8 boletín del parc nacional d’aigüestortes i estany de sant maurici
¡bellas y con nombre! Los nombres vulgares de las plantas fueron, y son sin duda, muy útiles para el habla cotidiana. Pero estos nombres vernáculos resultaban en ocasiones imprecisos puesto que no eran universales -eran aplicables a una sola lengua-, únicamente algunas plantas tenían nombre y para rizar el rizo, a veces el nombre de dos plantas coincidía -o una planta tenía más de un nombre-. Fue Carl Linné quién en el siglo XVIII puso fin al entuerto y sentó las bases de la nomenclatura botánica, según la cual toda especie quedaba definida de forma exclusiva mediante la combinación de dos palabras en latín: el género y el epíteto específico. Y es así como botánicos de todas las épocas han ido nombrando las plantas, removiendo entre latinajos y seleccionando, a veces muy elegantemente, palabras que en muchos casos son capaces de provocar vuelos de nuestra imaginación. Dilatemos nuestras pupilas frente a algunas de las más bellas flores del Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici y reflexionemos un poco sobre sus nombres. Místicos son los nombres de algunos géneros, como es el caso de Dianthus, los claveles silvestres, quienes nos
conectan, quizás por el embriagador olor de algunas de sus especies, con la mismísima divinidad. De hecho el nombre Dianthus procede de las palabras griegas «dios» (genitivo de «zeus» -dios-) y «anthos» (“flor”). Otro género con representantes en la alta montaña del parque, Alchemilla, opta asimismo por la mística, ya que las gotitas que de forma tan sutil y artística rezuma el borde de sus hojas no fueron sino el agua celeste que los alquimistas utilizaron en la obtención de la piedra filosofal. Hay otro grupo de plantas cuyos géneros rinden homenaje a personajes mitológicos, Aquí tenemos atractivas flores de montaña incluidas en los géneros Narcissus, Adonis, Daphne o Silene, este último padre adoptivo y preceptor de Dionisos, siempre representado con vientre hinchado, similar a los cálices de algunas especies de este género. También el nombre del delicado lirio que salpica los prados estivales del parque, Iris xiphiodes hace, por un lado referencia al parecido de la flor a una espada («xiphos») y por otro, evoca la figura de la mitológica Iris, hermana de las Harpías y personificación del arco iris que anuncia el pacto entre los hombres y los dioses poniendo el broche final a la tormenta.