ODRADEK
INVIERNO 2020
Nยบ3
BRUNO CUNEO | PLIEGUE | GRILLO MUJICA
Imagen portada: María José Rojo Fotografía interior: Emilia Martín y María José Rojo
OJOR AÍRAM
Providencia 2271 editorialodradek@gmail.com
www.odradek.cl
OJOR AÍRAM
junio ESPECIAL POESÍA NÚMERO 3 SANTIAGO CHILE
07
Ficción
14
Poesía
Florencia Astaburuaga Siete idas y siete vueltas
Bruno Cuneo La casa ideal
54
Poesía
64
Ficción
Marcela Fuentealba Cerros viejos
Gonzalo Baz Los distantes
27
Ficción
77
Poesía
37
Poesía
91
Fotografía
42
Entrevista
Grillo Mujica Cita con los exóticos dealers chilenos de París Juan Manuel Silva Trabajar cansa Pliegue Formas de caer
Providencia 2271 editorialodradek@gmail.com
www.odradek.cl
Marjorie Agosín No me obsesiono por tu nombre
Emilia Martín y María Rojo Textos de Odradek No me mires
OJOR AÍRAM
SIETE IDAS Y SIETE VUELTAS Florencia Astaburuaga
FICCIÓN
7
Aunque parezca que caben en las manos sus piecitos todo bebé se extiende por kilómetros primero, destructores del mundo que vienen a ocupar y lo primero que hacen es hacerlo estallar todo bebé viene con dinamita. Cómo se apaga, si se apaga, tanto fuego. Marina Yuszczuk
I
Me he ido de casa, ya no soporto el
Cierro los ojos y repito "que nadie
olor, los alaridos a mitad de la noche,
cercano
las copas, unas contra otras, no sé
desesperación nos acunamos en la
qué
idea
celebran,
sanitaria?,
¿la
¿que
emergencia caemos
sin
estufa
muera".
de si
En
protección, es
que
un
acto
cerca la
de
de la
tenemos,
misericordia?, ¿al gobierno indolente
buscando abrigo, un resto de amor.
que dejará morir a nuestros abuelos y
A veces, en las esquinas de la casa
abuelas? Y que quede claro que no
escucho violines trinar, como en las
estoy en contra de la muerte, pero sí
películas de terror. Máxima tensión,
de la que es causada por semejante
todo me angustia, la falta de alcohol
inoperancia. El ministro de Salud es
en mi cuerpo lo acrecienta…la tan
un incompetente, nadie del gobierno
necesaria desinhibición del alcohol.
se salva, sus palabras son patadas al Me sirvo una copa de vino, solo una
pueblo.
copa al día, estoy embarazada. Miro Hoy mi huida tiene otro motivo, no la
hacia abajo, soy un cuerpo atrapado
crisis
en otro cuerpo, un cuerpo atrapado
que
nos
embarga;
mis
compañeros de departamento siguen
entre
brindando, suenan sus vasos, y yo no
Dentro mío hay un cuerpo cálido,
puedo brindar con ellos, aunque no
que
hayan
incomodidad, la búsqueda constante
razones
para
hacerlo
me
gustaría chocar las copas, las tazas.
murallas, poco
entre sabe
de sentido. Suerte la suya.
concreto. sobre
la
FICCIÓN
8
II
No debería tomar, ni fumar, ni hacer abdominales, ni tomar baños eternos, ni tener malos pensamientos. Tendría que empezar a asumir mi estado, aprender a tejer a palillos, caer en clichés. No estoy dispuesta. Vuelvo a mirar
hacía
abajo
y
es
obvio,
el
espacio que ocupa el bebé no deja ver mis pies. Genero una imagen mental
de
mí
misma
del
todo
atrofiada, ¿mi proyección a futuro debiera
estar
embarazo? negación,
alineada
Por
ahora
cuánto
falta
con es
el pura
para
ir
al
Por ahora ejerzo la peor calaña de premadre,
no
necesario,
me no
involucro leo
quedar
con
el
adormecido, no volver
varios días, ir a primera hora a la botillería, pasar la media tarde en una plaza,
hincando
el
codo.
Eso
no
quiere decir, en todo caso, que mi amor por la criatura que llevo adentro sea poca cosa, no, me cae cada día mejor, tampoco esperen que haga una aporía de la madre abnegada. Ser incubadora tiene su gracia, no les miento,
un
estado
de
hechizo
permanente, el cambio es tu única constante. Pero no me siento ni un centímetro de madre, no tengo idea de llantos, de pañales ecológicos, de vitaminas y oxitocina. Las horas pasan sin
presión
reconocerme
alguna a
y
medias
puedo en
el
espejo, eso que ves, que tocas y sientes es tu cuerpo, me digo, tu cuerpo
conteniendo
otro
cuerpo,
rarezas del estado de gestacional.
las
lo
nuevas
mido mi panza, siquiera le digo panza, le digo guata, le digo entrañas, marañas, un globo. He olvidado las cremas, los rituales, la idea de feminidad impuesta. ¡Las horas a la matrona!, siempre llego tarde. Cuando sin querer me tropiezo con algún dato "Su guagua ya la escucha, ¡háblele!", trato de hacer lo contrario a toda costa. Susurro, escucho música con audífonos. III
paladar
a casa en
sobre
de
facultades del bebé, ni me saco fotos, no
karaoke y tomar sin medida, jalar hasta
más
No he podido ir al psicólogo, problemas en el Cesfam, me llaman y me dicen que no hay atención presencial. Me imagino a la psicóloga preguntándome cómo ha sido ver al ser vivo dentro mío en las ecografías: gracioso, le diría, ¿qué se cree ese ser, usurpar
mis
entrañas,
moverse
grácil
dentro mío, comandar mis hormonas y darme vueltas en el aire? Estoy encerrada y no sé bien dónde mirar, ¡Iré a sacar un salvoconducto! No sé cuántas semanas de gestación números
tengo,
siempre
aleatorios,
respondo
veintisiete,
cinco
meses casi seis, quizás siete. Es extraño, hasta cierto punto yo soy ese ser, el que tengo
dentro:
encerrado,
aislado,
aprendiendo a tragar líquido amniótico. Pensándolo discordia,
lo
bien llevo
soy
la
dentro
distancia, pero
no
la lo
nombro, es la otredad carcomiendo lo último que me queda de ácido fólico.
NÍTRAM AILIME
FICCIÓN
11
IV
Recuerdo latente el primer consejo que
En
me dieron, porque claro, consejos te
sertralina. Vuelvo
llegan sin que los necesites: camina
zen que apenas cabe en la mochila,
todos los días, al menos seis cuadras a la
lo meto a la fuerza, el cambio de
redonda.
comuna
Caminar…
-caminar,
¡qué
el
consultorio
me
me
recetaron
con un espíritu
exige
cuarentena
recuerdos!, el viento en la cara, las horas
catorce días, me siento preparada.
pasando
Me puse pepinos en los ojos para
frente
zigzagueando-.
a He
ti
sin
tenido
el
reloj
ganas
de
desinflamarlos
de
la
ansiedad
llamar a mi prima y preguntarle: ¿es
contenida, con la pinza repasé mi
viable hacerlo por el pasillo, siete idas y
mentón, ningún pelo sobresale -por
vueltas, dos veces al día?
lo que puedo constatar. He vuelto, con guata, caderas abultadas, un
V
poco de doble pera, pero he vuelto, eso es lo importante. Alisten sus
¿Qué se yo de niños? Lloran, cagan y se
paneras, sus cuchillos untados en
duermen, te revientan en oxitocina y
mantequilla.
sacan tu tono de voz más ridículo. Te dejan agotada, empapada en vómito,
Hoy fue día de ecografía, a las cinco
con un sentimiento de asfixia amorosa.
ecografías
Eso es lo que sé. LLevo toda una vida
semi llorando, es mi forma de lidiar
preparándome, hombre tras hombre mi
con el estrés, ¿estrés de qué?, de
espíritu maternal se ha desarrollado,
todo
hombres sin madres que lloran en mis
detalles.
faldas, hombres sobreprotegidos que
misma edad que mi compañero L.,
exigen su cuota de amor, hombres
veo en su placa su nombre, lo
adictos
error,
retengo, más abajo su rut, trato de
hombres que solo juegan, hombres que
memorizarlo. Tiene lindos ojos, no
hay que darles la comida en la boca.
sé mucho más de su cara porque la
Llevo toda una vida enfrentando la
tapa la mascarilla. Esperamos en
frustración, el llanto desmedido a mitad
silencio, Ele está estacionando el
de madrugada, qué más da, sea como
auto, creo haberle dicho al doctor,
sea, de ésta saldremos vivos, no lo digo
la
sólo por mí, lo digo por lo que acuno,
Aprovecho
por el padre de la bestia y por mis
documentos, le entrego mi carnet
compañeras. Mañana prometo volver a
de embarazada, la última ecografía,
casa después de dos semanas de huida,
le repito mi nombre, por si no lo
ya estoy harta de mi madre.
escuchó antes.
a
la
adrenalina
y
al
anteriores
un
poco, El
no
he
entraré
ginecólogo
puerta
está de
llegado
tiene
en la
entreabierta. ordenar
mis
FICCIÓN
12
L. llega, nervioso y tranquilo, en su
grito invisible que devuelve un mapa
estado
del lugar. L. se da vuelta, le pide al
permanente:
desatenta.
Se
sienta
atención y
las
cosas
doctor
un
poco
de
papel,
¿estará
toman su ritmo habitual, es un baile
llorando?, pienso, ¿tanta emoción para
ya
las
una ecografía 2d? yo tengo hambre,
ecografías. Trato de quitarle el sabor
me comería un helado ahora mismo.
a ceremonia, a ritual, me bajo los
Recibe el papel y mientras acomete el
calzones sin anteponer problemas,
acto nos cuenta, -mientras con el
donde sea, los dejo sobre una mesa,
doctor miramos cada uno su pantalla
me hago la desinteresada, me subo a
asignada- que hay una araña de rincón
la camilla de un salto. Mala idea. Algo
en
en su actitud me deja en ridículo, me
mataré. No alcancé a mirar, pero le
desacelera, dejo de hacerme la niña,
pedí
ahora soy toda una adulta. La primera
cadáver, hermosa hembra, peligrosa. El
ecografía es intrauterina, penetración
ginecólogo le agradece la valentía y
sin placer, para la segunda me pongo
me pregunta, ¿quieren saber el género
los calzones y me subo el vestido, veo
del bebé?, no gracias, le digo, con el
que mi guata abultada no genera
presagio de la araña me basta. Me bajo
algo en él, pero qué le va a generar,
de la camilla, esperamos que el doctor
soy una paciente más.
llene
conocido,
el
foxtrot
de
la
lavamanos, que
la
me
cartola
es
hembra,
acercara
del
carnet
la su
de
embarazo. Todo ha salido bien, ¿no lo Me embetuna de gel frío y recorre mi panza con la pistola del ultrasonido, miro
a
L.
de
reojo,
y
pregunto:
¿doctor, cómo genera las imágenes el ultrasonido?, me responde a medias, está midiendo al ser que llevo dentro, está ocupado, L. saca su celular y empieza a grabar la pantalla que nos devuelve
la
imagen
perfilada
del
bebé, buen fémur, pienso, ¿y los dedos donde están? le pregunto, me explica que es difícil de cortar la imagen
específicamente
en
las
manos, la ecografía funciona como el sistema de ecolocalización de los murciélagos, un
crees?
LA CASA IDEAL Bruno Cuneo
OJOR AÍRAM
14
POESÍA
15
Pensamiento esencial: la dedalera he estado queriendo adornar mi mente con otras cosas que muebles por ej. un risco, una ola, un peñasco algo infinito a escala manejable como un océano, navegado e inmóvil en una bañera. Piensa tú si mañana ya nada amanece y la realidad se repliega y el mundo se agosta: pon primero una vela y luego pon agua forma un plano esencial y añade allí lo que quieras: graznidos, bocinas, timbres algo que vaya en la dirección del viento y te lo recuerde. [Inédito, 2020]
POESÍA
16
Gracias sean dadas por la existencia del espino por la hierba quemada por el sol por la quietud de la roca en el cerro gracias sean dadas por lo seco. Mi ojo ciñe este paisaje y pienso que sí, que sería bello: dejarse acunar por esta ruta muerta y contemplar por un minuto largo tu futuro sin miedo, en blanco y todo tu pasado, sin remordimiento sólo estar allí, no ahí clavado a un presente eterno la mano desasida de todo la dura tregua del deseo. [Inédito, 2020]
POESÍA
17
LA CASA IDEAL
La casa ideal es de un solo piso con un breve antejardín y un patio interior blanco. En él hay un parrón un ciruelo y un manzano. La casa ideal tiene también un gato negro, de pelo corto que duerme durante el día en el sofá y sale sin objeto por la noche. La cocina de la casa ideal es pequeña con una batería de cobre y otra de aluminio una mesa de madera blanca una jarra para el vino y otra para el agua. Su ventana mira al mar pero jamás lo muestra en pleno: sólo una ola que se azota contra un peñasco la silueta de un barco bajo la resolana y cuatro boyas a lo lejos. La casa ideal es una estructura, un amasijo de palos vuelto coherente, una línea vertical y otra horizontal, la casa ideal es una casa. [Jahuel, 2017]
POESÍA
18
SOIR BLEU
Quién sabe si después de un año no comience todo de nuevo el triste espectáculo que hemos dado interrumpido apenas por una breve calma como la de esta tarde azul la última, tal vez, de un antiguo verano. El detalle está en las lamparitas de colores en la luz que a pesar de todo sobrevuela débilmente nuestros años. Vivir no es tan difícil si lo piensas lo único difícil es pensarlo. [Verano, 2005]
SPLITTING, MATTA CLARK 1974
POESÍA
SPLITTING, 1974
La casa la partió en dos como quien parte una sandía y de ese rojo intraducible forja el recuerdo de su infancia o la terrible visión de un desesperado a punto de saltar de una ventana su hermano mismo, por ejemplo, o la tristeza de ser pocos en el velorio y ver al padre llegar molesto y atrasado como quien asiste por obligación a una fiesta de disfraces. La gente especula densamente ahora sobre los conceptos de su arte. Yo, en cambio, solo veo a un hombre afanado con una sierra, con un taladro tratando de completar la demolición de la casa primordial que le destruyeron. Cada uno tiene sus razones, y yo también tengo las mías tengo también mi grieta, mi propia Casa Usher algo escondido bajo las tablas y reencontrado por casualidad y con un poco de vergüenza los deseos que pude consumar con esta moneda vieja una fotografía ridícula y una carta destemplada que guardo con el temor creciente de que puedan fundir el álbum.
21
POESÍA
22
Lo que me gusta en todo caso de esta obra no es tan solo su aire de alegoría de la disociación de la conciencia familiar con todos sus traumas, secretos y pudores, sino el modo en que por un acto violento y simple el interior oscuro fue puesto también al descubierto de manera que los fantasmas no tienen ya dónde esconderse y puedes fumar tranquilo, si te place, o soñar con otras cosas tanto si duermes en el sillón como si miras distraído por la ventana imaginando un lugar al fondo donde quizás puedas llegar y por fin levantar algo. [Jahuel, 2017]
POESÍA
23
ARREPENTIMIENTOS
El barco del amor se estrelló contra el dique de la vida cotidiana Vladimir Mayakovski
El aburrimiento nos llevó esa noche a arrendar una vieja película a comprar comida china y a cuidarnos de no manchar las sábanas. ¿Son cañonazos o latidos de mi corazón?* la pregunta me recorrió como un escalofrío un alero crujió y tú, que parecías distraída, me miraste de reojo por un instante. Qué triste, me dije, cuando ya te habías dormido y un arco iris miserable iluminaba la pantalla reconocer que nuestro amor no acreditara para ser sacrificado a una causa universal sino solo a la crianza de los hijos mientras nosotros nos quedamos a cada lado de la cama y sin mirarnos como dos en dos veredas que se cortan en un punto inexistente viendo cómo todo se nos viene guarda abajo mientras el menor juega con su perro cojo y no entiende nada de lo que mañana nublará sus sueños, todavía impecables.
POESÍA
24
Duérmete, me dije, porque como cuando niño en la oscuridad de tu pieza la luz que se cuela por debajo de la puerta es la de una fiesta a la que no fuiste invitado. [Verano, 2005]
OJOR AÍRAM
POESÍA
26
LOS OTROS
Existen alegrías que la vida no comparte con nosotros sino con otros que desconocemos aunque tan reales como nuestro deseo de que existan en una calle cualquiera de una ciudad no muy lejana a la nuestra bebiendo por la mañana una taza de café mientras el sol acaricia suavemente sus rostros soñolientos en la ventana. A veces, cuando pienso en ellos, me pregunto qué sería de mí si algo malo les pasara.
[Verano, 2005]
FICCIÓN
27
CITA CON LOS EXÓTICOS DEALERS CHILENOS DE PARÍS Grillo Mujica
En el Barrio Latino de París, el Piticlín
No más de cuatro pisos. Las ventanas
me invitó para presentarme al Drácula.
de la escalera por donde subimos
Me advirtió que era escritor. Llegamos a
daban a Saint Michel, al costado del
un señorial edificio, al ladito del Parque
Parque Luxemburgo, pulmón parisino,
Luxemburgo, nada menos que en la
preexistencia muy bien mantenida de
esquina del Boulevar Saint Michel con
jardín aristócrata francés.
la rue de Vaugirard. Cuando vivía cerca de allí, llevaba a mi Entramos por una tremenda y bella
hija a los títeres de los domingos, o a
puerta tallada en alguna madera noble.
los
Se
puertaza
juegos que están protegidos por una
parisina tenía historia. Piticlín solo la
rejilla de alambre. Los padres podían
empujó.
leer tranquilos algún diario, pues los
me
tocar
ocurrió No
que
tuvimos
algún
timbre.
esta
necesidad No
de
juegos
había
niñitos
electricidad. El suelo de ese umbral
monos.
infantiles
estaban
cualquier
enjaulados
día,
como
interior estaba saturado de papelerío tirado por debajo de la puerta de
Subimos por una amplia escalera muy
correos con cuentas, publicidades y
cochina. Se notaba el mármol solo
algunas hojas otoñales que se colaron.
porque unas huellas lo despejaron. Por
Nadie hacía el aseo aquí, este edificio
esa escalera señorial entraba la luz
estaba abandonado. No recuerdo que
ambigua del atardecer por un vidrio
tuviese ascensor.
roto de una ventana muy cochina con polución.
OJOR AÍRAM
FICCIÓN
29
Piticlín golpeó fuerte la única puerta
costra de basura del departamento
del segundo piso.
para
descubrir
platerías,
bibelots
antiguos y hasta encontró un jarrón Estaba yo informado que el Drácula,
chino Ming en buen estado, en un
habitante de allí, era competidor del
placard. Los vendía en el Mercado de
Piticlín en el dilerío del Barrio Latino.
las
Tenían una suerte de fair play en sus
Clignancourt. Todo esto lo supe por el
tráficos
copuchento Piticlín, quien le tenía un
de
chilenos
cannabis,
peleaban
el
pues
ambos
territorio
del
Pulgas
respeto
de
Saint-Ouen-Porte
parido.
Me
micro narcotráfico a otros sudacas y a
momento:
los griegos. Doy luces, para decir con la
asesino que tiene».
chichita
que
nos
«Cáchate
dijo las
de
en
un
manos
de
estamos
curando. En tout cas, cualquier movida
A posteriori supe que el Drácula le sacó
de mi amigo era previsible. Pues mi
la chucha a un campeón de boxeo en
amigote, muy dealer y cafiche exitoso
El Bosco, histórico antro bohemio de
sería, pero transparente, no maleado,
Santiago-Shile.
un
le
algunos lo creían agente del CIA, hasta
envidiaba su éxito con las mujeres. A
mi padre, que fue su psiquiatra, lo supe
posteriori,
por
jipi
exótico traté
esotérico. de
Yo
entender
dicho
Para
cazuela.
más
Una
recacha,
fuente
más
éxito. Físicamente flaco, alto y moreno,
impajaritable, un cumpa periodista y
con pinta de alta casta india, eléctrico,
escritor,
achinado,
Nicaragua,
mas
chamullero
con
imparable
un
cuento
para
ex
guerrillero ex
chileno
en
guardaespalda
de
las
Allende, me afirmó que fue agente de
minas new age en su mira. Estoy
la inteligencia cubana. Le creo, pues
seguro que se culió a casi toditas las
estuvieron a punto de emprender un
minas que este pecho les echó el ojo.
negocio
juntos:
sánguches
de
cochayuyo con queso. Ante mi duda de Entramos
a
un
departamento
en
cómo
alguien
de
la
inteligencia
penumbras. Me parecía increíble que
cubana, tan jevi como el Mosad, podría
este edificio de elegante apariencia
interesarse
exterior, en un lugar privilegiado de
sánguches o drogas, mi cumpa ex
París, estuviera okupado por el Drácula.
guerrillero
Pensándolo bien, alguien como él, era
coberturas daban más info que las
el habitante exacto para el dep. Este
coberturas diplomáticas. Me asusté.
pseudo dandi, dealer de droga dulce, y cuasi gurú del Barrio Latino vivía allí. No pagaba ni uno. Escarbaba entre la
o me
emprender afirmó
que
con esas
OKSESOJ
FICCIÓN
El asunto es que fuimos recibidos personalmente por el Drácula. A estas alturas
de
recuerdos
puedo
equivocarme, pero supongo que mi amigote Piticlín estaba haciendo un enlace entre lo que posiblemente él consideraba
dos
intelos.
O
la
otra
31
En un territorio de los Andes de Bolivia, la gente de un ayllu, al ladito del pueblo, puso atención a un hilo que salía de unas rocas infiltradas en una de las terrazas de cultivo, donde los niños jugaban con sus huamanis
posibilidad que se me ocurrió: quizás me utilizaba para dilucidar, con la chiva del encuentro de dos escritores, o sacarle la pepa a su competidor, sobre
Uno de los cuentos, que no recuerdo
quién era el proveedor de la excelente
como
cannabis sativa holandesa, con la cual
estupendamente delirante. Trataré de
nuestro Drácula estaba triunfando en
sintetizarlo:
se
intitulaba,
lo
encontré
el Barrio Latino. En fin, todo esto son rellenos atmosféricos para lo que viene.
En un territorio de los Andes de
En resumen, reitero, estaba en un dep
Bolivia, la gente de un ayllu, al ladito
penumbroso, con dos narcos (y no solo
del pueblo, puso atención a un hilo
eso) chilenos en París.
que salía de unas rocas infiltradas en una de las terrazas de cultivo, donde
Ni me sorprendió que el Drácula me
los niños jugaban con sus huamanis.
vendiera pomada. Sabe dire, el dandi
Esta cuerda se perdía entre las nubes
escritor
y el cielo. La gente de la aldea notó a
y
dealer
sabía
que
me
acusaban de poeta, entonces, carente
los
de
chamullos
jugando con esa cuerda misteriosa.
escriturales o por natural seducción,
Trataban de achuntarle con piedras, lo
por siaca, el Drácula se pasó soltándose
adornaban
las trenzas con su onda literaria. Me
amarraban volantines. Este asunto de
contó un proyecto alucinante de su
la presencia de una cuerda o hilo
novela mayor. Además me tiró por la
extrañísimo
cabeza, narrando histriónicamente, en
primero
compañía de su excelente hierba, al
locales
como
menos dos cuentos notables. Recuerdo
luego
se
uno, que por lo demás creo que está
internacional,
publicado en uno de los millones de
científico,
libros desapercibidos, que como toda
mentado hilo, una suerte de cuerda
sorpresa en los links literarios te llegan
de algún metal misterioso.
feedback
por casualidad.
para
sus
niños
sumamente
con
en
apareció
ocupados
flores
un
andinas,
ayllu
andino,
los
medias
en
noticia produjo
curiosa. un
mundial,
mediático,
le
Mas
interés
globalizado, etc.,
con
el
FICCIÓN
32
El asunto es que, lo que recuerdo del
El final del cuento, ya utilizado en
cuento
textos
del
Drácula,
los
científicos
de
ciencia
ficción
o
de
mundiales decidieron roer, cortar el hilo,
mitología esotérica, es que el mundo,
bombardeándolo
con
rayos
láser
el planeta tierra, se cae. Es decir,
concentradísimos,
esos
que
cortan
pierde, en cuestión de segundos, su
lograban
dependencia de las leyes de la física
científico
imperantes.
barras
de
corroerlo
acero. un
Apenas
poquito.
Un
El
mundo
se
dispara
pakistaní, experto en láser, en complejos
para cualquier lado o dimensión. En
cálculos
IBM
eso, en plena narrativa del Drácula,
cedieron
en una suerte de comedor de ese
con
poderosísimo,
un
computador
que
se
lo
cagados de la risa en Harvard, corrió el
departamento
riesgo de vaticinar que, tal como iban,
una anciana dama blanca, con el
lograrían
misterioso,
pelo blanco, su rostro blanco, su
digamos un 23 de julio. Evidentemente,
vestimenta sedosa blanca, como una
por si acaso y porque seguramente no
aparición de una bella parca. No
había noticias interesantes en el mundo,
alcancé a asustarme y no sé si el
la prensa mundial se instaló para ese 23
Piticlín tampoco. Entonces el Drácula
de junio en el ayllu (como en el caso de
interrumpe su chicharra, se para de
los 33 mineros chilenos, me imagino)
la «mesa de las mil patas», como le
con todas las cadenas televisivas y otros
llamaba a la mesa en que estábamos
media reporteando el final del corte del
instalados
Hilo ET Pachamama. Así le llamaron, así
inédita que también algo me contó),
pasó al estrellato mundial. Aquí tendría
se dirige hacia la aparición de la
que ponerle color, describir el estrellato
dama
global que logra el humilde Ayllu de
tomándola de algún brazo, la sienta
Punkará, en Bolivia, porque tuvo la mala
con nosotros. La anciana, a la luz de
o
cortar
buena
el
hilo
blanca
y,
de
una
novela
delicadamente,
el
las velas, tenía una mirada al infinito.
rareza.
El
Me paré y la saludé, Piticlín también,
asunto es que el cuento del Drácula
pero sin decir nada. El Drácula nos
termina
miró divertido.
global
de
cuando
una los
internacionales,
con
especiales
mucha
y
de
(título
aparece
ser
epicentro
circunstancia
tenebroso,
científicos
trajes,
anteojos
parafernalia
La anciana blanca no nos dio boleto,
patrocinada, accionando con un aparato
ni siquiera fijó sus ojos celestes en
poderosísimo
láser,
nadie. Estuvo unos cinco minutos
fabricado,
sentada con su mirada perdida, y se
de
especialmente con
la
rayos
diseñado
copuchenta
filmándolo
todo,
y
prensa
logran
mundial cortar
filamento de metal desconocido.
el
para y se va como llegó, etérea.
FICCIÓN
36
El Drácula ya preparaba otro petardo.
El Drácula aceptó siempre y cuando
En París de entonces, no sé si ahora, la
nosotros financiáramos un sánguche
marihuana era un lujo oriental. Solo se
para llevarle a su Dama Blanca.
encontraba hachís marroquí, kif medio amarillento,
muy
ordinario.
Cuando
Después
supe
que
esa
anciana
más, te bajaba la presión un poquito y
(¿esquizofrénica?) era una aristócrata,
te ponías más parlanchín. El pito de
marquesa, algo así, heredera, dueña del
nuestro anfitrión era muy activo, hasta
edificio,
me
mi
por su familia, por rallada. Recuerdo
paranoia, pues hasta donde recuerdo,
una info de mi padre psiquiatra, o
otra de sus gracias era ser inteligente
quizás de mi madre, asistente social de
emocional, que le llaman. Entonces,
locos
estimula
me
(multiclases) prefieren asumir a sus
cuente otro de sus proyectos literario.
muertos, más que a sus locos aún vivos.
angustió.
al
Piticlín
Drácula
cachó
para
que
absolutamente
toda
su
abandonada
vida:
las
familias
Se va de hocico y le informa que soy editor. El Grillo tiene una imprentita, le
Simplemente el Drácula la cuidaba,
dice. Con este dato el Drácula no paró,
cobrándose el habitar en el centro de
seduciéndome con su proyecto estrella:
París,
recopilar,
micronarcotráfico.
fotografiar
todas
las
piola
y
manteniéndose Pienso
que
con este
cochinadas manuscritas de los baños
señor shileno, el Drácula, con onda
públicos
newyorkinos,
literaria, muy olvidado, que formó parte
berlineses, romanos o de cualquier
de la inteligencia cubana (que, reitero,
ciudad
le
parisinos, jevimetal.
Me
dio
ejemplos
llegan
a
los
talones
al
Mosad,
como: «Mencanta chuparlo, teléfono
inteligencia israelí), ese que le sacó la
tanto»
chucha a un campeón de boxeo, es un
(de
París);
«Aquí
estuvo
el
picoeoro, rey de los choros» (del baño
histórico
de
Santiago,
antecedentes. Si no, ¿cómo chuchas
Chile); «Si lo tienes chico, yo te lo
vivía de la preexistencia del lugar que
agrando» (en un tugurio chicano de
les dije: antigüedades, bibelots y toda
Nueva
decadencia
La
Carlina,
York).
Recoleta,
Creo
que
reí
y
efectivamente se me pasó la presión baja.
El
Drácula
propuso
un
bricoleur.
vendible
Constaté
de
la
esos
anciana
blanca?
tour
inmediato por el Barrio Latino para
No recuerdo si fue el Piticlín u otro
recopilar este patrimonio escritural de
diler el que me informó que el Drácula
retretes. El Piticlín, viéndome pálido,
fue asesinado en Caracas. Me tinca que
salva la situación proponiéndonos que
Drácula tenía tanta info, que se lo
saliéramos
echaron
a
comernos
un
kebab,
donde unos tunecinos cumpas de él.
porsiaca.
Solo
reivindicarlo literariamente.
quiero
RRAP NITRAM
TRABAJAR CANSAÂ Juan Manuel Silva
POESÍA
TRABAJAR CANSA
Le diré a todos que conseguí un trabajo y que he alcanzado el umbral de la vida independiente, al fin. No importa que el dinero lo envíe mi padre, junte las monedas que quedan en el baño o el whisky del poeta no sea más que grapa. He conseguido un lugar en el universo:escritorio, computador, silla y pieza la política y el contexto que me determinan. Ahora, sólo resta esperar mi destino: el éxito, la cárcel o el silencio.
38
POESÍA
RICCORSI
Despierto borracho nuevamente y no sé si debiera volver a la lectura de Vico o llamar a mi madre por un poco de dinero. Se repiten las cosas como una mala empanada. Salvo la frustración y el llanto, vuelve todo igualito, marea de cuchillos a mis venas. Dormiré doce horas igual que ayer, el fideo frío con salsa me esperará al lado de la cama como la botella de vino y el calzón de mi amiga. No soy más que la basura que me rodea: tenso mi vida como el arquero que busca la diana, pero falla.
39
POESÍA
PASTA GRATUITA
La pasta iguala en vapor al ambiente pueden cortarse con un cuchillo. Alcaparras, aceite de oliva, anchoas que tenía escondidas como su sexo la chica a la que espero. No importa comer arroz blanco o papas cocidas el resto de la semana, hoy robaré sus besos con la ganzúa del vino y el verso, aunque para comer falte una mesa o una escoba que ahuyente el polvo, la prosa.
40
PLIEGUE
FORMAS DE CAER
ENTREVISTA
43
El amor comienza por la revelación de un mundo posible como tal, envuelto en otro que lo expresa. El amor conlleva todo ese encuentro con la composición de imágenes intensas, texturas y con las percepciones anteriores a éste. Pliegue**
Pliegue es un colectivo multidisciplinario enfocado en la creación de metodologías de divulgación de estética y filosofía contemporánea, a través de series, textos y conversatorios. Reúne el ensayo filosófico y las herramientas del cine, con el propósito de investigar la posibilidad de pensar en imágenes. “El paper: publica o muere”, “ “Cuerpo poshumano” y “Pensar el deseo”, son algunos de los temas trabajados en la web serie Paradojas del nihilismo. **Sobre el poema "Amor a primera vista" de Wislawa Szymborska
ENTREVISTA
44
REPENSAR LOS DOGMAS Buscamos contribuir a la producción de una nueva imagen del pensar, que lo vincule con lo sensible, con los afectos, con lo vital. Nos resistimos a la Creemos que toda disciplina tiene su propia imagen dogmática que reduce pensar a un ejercicio singularidad, que surge de un problema en la meramente racional y especulativo, a la imagen vida y que adopta sentido político, en un cierto dicotómica de la producción de conocimiento, que territorio, para una cierta comunidad. separa la razón de la sensibilidad, el lenguaje del cuerpo, el pensamiento de la práctica. Crear nuevos modos transdisciplinarios y multidisciplinarios conlleva repensar los Crear conlleva experimentar y vivir. Nos dogmas de las mismas disciplina y afrontarse a interesa fugarnos de las estructuras que lo nuevo, a la diferencia. Componer aceptando y determinan de manera absoluta qué es lo que potenciando esa singularidad, es el desafío. Creemos que en el arte hay un potencial se debe pensar y cómo se debe pensar. revolucionario, que permite construir Queremos investigar y experimentar nuevos estructuras abiertas al cambio, que se resistan modos de divulgar y hacer filosofía, que se a la representación y a la moralidad. Tratamos conecten con lo vivo. La tarea micropolítica es de sostener una apertura al acontecer de lo crear otro lugar, a la vez que criticar los nuevo en un pensamiento que parta siempre incentivos, instituciones y configuraciones que por la diferencia y el impacto sensible de las tienen un rol relevante en la administración, fuerzas que nos componen. legitimación y capitalización de los saberes.
ENTREVISTA
46
UN MODO DE VIDA Todos, en distintos niveles y desde distintas perspectivas vitales, hemos sido y somos nihilistas. En ese sentido, no habría un “ser nihilista” como si fuese una categoría o rasgo de la personalidad, o como si fuese una categoría identitaria, sino que es una condición afectiva y existencial, que de hecho, tampoco puede ser reducida a lo individual. Nihilismo es, como nosotros lo entendemos, desde Nietzsche-Deleuze, posponer tu vida por ficciones supraterrenales, posponer tu sensibilidad por ficciones que sobrepasan este plano vital. En su tiempo Nietzsche lo planteó desde el cristianismo, que negaba tu sensibilidad corporal, tus afectos por la noción del “cielo” o de “redención”. Lo que le molestaba a Nietzsche no es el carácter ficticio del cielo, o el carácter ficticio del cristianismo, porque para Nietzsche la verdad es una composición de ficciones, sino que esa ficción no fuese terrenal, no estuviese conectada con tu sensibilidad.
En el caso de los académicos, para llevarlo a la serie, los afectos vitales que te mantienen en la práctica de investigación, todo lo que te hace sentido de estar ahí, se ve cotidianamente supeditado a ficciones que están en otro plano, como el estatus, el prestigio, la posibilidad de financiamiento. El nihilismo se visualiza en cuando negamos lo que vitalmente, sensiblemente nos hace sentido. Ahora bien, hemos configurado un mundo donde constantemente aprisionamos nuestra sensibilidad, por ideas que no conocemos vitalmente. A Nietzsche, en la lectura que tenemos, le preocupó por sobre todo la vida, cómo afirmar la vida pero, también, cómo paradójicamente, el deseo desea su propia represión. El nihilismo es un modo de vida que busca anular la vida, una voluntad que está dirigida contra sí misma pero que no por ello, deja de ser una voluntad. Vinculado a eso, vitalismo sería una resistencia al nihilismo, afirmando las potencias del cuerpo.
ENTREVISTA
EL DEVENIR ES INHUMANO
49
La relevancia del concepto de devenir se vincula con inventar modos de modificar nuestra sensibilidad. Por lo tanto, no es un ejercicio recetario o un modelo, sino que tiene que ver con la experimentación y la creación de modos de apertura a nuevas sensibilidades. La noción de devenir nos permite pensar el encuentro desde una mirada no-identitaria: yo devengo un mundo, un código múltiple, no una identidad. Entonces, no es imitar, es componer. Por ejemplo: ¿qué relaciones tenemos con el concreto, por ejemplo?, ¿con el gris del concreto? Para muchos de nosotros es simplemente el piso en el que caminamos por una calle, perceptualmente puede no generarnos ningún impacto. Pero, ¿qué sería el concreto para un skater, por ejemplo? Los skaters están constantemente pendientes de la textura del concreto, de su superficie. Los skaters crean modos de sensibilidad con esa materialidad. Por otro lado, ¿qué relación tiene un artista del concreto, como un arquitecto? Logra potenciar y sacar ese elemento de las calles y brindarle afectos, lugares. La noción de devenir nos permite hacernos cargo de cómo los devenires son inhumanos, son con colores, con velocidades, con intensidades.
ENTREVISTA
50
EXPERIMENTAR EL MÉTODO Con respecto a la estandarización de la escritura, la crítica no apunta a la estructura en sí misma, o a que un texto tenga o no un formato, sino a cómo ese formato está creado para potenciar el sentido de la disciplina, el sentido del quehacer u otros fines. El caso del paper en las humanidades es clave, porque es un formato que puede ser muy favorecedor y hace mucho sentido en algunas ciencias exactas; en las artes, en cambio, termina generando incentivos para que la creación quede supeditada al formato. Incluso en las mismas ciencias, este formato está supeditado a incentivos relacionados con el lucro y no con los fines de la disciplina.
No hay un formato per se bueno o malo, es el sentido del formato y cómo su estandarización termina coartando las posibilidades de investigación. Intentamos experimentar constantemente en los cursos y en las charlas; buscamos que cada método haga sentido con los afectos del curso. Lo cual no significa, entonces, que no tengamos metodologías; queremos generar metodologías que estén en apertura y que no se transformen en una estandarización. Eso, ¿puede ser posible? Es una pregunta que nos hacemos en la práctica.
VITALIZAR LOS CONCEPTOS
Publicar en youtube tiene que ver con permitir un mayor acceso –que es un asunto que nos importa mucho– pero no es necesariamente el formato que elegiremos siempre. La crítica a la academia no tiene que ver con el uso de conceptos; lo contrario, en cómo las condiciones de producción supeditan esa escritura a otros incentivos que no tienen que ver con el sentido mismo de lo que se escribe. Cada concepto, es un mundo creado que remite a otros mundos, y la tarea de la divulgación no es simplificarlos sino que vitalizarlos de acuerdo a su potencia.
ENTREVISTA
52
LA IMPOSIBILIDAD DEL CÍNICO
El hipócrita y el cínico están en relación, no necesariamente en oposición. Lo relevante de estas figuras es que lo que está en juego es la ilusión y la creencia. En el mundo afectivo del hipócrita, existe la creencia de que hay una cierta verdad y, hasta cierto punto, defiende esa verdad y está dispuesto a dar justificaciones por el sistema en el que está inserto. El hipócrita asume la creencia de que el sujeto, por sí solo, comanda sin relación con el afuera sus acciones, sin darse cuenta de que esa supuesta posibilidad de decidir implica una sumisión con un orden preestablecido. El cínico, en cambio, como dice Carlos Ossa, es “conciencia de la imposibilidad”. El cínico ya ha agotado mentalmente sus opciones de emancipación; es aquella figura donde todo está desenmascarado y, pese a ello, no puede hacer nada. El cínico no se preocupa de justificar los aspectos negativos del sistema; está consciente de los problemas y del malestar asociado a ellos, pero también está consciente de su propia imposibilidad para hacer algo al respecto.
NÍTRAM AILIME
CERROS VIEJOS Marcela Fuentealba
POESÍA
55
A UNA NIÑA ANARQUISTA
Para Ivanna Donoso
Viajar no es tan agradable. En los aeropuertos hay que someterse a la inspección violenta si estás cansada con la violencia lloras por el que controla al que se mueve el que trabaja y el que se salva goza supuestamente es eso la lucha de clases feroz y sanitizada no puedes creer lo feo y lo falso la vida no es así. Los mejores son los anarquistas dicen las niñas con padres borrachos y madres fantásticas o al revés cambian de idioma mejor no deben temer pues nada se pierde ni se gana menos la lengua más allá de los mares habrá la misma u otra vida.
POESร A
Nada que decir de tu existencia tan intensa de querer de exigir no hacer mรกs la fila verรกs que no lo soportas ni la indiferencia ni andar tanto sola te hallarรกs hija no hay otra estar donde estรกs.
56
POESÍA
CERROS VIEJOS
Para Natalia Babarovic
No se soporta nunca el sufrimiento del niño jamás su impunidad no estará angustiado si le pinchan el globo tendrá donde salir porque siempre hay luz decimos sea la esperanza del día no habrá pena sino regocijo no habrá sequía habrá lluvia si el mundo nace y se descompone.
57
POESÍA
Era la loca de la familia había varias resultó la más cuerda no era fría ni sufría alguien había matado a alguien en guardia con la miseria nunca será en su casa veía y sentía entre mentiras veía tal cantidad de cosas la invitaban a tomar el té cuando pintaba los desastres la turba armaba las plantas. Como las flores un milagro lo que debemos saber la vida que se forma la generación sucede viejos los cerros y reverdecen ver otra vez las piedras ¿las ves? Un momento libres sumergidas en el estanque estallaremos en el mar otra cosa verdadera la tercera es la vencida.
58
NÍTRAM AILIME
POESÍA
CASCANDO
Para Carlos K
Cuando vienes acudir golpear quebrar un jarrón se casca se triza un hombre se casca la salud a otro lo asaltan y cascan sin piedad o mejor cascó para saber algo o mal se cascó de una pulmonía o felices en la mañana cascaron cascando. Romper debilitar golpear matar superados los cuerpos del amor los cuerpos que se van bajar el tono decrecer no pienses y sigue caminando dame tu mano tu lengua.
61
POESÍA
No ser nadie ser otra contigo solo contigo calando claro lo tenue firme con luz o sin dándolo todo. Niña a caballo los cascos los cardos los cerdos los cedros la muerte el saber el habla el sexo saber hablar y sentir la palabra el lujo de callar y que me exija gritar si me voy a ir que te vayas cascando estoy hecha polvo siempre viva.
62
OJOR AÍRAM
LOS DISTANTESÂ Gonzalo Baz
FICCIÓN
65
1
Te mudabas a otra ciudad. Dejabas
No
todo para empezar una vida en otro
molestaba y para evitar que preguntara
lado, pero aparecías en las reuniones
me contaste aquella extraña historia
con esa sonrisa, como si nada. Solo
sobre tu vecino. No contabas nada,
hablabas
lo
preferías los diálogos utilitarios, a los
respuestas
que podías cambiarle el rumbo en
del
viaje
preguntaban,
y
cuando tus
te
podías
ocultar
que
algo
te
siempre eran evasivas. Se limitaban a
cualquier
dar
sin
pareció medio soberbio porque en el
entusiasmo, sin desinterés, como si
fondo estabas pensando en algo que
hubieras
habías
la
información
necesaria,
incorporado
representar.
un
a
leído
y
era
Siempre
como
me
que
te
cierta
rebajabas al nivel-mundo para hablar
admiración en eso, pero tu actitud
con la gente. Qué hijo de puta, podías
daba un miedo terrible. No sé miedo
aunque sea quedarte callado en vez de
de qué; sólo sé que había algo que
hacer sentir a todo el mundo como
me incomodaba. Me hacía sentir
pelotudos. No te quedaba bien hablar
insegura. Lo que sea, ya no importa.
de la vida. Pero aquella noche me
El lugar oscuro e impenetrable con
hablaste de tu vecino, el pelado con
el
el
pinta de arquitecto que rara vez te
tiempo. Podía percibirlo, como se
saludaba cuando se cruzaban en el
percibe
un
pasillo. El tipo te había pedido que
oscuridad,
dejaras de escuchar aquella canción
callado
que te fascinaba porque lo deprimía
mirando un punto fijo en medio de
horrible. Era una de Callahan o de Nick
una reunión. Yo te hablaba como
Drake. Vos dijiste que sí porque no se
para distraerte y me mirabas con
te había ocurrido nada que decirle en
cara de idiota, o de desesperado,
el momento y a partir de aquel día
como si te hubiese arrancado de una
empezaste
pesadilla, después sonreías y con
auriculares. Aquella canción pasó a
algún
deprimirte. El vecino pelado solo en su
que
precipicio cuando
Reconozco
texto
momento.
parecías la
luchar
proximidad en
te
plena quedabas
comentario
todo de
volvías
temporalmente al mundo exterior.
casa
con
a
sus
escucharla
alegrías
con
anémicas
y
privadas. Hablabas de él casi que con 2
cariño. Siempre el juego de los espejos, como una rata en una trampa.
Por aquellos días fui a visitarte a tu
Tomamos
casa.
fumamos un cigarro atrás del otro.
vino
toda
la
noche
y
OJOR AÍRAM
FICCIÓN
67
De a poco tu mirada iba quedando
Él se te sentó al lado y te saludó
más limpia, tu cara siempre pálida
sorprendido, preguntándote cuándo
apenas enrojecida por el alcohol. Lo
habías vuelto. Vos le contestaste que
que sea que te pasaba esa noche, me
nunca te habías ido, que no habías
lo comunicaste sin hablar, en la forma
conseguido el trabajo que querías,
de mirar todo a tu alrededor, de
que te habías enamorado de una
acariciar el vaso de vino. Nunca supe
profesora
bien por qué te seguía los viajes.
entendí yo, estaba en blanco. No
de
karate.
No
sé,
eso
supe si creerle, Marcos siempre está 3
re loco y se le da por inventar historias. Dijo que estabas raro, yo
Lo primero fue el vacío del momento
dije como siempre, él dijo que te
inmediato
se
pusiste a leer y no le diste más bola.
extendió durante varios días. Cada
No supe bien qué pensar, ese mismo
tanto
novedades.
día, yo había recibido un mail tuyo
Después nos acostumbramos a tu
contándome que te habías instalado
ausencia,
nos
en un apartamento del centro, que
juntábamos con los pibes aparecías
ya te habías emborrachado con una
en anécdotas y comentarios sobre tu
pareja de estudiantes peruanos en
vida
país,
un bar de mala muerte, donde las
especulaciones sobre lo que estarías
cucarachas brillaban al recorrer las
haciendo en ese momento que por lo
paredes verdosas. Ese día me la pasé
general terminaban en alguna burla a
sentada en mi mesa, tirando una
tus rarezas, como si esa fuese la forma
pelotita de goma contra la mancha
de
de humedad del living, cada vez que
a
la
partida
llegaban
tus
aunque
actual
Supuestamente
cuando
en
defendernos
de la
que
otro
tu
abandono.
tecnología
nos
le embocaba caían como tres kilos
mantendría en contacto, pero eso no
de
funcionó
acordar de las veces que tomábamos
con
nosotros,
más
bien
sentíamos la obligación de decir algo.
polvo
al
piso
que
me
hacía
hasta el amanecer.
Decías que ese modo de soledad era nuevo,
fluía
por
los
cables
transoceánicos.
Tu ausencia me incomodaba, un no saber qué hacer con todo lo que pasó.
4
Nuestra
amistad
era
compulsiva, dependíamos el uno del otro, vos entendías dentro de tu
Un día vino Marcos y me dijo que te
tosca forma de ser, cómo me sentía
había visto en el ómnibus. Vir, te juro
con respecto al mundo, a mi trabajo,
que lo vi, estaba sentado contra la
a mi familia, a mis relaciones de
ventana del 163, leyendo.
pareja.
FICCIÓN
Yo te conocía y aunque nunca supe que mierda te pasaba por dentro, sabía bien lo que necesitabas y a mi manera
intentaba
dártelo.
O
estábamos todo el tiempo juntos o nos
odiábamos.
Cuando
estabas
distante te odiaba, como te odio ahora, gil.
68
Nuestra amistad era compulsiva, dependíamos el uno del otro, vos entendías dentro de tu tosca forma de ser, cómo me sentía con respecto al mundo, a mi trabajo, a mi familia, a mis relaciones de pareja. Yo te conocía y aunque nunca supe que mierda te pasaba por dentro, sabía bien lo que necesitabas y a mi manera intentaba dártelo. 6
5
Viajes por pueblitos del interior. Lo mejores momentos de Juan y Vir. Mi excusa era conocer la arquitectura, la tuya
olvidarte
de
vos
mismo.
Ninguno de los dos lo conseguía, pero
¡bien
igual!,
volvíamos
con
extrañeza, el efecto duraba días y después el mapa y a pensar el próximo.
Pasábamos
más
días
planificando que haciendo. El lugar era planificar. Horas viaje. Siempre de noche y con los ojos retardados de
tanta
droga.
Tus
pueblos
preferidos eran los que a mí me parecían deprimentes.
particularmente Casi
siempre
decías
que podrías vivir ahí un año. Pasabas mucho rato pensando en cómo sería tu vida si hubieses nacido allí. Te hubiese gustado enamorarte de una piba de pueblo e irte a vivir con ella, pero tu esencia te obligaba a estar siempre cerca del movimiento. Por eso elegiste una ciudad monstruosa para
irte.
Siempre
pensé
que
pensabas en eso cuando perdías la vista en el paisaje verde que nos atravesaba a 100 km por hora.
Cuando te conté lo de Marcos te reíste, negaste todo, mandaste fotos, contaste historias, hablamos por Skype, nunca una
dirección
estable,
un
número
telefónico o cualquier otra referencia a través de la cual alguien pudiera llegar a vos. Todo distancias. Ahí empecé con lo de que no te habías ido nunca y que vivías desde hacía meses acá sin que nosotros
supiéramos.
Ansiedad.
Psiquiatra. Pastillas. Tu cara impresa en el cristal con la sonrisa de siempre. La rata
en
la
trampa.
Una
serie
de
posibilidades. Nos grabábamos por diversión. Nunca volvíamos a escucharnos. Archivos MP3 como
fósiles.
habláramos
Un
sobre
día
quisiste
fantasmas.
que
Puertas
que se cierran, objetos que se mueven, casi siempre en la casa de tu infancia, o el baño de un amigo de tu abuela, donde aseguraste haber conversado con un muerto. Aquella grabación fue un anuncio
de
tu
duplicación.
De
tu
fantasmagorización, o como puta sea que se diga lo que pasó contigo después de que te fuiste. Tu voz en aquel audio es la posibilidad que no fue.
OJOR AÍRAM
FICCIÓN
71
7
Te empecé a buscar. Mientras nos
Estabas interesado en un indigente
escribíamos
y
que había llegado a Tristán Narvaja.
hablábamos por skype como si nada,
Nadie podía comunicarse con él.
yo te buscaba por Montevideo. Tomé
Pronosticaste
un par de veces aquel ómnibus en el
desaparecería,
que te vieron, visité todos los lugares
derecho a la distancia que ya había
donde solíamos ir, todos los bares que
conseguido gracias a su suciedad.
frecuentabas, hablé con toda tu familia
En las librerías de Tristán nadie
para saber de tus conversaciones con
sabía cuál era la nacionalidad del
ellos. Me odiaron todos, incluso tu
recién
hermana. Vos huyendo del amor que
hablaba con acento portugués, por
todo
otro
mails
abraza
y
cada
paraliza,
tanto
como
en
que
algún
día
reafirmando
llegado. francés,
Por
un
momentos
por
momentos
aquella película de Antonioni donde
balbuceaba
Jack Nicholson quiere desaparecer. Me
fonética inentendible que hacían
acuerdo
pensar en que podía haber vivido
que
salimos
del
cine
y
unas
palabras
de
estuvimos veintidós minutos callados
en algún país muy distante.
caminando por San José hasta el Solís.
Marcos y vos le llamaron César y en
Los conté, sí. Después dimos la vuelta y
seguida le empezaron a decir así
fuimos a un restaurante de moda. Ahí
todos
me contaste toda la película como si yo
Incluso los del bar empezaron a
no la hubiese visto contigo.
llamarlo por ese nombre. Decías
los
libreros
de
Tristán.
que eso te hacía sentir culpable. Ese día me dijiste que siempre habías
Belleza andrógina encerrada en un
interpretado el arte como un péndulo
nombre. ¿Cómo no hacerlo? decía
entre el encontrarse y el perderse, ser
yo, y vos, con tu soberbia del orto,
uno mismo o ser otro. Te contesté que
mirabas
las rabas ese día estaban demasiado
extranjero había conseguido una
aceitosas.
escoba
En aquella época habías dejado la
pasaba barriendo las veredas de
facultad y trabajabas en una librería.
toda la calle desde Colonia hasta
Anotabas todos los días el horario en
Cerro
que pasaba el auto rojo de tu vecino
rápidamente
por la puerta de tu casa. No entendí
propinas
esa
empleados
obsesión
con
las
repeticiones
para en
otro
una
volqueta
Largo,
gesto
fue
por de
lado.
las
y
se
que
retribuido parte
El
con
de librerías
los y
exactas, y menos la frustración cuando
comercios. César no lo pedía, pero
te
eran
aceptaba los billetes que le daban
imposibles. Cada uno busca sus formas
y seguía barriendo con la mirada
de perder el tiempo.
perdida en el suelo.
dabas
cuenta
de
que
NÍTRAM AILIME
FICCIÓN
75
Decías que el mundo para él debía ser
Entonces tu amigo librófilo (les decías
unos pocos metros de baldosa alrededor
“amigos”
de la escoba, que se había convertido en
interesaban)
una prótesis para intervenir en el mundo
enterrarlos en el patio de la casa para
físicamente, el punto de agarre que lo
que no los descubriera. Solo que eso
mantenía entierra. Aquella herramienta
había empezado hacía más de diez
que había elegido parecía ser perfecta,
años. Por lo que, según un cálculo
porque
que
lo
mantenía
en
un
espacio
a
los
clientes
había
hiciste
que
te
empezado
a
mientras
te
reducido casi solo para él. Sin distancias
emborrachabas con Marcos en La
temporales
las
Tortuguita, debía tener una biblioteca
abstracciones que eso implica. El ritual de
enterrada con más de tres mil libros
barrer
desde
envueltos en bolsitas de nylon. Poco
Colonia hasta Cerro Largo te hacía pensar
después, ante la incómoda curiosidad
en lo imperceptible de la tierra girando
de ustedes dos, el librófilo les mostró
sobre su eje. Nunca llegué a conocer a
un
César por más que me insistieras en que
perfectamente doblado en la billetera
fuera a visitarte al trabajo. El mundo de
donde
las librerías y bares de Tristán Narvaja
categorías en que se organizaban los
eran para mí un universo al que no tenía
libros. Llamaban la atención algunas
acceso. Nunca. No soportaba la distancia
categorías
que
universo
“Cetrería”, “Poetas ecuatorianos de la
mistificado (por ustedes mismos) de los
década del 40”. El plano no solo
libros
a
ocupaba su patio, sino también el de
descubrir entre página y página, de los
sus vecinos y prácticamente los del
viejos fetichistas que hacía décadas que
barrio entero. Aquella herramienta
no leían un libro y sin embargo dejaban
que
su vida en la búsqueda de la quimera de
perfecta, porque lo mantenía en un
los libros raros, incontrolables, de cuya
espacio reducido casi solo para él. Sin
existencia
libreros
distancias temporales ni simbólicas,
esos
ni las abstracciones que eso implica.
personajes excéntricos que se pasaban
El ritual de barrer lentamente las
horas en las mesas de ofertas. Recorrían
veredas desde Colonia hasta Cerro
todos los días las librerías y los domingos
Largo
iban a la feria. Me contaste de aquel tipo
imperceptible de la tierra girando
que gastaba su sueldo entero en libros
sobre su eje. Nunca llegué a conocer a
viejos al punto de que su esposa le había
César por más que me insistieras en
prohibido entrar a la casa con nuevos
que fuera a visitarte al trabajo.
ni
simbólicas,
lentamente
había
entre
usados,
yo
llenos
hasta
sospechaban.
ejemplares.
las
los Te
ni
veredas
y de
ese
mensajes
propios gustaban
plano se
había
te
hecho ubicaban
como
las
mano distintas
“Colombofilia”,
elegido
hacía
a
parecía
pensar
en
ser
lo
FICCIÓN
76
El mundo de las librerías y bares de
donde
Tristán
Narvaja
universo
al
se
ubicaban
las
distintas
eran
para
mí
un
categorías en que se organizaban los
no
tenía
acceso.
libros. Llamaban la atención algunas
que
Nunca. No soportaba la distancia que
categorías
había
universo
“Cetrería”, “Poetas ecuatorianos de la
mistificado (por ustedes mismos) de
década del 40”. El plano no solo
los libros usados, llenos de mensajes a
ocupaba su patio, sino también el de
descubrir entre página y página, de los
sus vecinos y prácticamente los del
viejos fetichistas que hacía décadas
barrio entero.
entre
yo
y
ese
como
“Colombofilia”,
que no leían un libro y sin embargo dejaban su vida en la búsqueda de la
Lo que habías dicho de César se
quimera
raros,
cumplió y un día desapareció. Nunca
existencia
más lo vieron y a los dos días ya
hasta los propios libreros sospechaban.
nadie se acordaba de él. Siempre hay
Te
algo
de
los
inencontrables,
de
gustaban
libros cuya
esos
personajes
nuevo
de
que
hablar.
Ahí
excéntricos que se pasaban horas en
empezaste ese cuento interminable,
las mesas de ofertas. Recorrían todos
como
los días las librerías y los domingos
llenos de deseo y asco.
todo.
Abandonos
violentos,
iban a la feria. Me contaste de aquel tipo que gastaba su sueldo entero en libros viejos al punto de que su esposa
8
le había prohibido entrar a la casa con nuevos ejemplares. Entonces tu amigo
Empecé una especie de duplicación
librófilo
(les
los
para atrás. Me obsesioné con la idea
clientes
que
había
de una edificación que se derrumba
empezado a enterrarlos en el patio de
y que al caer derrumba todo a su
la casa para que no los descubriera.
alrededor. Tengo que volver a leer
Solo que eso había empezado hacía
todos tus gestos, todo lo que alguna
más de diez años. Por lo que, según un
vez me dijiste, todo lo que ocultabas,
cálculo
te
sólo así puedo llegar a tu situación
La
actual.
decías te
que
emborrachabas
“amigos”
interesaban)
hiciste con
a
mientras Marcos
en
Tortuguita, debía tener una biblioteca
1- te fuiste
enterrada con más de tres mil libros
2- estás en Montevideo
envueltos en bolsitas de nylon. Poco
Dos posibilidades, como tu péndulo.
después, ante la incómoda curiosidad
Tu pregunta de siempre ahora me
de ustedes dos, el librófilo les mostró
vuelve como esta mosca que se
un
empeña a volver sobre la sábana.
plano
hecho
a
mano
perfectamente doblado en la billetera
POESÍA
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MARJORIE AGOSÍN: NO ME OBSESIONO POR TU NOMBRE
Marjorie Agosín nació en Chile en 1955; país en el cual vivió su infancia y parte de su adolescencia. Hija de padres judíos, a sus catorce años se mudó junto a sus padres a la ciudad de Atenas ubicada en el estado de Georgia en Estados Unidos. Comenzó a escribir poesía a su corta edad y actualmente es autora de numerosas colecciones. Escritora, editora y activista de los derechos humanos, sus poemas indagan principalmente en torno a los temas relacionados a la justicia social y el feminismo. En Estados Unidos es profesora de español y literatura latinoamericana en el Wellesley College, donde ha contribuido a la difusión de la obra de Gabriela Mistral y de la literatura chilena en general. Entre sus libros más recientes de poesía se encuentran La luz del deseo (2009), Secrets in the Sand: The Young Women of Juárez (2006), donde denuncia los feminicidios en Ciudad Juárez y El ángel de la memoria en el cual resucita y traza la vida de su abuela Helena Broder, mujer que huyó a Viena durante la Segunda Guerra Mundial y que luego llegó a Chile; país donde murió cuando la autora tenía ocho años.
POESÍA
NO JUZGUEIS
Jueces míos, compañeros de oficina y de habitación, padre mío que aún no llegas al cielo Amigos y poetas estos pezones que han dibujado en catedrales y museos que han acariciado como la corteza del árbol o como pájaro terrestre atrapado en una mano ondulante, son míos, como son mis pasos que avanzan sigilosamente hasta llegar a una costa de marfil, a una costa nueva y mi vientre. hundido por cicatrices costureadas por brujerías y andanzas es también mío porque en él si me place, cargaré a una niña cargaré a una flor o una palabra para enseñarle a llamarse y a vivirse en un siempre verano
79
POESÍA
Porque mis calzones multicolores como el musgo también me pertenecen como una voz perpetua y redonda. Jueces míos jamás habéis recibido veredictos y sentencias de como colocar el pene de qué hacer con los espermas centellantes qué hacer con esa presa colgante y un poco incómoda qué les da el derecho a ordenarme a barrer mi cuerpo como hojas de podrido maíz. Pero yo digo basta y si deseo cortarme una mano ó adormecer al niño dentro de mí seré yo que me viviré y os pido déjennos vivimos y habitarnos en árboles y ríos y niños deseados en una nueva costa de marfil.
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POESĂ?A
TRIUNFO
No me obsesiono por tu nombre igual te poseo al llamarte. Al inventar esa tarde en que Hamlet delirante entra a la casa y los dos nos arrancamos al bosque para verlo todo desde cerca. No me obsesiono por tu nombre camino por tus piernas vacĂas estrujo tu cabello y al dibujarte igual te poseo.
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POESÍA
MENSES
Me persigue la sangre de los trece años cumplidos que atrapó el ruido fugaz de mis ingles Desde entonces, me supe finalizada, prohibida en un quehacer de lunas mortuorias Fui encierro de trinidades, en el ruedo de la falda, en el corpiño de senos imaginarios. Desde entonces me supe enferma y me enseñaron a no ser desnuda en las puertas del sol y en los días de sangre.
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POESÍA
CURRICULUM VITAE
Será lo real familiaridades del maestro? más vale. atreverse, inventarlos. Ojos: colgantes entre dos botellas azules. estatura rectangular, cuarenta y dos kilos de pan y baldos cabellos de princesa rusa y Brigitte Bardot casada 21 días Hijos: pétalos de rosa concebidos en la roca sobre las islas. Contribuciones: BA MA MRS PHD P.
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POESÍA
Profesión Durante los inviernos maestra del luto en los otoños institutriz de señores medievales Verano: recopiladora de cuadernos caracoles reseñas-viajera en bicicletas robadas débil-soñadora-hechicera. Publicaciones: semiología del orégano: Una revolución etimología estructural de la prostitución las huellas en la obra literaria Objetivos: Masturbar la disecación de las palabras comerlas llorar un poco ser maestra al aire libre y descalza con los ombligos al viento.
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POESÍA
Verdaderos objetivos: ser la B. Bardot dormir solitaria entre los calcetines del amante abolir puertas la intertextualidad los papeles de calcar. Experiencias: una noche sociedad de escritores un vaso de vino tu pañuelo. Referencias tres tarjetas postales dirigirse a: país abandonado Asunción Analfabeta Juanito Vishusken pescador y poeta Delfina Nahuenhual: modelo.
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NO ME MIRES
FOTOGRAFÍA DE EMILIA MARTÍN Y MARÍA ROJO | TEXTOS DE ODRADEK
OJOR AÍRAM
FOTOGRAFÍA
Mi mamá quería que yo fuera linda. A diferencia de mis compañeros de colegio, nunca me decía que yo era la más linda. Incluso a Matías, uno de los más feos del barrio, su mamá lo había convencido de que era lindo. Recuerdo la primera vez que, en defensa de las burlas, confesó que su mamá le había dicho que era el más lindo del mundo. Lo decía con los ojos abiertos, con certeza. El asunto es que mi mamá quería que yo fuera linda. Que fuera linda, pensaba yo; estirando las palabras en mi cabeza. A mi hermana menor, en cambio, no le decían ninguna de las dos cosas; sin embargo, cada vez que nos visitaba alguien, en vez de saludarla, le decían que tenía los ojos preciosos. «Qué lindos ojos» y la quedaban mirando. A mí en cambio me tomaban la cabeza torpemente,
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exclamando que estaba gigante, me revolvían el pelo, y le preguntaban a mi padre qué me daban de comer. A mí me hubiera gustado que me quedaran mirando, así, como perplejos. Recuerdo la sección en los programas de televisión de la mañana, donde mostraban tratamientos y artículos de belleza: reductores, píldoras para bajar de peso, láser para eliminar los pelos no deseados, fajas, y el más increíble de todos: calzas con glúteos incorporados. Antena tres directo, uno de los canales en los que siempre terminaba cada vez que empezaban los comerciales. Cómo olvidar el eslogan: Garantía de satisfacción total. De alguna forma, encontraba consuelo en esos anuncios y en la imagen de las mujeres desesperadas que me devolvía la televisión.
NÍTRAM AILIME
NÍTRAM AILIME
FOTOGRAFÍA
Las creencias de su hijo, lo sabía, eran similares a las de todo creador de arte, medio extrañas. Pero cuando pidió un cura para la ceremonia del entierro de su perro, supo que la extrañeza se había disparado. Y así fue: se agudizó su misantropía. La señora oía detrás de la puerta cómo su hijo maldecía a la raza. Lo escuchaba, a veces, bramando contra ella, contra sus tías y las visitas. Otras veces, a media tarde, lo escuchaba llorar.
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Sentía, de vez en cuando, pequeños golpes en la pared. Pero como toda señora sabe, en malcriar no hay pecado: cada vez que veía el bigote de su creación, lleno de migas de los mejores pasteles, se sentía satisfecha. Entonces, sacaba el vino en caja, lo servía hasta el borde de la taza, y succionaba con delicadeza, dedo chico en el aire, como si se tratase del té más fino de Oriente.
OJOR AÍRAM
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Recuerdo la vez que pensé que le leía la cabeza a la gente. Vengo de una familia atea, no tengo ninguna formación religiosa ni de creencias. Diría que pasé de ser atea a ser agnóstica. A los 19 años, conocí a una chico durante unas vacaciones y le dije algo que nunca supe bien qué era. Cuando nos volvimos a juntar después de una semana, me di cuenta que sabía el nombre de su papá, de su mamá, de sus hermanos, sabía dónde vivía; había absorbido un montón de información que no sabía de dónde venía. Después, investigando, supe se llamaba “retrocognición”, en el estudio de la parapsicología: conocer el pasado de otra persona. Eso fue, no sé, a los 19 años. Después de eso no me pasó nada durante mucho tiempo, pero me quedó latente. Le conté a mi papá y se murió de la risa. Es como el sentido del oído. Yo no escucho, pero me llegan imágenes a la cabeza; si tú escuchas una vaca mugir, te llega la imagen de la vaca.
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Eso se llama memoria relacional: en algún lugar de tu cabeza tienes una vaca, la vas a buscar, sin verla. A mí me llegan imágenes: unas vacaciones en la playa en un lago, la abuela se cae y se le cae la cámara de fotos en el lago. Llegan las imágenes, todas ajenas. Es como un collage que se arma en la cabeza y que se siente detrás. La gente viene a mis sesiones, y es impresionante ver lo que piensa. La mitad de las sesiones no funcionan. Yo los veo atravesar la puerta en chaquetas de mezclilla; avergonzados, a veces. He hecho como quinientas sesiones. Las sesiones funcionan cuando salen, por lo menos, veinte pruebas específicas; anécdotas, secretos personales, intereses que coinciden con la persona consultada. No puede ser algo genérico. No puedo decir que le gusta el fútbol, tiene que ser algo específico. Algún rasgo físico muy particular. No sé, que el hombre cuidaba palomas en la casa o que cojeaba porque se había roto la pierna izquierda en un accidente de motocicleta… Yo no me encargo ni de Dios, ni del sentido de la vida.
OJOR AÍRAM
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«Llevas cachureos y no eres capaz de llevar una sombrilla», «hoy van a hacer 33 grados, mamá», «por favor, la sombrilla», «la sombrilla está al lado de la puerta, no te olvides» «¡es una sombrilla importada, mamá, no es cualquier sombrilla!» le ha dicho su hija con insistencia durante la semana que llevan en la playa. Pero hacerle caso, incluso escucharla, sería un retroceso magno, un retorno al antes de nacer, sería negar la autoridad que la tiene en el escalón de arriba, el de madre, la que se abre de piernas, pare y sufre. Tiene razones supremas para estar allí, sobre ella, porque aquella es cabeza de hija que estuvo y creció dentro suyo.
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«Porque yo lo digo» le ha dicho Eugenia a su hija desde que fue separada de su cuerpo y ahora la madurez de la niña no significaba igualar los roles; jamás escucharía de ella un consejo de vida, menos una orden sanitaria. «Tus fiebres y tormentos emocionales los he lidiado yo mientras tú dormías» ha sido una de las respuestas de Eugenia para cerrar el tema sombrilla. Y la sombrilla queda en su espacio, entre la puerta principal y la cesta de revistas. En gestos de resistencia como aquellos se encontraba la verdadera victoria de la vida, en evitar a toda costa la simetría con los otros.
SPLITTING
1974, MATTA CLARK
NEW YORK:Â 98 GREENE STREET LOFT PRESS
KEDARDO
P O S T E R
LA CASA IDEAL
OJOR AÍRAM
Santiago Chile