Año 5 No 30
MAYO - JUNIO 2020
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engineering to protect and save lives
CERTIFICADA
2018 MEX
EDITORIAL COVID-19
nos ha demostrado que los tiempos difíciles pueden surgir en cualquier momento, ha denotado la fragilidad de nuestro sistema social y nos ha puesto un reto transformador que nos empuja hacia nuevas condiciones de trabajo, renovadas formas de socializar e invita a la reflexión.
A la par, nos da la posibilidad de mostrar que las cosas pueden funcionar si retomamos el camino y adaptamos la realidad tecnológica a nuestras anteriores actividades. Por otra parte, como sector, permite reafirmar la importancia de nuestro trabajo en el ámbito de la seguridad humana y de los bienes inmuebles de diversos sectores industriales, con los que trabajamos de la mano. Esta pandemia nos ha evidenciado como una industria esencial que provee a otras, como la alimentaria, de seguridad dentro de las instalaciones en que se generan sus productos. Los sistemas contra incendio están presentes en la industria química, en las tiendas de auto servicio, en servicios de mensajería, todos ellos esenciales y todos protegidos por sistemas automáticos que provee nuestro sector. Reconocemos pues, el reto, y sabemos que lo principal es la salud y la vida de todos los trabajadores del ramo, pero también mantenemos la convicción de que el trabajo del contra incendio es esencial para salvaguardar la vida de aquellos que se mantienen trabajando para que todos resolvamos nuestros consumos esenciales, por ellos, es necesario mantener actividades de mantenimiento y de verificación de todo lo instalado. Del tal manera que, desde nuestra trinchera, en esta edición hemos incluido artículos que muestran la importancia de la labor contra incendio en referencia al mantenimiento, que se refleja en la sección “TESTIMONIO”; la necesidad de hacer una introspección sobre la manera en que concebimos la seguridad y los cambios por hacer, de lo que se habla en “COMUNIDAD”; o la preocupación que generan las afectaciones a la salud y al ambiente luego de un incendio, en nuestra sección de “PORTADA”. Como cada edición, te invitamos para que te adentres en el mundo del fire, que nos consultes y nos compartas como un medio comprometido, como una herramienta que aporta conceptos técnicos básicos de este amplio mundo. Juntos podemos demostrar que a pesar de la distancia seguimos unidos y aportando desde nuestra trinchera a la seguridad humana.
¡Promoviendo la Cultura de la Prevención! Los editores Revista Contraincendio Comentarios: lectores@revistacontraincendio.com
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CONTENIDO
DIRECTORA GENERAL Y EDITOR RESPONSABLE
Ronit M. González Pérez direccion@revistacontraincendio.com EDITOR DE CONTENIDO
Roberto Zaldivar Sacramento robertozaldivar@revistacontraincendio.com ARTE Y DISEÑO
Lorena Alvarado Hurtado
26 PORTADA Afectaciones ambientales y de salud a causa de incendio
COLABORADORES
David Morales Reinosa Enrique Rodríguez Nolasco Gerzayn Fuentes Campos José Luis de León Justo Adámez Mark Knurek Ramón Domínguez Bentancourt Raúl Sánchez Meza Victoriano Angüis Terrazas CONSEJO EDITORIAL
David Morales Reinosa Presidente del CONAPCI
6 ACTUALIDAD
Juan José Camacho Gómez Presidente de AMRACI
Incendios en tiempos de COVID-19
Francisco Guzmán Hernández VENTAS Y PUBLICIDAD
Gerardo G. Pérez Tel. 55 78.27.37.37 / 55 55.75.47.94
Esta revista considera sus fuentes como confiables y verifica los datos que aparecen en su contenido en la medida de lo posible, sin embargo, puede haber errores o variantes en la exactitud de los mismos, por lo que los lectores utilizan esta información bajo su propia responsabilidad. Los espacios publicitarios constantes en esta revista son responsabilidad única y exclusiva de los anunciantes que oferten sus servicios o productos, en ese respecto, los editores, casa editorial, colaboradores o asesores de esta publicación periódica no asumen responsabilidad al respecto.
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8 EN VOZ DEL EXPERTO ¿Por qué el mantenimiento?
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Revista Contraincendio es una publicación bimestral, fecha de impresión mayo-junio 2020, editada por Ronit Marielisa González Pérez como editor responsable, producida por el Centro de Desarrollo Profesional ACTIVA, S.C., con número de Certificado 04-2019040316401800-102 de Reserva de Derecho al Uso Exclusivo del Título que expide el Instituto de Derechos de Autor, número de certificado 17334 de Licitud de Título y Contenido, WTC, Montecito Nº 38, Piso 28 Oficina 16, col. Nápoles, Alcaldía Benito Juárez, C.P. 03810, ciudad de México, impresa por Preprensa Digital en Caravaggio N° 30, Mixcoac, ciudad de México, C.P. 03910 Alcaldía Benito Juárez. Autorización SEPOMEX PPO9-02037 “Revista Contraincendio” es Marca Registrada. Hecho en México.
12 ARTÍCULO TÉCNICO
Almacenes robotizados
32 NORMATIVIDAD
Certeza, seguridad y eficiencia
16 TESTIMONIO
Sistemas contraincendio, actividad esencial
20 COMUNIDAD
Introspección ante la contingencia
36 PANORAMA
Sistemas de alertamiento ante el riesgo
40 DESDE LA ÓPTICA DEL USUARIO
Unión por la seguridad
22 ALTAVOZ
El corto circuito en los incendios
46 TECNOLOGÍA
CPVC, conducción asegurada
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ACTUALIDAD
Incendios en tiempos de COVID-19 y el golpe a la industria De acuerdo con datos obtenidos a través de un monitoreo realizado a
diversos medios de comunicación del país,
en sus plataformas digitales, se ha obtenido el siguiente muestreo en materia
de incendios.
El sector más vulnerado por incendios durante la condición de sana distancia es el industrial, con el 42% de los siniestros contabilizados.
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De los espacios dañados, resultan ser las bodegas, las fábricas y los negocios como madererías o herrerías los más afectados.
Respecto a las afectaciones de salud se sabe que a causa de dichos incendios resultaron.
En el ámbito internacional hubo cinco eventos que
en su conjunto dejaron 63 personas fallecidas y 95 lesionadas, siendo también
los sectores del comercio y la industria los más golpeados.
Las estadísticas son claras, los sectores empresariales, industriales y comerciales han sido fuertemente impactados desde diversos frentes en la era del COVID-19, la falta de personal en muchos de los casos registrados, fue un factor importante para que el fuego se propagara sin control y capacidad de respuesta, según declaran los cuerpos de rescate ante los medios de comunicación.
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EN VOZ DEL EXPERTO
¿Por qué el mantenimiento? POR: GERZAYN FUENTES CAMPOS
La falta de inspección, pruebas y mantenimiento a los sistemas contra incendio, sumado a la reducción de personal en las empresas, puede generar incendios que no podrán ser controlados.
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Influenciados por nuestra percepción, muchos incendios “pareciera” que se desarrollan por la noche, sin embargo, estos suceden a cualquier hora y sin aviso. Y digo que “pareciera” porque en las mañanas al ver las noticias es que nos enteramos de ellos.
La realidad es que cuando no hay personal en las empresas o ante una reducción de personas en las jornadas laborales, que puedan atender de forma oportuna un incendio incipiente y controlarlo con el uso adecuado de un extintor portátil, éste puede salirse de control, a tal grado, que en minutos se puede llegar a perder la materia prima para la producción, el producto terminado, peor aún, la maquinaria para producir o todo el patrimonio de un empresario. Dicho panorama puede replicarse en otros espacios con baja ocupación como hoteles, edificios de oficinas corporativas, en plazas comerciales o edificios de uso múltiple, así como centros de entretenimiento, por ejemplo, salas de cine, centros de espectáculos y museos. Aún y cuando el 30% de los incendios en ocupaciones no residenciales tienen como origen principal las áreas de preparación de alimentos; en segundo lugar, están los incendios causados por la falta de acción y descuido con un 11%, así como fallas eléctricas con 12%.
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No tengo un dato estadístico que sustente lo que estoy por contarles, pero en mi experiencia de más de 17 años visitando clientes que han pasado por el doloroso proceso de recuperarse ante un incendio, he notado que la causa del incendio fuera de control lo puedo clasificar en dos grandes grupos. El primero es porque no tenían un sistema contra incendio instalado, y el segundo, porque su sistema instalado no funcionó correctamente por falta de mantenimiento adecuado. Si los sistemas contra incendios hubiesen operando al 100% y en modo automático, me atrevo a asegurar que el incendio se hubiera controlado de forma oportuna. Y esto lo digo a todos los clientes y lo repito hasta el cansancio:
“Señores, deben entender que los sistemas contra incendio salvan vidas y dan continuidad operativa a las empresas protegiendo bienes e inmuebles.”
¡Ok! Ya me desahogué, así que sumemos con ideas que sean de utilidad para nuestros clientes. Mi recomendación es que lleven a cabo las siguientes actividades de inspecciónverificación en sus sistemas contra incendios: Sistema de bombas, estaciones de manguera y rociadores. 1 Revisar que el tablero de control sólo tenga el LED de color verde encendido. 2 Desconectar las baterías de respaldo y que el sistema siga operando. 3 Apagar el interruptor de energía principal que alimenta al tablero de control y que el sistema siga operando. 4 Activar varias estaciones manuales, al azar, y que suenen las alarmas según lo esperado. 5 Activar varios detectores de humo o calor, al azar, y que suenen las alarmas según lo esperado. Sistema de bombas, estaciones de manguera y rociadores
1 Asegurar que los tableros controladores estén encendidos y en modo automático. 2 Verificar que el tanque de combustible este lleno o mínimo a ¾. 3 Probar que las baterías tengan carga y estén operativas. 4 Revisar que todas las válvulas de descarga a la red estén en posición completamente abierta. 5 Verificar que el depósito de agua para el sistema esté lleno y que la válvula de succión este completamente abierta. 6 Tirar agua de unas estaciones de manguera o hidrantes y verificar que el sistema de bombeo funcione en automático. 7 Abril la válvula de prueba del sistema de rociadores y verificar que el sistema de bombeo funcione en automático. 8 Al cierre de válvulas o arranque de las bombas contra incendio se debe asegurar que el tablero de control de alarmas registre el evento.
Me da mucho coraje cuando observo que las causas del incendio son por falta de un programa de inspección, pruebas y mantenimiento. Lo peor de todo es que se pudo evitar y “si le echo más sal a la llaga”, gran parte de las inspecciones básicas que los propios clientes pueden llevar a cabo sin costo extra. Es decir, sin tener que contratar a las empresas que nos dedicamos y entrenamos en los sistemas que protegen a sus empresas.
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EN VOZ DEL EXPERTO
Las actividades antes descritas te permitirán saber si tu sistema funcionará en caso de una emergencia, o al menos, te darás cuenta que está fallando, en ese momento puedes llamar a una empresa profesional que haga una inspección a fondo para realizar las correcciones necesarias y puedas dormir tranquilo. Existen normas internacionales y recomendaciones de los fabricantes que nos indican cuales son las inspecciones, pruebas y mantenimientos que debemos realizar a cada uno de los componentes o dispositivos de los sistemas contra incendio y también nos dictan la periodicidad para cada actividad. Analizando las pérdidas de los datos estadísticos de Estados Unidos de América (EUA), extrapolándolos a México, tomando como base la población para cada país y considerando que EUA tiene una mayor cultura en la protección contra incendios, los ocurridos en México, en las ocupaciones no residenciales durante el año 2017, causados sólo por la falta de acción y descuido superarían los 2,709 millones de pesos ¡Sí, leíste bien! $2,709,120,515.93 pesos mexicanos. La categoría de ocupaciones no residenciales, en EUA, incluye propiedades industriales y comerciales, instituciones (como hospitales, hogares de ancianos y prisiones), establecimientos educativos (desde preescolar hasta la universidad), propiedades móviles y propiedades de almacenamiento. Estimaciones nacionales en EUA muestran que en promedio de 2008 a 2017, alrededor del 90% de los incendios de estructuras no residenciales, el 90% de muertes, el 92% de las lesiones y el 92% de las pérdidas en dólares ocurrieron en ocupaciones no residenciales. El gobierno, la sociedad y las empresas debemos trabajar unidos, en equipo, con madurez y con un mismo objetivo para hacer los cambios necesarios a las reformas con un único fin “Salvar vidas y dar continuidad operativa a las empresas”. La importancia de esto radica en que las micro, PyMEs y grandes empresas son fuentes de generación de empleo.
El 30% de los incendios en ocupaciones no residenciales tienen como origen principal las áreas de preparación de alimentos; en segundo lugar, están los incendios causados por la falta de acción y descuido. El gobierno, la sociedad y las empresas debemos trabajar unidos, en equipo, con madurez y con un mismo objetivo para hacer los cambios necesarios a las reformas, con un único fin “Salvar vidas y dar continuidad operativa a las empresas”.
Causa incendio del fuera de control
Falla en el sistema contra incendio Sin sistema contra incendio instalado
Sistema fuera de servicio (apagado) Sistema con fallas, silenciado Sistema con fallas, ignorado Bombas en modo manual o apagadas Tanque de combustible, sin combustible Válvulas de control, cerradas Conocimiento de la falla y no corrección porque no hay presupuesto o autorización Falta de conocimiento o entrenamiento en la operación del sistema
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CEO Koltek, CEPI especialista en proyectos contra incendio.
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ARTÍCULO TÉCNICO
ALMACENES
ROBOTIZADOS La innovación acelerada de la nueva generación de centros de distribución automatizados se convierte en un verdadero reto para la protección de sus mercancías. POR: DAVID MORALES REINOSA
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La modernidad alcanza todos los sectores, apremia la transformación de actividades, y en casos muy específicos, demanda mayores espacios de almacenamiento en los lugares que se contiene una variedad amplia de productos, tiempos de entrega mucho más rápidos, reducción de costos en manejo de materiales, sistemas de logística sofisticados y disminución de tiempos en la entrega a los clientes. Por tales motivos, los centros de distribución de alto movimiento requieren soluciones de almacenaje más eficientes y modernas. Por ejemplo, actualmente el comercio electrónico juega un papel muy importante en el consumo diario, realizamos cada vez más transacciones y compras en línea, con tiempos de espera relacionados a la entrega mucho más rápidos, esto permite la reducción de costos, satisfacción de clientes, y por lo tanto, un desarrollo económico creciente. Al mismo tiempo, hemos observado que este frenético crecimiento conlleva retos, en especial, riesgo de incendios. En ese respecto,
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la protección contra incendio de almacenes y centros de distribución se vuelve necesaria para la continuidad de los negocios y de la cadena productiva. Además, la nueva generación de almacenes automatizados o robotizados se convierte en un verdadero reto, pues la industria logística no se va a detener en la búsqueda de eficientar sus procesos utilizando toda la tecnología disponible a su alcance. Estableciendo un contexto, existen varios tipos de almacenamiento dependiendo de las características del producto, de esto se desprende la complejidad y el riesgo, por ejemplo, existen materiales que son más difíciles de proteger contra un incendio, tales como: llantas, plásticos, productos químicos, telas, productos a presión, entre otros, y más aún, cuando estos productos se encuentran distribuidos en diferentes áreas del almacén, creando una condición alta de riesgo. Las propias condiciones de operatividad que se generan actualmente suman al riesgo que presenta el almacenaje de productos peligrosos, es decir, al adicionar tecnología (automatización o robots) así como al minimizar los espacios de almacenamiento buscando alturas mayores para reducir costos. Todo lo anterior complica las opciones de protección contra incendio, (rociadores en techo, rociadores dentro de racks, sistemas de extinción por gas, detección temprana de humo o fuego, combate manual, etc.) así, la creación de nuevas soluciones de almacenamiento crece muy rápidamente
y las opciones de protección contra incendio van tratando de desarrollar productos o soluciones que brinden la posibilidad de minimizar los riesgos de incendio, donde se pueden perder vidas, propiedades o generarse la interrupción del negocio. Ahora bien, la protección contra incendio con sistema de rociadores automáticos sigue siendo una de las opciones más confiables y económicas para el combate de los fuegos en almacenes, pero con la nueva generación de almacenamientos automáticos o robotizados, se generan mayores complicaciones para el adecuado control y extinción (obstrucciones, rápida propagación horizontal, limitación de accesos, etc.). Unos de los sistemas de almacenaje más modernos son los sistemas de almacenamiento y recuperación automáticos de carga superior “Automatic Storage and Retrival Systems” (ASRS); lo que diferencia estos arreglos de almacenamiento de otros tipos de arreglos ASRS es que los contenedores se cargan
y descargan verticalmente desde la rejilla superior de almacenamiento, utilizando robots automatizados que se mueven por el área en una red de cuadrícula elevada. Dado que la manipulación de materiales se realiza de forma vertical, no se requieren equipos tradicionales de manejo de materiales, como montacargas, lo que elimina la necesidad de pasillos de almacenamiento. Ante la falta de pasillos, la protección recomendada para este tipo de almacenes no solo se centra en los sistemas automáticos de rociadores en techo, ya que es prácticamente imposible la instalación de rociadores dentro de los raks, debe pensarse en incluir recomendaciones que se centren en la detección temprana y la extinción del incendio por parte de los servicios de bomberos locales, esto genera espacios sumamente complejos de proteger y los vuelve una ocupación de riesgo muy alto en materia de incendio.
Ingeniero en electrónica por el ITESM y alta dirección en el IPADE, con amplia experiencia en sistemas contra incendio durante más de 25 años.
Es importante resaltar que FM Global proporciona guías para la protección de todo
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ARTÍCULO TÉCNICO
tipo de almacenamiento ASRA que se encuentra en el mercado, actualmente realiza constantes investigaciones y pruebas para confirmar la eficiencia de cada protección contra incendio ofrecida. Por ejemplo, la guía de protección de FM Global Property Loss Prevention Data Sheets 8-34 en su sección 2.4 para “sistemas de almacenamiento y recuperación automáticos” (ASRA) de carga superior, proporciona criterios o recomendaciones de construcción, ocupación, uso de robots y protección.
La creación de nuevas soluciones de almacenamiento crece muy rápidamente y las opciones de protección contra incendio van tratando de desarrollar productos o soluciones que brinden la posibilidad de minimizar los riesgos de incendio.
De tal manera que la protección más robusta o en una visión de 360 grados, debe incluir rociadores automáticos en techo para diferentes alturas y ocupaciones, instalación de hidrantes tipo monitor fijo, cámaras de visión infrarroja, detección temprana de humo en techo e hidrantes para combate manual exterior; de tal manera y debido a lo complejo, compacto y restringido de las áreas de almacenamiento vertical, el combate contra incendio se vuelve más crítico y tiene que ser una mezcla de varios sistemas. Algunos de los principales puntos a tener en cuenta para un buen diseño y selección de los sistemas para prevención de incendio son:
Protección con rociadores automáticos Detección temprana de humo o fuego Monitores fijos de agua Barreras verticales (Compartimentar) Acceso para combate manual
Implementar lo anterior permite lograr una separación con barreras verticales y evitar la propagación horizontal del fuego. Para mayor información sobre las guías de FM Global Property Loss Prevention Data Sheets se pueden consultar gratuitamente en: https://www.fmglobal.com/ research-and-resources/fm-global-data-sheets El mundo presenta cada día más proyectos de almacenes robotizados, con innovaciones y tecnologías de punta que generan una necesidad de protección contra incendio adecuada, y a la ves, una coordinación muy estricta entre todas los involucrados, constructores, fabricantes, códigos y normas de cada país, aseguradoras, instaladores y operadores para garantizar su adecuada protección y minimizar los riesgos, generando así una instalación robusta, un esquema 360 que garantice la vida y los negocios.
La protección debe incluir rociadores automáticos en techo para diferentes alturas y ocupaciones, instalación de hidrantes tipo monitor fijo, cámaras de visión infrarroja, detección temprana de humo en techo e hidrantes para combate manual exterior.
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TESTIMONIO
Sistemas contraincendio,
ACTIVIDAD ESENCIAL POR: RAÚL SÁNCHEZ MEZA
Las propias características que posee el objetivo de instalar sistemas contra incendio, enfocados en resguardar la vida, convierten al mantenimiento de los mismos en una actividad de primera necesidad durante una contingencia. 16
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La experiencia nos ha demostrado que la presencia de una pandemia conlleva afectaciones de todo tipo en todos los sectores de las actividades que realizamos comúnmente. La protección contra incendios no es la excepción. La mayoría de nuestras actividades se encuentran detenidas para evitar contagios que agraven la situación, y que dicha medida, nos permita salir de este estado de emergencia. Solo actividades consideradas esenciales se mantienen en actividad con un reducido número de personas, por seguridad sanitaria, entre otro tipo de medidas adicionales. En general, estas actividades son las siguientes: 1. Las que de manera directa son necesarias para atender la emergencia sanitaria; como son las actividades laborales de la rama médica; paramédica y administrativa. Así como la de apoyo en todo el sector salud, tanto en el campo público como privado. 2. Las que involucran la seguridad pública y la protección ciudadana, las que buscan la defensa de la integridad y soberanías nacionales. La procuración e impartición de justicia, así como la actividad legislativa tanto del nivel federal como del nivel estatal.
3. Aquellos sectores que se consideran esenciales para el funcionamiento fundamental de la economía.
Sector financiero Recaudación tributaria (el SAT y todas sus operaciones permanecen) Distribución y venta de energéticos, gaso lineras y gas Generación y distribución de agua potable Industria de alimentos y bebidas no alcohólicas Mercados de alimentos Supermercados Abarrotes y venta de alimentos preparados Servicios de transporte de pasajeros y carga Producción agrícola, pesquera y pecuaria Agroindustria Industria química Productos de limpieza Ferreterías Servicios de mensajería Guardias y labores de seguridad privada Guarderías y estancias infantiles Instancias para personas de la tercera edad Refugios y centros de atención para mujeres víctimas de violencia, sus hijos y sus hijas Tecomunicaciones y medios de información De almacenamiento y cadena de envío de insumos esenciales Logística (aeropuertos, puertos y ferrocarriles) Así como actividades cuya suspensión pueda tener efectos irreversibles para su continuación.
4. La operación de los programas sociales del gobierno. 5. Conservación y mantenimiento de la infraestructura crítica, que asegura la producción y distribución de los servicios indispensables como: agua potable, energía, gas, petróleo, gasolina, turbosina, saneamiento básico, transporte público, infraestructura hospitalaria y médica de primer nivel, entre otras.
A primera vista la protección contra incendios no se ve incluida de manera explícita en esta lista que se aplicó desde el 31 de marzo y hasta el 30 de abril como plazo original. Sin embargo, considero que aquellas instalaciones (inmuebles, plantas, almacenes, etc.) que estén dentro de las actividades esenciales y que cuenten con sistemas contra incendios, deberán seguir disponibles en caso necesario, esto implica que las actividades de mantenimiento no deben interrumpirse. Operando siempre apegado a las recomendaciones emitidas por la Secretaría de Salud. El numeral 5 sobre conservación y mantenimiento de infraestructura crítica, también deja la posibilidad de continuar con la protección contra incendios de manera abierta, por lo menos en el rubro del mantenimiento en los sistemas contra incendios de lo denominado como infraestructura crítica. Sin embargo, deja incertidumbre al mencionar “entre otras”. Por otra parte, es entendible que como cualquier sector de la economía que genera empleos, no deseamos parar actividades para no vernos afectados o en el mejor de los casos, vernos afectados lo menos posible . Por ejemplo, el diseño de los sistemas contra incendios, a lo cual se dedica un servidor, cuyos contratos se celebraron antes de esta emergencia sanitaria, se puede continuar mediante el home office sin problema. Pero un mantenimiento no puede ser trabajado de dicha forma.
Los sistemas contra incendio tal como lo entendemos, incluyen los sistemas existentes de supresión de incendios (base agua, agentes especiales, agentes limpios, etc.) así como los sistemas de detección, alarma y notificación. Todos estos sistemas inspeccionados y probados periódicamente, aunado al mantenimiento preventivo garantizan su correcto funcionamiento. No hay que olvidar que, desde el punto de vista legal, en México la NOM-002-STPS-2010 en el apartado 7. “Programa específico de seguridad para la prevención, protección y combate de incendios”, inciso g, se establece que se debe llevar el registro del cumplimiento de la revisión mensual y mantenimiento preventivo
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TESTIMONIO
anual realizado al equipo contra incendios y a los detectores. Es decir, esto aplica en aquellas instalaciones que sean consideradas como centros de trabajo, que de alguna manera son la mayoría: industria, centros comerciales, hoteles, restaurantes, escuelas, etc. En el ámbito de normatividad extranjera, el IFC (International Fire Code) y la NFPA (National Fire Protection Association) en sus códigos 1 (código de incendios), 101 (código de seguridad humana) y 5000 (código de construcción y de seguridad) establecen para los sistemas de rociadores, como requerimiento para garantizar su funcionamiento, la inspección, prueba y el mantenimiento. Entonces, además de ser una obligación legal el mantenimiento es una necesidad imperiosa por tratarse de sistemas que han sido diseñados e instalados para salvar vidas, de ahí su importancia y la necesidad de tenerlos en condiciones de operación con una cobertura total de instalaciones y no solamente de las actividades esenciales. Tomar la decisión de separar de sus actividades a las empresas que brindan mantenimiento, además de afectar económicamente a estas, de alguna manera pone en riesgo las propiedades de actividades no esenciales y las pocas personas que pudieran permanecer en ellas. ¿Cómo hacer para no suspender el mantenimiento a los sistemas contra incendio de las actividades no esenciales? Considero que se necesita crear conciencia en los usuarios: Primero, aunque las actividades tengan que parar, el riesgo de incendio no desaparece. En algunos casos hasta se incrementa por la falta de personas que detecten conatos y los extingan. Segundo, aquellas instalaciones que cuenten con sistemas de extinción automáticos. Estos, deben tener sistemas de supervisión a través de paneles de alarma, y ser supervisados por alguna persona con conocimientos en ellos, de tal forma que pueda detectar un mal funcionamiento. Tercero, que las instalaciones que cuenten con supervisión de los sistemas de extinción mediante sistemas de detección y alarma conectados a un panel, mientras estos funcionen adecuadamente y no presenten problemas, los sistemas estarán funcionales, a la primera señal de mal funcionamiento ya sea del sistema de extinción o del panel de alarma, igual que en el segundo caso, es necesario llamar a las empresas que les dan mantenimiento, las cuales deberán tener personal disponible para estos casos. En conclusión, el mantenimiento de los sistemas contra incendio en las actividades no esenciales es tan importante como en las que no lo son, porque los riesgos de incendio prevalecen en todo tipo de instalaciones.
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Además de ser una obligación legal, el mantenimiento es una necesidad imperiosa por tratarse de sistemas que han sido diseñados e instalados para salvar vidas.
Aunque las actividades tengan que parar, el riesgo de incendio no desaparece. En algunos casos hasta se incrementa por la falta de personas que detecten conatos y los extingan.
Gerente del Internacional Fire Safety Consulting (IFSC) de México. CEPI, SFPE.
COMUNIDAD
Introspección ante la CONTINGENCIA POR: VICTORIANO ANGÜIS TERRAZAS
La contingencia generada por COVID-19 ha generado una desestabilización global y en todos los frentes, que quizá no tienen precedentes en la época moderna, esto invita a pensar sobre lo que hemos construido y los rumbos elegidos.
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La zozobra causada por el problema de la pandemia es como una sombra que está impactando de manera significativa en la gran mayoría de los habitantes del planeta, mostrando la fragilidad de los humanos, por tal situación. A pesar de conocer el ciclo de vida natural del hombre, hablando en el sentido estricto de la palabra, se ha creado una incertidumbre severa con el solo hecho de no saber qué pasará, por ello, la necesidad imperiosa de hacer una reflexión para tratar de entender los motivos generadores de tal acontecimiento, por tanto, s2e requiere conocer el valor de la seguridad y la salud, vistas con un enfoque integral.
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Es posible que en el día a día anterior a esta contingencia, el concepto de seguridad se veía muy lejano e inclusive algunos no lo consideraban como algo compatible con su forma de vivir, sin embargo, lo que está ocurriendo a nivel mundial, en donde no existe distinción de clases ni estatus económico, hoy día esta cobrando factura por la falta de prevención en todos los aspectos, en donde los gobiernos han sido rebasados por la carencia de prevención, ejemplo más claro, hasta ahora, la soberbia de un gobierno estadounidense que actualmente se ve vulnerado en forma mucho más severa al de otras naciones, por ello, la necesidad de establecer estrategias globales para revertir el impacto, no solamente observado desde el punto de vista salud, sino social y económico. En este mismo sentido, los humanos requeríamos una lección severa para entender lo que hemos estado sembrando, bien por factores como la ignorancia, incredulidad, falta de oportunidades, pobreza extrema,
inconsciencia, falta de educación, desinterés, así pudiéramos mencionar más causas. Hoy día, tenemos la oportunidad de recomponer las costumbres y hábitos de comportamiento en todos los sentidos, en lo referido a la seguridad y salud, habría que comenzar a observarlos en un concepto integral que aborda y aglutina todas las disciplinas y especialidades avocadas a proporcionar las medidas de prevención, ellas han de brindar la calidad de vida requerida por las mujeres y hombres del planeta, tratando de asegurar integridad física y mental. Recordemos que la seguridad integral, es un término reconocido por los expertos de conducir la gestión de esta, por lo cual, al considerar la importancia de cada una de las disciplinas correlacionadas, las cuales contribuyen a los programas de salud, se entiende que las organizaciones de cualquier tipo, giro o actividad económica deberán modificar sus patrones de conducta, asumiendo su parte responsable, a través del establecimiento de nuevos estilos de vida, sin embargo, se debe comprender que la gobernanza de los pueblos requiere de líderes de opinión, lo cuales, deben rodearse de expertos en cada una de las áreas de competencia. Paralelamente, la fuerza de trabajo, deberá respetar los lineamientos marcados en la prevención de riesgos, considerando para tal fin, a los empleadores, los cuales, serán responsables de cumplir con sus obligaciones marcadas por ley y convicción, proporcionando condiciones adecuadas de trabajo, incluyendo para tal fin, las concernientes con la salud y seguridad. El sector educativo por su parte, debe de revisar sus cuadros educativos y volver a sus bases para establecer materias básicas para generar la inclusión de valores, hoy perdidos, y armonizar la vida de los profesionistas, sus familias y de la sociedad, esto como producto de los grandes avances de la ciencia, que han sido positivos, pero que han generado también una gran parte de la desintegración en todos los aspectos. Atendiendo lo anterior, todos los estratos de la sociedad deberán asumir nuevos estilos de vida, partiendo de la reflexión pueden considerar ciertas prácticas positivas que ayuden a estar preparados ante nuevas situaciones de
apremio, por ejemplo, evitando el desperdicio, la contaminación, el manejo de sus desechos, la separación de los mismos, reconsiderando su función ante la familia, la sociedad, entre otros. Considero que el camino es extremar precauciones, camino que debió tomarse tiempo atrás, pero que al tomarlo nos dará la posibilidad de avanzar esta etapa, sin embargo, habrá que considerar otros factores secuenciales a causa de esta pandemia, tales como, la incertidumbre, miedo, aspectos económicos, falta de alimentación, despidos, la misma enfermedad, por mencionar algunos, los cuales pueden desencadenar la inseguridad social, robos por necesidad, oportunismo, incremento de precios, desabasto, violencia, etc., ante ello, los gobiernos deberán actuar de inmediato, quizá con entrega de despensas básicas a la sociedad, sobre todo a los más desvalidos, o entrega de productos del campo antes de su descomposición, a través de un programa estratégico, para el caso de la ciudad de México, posiblemente por alcaldías, esto serviría para fortalecer al sector, en lo obviedad de ser pagado a los agricultores. Mi propuesta sigue en otras líneas, por ejemplo, deberá establecerse el deporte obligatorio, atención médica preventiva obligatoria, efectuar planes de integración familia-sociedad-gobierno, evitando con ello enfermedad e inseguridad, en la obviedad del fomento a la cultura. En suma, conseguir buena salud mediante la disciplina, con un equilibrio entre deporte y mente activa. Por último, debemos evitar los posibles estallidos sociales, esta raza joven ha demostrado que puede al paso del tiempo.
Presidente de AISOHMEX, profesor de seguridad industrial en la UNAM, asesor de la CONAE y presidente del Comité Técnico de Normalización Nacional para Productos de Proteccion y Seguridad Humana.
seguridad y salud, habría que comenzar a observarlos en un concepto integral que aborda y aglutina todas las disciplinas y especialidades avocadas a proporcionar las medidas de prevención, tratando de asegurar integridad física y mental. Mayo-Junio 2020
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ALTAVOZ
EL CORTO CIRCUITO EN LOS
INCENDIOS
El papel preponderante que juega la energía eléctrica en la cotidianeidad de nuestras vidas, es razón suficiente para poner foco en su desempeño y evitar que su mal uso e instalación provoquen incendios.
POR: ENRIQUE RODRÍGUEZ NOLASCO
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De manera reiterada, se ha dado la primacía a la instalación eléctrica, particularmente al “corto circuito”, como causa de incendios. Ciertamente, estos tienen participación en el total de eventos ocurridos, pero los análisis recientes del Consejo Nacional de Protección Contra Incendios (CONAPCI) y del Comité Nacional Permanente de Peritos en Prevención e Investigación de Incendios (CONAPPII) del CIME, muestra que la instalación eléctrica tiene una participación menor del 15% en el número total de incendios urbanos. Entonces, si no es el principal origen de incendio, ¿debemos dejar de prestar atención a la instalación eléctrica?
Desde luego que no. Aunque su participación en número de eventos no ocupa la primera posición, de acuerdo con la información estadística disponible; en el impacto económico, por el daño que causa a las instalaciones y efectos colaterales que genera, sí es la más relevante, con una participación superior al 50%. Esto se debe a que cuando hay un problema con la instalación eléctrica en áreas comerciales o industriales la cantidad de material combustible es mucho mayor que en una unidad habitacional, así como la cantidad de equipos y accesorios que se requieren de este servicio, trabajando en muchas ocasiones de forma ininterrumpida, con mayor exposición a riesgo, que se torna permanente, brindando relevancia al impacto.
Los propietarios o usuarios deben apoyarse en especialistas eléctricos o de seguridad para tomar las medidas preventivas necesarias y no esperar a que algo dañino suceda para corregir.
Parece contradictorio lo anterior, ya que las instalaciones comerciales e industriales requieren obligatoriamente una autorización de cumplimiento de normas muy estrictas en temas de seguridad (que incluye la instalación eléctrica), programas de mantenimiento y verificación. Entonces, ¿es un problema de normatividad, reglamentación o del usuario? La respuesta, basada en la experiencia y el análisis de los peritajes, es por falta de conciencia del usuario sobre el riesgo y peligro al que está expuesto por no tener instalaciones eléctricas seguras. En la instalación original, cuyo diseño es realizado por un especialista en la materia, se establecen criterios y normatividad en la
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construcción, su uso y mantenimiento. Esta información es usada para tramitación de licencias y permisos, que no siempre se aplican, ya que normalmente la construcción se deja en manos de un contratista que no necesariamente coloca los insumos con la especificación establecida, aplicando un erróneo sentido de ahorro. Aunque debiera haber una supervisión permanente del avance y cumplimiento de especificaciones de la instalación, esto tampoco siempre se cumple, con otro concepto de ahorro mal aplicado. Una vez que la instalación inicia su operación, es frecuente que las necesidades del día a día requieran modificaciones al sistema eléctrico, como puede ser una mayor cantidad de tomas de corriente (comúnmente definidos como contactos), colocar contactos múltiples que sean alimentación de una toma de corriente individual, cambio en las características (incluyendo capacidad) de los equipos o sistema de consumo, que no necesariamente se aplican con la revisión conjunta y adecuación del sistema eléctrico. Lo peor, es que en ocasiones, para solucionar la necesidad, se hacen instalaciones provisionales y fuera de norma técnica, que se convierten en definitivas. Otro aspecto, no menos relevante, es que consideramos las instalaciones eléctricas eternas. Dependiendo de las especificaciones de diseño, uso, mantenimiento y ubicación, el cableado eléctrico y los sistemas de seguridad, tienen una vida útil total de 15 a 25 años. Rara vez, pero muy rara, las instalaciones son renovadas para mantener su condición segura, y las fallas pueden derivarse por la culminación de su vida útil, los elementos o componentes de los aislamientos, se degradan y exponen, sin protección
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alguna para usuarios en la energía eléctrica con la que trabajan. Es increíble que se le dé más importancia a los aspectos estéticos de las instalaciones que a los de seguridad. Aunque hemos mencionado los temas como parte de las instalaciones comerciales e industriales por su mayor impacto en caso de un evento, todos y cada uno de ellos aplica para los casos habitacionales. Si las instalaciones eléctricas se construyen conforme a lo que dicta el diseñador, se mantienen y operan dentro de los limites establecidos por el diseño; si las modificaciones que requieran el día a día se hacen con la revisión, y en su caso, adecuación del sistema y se renuevan conforme el uso lo demande, los incendios por causa de la instalación eléctrica y por lo tanto, corto circuito, serán mínimos.
Si las instalaciones eléctricas se construyen conforme a lo que dicta el diseñador, y se mantienen y operan dentro de los límites establecidos por el diseño, los incendios por causa de la instalación eléctrica, o corto circuito, serán mínimos.
Para este fin, los propietarios o usuarios deben apoyarse en especialistas eléctricos o de seguridad para tomar las medidas preventivas necesarias y no esperar a que algo dañino suceda para corregir, si es que esto no es catastrófico. Siempre es más económico prevenir que reconstruir, y sobre todo, salvar vidas invaluables, no esperemos a que le suceda a una persona cercana. La energía eléctrica es primordial para nuestra vida diaria, entonces démosle la importancia que se merece, para que disfrutemos de su aplicación y permanezcamos tranquilos, sabiendo que por este tema, nuestras vidas y bienes están seguros. Confirmemos, con esta forma de actuar, que podemos vivir en ambientes seguros, evitando incendios por corto circuito.
Director general de Grupo Adypro. Perito valuador y de prevención. Miembro del Colegio de Ingenieros Mecánicos y Electricistas.
PORTADA
Afectaciones ambientales y de salud a causa de
INCENDIO POR: JUSTO ADÁMEZ
Proteger las actividades de nuestros clientes, con especial atención a la protección del medio ambiente gracias a las soluciones utilizadas en nuestros diseños, debe ser una prioridad para cualquier consultoría e ingeniería contra incendios. Fundamentos de la sostenibilidad
CEO en Ashes Fire
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La sostenibilidad hace referencia al uso consciente y proactivo de métodos que no dañan a las personas, al planeta o a los beneficios, dejando también un impacto positivo. Se identifica con aquellos caminos de progreso que satisfacen las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones. Dicho concepto se basa en el principio de consumo responsable, que significa, darle la importancia a evitar el desencadenamiento del siniestro contaminante, desde a elección
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de soluciones sostenibles que se basen en el cumplimiento de objetivos de protección, que dañen en el menor grado posible el medio ambiente. Esto se consigue con el entendimiento del riesgo a proteger, realizando una ingeniería a la medida, la elección eficiente de las soluciones y con el empleo de las tecnologías de protección adecuadas.
Los efectos del incendio Los efectos sobre el entorno engloban El efecto del humo y su dispersión en la atmósfera. La radiación térmica emitida por las llamas. Todo incendio afecta a las personas, la propiedad y el medio ambiente. En algunos casos, las pérdidas resultantes son extraordinarias, causando cientos de muertes,
daños generalizados a la propiedad, el paro total de actividades industriales e impactos significativos en el medio ambiente. Más a menudo, los incendios pueden causar una única víctima o afectar a una parte limitada de la actividad, aunque los efectos siguen siendo muy significativos para los afectados y conjuntamente son importantes.
Los efectos sobre la salud
Cuando se queman los materiales en un incendio se desprenden partículas y gases que vemos en forma de humo y que resultan tóxicos para nuestro organismo y el medio ambiente. Las partículas de humo incluyen sustancias y ácidos muy peligrosos y corrosivos.
Las partículas pequeñas son capaces de llegar a lugares más profundos del aparato respiratorio y ahí producir alteraciones de mayor consideración, e incluso inducir procesos de tipo asmático. Estas partículas pasan libremente por las membranas de las células del tejido adiposo, donde se almacenan y donde pueden permanecer por largo tiempo. Las partículas de mayor diámetro quedan atrapadas en el material mucoso del aparato respiratorio, inducen el reflejo de tos y se eliminan con cierta facilidad.
Ocasionalmente los humos arrastran partículas en combustión que, además, pueden tener el efecto de propagar el incendio en numerosos entornos, especialmente industriales y logísticos.
Este efecto es consecuencia de que los compuestos derivados de la combustión se incorporan a nuestro organismo por cualquier vía, ya sea cutánea, conjuntival o respiratoria. Un incendio afecta principalmente al sistema respiratorio, en segundo lugar, a las partes superficiales del cuerpo, principalmente los ojos.
La inhalación de gases calientes que provoca la conflagración tiene también ciertos efectos perjudiciales en el cuerpo humano, que pueden producir úlceras en las vías respiratorias y dilataciones alveolares irrecuperables.
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El efecto irritante del humo en los ojos, obliga a cerrarlos por acto reflejo, impidiendo el abandono de la zona afectada, limitando en gran medida la evacuación de las personas de las áreas afectadas. El humo produce irritación e inf lamación de las conjuntivas, lo que común mente conocemos como conjuntivitis tóxica, que pueda causar hasta úlceras córneas y con esto disminuir su visión de manera severa. Como contexto y ventana hacia lo que sucede apuntaré el siguiente dato, más de dos tercios de las muertes por incendios se deben a lesiones por inhalación.
Impacto ambiental Las principales causas de la contaminación del aire están relacionadas con la quema de combustibles fósiles (carbón, petróleo, gas). La combustión de estas materias primas se produce principalmente en los procesos ligados a la actividad industrial y al transporte por carretera, pero también, aunque con menor grado de incidencia y no por ello despreciable, se produce a causa de los incendios. Desde la perspectiva de impacto ambiental y por las características de los humos, los incendios “no forestales” tienen efectos altamente contaminantes sobre el medio ambiente, derivado principalmente de: Contaminación del aire. Contaminación del agua. Agotamiento de la capa de ozono = Calentamiento global.
Más de dos tercios de las muertes por incendios se deben a lesiones por inhalación. Contaminación del aire Se denomina contaminación del aire a cualquier situación en la que una sustancia que sea introducida por acción humana en la atmósfera genere un impacto perjudicial, tanto para el medio ambiente en general como para la salud de las personas.
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Entre todas estas sustancias, quizá la más conocida es el dióxido de carbono, que es el que se produce tras la quema de combustibles fósiles y desechos sólidos, pero sustancias contaminantes derivadas de un incendio también son el monóxido de carbono, el dióxido de azufre, el metano, el monóxido de nitrógeno, el clorofluorocarbono (CFC) y similares. El ácido de azufre es especialmente contaminante al ser el responsable directo de las nubes tóxicas. Es sabido que el dióxido de carbono (CO2) es uno de los principales responsables del cambio climático. Otras sustancias de las que se habla poco, pero son igual de dañinas son los CFC y los gases HFC o hidrof luorocarbonos, que son un tipo de gases fluorados con efecto invernadero. La disparidad de materiales y sustancias químicas presentes en las industrias es enorme. En caso de incendio, la diversidad hace que la cantidad de contaminantes y partículas de ceniza y humo sea de relevante consideración, cuando además pueden transportar productos químicos nocivos hasta decenas de kilómetros, impedir la respiración en regiones próximas y obligar a la evacuación de las zonas aledañas.
Contaminación del agua La forma habitual de combatir los incendios industriales con el uso de grandes cantidades de agua o espumógenos puede contaminar el agua. En las industrias encontramos entornos llenos de productos electrónicos, productos químicos industriales, baterías, pinturas y plásticos, por citar algunos. Sus cenizas y escombros son finalmente transportados a desagües y mayoritariamente acaban en los ríos. Las cenizas disminuyen el oxígeno del agua y contribuyen al crecimiento de cianobacterias. Cuando la ceniza, mayormente carbono orgánico, llega al agua, es biodegradada por bacterias en el agua, que en el proceso consumen el oxígeno disuelto, dificultando la sobrevivencia de la fauna piscícola que requiere niveles altos de oxígeno disuelto en el agua.
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Así mismo, el exceso de este sedimento en el agua daña las tuberías y, si llega a las plantas potabilizadoras, también tiene un efecto negativo en estas instalaciones al colmatar los filtros.
Calentamiento global El papel del ozono es el de filtrar aproximadamente el 99% de las radiaciones ultravioleta que nos llegan del sol. La mayor parte del ozono se encuentra en lo que se conoce como baja atmósfera, entre los 30 y los 20 km de altura, llamado comúnmente capa de ozono. Cuando decimos que esta capa se agota, nos referimos al adelgazamiento de la misma como resultado de la acción de los compuestos llamados holocarbonos, clorof luorocarbonos o CFC. Además de las reacciones naturales, hay otras en las que intervienen compuestos que contribuyen a la a la destrucción del ozono. Aquí es donde aparecen los compuestos CFC. Estas son moléculas sintetizadas, muy poco activas químicamente, y que, en ese sentido, cuentan con un tiempo muy largo de permanencia en la atmósfera (de 100 a 200 años). Cuando una molécula de CFC llega a la estratosfera se puede disociar por radiación ultravioleta, liberando átomos de cloro que reaccionan con el ozono contribuyendo a la destrucción del mismo. En esta reacción catalítica queda libre un átomo de cloro, por lo que la acción destructora se multiplica. Además del cloro hay otros átomos o iones que producen el mismo efecto destructivo. ¿Dónde se producen los gases CFC y HFC en relación con los incendios? Los encontramos en las industrias, en sus sistemas de refrigeración, embalajes, espumas aislantes, pinturas, disolventes, liberándose en grandes cantidades cuando se queman. También nos encontramos con el hecho de que en muchas industrias y construcciones aún se mantienen como sistemas de extinción automáticos, antiguos sistemas basados en gases HFC: FM-200 (HFC-227) y FE-13 (HFC-23) como más comunes. Son agentes de extinción gaseosos con un potencial de calentamiento global mucho más elevado que CO2 y regulados por el Protocolo de Kioto sobre gases de efecto invernadero. Hoy en día, deberían ser remplazados por alguno de los sistemas actuales o soluciones técnicas alternativas de eficacia contrastada.
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El enfoque principal para evitar el impacto de los incendios en el medio ambiente debería ser la prevención, centrada en evitar que se desarrollen.
Plan de acción global El enfoque principal para evitar el impacto de los incendios en el medio ambiente debería ser la prevención, centrada en evitar que se desarrollen. De tal manera que, mientras más gastemos en prevención, menos necesitaremos gastar en la gestión posterior al desastre. No solo se trata de ocuparse de las nuevas construcciones, también es necesario adecuar las industrias y construcciones existentes a la realidad de sus riesgos actuales, haciéndolas más resistentes ante un incendio. Ello requiere la voluntad de sus titulares, a efecto de protegerlas siguiendo criterios lógicos, que den ventaja a la propia industria y al medio ambiente al mismo tiempo. Con el fin de apoyar este proceso, han surgido recientemente plataformas como PLAN SAVE 360, que proporciona modelos e instrumentos de financiación innovadores, basados en fórmulas de renting, que permite a las industrias abordar de manera inmediata el desarrollo de medidas eficaces y eficientes para evitar los daños propios y al medio ambiente.
Por las características de los humos, los incendios “no forestales” tienen efectos altamente contaminantes sobre el medio ambiente.
NORMATIVIDAD
CERTEZA, SEGURIDAD Y EFICIENCIA POR: JOSÉ LUIS DE LEÓN
La validación y certidumbre de funcionalidad en cada componente de cualquier sistema contra incendio, debe ser dada por una tercería de parte, esto implica conceptos como listado y aprobado de los que echará mano este ente verificador.
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En ocasiones, cuesta entender que un sistema instalado para proteger la vida de las personas y asegurar la continuidad operativa de los negocios, quede como un simple adorno de tubos que no salvaguarda lo que debiera al momento de un siniestro. Y la realidad es que el sistema funciona, pero quizá alguno de sus elementos no contaba con las características necesarias para ser parte del mismo. Y es ahí, donde se vuelve fundamental el tema de la calidad de sus componentes. En el sector de la protección pasiva, detección, alarma, combate y supresión de incendios el tema es de suma importancia, como lo es en otros sectores de productos y servicios con los que convivimos diariamente. De la misma manera que esperamos que un medicamento, un automóvil o un electrodoméstico cumplan su función con seguridad y eficiencia, así también los equipos que tienen el propósito de proteger la integridad de las personas en medio de situaciones de riesgo, en este caso incendios, deben ser seguros, confiables y cumplir adecuadamente la función para la que fueron diseñados, fabricados e instalados. Cada producto utilizado en el sector tiene como propósito proteger la vida en caso de incendio, en esa lógica, debe estar bien ensamblado y construido con materiales de buena calidad; adicionalmente, existe el tema de aprobaciones y listados que va más allá de esto. Es
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decir, cada componente de un sistema contra incendio es parte de un sistema más complejo formado por equipos interrelacionados, de diferentes características, funciones, marcas y fabricantes. Ante tal complejidad y a fin de asegurar que los componentes se encuentran diseñados y construidos para un uso efectivo, y que se desempeñan como deben hacerlo, es necesario involucrar a un tercero de parte. Dicha figura debe tener la capacidad de evaluar la ingeniería del componente, producto o material, así como definir y realizar pruebas críticas de los mismos, llevar a cabo inspecciones periódicas a los procesos de su fabricación y certificar el apego de estos a una serie específica de requerimientos. Ante esta necesidad, nacen los conceptos de listados y aprobaciones. Acercándonos a la literatura y a los referentes, la NFPA 13 define el término “listado” como todos aquellos equipos, materiales o servicios que se encuentran incluidos en una lista publicada por una organización. Dicha organización, según la NFPA, debe tener tres características. Primero, ser aceptable para la Autoridad con Jurisdicción, o AHJ por sus siglas en inglés, involucrada en el proyecto. Segundo,debe mantener inspecciones periódicas de la fabricación del equipo,
de materiales listados, o una evaluación periódica de los servicios ofrecidos, a fin de certificar que tales equipos, materiales o servicios cumplen con los estándares designados y satisfacen pruebas específicas efectuadas para asegurar que se desempeña el propósito esperado. Tercero, debe ser un tercero de parte, es decir, sin relación con el fabricante, el usuario o con el diseñador/instalador. Si bien algunos estándares como la NFPA 13, no son explícitos en este punto, otros como la NFPA 1, 20 y 72 sí manifiestan en los anexos y comentarios que el marcado de productos o el listado de materiales y componentes debe conducirse por una agencia de certificación externa o tercera. También varias publicaciones dentro del sitio de NFPA hablan del valor de la certificación de productos por terceros refiriéndose específicamente al listado de materiales y componentes. Como la organización encargada del listado debe ser aceptable para la AHJ es necesario definir también lo que es una AHJ, pues esta no se refiere a cualquier individuo. NFPA la define como una organización o individuo responsable de hacer cumplir los requerimientos de un código normativo o un estándar de referencia. Esta figura puede ser una compañía aseguradora, un oficial o inspector de alguna agencia federal, estatal o municipal encargada de la seguridad del centro de trabajo. La mayoría de los componentes de un sistema contra incendio que son críticos para su correcto desempeño, deben ser listados según NFPA. Esto incluye cierta tubería, ciertas conexiones, algunas válvulas específicas como las de alarma o medidores de agua, algunos aditamentos como los medidores de flujo, los componentes de soportería que tienen contacto directo con la tubería o con la estructura, rociadores, equipos de bombeo, y dispositivos de alarma, entre otros. Por otra parte, la misma NFPA define el término “aprobado” simplemente como algo aceptable para la AHJ. Es decir, para NFPA no es necesario que un producto aprobado sea parte de una lista donde una organización
lleva a cabo auditorías constantes sobre el diseño, fabricación y desempeño de tal producto. En este punto, es importante notar que por estos mismos estándares un componente aprobado no es un sustituto de un producto listado. Los componentes que no afectan de manera adversa el funcionamiento de un sistema contra incendio no requieren ser listados por NFPA, pero generalmente requieren ser aprobados. Algunos ejemplos de componentes que la NFPA requiere aprobados son: la toma siamesa para uso de bomberos, filtros para líneas de succión de bombas que se abastecen de lagos o fuentes expuestas y también algunos componentes de los sistemas de rociadores como manómetros, válvulas de dren y válvulas de prueba. También es importante saber que la NFPA no aprueba, inspecciona o certifica ningún material, instalación, procedimiento o equipo y tampoco aprueba o evalúa a los laboratorios que se dedican al listado de productos y componentes a través de pruebas periódicas. Esto para evitar cualquier tipo de mal entendido o situación de engaño ante reconocimientos sin valor. A la par, existe otra definición de aprobado fuera de los estándares NFPA que debemos también conocer. La compañía aseguradora FM Global define el término aprobado como un producto o servicio que ha cumplido los requerimientos de aprobación de esta misma organización. Tal producto o servicio se considera entonces “aprobado FM” (FM Approved). Estrictamente hablando la aprobación FM de un producto o servicio es equivalente a lo que NFPA considera como “listado” pues todo producto o servicio que es aprobado FM aparece en una lista llamada Guía de Aprobación (Approval Guide) donde el mismo FM Global funge como el tercero de parte encargado de la evaluación y pruebas periódicas de los mismos. Dependiendo del estándar bajo el cual se realice el diseño y la instalación de un sistema contra incendio (NFPA o FM) se conocerán las características del equipo o material que es requerido usar. Por ejemplo, NFPA pide que un manómetro sea aprobado, es decir aceptable para la AHJ, pero por su parte FM pedirá que un manómetro sea aprobado FM, es decir que se encuentre listado dentro de su Guía de Aprobación. Otro ejemplo lo vemos con las tuberías para sistemas de rociadores, las cuales por NFPA deben cumplir con ciertos estándares de fabricación o ser listados, pero que Ingeniero industrial por FM deben ser aprobadas FM. Con esto, en sistemas, con una Maestría en es importante saber que independientemente ciencias y sistemas del listado de un producto, dicho listado no de manufactura garantizará que tal producto se desempeñe por el Instituto como es requerido cuando se encuentra diseTecnológico y de ñado o instalado fuera de su listado. Por ejemEstudios Superiores plo, un rociador montante no está listado ni de Monterrey. aprobado FM para ser instalado de manera NICET nivel IV. colgante, así que en esa posición no funcionará como es requerido y esperado.
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NORMATIVIDAD Para dejarlo claro, es importante identificar que los términos “aprobado” y “aprobado FM”, son pues, términos muy diferentes. El término “aprobado” por NFPA no implica ninguna lista y por tanto ninguna evaluación periódica hecha por un tercero. Un producto “aprobado FM” es evaluado periódicamente para asegurar conformidad con ciertos requerimientos de diseño, fabricación o desempeño y aparece dentro de una lista que así lo demuestra. Ahora bien, FM Global y UL (Underwriters Laboratories) son dos de los organismos más grandes del mundo que se dedican a probar, evaluar y certificar productos de uso contra incendio, con más de 100 años haciéndolo. Ambos organismos listan también otros componentes no relacionados directamente con los sistemas contra incendio, pero sí relacionados con la seguridad del centro de trabajo, tales como elementos constructivos del edificio, recubrimientos, aislamientos, así como algunos equipos específicos a fin de minimizar el riesgo de daño en caso de incendio. Estos dos listados, UL y FM, son los más comunes para el sector de incendio en Estados Unidos. En México, lo son para proyectos que se diseñan bajo los estándares de NFPA o de FM Global. Pero existen otros organismos que se dedican al listado de productos de uso contra incendio como VdS para ciertas partes de la Unión Europea o CCC en China. En México, la organización UL cuenta con un acuerdo de reconocimiento mutuo para la aceptación de resultados de la evaluación de la conformidad con base en las Normas Oficiales Mexicanas, aunque por el momento, no en productos relacionados con sistemas contra incendio, solo para ciertos artículos eléctricos y electrodomésticos. Cada día se vuelve más común en nuestro país el diseño e instalación de productos para uso contra incendio listados UL o aprobados FM, e incluso muchos esos productos cumplen con ambas credenciales. Estos, generalmente llevan una marca física en su exterior para demostrarlo. Sin embargo, debido a la creciente falsificación de este tipo de marcados físicos es importante confirmar que los productos efectivamente han cumplido los requerimientos de su listado o aprobación acudiendo directamente a las respectivas listas públicas.
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Resumiendo, la habilidad de un sistema de protección pasiva, detección, combate o supresión de incendios, para funcionar como se espera depende de varios factores incluyendo un buen diseño, una buena instalación y un buen mantenimiento. Pero también requiere del uso de componentes eficientes y confiables, como algo fundamental para su desempeño. Para tal fin, es necesario requerir y utilizar productos que cuentan con una evaluación de conformidad que representa una serie de requerimientos preestablecidos y probados por décadas, llevada a cabo de una manera constante y periódica por un laboratorio especializado sin relación alguna con distribuidores, fabricantes, diseñadores o instaladores de estos sistemas o componentes. Esta es la gran importancia del listado de productos de uso contra incendio. ¿Qué es lo que sigue para México? En nuestro contexto, el foco indica lo siguiente, primero, contar con normas y estándares que garanticen un diseño y una instalación de sistemas contra incendio más robustos y que ofrezcan una mejor protección que la ofrecida por los sistemas de operación manual o aquellos que no se diseñaron o instalaron bajo los estándares internacionales con eficiencia comprobada por más de un siglo. Los avances en el desarrollo de normas mexicanas han sido muy importantes en los últimos 5 años y traerán un enorme beneficio para la seguridad contra incendio: a) NMX-S-066-SCFI-2015 - Seguridad - Equipo De Protección Contra Incendio – Sistemas Fijos – Sistemas de Rociadores Auto máticos – Diseño e Instalación, actualmente vigente. b) PROY-NMX-S-069-SCFI-2019 - Seguridad- Sistemas de Alarmas de Incendio y Señalización- Aplicación, Instalación, Inspección, Pruebas y Mantenimiento. Actualmente en proceso de consulta pública. c) PROY-NMX-S-XXX-SCFI-2019 – Seguridad – Bombas Esta cionarias Contra Incendios – Diseño e Instalación. Próxima a publicarse en el Diario Oficial de la Federación. Segundo, contar con productos y componentes de sistemas contra incendio de mayor y comprobada confiabilidad, es decir, productos diseñados, fabricados y evaluados bajo el escrutinio constante de un tercero calificado, con la experiencia e infraestructura para llevar a cabo todas las pruebas e inspecciones necesarias de manera imparcial. Cualquiera de estos dos grandes pasos no tiene sentido sin el otro, pues ambos son indispensables.
PANORAMA
Sistemas de
alertamiento ante el riesgo POR: RAMÓN DOMÍNGUEZ BETANCOURT
La intervención humana dentro de una acción siempre será proclive a la equivocación, esto promueve la automatización de sistemas de alertamiento a través del desarrollo tecnológico.
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En la época de la “Familia Nostra”, a principios de la República Romana, existía un grupo de esclavos apostados en las murallas para observar posibles incendios. Posteriormente, se creó un cuerpo militar integrado por siete cohortes, “Los Vigiles” (Los Vigías), ideado por Marco Licinio Craso en el año 60 a. de c., durante el Imperio Romano, para realizar las funciones de bomberos y policías en la ciudad. Desde entonces y hasta nuestros días, han pasado más de dos mil años y se sigue en la búsqueda de la mejor forma de alertar la presencia de un incendio. Durante todo ese tiempo, exceptuando la Edad Media, ha habido grandes avances. Pero estos, han sido más notorios y rápidos en los últimos 50 años, gracias al uso de modernas tecnologías. Parte de este avance se ha manifestado en la instrumentación industrial, que no es algo distinto de los sistemas de
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detección, alertamiento y señalización. En el último medio siglo, por ejemplo, se desarrolló el control distribuido para las plantas de proceso, a fin de tener un registro más automatizado y preciso de los trabajos que ahí se realizan. Esto se dio, sobre todo, después del incidente de la central nuclear de Three Mile Island, el 28 de marzo de 1979 en Pensilvania, Estados Unidos. En esa ocasión, un error humano provocó un descontrol que se tardó mucho tiempo en corregirse. Sin embargo, si se hubiera permitido que el CPU (Unidad Central de Procesamiento) de una computadora, detectara y corrigiera el error, este habría reducido el tiempo de respuesta a unos 30 segundos. Además, se hubiera evitado dejar descubierta la parte superior del núcleo, que les llevara 10 años desalojar la burbuja de gas radiactivo que se formó, liberando 2 millones 500 mil Ci de radiación y pérdidas por cerca de mil millones de dólares. Del desarrollo de la instrumentación industrial para reducir estos riesgos a valores aceptables ha aparecido una nueva área en la seguridad, que es la “Administración de Riesgos”, y como una de sus herramientas, el análisis de riesgos, con todas las metodologías cualitativas y cuantitativas para evaluar el valor de los riesgos, a fin de determinar si son aceptables o inaceptables, en cuyo caso se establecerán medidas de
mitigación que hagan que el riesgo adquiera valores aceptables. Cuando se analizan los sistemas actuales de detección, alertamiento y señalización de fuego, no distan mucho los sistemas de instrumentación industrial, sino que han tomado muchos de sus avances para adaptarlos a sus funciones, ya que, en principio ambos funcionan de igual forma. Lo mismo es la detección, alertamiento y señalización de fuego. Lo que varía es que la respuesta que se tiene en los actuadores, que realmente funcionan como interfases, son del tipo encendido-apagado (on-off); en cambio, en el Sistema Básico de Control del Proceso (BCPS) la respuesta de los actuadores puede ser proporcional a la desviación de la variable, pero el lazo de control es igual. En los sistemas de detección, alertamiento y señalización de fuego las otras diferencias con un BCPS se encuentran en que no se tienen que definir tantas variables entre sensores y actuadores, como podría ser la banda proporcional o la velocidad de corrección o tiempo de respuesta (rate), sino que solamente se tiene un punto de calibración (set point) y un solo valor de respuesta (on-off) en un determinado tiempo de respuesta, para que opere el sistema de supresión de incendio. Sin embargo, el problema del BCPS es que, al final de cuentas, está supervisado por humanos que tienen que tomar una acción y, se ha determinado que en los países del primer mundo, donde un ser humano bien capacitado y descansado, posee una confiabilidad en su toma de decisiones durante los primeros 10 minutos, de 1 X 10-2, lo que representa que de 100 veces que realice esa acción en una se va a equivocar. En la práctica este es un valor de confiabilidad muy bajo, en otras palabras, un riesgo muy alto con un valor inaceptable. Ante esta situación, la instrumentación ha buscado la forma de reducir el riesgo humano, no dependiendo de él, y se han creado Sistemas Instrumentados de Seguridad (SIS) que tienen por objeto actuar cuando el humano no toma la decisión esperada o se equivoca de decisión, es un sistema que está por encima de los humanos y, evitar así otro incidente como el de Three Mile Island. Esto ya lo estamos viendo en nuestra vida diaria, como en los vehículos que paran automáticamente al detectar un obstáculo sin que el humano toque el pedal del freno. Como consecuencia de buscar la reducción del valor de los riesgos, ya que no se puede llegar a cero, la tecnología de la instrumentación industrial ha venido a desarrollar el concepto de “Capas de Protección” como se muestra en el esquema anterior, en donde el Safety Instrumented System (SIS) se encuentra por encima de los humanos. Este concepto permitió el desarrollo de una herramienta para evaluar en forma semicuantitativa los riesgos, llamada LOPA (Layer of Protection Analysis) (Análisis de Capas de Protección) que permite estimar el valor del riesgo y la reducción de este hasta llevarlo a un valor aceptable.
El SIS tiene como objetivo que la falla humana lleve a la instalación a una condición segura como sistema de instrumentación que es, y cuenta con una serie de dispositivos de mitigación, unos pasivos y otros activos, quedando dentro de éstos últimos los sistemas de detección, alertamiento y señalización de fuego, por lo tanto, pueden ser considerados como parte del SIS, en consecuencia, se puede calcular el valor del riesgo que van a mitigar y el valor de mitigación del riesgo, lo que proporciona un argumento financiero para su instalación. Sin embargo, al ver los sistemas de detección, alertamiento y señalización de fuego como parte del SIS, se tienen que tomar en cuenta los requisitos que tienen que cumplir sus componentes como y dado que tiene “Funciones Instrumentadas de Seguridad” (Safety Instrumented Functions) (SIF) deben cumplir con las Normas ISA S84.01 (ISA, 1996), IEC 61508 (IEC, 1998) e IEC 61511 (IEC, 2001). Por lo tanto, como todo elemento del SIS, los de un sistema de detección, alertamiento y señalización de fuego tienen que estar certificados en su “Probabilidad de Falla en la Demanda” (Probability of Failure on Demand) (PFD), lo que lleva a los “Niveles de Seguridad Integral” (Safety Integrety Level) (SIL) que se clasifican como se muestra en la tabla 1.
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PANORAMA
Tabla 1 Niveles de Seguridad Integral
Probabilidad promedio de falla por año (modo de baja demanda)
SIL 4
10-5 y 10-4
100000 a 10000
10-9 y 10-8
SIL 3
10-4 y 10-3
10000 a 1000
10-8 y 10-7
SIL 2
10-3 y 10-2
1000 a 100
10-7 y 10-6
SIL 1
10-2 y 10-1
100 a 10
10-6 y 10-5
Actualmente en los SIS para plantas de proceso se está pidiendo que todos los elementos cumplan con SIL 2 lo que representa la certificación correspondiente, redundancia en sensores, actuadores y controladores lógicos de todos los lazos de control y barreras entre circuitos que garanticen que la falla en uno de ellos no afecte a otro. El empleo de SIL 4 se ha dejado para las centrales nucleares solamente, debido a la complejidad de la arquitectura de la instrumentación. En consecuencia, los sistemas de detección, alertamiento y señalización tienen que irse adaptando a estas reglas si se quiere que se adapten a SIS pudiendo convertirse en una SIF del SIS iniciadora del protocolo para llevar a condición segura a la instalación. Estas condicionantes de los sistemas de detección, alertamiento y señalización han permitido que desde 1997 el Departamento de Defensa de los EUA iniciara el desarrollo de lo que ahora se conoce como “Sistemas de Notificación Masiva” (Mass Notification Systems) (MNS), aunque en inicio se pensó en la notificación e instrucción para el personal de una instalación bajo la amenaza terrorista de explosivos y, en busca de una solución el Departamento de Defensa, publicó el documento Unifide Facilities Criteria 4-02101 (UFC) en donde se establece el diseño y operación de MNS para instalaciones militares. Conforme se fue extendiendo la necesidad a los interesados en el Departamento de Defensa, la NFPA lo tomó e incluyó, cambiando incluso el nombre de la NFPA 72 “Código de Alarma de Incendio, y Señalización”. La MNS se puede resumir en la siguiente forma:
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Factor de reducción de riesgo
El propósito de la notificación masiva es proteger la vida indicando la existencia de una situación de emergencia e instruyendo a la gente de la respuesta y acción necesarias que se deben tomar. La forma de reducir el riesgo humano, es no dependiendo de él, y se han creado Sistemas Instrumentados de Seguridad (SIS) que tienen por objeto actuar cuando el humano no toma la decisión esperada.
Ingeniero químico por la UNAM, Perito en seguridad e higiene industrial, certificado CEPI.
Probabilidad promedio de falla por año (modo de alta demanda)
“Notificación masiva y MNS proporcionan en tiempo real información e instrucciones a las personas en un edificio, área, sitio o instalación usando comunicaciones con voz inteligible, señales visibles, texto y gráficos y, posiblemente señales táctiles u otros métodos de comunicación. El propósito de la notificación masiva es proteger la vida indicando la existencia de una situación de emergencia e instruyendo a la gente de la respuesta y acción necesarias que se deben tomar”. Para la Underwriters Laboratories (UL) en su Norma UL 2572 define el Sistema de Comunicación de Emergencia/Sistema de Notificación Masiva como: “Una configuración de componentes e interfaces que son usadas para comunicar información a los ocupantes de un edificio, área, sitio u otro espacio acerca de una condición de emTergencia”. Los sistemas pueden consistir de equipos que pueden reproducir voz viva o mensajes de voz grabados, tonos e indicadores visuales tales como luz estroboscópica y letreros luminosos. Como se verá, ya se les está pidiendo a los sistemas de detección, alertamiento y señalización que hagan algo más y, cada día, se está más cerca de lo planteado al inicio del presente artículo, acercando a que estos sistemas se vuelvan un elemento de los SIS y sirvan, no solo para operar medidas de mitigación, si no sean la señal de inicio para que el SIS lleve a condición segura a la instalación.
DESDE LA ÓPTICA DEL USUARIO
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POR: ROBERTO ZALDIVAR SACRAMENTO
por laseguridad
Airbnb, empresa líder que conecta viajeros a través de interacciones persona a persona, ha decidido fortalecer la seguridad de sus espacios mediante una alianza comercial con EXTIN FLAM. 40
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Si hay algo que se mueve a gran velocidad y avanza de manera incontenida, es la tecnología, a la que se han sumado diversas herramientas como la conectividad; fusión que ha permitido obtener e impulsar nuevos modelos de consumo. Naturalmente, esto implica un cambio entre el producto o servicio y la relación que éste tiene con la persona que ha generado la necesidad de adquirirlo.
Ejemplo de ello es la denominada economía colaborativa o consumo colaborativo, sustentado en alquilar, prestar, comprar o vender productos y servicios en función de necesidades específicas; que puede ser desde reclutamiento de personal en línea, hospedaje ofrecido de persona a persona, coche compartido y transmisión de música o video, y que hasta la fecha han integrado un mercado de alrededor de 15 mil millones de dólares en los EE.UU., con una proyección de incremento en 22 veces hasta alcanzar 335 mil millones de dólares en 2025, según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). Esa tendencia de crecimiento descrita en el párrafo anterior también puede ser observada en el mercado mexicano. Durante el 2019, 951,200 viajeros llegaron a la Ciudad de México y se hospedaron en un espacio ofrecido a través de Airbnb. Actualmente, la plataforma que conecta viajeros en busca de experiencias únicas, cuenta con una oferta de alojamientos de más de siete millones de espacios, en cerca de 220 mil ciudades pertenecientes a 191 países y regiones. Airbnb aprovecha su plataforma para empoderar financieramente a millones de personas en el mundo, dándoles la posibilidad de
que obtengan un beneficio económico de las propiedades o el espacio extra con el que cuentan. Esto los convierten en emprendedores de la hospitalidad, y con ello, también en responsables de las condiciones de seguridad mínimas para los huéspedes que alojan. Las acciones y medidas en favor de dicha seguridad se dan en diversos rubros, una de ellas, implica el interior de los espacios habitables, y puede ser tan robusta como el propio anfitrión lo decida, estableciendo acciones preventivas en áreas como la detección de incendios. Para ello, hay empresas especializadas en México que tienen toda la trayectoria y conocimientos necesarios para ser un excelente diseñador, instalador, asesor o proveedor de equipos y sistemas contra incendio. Tal es el caso de EXTIN FLAM, empresa líder en el sector con más de dos décadas de presencia en el área de seguridad a través de la fabricación de extintores y señalización industrial. Cada equipo fabricado por EXTIN FLAM cuenta con los más altos estándares de calidad regidos por los lineamientos de las Normas
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Oficiales Mexicanas NOM-100-STPS-1994 y NOM-104-STPS-2000, haciendo de ella, una empresa confiable para la extinción de fuegos. Además, son distribuidores de marcas de reconocido prestigio a nivel internacional.
Motor de espacios seguros Ante todo lo anterior, generar estos contextos brinda la posibilidad de poner en la mesa el alcance de un sector o actividad económica, permite además, observar con lupa la importancia de una compañía, sus actividades y aportaciones que terminan impactando en la sociedad.
Mediante el programa casa segura se da la colaboración entre Airbnb y EXTIN FLAM, permitiendo que los anfitriones sean informados, asesorados y abastecidos en materia de ACCIONES preventivas y mitigación de incendio. De esa manera, el programa que puedes consultar en www.casasegurabyairbnb.com, es una iniciativa de colaboración entre estas dos empresas que ha de generar valor social, permitiendo que los anfitriones de Airbnb sean informados, asesorados y abastecidos por EXTIN FLAM en materia de medidas preventivas y de mitigación de incendio. Dicha iniciativa, cuenta con algunas reuniones informativas, en las que el equipo más calificado de la empresa contra incendio enseña a los anfitriones de la firma de arrendamiento persona a persona, a conocer los detectores de humo, identificar sus sonidos, su funcionalidad y las mejores prácticas para su instalación en los espacios adecuados de los hogares ofertados.
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escenarios, como sismos, incendios, ciclones, entre otros. Además, a través de su sitio oficial brinda una serie de infografías que ofrecen información sobre los mismos rubros. Por otra parte, Airbnb ofrecerá de forma gratuita un detector de monóxido de carbono para sus anfitriones en México; esperan entregar en el primer semestre del año cerca de dos mil unidades.
Durante una de estas reuniones, el equipo EXTIN FLAM recalcó la importancia de saber los lugares en los que no es recomendable instalar los detectores de humo, para evitar falsas alarmas: Sitios en los que se genera vapor de agua, como el baño o la cocina. Cerca de las aberturas para ventilación, calefactores o radiadores. En el garaje, donde los gases del tubo de escape de los carros podrían dar lugar a falsas alarmas.
Es importante destacar que todas esas medidas forman parte de una estrategia mayor, en la que Airbnb pretende incrementar su seguridad en diversas aristas, y para ello, ha realizado una inversión de 150 millones de dólares a nivel global. En suma, esta sinergia entre EXTIN FLAM y Airbnb permitirá que estas interacciones de consumo colaborativo, específicamente en la renta de espacios persona a persona, cuente con lugares seguros para los ocupantes y una garantía de derrama económica para los dueños de los espacios al aumentar la calidad de la experiencia brindada.
Los detectores de humo deben instalarse al menos a 30 cm de las lámparas. La demostración incluyó la familiarización con el detector y se dio la explicación para su activación, “Coloque las pilas y vuelva a poner la tapa que las cubre. Utilice el botón de prueba para comprobar si el detector de humo funciona. Coloque en el lugar de su casa con las mejores condiciones para ello. No olvide cambiar las pilas siempre que sea necesario. Todos los detectores de humo tienen una señal de advertencia cuando las pilas están a punto de agotarse”. Esto genera, sí, una alianza comercial, pero también la unión de dos empresas líderes en su ramo, en la búsqueda de garantizar la seguridad de las personas en los millones de espacios con los que trabajan, concientizando además a cada uno de los anfitriones, y ellos a su vez, a sus huéspedes, generando círculos virtuosos de prevención. El programa cuenta con una campaña educativa en prevención de accidentes validada por el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) y por la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil. Para ello se establecerán mecanismos de trabajo coordinado, en los que dichas instituciones brindaran entrenamientos presenciales de protección civil sobre el actuar ante diversos
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81 de los 121 Pueblos Mágicos de México, cuentan con espacios ofrecidos a través de Airbnb.
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CPVC, CONDUCCIÓN
ASEGURADA
POR: MARK KNUREK
La pluralidad de materiales e innovaciones crece cada día, generando opciones y permitiendo protecciones específicas que se adaptan a la necesidad de las ocupaciones y sus espacios. Implementar un termoplástico para conducir el agua de un sistema de protección contra incendio no es necesariamente lo primero en que se piensa. Pero la realidad es que desde su primer uso, el policloruro de vinilo clorado (CPVC) especialmente diseñado, ha crecido en popularidad y ahora se utiliza en edificios industriales, comerciales y residenciales por todo el mundo. Lubrizol comercializó por primera vez el CPVC a principio de los años sesenta, hoy convertido en un material de tubería viable para sistemas de rociadores automáticos
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contra incendios, gracias a sus características que lo hacen diferente a otros plásticos como el PEX o el polipropileno, constituidos completamente de hidrocarburos, propiedad que los hace un excelente combustible. Por el contrario, el CPVC se constituye en más del 65% de cloro, un retardante natural del fuego, que además, proporciona capacidad de soporte ante la presión de temperaturas altas y una excelente resistencia a la corrosión. Atributos con los que no cuenta el famoso PVC, compuesto solo por un 57% de cloro y limitado en su rendimiento de presión a altas temperaturas.
Gerente de ventas de América del Norte para el negocio de CPVC de Lubrizol, con más de 20 años de experiencia.
Cualidades de Resistencia al Fuego Cuando se expone a una flama, el cloro en el CPVC actúa como un retardante del fuego, evitando que el material se queme a menos que se mantenga continuamente dentro de él. El material se apaga automáticamente tan pronto como se retira la flama. Además, la estructura molecular y la morfología del material hacen que se forme una capa gruesa de carbón aislante en el exterior, que protege al resto de la tubería de daños adicionales. Esto permiten el suministro confiable de agua, incluso cuando se envuelve en llamas. De manera más detallada: Alta temperatura de ignición Instantánea: El CPVC BlazeMaster® tiene una temperatura de ignición instantánea, la temperatura más baja a la que puede soportar la combustión, es de 900°F (482°C). Alto Índice Límite del Oxígeno (LOI): Requiere 60% de oxígeno en la atmósfera circundante para mantener una flama. Para referencia, la atmósfera de la Tierra está compuesta de solo 21% de oxígeno. Esto significa que cuando se elimina una fuente de fuego, el CPVC se apaga automáticamente. Generación limitada de humo: Cuando se expone a una flama limita la cantidad de humo producido, lo que potencialmente reducirá el daño por humo en comparación con otro material. Carbonización: El exterior de la de tubería se carboniza en lugar de fundirse cuando se expone a una flama hasta una cierta temperatura. Esta superficie carbonizada ayuda a aislar el interior de la tubería, manteniendo su integridad estructural.
Cualidades Resistentes a la Corrosión Como ya se mencionó el material tiene una excelente resistencia a la corrosión, tanto interior como exterior. Esto permite su
instalación en ambientes corrosivos, tales como áreas de piscinas y spas, o áreas expuestas al aire salado del océano. También es resistente a la corrosión inducida por microbios (MIC), que a menudo se produce en sistemas estancados como los rociadores contra incendios. La MIC puede causar una reducción de las vías fluviales dentro de las tuberías de metal debido a la acumulación de productos de corrosión, así como a fugas por los poros. La resistencia a la corrosión ayuda a: Mantener la superficie lisa de la tubería. El CPVC tiene un factor C de Hazen-Williams (la medida de la suavidad de la superficie) de 150, en comparación con los 120 del acero, que pueden caer a 60 a lo largo de su vida útil. Mantener la tubería libre de residuos que puedan desprenderse de la superficie de la tubería y, potencialmente, obstruir o restringir el flujo de agua a través de un cabezal del rociador. Mantener la integridad estructural del sistema, evitando los puntos débiles en las tuberías o uniones que pueden explotar bajo presión o comenzar a gotear.
Aprobaciones y listados El CPVC ha sido optimizado a lo largo de los años y se ha conseguido potenciarlo como una alternativa al acero, que es rentable, confiable, más duradero y amigable con el medio ambiente. Además, es verificado por las principales agencias internacionales. Cumple con múltiples normas establecidas por la NFPA, que incluyen:
El CPVC se constituye en más del 65% de cloro, un retardante natural del fuego, que además, proporciona capacidad de soporte ante la presión de temperaturas altas.
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VNFPA 13: Una norma de referencia en la industria para la instalación de sistemas de sprinklers. Como miembro de la NFPA, el CPVC BlazeMaster cumple con la norma NFPA 13 y está aprobado para todas las aplicaciones de riesgo leve. NFPA 13D: una subsección de la NFPA 13, la NFPA 13D se aplica específicamente a las normas para la instalación de sistemas de rociadores contra incendios en una o dos viviendas familiares, así como en casas móviles y casas prefabricadas. NFPA 13R: otra norma relacionada con la NFPA 13, la NFPA 13R establece normas para sistemas de rociadores contra incendios en propiedades residenciales de hasta cuatro pisos, incluyendo unidades multifamiliares, hoteles y viviendas para estudiantes. Está listado en UL, C-UL y ULC para lo siguiente: UL 1821 - Tubería y Conexiones de Rociadores Termoplásticos para Servicio de Protección Contra Incendios UL 1887 - Norma Para la Prueba de Seguridad Contra Incendios del Tubo de Rociadores de Plástico para Características de Flama y Humo Visibles ULC/ORD - C199 - Tubería de Combustible para Sistemas de Rociadores FM Global es una organización de terceros que aprueba los materiales para usos específicos. A través de FM Global, las tuberías y conexiones BlazeMaster están aprobadas tal como son fabricadas.
Capacitación y mejores prácticas La instalación adecuada del sistema de rociadores automáticos contra incendios es crucial para su éxito y confiabilidad a largo plazo, por tal motivo, BlazeMaster ha desarrollado un programa de capacitación en línea gratuito que cubre las mejores
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prácticas de instalación y comparte recursos valiosos, diseñados para instaladores, contratistas, ingenieros y gerentes de construcción interesados en obtener más información sobre la instalación en edificios nuevos o reacondicionamientos. El curso de capacitación cubre una variedad de temas relacionados con la instalación, la aplicación y el mantenimiento de los sistemas. Específicamente, aprenderá sobre: Normas, códigos y aprobaciones Mejores prácticas de instalación Compatibilidad química Cortar y unir Parámetros de diseño Listados y circunstancias especiales Los participantes también obtienen una visión general de los usos y ventajas del CPVC de BlazeMaster que lo ayudan a comprender mejor y describir cómo funcionan los sistemas para salvar vidas y dinero.
Ha sido optimizado a lo largo de los años y se ha conseguido potenciarlo como una alternativa al acero, que es rentable, confiable, más duradero y amigable con el medio ambiente. Además, es verificado por las principales agencias internacionales. La capacitación incluye seis módulos que cubren los temas detallados anteriormente. Cada módulo consta de una serie de diapositivas, consejos y un cuestionario. Después de completar todos los módulos de capacitación, se le pedirá que complete un ejercicio de capacitación práctica. No se cobra por este curso de capacitación en línea. Cabe resaltar que los sistemas son tan buenos como el que instaló la tubería, los accesorios y los cabezales de los rociadores. Por esta razón, cuanta más información, mejores prácticas y recursos podamos compartir, mejor será para todos. Para enterarte de más y comenzar con tu preparación, visita el centro de capacitación en línea, www.blazemastertraining.com y crea una nueva cuenta. A partir de ahí, inicia sesión y comienza tu capacitación. La pluralidad de materiales e innovaciones crece cada día, generando opciones y permitiendo protecciones específicas que se adaptan a la necesidad de las ocupaciones y sus espacios. El sector de la protección contra incendio crece, y con él, la calidad, oferta y garantía de seguridad, que permiten garantizar la vida y la continuidad de operaciones.