba en la almohada, Sus heridas siempre reabren suturas, Y nada cambia, nada fluctúa.

Roger Buendía.

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Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ Otros

Nunca he querido estar aquí. Muy a menudo mi cuerpo me pide que recoja toda mi carne y me vaya. Después de suficiente terapia para superar el año, despues de las horas perdidas en el gimnasio, después de la celulities, el pelo enmarañado, después de todos los esfuerzos por no llevar demasiado maquillaje, mi cuerpo sigue siendo una respuesta a medias, mis vértebras una interrogación que debería haber reducido en grosor. Mis entrañas no están hechas de mi, sino de todo lo que me hace más pequeña.

Después de todos los intentos de autocuidados, aún me parece que aquí dentro, no hay lugar donde pueda esconderme.

Ya no tiene nada que ver con la talla o la forma, o los números, o recordar cómo masticar sin accidentalmente tragar y ahogarme con un poco de culpa. Lo que queda, es el deseo de partirme en dos, todos los huesos mudándose a cualquier otro lugar.

Algunos días mi cuerpo quiere evaporarse, tiene miedo de ocupar espacio, acaba, como chatarra, olvidado en el bolsillo trasero de cualquier pantalón. Mi cuerpo se queja, duele desde el pecho hasta las yemas de los dedos. Mi cuerpo se expande por sí solo , culpa aquelllos que no supieron seguir el ritmo del crecimiento. Se olvida de todo el mundo pero exige calidez. Se rompe constantemente el corazón.

A veces mi cuerpo es una disculpa, una contradicción.

Mi cuerpo es una casa para la cual no siempre tengo las llaves correctas, un edificio que requiere reconstrucción, o flores frescas cada Domingo por la mañana, o puertas de verdad, o un mejor mecanismo de salida.

Desirée Baltanás ___________________________________________________________________ 11

Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ Poesía

Mía Mía De mi Misma Mía cuando voy Y cuando vengo Mi decisiva Mía que digo Que siento Mía niña, mía joven Mía alocada de mi Inmadura o de maduración tardía Mía yo de nadie más Mía capaz de hacer y deshacer Mía que se equivoca Y aprende Mía de mi amor Mía libre Del aire De la tierra Del Mar Txell Navarro

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Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ Poesía

Crazy Eyes City of God, hot afternoon, sweaty chabola A kid reads some comic laid on his bed Sunrise lights entering through the curtain’s grid Millions of flies flying around the little black body A kid plays with a gun outside Thin, bony, starving, looks inside with crazy eyes His slim silhouette hides the flies flight And the shot sound hides their buzzing Miguel Almança

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Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ Relato

El sueño Como editor del presente relato, os recomiendo leer este fragmento, encontrado entre los viejos papeles de un difunto cliente, en la oscuridad de la noche o como mínimo en un lugar aislado y tranquilo. He decidido publicar esta pequeña historia para así honrar la memoria de Copelio Arenal, el presunto autor del texto.

Me encuentro en mi cama, por suerte este horrible día ha terminado. Por fin llego al mejor momento. Ahora conseguiré reunirme con Morfeo y taparme bajo las sombras y la oscuridad.

La tranquilidad me rodea y me llena, todo sonido se desvanece con las olas de la noche. Corre una suave brisa, la temperatura es lo suficiente cálida y fría como para que pueda taparme con una fina sabana. Ella es mi protección que transforma el horror de la oscuridad en reposo y descanso. Veo una luz al fondo del pasillo.

Debe ser la ventana de la calle, que envía los rayos que inundan mi habitación en la penumbra y es fuente de la suave brisa que noto y que me acompaña durante la velada. También es la que me despierta por la mañana, canaliza los rayos del sol hasta mi cara. La que deja pasar los ruidos de la vida matutina. Pero ahora es mi ayuda para adentrarme en el mundo del sueño.

Creo que ya llega... Sí... Está aquí…¡Por fin! Creo que me voy a dormir, voy a adentrarme en la soledad y en el descanso completo. Lo mejor del día, pero sobre todo lo mejor de la noche, me despido… ¡No, no puede ser! ¡Esto no puede estar pasándome a mí, por favor Morfeo llévame no me dejes aquí, no…! Esta noche ha pasado de ser mi esperanza, mi ayuda para conseguir sobrellevar mi penosa vida, a convertirse en la gran asesina de mi mente.

Estoy frente a una de esas noches, todos la conocéis, en la que no puedes descansar, en la que te pasas horas y horas dan___________________________________________________________________ 14

Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ do vueltas. Sí, estoy perdido. ¿Por qué a mí? ¿Qué he hecho yo para merecer esto? Voy a intentar dormir de lado... Nada, no hay solución. Tal vez si cambio de lado lo consigo. No surge efecto.

Volveré a ponerme boca arriba, imposible. Os maldigo dioses del sueño. Hipnos, Morfeo, Oneiros, ¿qué estoy haciendo mal? ¿por qué no puedo dormir? Maldita oscuridad, asquerosa, horrible, muerte de la vida, que me rodeas, me impides ver, me traes falsa seguridad y ahora me inundas de terror. Estoy empezando a sudar, signo de que la noche acaba de empezar. Maldita calor, maldita ventana, maldita luz. Cada vez me siento más despierto. ¿Qué es eso? ¿Quién habla? ¿Por qué escucho conversaciones?

Son las cañerías que aprovechan la oscuridad de la noche para conversar, sus voces chirriantes y metálicas se meten en mi oído y cada vez estoy más despierto. El mundo ya debería estar dormido, la negra noche nos ha tapado con su velo y todo el mundo descansa. No, no todo el mundo, yo me encuentro en un estado de nerviosismo extremo, me noto al borde del ataque de ansiedad, mi corazón late fuertemente, las gotas de sudor caen por mi frente, las sábanas se pegan a la espalda y a las piernas, incluso noto los pies mojados. También escucho ruidos por la ventana.

Los coches hablan entre ellos. ¡Callaros!... No causa ningún efecto. ¿Por qué no se callan? ¡Dejad de hablar malditos motores! No puede ser, ahora las luces también hablan, bailan y se mueven entre las paredes. Se cuelan a través de la ventana y andan a sus anchas por mi habitación. ¡Silencio, silencio! ¡Oscuridad, necesito las tinieblas!

Por fin, creo que todo ha terminado. La calma inunda este momento, las cañerías ya no hablan, las luces han dejado de bailar y la brisa ha vuelto, la sábana me vuelve a proteger.

He conseguido adentrarme en el otro mundo, un mundo nuevo, pero también tan antiguo como toda la humanidad. Un momento, ¿qué es eso? Parece que algo se mueve alrededor mío. Tiene piernas y es alto, muy alto, podría decirse que se da contra el te___________________________________________________________________ 15

Pluma Vol. 1 ___________________________________________________________________ cho. Sus piernas son blancas, delgadas y largas, parecen piernas de marioneta que se mueven a mi alrededor. Se escucha como andan todas a la vez, un repiqueteo continuo que se mete en mi oído. El horror se mueve alrededor mío. No para de mirarme, su semblante es de mujer, pero es más bien una especie de muñeca de porcelana. Tiene el pelo rubio, y toda su piel es blanca, brillante y frágil. Su cara es la típica de cualquier muñeca, con los mofletes rojos y todo lo demás blanco. Ahora lo veo, es una bailarina, similar a las de las cajas de música, pero tiene más de nueve piernas y mide más de dos metros. Se mueve a mi lado mirándome. Parece que quiere hacer algo, pero simplemente se limita a dar vueltas y moverse. Qué figura más siniestra, ¿porque está aquí? Déjame dormir, ¡vete maldita criatura, déjame en paz!

La criatura ha desaparecido, creo que puedo volver a dormir. Me vuelvo a relajar, y ahora el entorno está dispuesto a darme una tregua y mandarme al mundo de los sueños. Un momento, ¿qué es eso? ¿Por qué hay un hombre al final del pasillo? Es alto, y de fuerte constitución con cara y cuerpo anchos. Simplemente está quieto, no hace nada, tan sólo me mira fijamente. Lleva una bata decorada, parece de un lugar exótico. Debajo lleva un traje, deduzco que es abogado. Me grita, ha sacado unos papeles y su grave voz dice: “K, K” ¿Qué quiere decir con eso? Poco a poco se acerca y cada vez se hace más grande y yo más pequeño. Me señala con unos papeles mientras agita el brazo y sigue gritando “K, K”. Al llegar al lindar de mi puerta desaparece. Se ha desvanecido delante mío, igual que la bailarina araña. ¿Qué me está pasando? ¿Me estoy volviendo loco? Si yo solo intentaba dormir. ¿Por qué a mí?

Las luces inundan mi habitación de nuevo, pero ahora luchan entre ellas. Las tuberías vuelven a hablar, pero están discutiendo, se gritan. También vuelven a rugir los coches, se pelean por ver quien ruge más fuerte. Empiezo a notar una fuerte presión en la cabeza. Siento que me presionan el cráneo por los ___________________________________________________________________ 16

Pluma Vol.1 ____________________________________________________________________ lados, como a una uva. Creo que me va a explotar la cabeza, una fuerza sobrehumana me la va a comprimir y estrujar como una prensa hidráulica que destruye una sandía. De repente, me encuentro en mi cama, todo está tranquilo. La suave brisa recorre el contorno de mi cuerpo, moldeado por las sabanas, y la penumbra inunda mi estancia. Ya no sudo ni tengo calor, el silencio vuelve a invadir el cuarto y con él la oscuridad me envuelve. Miro el reloj y solo ha pasado una hora desde que me fui a dormir. Otra vez, otra vez empiezan los sudores, las tuberías hablan, los coches rugen y las luces bailan a mi alrededor cegándome. El ciclo empieza de nuevo y con él mi terror.

Diego Rosado

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Colaboradores: Ismael Maimouni Boada Roger Buendía Desiré Baltanás Oliva Txell Navarro Miguel Almança Pellicer Diego Rosado Arráez

Directores: Miguel Almança Pellicer Diego Rosado Arráez Diseño general: Diego Rosado Arráez Portada: Francisco de Goya

Miguel Almanรงa

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