Ulrika 48 revista de poesía
21
Festival Internacional
de Poesía de Bogotá
celebración de la
diversidad étnica y cultural en iberoamérica Poemas de Raúl Vallejo Homenaje al poeta Guillermo Martínez GonzáleZ Poetas ganadores de la convocatoria Nuevas voces para la poesía colombiana David Reinoso y su Estuche de contrabajo
ulrika 48 |
1
LIBRERÍA
LIBROS VIEJOS, RAROS Y CURIOSOS Visítenos en nuestra casa, Ofrecemos asesoría editorial. Calle 65 No. 10-20, Teléfonos: 2487175 y 313 4187544, Bogotá puentesdeniebla2000@yahoo.com.ar
www.libreriatrilce.com ulrika 48 |
3
contenido
-9-
POETAS invitados
al 21 festival
de poesía
8
diversidad iberoamericana y afrodescendientes: Natalia Toledo, Humberto Ak’abal, Hugo Jamioy, Vito Apushana, Jordi Virallonga, José Ángel Fernández Wuliana, Fredy Chicangana, Alfredo Vanín, Lindantonella Solano, Sonia Truque, Jaime Alonso Muñoz
6
POETAS
CATALANES
51
Narcís Comadira, Francesc Parcerisas, Eduard Sanahuja, Jaume Pont, Margarita Ballester, Maria Mercè Marçal
5
el FESTIVAL DE POESÍA DE BOGOTÁ cumple 21 años editorial
6 24 27
FUNDADORES: ANTOLOGÍA DE LA POESÍA IBEROAMERICANA
POEMAS PARA EL PADRE RAUL VALLEJO nuevas voces: Andrés Camilo Torres Estrada, Omar Garzón Pinto, Darwin Alexander Toledo Cerón, Yonny Germán Vanegas, Edgar Sebastián Martínez Castañeda, Felipe Donoso Suárez, Nidia Andrea Martin Bolaños, Camila Charry, Alejandro Cortés, Henry Alexander Gómez
40
taller festival internacional de poesía de Bogotá: Silvio Andrés Salcedo Tovar, Rosaura Mestizo Mayorga, Jorge Carlos Ruiz de la Quintana, Neftalí Eugenia Castillo
44
ESTUCHE DE CONTRABAJO: CANCIÓN A CONTRAVÍA. Ópera prima de David Reinoso Robinson Quintero Ossa
46
GUILLERMO MARTÍNEZ GONZÁLEZ: POEta homenajeado festival 2013 Samuel Jaramillo González
V Jornadas Universitarias de poesía Ciudad de Bogotá 16 a 20 de septiembre 2013
dirección@poesiabogota.org • www.poesiabogota.org direccion@poesiabogota.org • www.poesiabogota.org Corpoulrika
Festival Internacional de Poesía de Bogotá
editorial
el FESTIVAL INTERNACIONAL DE POESÍA DE BOGOTÁ cumple 21 años Un festival donde la estrella no es el poeta, sino la poesía misma
-9-
E
l 25 de mayo se dará inicio a una nueva jornada del Festival Internacional de Poesía de Bogotá, un evento que se ha ido configurando como referente obligado para los seguidores de éste género en Colombia e Iberoamérica y en una invitación sostenida a retomar nuevas formas de ver y vivir el mundo. Como es natural y necesario el evento no sólo toca a Bogotá y así, desde su fundación en 1992, ha visitado ciudades como Manizales, Ibagué, Cali, Valledupar y Cartagena. Este año el Festival tiene como objeto la Celebración de la diversidad étnica y cultural en Iberoamérica y por lo mismo contará como aliada natural a la ciudad de Riohacha y como anfitriona inaugural a la cultura Wayuu. El 26 de mayo, luego de llegar a Bogotá, poetas provenientes de naciones originarias como la Zapoteca (México), Maya K´iche (Guatemala), Aimara (Bolivia), Mapuche (Chile), Camëntsá (Putumayo) o Quechua (Ecuador) viajarán a Riohacha donde desarrollarán una intensa actividad jalonada por sus anfitriones wayuu. Además de las actividades propias de este tipo de eventos (recitales, charlas y mesas redondas) se harán eventos como el “fundingue de luz”, “ofrendas de la luz de nuestra tierra, del agua y de las flores locales”, saludos a partir de las “Danzas de la Yonna” y el cierre con “plegarias a pachamama” y “pacto de hermandad” la noche del 27 de mayo. Participarán también en re-
presentación de la diversidad cultural de la península ibérica la poesía propia de Catalunya (Comunidad autónoma española). Las sedes principales: La Biblioteca Almirante Padilla, la Universidad de la Guajira e Instituciones educativas de resguardos indígenas, entre otros. En Bogotá, entre el 28 de mayo y el 1 de junio, los eventos no serán menos fríos, aunque sí muy seguramente bañados por la lluvia que caracteriza nuestro clima. Espacios como la Biblioteca Nacional (Inauguración con todos los invitados el martes 28 de mayo a las 7:30 p.m.), El Park Way del tradicional Barrio de La Soledad, las Bibliotecas Públicas Julio Mario Santo Domingo, Virgilio Barco, Tunal, Tintal y Usaquén a través de sus acostumbradas “Lunadas literarias” con música y poesía; sin olvidar una sostenida programación de charlas, mesas redondas y lanzamientos de libros en universidades como la Nacional, el Externado, la Pedagógica, la Salle y la Central, entre otras. El poeta colombiano homenajeado este año será Guillermo Martínez (La Plata, Huila) en acto que se llevará a cabo también en la Biblioteca Nacional (31 de mayo, 7:30 p.m.). El Festival es un “evento apoyado por el Ministerio de Cultura - Programa Nacional de Concertación Cultural” y por el Instituto Distrital de las Artes a través del Programa Distrital de Apoyos Concertados, con el concurso de diversas instituciones públicas y privadas.
ulrika 48 |
5
FUNDADORES
ANTOLOGÍA DE LA POESÍA IBEROAMERICANA Poetas del Festival Internacional de Poesía de Bogotá 1992-2013. Publicación de la Universidad de Nuevo León México
-9-
I
mposible olvidar el magisterio de poetas como Juan Manuel Roca y María Mercedes Carranza – en ocasiones intransigentes y conflictivos, sin que ello, como es obvio, haga mella en su poesía, y curiosamente, sin que se les deje de recordar, en sus respectivos momentos, como grandes, altos amigos –; o la guía más laxa o quizás más cercana desde una perspectiva generacional – porque las generaciones no hablan solamente de años – de Jotamario Arbeláez, Darío Jaramillo, Juan Gustavo Cobo Borda, Samuel Jaramillo o Guillermo Martínez. Unos y otros, en todo caso, tuvieron mucho que ver con el surgimiento de iniciativas enfocadas a la promoción sostenida de la palabra poética, del hecho poético – expresión que tanto le fastidia a ese otro gran poeta que es Jaime Jaramillo Escobar-. Roca juntando poetas con ojo de político o de padrino antioqueño en grupos, cofradías o sindicatos – coyundas para nada deleznable y antes más bien necesaria ante la calculada reserva del establecimiento frente a la poesía – los cuales derivarían en organizadores del Festival Internacional de Poesía de Medellín y el de Bogotá o en editores de libros y revistas como Común Presencia, Ulrika, Prometeo o Luna Nueva. María Mercedes Carranza y Darío Jaramillo dándoles pulmones desde la Casa Silva o la Subgerencia Cultural del Banco de la República. Mario Rivero publicándoles en su Golpe de dados o financiando interminables, bohemias y fructíferas tertulias… A la mayoría de ellos les hemos saludo previamente – como debió ser – en el libro Homenajes, bellamente editado por el Instituto Caro y Cuervo… Maestros indiscutibles como Gonzalo Rojas, José Emilio Pacheco, José Agustín Goytisolo, Ledo Ivo, Carlos Germán Belli, Pablo Armando Fernández o Juan Calzadilla dieron desde un principio al Festival
6
| ulrika 48
Somos fundadores, nuestros hermanos y nuestros hijos; nuestros padres y sus padres, hasta donde nos llegue la memoria. Fundar es existir…
los quilates para que su ejercicio y permanencia se justificase, pero sobre todo para que se erigiese como una necesidad, como un deber para la ciudad y para todos aquellas personas comprometidas con la idea de que la poesía es la única prueba concreta de la existencia del hombre… Sin embargo, el peso que significan 20 (ahora 21) años de sostener una convocatoria que no decae en lo que toca a la calidad y compromiso humano de sus poetas nos obliga a contar con autores que si bien se sumaron a la cruzada en años más recientes, desde un principio entraron a formar parte de la Cofradía del Festival. Cómo no mencionar aquí a los poetas mexicanos Margarito Cuéllar y José Ángel Leyva o a Luis Miguel Madrid de España, siempre cercanos y más preocupados por los avatares del Festival que muchos de aquellos que saludamos a la vuelta de la esquina o que, vinculados de una u otra forma al aparataje de la burocracia cultural de nuestro país, parecieran trabajar por lo bajo para que toda suerte de temporales se cerniesen sobre nuestro desmantelado pero imbatible barco festejante… Aparecen también aquí, aunque a ratos tan mareados que se teme caigan o se lancen de improviso por la borda – se sabe de unos cuantos que lo han hecho -, aquellos poetas que de manera inmediata, día tras día, año tras año, ponen con orgullo, amor y dignidad la mesa de la concelebración: John Fitzgerald Torres, Fernando Linero, Eugenia Sánchez Nieto, Darío Sánchez Carballo y David Reinoso, entre no muchos más… Y la nave va… Rafael Del Castillo
POETAS invitados
al 21 festival
de poesía diversidad iberoamericana y afrodescendientes:
Natalia Toledo, Humberto Ak’abal, Hugo Jamioy, Vito Apushana, Jordi Virallonga, José Ángel Fernández Wuliana, Fredy Chicangana, Alfredo Vanín, Linda Antonella Solano, Sonia Nadezhda Truque, Jaime Alonso Muñoz poemas para el padre : Raúl Vallejo nuevas voces:
Andrés Camilo Torres Estrada, Omar Garzón Pinto, Darwin Alexander Toledo Cerón, Yonny Germán Vanegas, Edgar Sebastián Martínez Castañeda, Felipe Donoso Suárez, Nidia Andrea Martin Bolaños, Camila Charry, Alejandro Cortés, Henry Alexander Gómez taller festival internacional de poesía de bogotá:
Silvio Andrés Salcedo Tovar, Rosaura Mestizo Mayorga, Jorge Carlos Ruiz de la Quintana, Neftalí Eugenia Castillo Ópera prima:
David Reinoso ulrika 48 |
7
pueblos originarios
-9-
Identificarnos, un compromiso con nosotros mismos. Todo intento en ese sentido es otro paso de la humanidad.
Natalia Toledo
N
acida en Juchitán, Oaxaca, México, 1967. Poeta bilingüe: Zapoteco-Español. Egresada de la Escuela General de Escritores Mexicanos (SOGEM). Ha participado en distintos talleres y cursos, como el “Taller magistral de poesía”, impartido por la maestra Elsa Cross, y “Ruptura en el Arte”, con la Dra. Teresa del Conde, en el Museo de Arte Moderno. Ha publicado los libros de cuentos bilingües (zapoteco-español): El Conejo y El Coyote (2008), La muerte pies ligeros (2005) y El niño que no tuvo cama (2012); así como los libros de poemas: Olivo negro (2005), Flor de pantano (antología, 2004), Mujeres de sol, mujeres de oro (2002), Femmes d’or (2002) y Paraíso de fisuras (1992). Sus poemas han sido traducidos para antologías y revistas en inglés, italiano, francés, vietnamita, esloveno, punjabi, griego, chino y alemán. En 2004 recibió el Premio Nacional de literatura Nezahualcoyotl, por su libro de poesía Olivo negro. Ha sido becaria del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes en 1994, 2001 y 2004 en lenguas indígenas, y del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Oaxaca, en 1995, en el área de jóvenes creadores.
Íque lidxe’ nabeza ridxi sti’ bihui, riuunda’ sti’ bigose ne guiba’ yudu’sti’ Xavicende quám, quám, quám.
Sobre el tejado de mi infancia el grito del cochino, el canto del zanate y la campana de San Vicente, quám, quám, quám.
Xcu badudxaapa’ huiini’ Napa’ ti bandá’ biree lu gui’chi’ die’ guendadxiña dxa’ nisa guielua’ ne ruaa’ nagapi ti guie’ guyuu tuxa ndaani’ bandá’ gui’chi’ ne guxha de xcú xa guie’.
Niña con raíces Tengo una foto en sepia con los ojos llenos de agua y una flor en los labios alguien entró a esa foto y arrancó de raíz la flor.
8
| ulrika 48
poetas invitados / Natalia Toledo
Ni guicaa T. S. Elliot
Para T.S. Elliot
Ndaani’ batanaya’ gule jmá guie’ naxiñá’ rini
De mis manos crecieron flores rojas
ziula’ ne sicarú,
largas y hermosas,
qui zanda gusiaanda’ dxiibi guxhanécabe naa guirá ni gule niá’.
cómo olvidar el miedo con que fui despojada de toda certeza.
Guzaya’ xadxí ne batanaya’
Caminé con las manos
bitiide’ guidilade’ ra dxá’ beñe
y metí mi cuerpo donde había lodo
ne ndaani’ guielua’ bidxá yuxi nuí.
mis ojos se llenaron de arena fina.
Gula’quicabe láya’ Mudubina
Me llamaron la niña de los nenúfares
purti’ gule’ luguiá nisa.
porque mi raíz era la superficie del agua.
Guriá yaachi naxí gudó yaa’ ti beenda’ cayacaxiiñi’ naa
Pero también fui mordida por una culebra apareándose
ne guca’ Tiresias biníte’ guielua’,
qui niquiiñe’ guni’xhí’ ora guzaya’ stube ndaani’ ca dxí ma gusi.
y quedé ciega, fui Tiresias que recorrió sin báculo su historia.
¿Guná nga ni bisanané binniguenda laanu?, ¿xí yuxi guie
¿Cuáles son las raíces que prenden, qué ramas brotan
bisaananécabe laanu?
/de estos cascajos?
Ca xiiñe’ zutiipica’ diidxa’ guní’ jñiaaca’ne zazarendaca’
tal vez soy la última rama que hablará zapoteco
sica ti mani’ ripapa ndaani’ guí’xhi’, ne guiruti zanna tu laaca’.
mis hijos tendrán que silbar su idioma
Guirá beeu nuá’ neza guete’
y serán aves sin casa en la jungla del olvido.
balaaga riza lú nisa cá tini, ni rini’ xcaanda’ guielua’ pe’pe’ yaase’.
En todas las estaciones estoy en el sur
Zabigueta’ zigucaaxiee xquidxe’,
barco herrumbrado que sueñan mis ojos de jicaco negro:
ziguyaa xtube xa’na’ ti baca’nda’ ziña,
a oler mi tierra iré, a bailar un son bajo una enramada sin gente,
chupa bladu’ guendaró ziaa’ zitagua’.
a comer dos cosas iré.
Zadide’ laaga’ neza luguiaa, ni bi yooxho’ qui zucueeza naa, zin-
Cruzaré la plaza, el Norte no me detendrá, llegaré a tiempo
daaya’ ra nuu jñiaa biida’ ante guiruche guirá beleguí.
para abrazar a mi abuela antes que caiga la última estrella.
Zaca’ xti bieque xa badudxaapa’ huiini’
Volveré a ser la niña que porta en su párpado derecho un
ni riba’quicabe guie’ bacuá íque laga,
/pétalo amarillo,
xa ba’du’ ruuna niidxi sti guie’
la niña que llora leche de flores
zabigueta’ xquidxe’ ziaa’ si gusianda’ guie lúa’.
a sanar mis ojos iré.
Diidxa’ ne guenda
Tradición
Guyuu tu gucua nisa dondo bi’na’ guidila’du’,
Hubo quien probó el mosto de tu piel, te caminó de la cabeza a los pies sin abrir los ojos para no descubrir el resplandor del sol. Hubo quien sólo pellizcó la comida y no quiso beber el chocolate de los compadres y el pozol de semilla de mamey. Hubo quien colgó en la puerta de tu casa una olla rota y no quiso pagar la fiesta. No supieron los tontos que una flor caída al suelo sigue siendo flor hasta su muerte.
tu guzá de íque de ñeeu ne qui nuxhalelu ti ñunibia’ xtuxhu gubidxa. Guyuu tu gudxiru lu guendaró ne qui niná ñe’ dxuladi male ne cuba ladxi guenda. Guyuu tu bigaanda ti pumpu nalaa xa’na li’dxu’ ne qui niná ñuni saa. Qui ganna ca binni huati pa ti guie’ biaba layú guie’ ru’ laa dxi gáti’.
/en el estero
ulrika 48 |
9
Humberto Ak’abal
N
ació en Momostenango, Guatemala en 1952 donde vive y trabaja. Es poeta de la etnia Maya K’iche. Piensa y escribe sus poemas en idioma K’iché y se autotraduce al español. En la actualidad es uno de los poetas guatemaltecos más conocidos en Europa y Sudamérica. Sus obras han sido traducidas al francés, inglés, alemán, italiano, portugués, hebreo, árabe, escocés, húngaro y estonio. Sus poemas han sido publicados en periódicos y revistas de Guatemala, Centro América, México, Estados Unidos, Venezuela, Brasil, Colombia, Líbano, Japón, España, Francia, Austria, Suiza, Alemania, Holanda e Italia. Entre sus libros de poesía se encuentran El animalero, Guardián de la caída de agua, Hojas del árbol pajarero, Lluvia de luna en la cipresalada, Hojas solo hojas, Retoño salvaje y Desnuda como la primera vez.
10
Tz’apininaq kaj
Cielo cerrado
Pa ri jun q’ij ri’ ri zutz’ xkitz’apij ri kaj, maj jun uch’ut re q’ij.
Ese día las nubes cerraron el cielo, ni una gota de sol.
Juba re q’eqa tew kusolkopij ri qak’ux k’aslemal.
Un chorrito de viento frío nos despeinaba el alma.
Are jampa kaqaj jun q’ij jeri’, xuquje ri tzij kakiban buch’uy.
Cada vez que cae un día de esos, hasta las palabras se arrugan.
Ri moxwaqan
La izquierda
Are jampa xkam ri wikiwaqan xinto’wib ruk’ ri numox.
Cuando la derecha se paralizó me refugié en la izquierda.
We ta ma ta rumal ri numox kinchararej ta wib ri’ ruk’ ri wikiwaqan.
Si no fuera por la izquierda estaría arrastrándome con la derecha.
Nuto’on wib cho ri numoxwaqan xa jawi ta kinbe wi.
Me he apoyado en la izquierda para trasladarme de un lugar a otro.
Ri q’ij ri man k’o ta chi ri’ ri numoxwaqan kak’is nek’uri ri’ ri nueyebanik.
El día que me falte la izquierda se habrán acabado mis ilusiones.
Kinloq’aj ri numoxwaqan!
¡Bendita sea mi pierna izquierda!
| ulrika 48
poetas invitados / Humberto Ak’abal
Q’ana q’ayes
Fruta madura
Ronojel ri awatz’iaq akojon
Todo ese roperío que te envuelve
man kakowin taj katuk’u’.
no puede ocultarte.
Ri a tu’ nitz’ ri kuraqapuj ta ri a po’t,
Tus pechos a punto de romper tu güipil,
ri atzanawachaq tak’alik
tus nalgas levantaditas
je ta uje saqa tukumux ;
como cola de paloma sabanera;
are k’ut ri awa’ e ajchajilab
y tus piernas
re ri aqaj ri kuk’u’ rib
guardianas del panal que se esconde
chi uxe’ ri awuq,
debajo de tus enaguas.
are jampa katkubi’k
Cuando te sientas
su kabison ri tem.
suspira la silla.
Kinwach’ ri waq’
Me muerdo la lengua,
kinq’i wib
y me aguanto las ganas
che katinriq’o.
de lamerte…
Pach’um
Entrelazadas
Kinwil ri iboch’ re ri uq’ab,
Miro sus manos nervudas,
man k’o ta chi rixk’iaq,
sus dedos sin uñas,
echaqoj rumal xuch’aj tzi,
rústicas de tanto lavar nixtamal,
rumal xuke’j ixim cho ri ka’;
de tanto moler maíz sobre la piedra;
rumal xuchakuj ri ulew.
de tanto labrar la tierra.
Ruk’ ri uq’ab ri’
Con esas manos
xuk’ut chwe ri utijik ri nuwa,
me enseñó a comer,
ruk’ ri uq’ab ri’
con esas manos
xujal ri wuq,
me cambió los pañales,
ruk’ ri uq’ab ri’
con esas manos
xinnuto’o
me sostuvo
che kuk’ut chwe ri bininik,
para enseñarme a caminar,
xuquje kuk’ ri are
con ellas consoló
xukubisaj nuk’ux.
mis tristezas…
Ri jun q’abaj e ri’j chik, e baq chik,
Esas manos huesudas y viejas,
kipach’um kib cho ri uch’ek,
entrelazadas sobre sus rodillas,
man kajunamataj taj
son únicas
xwi ri uq’ab e je ri’.
como solo sus manos podrían ser.
ulrika 48 |
11
Hugo Jamioy Juagibioy
N
acido en Bëngbe Uáman Tabanók (Nuestro Sagrado Lugar de Origen) Sibundoy Putumayo; ORALITOR, escritor y poeta. Diseñador y cultor del Arte Indígena Camënt¨sá. Coordina el área de Diseño de KAMTUKWA y colabora con la Escuela de Arte Indígena en la Sierra Nevada de Santa Marta y Sibundoy Putumayo. Fue Director del Programa Especial de ORALITURA en RELATA del Área de Literatura del Ministerio de Cultura hasta 2010; Ganador de la Beca de Investigación en Literatura 2006 otorgada por el Ministerio de Cultura; ganador de la Beca de investigación en oralitura indígena 2009 otorgada por el Ministerio de Cultura. Ha publicado los libros: Mi fuego y mi humo, mi tierra y mi sol (poesía), No somos gente (narrativa), Bínÿe be oboyejuayëng / Danzantes del viento (poesía). Ha colaborado
con investigaciones sobre las lenguas indígenas de Colombia. Sus poesías han sido traducidas al inglés, portugués, italiano, francés, árabe y japonés. Se desempeñó como director de la Corporación JUABNA y de la Editorial JUABNA DE AMERICA, EDICIONES INDIGENAS.
Aty Tima Zarkuney, at¨sbe buiñent¨san onÿnaná
Tima Aty Zarkuney, brote de mi sangre
(Juahscon buashinÿinÿanbe Mamá)
(Tima Aty Zarkuney: Madre de la Fertilidad de la Luna)
At¨sbe bembbiam
A mi hija
Chëté sënján tëjaján
Aquel día caminé por el monte
chë tanguá niñë¨sëng
los leños viejos
chë celoca orquideushangá jtsaitëmiám
escondían las orquídeas en el cielo
nÿe canÿeshá
solo una,
nderado,
esperaba mi visita
at¨sbiam enjobatmán
para mostrarme en sus bellos colores
jinÿinÿiyám cabá nduant¨sefjon or
tus ojos;
acbe bominÿ;
mas al fondo de la espesa montaña
chë mallajt betiyëng tejan tsoyn
el pájaro cantor decía:
chë versiay shloft¨s enjetsichamo;
ella, es el brote de una planta de esta tierra
cháendmën, chë cachent¨sa betiyent¨sán onÿnaná
cochtsábobiamnay
para que mañana florezca.
yëbsán chaunt¨sefjonam.
12
| ulrika 48
/abónala,
poetas invitados / Hugo Jamioy Juagibioy
Fshantsiñ
En la tierra
Ndoñ quetsatajuatsënt¨sná
No es que este obligando
at¨sbe ¨so¨són
a mi hijo
jabuachán chaotsenangmen
a trabajos forzados
fshantsiñ;
en la tierra;
nÿe
solamente
sëndëbuatëmbá
le estoy enseñando
chabe Mamá chabotsebobonshanam
a consentir a su madre
básetemorscán.
desde pequeño.
Tonday chiatayán, nÿe sënjenojuabó
No dije nada, solo pensé
Taitábe uchanëshañ chë plumushangac
me hicieron pensar en la muerte de un guacamayo;
Esas plumas que lleva el Taita en su corona
sënjenojuabó, botaman shloft¨s tojobaniyec; el Taita que caminaba distante de mi chë Taitá, at¨sbent¨san bënoc endanan
se acercó y me dijo:
tonjobeconá y ¨sonjauyán:
yo no lo maté
at¨s ndoñ cheyatóba.
lo recogí en el salado de los loros
sënjonÿen tsenëguëngbe luaroc
fue mi ofrenda
jtsetat¨sëmbuam nt¨sam bejuabnayan.
para adquirir el poder de adivinar el pensamiento;
Chent¨sán tontsatoñ.
luego se marchó.
Pont ora
Puntual
Cha¨sojuamënt¨sentscuan chandëbëtachjan
He de caminar hasta el cansancio
betsca jtsanan ¨sondmën
y aunque tengo afán
pero uenán chandán
no aligeraré mis pasos
nÿe chanjashjango
solamente he de llegar
ndémocnaor tojtsemnor
en el momento preciso;
masque cha¨scobatman
aunque te deje esperando
bëtscá y bëtscá soy
muchas y mil veces
masque jetiñoy chëjashjango
aunque llegue tarde a las citas
y chë luarent¨s ndocná taicochatsmën nÿe cbëyán
y el lugar este lleno con tu ausencia
ndocnaté quechaisashjango
solamente te digo
pero pront chanjashjango
que nunca he cumplido
pont ora chaojtsemna ora.
pero he llegado siempre en el momento indicado. ulrika 48 |
13
Vito Apüshana
E
s ante todo una voz... la voz colectiva del estro poético wayuu. Nacido en algún lugar de la península de La Guajira, cerca de la frontera colombo venezolana. En 1992 la Secretaría de Asuntos Indígenas Departamental y La Universidad de La Guajira publican su breve poemario: Contrabandeo Sueños con Aliijuna cercanos. Sus poemas han aparecido en revistas especializadas como Número (Bogotá), El Magazín de El Espectador, Casa de las Américas (La Habana)… entre otras y en plataformas electrónicas como Lyrikline.org, Youyoupana. com y Poetry International Web. Su poesía es deudora del canto mítico de los poetas wayuu Juan Pushaina y
Ramón Paz Ipuana…así como de la memoria narrativa de Gliserio Pana Uliana, Antonio López Epieyuu y Miguel Ángel Juusayuu… y de la palabra serena de los Pütchipü’üi (Portadores de la Palabra).
ARÜLEEJÜLIIRUA
PASTORES
Arüleejülii wayaa
Somos pastores…
Waya wayuu kepiakana wopulu’uwai.
somos los hombres que viven en el mundo de las sendas.
Ekajitshii wayakanaya’asa,
Nosotros, también, apacentamos,
ale’ejüshii waya sulu’umüin wanee paüya’asa… Je
también regresamos a un redil… y nos amamantan.
achujeennüüshii waya.
Y somos leche del sueño, carne de la fiesta… sangre del adiós.
Je süchira waya tü lapükaa, süsala tü mi’irakaa… Süsha tü
Aquí, en nuestro entorno,
apütawaakaa.
la vida nos pastorea.
Ya’yaa wa’ato’upünaa, sürüleejüin waya tü kataakaa o’u.
MAITUUI
CALMA
II
II
Tü nnojolaakaa jiwa’atüin aa’in shia wanee e’inuushi mulo’u je
La tranquilidad es un tejido largo y colorido…
kanasü…
la embellecemos con diseños de cielo,
anachonsü ma’in watuma süka sükanasüin aitu’u,
pinturas de tierra y dibujos de mar.
äjüjia sünainjeejetü mmakaa je kasa shijeerüjalairua palaa. Tü alaülayuu nnojoliishi watteein sünain
Los mayores nos envuelven en ella
saapünapa anüikii wattachonyawai,
en cada palabra de mañanita,
eepa ko’uta’awai aipa’achiiruwajeejetü.
en cada silencio de anochecer.
Süka tia, sütünülashii waya saa’in tü mojuuikalüirua Así nos hacemos latidos de los montes. 14
| ulrika 48
poetas invitados / Vito Apüshana
YONNA SÜMAA JEMELII
DANZA Y NACIMIENTO
Sünain me’rujuin jarai yaa eera a’lapüjaashi sümaa tü yonnakaa…
Desde lo invisible alguien sueña con la danza…
je tü sukutulakalüirua tü kasairua eekaa shipishuwa’a sulu’u
y los movimientos de todos los seres existentes
mmakaa o’unajaasüirua soo’u suwu’irua tü tawalachon jemeisüyütkalia.
visitan los pies de mi hermanita recién nacida.
Yonnakaa sulu’u tü piyouikaa meinmalaainsalü.
El círculo del baile no cesa.
SAAJÜIN WANEE A’LAÜLAA ALEMASAHUAJE’WOLÜ
DE UN ALAÜLA DE ALEMASAHUA
«Jemeichipa pia…
«Ya naciste…
Jemeichipa pia süchoin wayuu,
y naciste hijo de gente,
nachoin pia na palajanaajanakana e’itaain wopu Epitsümüin.
de los fundadores de trochas del cerro de Epitsü.
Eeichipa pia süpüla pu’unüin je nnojoireein püle’ejüin,
Y puedes irte y puedes no volver,
Yaleechipaja’a pia weinshi yala, na’ato’u chi wunu’u Mokoo-
pero siempre estarás ahí… junto al árbol Mokooshira
shirakai
que circunda tu cementerio;
pejekai sünain pa’amuuyuushi
ahí pertenece tu sombra y tu descanso.
yala’a yala shia eere puyoluju je peemeraaya. Ya naciste Jemeeichipa pia
y tal vez puedes irte y no volver,
ja’itaichi pia o’unüin je male’ejüinreein,
pero siempre estarás aquí,
ayateechia pia yaain yaya weinshi
siempre serás nombrado en la música del sawawa…
ayateechia pia achuntunüin anülia sawawa’iralu’u…
y nos encontraremos mirando hacia Jepira,
Je antiraajeena waya eirakaain wanaa sümaa Jepira,
en donde los espíritus se harán uno solo,
eere tü asheyuuwaakalüirua waneesieerüin shia,
para el viaje definitivo.
süpüla tü o’unaakaa male’ejüinreewaa. Ya naciste Jemeeichipa pia
y naciste hijo de gente, de los pastores silbadores de Alema-
jemeishi pia süchoin wayuu, nachoi na arüleejülii, ewiijülii
sahua.
Alemasahuaje’ewoliikana,
Que no desespere tu pie en hacer la huella,
nnojolü püshapaje’erüin puwui shi’itaain tü awuichikanain
pues ya los viejos pasos de los ancestros están en el nuevo
waakaa,
tuyo.
aka, nakuwana a’laülaa kama’ainnakana shia kanainka joolu’u tü
No desesperes en llegar, que ya estás aquí… hijo de gente,
jeketkaa pukuwa.
hijo del sudor del cielo».
Nnojoi püshapajaain sünain antaa, yaaichipa pia ya’yaa… Süchon wayuu, süchon shira tü e’itüsükaa aitüü». ulrika 48 |
15
Jordi Virallonga
P
oeta, ensayista, crítico, y traductor. (Barcelona, Catalunya, 1955) Es catedrático de Filología Española de la Universidad de Barcelona y cofundador y presidente del Aula de Poesía de Barcelona. Como crítico y traductor de varios idiomas, colabora permanentemente con diferentes periódicos y revistas. Su obra poética está contenida en las siguientes obras: Saberte (1981), Perímetro de un día (1986), El perfil de los pacíficos (1992), Crónicas de usura (1996), Todo parece indicar (2003) y Los poemas de Turín (2004). También ha publicado los cuadernillos Dos poemas en Turín, La vida es mentira, no obstante va en serio, y Con Orden y concierto. Parte
de su obra ha sido traducida al italiano, portugués y turco. Entre los premios obtenidos se destacan el Premio Ciudad de Irún en 1996 y el Premio Internacional de Poesía Villa de Aoiz en 2002.
Álbum Mira qué piernas tienes, la lisura de tu cuello.
Mira ésta, es invierno,
La vida te ha dejado ser bella todavía.
y unas hojas más allá la primavera
Aún te queda tiempo para más de una noche,
de otro año y los niños corriendo la alameda,
noches que no son un regalo,
¿si nunca ibas a morirte,
que regalas a los amigos feos,
qué risa entonces podía imaginarse
precoces pero tiernos, o a hombres
que nunca más volverías a ser ésa?
que te llamaron guapa y querían
Aquí es verano. Éstas no, que no las vea nadie,
estar contigo a solas una noche
o da lo mismo,
como un verano entero.
también en esas calles la gente se encierra
Una noche tan sólo, y otra vez sola
con sombras que tampoco fueron suyas.
tras otra soledad entre las piernas.
Ya siempre será así.
Da lo mismo, quizá es un mal comienzo,
Seguirás tomando leche hasta que llegue
saca el álbum, ¿dónde está el mechero?
la vejez sin paliativos,
Princesa de las fotos,
no la muerte a la que temes menos,
no volverás a contar tu vida a nadie.
para dar a tus hijas una herencia de fotos que mostrar
Lejanas, irrompibles, testigos implacables
a sus novios, a sus amigos nuevos
que a cientos de quilómetros del tiempo,
(por cierto, estás preciosa de perfil en la del puente),
de cuando había risas y un paisaje,
y entiendan en tus ojos, los suyos,
siguen llevándote a las playas, los amigos,
que perder no es fracasar,
la toalla de un hotel a mediados de noviembre.
y que la victoria significa estar sufriendo siempre para no alcanzar verdad alguna; que con su poco de amar, todo es vivir irremediablemente.
16
| ulrika 48
poetas invitados / Jordi Virallonga
Ejemplo
El centinela
Se leyó a sí mismo
Esperar, sufrir,
los versos que había escrito
dar vueltas por la casa,
y se negó, nunca más,
atender un regreso,
a recibirse.
desear verdad y venganza,
Era un mal poeta,
cavar la bajeza.
pero un hombre extraordinario.
Nada más puedo hacer con todo esto que soy, aun sabiendo que, cuando tienes pavor, la peor soledad es la del centinela
El delirio de Patrizia Mira mis brazos, se cubren de neón,
Mira mi huella pisar las calles,
abarcan la luz nocturna de los barrios y aeropuertos;
sombrear la estela de los faros autónomos en los escaparates.
ese esparcimiento de órbitas tardas en peceras de cristal,
Mira mi pecho, imagina la nada impensable
zona a zona,
y amnistía tu legítimo deseo.
planta a planta, la cometa de ascensores.
Mira hombre mi ansiedad,
Mira mis ojos, todo lo ocupan
el húmedo filtro que atraviesa los cristales,
-más inmensos que el iris de la noche,
la perfecta distribución de las horas, las luces,
que la luz de la bahía resguardada de los puertos-,
el sugestivo encaje de los vientos
derramados en la incógnita inicial del horizonte,
y alza sobre mí
donde están los sueños todavía por crear.
la dispuesta obscenidad de tu semblante.
Mira mi sexo,
Levántame los diciembres, el cristal vaporoso,
mira su longitud cavernal
la línea suburbial donde acaba tu viaje.
recibir la láctea dispersión de caminos boreales.
No respondas al teléfono, es gerencia:
Mira mis piernas levantarse por encima de las patrias,
mira seis veces mi ropa,
apuntalar la tierra, embovedar planetas,
acércame las sales, esa colonia agreste.
también la lejanía ignorada,
Déjame descansar y el mundo será nuestro,
de océano a océano,
también el baño de alto standing, estatura brutal,
piedra a piedra, el malecón de asfalto.
y el dúplex de porcelana en que te espero.
ulrika 48 |
17
José Ángel Fernández Wuliana
P
oeta indígena wayuu- nació en la Laguna del Pájaro, Distrito Páez, en la Guajira venezolana, en 1961. Es sociólogo y antropólogo. Asesor de los periódicos indígenas Nunuiki Wayuu y Wayuunaiki. Ha publicado el libro de poemas Iitakaa (Totuma), en edición bilingüe, español y wayuu. En breve publicará su segundo libro La rebelión de la libertad. Ha sido invitado a Colombia y a España a leer sus poemas.
APAALAAIRUA JE JAYEECHIIRUA NÜMÜINJATÜ CHI UUCHI LAÜLAAKAI (DONES Y CANTOS AL CERRO MAYOR) I JUYAPÜ A’yalajüshi kaarai atalatalaasü jutaishiikaa, o’ttusu sünain e’itaa juyakaa. INVIERNO Llora el alcaraván la sabana se alegra, comienza a llover el invierno. II SÜPÜTAAYA IIWAKAA Ayonnajüsu iiwakaa süma’iki eküshii waya irama’airuku. DESPEDIDA DE LA PRIMAVERA Se despide la primavera danzando comemos carne de venado. III TÜ SHIIMÜINKAA Waneeshiane’e chira iipünaakai niain atüjaain soo’u tü shiimüinkaa. LA VERDAD Solo él, que está arriba sabe, cuál es la verdad. 18
| ulrika 48
IV PAIPAICHENNII Yonnateesü mmakaa nümaa joutai, akurutshii paipaichenniikana. La tierra quiere danzar con el viento, sienten fríos los hongos, tiernos. V NÜ’LAPÜIN LAÜLAA Antüshi laülaakai sümaa lapükaa, ojo’ttaanüsü siki soo’u kü’likikaa, o’utüna aa’inrü anneetkaa. SUEÑO DE ANCIANO Llegó el anciano con el sueño encienden las leñas del fogón, sacrifican el carnero.
Fredy Chicangana
D
e la comunidad Yanacona del Sur-Oriente del Cauca, Colombia, 1964. La poesía de Fredy Chicangana es una interrogación constante acerca de su cultura, de su espiritualidad y de su devoción a la naturaleza. Sus textos hablan desde la memoria de sus antepasados, pero también desde la incertidumbre del encuentro con lo urbano. Pájaros, ríos, sonidos y espíritus de la selva se mezclan para rescatar la oralidad y la verdad propia de su pueblo. Ha participado en múltiples encuentros de Escritores en Lenguas Indígenas (México, Venezuela, Chile, Ecuador y Perú). Con su trabajo literario además ha contribuido al fortalecimiento de la cultura Yanacona, a partir de
Palabra del abuelo
talleres de “recuperación de lengua propia” y de los “cantos de nuestra gente”. Es miembro fundador del grupo Yanamauta, “conocimiento y saberes yanaconas”. Entre los trabajos de su autoría se cuentan: Cantos de amor para ahuyentar la muerte; Yo Yanacona, Palabra y memoria; y El colibrí de la noche desnuda y otros cantos del fuego. Sus poemas han sido publicados en diversas revistas y periódicos, así como en la Antología de Literatura Indígena de América (Chile, 1998). Actualmente trabaja en talleres relacionados con la reivindicación de la palabra y la hoja de coca, y en la propuesta sobre “Oralitura y resistencia desde las comunidades indígenas del Cauca”.
El pájaro color arco iris
Palabra de abuelo —no sigas a ese pájaro gris—, que es espíritu y lleva al despeñadero,
El pájaro color arco iris, surcador de los urcos
es pájaro de muerte.
cantador de la lluvia
Palabra de abuela —no juegues con fuego—,
partió del nido y no ha vuelto aún. No hay canto
que hace orinar en cama,
sobre los altos jiguas, ni colores fugaces sobre el firmamento;
es frío dentro de cuerpo.
sus nidos de redondas puertas se enfrían cada noche y
Palabra de Taita —haz caso al abuelo—,
árboles lloran el tamborear de los picos.
hay que pagar pa‘ cazar.
Qué triste es partir de la tierra que nos dio comida,
Palabra de mamita —haz caso a la abuela—
del viento que nos vio jugar sobre las verdes pambas
hay que pagar para jugar con el fuego.
de la noche y la luna jugando con nuestras sombras
Palabra de pájaro gris —abuelo de mal agüero—,
de aquellos caminos que agitan el alma.
es hombre desconfiado.
El pájaro color arco iris, tú y yo
Palabra de fuego —abuela de mal presagio—,
y otros yanaconas se fueron del nido
es mujer maliciosa.
emigraron buscando nuevos caminos o
Palabra de mi corazón —bienvenido el misterio—,
huyendo de la escasez de la chagra;
alienta este canto.
partieron sin partir de la madre huyeron sin huir del fuego hecho placenta. Algún día volveremos desde el techo de hierro;
Cantos de la tierra
huyendo del áspero sabor del aroma y
De maíz son mis cantos y de agua mi esencia
el ruido que carcome el cuerpo. Volveremos cantando
canto hoy como antes cantaron
como el pájaro color arco iris que nos mira desde la distancia,
como terca semilla que se niega a la muerte
volveremos para besar los tapukus, para animar la vida de Jukas
así como gota que alimenta la fuente.
que en los bosques gime,
De maíz: cantos, agua, esencia…
para irnos a buscar la serpiente que bulle sobre los Yakus
vivo hoy con la siembra de ayer
para seguir siendo pájaros que anidan el alma.
como espiga madura que florece en la tierra. ulrika 48 |
19
Alfredo Vanín
E
l poeta, etnólogo y escritor Alfredo Vanín nació a orillas del río Saija, cerca de Guapi, en 1950. Estudió literatura y antropología. Su obra ofrece una cosmovisión que mezcla lo afrodescendiente, hispánico e indígena, raíces trenzadas cuidadosamente en sus poemas y en su propuesta narrativa. Toda su obra ensalza la memoria, el Pacífico, el cimarronaje, el erotismo y la búsqueda de un lenguaje poético propio. Entre sus libros de poemas se destacan Alegando que vivo (1967), Cimarrón en la lluvia (1990), Islario (1998), Desarbolados (2004) y Jornadas del Tahúr (2005), y
su Obra poética que reúne Cimarrón de lluvia y Jornadas del Tahúr, publicada por el Ministerio de Cultura en 2010. Ha publicado además la novela Los restos del vellocino de oro (2008) y diversos trabajos etnográficos enfocados a la causa de la afrocolombianidad del Pacífico. Ha sido invitado a diversos festivales: Festival del Imaginario, Casa de la Cultura del Mundo, Francia, 2008; Feria del Libro de Guadalajara, 2007; y Festival de Poesía de Medellín, 1999 y 2001. Actualmente vive en Cali, donde es miembro tallerista del proyecto RENATA.
Zarzamora
Balada para el cuarto de hora
Quise incitar el largo convite
La delgada línea de sus ojos desquicia el horizonte
de tu risa
y sus pelícanos de fuego
negar el río sojuzgado
tal como una fingida reina cíclada
y entrar en las ardientes materias
adorada entre ruinas que lastran mi tambor
de la gracia
por más que invoque las gabelas y el dios término
me apresuré buscando fuego
y asome sin pudor a los ritos de sangre
incienso que atesoran los camaleones
con la furia que perseguí a bordo de las rosas secretas
centellas de unicornio no doblegadas a la hora
[y olvidadas
del león rampante
por odaliscas de verano
y traviesos veleros
alguna rabia sorda fermenta en los surtidores de la miel
robados a viejos pescadores del golfo
y escapa entre los diarios que multiplican el fresco tremor
para acrecentar los festines de la madreperla.
de las masacres
Y he aquí que arpías y boleros
más allá de las tibiezas enaltecidas
pregonaron la fama:
en las ollas de quebrantos y duelos
las mercenarias galerías cobijaban ahora
pero al fin gatolobo, pernicia
tus deleites
de barrio amurallado
el viento destilaba un espeso alquitrán
invertiré el cuarto de los nautilos
y en tu deriva hembra
violento remolino de párpados
se marchitaban los dragones
al fuego lento de la dicha
dignos por lo demás de ciertos ecos.
y allí de pronto es otra guerra.
Entonces sepulté mis navíos aplacé para otras lunas la navegación del hechizado y entoné cánticos de alabanza a las discordias del fauno que se queda ciego.
20
| ulrika 48
LindAntonella Solano
P
oeta nacida en SüchiimmaRiohacha, La Guajira, 1975. Pertenece a la nación Wayuu. Educadora de Preescolar, psicóloga, docente catedrática en la Universidad de la Guajira y de la Fundación Universitaria San Martín. Miembro fundador y exmiembro directivo de la fundación Atrapasueños; creadora y coordinadora de Poesía al Parque y al Barrio 2003-2007. Actualmente es coordinadora-tallerista del grupo taller de Aproximación a la Creación Literaria en Narrativa y Poesía denomina-
Kata’ ou Tü pansawaakaa akuwa’ipa sünainjeejetü: Shiainjatkalüje wanee kasa anasü ma’in mülouin nüta’a ka’ikai soo’u ataa sütijaaanüin oo’u sukutulaain anain tü ataakaa shiiuupunaa ee’irukuu Doris Lessing
do Talaushi-Alegría. Miembro del Consejo de Cultura Municipal por el área de Literatura. Apuntes ligeros sobre kashi de 7 eneros desde el vientre de Süchiimma es un poemario que recorre la cosmovisión de los Wayuu, constituido por 60 poemas cortos que proclaman a kashi-luna como símbolo de fortaleza a esta mujer que se redescubre con estos valores y hace la metamorfosis desde las fases universales de este astro que desea exhortar a través de la luz de la putchi-palabra los senderos de quien los lee.
Kata’ou La cordura depende de esto: Que debería ser una dicha enorme sentir el latigazo del sol sobre la piel, Que debería ser una Dicha enorme poder estar de pie, Sabiendo que los huesos se mueven con soltura bajo la carne Doris Lessing
Fuente que tiembla Wuin chüitüsü akutkutsü wale’eru’u
Dentro de nosotros y refresca
je asamatakaa saa’in mmakaa shipishuwa’a,
al universo,
Kataa o’u shia wanee ati’irawaa
Vivir es despertar
süpüla einaa sususia weinshi,
para tejer la mochila
Awataa müin aka julirü
del tiempo,
Pasanain sünain isashiikaa
Volar como julirü,
sümaa aa’in
en medio del asashii
Süchajaain sujuula ka’ikalüirua,
Con el aa’in en busca
Je eisalajaa akuwa’ipaa suulia samutkoo
del aliento de los días,
ojulijakuu makaa soo’u tü outaa lijotshiikaa,
Y tener cuidado
Kataa o’u po’oojira waya
con el zamuro…
Kataa o’u po’oojira waya
Mendiga por la muerta oscuridad
E’irukuukoo shipishuwa’a Kataa o’u po’oojira waya.
Kata’ou bañanos, Kata’ou bañanos Todo el e’iruku Kata’ou bañanos.
ulrika 48 |
21
Sonia Nadezhda Truque
E
n Barcelona asistió a cursos de Filología Catalana. En el 2012 invitada al Encuentro Internacional de Escritoras Mestizas, Indígenas y Afrodescendientes, en Quito-Ecuador, organizado por el Ministerio de Patrimonio. En 1993 obtuvo la Beca Colcultura de ensayo, con la investigación Almacén de los niños. Historia de la literatura para niños en Colombia. Coatura del libro Los Samper un libro abierto. Trabajó en el apoyo documental para los Cuadernillos de Poesía de Panamericana Editorial. Antóloga y comentarista de libros. Ha publicado los libros de cuentos La otra ventana, Historias anómalas, Los perros prefieren el sol y otros cuentos.
FRIDA KHALO EN PRIMERA PERSONA
19 con 5ª. En esa esquina
En este cuarto todo flota
es muy frecuente encontrar
mi cuerpo roto
bebiendo o tomando café
se recoge a la orilla de esta cama
al grupo de pensionados que arreglan el país (político)
Un vientre enorme veo crecer de mi ombligo tres cordones de plata
Al grupo de jóvenes
sostienen tres fetos
que se agotan en su juvenilia
que auscultan la ciudad
A los murmuradores de la desgarradura ajena
Veo la ventana que soslaya el sol veo mi cuerpo roto
En esa esquina
del que todo fue vaciado
hay un hombre que aguarda para ver pasar el cadáver de su enemigo
El olor a éter me adormece recuerdo la lluvia quiero ver llover y que la lluvia me lleve hasta un río que el río me lleve hasta un estuario y desde allí hasta alta mar para desprenderme de esta vida cruel que tanto se encarnizó conmigo. A Ignacio Ramírez
22
| ulrika 48
Jaime Alonso Muñoz
C
omunicador social- periodista nacido en Santa Rosa de Osos Antioquia en Agosto 9 de 1957. Redactor de contenidos afro e indígena del periódico virtual Actualidad Etnica. Representante a la Mesa distrital de la Política pública de comunicación comunitaria, en delegación obtenida por asamblea de los medios de comunicación y procesos de comunicación de las comunidades afrodescendientes en el distrito capital año 2009- 2012.
SOBRE LA PIEDRA Sobre la piedra encontré dibujadas
TORMENTA EN UN VASO DE AGUA
las vidas de muchos.
Sonidos, ecos, pasos
Seres con alas de arena
Algo se quiebra
mirando a donde echar a rodar el destino,
algo resplandece
y arqueados dedos sobre la esfera, incesantes,
cuando algo se quiebra.
esculpían allí sus devotos ajuares de roca. Sobre la piedra
Cómo golpea el sol sobre
La huella del guerrero descansando
las tinieblas
leyendo sobre cicatrices, en la rugosa piel,
cómo ruedan las tinieblas
la fiel escultura irregular del destino.
sobre los cuerpos
Sobre la piedra, la mudez del labio.
cuerpos que se quiebran
Los senos oscuros de la primera mujer, su pecho de cal
Cómo golpea el sol sobre
y risa clara.
cristales doblados
Sobre la piedra
en el cuerpo de la ola
Las arañas del tiempo trepándome la espalada.
Cómo hace sonar la ola su cristalería. Oigo sonidos, ecos, pasos algo se quiebra el suelo no resiste, tantas muertes en un vaso de agua.
Corpoulrika ulrika 48 |
23
RAÚL VALLEJO POEMAS PARA EL PADRE Escuchamos en algún recital estos hermosos poemas inéditos en Colombia y le solicitamos a su autor que nos permitiese publicarlos en estas páginas. Helos aquí para el disfrute de nuestros lectores.
-9-
RAÚL VALLEJO (28 de junio de 1959) Poeta ecuatoriano nacido en Manta. Embajador de su país en Colombia. Cursó sus estudios secundarios en el Colegio Salesiano “Cristóbal Colón” de Guayaquil. Se licenció en Letras en la Universidad Católica de Guayaquil. Obtuvo su maestría en Artes en la Universidad de Maryland en College Park, con una beca
del Programa Fulbright administrada por la organización LASPAU. Integró el Taller de Literatura del Banco Central del Ecuador en Guayaquil que coordinó el novelista ecuatoriano Miguel Donoso Pareja. Entre sus libros de poesía se encuentran Cánticos para Oriana (Quito, 2003) y Crónicas de un Mestizo (Quito, 2007).
Padre, ¿extraviaste nuestros nombres acaso? 1 Padre, no sé dónde estás. Te fuiste antes de que yo naciera y me quedé sin tu nombre y sin tu abrazo. Fui un perro extraviado en una playa sin fin. Después te vi en tardes evaporadas. Pero no me acuerdo de tus ojos, ni de tus manos, ni del sonido de tu risa. Eres el silencio permanente de mi extravío. Solo recuerdo tu rostro dormido en el ataúd rodeado de tus otros hijos, de tu otra casa. Estabas hermoso y frío como esas estatuas esculpidas en mármol. Me acompaña la desesperación de esa mosca que besaba tus párpados, ofuscada y sin salida ella también dentro del féretro. Fui esa mosca extraviada en tu muerte. Y sin embargo, padre, somos el pálpito de la vida y yo tu progenie.
24
| ulrika 48
RAúL VALLEJO
2 Padre, yo no pude matarte si no a través a de mi propia muerte. Todo lo que tuve de ti en mi niñez fue esa volqueta fabricada en hierro que arrastré por las calles polvorientas del vecindario junto a mi tristeza infantil. Yo era un nómada sin pasado, paseante de barrio sin historia. Un día regalé la volqueta a un niño con el rostro aún más desolado que el mío, niño de pobreza de postal amarga. Al desprenderme de aquel juguete maté mi infancia y me quedé nuevamente sin ti. Me convertí, padre, en un adolescente de huesos de ceniza. Sobre mi huérfana delgadez llevé nuestros cadáveres a cuestas. 3 Padre, he vivido en orfandad sin que te hubieras enterado de tu muerte. Ausencia a la que nos sometiste durmiendo en la cama matrimonial de tu otro hogar. ¿Alguna vez sentiste remordimiento por el rito de hombre que repetiste igual que aquellos otros hombres que también carecían de futuro? Mi orfandad tiene el rostro de un niño solitario que juega en tardes calurosas con amigos que solo él ve, amables fantasmas vespertinos. Mi condición de adolescente sin padre es tan dura como la roca del acantilado que recibe el golpe furioso del mar e imperceptible se va desgastando. Tu abandono, padre, me acarició desde siempre como la lluvia que besa la playa, que deja huellas de gotas sobre la arena que el mar borra enseguida. Mis recuerdos de ti son como los peces muertos que los pescadores dejan en el vientre de las canoas para que los devoren las gaviotas. ¡Padre, devuélveme esa condición de hijo tuyo que nunca tuve!
4 Padre, me debes la mirada dolorida de mi madre, sus ojos de un azul grisáceo que nos miraban con la somnolencia de Penélope. Me debes también la madurez apresurada de mi hermano, sus largos días de trabajo para que nuestra mesa siempre oliera a pan fresco. Me debes los suspiros de mi hermana que siempre te buscó como si ella fuera la que se hubiese marchado de casa. Me debes la vergüenza pueril de andar por la vida sin padre.
ulrika 48 |
25
RAúL VALLEJO
5 Padre, no tengo una sola fotografía tuya. Tu rostro se ha desvanecido en mi memoria desteñido daguerrotipo del fracaso. Eres una sonrisa difusa como neblina una mirada opaca como cristal de mala calidad una palabra muda como cementerio. Eres tinta que se escurre de una acuarela humedecida en lágrimas. ¿Cómo acariciabas a un niño cuando yo era niño? ¿Dónde andabas cuando mi adolescente buscaba a quién parecerse en espejos de fantasmas? Padre, eres polvo tras una lápida que no conozco, eres desilusión del buscador de tesoros en la tumba en la que habré de encontrarte. 6 Padre, nunca tu voz me leyó un cuento para proteger mi sueño. Descubrí por mí mismo a un pequeño príncipe venido a la tierra desde un asteroide lejano, a una niña que tras perseguir a un conejo blanco apurado llega a un mundo de maravillas, a un burrillo que descansa entre las rosas eternas del cielo de Moguer, a una viuda del tamarindo que espantaba el espanto del día alrededor de una fogata nocturna. Las palabras que jamás obtuve de ti me las dijeron los libros en los que fundí mis ojos cargados de abandono. Ahora, Padre, yo mismo escribo los cuentos para mi desvelo y no es en vano. Escribo con las palabras que sostienen mi agonía de ser, el verbo que me ha liberado para siempre de tu ausencia.
26
| ulrika 48
nuevas voces
-9-
El festiva invitó a los jóvenes bogotanos a participar como jueces y parte en una convocatoría para dar a conocer siete las nuevas voces de nuestra poesía. A continuación publicamos poemas de los siete seleccionados y de sus jurados.
Andrés Camilo Torres Estrada
C
on 26 años de edad es profesional en Estudios Literarios egresado de la Pontificia Universidad Javeriana, con maestría en Literatura de la Universidad de los Andes. Ganador del concurso de la Casa de Poesía Silva en el 2010.
En la danza El vestido violeta gira un instante antes que la bailarina.
A Borges Algunos espejos del sur omiten en sus reflejos el centro del cuerpo y en cierta época del año logran retrasar la salida del sol. Quien se ha mirado en ellos anda con la noche a cuestas. Sin saberlo.
ulrika 48 |
27
Omar Garzón Pinto
S
us poemas han sido publicados en diversas revistas y periódicos de su país. Ha presentado su obra en espacios académicos, culturales y artísticos de la capital colombiana como el III Festival de Literatura de Bogotá (2012); I Recital de Poesía Universidad Minuto de Dios (Bogotá, 2012); Homenaje a Raúl Gómez Jattin, organizado por el Taller de poesía de la Univesidad Nacional (Bogotá, 2011) y en la III y VI versión del Recital
de Poesía Universidad de La Salle (Bogotá, 2011). Entre los años 2011 y 2012 se desempeñó como tallerista literario en la Fundación Andrés Barbosa Vivas. Es autor del libro Faro desnudo, editado por la Liga Latinoamericana de Artistas (Bogotá, 2011). En la actualidad trabaja como profesor de Geografía en el Colegio San Basilio de su ciudad natal y prepara su segundo poemario titulado Flores para un ocaso. Dirige el portal literario farodesnudo.blogspot.com.
Aquelarre en MACAYEPO Hoy cayeron piedras del cielo. Cayeron tantas veces que nuestros cuerpos tomaron forma de cantera: A su choque con el suelo daban gritos de agonía. Cayeron como truenos cortando hasta el aire en nuestras bocas. Hoy cayeron piedras del cielo y las ramas deshojadas de los árboles cobraron vida. A cada paso de su danza vespertina nos quebraban los brazos, las piernas, la voz y el cuerpo en la montaña ya no era nuestro. Los montes se alzaron imponentes para ser testigos de la fiesta de los hombres: Ramas estacadas en los vientres, filos que salían de las venas, piedras en los ojos, llantos sin destino… Todo en la vitrina de la muerte, todo en el lienzo de la tierra /ya salada, ya de cal. Hoy cayeron piedras del cielo. De su paso por aquí solo queda el rastro de unas sombras y los campos removidos y las huellas de los niños y esta mano de algún anciano que partió sin ella.
Ruta entre CAÑO SIBAO y el canto de un pájaro 1 Es muy triste caer sin más al lado de la cerca cuando no se es fruto de algún árbol. 2 Es muy triste sentir la lluvia cuando cada gota es un puñal que te desangra. 3 Es muy triste cuando un cielo rojo entre tu espalda y el suelo es tu último lecho. 28
| ulrika 48
Darwin Alexander Toledo Cerón
N
ació en Bogotá pero residió en los municipios de Soacha y Granada. Estudió Comunicación Social en la Universidad Javeriana. Desde el 2009 ha estado interesado en la poesía, estudiando autores como Rainer Maria Rilke, César Vallejo, Octavio Paz y Julio Cortázar.
Agosto Las cometas son deseos, decía mi abuelo. En las manos de un niño luchando a contraviento en las bajadas. En las de un hombre ansiando la oportunidad de un buen viento. Decía que vuelan tan alto que parecen saludar a Dios moviendo sus colas de trapos viejos. Ahora, él es viento y nube Yo, su última cometa.
EL TIEMPO una hoja de papel en blanco. El espacio lugar dentro las márgenes. El hombre el poema hablado de Dios. La muerte punto final. El poeta quien escribe fuera del margen quien vive después del punto. ulrika 48 |
29
Yonny Germán Vanegas
N
ació en Bogotá en 1978. Licenciado en Humanidades y Lengua Castellana. Dedicado a la docencia, la gestión cultural y a la escritura de poesía. Ha publicado sus poemas en varios medios nacionales y ha obtenido algunos reconocimientos como: Primera Mención Concurso Nacional “Si Los Leones Pudieran Hablar” Casa de poesía Silva, 2008; Finalista Con-
curso de poesía “Arte y letras de la localidad de Engativá”, Alcaldía Local de Engativá, 2011; ganador del Concurso de la Secretaría Distrital de Cultura Recreación y Deporte: “Buenas Prácticas y Propuestas para el fortalecimiento de la articulación e interacción de los espacios de participación y concertación del Sistema Distrital de Arte, Cultura y Patrimonio”, 2011.
Araña En el centro de la noche entre una constelación de polvo: teje su propia luz
Pájaros Se disuelven los pájaros: durante toda la noche han bebido la sombra del saúco ahora son pájaros ebrios y extraviados que buscan un color celeste
30
| ulrika 48
Edgar Sebastián Martínez Castañeda
P
oeta bogotano, 1987. Realizó la carrera de Estudios Literarios en la Universidad Autónoma de Colombia. Fue fundador y coordinador de la Revista Oral y la Revista Don Jumento. Ha participado en eventos externos como el XXX Encuentro Internacional de Escritores de Chiquinquirá; las Jornadas Universitarias e Internacionales de Poesía en Bogotá en la Universidad Pe-
dagógica Nacional y el Gimnasio Moderno; en el 19 Festival Internacional de Poesía de Bogotá en la Alianza Francesa; y Lectura de Poesía (Nuevas Voces de la Poesía Colombiana) en la Casa de Poesía Silva. Actualmente trabaja en una investigación sobre León de Greiff y Vidal Echeverrya. Fue ganador del Concurso Nacional de Poesía Casa Silva La Poesía de los objetos 2012.
III
IV
Suelo ver en fotos un familiar al que no recuerdo A veces escucho a mitad de la escalera una voz que increpa mi nombre
Los ojos se apagan en la hoguera abandonan el estío La llama sufre el baile de las sombras entre lo visto y lo soñado En la punta del cigarro arde la tiniebla
Hace días que acostumbro fumar en habitaciones ajenas sentarme atizar la llama inerte y quemar foto tras foto
Hotel Abu Ghraib En la noche un coágulo traga la garganta de cristal En el día el sol enfurece los barrotes
ulrika 48 |
31
Felipe Donoso Suárez
N
ació en Bogotá en 1979. Ingeniero Civil. En el año 2002 algunos de sus poemas fueron publicados en Primeras páginas para soñar, antología de poemas ganadores de los concursos interuniversitarios de poesía de la Universidad Minuto de Dios. En el año 2003 obtuvo el primer premio en el Concurso de Poesía Eduardo Carranza
con el poema titulado “Invención”. En Junio 2010 participó en el XVII Festival de Poesía de Tenjo. Participa activamente en el colectivo Comunidad del Megáfono, buscando lugares y escenarios cotidianos y urbanos para compartir y escuchar poesía. En la actualidad cursa segundo semestre de filosofía en la Universidad Nacional Abierta y a Distancia.
Dios Te nombro hombre Al hondo mar que llevas dentro Lo llamo miedo
Lluvia Puedo enumerar la lluvia Contarla Darle nombres en cada instante Puedo salir y retenerla con mi abrigo Tomar de adentro lo fundamental Puedo alcanzarla Seguirla Sentir la oscura vibración del relámpago O acaso guarecerme Y verte caminar entre la niebla
32
| ulrika 48
Nidia Andrea Martin Bolaños
B
ogotá, 1989. Egresada del colegio Nuestra Señora del Rosario. Actualmente trabaja como promotora de lectura en Fundalectura. Como parte de su búsqueda en el campo de la escritura y diversas formas de expresión, administra el grupo Búsqueda Poética. Trabajó con la Corporación Cultural Contravía, dedicada a la divulgación de cultura musical.Ha realizado estudios en Psicología, en la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia.
Intermitencia Al día siguiente no murió nadie
José Saramago
El viento eleva las aves para leer su destino. Insoportable reflejo que la muerte abandona.
Rutina Cruzo el umbral donde se unen dos mundos. Me sumerjo en el aire. El que conoce mis pasos, juega, los desvía. Soy fibra oscilante en busca del centro.
ulrika 48 |
33
JURADOS NUEVAS VOCES DE LA POESÍA COLOMBIANA
-9-
Los jurados de la convocatoria Voces para la poesía Colombiana nos ofrecen aquí una breve muestra de su trabajo poético
Camila Charry
EL ÚLTIMO CAMINO por JORGE CADAVID Poeta y ensayista colombiano, Pamplona en 1962. Es profesor de cátedra en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, donde da clases de literatura latinoamericana.
E
n la poesía de Camila Charry Noriega, la imagen nos hace comprender de otra manera la realidad, la hace transparente y pura. Esto se logra no pensando a través de ideas sino de imágenes. Las transiciones, las márgenes, los intervalos de escritura, nos ofrecen una interpretación del silencio. Desde esta perspectiva, las notas mudas de este primer libro encontrarán en el lector ideal el sonido más profundo que las exprese. Toda poesía auténtica “dice” más de lo que “enuncia” el poema. No hay poema ni escritura ni estado de gracia posible sin una colosal disposición a renunciar a todo lo aprendido y entregarse a contemplar por primera vez. Esa visión primera es la que nos ofre- Camila Charry Noriega ce Camila Charry Noriega en su extraño libro Detrás de la bruma. Desconocer lo conocido, la extrañeza, la espera y la llegada del poema son algunos de los temas principales de esta obra. El poeta espera secreta, pacientemente, que la
34
| ulrika 48
intemperie del mundo nuevo se revele en el milagro de una visitación, una epifanía. La intensidad de esta escritura y la constatación de su carácter instantáneo y transitorio llevan al poeta a verificar que el paraíso no es artificial sino real: aunque fugaz, como una frágil mano que atraviesa la llama, o un par de caballos detrás de la bruma. Basta leer estos poemas en voz alta para confirmar el impulso de una fuerza que avanza inexorablemente hasta ver el dorso nunca visto del objeto de siempre. Esa marcha oscilatoria de la voz se radicalizará con el paso de los años, hasta convertirse en procedimiento vital. De ahí que el yo de esta poesía se encuentre en la frontera de una voz segura y robusta que canta sus verdades. Ese yo también se funda en sus interrogaciones; indaga el mundo a partir del reconocimiento de su debilidad y su ignorancia. El poeta cree en sí, pero no tanto. Cuando cree, duda. Cuando duda, cree. El escritor catalán Joan Margarit expresa lo anteriormente dicho con algo de humor: “Escribir un mal poema que no se entienda es lo más fácil. Escribir un mal poema pero que se entienda es algo más difícil. Escribir un buen poema que no se entienda es muchísimo más difícil, y, en fin, escribir un buen poema que se entienda, eso es patrimonio de los clásicos”. No dudo que la poesía de Camila Charry, con su primer libro, Detrás de la bruma, ya intuye este último camino.
Del libro Detrás de la bruma. Fundación Común presencia, Colección Los conjurados. Secretos
Olvido
Yo guardo secretos, madre, que me matan esta fugacidad es una manera de nombrarlos: tanto deseo de todo y la nada ya tan dentro.
Estarás lejos cuando en las tardes el aguacero de siempre esconda golondrinas y gusanos. Sabrás al fin que olvidar es sólo esquivar entre las calles fantasmas que la luz de los faroles imagina.
Lenguaje
Señales
En esta hondura que es mi cuerpo laten el agua el miedo el goce de mirar tus ojos calmos limpios como cualquier palabra muerta.
Llueve sin afán el día huele a ti; atento mi corazón palpita y desconfía sabe que a pesar de todas las señales jamás vas a volver.
Del libro inédito Era por estar vivos, Segundo Lugar en el Concurso Nacional de Poesía Ciro Mendía 2012
Era por estar vivos
Cuando al fin
que nos desnudábamos y reconocíamos la furia en el colmillo de la noche y era por este apego a la carne que día tras día las manos quemadas por tanto sueño arrancaban de las espinas la luz roja de la tarde.
los perros se callen y tras la puerta el eco de la noche repita mi nombre hasta el amanecer me habré reconciliado con cada una de las apariciones que la memoria trae impasible como un trueno.
ulrika 48 |
35
Alejandro Cortés
Una mirada a su palabra por Roberto Burgos Cantor Uno de los narradores más destacados de la literatura colombiana actual. Siempre en díalogo con nuestra poesía.
N
ació en Bogotá. En dos mil seis participó en El alma en un bolsillo, una antología de nuevos poetas auspiciada por la Casa de Poesía Silva de Bogotá. En dos mil nueve ganó el Concurso Nacional de Novela Corta de la Universidad Central, con la novela Notas de inframundo, que fue publicada y lanzada al año siguiente en la Feria Internacional del Libro de Bogotá. En dos mil once ganó el Concurso Nacional de Cuento de la Universidad Central, con el cuento Él pinta monstruos de mar, que le dio título a una antología publicada por la Universidad Central. En marzo de dos mil doce, lanzó el libro de poesía Pero la sangre sigue fría, que contó con el prólogo de Roberto Burgos Cantor y la presentación de Álvaro Miranda. Poemas y cuentos han hecho parte de publicaciones físicas y virtuales. Ha sido invitado por la Corporación Fernando González Otraparte (Envigado), Red Internacional de Editores Independientes Edita (Itagüí), Festival de Poesía de Bogotá, Fundación Artística Casa de Hierro (Barranquilla), Encuentro Internacional de Poetas en Zamora (Michoacán).
Alejandro Cortés.
36
| ulrika 48
LA NOCHE PRESENTIDA
El reptil sabe que su estela mesozoica tiene la edad del poema; el poema no olvida que por la osamenta de sus letras crece la agrura del reptil. El saurio, el lagarto, el monstruo rara vez emergido de las catacumbas de mares e inframundos, advierte en sus pisadas la tinta del poema. Desde el primer día carga el llamado a la extinción. Escapista de paso discreto y ausencia estrepitosa, un puñal y una huida. Conspirador de recuerdos, coleccionista de olvidos. El poeta es una herida abierta en el tejido del mundo, un ciudadano de la memoria que siempre está de paso, un reptil que construye, sobre la ruina de los días, su mórbida perpetuidad. Presiente la noche. Deberá disculparse por sus silencios, y cruzar mares, para grabar de banderas su epitafio.
EL PRIMER OFICIO DEL DÍA Poesía es un desempleado que lleva a un niño al colegio. La mano que protege y la mano que redime, se unen y se transmiten silencios. El niño no habla de los libros que le faltan. El adulto no habla del empleo que no ha conseguido. La poesía es omisión. La calle, un río crecido. Antes de cruzarla se aprietan las manos con más fuerza, para que nunca se vayan a soltar. Poesía es un desempleado que lleva a un niño al colegio. Es la fábrica ausente, es el libro no leído. Poesía es caminar de la mano con la promesa de nadie.
OSAMENTA DEL AGUA Tiene la lluvia la facultad de hacer más pesados los zapatos y más livianos los suelos. Unido a su paraguas uno es un mismo esqueleto del que cuelgan carnes y telas enfermas de agua. Así lo entiende el relámpago cuando ataca. Mi paraguas no es más que una sombrilla moribunda que con sus faldas levantadas advierte los huesos. Usarla me avergüenza ante el granizo, olvidarla me apena ante el desconocido. Y con vergüenza, dejo que el entendimiento se diluya en la canción del agua contra las telas. Mis pasos ya no son pesados, los suelos entienden las metáforas del aire. Y entre tormenta y tormenta, me siento un poco más lluvia, me vuelvo un poco más hueso.
CARTOGRAFÍA DEL AGUA
TÍTULO DE PROPIEDAD
El que desde el ojo de buey contempla la lluvia, se va con el galope del agua. Sus ojos, agrietados de relámpago, recorren los mapas que las gotas trazan sobre la ventana. Aprende a esperar sin esperanza, a recibir sin ansiedad la calma. El que desde el ojo de buey contempló la lluvia, entiende que hay un país perdido en la cartografía del agua, y busca en los cielos grises, el galope que lo haga regresar.
A la barca abandonada un hilo de cuerda la amarra al mundo. El agua que la mece y la duerme, es el agua que la desmiembra. Lo que queda de barca no se decide a ser lago ni orilla; solo un cuerpo enraizado de cabuya que, mientras se rompe, oscila y espera, oscila y espera. El abandono es propiedad de la deriva.
PORTADA Al que se asoma al pantano, el agua le roba la cara. Es un reflejo que se aleja y naufraga. Solo en las profundidades se recupera. ulrika 48 |
37
Henry Alexander Gómez
Un rumor de árboles por HELLMAN PARDO Actualmente dirige el taller Relata, en la ciudad de Fusagasugá. Poeta y narrador.
“U
n rumor de árboles rompe la noche”, dice D’Annunzio en Odas navales, refiriéndose al cuidadoso avance de las tropas al descender de los barcos en guerra. Es aquel rumor, aquella resonancia que advierte el italiano en tan sublime imagen, la que insinúa Henry Alexander Gómez en Memorial del árbol, libro ganador del Concurso Nacional de Poesía Inédita 2012. La obra, dividida en tres partes memoria de noche, memorial del árbol y la línea del árbol, encierra rastros del expresionismo alemán, indicio de su cuidada lectura de poetas en lengua germana como Else Lasker-Schüler, Georg Trakl, y aún atisbos de Rilke. Si bien el expresionismo lírico es penetrante y desnudo en el manejo del estilo, Gómez indaga en su poesía el reposo y la simultaneidad de representaciones alegóricas, características de dicho movimiento. En los doce poemas que componen “memoria de noche”, se entreabren cuatro particularidades bien perfiladas: la cercanía a la sombra, el breve intervalo entre la caída de Henry Alexander Gómez. la tarde y la vigilia de la noche, el laconismo preciso, y la desfragmentación de lo contemplado. Es así como “Una lechuza / se desliza por la boca del viento”, o ese admirable poema donde nos dice “Respiro las grietas / de una calle cualquiera; / escribo so-
38
| ulrika 48
bre el polvo / y su semilla”. Pero no es la noche la que nos somete a su palabra, es el enigma de esperar mejores augurios. En “memorial del árbol”, la sección que le da el título al libro, y el que contiene la mayor cantidad de poemas, se despuntan versos más libertarios, desprovistos de realidades efectistas. Deja atrás la noche como elemento esencial, y asume la desolación de los recuerdos perdidos: “permite que el viento deshaga el laberinto / sobre la piel de tu infancia”, y, como si un árbol de antaño fuese el que escribiera, anuncia “Vivir la lentitud / de la hormiga, / confuso / en una ola de arena.”, o “de mis brazos cayó la hoja / con la que un hombre descalzo / cubrió su sombra”. Es precisamente la remembranza, la evocación a un pasado deshecho, dejando al árbol como un testigo vidente, cercano a la desolación que indaga todos los rostros. Santiago Espinosa lo advierte en el prólogo del libro, cuando comenta “para él, no hay futuro ni promesa hasta que los pasados se realicen”. En el apartado que cierra el libro, “La línea del árbol”, Gómez nos muestra su fascinación por ciertos poetas decadentes, sombríos, cuya musicalidad aún traspasa el tímpano del lenguaje. En “El ángel negro de la isla de Kampa”, aparece un Holan devastado por la muerte de su hija Katerina, y exiliado en su querida isla; en el poema “Paul Celan hilvana su fuga”, nos habla del rumano y la desolación que siempre le acompañó: “Es en tu vientre, / madre, / donde / siembro / mi otoño”; o, las líneas de “Episodio para Jean Arp”, donde explora el encanto y ostracismo característicos del escultor y poeta francoalemán. Es Memorial del árbol un libro persuasivo, consistente, en donde fluyen imágenes de alta factura. Sin duda, escucharemos el eco de este poeta bogotano más allá de esta obra, más allá del importante premio que le fue concedido.
Del libro Memorial del árbol
UNA LECHUZA
RESPIRO las grietas
se desliza por la boca del viento.
de una calle cualquiera; escribo sobre el polvo y su semilla.
Su sombra traza un círculo inmortal en la herida del árbol.
Mi escritura no es más que la aridez del aire,
En donde página tras página se incendiaban las palabras,
la señal del derrumbe.
un aleteo oscuro anuncia lo que no puede nombrarse.
VELO DE NOCHE Vivir la lentitud de la hormiga, confuso en una ola de arena.
SOBRE LA PIEL Permite que el viento deshaga el laberinto sobre la piel de tu infancia. Deja que delate una íntima escritura: el torbellino de lava que palpita en el vientre del águila (todos los fragmentos de tiempo en el que el agua cae de su envoltorio son uno con su dios). Pero sólo es el viento, oscilante. Una tinta invisible en un rostro que permanece.
Entre el amor y mi sangre hay un silencio de pájaros, velos como mareas de hielo bordados con filamentos de sal. Alguien ha escrito mi nombre en una roca incendiada con el carbón que tiñe lentamente la noche.
ulrika 48 |
39
taller festival internacional de poesía de Bogotá 2013
E
-9-
l taller del Festival está concebido para interactuar de manera efectiva con nuestras iniciativas concretas en torno a la literatura y el arte. Esta iniciativa, si bien conserva su interés en mantener el diálogo con la poesía y los poetas colombianos e iberoamericanos, se ajustó al tema del XXI Festival Internacional de Poesía de Bogotá: “Celebración de la Diversidad Étnica y Cultural Iberoamericana”. El taller cuenta siempre con poetas invitados presenciales y virtuales (vía Sky-
pe) con los que analizan los aportes y posibilidades de la poesía desde la perspectiva mencionada, sin descuidar los textos de los talleristas y las reflexiones teóricas en torno al oficio de la poesía que, con Pessoa, también asimilamos al oficio de vivir. Entre los miembros del taller hemos contado con poetas de varios países vinculados como estudiantes de postgrados a la Universidad Javeriana, profesores universitarios y de bachillerato, al igual que profesionales de diversas disciplinas.
SILVIO ANDRÉS SALCEDO TOVAR (Bogotá – Colombia – 1985) Poeta. Adelanta estudios de Teología en la U. Javeriana
ENSUEÑO Te besaré en el silencio de la ausencia. Esperaré al día de tu mirada. Desearé tenerte junto a mí. Buscaré el reflejo de tu voz en el brillo de la noche. Me detendré en el paso último de tu mirada. Esconderé la llama fría de mi voz. Leeré la nota de tu caricia. Seré el paso de tu piel. Cubriré con mi mano los turgentes montes de tus laderas. Seré el silencio que necesitas para hablarme sin palabras. Seré el beso que te robe un gemido por las mañanas. Seré el toque certero que le dé fin al infierno de no amarme.
40
| ulrika 48
ROSAURA MESTIZO MAYORGA (Bogotá – Colombia) Poeta, pedagoga, abogada.
CARTA DE CUAYÁ* Leí en tus labios la corriente de una luz de opalina Hablabas de dos mundos: el del sur y el del norte A tu encuentro sutil y generoso asistí vestida de cocuyo, chiguas y bosque nativo. Por el transcurso de los siglos recibí de ti una carta gestante con que desolabas el cielo por vestido me diste arcilla, arena por palacio una mina donde las barbas se hicieron blancas, sellando el hambre minera. Por hijo parí un ángel -el ángel del carbónAquí sigo, aun cuando no me veas vestida de cocuyo, chiguas y bosque nativo. Entre escaso herbaje estoy conservando esta inscripción, -Lo visible, deja un halo de lo real*Cuayá / Guayá: Nombre de una vereda de Suejica o Suesca (Roca de las aves)
ulrika 48 |
41
JORGE CARLOS RUIZ DE LA QUINTANA Bolivia, 1979. Estudió Filosofía y Letras y Antropología. En el presente cursa un posgrado en Teología en la Universidad Javeriana. Actualmente forma parte del “Taller de apreciación y creación del Festival Internacional de Poesía de Bogotá.”
Aparecidos: versión délfica
Aparecidos: versión geométrica
Aparecido bajo la luz Bajo la luz sólo tiempo del tiempo ya no queda nada la nada que viene con la luz
Aparecido Aparecida Son luz Son noche Entonces son nada
Aparecida sobre la noche arriba la noche abajo tú De tú ya no queda nada la nada viene con la noche Duerme la noche cubierta de luz El tiempo y tú vienen solos Aparece la nada arriba y abajo Ya no queda nada sobre y bajo Aparecidos de un sólo tiempo de una sola noche
42
| ulrika 48
El tiempo no viene pues el tiempo también es nada por tanto si la noche no duerme tampoco la luz cubre entonces nadie viene nadie aparece Ya no queda nada de nada Ya no queda nada de nadie nada y nadie se conocen aparecidos al tiempo quienes a su vez se aparecen sin parecerse a nada y a nadie
Neftalí Eugenia Castillo República Dominicana,1979. Es licenciado en Filosofía y Humanidades. Actualmente termina un postgrado en Teología en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá. En el 2009 inició, junto al jesuita Prudencio Piña, el recital “Una poesía para Dios” que se realiza dos veces al año en Santiago De los Caballeros.
Confusión de mí
Mujer
Alguna vez pensé que a esta altura de la historia tu voz ya no sería un imperio en mi poblado. Que no sudaría como un pez sin agua, tembloroso, asfixiado. Alguna vez pensé que a esta altura de la historia yo podía haber amado a otra y que el mar, el viento la noche el humo del tabaco el ron de caña negra o algún amable beso terminarían borrando tu nombre. Pero no… Vuelve el cosmos con tu rostro. Y en este puerto de mi vida, triste, sin faro y sin sirenas todos los barcos pasan a dejarme recuerdos de ti.
Prodigiosa fontana desbordante de vida. No existe diferencia entre tú y la vida entre el amor y Dios entre Dios y la vida entre el amor y tú. En mí llevo tu piel y tu esqueleto, tu grito milenario tu implacable silencio. Tu relámpago tu lluvia y el espanto de tus lágrimas En mí llevo tu piel y tu esqueleto Tu grito milenario me llena la boca Subo contigo a los tejados Y allí siempre tu silencio. Riego con tu lluvia los sueños estériles Haciendo que germine la utopía Y de un fogonazo, como un relámpago salido de tus ojos, Desterramos la muerte para siempre.
ulrika 48 |
43
ESTUCHE DE CONTRABAJO: CANCIÓN A CONTRAVÍA Ópera prima de David Reinoso
-9Robinson Quintero Ossa
Poeta. Pertenece al Consejo Editorial de la revista Ulrika.
E
stuche de contrabajo. El título me pone ante un acertijo: ¿qué música verbal canta el útil que guarda la funda?, ¿qué sugiere y cómo sugiere? Porque un libro es como un estuche que guarda un artefacto melodioso y sugestivo. Yo agradezco esta primera insinuación; un título es ya una promesa (una promesa por cumplir). El poeta sabe de esto, sabe que en esencia la poesía es el gusto por el arte de lo adivinatorio, y por eso me convida a un juego de presentimientos, prueba mi curiosidad desde el comienzo. Entonces cedo a la tentación, abro la funda y le doy oídos a las primeras piezas: música grave, por lo bajo, apenas apuntada (el contrabajista es consciente de la tesitura de su canto): el poeta juega a dar la nota más baja. Compone poemas breves, escalonados en versos cortos, y su lenguaje es sencillo, nada ampuloso, sin sintaxis forzadas. El silencio canta en los espacios en blanco de la página; la gravedad de su música está hecha de ese silencio, sobre el cual la palabra dice con energía pero también con mesura, contempla, discierne. Las suscitaciones también son plásticas. El libro traza objetos y espacios figurativos que se difuminan en imaginarios abstractos, plástica natural en las sensibilidades inclinadas a contemplar e interiorizar: «Mi mano, por ejemplo / delinea la palabra mar / y el oleaje que la sacude / es su espíritu que forcejea, con el pensamiento» («Mano de obra»). Lo que canta en esencia Estuche de contrabajo es la poesía que reflexiona sobre la poesía, es decir, la poesía que canta la experiencia del oficio de escribir: el instrumento se oye a sí mismo. El poeta canta la dificultad de expresar lo indecible, porque la realidad es más compleja que la palabra que quiere descifrarla; es consciente de su imposibilidad de discernir con sus propios útiles porque la vida es más grave que el poema, o dicho de otro modo, el poema no puede darle vuelo a 44
| ulrika 48
lo que pesa. Por eso su nota grave, abismal. Así lo da a entender, en un juego alegórico bastante acertado, en su texto «Libreta de apuntes»: Tengo algunos pájaros sin pico y patas otros con alas deformes, a todos ellos les limpio las jaulas en las mañanas.
La poesía es motivo de sospecha y de burla disimulada. En este sentido, David Reinoso liga con uno de los temas insistentes de los poetas colombianos de las últimas décadas del siglo XX: la poesía como útil crítico que critica a su vez a la poesía, y que desde esa mirada a sí misma, desde esa honestidad, la afirma, aunque traiga desencanto; la adhiere, con fallas y todo: «Muero en mi ley / escribiendo / matándome». Su palabra es directa, despojada —los signos crípticos no emborronan la partitura—, tocada por un humor franco, incluso oscuro en ocasiones, como en el poema que da nombre al libro, «Estuche de contrabajo»: «Es curioso ver cómo este hombre / lleva su ataúd a todas partes». Pero Estuche de contrabajo es también, y por eso su canción llega a llamar nuestra atención, la poesía de la experiencia de la vida, la poesía del dolor, del tiempo, de los sueños. El poeta canta la maravilla y la desilusión de su travesía, con acento un tanto amargo, con acordes casi apagados. Pero un asunto resalta: el fracaso. El fracaso del que regresó de la travesía sin encontrar nada, y el fracaso de la palabra como medio de restitución. El contrabajo expresa eso: la historia de un escritor de versos que busca, contra toda descreencia, la poesía en un mundo absolutamente antipoético. Es la canción a contravía, como lo sugiere en «Ministerio»: «Este oro lo puso en mis manos el abismo». O, como lo insinúa en «Acordes secretos», la canción que resiste: «La vida pone a rodar un vinilo negro / y lo escuchamos bajo su aguja de diamante».
MINISTERIO
MANO DE OBRA
A veces la vida aprieta un gatillo o estira la manta sobre un cuerpo
No trabajo con logias o funerarias Como otros hombres retrato pasos sin caminos y este oro lo puso en mis manos el abismo.
Tú lees palabras yo sólo trazo bocetos de desgracias puñales de respiración Mi mano por ejemplo delinea la palabra mar y el oleaje que la sacude es su espíritu que forcejea con el pensamiento Escribo la palabra soledad pero en realidad es el destierro atorado en mi garganta Tus ojos leen las palabras yo emparedo letras bajo palustradas de silencio.
ACORDES SECRETOS
KAMIKAZE
Preguntan por el concepto de oído musical y recuerdo la voz del día mudo cuando unas llaves abren la mañana El sonido de un pedazo de carne cuando se desliza en la sartén caliente La música de un campanario cuando el badajo juega entre sus faldas O el rumor de una cascada cuando el agua conversa con las piedras La vida pone a rodar un vinilo negro y lo escuchamos bajo su aguja de diamante.
Mientras mi corazón se amarre ladrillos al cuello y hunda su cabeza en las aguas de una página seguiré vivo Amando esta lotería de alma tullida sobre muletas de oro lotería de arroyo estrangulado por el acueducto lotería de pies de atleta y alas de cartón Muero en mi ley escribiendo, matándome.
Otras veces olvida respirar se distrae y oculta su rostro en la muchedumbre entonces la observo y escribo Para eso me contrató la muerte
ESTUCHE DE CONTRABAJO TALA ¿A quién se le ocurrió la palabra árbol al primer labriego al primer hombre desterrado por su pueblo? Difícil saberlo Entre el movimiento del lápiz y su rastro en la página respira un hacha.
Es curioso ver cómo este hombre lleva su ataúd a todas partes He visto ataúdes que arropan el miedo y los llaman casas ataúdes que ahuyentan la intemperie y los llaman trajes Nunca un ataúd redondo con un muerto que no ha muerto.
ulrika 48 |
45
poeta homenajeado festival 2013
GUILLERMO MARTÍNEZ GONZÁLEZ: POESÍA Y ANHELO
-9Samuel Jaramillo González
Economista y urbanista. Desde muy joven se destacó como poeta, tras ganar varios premios nacionales y ser incluido en múltiples antologías.
A
comienzos de los años ochenta llegó a mis manos un libro de poesía recientemente publicado en Bogotá, Declaración de amor a las ventanas que me llamó poderosamente la atención. No conocía a su autor, Guillermo Martínez González, y de él sólo sabía que venía del Huila y que era nieto de una de nuestras mejores poetas, Matilde Espinosa. Y digo que ese libro, y la voz que se plasmaba en sus poemas, capturaron mi atención. Y no solo la mía. En el medio de la poesía colombiana quedó claro que este poeta ocuparía un puesto destacado en ella. Y así ha sido. ¿Qué era lo que me atraía tanto la atención en esta poesía de Guillermo Martínez y continúa haciéndolo hoy en día? Tantos años después, puedo decir que desde entonces lo intuía, pero en su momento lo diferenciaba solo a medias. Hoy creo tenerlo más claro. Pero esta comprensión para mí ha sido gradual. En buena parte esto se debe a la consolidación paulatina y creciente de la obra de Guillermo Martínez (tres poemarios originales publicados y uno en proceso de edición, varios volúmenes de traducciones y de ensayos) que cada vez afianza más su voz poética, desplegando desarrollos en muchas direcciones, y al mismo tiempo fortaleciendo este nodo tan interesante de su expresión. La poesía de Guillermo Martínez está muy imbricada con la que escribe su generación, y comparte con otros poetas colombianos de su promoción, con los mejores de ellos, muchos recursos y preocupaciones. Desde luego que es un escritor que posee oficio y un grado de destreza en la movilización de los instrumentos expresivos de la poesía que justificaban la conclusión temprana de que se trataba de un poeta importante en nuestro medio. Pero había y hay algo más. Desde sus inicios en sus poemas vibra una nota peculiar que le da un perfil, una entonación, excep46
| ulrika 48
cionales y a la vez, reconocibles. ¿De qué se trata? Una primera percepción, muy nebulosa, me decía que en la poesía de Martínez vibra sobre cualquier otro tono, un acento “positivo”. Y esto es más bien escaso en el escenario de nuestras letras. Los poetas colombianos que tienen una obra comparable a la de Guillermo Martínez tienen registros dominantes muy diversos: la decepción frente al mundo que los rodea que los conduce a una concentración en la ironía, el humor negro disolvente, la desesperanza (Alvarado Tenorio quiso acuñar la denominación de “generación desencantada” aplicada tal vez con mayor propiedad a la promoción inmediatamente anterior). A otros este divorcio con la realidad circundante los empuja a la reprobación vehemente, a la indignación y a la admonición airada. Otros deciden cortar con este entorno incómodo y degradado y construyen con sus palabras mundos paralelos más amables o menos banales apoyados en la erudición literaria o histórica. Y así podrían enumerarse vertientes adicionales. Todas ellas trasmiten una sensación “negativa”. Esto no es bueno ni malo, solamente constato un hecho. Hay poesía de excelente calidad con estos referentes. Pero como he dicho, la poesía de Guillermo Martínez nos impregna de un aura “positiva”. Isaías Peña, en un comentario sobre su primer libro, anota que encuentra en él algo infrecuente entre nosotros: alegría. Esto, desde luego, es verdad, y tiene que ver con lo que quiero señalar. Es cierto que existe alegría en esta poesía y esta no es una de sus características menores. Pero no se trata de que Martínez González sea un poeta optimista, o mucho menos, despreocupado o conformista. Como cualquiera puede constatar, en sus poemas no es raro encontrar parajes sombríos, y también crítica, indignación, tristeza.
¿Qué es entonces a lo que aludo con esa expresión aproximada de “aura positiva”? Creo encontrar una pista en lo siguiente: parece desprenderse del papel que este poeta le encomienda a la poesía. Al pacto que le propone al lector. El lector de estos poemas encuentra en ellos una invitación a desear, a anhelar. Las palabras de Guillermo Martínez son un instrumento para expandir el alma, para ir más allá de los límites a los que la experiencia en bruto nos condena. Esto es lo que reconocemos como energía y una energía activa, positiva. Esta poesía no sólo rememora, o registra, o reflexiona. Su núcleo es promover el ansia, la avidez. Claro que hace todas estas operaciones que he mencionado: incluso se lamenta, teme, enjuicia. Pero siempre alrededor de este eje: la poesía como palanca del anhelo. Y este planteamiento implica siempre una tensión. No se trata solamente de exaltar el goce o la fascinación. Algo se opone a lo que se desea. A lo que se llama es a superar las barreras que nos separan de lo deseado. El norte de este deseo al que nos concita esta poesía, es plural. Son varios sus objetivos, contiguos, pero variados y su sentido va desplazándose imperceptiblemente. Una de estas metas es la libertad. Y la libertad encarnada en la facultad de moverse físicamente. De no permanecer estacionado, enraizado. Obviamente la referencia al movimiento físico es un dispositivo expresivo para proyectar el sentido de la libertad en su dimensión más amplia. En uno de sus poemas más conocido en el que fija su atención en los semáforos, cristalización de la vida urbana moderna, dice: Yo le canto a los semáforos (…) Le canto a su monólogo de colores (…) A su alegría en las calles A sus ganas de salir Corriendo con los carros. (Homenaje a los semáforos. DAV )
La formulación poética del deseo parte de la constatación de la existencia de la limitación. Sostengo que no se trata exactamente de la celebración, sino de la incitación a desembarazarse de las ligaduras que nos impiden la expansión. Por ello con frecuencia
Guillermo Martínez González. Foto Catalina Aguirre García
emplea fórmulas gramaticales y sintácticas condicionales. Ojalá pudiera ser libre, reitera el poeta. En el notable poema del que es extraído el título de la presente muestra de textos de Martínez, el poeta esboza la cartografía de referentes de sentido que construye para su convocatoria a la expansión: Si el viento que habita las estrellas Y el curso de los ríos Si el viento de esta noche Que despierta estremecidos a los árboles Y sacude el silencio turbio de la ciudad Si ese viento fuera mío Sería el pasajero del Mundo que Flota (Si el viento. PN)
Esta ligereza, esta movilidad, este albedrío se encarnan entonces en el viento, los ríos. En otros poemas, en las aves, los cabellos de las muchachas, la luz, las estrellas, la lluvia. El vuelo retorna una y otra vez como encarnación de la emancipación. ulrika 48 |
47
Sucede que hay días Que hay tardes en que uno No quisiera trabajar (…) Sucede que hay tardes En que uno quiere volar por la ventana En que uno quisiera ser como la música Que no pesa en el aire ni en los hombres.(…) (Esas tardes, esos paréntesis. DAV)
La contraparte, lo que dificulta la libertad y coarta el vuelo, en algunos momentos es la rutina, los esquemas de comportamiento adocenados que aprisionan. En el mismo poema: Tardes de esas paréntesis de esos En que duelen los horarios del oficio Y las teclas de la máquina Se clavan en el alma (Esas tardes, esos paréntesis. DAV)
En otras ocasiones lo que aparece como fin deseable es algo más interno, y tal vez de naturaleza metafísica, aunque esta palabra contraste con la insistencia de esta poesía en rehuir la elucubración racional: se trata de la posibilidad de conectar el yo con el entorno. De “salir de uno mismo” como diría Ortega y sentirse de algo más amplio que la mera conciencia. El objetivo aflora con la explicitación de la contraparte: el obstáculo para la plenitud de la existencia humana parece ser la introspección, la insistencia obsesiva en bucear en uno mismo. En el paisaje expresivo de Martínez esto se cristaliza en el meditar solitario, en la pesadilla. Si lo que anhela es diurno y luminoso, su contrario es nocturno, oscuro, tormentoso: Tendré que espantar Como casi todas las noches A los caballos salvajes que pastan Cerca de mi ventana (El trasnochador. DAV)
En uno de los poemas más conocidos de Guillermo Martínez en el que el poeta se duele del desasosiego de este exceso de yo, afirma, con imágenes destellantes y contundentes:
48
| ulrika 48
Como luna de piojos Como polvo y leche sucia Alrededor de mi cama Fueron algunas de mis noches Como caballos verdes Chapaleando espantados En la arena movediza (Como luna de piojos. DAV)
Como alternativa el poeta exhorta a dirigirse a las antípodas de la introspección dolorosa. En primer lugar, a la exaltación de lo elemental, de las vivencias sencillas y los personajes que las protagonizan. Sin pretensiones y con sabiduría. Yo le canto a María La lavandera La que lava la ropa Entre susurros elementales Y abalorios de humildad. Yo estaré siempre a su lado Porque amo sus sueños de agua Sus anillitos de alegría Su pequeño mundo de jabón Y la ternura Que riega En mis camisas. (Yo solo amo sus sueños de agua. DAV)
Reconocemos ese componente en la tesitura de su voz, amable, echando a mano diminutivos y palabras corrientes, expresando estados de alma con los actos más cotidianos y sencillos. En esta trayectoria, se involucran los objetos. Aquellos que hacen parte de la vida corriente, el polo opuesto de la angustia onírica y turbulenta: Escoba Amiga nuestra Te amamos porque eres humilde Y buena (Escoba. DAV)
Se ansía fundirse con la realidad natural, desprovista de intelecto:
Eso deseo: Como los gorriones quisiera Volverme hierba (Padezco de un sueño. PN)
Desde luego, el vehículo privilegiado para soltar amarras es la poesía misma. Una poesía con estas características de elementalidad y exaltación de la vitalidad: Así quisiera escribir mi poesía: desnudo Casi invisible: cantando Como un pájaro de luz sobre la muerte (Símbolo. DAV)
La sensualidad es otro antídoto para la tribulación y la zozobra. El cuerpo femenino, siempre aparece como una invitación. Incluso se recuerda para desear, fundido el cuerpo apetecido con elementos naturales que se concitan para contribuir a esta expansión de la sensibilidad del poeta. (…) Te recuerdo junto al caballo, junto a la estrella que descendía del árbol. Te recuerdo así: desnuda sobre las piedras del río. (Muchacha en el río. APR)
Una de las vetas más brillantes de la poesía de Guillermo Martínez es aquella en la cual converge esta búsqueda vitalista de transcendencia del yo, y el amor y la sensualidad en clave de referentes naturales telúricos, espejos de la pasión trascendente. Allí brilla el vigor verbal de este poeta, su maestría en construir imágenes deslumbrantes, que lo acercan a otros poetas que llegan a parajes similares transitando otros senderos. Y tu cabellera ilumina la noche como un faro En el espeso recuerdo de las noches del mar. Las palabras flotan esplendorosas Como en el principio del mundo Cuando todo necesitaba un nombre (Y ahora vienes tú. PN)
Incluso la evocación del pasado adquiere un carácter de proyección hacia el futuro. Lo que se recuerda son momentos de plenitud que se han perdido y a
lo que se convoca es a su recuperación para potenciar el presente: Una resurrección Pido ahora para poder vivir En estos días de muerte … Para volver a sentir de nuevo mis heridas El sol que quema al deseoso… Renacer, eso pido como cualquier Lázaro En estos días en que transito Solo en la sombra Como una piedra lanzada al vacío (Una resurrección. PN)
He dicho que la obra de Guillermo Martínez ha ido enriqueciéndose y visita otros parajes expresivos, explora diversos temas. A mi juicio no pierde el hilo que lo une a este venero del anhelo y, sobre todo, acumula en esos terrenos sus logros expresivos. Uno de estos campos en que Martínez tiene logros más significativos y característicos, es el de la exaltación de iluminaciones imaginativas y oníricas, en las que este poeta desarrolla una gran capacidad para construir imágenes impactantes: su verbo es poderoso, sobrecogedor: Aquel caballo De blancura robada al relámpago Aquel caballo fulminante De cola inmensa Para agitar el fuego Aquella criatura de belfos rosados En el vapor de la luna: Aquel caballo Su relincho solitario Su erizado galope hasta el alba. (Caballo blanco. TPV)
¿No se reconoce en esta imagen enceguecedora, y aparentemente aislada, de este caballo resplandeciente, la cristalización de la imaginación poética como pócima contra la trivialidad y el filisteismo? La oscura etapa por la que atraviesa nuestro país, con su lastre de muerte y de violencia, se abre paso en las preocupaciones de este poeta, como en la mayoría ulrika 48 |
49
de sus coetáneos, por lo demás. Guillermo Martínez captura la zozobra que esto exhala con herramientas vecinas a las que ha forjado a través de su exploración sobre los estragos de la introspección obsesiva y turbulenta. El resultado son poemas de gran peso expresivo y muy perturbadores. Veamos un ejemplo: Amanecían en las calles con la cara de espanto alterada por las moscas O bajaban al pueblo en lomo de mulas guindados como animales de sacrificio O flotaban en la hierba y el río con el treno inflamado bajo la luz de la luna: En aquel tiempo la violencia se paseaba con su tambor de medianoche por las aldeas (Los muertos. APR)
Vehículo paradójico esta poesía de Guillermo Martínez González, que nos confronta con el deseo, con el anhelo, con el ansia de un universo más amplio que nosotros mismos. Es difícil resistirla, porque sus armas son poderosas: sus palabras certeras no nos permiten acomodarnos. Nos empujan a salir de nuestros límites, a desplegar las alas de la imaginación. Tendríamos que agradecerle estas exigencias al poeta. A este poeta verdadero.
50
| ulrika 48
ESAS TARDES, ESOS PARÉNTESIS Sucede que hay días Que hay tardes en que uno No quisiera trabajar En que uno quisiera estar por ahí Fumándose un cigarrillo O bebiéndose un buen vino Mientras se acerca la noche. En que uno quisiera estar por ahí Hablando sobre las primeras novias Con un viejo amigo Mientras la lluvia cae sobre la ciudad Como una cortina blanca Como un coro de ángeles húmedos. Sucede que hay tardes En que uno quiere volar por la ventana En que uno quisiera ser como la música Que no pesa en el aire ni en los hombres En que uno está para soñar Para conversar con antiguos Días de la infancia. Sucede que hay días así Mañanas de esas en que uno amanece de vago Tardes de ésas paréntesis de ésos En que duelen los horarios del oficio Y las teclas de la máquina Se clavan en el alma. En que uno está totalmente Desligado del mundo Y no quiere hacer nada Y quisiera estar todo el tiempo Bailando sobre la lluvia.
6
POETAS
CATALANES Narcís Comadira
(Gerona, 1942) es escritor y pintor. Su obra poética hasta el año 2002 se reúne en el volumen Formes de l’ombra (Formas de la sombra). Poesía 1966-2002. Sus últimos libros de poemas son Llast (Lastre) (2007) y Lent (Lento) (2012). Dos de sus poemarios se han traducido al castellano: Enigma (1985) y En quarantena (1993), que obtuvo el Premio Ciudad de Barcelona, el Lletre d’Or y el premio de la Crítica. Ha escrito y estrenado textos para el teatro. También ha publicado prosa: Girona. Matèria i memòria (1989), un retrato de su ciudad natal (traducida al castellano). Fórmules magistrals (1997), sobre valores culturales de la gastronomía. Sense escut (Sin escudo) (1998), textos de tema cultural, L’ànima dels poetes (El alma de los poetes) (2002), Camins d’Itàlia i Dies de França (2005), Les paraules alades (Las palabras aladas) (2011), donde recoge ensayos sobre literatura y Marques de foc (Marcas de fuego) (2012), una autobiografía poética. Como traductor de poesía cabe subrayar su antología en dos volúmenes de poesía italiana y su versión completa de los Canti de Giacomo Leopardi (2004), que ha merecido importantes premios. Para el teatro ha traducido a De Filippo, Molière, Chejov, Pasolini, Pirandello, Vercors y Goldoni. Narcís Comadira estudió Filología en la Universidad de Barcelona y se licenció en Historia del Arte.
APAREIX, DE SOBTE, UN JOVE BELLÍSSIM, CAUSANT LA NATURAL TORBACIÓ EN ALGUNS ESPERITS EXCESSIVAMENT TÍMIDS I ANALISTES
APARECE, DE PRONTO, UN JOVEN BELLÍSIMO, CAUSANDO NATURAL TURBACIÓN EN ALGUNOS ESPÍRITUS EXCESIVAMENTE TÍMIDOS Y ANALISTAS
Com un déu que sorgeix, nova la pell entre aigües agitades, asserenes els ulls i altres tempestes alces, interiors, dintre la sang sorpresa de donar vida a un cos tan distint d’aquest teu que sembla ser el cos únic que es mou damunt la terra. Oh absurd coneixement! Sorgeix la pell, el límit exterior, la carn que tensa els moviments i envolta els ossos, els processos interns, assimilacions, secrecions exactes; i es fa la vida: l’ànima subtil, el misteri profund de la mirada. Llavors, per consolar-nos, pensem que l’acció i les obres ens basten.
Como un dios que aparece, nueva la piel, entre aguas agitadas, tranquilizas los ojos, también levantas otras tempestades, interiores, en la sangre sorprendida de darle vida a un cuerpo tan distinto del tuyo, como si fuera el único cuerpo que se mueve sobre la tierra. ¡Oh absurdo conocimiento! surge la piel, el límite exterior, la carne que tensa el movimiento y rodea los huesos, los procesos internos, asimilaciones, secreciones exactas; y aparece la vida: el alma sutil, el profundo misterio de la mirada. Como consuelo, entonces, pensamos que la acción y las obras nos bastan.
Però la sang, damunt de tota excusa, sense saber per què, vol la bellesa.
Pero la sangre, más allá de toda excusa, sin saber por qué, desea la belleza.
52
| ulrika 48
Narcís Comadira
DIES DE GOIG
DÍAS DE GOZO
Deixa que tot s’esborri I, a l’alba dels desficis (quan tot es fa visible i gràcils ens retornen els corriols del bosc, vora el riuet on les maduixes tempten la dent sagaç), coronats de xuclamel i pèsols d’olor i vidalbes, dansem, lliures del tot de nosaltres mateixos. Oblidats, som déus.
Deja que todo se borre, y al alba del desasosiego (cuando todo se hace visible y gráciles nos retornan los senderos del bosque, junto al riachuelo donde las fresas tientan el diente sagaz), coronados de madreselva y guisantes de olor, bailemos, totalmente libres de nosotros mismos. Olvidados, somos dioses.
NARCISOS
NARCISOS
Fràgils, efímers, sou la pura alegria, l’esclat de mesos soterrats, del créixer en confiança.
Frágiles sois, efímeros, sois la pura alegría, estallido de meses enterrados, de crecer en confianza.
Dos dies breus de llum, de perfum delicat, que es confonen amb la pròpia promesa.
Días breves de luz, de aroma delicado, confundido con la propia promesa.
¿Acceptaries tu un destí tan humil? No, tu vols més. El teu final serà també més sòrdid: tot cucs i podridura.
¿Aceptarías tú tan humilde destino? No, quieres más. También será más sórdido tu final: lleno de podredumbre y de gusanos.
ulrika 48 |
53
6
POETAS
CATALANES FRANCESC PARCERISAS
(Begues, Barcelona, 1944). Sus primeros libros se encuentran reunidos en el volumen Triomf del present (Triunfo del presente), obra poética 1965-1983, a los que siguieron otros como Focs d’octubre (Fuegos de octubre) (1992) o Natura morta amb nens (Naturaleza muerta con niños) (2000). Destacado miembro de la Generación del 70, ha ganado algunos de los más importantes premios literarios catalanes. Ha llevado a cabo un intensísimo trabajo como traductor del inglés, francés e italiano, tanto de narrativa (Pavese, Poe, Mansfield, Tolkien, Michaux…), ensayo (Rimbaud, Marcuse, Russell...) y poesía (Eliot, Pound, Tomlinson, Heaney...). Asimismo es autor de una antología de poesía inglesa y norteamericana (1985). Francesc Parcerisas se doctoró en Teoría de la Traducción. Fue lector de español en la universidad de Bristol y, hasta la actualidad, profesor de traducción de la Universidad Autónoma de Barcelona. Fue presidente de la Asociación de escritores en lengua catalana, director de la Institución de las letras catalanas y es representante catalán en el Ariane European Literary Transation Network y en el Conseil Europeen d’Associations de Traducteurs littéraires (CEATL).
54
A LA MANERA D’ANNE SEXTON
A LA MANERA DE ANNE SEXTON
El fons del pou és fosc i sense por perquè és finit. Com el fons del teu cos i del meu cos és segur i és lluminós perquè és finit. Però la pell que no ens podem arrencar és la de l’altre: un desert que són paraules. La meva primera imatge o els ulls que no arribo a copsar em són la sang dels límits. I la veu que em diu el nom és distància i és silenci. I les ungles que esgarrapen són el temps que separa tots aquests dies que el llapis va marcant: fa divuit dies que t’espero.
El fondo del pozo es negro y sin miedo porque es finito. Como el fondo de tu cuerpo y mi cuerpo es seguro y luminoso porque es finito. Pero la piel que no podemos arrancar es la del otro: un desierto que son palabras. Mi primera imagen o los ojos que no logro atrapar son en mí la sangre de los límites. Y la voz que me llama por mi nombre es distancia y silencio. Y las uñas que arañan son el tiempo que separa estos días que el lápiz va marcando: hace dieciocho días que te espero.
| ulrika 48
FRANCESC PARCERISAs
TESTES ROMANES
TESTAS ROMANAS
Heus-los aquí: el cèsar conqueridor de terres, el lictor amb el feix que el dignifica, el cònsol togat, el soldat sorrut, l’esclau africà. Tots dormen per igual –gèlids i un punt estantissossota aquest son distant i imprevisible amb què l’agulla del temps ens traspassa. I doncs, ¿per quin atzar ens meravella ara aquest marbre nitid, dur, cruel, i admirem, astorats, muts de respecte, aquests poderosos i salvatges destructors de temples? Tant ens és que cerquessin el bé o el mal, I ho sabem: les passions es glacen en el marbre. Les seves testes impàvides i immortals en la pedra són, tan sols, la patria naufragada.
Helos aquí: el césar conquistador de tierras, el lictor con el fasces que le dignifica, el cónsul togado, el áspero soldado, el esclavo africano. Todos duermen igual –gélidos y algo pasadosbajo este sueño distante e imprevisible con que la aguja del tiempo nos traspasa. Y entonces ¿por qué azar nos maravilla ahora este nítido mármol, duro, cruel, y admiramos, atónitos, mudos de respeto, a estos poderosos y salvajes destructores de templos? Qué más da que buscaran el bien o el mal, y lo sabemos: las pasiones se hielan en el mármol. Sus impávidas testas inmortales en la piedra son, tan sólo, la patria naufragada.
GOSSOS
PERROS
Mireu-los: són una colla de gossos rònecs acostumats a envair, a fonyar jardins. Freds, desvergonyits, res no els detura -ni aquest grup de poetes que malda, també, per donar sentit a la vergonya de la vida. Coixos, orbs, nafrats de paparres, encara ensumen amb llur fúria esmorteïda la gossa vella que habita aquest jardí. I això, que ens importuna, ens els acosta: animals impúdics, fidels, envilits, que, com nosaltres, assetgen, furients o defallits, la quimera de l’amor: un poder suprem que, anorreant-los, els pugui redimir.
Miradlos: son una jauría de perros famélicos acostumbrados a invadir, a escarbar jardines. Fríos, desvergonzados, nada les detiene -ni este grupo de poetas que se esfuerza, también, en dar sentido a la vergüenza de la vida. Cojos, ciegos, con llagas de garrapatas, todavía ventean con su furia amortecida la perra vieja que habita este jardín. Y esto, que nos molesta, también los acerca: animales, como nosotros, impúdicos, fieles, envilecidos, que asedian, furiosos o desfallecidos, la quimera del amor: un poder supremo que, aniquilándolos, les pueda redimir.
ulrika 48 |
55
6
POETAS
CATALANES Eduard Sanahuja
(Barcelona, 1953). A su primer libro, El gos del galiot (El perro del galeote) (1981), le seguirán Mirador (1983), Doble joc (Doble juego) (1987), En defensa pròpia” (1994), Compàs d’espera (2006) y “El llançador d’espases (El lanzador de espadas)” (2013). Ha ganado diversos premios literarios y ha traducido al catalán tres extensos poemas del poeta francés Blaise Cendrars, recogidos en un volumen titulado Prosa del transsiberià (1992). Eduard Sanahuja es profesor de Didáctica de la Lengua y la Literatura en la Universidad de Barcelona y cofundador del Aula de Poesía de Barcelona, asociación de la cual es vicepresidente.
56
[CARREGAT AMB L’ESCORÇA DEL RECORD...]
[CARGANDO LA CORTEZA DEL RECUERDO...]
carregat amb l’escorça del record l’home vençut fuig de la llum del dia el gos plorós flairant els rocs fa via i gasta els peus sagnosos sense nord
cargando la corteza del recuerdo huye el vencido de la luz del día lloroso oliendo piedras anda el perro y gasta sus sangrantes pies sin guía
ha estat l’esclavitud la gelosia la foscor dels forats la mala sort el galiot marçada buscant mort a un sot profund els ossos hi confia
fueron la esclavitud la mala suerte lo oscuro de las cuevas y los celos el galeote mistral que busca muerte a una fosa profunda da sus huesos
Sentiu el ca com crida culivat damunt del cos de l’única certesa? foll sol d’amic queixala el vol del fat
¿Oís al perro gritar acurrucado sobre el cuerpo de la única certeza? huérfano muerde el vuelo del mal hado
la nit el vals l’amor de la princesa: cada queixal defensa al·lucinat el dret universal de la tristesa
la noche el vals el amor de la princesa: cada colmillo defiende alucinado el derecho universal de la tristeza.
| ulrika 48
Eduard Sanahuja
TROSSOS VII
TROZOS VII
No tinguis temptacions de jugador. Que es reparteixin ells totes les cartes i totes les victòries importants. No vulguis competir, perquè perdràs. Pensa que no n’hi a prou de ser cavall per triomfar a la cursa dels cavalls. Al final de la cursa, de la nostra, només hi haurà un balanç, dues preguntes: qui has estimat, qui t’ha estimat a tu.
No tengas tentación de jugador. Que se repartan ellos la baraja y todas las victorias importantes. No quieras competir: vas a perder. Piensa que no es bastante ser caballo para ganar carreras de caballos. Al llegar al final de la carrera, habrá sólo un balance, dos preguntas: quién te ha querido, a quien quisiste tú.
EPITAFI DE L’HOME IMPORTANT
EPITAFIO DEL HOMBRE IMPORTANTE
Sempre vaig destacar en totes les facetes. Vaig ésser un nen modèlic i un perfecte estudiant. Vaig esposar una dona bellíssima i discreta i he estat un pare recte i un marit generós. No tinc queixa dels fills ni de les meves filles. Vaig treballar per ells, i fins i tot per elles. El meu darrer triomf és aquest panteó. No em mireu com un mort que us hagi de fer pena. Sóc un mort important. Sóc el més mort de tots.
Yo siempre destaqué en todas las facetas. De niño fui un ejemplo y un perfecto estudiante. Desposé a una mujer bellísima y discreta y he sido un padre recto y un pródigo marido. No tengo queja alguna de mis hijos e hijas. Para ellos trabajé, incluso para ellas. Mi último triunfo es este panteón. No debéis ver en mí a un muerto que da pena. Soy un muerto importante. El más muerto de todos.
ulrika 48 |
57
6
POETAS
CATALANES Jaume Pont
(LLeida, 1947). Sus primeros cinco libros de poemas se recogen en Raó d’atzar (Razón de azar). Poesía 1974-1989. Luego vendrían Vol de cendres (Vuelo de cenizas) (1996), Llibre de la Frontera (2000) y Enlloc (En parte alguna) (2006). Presente en las principales antologías de poesía catalana contemporánea, ha ganado diversos premios y sus poemas han sido traducidos a una docena de lenguas. Asimismo es antologador y ha publicado diversos ensayos literarios. Jaume Pont ha sido profesor de las universidades de Barcelona, Poitiers, Instituto Universitario Orientale de Napoli, Illinois, Mar del Plata y Littoral-Côte d’Opale. Actualmente es catedrático de Literatura Española en la Universidad de LLeida.
58
POSSEÏT
POSEÍDO
I tu no fas altra cosa que fugir, tocar el cim, fugir cap a l’erm domini on tots els daus estan marcats, mentre la meva carn ignora les contrades d’aquesta nova terra a l’esguard de la nàusea dels vents. Com dir-te que només et sagna la ferida quan els meus ulls no hi veuen. Com fer-te entendre, dolç hoste de la nit, l’aspra cremor de somnis i paraules encallades al sol renegrit de la meva llengua, els verds estius ara glaçats als llucs de les pomeres. Sobre la teva boca, la meva boca. Tenen els teus llavis l’estrany fulgor de les altures.
Y tú no haces más que huir, tocar la cima, huir hacia el yermo dominio donde todos los dados están marcados, mientras mi carne ignora las comarcas de esta nueva tierra al lado de la náusea de los vientos. Cómo decirte que sólo te sangra la herida cuando mis ojos no ven. Cómo hacerte entender, dulce huésped de la noche, el áspero ardor de sueños y palabras encalladas en el sol ennegrecido de mi lengua, los verdes veranos ahora helados en los brotes del manzano. Sobre tu boca, mi boca. Tienen tus labios el extraño fulgor de las alturas.
| ulrika 48
Jaume Pont
LATITUD DEL FUNÀMBUL
LATITUD DEL FUNÁMBULO
Més a prop de l’amor
Más cerca del amor
indivisa l’òrbita que clou el foc tubular de la carn
indivisa la órbita que apaga el fuego tubular de la carne
mugró de la por i l’abís
pezón del miedo y del abismo
Més a prop de tu la latitud del funàmbul
Más cerca de ti la latitud del funámbulo
[SOBRE AQUELLA PEDRA ERMA QUE NO ÉS PEDRA...]
[SOBRE ESA YERMA PIEDRA QUE NO ES PIEDRA...]
Sobre aquella pedra erma que no és pedra aixecaré demà la meva casa.
Sobre esa yerma piedra que no es piedra mañana construiré mi casa.
No hi ha bri d’herba que ella no conegui ni anella d’aigua on no cremi la perla del seu collar.
No existe hierba que ella no conozca, ni anilla de agua en que no arda la piedra de su collar.
El fosc silenci dels ocells i els peixos ens ensenya ullcluc com fer-la nostra.
El oscuro silencio de aves y de peces a ciegas nos enseña a hacerla nuestra.
Sovint pren l’aparença d’una forma menyspreable.
Suele tener apariencia de una forma despreciable.
D’ella brolla la font que no mor mai.
De ella brota la fuente que no muere jamás.
ulrika 48 |
59
6
POETAS
CATALANES Margarita Ballester
(Barcelona, 1942) publicó su primer libro de poesía a los 47 años, L’infant i la mort (El niño y la muerte) (1989), premio Rosa Leveroni. A éste le siguieron dos más Els ulls (Los ojos) (1995) y Entre dues espases (Entre dos espadas) (2004), que obtuvo el prestigioso premio Josep Maria LlompartCavall Verd de poesía y fue traducido al castellano el año 2011. Ha escrito un libro de narrativa juvenil, L’escarabat daurat (El escarabajo dorado) (1993). Algunos de sus poemas han sido traducidos en diversas antologías al francés, inglés, italiano y ruso. Margarita Ballester se licenció en Filosofía y Letras antes de estudiar historia en París. Hace veinte años que vive en la isla de Menorca donde ejerció como profesora de historia en la enseñanza secundaria. Actualmente está ya jubilada.
60
LA DIMENSIÓ VEGETAL DEL TEMPS
LA DIMENSIÓN VEGETAL DEL TIEMPO
La mort s’atura sobre meu; no m’esparvera, cau més aviat dins l’àmbit de la nosa.
La muerte se detiene sobre mí; no me horroriza, acaso cae en el ámbito del estorbo.
I s’escola la vida sobrant de moltes hores, marge avall, i creix la mort als arbres que sobreviuen a casa pròpia. Ressona, en el meu cap, la dimensió vegetal del temps que no viuré ni escriuran per nosaltres: el temps de les tortugues i els bibliòfils.
Y se escurre la vida sobrante de muchas horas, orilla abajo, y crece la muerte en los árboles que sobreviven en la pròpia casa. Resuena, en mi cabeza, la dimensión vegetal del tiempo que no viviré ni van a escribir para nosotros: el tiempo de las tortugas y los bibliófilos
| ulrika 48
Margarita Ballester
TOMBEAU (II)
TOMBEAU (II)
T’esperava com espera la nit en una plaça, para meu, petit… Abocat a la terra, et sento orfe, i jo amb tu –paraula per paraulaagafada de la teva mà. Ella ens espera.
Te esperaba como espera la noche en una plaza, padre mío, pequeño… Arrojado en la tierra, te siento huérfano, y yo contigo –palabra por palabraagarrada a tu mano. Ella nos espera
L’U D’ABRIL DE 1999. KOSSOVO
EL UNO DE ABRIL DE 1999. KOSSOVO
Ara que torna abril i cada primavera deixa per fer demà alguna cosa torna, per demà, el calendari de la guerra.
Ahora que vuelve abril y cada primavera deja para mañana cualquier cosa vuelve, para mañana, el calendario de la guerra.
M’han dit que és temps de fer pujar les síndries amb l’aigua de les gotes de rosada, on menjaran els fruits els que ara fugen?
Me han dicho que ya es tiempo de que crezcan las sandías con agua de las gotas de rocío, ¿dónde comerán los frutos aquellos que ahora huyen?
ÀFRICA
ÁFRICA
No sé si la mel més dolça em pren els dits cap a la boca o l’aspre de la vida em desbarata el nom en els límits del món: aigua de sucre i esponges de calvari.
No sé si la miel más dulce me lleva los dedos a la boca o la aspereza de la vida me desbarata el nombre en los límites del mundo: agua de azúcar y esponja de calvario.
ulrika 48 |
61
6
POETAS
CATALANES Maria Mercè Marçal
Nació en Ivars d’Urgell, Lleida, 1952 y murió cuarenta y seis años después. Su obra poética hasta el año 1997, uno antes de su muerte, se recoge en el volumen LLengua abolida (Lengua abolida). Póstumamente aparecería Raó del cos (Razón del cuerpo). Su poesía (así como su militancia cívica a favor de las mujeres, las clases oprimidas y los pueblos sin estado) le ha llevado a ser referente de las generaciones posteriores y a ser considerada una de las mejores voces de la poesía catalana de todos los tiempos. Asimismo fue traductora, especialmente del francés al catalán, y versionó poemas de Anna Akhmátova y de Marina Tsvietáyeva. Maria Mercè Marçal trabajó como profesora de bachillerato de lengua y literatura catalanas. Fue crítica literaria y una de las fundadoras de la editorial Llibres del Mall. Colaboradora en diferentes revistas y periódicos, fue una activa impulsora de múltiples actividades culturales y literarias para potenciar la literatura escrita por mujeres. Asimismo fue la responsable de la sección sobre feminismo de la Universitat de Prada (1980-1985) y cofundadora del Comité d’Escriptors del Centre Català del PEN Club. Publicó también narrativa breve, infantil y novela: La passió segons Renée Vivien (La pasión según Renée Vivien) galardonada con múltiples premios literarios. Esta novela, así como el libro de poemas Desglaç (Deshielo), están traducidos al castellano.
DIVISA
DIVISA
A l’atzar agraeixo tres dons: haver nascut dona, de clase baixa i nació oprimida.
Al azar agradezco tres dones: haber nacido mujer, de clase baja y nación oprimida.
I el tèrbol atzur de ser tres voltes rebel.
Y el turbio azul de ser por tres veces rebelde.
[DRAP DE LA POLS…]
[TRAPO DEL POLVO…]
Drap de la pols, escombra, espolsadors, plomall, raspall, fregall d’espart, camussa, sabó de tall, baieta, lleixiu, sorra i sabó en pols, blauet, netol, galleda.
Trapo del polvo, escoba, sacudidor, gamuza, estropajo, cepillo y plumero, bayeta, escamas de jabón y lejía y arena, jabón en polvo, cubo, azulete y netol.
Cossi, cubell, i picamatalassos, esponja, pala de plegar escombraries, gibrell i cendra, salfumant, capçanes.
Paleta de las mantas, salfumán, barreño, pozal, paño, esponja, pala, orinal y ceniza de lavar.
Surt el guerrer vers el camp de batalla.
Sale el guerrero al campo de batalla.
62
| ulrika 48
Maria Mercè Marçal
[NI QUE ET VEGI LA SANG…]
[NI AÚN VIÉNDOTE LA SANGRE…]
Ni que et vegi la sang a les mans no sé fer-te culpable.
Ni aún viéndote la sangre en las manos puedo hacerte culpable.
Sé que era l’assassí disfressat de tu.
Sé que era el asesino disfrazado de ti.
I és ell també que, ara, em vol convèncer i prendre’m la disfressa de mi i apunyalar-te.
Y es también el que, ahora, me quiere convencer y robarme el disfraz de mí y apuñalarte.
[AQUELLA PART DE MI QUE ADORAVA A UN FEIXISTA…]
[ESA PARTE DE MÍ QUE ADORABA A UN FASCISTA…] Toda mujer adora a un fascista... Sylvia Plath
Aquella part de mi que adorava un feixista -o l’adora, qui ho sap! jeu amb tu, jau amb tu.
Esa parte de mí que adoraba a un fascista -¡o lo adora, quién sabe!contigo se acuesta y yace contigo.
No l’espanta la tomba. Cridada des de sempre al domini més fosc, mor amb tu, i viu de tu.
No le asusta la tumba. Llamada desde siempre al oscuro dominio, muere contigo, y vive de ti.
Ofrena tremolosa, no sap sinó seguir-te i arrapar-se al teu mal com al port més segur.
Ofrenda temblorosa, sólo sabe seguirte y agarrarse a tu mal como a un puerto seguro.
Medusa desossada, allò que de mi resta malda per completar-se sense tu, lluny de tu.
Medusa deshuesada, lo que resta de mí se esfuerza en completarse sin ti, lejos de ti.
El bisturí vacil·la. Qui em viu a l’altra banda? I com podré pensar-te com si jo no fos tu?
El bisturí vacila. ¿Quién me vive en la otra parte? Y cómo voy a pensarte como si yo no fueras tú.
ulrika 48 |
63