19 minute read
Esponjas y vinagre, por Nelson Díaz. Reseña de libros de Marcelo Figueras Patricio Pron Jana Leo y del anónimo Diario de un incesto Feria Internacional del Libro de Buenos Aires
from Dossier 57
Por Nelson Díaz
Memorias del Indio
Advertisement
En su DNI dice Carlos Alberto Solari (Paraná, 1947), pero para las huestes ricoteras es el Indio Solari o el Indio a secas. Comparte con Charly García el podio número uno del rock argentino. Los recitales de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, las ya míticas “misas ri coteras”, se transformaron en un hecho digno de un ensayo sociológico sobre su música y el poder que ejerce sobre las masas. Basta ver en YouTube la canción ‘Jijiji’ acompañada del pogo más grande del mundo.
Los Redondos se mantuvieron activos entre 1976 y 2001 hasta que diferencias insalvables –artísticas y especialmente económicas– con Eduardo Skay Beilinson dieron por terminada la historia. Beilinson formó Skay y Los Fakires, y el Indio dio vida a Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado. Los fanáticos ricoteros se inclinaron sin dudarlo hacia el Indio. Solo en su último recital, realizado en Tandil en 2016, metió 200.000 personas. En ese concierto, pa rado sobre el escenario, habló por primera vez públicamente de lo que era un secreto a voces. “Mr. Parkinson me anda pisando los talones”, les dijo a sus fanáticos.
Editorial Sudamericana acaba de editar In dio Solari. Memorias en conversaciones con Marcelo Figueras. Recuerdos que mienten un poco, un extenso volumen que recoge la vida de Solari desde su niñez en Paraná, sus años li sérgicos en La Plata, su acercamiento a La Cofradía de la Flor Solar, aquella comunidad de artesanos hippies que formaron un grupo de rock psicodélico que fue el embrión: allí conoció a Skay, de Los Redonditos de Ricota. “Pocas ma terias son más plásticas, más maleables que la memoria. La memoria es lo que uno recuerda, sí, pero al mismo tiempo es lo que uno cree que recuerda, y además lo que dice que recuerda”, dispara el Indio en consonancia con el subtítulo del libro: Recuerdos que mienten un poco.
El libro tiene varios puntos altos y reflexio nes del Indio que terminan subrayadas. Comencemos por el principio. Marcelo Figueras (Buenos Aires, 1962) es un novelista, guio nista y periodista de fuste. Entre sus novelas, vale recordar El espía del tiempo, La batalla del calentamiento, El año que viví en peligro, Kamtchatka –llevada al cine con guion del pro pio Figueras y Marcelo Piñeyro, quien también la dirigió–, El rey de los espinos y El negro corazón del crimen, entre otras. Con Piñeyro hicieron dupla como coguionistas en Plata que mada; y en solitario guionó Peligrosa obsesión, dirigida por Raúl Rodríguez Peila y Rosario Ti jeras, la notable novela del colombiano Jorge Franco, llevada al cine con título homónimo y dirección de Emilio Maillé.
Con todas estas credenciales era de esperar que Figueras no fracasara. Y no lo hizo. Se trata de una extensa entrevista, distribuida en veintisiete capítulos, en una estructura que recuerda Martropía. Conversaciones con Spi netta, de Juan Carlos Diez. Figueras aprieta el acelerador a fondo desde el vamos, y el Indio (es justo reconocerlo) no esquiva el bulto. Habla de su padre, José Solari, nacido en La Pampa, en 1900, empleado durante toda su vida en el correo. Su madre, Celina Estelita, hija de un vas co francés “medio vagoneta, bailarín”, que, dice el Indio, la abandonó y la dejó en Río Colorado, en el sur de Argentina, con unos conocidos que se transformaron en los abuelos postizos del músico. Su mamá murió a los cien años. Fi gueras continúa preguntando. El Indio contesta todo. Desde su trabajo como encargado de un hogar de niños (hay una foto aún con pelo, bi gote, traje y corbata, muy alejada del rocker que conocemos), pasando por su vida privada, su hijo Bruno, sus peleas con Sky y su concepción del mundo.
El libro incluye muchísimas fotos de dife rentes etapas de su vida –en blanco y negro, en colores– y dibujos de su autoría; también con tiene reflexiones sobre el arte, la devoción de los fans, la existencia y la vida. En estas reflexiones Carlos Solari demuestra ser un tipo inteligente, lúcido y muy culto. Por ejemplo, cuando en plan de confesión le dice al entrevistador: “Durante esos tres años, del 67 al 69, la psicodelia fue lo más importante que me pasó. Yo me consi dero un hombre de la psicodelia. Imagino que hoy habrá otras experiencias a disposición, que le serán parangonables de algún modo. Pero aquello era otro contexto y otras drogas. Lo que hizo en mí fue abrir mi cabeza, básicamente”.
Figueras aborda la “misa ricotera”, y Solari la asocia con la felicidad y la mancomunión de sus seguidores. “Creo que lo que inspiró esa cosa religiosa fue, sencillamente, la felicidad de la gente que nos iba a ver. A pesar de que de algún modo pareciese una contradicción, porque la temática que tocábamos, la tensión que producíamos, distaba de ser ligera. Pero la gente salía feliz de los shows. Eso era lo que te quitaba de encima el demonio, no era cues tión de rezar: lo que funcionaba era ir a un lugar donde lo expulsabas de veras, participabas de una experiencia dionisíaca”.
Sobre su condición de millonario que vive aislado en un búnker, contando fajos de dólares, el músico no esquiva la pregunta de Figueras. “Los que no están a favor de que uno siga infectando la sociedad hablan del mi llonario, con la intención de separarme de la gente. Como diciendo: Este dice esto, pero es un ricachón. Cuando yo no dije nunca que el dinero era malo. Lo único que distingo es entre los que se lo ganan de forma genuina o no. Si te lo ganaste bien, disfrutalo. Pero doná algo al Garrahan de vez en cuando, turro”. ¿Y el futuro Indio? ¿Cómo lidiar con el Par kinson? “Me va a costar convencer a la gente de que no voy a tocar más. Casi nadie quiere creerlo, ¿no?”, dice en tono reflexivo. Indio So lari. Memorias... es un muy buen libro (aunque demasiado extenso, porque incluso se reiteran conceptos), donde se exhiben luces y sombras de un ícono del rock pero, en definitiva, de un hombre común.
Indio Solari. Memorias en conversaciones con Marcelo Figueras. Recuerdos que mienten un poco. Editorial Sudamericana, 2019. 863 págs. Distribuye Penguin Random House.
Amor en tiempos de Tinder
El rosarino Patricio Pron (1975) estuvo en Montevideo para presentar Mañana tendremos otros nombres, novela con la que obtuvo el reciente Premio Alfaguara, dotado de 175.000 dólares y una escultura del artista canario Mar tín Chirino, fallecido el 11 de marzo.
Pron, autor de varios libros de relatos y de novelas –No derrames tus lágrimas por nadie que viva en estas calles y Nosotros caminamos en sueños, entre otros–, plantea en Mañana tendremos otros nombres la historia de una pa reja –los conoceremos como Ella y Él– próxima a los cuarenta años, en pleno derrumbe de una relación de cinco años. Ella es arquitecta, tiene miedo de hacer planes para el futuro y busca algo que no puede definir. Él escribe ensayos, y desde la relación con Ella nunca pensó en verse soltero de nuevo, en un “mercado” sentimental del que desconoce todo. Hay también un círcu lo de amigos de ambos descritos con una letra (M. o D., por ejemplo), lo que da la idea de que la identidad, la individualidad, se ha perdido. La novela empieza con la partición de una biblioteca, la que fue de Él y de Ella, con res tos de otros naufragios amorosos incluidos. Él arranca una página sí y otra no de los libros que fueron de los dos. El ingreso por error de un pájaro a la casa, que se golpea contra vidrios y paredes buscando una salida y finalmente cae muerto, supone una metáfora de la rela ción. Porque con la excusa de hacer una autopsia de la ruptura de una pareja, Pron logra una radiografía de las relaciones humanas en tiempo de redes sociales y apps. Se trata de
una fotografía instantánea de los tiempos que corren. Aplicaciones como Tinder para conse guir encuentros sexuales, amigos virtuales en las redes, el consumismo. El autor se centra en cómo con estas aplicaciones han cambiado las relaciones amorosas y la interacción entre los seres humanos. Desde una pantalla, alguien te puede agredir, desvirtuar o bloquear con solo deslizar un dedo. Es la generación Tinder, en la que lo público y lo privado ya no están se parados. Todo se expone; el éxito inmediato es el objetivo. Lo efímero como marca de estos tiempos. Ya no hay nada estable. El amor ya no constituye un refugio, el ámbito de la pareja. La novela plantea el cambio en el paradigma de las relaciones y nos interpela acerca de cómo nos percibimos y cómo percibimos a los otros. Como nos aseguró el autor en ocasión de una entrevista en Montevideo: “Nunca fue tan fácil intimar con otros. Nunca nos hemos sentido más solos”.
Mañana tendremos otros nombres, de Patricio Pron. Alfaguara (Premio Novela 2019). 267 págs. Distribuye Alfaguara.
El infierno tan temido
Dos libros que cuentan historias aberrantes. Las de violación, incesto y violencia psicológi ca y de género. El primero de ellos, editado por Malpaso, es Diario de un incesto y es anónimo. La autora –así lo consigna en la nota introduc toria– dice: “A fin de proteger mi intimidad, he decidido guardar el anonimato. Para ello he cambiado numerosos detalles. Aun así, no he alterado los hechos esenciales, que son ver daderos. Ruego a los lectores que respeten el deseo de ocultar mi identidad”. Y al leer el libro se comprende el pedido de su autora.
Diario de un incesto es una narración en primera persona de los abusos, maltratos y violaciones que la protagonista sufrió desde los tres hasta los veintiún años. Escrito en forma de diario, con un lenguaje directo y seco, hay pa sajes que se tornan brutales y producen asco. Su padre la violó durante casi 18 años bajo el silencio –la complicidad– de la familia, con una madre que rehúye el tema y un hermano que no puede enfrentar la verdad. No querer hablar del tema –la amiga le dice, con pragmatismo, que se olvide del asunto– deja a la víctima más desprotegida aun, en completa soledad.
Esa situación devino en odio a su progeni tor. “Tengo, y siempre he tenido, la impresión de que en realidad mi padre quería matarme, y que yo le seduje para impedir que lo hiciera. Recurrí a la sensualidad para seguir con vida. Salvé mi vida dándole placer sexual. Y él se hizo adicto a nuestras relaciones sexuales, y a mí me ocurrió lo mismo”, cuenta en un pasaje la autora. También llega a pensar en matarlo y darles de comer sus restos a los perros. Hay una relación psicológica dependiente que que da demostrada en algunos tramos, como cuando dice: “Mi padre sigue excitándome y sigue dándome miedo. Cada vez que pienso en él me pongo a cien. Percibo en el coño una tensión, una sensibilidad constante, y a veces incluso unos dolores agudos. Noto el estómago tenso y siento crecer un agujero negro en él”. Diario de un incesto es un libro duro que nos muestra qué tan crueles podemos ser.
El otro libro que gira en torno a la misma temática es Violación Nueva York, de la artista conceptual madrileña Jana Leo, que reside en Nueva York. El hecho ocurrió el 25 de enero de 2001, entre la una y las tres de la tarde, cuando Jana Leo fue violada en su apartamento de Har lem. Mientras dejaba unas bolsas de la compra con la puerta abierta a sus espaldas, su acosa dor aprovechó para entrar y retenerla a punta de pistola para violarla en su propia cama.
El libro –publicado en Estados Unidos en 2011 y ahora en al mercado hispanohablante–, narrado en primera persona, relata la odisea social y judicial que vivió Jana Leo luego de ser violada. Estuvo seis años juntando documentos judiciales, archivos fotográficos –sacó fotogra fías de cada uno de los rincones del apartamento, tal y como quedó después de la agresión– e hizo decenas de visitas a abogados y bibliotecas que seis años después permitieron que el violador fuera encarcelado. Pero no fue el único que marchó a la cárcel. La investigación que hizo la autora puso al descubierto otra tra ma: la del casero, que fue preso por fraude. El hombre sabía que las cerraduras de la entrada y de la azotea estaban rotas. El negocio consistía en no atender las viviendas que alquilaba para que los inquilinos dejaran los pisos. Por cada nuevo arrendatario no solo recibía una nueva comisión, sino que también se beneficiaba con el aumento del alquiler.
Leo recuerda perfectamente a su violador, el momento de los hechos y, sobre todo, el trauma que arrastra desde entonces. “No que ría la cámara, ni la tele, ni el video. Me quería a mí. No quería solo sexo, quería despojarme de mí misma, destruir cualquier rastro de confian za que yo tuviera en mi persona. Estaba a punto de violarme. Más tarde pensé lo que significa obligar a otra persona a tumbarse, no solo para forzarla a mantener relaciones sexuales contra su voluntad, sino también para ningunearla, ha cerla de menos, arrebatarle su autoestima y humillarla”. Violación Nueva York es un testimonio implacable y esclarecedor sobre el hecho en sí y las consecuencias psicológicas que debe afrontar la víctima.
Diario de un incesto, Anónimo. Editorial Malpaso, 2017. 127 págs. Violación Nueva York, de Jana Leo. Los Libros del Lince, 2017. 174 págs. Ambos distribuidos por Océano.
TITULO: Ciencia en la ciudad AUTORA: Laurie Winkless EDITORIAL: Biblioteca Nueva
En toda la historia de la humanidad, nunca como en la actualidad las ciudades han alojado a un mayor número de personas y, con una población mundial en constante crecimiento, la complejidad de la jungla urbana no hará más que incrementarse en las próximas décadas. Por ello, las ciudades se construyen utilizando algunas de las ideas más creativas y revolucionarias de la ciencia y de la ingeniería. Laurie Winkless conduce al lector por ciudades de los seis continentes y le descubre el papel esencial que la ciencia desempeña en ellas.
TITULO: Ganarse la vida en el arte, la literatura y la música AUTOR: Javier Gomá Lanzón (coord.) EDITORIAL: Galaxia Gutenberg
Encontrar una ocupación pagada, dentro del sistema de oficios y profesiones de cada sociedad, es lo que usualmente se designa como ganarse la vida. Al especializarse, el sujeto profesionalizado adquiere una posición social y con ella una identidad. A partir de estas ideas que Javier Gomá desarrolla en la introduccion, este libro analiza, en el curso de la historia de la cultura y la creación artística, literaria y musical, la forma en la que los creadores se han ganado la vida y su influencia en el fenómeno creativo y en la personalidad del propio artista.
TITULO: Historia de Venecia AUTOR: John Julius Norwich EDITORIAL: Atico de los libros
Venecia es una ciudad extraordinaria que todavía hoy atrae a millones de visitantes cada año, deseosos de contemplar sus canales y pasear por sus calles llenas de historia. Esta es una historia poblada por personajes fascinantes y llena de riquezas, aventuras, intrigas y heroicidades. Solo Norwich, con su sorprendente erudición y su estilo a la vez ameno y elegante, es capaz de recrear ante nosotros el esplendor de Venecia.
TITULO: Los desterrados AUTORA: Kamila Shamsie EDITORIAL: Malpaso
Isma por fin es libre. Después de años cuidando de sus hermanos gemelos tras la muerte de su madre, y ahora que ambos tienen diecinueve años, ha conseguido su sueño: estudiar en Estados Unidos. Pero Isma no puede evitar preocuparse por su hermana Aneeka, tan bella como tozuda, y por su hermano Parvaiz, que decide abandonar Londres para unirse al ISIS. Los desterrados, ambientada en Londres, Estados Unidos y Oriente Medio, se inspira en Antígona y recrea sus viejos temas: desobediencia civil, fidelidad y legalidad.
OCEANO R
La fiesta del libro
En la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires –con Barcelona como ciudad invitada; el año pasado fue Montevideo–, donde participaron escritores internacionales, se sucedieron charlas, exposiciones, Uruguay tuvo su día y, como (casi) todos los años, la polémica no faltó a la cita.
Finalizada el 13 de mayo, la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires –una de las de habla hispana más concurridas– comenzó el jueves 25 de abril con el discurso inaugural a cargo de la antropóloga argentina Rita Segato. En pleno año electoral argentino, el feminismo y la política nacional se impusieron como los dos grandes temas en su exposición. Minutos antes, en la sala Jorge Luis Borges, la misma donde semanas después Cristina Fernández de Kirchner presentó su libro Sinceramente, el secretario de Cultura, Pablo Avelluto, fue repudiado por un grupo de manifestantes, en su mayoría integrantes del gremio de docentes, que se encontraban en el predio de la Rural, que abarca 45.000 metros cuadrados.
Este año, la feria tuvo programadas más de mil actividades culturales, en las que participaron autores extranjeros como Arturo Pérez-Reverte –que fue a presentar Sabotaje, su novela más reciente de la saga protagonizada por Falcó, y que terminó envuelto en una fuerte (y buscada) polémica al criticar duramente el lenguaje inclusivo–, Rosa Montero, Santiago Posteguillo, Carlos Fonseca, Sergio Ramírez, Alfredo Bryce Echenique, Gioconda Belli, Laurence Debray, John Katzenbach, Victoria Schwab y Benito Taibo, entre otros.
En la comitiva de Barcelona se destacaron Carlos Zanón, Héctor Lozano –creador de la exitosa serie Merlí que se puede ver por Netflix–, Jordi Sierra i Fabra, el dibujante argentino Horacio Altuna (residente en Cataluña) y la cantante Silvia Pérez Cruz, quien ofreció un recital el sábado 27 en el marco de La Noche de la Ciudad en la Feria.
En las últimas ediciones de la feria ha ido ganando protagonismo un fenómeno que no se puede soslayar: autores juveniles para un público adolescente y la presencia de youtubers que son recibidos como rockstars por sus seguidores. Largas filas para la firma de libros, charlas y presentaciones para un nuevo fenómeno que aprovecha la exposición en las redes de estas figuras de la movida juvenil para llevarlos al mundo editorial. De hecho, el sábado 27, en la sala Julio Cortázar, tuvo lugar la Convención Blogger. Además de la entrega del premio Blogger de la Feria, hubo entrevistas públicas a los blogueros Antonio Santa Ana y Sara Búho. El 4 de mayo fue el Encuentro Bookstagrammer, en la sala Tulio Halperín Donghi, mientras que el 10 de mayo fue el Encuentro Internacional de Booktubers, en la sala José Hernández, con la participación de la autora estadounidense Mackenzie Lee y los booktubers mexicanos Claudia Ramírez y Alberto Villarreal. Esto demuestra la expansión de este fenómeno, que poco tiene que ver con la literatura.
Pero hablando de literatura, entre el viernes 26 y el domingo 28 de abril se llevó a cabo el XIV Festival Internacional de Poesía, en la sala Victoria Ocampo, con la participación de más de cuarenta autores. El poeta argentino Samuel Bossini fue el encargado de iniciar las lecturas junto con Emilio Fatuzzo, Mónica Sifrim, el chileno Bruno Cúneo, la colombiana Camila Charry Noriega y la compatriota Paula Simonetti. El domingo, día de cierre del encuentro, estuvieron la nicaragüense Gioconda Belli y el poeta argentino Jorge Boccanera.
Cabe destacar dos actividades que marcaron un punto alto de la feria. Uno de ellos fue el Diálogo de escritoras y escritores argentinos, realizado en la sala Domingo Faustino Sarmiento, que contó con la presencia de Samanta Schweblin, Martín Kohan, María Rosa Lojo y Carlos Busqued. La segunda actividad, en la sala Alfonsina Storni, fue el Diálogo de escritoras y escritores latinoamericanos, el lunes 6 de mayo, en el que participaron el escritor uruguayo Gabriel Peveroni, la argentina Florencia Abbate y el colombino Giuseppe Caputo, moderados por Victoria Rodríguez Lacrouts. El Día de Uruguay fue el martes 7 de mayo –también en la sala Alfonsina Storni– y contó con la presencia del embajador uruguayo en Argentina, Héctor Lescano, y la exposición de Hortensia Campanella sobre la Generación del 45, basándose en dos de sus máximas figuras: Idea Vilariño y Mario Benedetti. El cierre de la actividad estuvo a cargo de Malajunta Tango Trío, proyecto integrado por Adriana Filgueiras en voz, Jorge Alastra en guitarra, composición y arreglos, y Juan Rodríguez en violonchelo, acordeón y arreglos. Claro que la figura de Ida Vitale fue uno de los nombres que más sonaron en la feria; su obra fue muy buscada en el stand de la Cámara Uruguaya del Libro, teniendo en cuenta que dos días antes de la inauguración, el 23 de abril, recibió el premio Cervantes, el máximo galardón de las letras de habla hispana.
Las muestras y exposiciones tuvieron un lugar destacado. Podemos consignar el Espacio de la Diversidad Sexual, donde se expusieron 24 fotografías de Sebastián Freire. Se trataba de retratos de escritores de la comunidad LGBTIQ publicados entre 2008 y 2019 en el suplemento Soy de Página 12. La otra muestra de retratos, denominada Universos literarios, reunió a treinta escritores argentinos bajo la lente de los fotógrafos Pablo José Rey y Magdalena Siedlecki. El concepto de esta exposición, según explicaron sus autores durante la presentación, “es una conversación, una foto de la infancia, una retrato de hoy”.
Rey y Siedlecki le pidieron a cada uno de estos autores que eligiera una foto de su infancia para adentrarse en sus orígenes y el germen de su escritura. En blanco y negro se pudo ver compartiendo un mismo cuadro anecdótico y autorreferencial las fotos de la infancia y la adultez de autores argentinos, algunos conocidos en Uruguay y otros no tanto, como Álvaro Abós, Selva Almada, María Negroni, Agustina Bazterrica, Félix Bruzzone, Gabriela Cabezón Cámara, Hernán Casciari, Leila Guerriero, Martín Kohan, Leonardo Sabbatella y Ana María Shua, entre otros.
El stand de Barcelona, en su rol de ciudad invitada, se llevó las palmas y los ojos de los visitantes. El mejor stand de la feria, donde además de charlas con autores catalanes, se exhibieron 32 ilustraciones que invitaban a viajar por esta ciudad, considerada una de las capitales de la ilustración a nivel mundial. Desde la mirada de artistas visuales como Jordi Sierra i Fabra o Isaac Bosch Malagarriga, entre
otros, se pudo admirar espacios que integran el circuito turístico y cotidiano citadino barce- lonés: la Rambla, la playa de la Barceloneta, el Palau Nacional, la Basílica de Santa María del Mar, el mercado Santa Caterina y el mirador Turó de la Rovira.
Otra de las muestras relacionadas con Barcelona fue Literatura catalana, un mirador abierto al mundo, organizada por la Fundación Ramon Llull en colaboración con el gobierno de Andorra. En este espacio se explicó a la li- teratura catalana como “una excepción en la cultura europea y mundial”, asentada en una tradición medieval y conectada con las gran- des literaturas románticas que a principios del siglo XX crearon el proyecto de una cultura de masas moderna. Así lo reseñaron sus organi- zadores mediante la exhibición en pantalla de cinco momentos que se conectan con la lite- ratura universal: caballeros, poetas y filósofos; la Renaixença superstar; Barcelona metrópoli; los caminos del exilio; y el milagro catalán.
Como balance, la feria mantuvo el brillo de años anteriores, pese a que disminuyeron notablemente las ventas, según lo que pudi - mos recabar entre libreros y distribuidores, con lo paradójico de que el hito de la feria nada tuvo que ver con lo literario. Se trató de la presentación del libro Sinceramente, de la actual senadora y ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, que logró ré - cord de ventas.