Fichas de Cine - Neon Genesis Evangelion

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Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4

Los océanos de la tierra se tornan rojos e inhabitables para la vida como consecuencia del llamado “Segundo Impacto”. La humanidad entra en pánico e inicia una guerra nuclear. Cuando se restablece la calma, atraviesa una crisis global a niveles insospechados.

La antigua ciudad de Tokio al igual que otras grandes metrópolis se encuentra parcialmente sumergidas bajo las aguas, consecuencia del derretimiento de los polos glaciares. En la serie original las aguas permanecen azules y su panorama es menos apocalíptico.

La ciudad moderna y su esquema para la vida humana queda fragmentada ante su falta de flexibilidad y capacidad de respuesta ante el desastre. Estática, permanece desolada bajo las aguas como un recordatorio de una vida mucho más fácil y despreocupada.

Los sobrevivientes del desastre crean y se reúnen en pequeñas y efímeras comunidades flotantes las cuales funcionan como un coral humano. Alrededor de enormes buques de ayuda humanitaria, forman racimos en los cuales recuperar su modo de vida anterior.

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“Neon Genesis Evangelion”, nuestro tema de conversación, exploran la simbiosis entre hombre y máquina. La primera vuelve difusa la línea entre humanidad y robótica, siendo indistinguible el tejido orgánico del artificial; mientras que la segunda plantea una relación menos drástica pero igual de estrecha, donde ciudad, máquina y hombre funcionan dentro de un mismo sistema con el único propósito de sobrevivir. “Evangelion” como serie, desarrolla no solo la interacción hombre-máquina por medio de sus estilizados y llamativos “robots” gigantes, sino también un contexto complejo, donde una sociedad futurista habita dentro de un gran complejo militar disfrazado de ciudad. Dicha presencia artificial no solo modifica el modo en que sus habitantes habitan, sino que también altera su ideología. La humanidad vive por y para la máquina, siendo espectadores pasivos de una lucha interminable cuyo propósito desconocen. La ciudad se convierte en una máquina para habitar, y que como un verdadero ente viviente, piensa, reacciona y se transforma.

riente y occidente mantienen una postura contraria respecto a la tecnología. Japón, gracias a una larga tradición “shintoista”, atribuye un espíritu viviente para todos los objetos del mundo, incluidos los creados de manera artificial por el hombre. En cambio, la religión judeocristiana, piensa que únicamente los seres humanos son poseedores de un espíritu o alma y por tanto, incompatibles con el resto de seres de la creación. Para los japoneses la tecnología no es más que una extensión de la naturaleza humana. El dilema de hombre contra la maquina no existe, por lo que historias donde la humanidad se conecta o fusiona directamente con la tecnología no resulta para nada descabellado, todo lo contrario, es entendido como un paso lógico y plausible en la cadena evolutiva. Gracias a este enfoque oriente ha podido explorar visiones del futuro que dentro de nuestro lado del mundo resultan impensables. Obras como “Ghost in the Shell” o


Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4

Tokyo-3 fue proyectada para ser la capital del nuevo Japón y reemplazar al asentamiento de Tokyo-2 en Nagano. Se encuentra fortificada tanto por estructuras de origen militar como por un entorno montañoso y acceso al mar de la actual ciudad de Hakone.

De imagen futurista comparte la fascinación por crear una utopía brillante y cubierta de rascacielos dentro de un entorno natural inmaculado, pero debido a su carácter de combate las fachadas son ciegas, con poco apego a valores estéticos sobre los funcionales.

De blancos rascacielos, la ciudad está dispuesta sobre una doble malla geométrica, cuadrada y octagonal, la cual le permite organizar y maximizar el espacio disponible, pero a la vez convertirse en un laberinto complejo y cambiante para quienes se atrevan a atacarla.

En Tokyo-3 conviven dos tipos de ciudades, una histórica, de estilo tradicional, pasiva y estática, donde las personas habitan; y la futurista, de hormigón armado y placas de acero, activa y flexible, donde las armas se albergan y la gente se refugia en caso de ataque,

La Historia de una Ciudad Viviente

Las ciudades fueron concebidas entonces como un organismo que se crea a sí mismo, en la cual repuestos y ampliaciones podían ser creados con gran facilidad y de manera conectada. Esto propicio la tendencia entre los pensadores de la época en el concepto de megaestructuras, construcciones de tamaños monumentales en las cuales las piezas que las componen son tan grandes, que partes enteras de la ciudad pueden ser reemplazadas sin mucho problema ante algún desastre o ataque. El movimiento metabolista piensa que la tecnología es un símbolo de la vitalidad humana. La arquitectura debe ser móvil, flexible, construida de células pequeñas como las propias de un organismo viviente. En lugar de tener una sola construcción colosal, los habitantes viven dentro de partes dinámicas las cuales cumplen una función determinada para la salud del resto. La ciudad es un ente que se regenera de manera cíclica, lo cual obedece a la creencia ancestral de renovación de la sociedad japonesa.

Dentro de la tradición del manga y el anime japonés podemos encontrarnos con una larga tendencia de representar escenarios utópicos y de una arquitectura futurista, donde gigantescos robots son casi siempre piloteados por adolecentes que se debaten entre la vida y la muerte. El llamado género “mecha”, de la abreviatura del término inglés “mechanical”, desde los años 80´s ha basado grandemente su arquitectura en la inventada por el movimiento metabolista de la década de los 60´s, de parte de figuras clave como Arata Isozaki o Kengo Tange. Como movimiento, el metabolismo surgió como una respuesta a la devastación dejada en el país producto de la Segunda Guerra Mundial, además de una posterior época de crecimiento acelerado y cambio continuo, donde surgió la necesidad de que las estructuras pudieran ser creadas para ayudar al desarrollo de la sociedad con antelación.


Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4

La principal característica de Tokyo-3 es su capacidad para resistir cualquier tipo de ataque y convertirse en un bunker subterráneo. Con gran facilidad sus rascacielos se hunden sobre el nivel del suelo y pasada la catástrofe emergen a la superficie intactos y a salvo.

Tokyo-3 es una ciudad metabólica, concebida como un organismo que se crea, modifica y sustituye a sí mismo. Es una mega estructura que a diferencia de las ideas occidentales de un territorio llano y virgen, convive con las viejas construcciones a su alrededor.

Para satisfacer una gran demanda energética, la ciudad genera energía eléctrica mediante torres solares de gran altura, las cuales giran sobre su propio eje durante el transcurso del día, así como de rascacielos cuyas fachadas están cubiertas de paneles solares.

Pese al su aparente resplandor y prosperidad, la ciudad también posee sus rincones oscuros en las afueras de la ciudad, donde sus habitantes buscan distracción y desahogo de los constantes ataques que interrumpen el desarrollo de sus vidas diarias.

Para occidente, la arquitectura se considera un tema demasiado serio, un hecho demasiado permanente y cuya alteración no entra a discusión. Para nosotros las utopías siempre son retratadas en un terreno llano y virgen, un nuevo comienzo alejado y desvinculado del resto. Pero los metabolistas aceptan a las viejas construcciones a su alrededor, construyendo por encima o por debajo de ellas, con estructuras que se adaptan al estilo arquitectónico y modo de vida existente. “Neon Genesis Evangelion” retrata a la perfección esta visión de una ciudad metabolica. Su llamada Tokyo-3 está planificada a modo de una fortaleza y bunker militar, siendo capaz de defenderse a sí misma y resistir cualquier tipo de ataque. Con gran facilidad sus rascacielos descienden bajo el suelo, sobreviviendo a la devastación apocalíptica, o sirviendo como plataformas de lanzamiento, escudos o depósitos de armas para los gigantes seres biomecánicos que la defienden.

Debido a su contexto nipón, uno de los países más densamente poblados, no es de extrañar que la ciudad y las estructuras retratadas posean un aspecto laberíntico. Tokyo-3 está planteada desde una doble malla geométrica, que por un lado le permite organizarse por bloques ortogonales de fácil comprensión, pero por otro una red octagonal que le hace confusa ante los invasores dentro de ella. Sumado a esto, las personas son representadas como seres diminutos dentro de escalas monumentales, frágiles e insignificantes. Entendida como un ente vivo, hay muchos aspectos que desdibujan la línea entre la biológica y la tecnología en “Evangelion”. Uno de los más notorios son los seres robóticos que los humanos utilizan como sus armas de defensa. Siendo una combinación entre seres vivos y maquinas, se conectan a la propia ciudad para propiciar su propio movimiento. Se alimentan de ella por medio de largos y gruesos cables que sin ningún reparo llaman cordones umbilicales. La ciudad es tanto su progenitora como la barrera que los contiene.


Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4

La escala de la ciudad y de sus elementos no está diseñada bajo la pequeña escala humana, sino la monumental de los “ángeles” y “evangelios” que se enfrentan en ella. La ciudad se convierte en un campo de juego de ajedrez de grandes dimensiones.

El aspecto militar de Tokyo-3 establece una relación simbionte con la vida urbana y el entorno natural, al grado en que su separación resulta difusa. La ciudad funciona como un verdadero ente viviente compuesto por piel, estructura y espacio interior (núcleo).

Las partes que componen a la ciudad además de intercambiables poseen una doble utilidad. Funcionan tanto un escudo protector y consciente de sus propios usuarios, como un medio que los contiene y toma decisiones sobre su existencia sin su consentimiento.

El “Segundo Impacto” convirtió al agua azul y potable en un recurso muy escaso. Grandes santuarios artificiales albergan el resto de la fauna y flora marina en un arca de Noé moderna, un esfuerzo para reparar el daño que la propia humanidad se creó a sí misma.

En la periferia de la ciudad, extensos bloques habitacionales fueron construidos para albergar un gran número de población migrante de todo el país, pero rápidamente degeneraron por su uniformidad y aislamiento, convirtiéndose en una zona deshabitada y fantasma.


Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4

Debajo de Tokyo-3 se encuentra el Geofrente, una cavidad natural que en forma de huevo actúa como un bunker. En su parte más alta los rascacielos cuelgan sujetos a gruesas capas de acero, mientras que debajo se encuentran las instalaciones militares de NERV.

El “Dogma Central” es el cuartel general de NERV, construido sobre la imagen de dos pirámides interceptadas. Al igual que la trama, está cargada de simbolismos, como la dualidad, la representación de un nuevo imperio futurista y la búsqueda de la inmortalidad egipcia.

El interior del Geofrente, cuando fue descubierto era una tierra inhóspita y estéril. Gracias a la mano del hombre se convirtió en un paraíso, con vegetación y un lago artificial, un oasis de la calamidad del mundo exterior y último bastión de la humanidad.

El interior de NERV es un complejo laberíntico de muchos niveles y de gran extensión. Funcionando como el mecanismo complejo de un reloj, está dominado por la presencia de elevadores y cintas de transporte ante la limitante de sus usuarios de recorrer a pie.

El centro de mando de NERV es una gran sala que diseñada como una plataforma de combate industrial, dividida en niveles y que mira hacia un enorme sistema holográfico, un “Gran Hermano” futurista que puede ver todos los rincones de su territorio.

En la parte más profunda del Geofrente, dos kilómetros por debajo del cuartel general, se encuentra el “Dogma Terminal”. Objetivo de los “ángeles” es un sitio de alto nivel secreto, lleno de secretos y cuya apariencia no corresponde a ningún ambiente terrestre.


Neon Genesis Evangelion / Especial de Series No.4 Debido a la supremacía de la arquitectura sobre las vidas humanas, es muy común encontrar dentro de las visiones metabólicas que las estructuras simbolicen el control y la opresión. Dentro, sus personajes son habitantes que aceptan el fatalismo de su situación o que constantemente se encuentran en una batalla contra su entorno. Son futuros que por igual resultan emocionantes y amenazantes. En “Evangelion” podemos encontrar algo de esto. Los propios pilotos, estrellas de la trama, aunque cobijados por la ciudad también son controlados por ella y por su sociedad tecnificada, la cual dicta lo que pueden o no pueden hacer. Cada vez que se arrojan a la batalla están a merced de la máquina, mas halla de que posean control sobre ellas. Viven dentro de un ambiente protector y consciente de sus usuarios, que en cada situación de emergencia los refugia y aleja del peligro. Pero a cambio ejerce un enorme dominio y alienación sobre ellos, dictando las normas de convivencia, disponiendo de sus hogares y espacios de trabajo como mejor le convenga, e interrumpiendo el ritmo de su vida sin previo aviso o compensación alguna. Si bien los objetivos principales de los metabolistas estaban enfocados hacia el desarrollo del individuo y sus libertades sociales, la arquitectura que planeaban también podía convertirse en una herramienta para su dominación capaz de volver la vida urbana en una experiencia fría e impersonal. Al convertirse la ciudad en una mega estructura, su funcionamiento recae generalmente sobre una sola entidad. En “Evangelion” la organización es asumida por la organización militar “NERV”, que en repetidas ocasiones se desvincula de la influencia del gobierno y actúa con gran independencia dentro de su territorio. “NERV” continuamente cruza la línea delgada entre una figura amigable y protectora, y una autoritaria enfocada en sus propios intereses oscuros. Su existencia como centro nervioso de la ciudad va en contra de cualquier sistema democrático y del libre comercio, ya que quien controla a las estructuras también controla a las personas que viven dentro de ellas. La sociedad dentro de “Evangelion” al igual que la mentalidad de los metabolistas, deposita una tremenda fe en la tecnología y en la arquitectura para resguardar a la humanidad del peligro. Pero esta fe también puede desembocar en una fuerte relación de codependencia donde el individuo se rinde ante la estructura y en última instancia se produce detrimento irreversible de la sociedad. Ra87

Luego de que el hombre fue expulsado del Edén, creó su propio paraíso, un lugar para satisfacer sus placeres terrenales. La ciudad...un lugar para protegerse, donde se puede huir, para olvidar que es débil físicamente.

Sobre el Estudio de Animación Gainax es un renombrado estudio de animación japonés, conocido por sus impresionantes efectos visuales, historias de gran enganche, tramas enrevesadas y por quedarse constantemente sin presupuesto antes de terminar la producción de sus animaciones. Fue fundada a principios de 1980 con el nombre de “Daicon Film” por estudiantes universitarios de Bellas Artes que compartían amistad y pasatiempos entre sí, tales como series y películas de ciencia ficción. El papel de líder recaería de manera informal sobre Hideaki Anno, quien por mucho tiempo actuaría como la mente creativa y director de los proyectos. Sus primeros proyectos fueron cortos de animación creados para la “Convención Nacional de Ciencia Ficción” en Japón, los cuales eran ambiciosos pero de baja calidad. En 1985 el estudio adoptaría el termino Gainax como su nombre oficial, y dos años más tarde realizarían su primer largometraje “Royal Space Force”, el cual no tendría la repercusión esperada y les haría mirar hacia el campo televisivo. Ahí producirían “Fushigi no Umi no Nadia” en 1989, reconocida por el público pero que financieramente era otro fracaso. Sobreviviendo de pequeñas animaciones para formato casero, Gainax se mantuvo en silencio hasta 1995, gestando las ideas para “Neon Genesis Evangelion” con la cual el mundo se rendiría a sus pies.


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