4 minute read

ECOLOGÍA INTEGRAL

A Favor De La Vida

Mauricio Diazgranados, egresado de la Facultad de Ciencias y nuevo director científico del Jardín Botánico de Nueva York, estará a cargo de un equipo de 100 científicos de todo el mundo, adelantando investigaciones de impacto global a favor del medio ambiente.

los recursos naturales, la predominancia del mundo financiero sobre la economía real, las luchas por el poder político y la exacerbación del individualismo en un mundo cada vez más globalizado, pero al mismo tiempo desigual, motivaron a Francisco a escribir este texto que convoca a la humanidad a la reflexión y a la acción individual y colectiva para cuidar la vida en el planeta.

¿Comulga con las preocupaciones del papa Francisco?

Mauricio Diazgranados, biólogo javeriano, fue recientemente nombrado director científico y decano del Centro Internacional de Ciencias de las Plantas en el Jardín Botánico de Nueva York. Al ser este el jardín botánico más completo del mundo, un centro de investigación de punta, de educación de la comunidad y promotor de la cultura y la ética del cuidado, la designación ameritaba una conversación con Diazgranados en el marco de la encíclica papal Laudato Si’.

Publicada en 2015 y vigente hasta el momento por su contenido reflexivo, abarcador y pertinente, Laudato Si’ se ha convertido en libro blanco para la humanidad en el marco de los esfuerzos en contra del deterioro ambiental. El consumismo desenfrenado, la cultura del descarte, la sobreexplotación de

Mauricio Diazgranados: Totalmente. Debo agregar que otra problemática es la polución en todas sus formas. La contaminación es uno de los mayores problemas actuales y un pilar del deterioro ambiental. Otro asunto crítico es la expansión demográfica. Los recursos del planeta son limitados y si nos seguimos expandiendo de la misma manera los estaríamos agotando. Debemos lograr un equilibrio para el uso eficiente y responsable de los recursos y la demografía.

Desde su actividad profesional, ¿en qué áreas ha encontrado mayores afectaciones por el cambio climático?

M.D: En los ecosistemas marinos. Hay arrecifes coralinos en peligro de desaparecer por blanqueamiento y hay playas que también están en riesgo, todo a causa del calentamiento. No podemos olvidar que, junto con la selva amazónica, los arrecifes de coral son fun- damentales para el mantenimiento de las especies y, por ende, de la vida en el planeta. Otro frente afectado es el de los páramos. En Colombia hemos visto sequía de cuerpos de agua por eutrofización, procedente de actividades humanas. Esto genera desequilibrios ecosistémicos visibles en lagunas secas, con su fondo resquebrajado o en épocas de lluvia y de sequía más intensas. A esto se suma el desequilibrio en la periodicidad de floración de las plantas, que puede ser más temprana. Si hay floración a destiempo también hay un desacoplamiento de las interacciones de las especies. Piense en los polinizadores que en determinada época ya no encuentran flores que se han marchitado. Se afectan, entonces, insectos y otras plantas. Finalmente, debo decir que me preocupan los frailejones en Colombia. Varias especies están en riesgo por polillas, escarabajos y hongos que antes no tenían presencia en el entorno y que ahora las afectan. Frailejones de dos o tres siglos de vida están muriendo rápidamente, algo inédito. La evidencia no es concluyente, pero indica que esta presencia de especies puede deberse al calentamiento global.

¿El ritmo de vida de la humanidad afecta el ritmo de adaptación de la naturaleza?

M.D: Los cambios climáticos por origen antrópico son de muy alta velocidad y no permiten que las otras especies se adapten a tiempo.

¿Cuáles son los aportes de los jardines botánicos a la crisis ecológica actual?

M.D: Los jardines botánicos están comprometidos con la conservación, la recreación, la educación y la investigación. Esto último es clave, pues son centros de generación de conocimiento científico a favor de la gestión responsable de los ambientes. Los jardines pueden, entonces, ser generadores de política pública y son fundamentales para liderar la transformación de las ciudades del futuro.

En la encíclica, el Papa se refiere a san Francisco de Asís, quien “pedía que en el convento se dejara una parte del huerto sin cultivar, para que crecieran las hierbas silvestres, de manera que quienes lo admiraran pudieran elevar su pensamiento a Dios, autor de tanta belleza”. Me pregunto si en los jardines botánicos hay espacio para ese azar.

M.D: Por supuesto. Esa es una práctica frecuente para mantener poblaciones naturales de plantas, insectos, aves, etc. En el Jardín Botánico de Bogotá, por ejemplo, hay un pequeño bosque nativo detrás de las instalaciones, que protege a especies naturales de la zona. Creo que lo que dice el Papa lo podemos implementar en nuestros propios jardines hogareños para construir un tejido verde.

En su configuración, los jardines botánicos también pueden responder a un sentido estético. ¿Qué de bello y de sublime encuentra usted en ellos?

M.D: Hay un misterio inexplicable cuando nos encontramos con la naturaleza y apreciamos otras especies con las que compartimos nuestra existencia. La misma fascinación que se siente al adentrarse en un bosque o una selva se puede sentir en un jardín botánico. Estos jardines son símbolos de libertad, de aire puro y de vida en toda su expresión.

Además de biología, usted también estudió bioética. ¿Qué le aportó esta última para su vida y el desarrollo de su trabajo?

M.D: Herramientas para tomar decisiones con responsabilidad. Todos los días nos enfrentamos a problemas éti- cos, pues nuestras decisiones, por pequeñas, siempre van a afectar a otros. La forma en que tomo decisiones me la dio la bioética. Con ella he confirmado mi compromiso de respeto a todas las formas de vida. Por eso soy vegetariano, me muevo en bicicleta y tomo el transporte público. También comprendí la importancia de entender los problemas a fondo antes de opinar y tomar decisiones. No se puede pensar en soluciones generalizables porque cada problema tiene un contexto específico.

Finalmente, ¿ha sido testigo de acciones masivas y decididas por el cuidado del planeta?

Testigo y actor. En mi cargo anterior en el Jardín Botánico de Bogotá lideré procesos de restauración ecológica en áreas verdes del distrito. Durante mi gestión plantamos cerca de 150.000 árboles, incluyendo 30.000 en la Reserva Forestal Thomas van der Hammen. Fueron plantados por familiares de víctimas de masacres en Colombia, en el marco del proceso de perdón y justicia. Fueron reforestaciones masivas con la función de restaurar ambientes, así como restaurar el corazón de las personas * Realizador radial de Javeriana Estéreo

Los jardines botánicos están comprometidos con la conservación, la recreación, la educación y la investigación.

This article is from: